Parabola Del Cocinero Reflexion

Estimados profesores, compañeras y compañeros,
A continuación, respondo por separado cada una de las preguntas:
¿Qué valores o principios considera que están a la base de las decisiones que tomó cada uno de
los cocineros?
Caso 1: El cocinero al verse enfrentado a una situación distinta prefirió hacer a un lado a su viejo
amigo y así evitar modificar el menú que tenía planeado con antelación. Al respecto vemos a una
persona inflexible y poco empática frente a las necesidades de los demás, por lo que prioriza su
comodidad y decide excluir a su amigo.
Caso 2: En este segundo caso, el cocinero determina mantener la invitación a su amigo adaptando
la cena con un menú especial para él. Lo anterior, lamentablemente incomodó a su amigo pues lo
excluyó del resto de los invitados sin abordarlo desde la inclusión. Éste ejemplo puede verse a
menudo en la toma de decisiones en diversos contextos sociales, pues si bien existen buenas
intenciones; no se cuenta con las herramientas necesaria para orientar cambios profundos que
eviten evidenciar estas acciones.
Caso 3: El cocinero al verse enfrentado a un escenario distinto al que tenía planeado, pone en
juego su capacidad de empatía y adaptabilidad para idear una estrategia que permita incluir a
todos sus invitados por igual y decide cambiar el menú. De esta manera todos los integrantes se
sintieron cómodos con la cena.
¿Qué consecuencias tiene para el invitado a cenar y para el resto de los comensales cada una de
las experiencias? Relaciónelas con el ámbito educativo
Las situaciones planteadas son fácilmente identificables en la realidad que presentamos en las
aulas.
En el primer caso, vemos un sistema educativo rígido que no es capaz de adaptarse a una
educación inclusiva. Prefiere segregar al que presente alguna diferencia mostrándose indiferente a
las repercusiones que esto pueda traer para quien recibe la discriminación.
En el segundo caso, el sistema escolar no está ajeno a la necesidad de “adaptar” sus estrategias,
pero prefiere hacerlo separando a aquellos que tengan necesidades educativas especiales con el
fin de que los cambios sean de tipo local y no desde sus bases de enseñanza y prácticas. Lo
anterior refuerza profundamente el sentimiento de discriminación en los estudiantes que son
llevados a trabajar a salas diferentes o que deben rendir pruebas distintas a sus compañeros.
El caso tres es el camino hacia el cual debemos avanzar como sociedad para lograr una educación
efectivamente inclusiva, donde cada integrante se sienta con igualdad de oportunidades y
condiciones para desenvolverse sanamente en su escolaridad. La escuela (instituciones escolares),
deben ser capaces de garantizar espacios sanos de crecimiento, donde los estudiantes tengan la
confianza de poder aprender, equivocarse y corregirse desde un ambiente seguro, que refuerce su
autoestima y el trabajo mancomunado entre todos sus miembros.
¿Cree qué habría una cuarta opción para resolver el problema descrito en esta historia?; ¿Cómo
sería?
Desde mi percepción, creo que una cuarta opción sería consultar a los invitados cuáles son los
alimentos que prefieren y aquellos que no, de esta manera el cocinero tendrá claridad para poder
elaborar un menú que sea del agrado de todos sus invitados.
Estimada Alicia,
Concuerdo contigo en que el cocinero debe dar la posibilidad de elegir a sus invitados qué es lo
que quieren comer. Al llevar lo anterior a la escuela, nosotros los profesores (cocineros de la
educación), debemos considerar las necesidades de nuestros estudiantes adaptándonos a ellas y
no a la inversa; y así ofrecerles un menú que garantice su educación de calidad.
Estimada Karina,
Me parece muy acertada la idea de un buffet con diversas preparaciones para dar la posibilidad a
los invitados de que puedan elegir. El docente (al igual que el cocinero) debe conocer las
necesidades de sus estudiantes para así favorecer las relaciones sociales inclusivas dentro y fuera
del aula; estableciendo un ambiente de confianza que desarrolle su aprendizaje integral.
Saludos,
Estimada Katyuska;
Considero muy apropiada tu propuesta para un cuarto caso. El cocinero al igual que un buen
profesor debe tener estrategias para abordar temas y situaciones diversas en todo momento. En
este sentido, la creatividad y capacidad de adaptación resultan fundamentales; ofrecer un buffet a
los invitados les da la posibilidad de poder elegir, sentirse parte y en igualdad de condiciones con
los demás invitados. Como profesores somos los encargados de otorgar a nuestros estudiantes
una adecuada inclusión en el aula, adaptando nuestras prácticas de acuerdo a sus necesidades,
características, gustos y ritmos; siempre con miras hacia una educación de calidad.
Saludos,

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