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Resumen Evolutiva 1

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Resumen de Psicología Evolutiva I

UNIDAD 1 - Psicología del desarrollo y Psicoanálisis. Los aportes de la psicología


genética. Aspectos metodológicos: el método clínico. La perspectiva diacrónica y
sincrónica.

STERN DANIEL. (1991) El mundo interpersonal del infante

Perspectivas y enfoques de la infancia: El infante observado y el infante clínico


La psicología del desarrollo puede realizar investigaciones sobre el infante sólo en tanto éste
es observado. Para relacionar la conducta observada con la experiencia subjetiva, es preciso
dar saltos inferenciales.

El infante clínico: las teorías psicoanalíticas han reconstruido un "infante" diferente. Este
infante es la creación conjunta de dos personas: el adulto que creció hasta convertirse en
paciente psiquiátrico, y el terapeuta, que tiene una teoría sobre la experiencia del infante.
Está constituido por recuerdos, reactualizaciones presentes en la transferencia, e
interpretaciones teóricamente guiadas.
Una infancia clínica se crea para dar sentido a la totalidad del primer período de vida del
paciente, una historia que emerge en el curso de su narración a algún otro.

El infante observado: su conducta se examina en el momento de su aparición.


El infante observado es también un constructo, una descripción de las aptitudes que pueden
observarse directamente: la capacidad de moverse, sonreír, buscar la novedad, discriminar
el rostro de la madre, codificar recuerdos, etc. PERO éstas observaciones en sí mismas
revelan poco sobre cómo es la "cualidad sentida" de la experiencia social vivida. Sacar
inferencias sobre las experiencias reales del infante es el dominio del infante clínico.
Ambos enfoques son indispensables para la tarea de pensar sobre el desarrollo del
sentido del sí-mismo del infante.

-> ¿Puede cualquier relato ser validado por lo que se piensa que sucedió en la infancia?
Schafer sostiene que no. "Los relatos terapéuticos no explican lo que realmente pasó" El
pasado es una ficción.
Ricoeur, en cambio, dice que hay algunas hipótesis generales sobre cómo funciona la mente,
y sobre cómo se desarrolla, que existen con independencia de los muchos relatos que podrían
construirse. (Ej: secuencia evolutiva de las etapas psicosexuales, o la naturaleza evolutiva
del relacionamiento objetal o personal).

La conjunción parcial de estos dos infantes es esencial por:


1) tiene que haber algún modo de que los sucesos reales se conviertan en experiencias
subjetivas que los clínicos llaman intrapsíquicas. Este punto de cruce envuelve a
ambos infantes.
2) el terapeuta mejor familiarizado con el infante observado puede estar en condiciones
de ayudar a los pacientes a crear relatos de vida más adecuados.
3) el observador de infantes mejor familiarizado con el infante clínico puede ser
impulsado a concebir nuevas direcciones para la observación.
Psicología del desarrollo: la maduración de las nuevas capacidades y su reorganización es
el tema de estudio adecuado en los cambios evolutivos. El psicoanálisis tiene que dar un
nuevo paso y definir las reorganizaciones progresivas en función de más amplios principios
organizadores del desarrollo, o en función de la vida mental.
Perspectiva psicoanalítica
Todas las teorías psicoanalíticas del desarrollo dan por sentado que el desarrollo progresa
de una etapa a la siguiente, y que cada etapa no es sólo una fase específica del desarrollo
del yo o el ello, sino que también es específica de ciertos problemas protoclínicos.
El infante atraviesa diferentes sentidos del sí-mismo y del otro. Los cuatro sentidos del sí-
mismo se conforman en su momento de aparición a los principales cambios evolutivos que
se han observado:
1) Sí-mismo emergente. Entre los 0 y los 2 meses: emerge un sentido del mundo, que
incluye un sentido del sí-mismo. Los infantes relacionan experiencias diversas. Parte
de la integración de los diversos sucesos se realiza de modo innato.
2) Sí-mismo físico. Entre los 2 y los 6 meses: los infantes sienten que están separados
físicamente de la madre, tienen distintas experiencias afectivas e historias separadas
3) Sí-mismo subjetivo. Entre los 7 y los 9 meses: el bebé descubre que hay otras
mentes allí afuera, además de la propia. Aparecen estados mentales subjetivos
(sentimientos, motivos, intenciones).
4) Sí-mismo verbal. Entre los 15 y los 18 meses: el bebé desarrolla el sentido de que
el sí-mismo (y el otro) tienen un almacén de conocimientos y experiencias personales
del mundo. Se produce lenguaje

FREUD. (1913) El interés por el psicoanálisis

● El interés para la psicología evolutiva:


