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Estudio Lirio Blanco

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TODO COMIENZA POR UNA ORACIÓN

IMBUIDA DEL JURAMENTO QUE COMPARTEN


EL MAESTRO Y EL DISCÍPULO

Traducción del artículo publicado en la edición de


febrero de 2021 del Daibyakurenge
1) La oración del practicante del Sutra del loto

2) La oración para transformar el veneno en


remedio
CLAVES PARA
EL TRIUNFO 3) La oración imbuida del juramento de maestro
y discípulo

4) La oración por el ideal del Daishonin de


“establecer la enseñanza correcta para asegurar
la paz en la tierra”.
“[L]as oraciones de un practicante del Sutra del loto serán
respondidas tal como el eco acompaña el sonido, como la
sombra sigue a un cuerpo, como la luna se refleja en el agua
límpida, como el rocío se condensa sobre un espejo, como el
imán atrae al hierro, como el ámbar adhiere el polvo o
como un espejo bruñido refleja el color de los objetos”.

Sobre la oración, en Escritos de Nichiren Daishonin (END), pág. 359


“[A]unque uno apuntara a la tierra y errase, o pudiera liar
el firmamento; aunque la marea dejara de subir y bajar, o el
sol saliera por el Poniente; jamás podría ocurrir que las
oraciones del practicante del Sutra del loto quedaran sin
respuesta”.

Sobre la oración, en END, pág. 364


“No hay ningún lugar en los mundos de las diez direcciones
al cual no llegue el sonido de nuestra voz al hacer daimoku.
Nuestra voz podrá parecer insignificante, pero cuando
entonamos el poderoso sonido del daimoku, no hay lugar del
universo donde no logre penetrar”.

Gosho Zenshu, pág. 808.


Orar al Gohonzon activa las funciones
protectoras del universo o «deidades benevolentes».
Desde la perspectiva del budismo, la ley de causa y
efecto asegura que en el momento en que oramos ya
estamos creando una causa de victoria para que
nuestras oraciones produzcan resultados.
L A B ATA L L A Pero esto no es perceptible para la mente
PERMANENTE CONTRA convencional; así pues, dudamos de que nuestras
LA IGNORANCIA oraciones se cumplan o nos preocupamos pensando
F U N DA M E N TA L cuándo habrán de concretarse. La oración es una lucha
permanente contra la ignorancia fundamental, la
expresión última de la ilusión. Y la fe significa tener
confianza absoluta en esa ley incuestionable de la vida,
aunque no podamos percibirla de manera directa.
Cuando entonamos Nam-myoho-rengekyo podemos
vencer la ignorancia primordial.
Si ponemos la oración en segundo plano o la
posponemos y, en cambio, recurrimos solo a métodos o
estrategias, probablemente nos encontraremos girando
en círculo, infructuosamente. La suprema victoria queda
asegurada cuando oramos como practicantes del Sutra
L A B ATA L L A del loto con todas nuestras fuerzas.
PERMANENTE CONTRA
LA IGNORANCIA Si hacemos daimoku sin determinación o sin
F U N DA M E N TA L foco concreto, las oraciones no se cumplirán. Como
practicantes del budismo Nichiren, hagamos la práctica
con seriedad, activemos nuestra sabiduría y sigamos
desafiándonos con perseverancia y valentía, más que
nadie. El budismo es una enseñanza que valora la
racionalidad.
“Es sumamente raro nacer como ser humano. Pero usted,
además de estar dotado de forma humana, ha tenido la especial
fortuna de conocer el budismo. Y de las muchas enseñanzas del
Buda, ha tomado contacto con el daimoku –o título- del Sutra del
loto [es decir, Nam-myho-renge-kyo] y se ha convertido en su
devoto. ¡En verdad, una persona como usted tiene que haber
hecho ofrendas a cien mil millones de budas en sus existencias
pasadas!”.

Carta a Jakunichi-bo, en END, pág. 1038.


