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Ensayo Final

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UNIVERSIDAD NACIONAL DEL ALTIPLANO

FACULTAD DE INGENIERÍA CIVIL Y ARQUITECTURA


ESCUELA PROFESIONAL DE ARQUITECTURA Y URBANISMO

SEMESTRE I

DOCENTE: Lic. EDER CESAR SANCA YUCRA

CURSO: COMPRENSIÓN Y ARGUMENTACIÓN

PRESENTADO POR:

- COYLA QUISPE, Yordy Jesus


- LUCANO MESTAS, Julianne Dannette

PUNO-PERÚ

2022
La Inteligencia Artificial. ¿amigo o enemigo del arquitecto?

Coyla Quispe, Yordy Jesus y Lucano Mestas, Julianne Dannette

Introducción

A causa de las diferentes problemáticas que han salido hoy en día dentro de la
arquitectura, varias investigaciones han buscado la manera de utilizar la inteligencia artificial
para dar un enfoque diferente a los problemas esto a base de conocimiento de arquitectos
expertos para hallar soluciones más adecuadas ante un problema, por lo cual se plantea la
siguiente interrogante, ¿Podría sustituir la inteligencia artificial a un arquitecto respecto a
proyectos urbanos? La inteligencia artificial tiene capacidad de respuesta rápida que puede
ayudar al arquitecto reduciendo su trabajo considerablemente y así elaborar proyectos en el
menor tiempo posible con mayor calidad.

Es por esto que, en el presente ensayo, se dará a conocer las definiciones acerca de la
inteligencia artificial y como está relacionada con los arquitectos; por consiguiente, se mostrará
los beneficios y las dificultades que puede traer su uso; luego explicaremos en que se basa ésta
para brindar respuestas al arquitecto y mediante qué procesos se relaciona, a partir de ello se
demostrará su aplicación en el desarrollo de diseños arquitectónicos y diseños urbanos
inteligentes

Desarrollo

La inteligencia artificial es un conjunto de algoritmos que son desarrollados por un


profesional especializado para que este pueda generar de forma independiente respuestas a
problemas como un ser humano o incluso mejor. El uso de esta tecnología en relación con la
arquitectura se puede apreciar en el diseño urbano que es el uso de la tecnología y la recopilación
de datos, estas herramientas tecnológicas en este caso son sistemas inteligentes y redes
neuronales; donde su uso es más visto en ciudades de primer mundo que buscan usar la
inteligencia artificial como base para generar ciudades sustentables y mejorar la calidad de vida
de sus ciudadanos. En definitiva, la inteligencia artificial puede ser aplicado en los diseños
urbanos mejorando la calidad de vida de una ciudad.
La inteligencia artificial se desarrolla desde 1956; es el conjunto de diferentes disciplinas
y de ésta unión se busca diseñar máquinas que sean capaces de pensar y actuar como los
humanos (Alemán, 2017); sin embargo, según Segarra et al. (2020), señala que los
conocimientos de los arquitectos no pueden ser aprendidas si no es por experiencia; además de
conocer los materiales para la ejecución de los trabajos y poder optar por el más conveniente; por
lo tanto, la inteligencia artificial se puede entender como una herramienta debido a sus beneficios
en el diseño y no como una amenaza de la suplantación de los arquitectos por las máquinas
(Chumpitaz, 2020), dicho lo anterior los avances tecnológicos con respecto a la inteligencia
artificial no significan un reemplazo del arquitecto; sino que se muestran como un apoyo y
aporte en el diseño arquitectónico.

Como señala Chumpitaz (2020), la inteligencia artificial ha estado en constante desarrollo


que permitió a los arquitectos procesar la información de un proyecto; de igual modo, Álvarez y
Blanco (2021) sostienen que los lenguajes de programación y la elaboración de algoritmos, se
van integrando cada vez más en el ámbito de la arquitectura, lo que ayuda a implementar y
automatizar los procesos entre el proyecto y el diseño; asimismo la tecnología ha permitido
obtener mayores herramientas por lo cual adquirió mayor precisión y calidad en el desarrollo del
proyecto de diseño (Chumpitaz, 2020). Con base a esto se infiere que la tecnología de la
inteligencia artificial ha permitido una mayor facilidad en el proceso de diseño para los
arquitectos.