El psicoanálisis no es sólo separar fenómenos compuestos en sus elementos simples, SINO,
que consiste en reconducir una formación psíquica a otras que la precedieron en el tiempo y
desde las cuales se ha desarrollado.
Para la cura de los síntomas es necesario rastrear la génesis y desarrollo de los mismos. El
psicoanálisis tuvo que derivar la vida anímica del adulto a la del niño.
Las impresiones de la niñez son muy importantes para la vida adulta. "Los enigmas de la vida
amorosa de los adultos sólo se solucionan cuando se ponen de relieve los factores infantiles
en el amor".
Las formaciones anímicas infantiles no desaparecen en el adulto pese todo el desarrollo
posterior.
Regreso al infantilismo psíquico (regresión): se pone de relieve en las neurosis y psicosis.
Vemos la medida de la predisposición a enfermar en la intensidad que los restos infantiles
hayan conservado en la vida anímica , de suerte que ella pasa a ser la expresión de una
inhibición en el desarrollo.
El material psíquico que permaneció infantil (reprimido, inviable) constituye el núcleo del
inconsciente. En la biografía de los enfermos podemos perseguir cómo es que eso
inconsciente, contenido por la represión, está al acecho para pasar al quehacer práctico y
cómo aprovecha las oportunidades cuando las formaciones psíquicas más tardías y elevadas
no consiguen sobreponerse a las dificultades del mundo real.

UNIDAD 2. Nacimiento psicológico e individuación. Proceso de separación-


individuación. Fase autística normal. Fase simbiótica normal. La constancia emocional.
De la dependencia hacia la independencia. Modelos de observación en el desarrollo
emocional.

MAHLER. (1974). El nacimiento psicológico del infante humano

CAP 1: ENFOQUE GENERAL


● NACIMIENTO BIOLÓGICO (observable) del niño no es lo mismo que NACIMIENTO
PSICOLÓGICO

● NACIMIENTO PSICOLÓGICO: se llama proceso de separación-individuación: el


establecimiento de un sentimiento de separación respecto de un mundo de realidad, y el
establecimiento de una relación con él, particularmente con respecto a las experiencias del
propio cuerpo y al principal responsable del mundo tal como el infante lo experimenta, el
objeto primario de amor.

● Es un proceso intrapsíquico de lento desarrollo que se manifiesta durante toda la vida pero
cuyos principales logros psicológicos ocurren durante la separación-individuación (desde el
mes 4 o 5 hasta el 30 o 36).

● Proceso normal de separación-individuación: incluye el logro por parte del niño de


funcionar separado en presencia de la madre y con la disponibilidad emocional de ésta.

● Separación: consiste en la emergencia del niño de una fusión simbiótica con la madre

● Individuación: consiste en la asunción por parte del niño de sus propias características
individuales.

● Estos desarrollos van de la mano con procesos evolutivos, pero NO son idénticos a ellos.

● DESARROLLO LOCOMOTOR PREMATURO que permite al niño separarse de la madre


puede llevar a una conciencia prematura del estado de separación.

● ADAPTACIÓN: Desde el comienzo el niño se moldea y despliega en la matriz de la unidad


dual madre-infante. La facilidad del niño para amoldarse a la estructura de su ambiente ya
está presente al comienzo de la infancia

● RELACIÓN OBJETAL: se desarrolla a partir del NARCISISMO SIMBIÓTICO O PRIMARIO


del infante, y se altera a la par que el logro de la separación-individuación. El funcionamiento
del yo y el NARCISISMO SECUNDARIO se desarrollan en la matriz de la relación narcisística,
y más tarde, objetal con la madre.

● SIMBIOSIS: es un estado inferido. Es un rasgo de la vida cognitivo-afectiva primitiva en que


no ha ocurrido la diferenciación entre el sí-mismo y la madre, o en que se ha dado una
regresión a ese estado de indiferenciación yo-objeto.

● IDENTIDAD: conciencia más temprana de un sentimiento de ser, de entidad, que incluye una
catexia del cuerpo con energía libidinal.
● A la edad de 2 o 3 años puede observarse una fase negativista casi normal del deambulador.
Se trata de la reacción conductual concomitante que señala el proceso de desligamiento de
la simbiosis madre-hijo.

CAP 3: LOS PRELUDIOS DEL PROCESO DE SEPARACIÓN-INDIVIDUACIÓN.


1) LA FASE AUTÍSTICA NORMAL (1ER MES):

● En las semanas que preceden a la evolución hacia la simbiosis, los estados somniformes del
neonato y del infante muy pequeño superan de lejos a los períodos de vigilia, y recuerdan ese
estado primigenio de distribución de la libido que prevalecía en la vida intrauterina. En la fase
autística normal hay una relativa ausencia de catexia de los estímulos externos. Este es
el período en que se observa más claramente la barrera que se opone a los estímulos, la falta
innata de respuesta a los estímulos externos. El infante pasa la mayor parte del día en un
estado de semisueño y semivigilia.