No hay mayor fortuna o alegría que
poder entonar daimoku al Gohonzon.
Cada pensamiento, deseo u oración que
expresamos ante el Gohonzon será aceptado y
envuelto en el amor compasivo e infinito de la
budeidad. Oremos con corazón transparente y
LA BUE N A FO RT UN A D E abierto, «considerando el sufrimiento y la alegría
H A BE R CO N O CI D O LA como hechos de la vida». Cuando nuestro corazón
LE Y M Í ST I C A está transido de dolor o de tristeza, dejemos salir
en nuestro daimoku esos sentimientos, tal como
los experimentamos. Oremos con fe invencible en
el poder de la Ley Mística, del mismo modo en
que «[…] los padres son renuentes a abandonar a
sus hijos o un niño se niega a alejarse de su
madre».
El solo hecho de convertir los problemas
en oraciones cambia su sentido. Pues al
reorientarlos como oraciones determinadas y
colmadas de confianza, elevamos nuestro estado
de vida. Entonces, las adversidades se convierten
LA BUE N A FO RT UN A D E en un campo de trabajo para realizar nuestra
H A BE R CO N O CI D O LA revolución humana, y hasta nuestra tendencia o
LE Y M Í ST I C A karma se convierten en una misión en bien del
kosen-rufu. De esa manera, todas nuestras
contiendas se transforman en abono que alimenta
un enorme crecimiento y desarrollo. A eso se
refiere, fundamentalmente, «convertir el veneno
en remedio».
“Si los creyentes laicos y su maestro oran con diferente actitud,
su oración será tan vana como tratar de encender fuego sobre el
agua. Aunque oren con un mismo propósito, tampoco obtendrán
respuesta si reinciden en el error de atacar las enseñanzas
mayores con enseñanzas menores. Con el tiempo, tanto el
maestro como sus seguidores laicos caerán en la ruina”.

Los ocho vientos, en END, pág. 835


El señor Toda dijo: «Debemos esforzarnos
en la fe, colmar nuestra vida de daimoku, que es la
mismísima vida del Daishonin; grabémoslo en nuestro
corazón e impregnemos en él todo nuestro ser, día a
día, para que cada una de nuestras acciones se
conviertan en un acto de amor compasivo.
¿Qué deseamos? ¿Por qué cosas estamos
E MBEBER N UE ST R A V IDA orando? ¿Cuál es el juramento que nos motiva en el
E N EL E STA DO DE nivel más profundo? Nuestra disposición interna
BUD E I DA D fundamental es lo que define quiénes somos.
Necesitamos imbricar en nuestra vida el juramento
del kosen-rufu, el compromiso que comparten el
maestro y sus discípulos. La esencia de la Soka
Gakkai yace en enseñar la fe sustentada en el lazo
directo entre el mentor y el discípulo. Esa fe nos
permite tomar conciencia de nuestra verdadera
identidad como Bodhisattvas de la Tierra y activar
nuestra budeidad intrínseca.
“Gran alegría es lo que uno experimenta cuando
comprende, por primera vez, que hemos sido entidades del
Buda, desde el mismísimo comienzo. Nam-myoho-renge-kyo
es la mayor de todas las alegrías”.

Registro de las enseñanzas transmitidas oralmente, págs. 211-212


“Si a usted le importa su seguridad personal, debe ante todo
orar por el orden y la tranquilidad en los cuatro sectores del
territorio, ¿no lo cree así?”.

Sobre el establecimiento de la enseñanza verdadera para asegurar la paz en la tierra, en END,


pág. 25
Nuestro orgullo como miembros de la
Soka Gakkai dedicados a trabajar a fin de
«establecer la enseñanza correcta para asegurar la
paz en la tierra» es creer rotundamente en el
potencial de todos los seres humanos. El cambio
interior en la vida de un solo individuo puede
producir un cambio que redunde en el
mejoramiento de toda sociedad. Lo importante es
reafirmar la certeza de que podemos transformar
E S TA B L E C E R L A E N S E Ñ A N Z A nuestra vida. […]
C O R R E C TA PA R A A S E G U R A R L A
PA Z E N L A T I E R R A Establecer la enseñanza correcta para
pacificar la tierra es el afán de hacer que el sol de
la esperanza se eleve en la vida de los que están
abrumados de dolor y desesperanza. Cuando
hacemos que el sol ascienda en nuestro corazón,
podemos ayudar a otros a hacer lo mismo. En
cualquier tiempo o lugar, la oración y la acción
basadas en el juramento del kosen-rufu libera un
infinito efecto en cadena de esperanza y de alegría.
“Orar en el budismo, significa abrigar el
juramento de triunfar sin falta”

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