Teniendo en cuenta a Álvarez y Blanco (2021) la inteligencia artificial es capaz de


aprender cualquier proceso de forma autónoma y comportarse como una mente humana, no
obstante aún no está muy desarrollada por lo cual se ha llevado a cabo algoritmos de machine
learning(aprendizaje automático) inspiradas en el sistema de una neurona, por lo que las redes
neuronales son capaces de aprender tareas y procedimientos incluso mejores que los seres
humanos está presente casi en todos los procesos digitales, de manera que tiende a un impacto en
el mercado laboral donde existe la posibilidad de sustituir a profesiones como el diseño y la
arquitectura. Alemán (2017) agrega sobre el algoritmo genético afirmando que es un
procedimiento frecuente que utiliza el valor de la población genética obteniendo información
cuantitativa de cada individuo que se utiliza para la resolución de problemas, por lo cual también
menciona que “Los algoritmos genéticos son eficaces al calcular funciones complejas las cuales
se aplican en distintas ramas de la ciencia” (p. 5). En conclusión, los algoritmos pueden resolver
problemas complejos, esto porque captan mayor información que un ser humano, calculando
distintas funciones en varias ramas, lo cual abre la posibilidad que se aplique en el diseño y la
arquitectura.

Segarra et al. (2000) da a conocer que los objetivos de los sistemas de control en la
arquitectura generan la capacidad de resolver problemas particulares, esto a base de
conocimiento de todas las partes involucradas. Se debe agregar también que “las redes
neuronales contribuyen permitiendo la automatización y optimización de procesos en el diseño
de viviendas colectivas, con un diseño más sostenible” (Álvarez y Blanco, 2021, p. 226). En
consecuencia, los sistemas de control y redes neuronales aportan en gran medida a la resolución
de problemas y al diseño sostenible por medio de la automatización, con base en la información
obtenida.

Tal como argumenta Alemán (2017) las Redes Neuronales Artificiales (RNA) son
diseñadas para ajustarse ante diferentes tareas que requieran la necesidad de captar información
en pleno proceso y obtener resultados con ciertos fallos. Con respecto a lo anterior, Álvarez y
Blanco (2021) dan a conocer que las redes gráficas como las GAN (redes generativas
antagónicas) en conjunto con redes neuronales generan y verifican gráficos, a su vez éstas han
sido importantes para la arquitectura, sobre todo en el ámbito académico. Asimismo, señalan que
las redes neuronales se han integrado en la práctica arquitectónica, como el diseño
computacional realizado mediante el programa Grasshopper. Por consiguiente, las redes
neuronales constituyen un rol muy importante en los avances de la inteligencia artificial porque
son la clave de un “aprendizaje inmediato”; que en conjunto con las redes gráficas obtienen
mejores resultados en la obtención y generación de nuevos gráficos arquitectónicos.

De acuerdo con Alemán (2017):” los sistemas expertos de la Inteligencia Artificial son
construidos obteniendo este conocimiento de un humano y codificándolo de tal forma que una
computadora lo pueda aplicar en situaciones similares” (p. 3). Por otra parte, según Segarra et al.
(2000) el sistema experto de la Inteligencia Artificial no puede sustituir a un profesional; pues
este último tiene sentido común y puede aprender rápidamente de los errores, además que se
puede sostener una conversación sin ningún problema o intervención. Por lo tanto, la inteligencia
artificial a pesar de adquirir conocimientos humanos por medio de sistemas expertos, no puede
suplantar sus cualidades para responder ante una situación conflictiva e interactiva.

La inteligencia artificial debido a su poca interacción con el cliente, la ausencia de


sensibilidad y la compresión de un contexto social, es poco probable, que reemplace a los
arquitectos (Chumpitaz, 2020), por consiguiente, según Segarra et al. (2000) el arquitecto debe
tener la capacidad de negociar y tener una rápida respuesta ante las necesidades de los usuarios
esto con el fin de poder satisfacer a ambas partes. Por lo cual, la inteligencia artificial no podría
sustituir al arquitecto por su falta de interrelación y comprensión en las ideas que puede tener el
usuario para su mayor satisfacción.