● Predominan procesos fisiológicos más bien que psicológicos. El infante está protegido
contra los estímulos extremos, en una situación semejante al estado prenatal, para facilitar el
crecimiento fisiológico.

● Tiene que ocurrir un desplazamiento progresivo de la libido desde dentro del cuerpo hacia su
periferia. Durante las primeras semanas de vida extrauterina prevalece un estadio de
narcisismo primario absoluto, marcado por la falta de consciencia del infante respecto de
la existencia de un agente maternante.

● Va seguido por un estadio de oscura consciencia de que uno mismo no puede proveer la
satisfacción necesaria, sino que ésta proviene de algún lugar de fuera del sí-mismo.

● La tarea de la fase autística es el logro del equilibrio homeostático del organismo dentro
del nuevo ambiente extrauterino, por mecanismos predominantemente somato psíquicos
fisiológicos.

2) FASE SIMBIÓTICA (2DO A 6TO MES):


● La vida de vigilia del neonato se centra en torno de sus continuos intentos de lograr la
homeostasis. A partir del segundo mes, una oscura conciencia del objeto que satisface las
necesidades marca el comienzo de la fase de simbiosis normal, en que el infante se comporta
y funciona como si él y su madre constituyeran un sistema omnipotente, una unidad dual
dentro de un límite unitario común.

● En este período, la barrera casi sólida contra los estímulos (ese caparazón autístico que
excluye los estímulos externos) comienza a resquebrajarse. La simbiosis tiene un significado
muy diferente para el copartícipe adulto de la unidad dual. La necesidad que el infante tiene
de su madre es absoluta, la necesidad que la madre tiene del infante es relativa.

● El término simbiosis, ese estado de indiferenciación de fusión con la madre, en que el “yo” no
está aún diferenciado del “no-yo”, y en que lo interno y lo externo sólo están llegando en forma
gradual a ser sentidos como diferentes. El rasgo esencial de la simbiosis es la fusión
somatopsíquica omnipotente, alucinatoria, con la representación de la madre y, en particular,
de la ilusión de que existe un límite común entre dos individuos físicamente separados. Este
es el mecanismo al que regresa el yo en casos de perturbación muy grave de la individuación
y de desorganización psicótica, descrito como psicosis simbiótica infantil.

● Durante el segundo y el tercer mes de vida la recepción sensorial de naturaleza contacto-


perceptual facilita la entrada del infante en el estadio simbiótico dicho. En la fase simbiótica
el infante comienza a percibir la satisfacción de sus necesidades como algo que viene
de algún objeto-parte que satisface esas necesidades (aunque todavía dentro de la órbita
como unidad dual) y se vuelve libidinalmente hacia esa fuente o agente de maternación.

● La NECESIDAD SE TRANSFORMA EN UN DESEO y más tarde en el afecto específico


de anhelo “ligado a un objeto”. Ya no se moldea bajo el impacto de la realidad, por un lado,
y de impulsos instintivos, por otro. Desde el punto de vista de la imagen corporal, el cambio
de una catexia predominante propioceptiva-enteroceptiva a una catexia sensorio perceptiva
de la periferia es un paso fundamental del desarrollo. Las sensaciones internas del infante
constituyen el núcleo de su sí-mismo, en torno del cual llegará a establecerse un “sentimiento
de identidad”.

● El autismo normal y la simbiosis normal son prerrequisitos del comienzo del proceso
normal de separación-individuación. Ni la fase autística normal ni la simbiótica normal, ni
cualquier de las subfases de la separación-individuación, es totalmente reemplazada por la
fase siguiente.

● No existe una diferenciación de lo externo e interno, de yo y otro.

● En esta etapa se va catexiando cada vez más el mundo, especialmente en la persona de


la madre, pero como unidad dual con él yo aún no claramente delineado, delimitado y
experimentado. La catexia de la madre es el principal logro psicológico de esta fase.

● La experiencia de dentro y de afuera es todavía vaga, el objeto más catexiado, la madre,


es aún un objeto parcial.