De acuerdo con Chumpitaz (2020) la tecnología ha permitido obtener mayores


herramientas por lo cual adquirió mayor precisión y calidad en el desarrollo de un proyecto de
diseño. Además, la concepción del sistema de control desde el punto de vista de la arquitectura
permite construir sistemas en los que se llega a un compromiso entre los intereses de todos los
actores existentes (Segarra et. al ,2000). Chumpitaz (2020) menciona que el investigador Im As,
estableció que las redes neuronales como la DNN (Deep Neural Network) eran capaces de
procesar gran cantidad de información y que el impacto de la inteligencia artificial en la
arquitectura está viviendo un punto de no retorno. En conclusión, la tecnología de la inteligencia
artificial propone un gran avance respecto a la elaboración de proyectos de diseño, y este se va
expandiendo al punto de tener un amplio impacto sin retorno.

Desde el punto de vista de Álvarez y Blanco (2021) dan a conocer que las principales
empresas del sector tecnológico dedican gran cantidad de recursos en la elaboración de conjunto
de datos para el entrenamiento de sus redes neuronales. Y Segarra et al. (2000) afirman que, la
aplicación de la Inteligencia Artificial en la arquitectura es plantear diferentes formas de solución
a un problema; a su vez, también busca rebajar los costes de tiempo, esfuerzo y dinero; a base de
influencias de la arquitectura y los expertos en ésta área. Es por esto que, las empresas invierten
un porcentaje considerable en el desarrollo de la inteligencia artificial para así no solo poder
obtener ganancias sino también ahorrar tiempo y recursos.

La inteligencia artificial presenta variedad de herramientas las cuales pueden utilizarse en


distintos ámbitos, por ende, también puede ser útil en el campo de la arquitectura como un
proyecto que busca generar ciudades inteligentes, en el ámbito de diseño urbano inteligente el
uso de las herramientas tecnológicas permiten procesar los datos de una urbe para generar
soluciones por lo tanto esto posibilita propuestas para la habitabilidad de una ciudad. En
consecuencia, la inteligencia artificial aplicado en diseño urbano tiende a una mejora en la
ejecución de un proyecto desarrollando así ciudades inteligentes lo que genera un reflejo en la
calidad de vida de las personas.

Casas (2014) define la ciudad inteligente como la unión de lo digital y sustentable que
tiene la capacidad de resolver problemas, esto a través de sistemas inteligentes qué están
conectadas a las construcciones de la ciudad; del mismo modo, Alva y Nava (2019) afirman que
es un conjunto de infraestructuras y elementos tecnológicos capaces de establecer redes que
conecten de forma física y virtual a las personas, asimismo definen que: “La ciudad inteligente
está compuesta por elementos tecnológicos y sociales que, integrados, funcionan como
herramienta para la gestión de espacios urbanos” (p. 147). En definitiva, las ciudades inteligentes
conectan a las personas con la estructura y los espacios urbanos, lo que permite a sus ciudadanos
tener acceso a la información de la urbe.

Alva y Nava (2019) dan a conocer:” La ciudad también genera un conjunto infinito de
datos y combinaciones que pueden ser recolectados y analizados en tiempo real, con el fin de
tomar mejores decisiones de una manera más rápida” (pág. 147). Asimismo, se menciona que
diferentes ciudades ya empezaron con la iniciativa de establecer un ambiente digital no solo en
mejorar las estructuras o laboratorios; sino también plantear la idea de una política digital con el
fin de desarrollar más ambientes inteligentes (Casas, 2014). A partir de ello, se infiere que el
conjunto de datos generado de una ciudad apoyado de la Inteligencia Artificial, busca diseñar
ambientes inteligentes para la toma de buenas decisiones en la creación de arquitectura urbana.

Para Alva y Nava (2019), la ciudad inteligente genera datos que luego comparte con otros
subsistemas, por medio de telecomunicaciones, sensores y sistemas robustos los cuales analizan
la información y dan como resultado la capacidad cognitiva de una ciudad, por otro lado, la
ciudad digital depende de la conectividad y el acceso a la información de sus habitantes, por lo
que es necesario asegurar una red con una estructura manejable lo que facilita la satisfacción de
las necesidades obteniendo información de la ciudad (Casas, 2014). En consecuencia, el acceso a
la información es un factor importante para el desarrollo de una ciudad inteligente esto a partir de
una ciudad digital, donde la intervención del arquitecto y la inteligencia artificial pueden ser
intermediarios para generar este tipo de diseño urbano.

Citando a Alva y Nava (2019): “La ciudad inteligente está compuesta por elementos
tecnológicos y sociales, que integrados funcionan como herramienta para la gestión de espacios
urbanos” (p.147); por otra parte, la ciudad digital permite una operación interconectada con
varios dispositivos lo que otorga una conexión presente en todo lugar garantizando información
de la ciudad (Casas, M. 2014). En conclusión, las ciudades inteligentes relacionan espacios
urbanos; mientras que la ciudad digital otorga una conexión ubicua en toda la ciudad.

Tal como señala Casas (2014) el cambio de una ciudad digital que depende del uso de
herramientas tecnológicas, hacia una ciudad inteligente que a su vez genera una sustentabilidad y
mejora en la calidad de vida; de acuerdo a esto Chumpitaz (2020) menciona que el desarrollo y
el avance de la tecnología ha tenido un importante efecto en muchos ámbitos, en la arquitectura
ha contribuido en diversas materias reduciendo así la labor del arquitecto. Para concluir el uso de
la tecnología ha ayudado a adoptar un enfoque diferente hacia los problemas encontrados
ayudando así al arquitecto a desarrollar ciudades sustentables que mejoren la calidad de vida
ciudadana.

Conclusión

La Inteligencia artificial no constituye un riesgo para el arquitecto, sino que es una


herramienta de apoyo, en base a esto usamos ejemplos de las ciudades inteligentes y en las
construcciones urbanas, sin embargo, los profesionales en la arquitectura al no estar ligado a este
tipo de tecnología, debería abrirse un aprendizaje adicional a este campo de la inteligencia
artificial orientado a su uso en proyectos arquitectónicos.

Mientras que, en los proyectos urbanos, la inteligencia artificial cumpliría un rol muy
importante para efectuar ciudades inteligentes que a partir de la información obtenida pueda
desarrollar entornos más adecuados que estén a disposición para sus ciudadanos cubriendo así las
necesidades de cada uno de ellos.
Referencias

Álvarez Ayuso, L.; Blanco García, F. (2021). Aplicación de redes neuronales al diseño de
vivienda colectiva. Rita, (16), 214-231.
http://ojs.redfundamentos.com/index.php/rita/article/view/595/528

Alva Fuentes, B.; Nava López, A. (2019). Diseño urbano inteligente, hacia una propuesta de
análisis e intervención. Revista Legado de Arquitectura y Diseño, 2019(26), 143-158.
https://doi.org/10.36677/legado.v14i26.14466

Alemán Morales, D. (2017). Técnicas de inteligencia artificial aplicadas a problemas de


ingeniería civil. Revista de Arquitectura e Ingeniería, 11(3), 1-7
https://www.redalyc.org/pdf/1939/193955164005.pdf

Casas Pérez, M. (2014). Ciudades inteligentes y ambientes de comunicación digital. Global


Media Journal México,11(22), 1-20.
https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=68732788001

Chumpitaz Requena, F. (2020). Inteligencia artificial y/o el arquitecto. Limaq, (006), 129-140.
https://doi.org/10.26439/limaq2020.n006.4820

Segarra, M., Antonio, A., Clavijo, J., y Sanz, R. (2000). Influencia de la Arquitectura en los
Sistemas de Control Inteligente. Revista Iberoamericana de Inteligencia Artificial, 4(10),
76-81 https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=92541008

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