A) LA PRIMERA SUBFASE: LA DIFERENCIACIÓN Y EL DESARROLLO DE LA


IMAGEN CORPORAL.
4 a 5 meses de edad.
Durante los meses simbióticos el infante pequeño se ha familiarizado con la mitad
maternante de su yo simbiótico, como lo indica la sonrisa social no especifica. Esta
sonrisa se transforma gradualmente en la respuesta específica de la sonrisa a la
madre, que es el signo crucial de que se ha establecido un vínculo específico entre el
infante y su madre. La capacidad de distinguir al objeto se desarrolla más rápidamente
que la de distinguir al “sí-mismo” de los objetos. El resultado debe ser un estado
simbiótico óptimo a partir del cual puede ocurrir una lenta y suave diferenciación
(expansión más allá de la órbita simbiótica).
La ruptura del cascarón: la atención del infante que durante los primeros meses de
la simbiosis se dirigía en gran parte hacia adentro se expande gradualmente con el
advenimiento de la actividad perceptual dirigida hacia el exterior durante los crecientes
períodos de vigilia del niño. El bebé comienza a diferenciar su propio cuerpo del
de su madre.
La pauta de verificación: Se interesa ahora en la “madre” y parece compararla con
“otro”, compara lo no familiar con lo familiar, rasgo por rasgo. Su reacción frente a
extraños: Parece estar comparando y controlando los rasgos del rostro del extraño
con los del rostro de su madre, y también con las imágenes internas que pueda tener
de su madre.

B) LA SEGUNDA SUBFASE: EJERCITACIÓN LOCOMOTRIZ


Primer período de ejercitación. DE 10 A LOS 16 O 18 MESES está subdividido en
dos partes:
- Primera fase de ejercitación, anunciada por la más temprana capacidad del
infante de alejarse físicamente de su madre gateando, haciendo pinitos,
trepando y poniéndose de pie, pero aun agarrado;
- Período de ejercitación propiamente dicho (segunda fase),caracterizado
fenomenológicamente por la locomoción verbal libre.

La expansión de la capacidad locomotriz durante la primera subfase de ejercitación


amplía el mundo del niño. No sólo tiene éste un rol más activo en determinar la
cercanía y la distancia con su madre, sino que las modalidades hasta entonces
utilizadas para explorar el ambiente relativamente familiar lo exponen repentinamente
a un segmento más amplio de la realidad; hay más que ver, más que oír, más que
tocar.
El deambulador da el paso máximo en la individuación humana cuando camina
libremente en postura vertical. La catexia libidinal se desplaza sustancialmente y pasa
al servicio del yo autónomo en rápido desarrollo y de sus funciones, y el niño parece
embriagado por sus propias facultades y por la magnitud de su propio mundo. El
narcisismo alcanza su nivel máximo. El niño se concentra en la ejercitación y
dominio de sus propias habilidades y capacidades autónomas.
La MARCHA proporciona al deambulador un enorme aumento de descubrimientos y
pruebas de realidad del mundo mediante su propio control y dominio mágico. Es el
primer paso hacia la formación de la IDENTIDAD.
La marcha parece tener un gran significado simbólico tanto para la madre como
para el deambulador: es como si el deambulador que camina solo hubiera
demostrado, al lograr la locomoción vertical independiente, que ya puede incorporarse
con derecho al mundo de seres humanos independientes.
La expectación y confianza que la madre es importante para la seguridad del niño.
Bajada de tono. La mayoría de los niños que estaban en esta subfase parecían tener
períodos de regocijo, o por lo menos, relativa excitación. Eran impermeables a los
golpes y las caídas, y sólo les “bajaba el tono” cuando se daban cuenta que su madre
no estaba en la habitación.

C) TERCERA SUBFASE: ACERCAMIENTO


En la mitad del segundo año de vida el infante se ha transformado en un deambulador.
En ese período se vuelve cada vez más conciente y hace un uso cada vez mayor de su
separación física. La falta relativa de interés por la presencia de la madre, que era
característica de la subfase de ejercitación, es reemplazada por un interés
aparentemente constante en determinar dónde está la madre, y por una conducta
activa de acercamiento. A medida que se desarrolla la conciencia de separación del
deambulador, éste parece tener una necesidad mayor, un deseo de que la madre
comparta con él todas sus nuevas habilidades y experiencias, así como una gran
necesidad de amor objetal.
Pautas de seguimiento (de la madre) y de huída (de la madre): indican tanto el deseo
de reencuentro con el objeto de amor como el temor del niño de que ese objeto lo
reabsorba. Se hace cada vez más evidente el temor de perder el amor del objeto.
El deambulador pequeño se da cuenta gradualmente de que sus objetos de amor (sus
padres) son individuos separados con sus propios intereses personales.
CRISIS DEL ACERCAMIENTO: el niño debe abandonar en forma gradual y penosa la
delusión de su propia grandeza, a menudo a través de luchas dramáticas con su madre,
y menos, con su padre.
Es la continua disponibilidad emocional de la madre lo que resulta esencial para
que el yo autónomo del niño alcance su capacidad funcional óptima, mientras va
cediendo su confianza en la omnipotencia mágica.
● Cuanto menos emocionalmente disponible este la madre en la época del acercamiento,
con tanta mayor insistencia e incluso desesperación el deambulador intentara cortejarla.
A medida que progresaba la subfase de acercamiento, los niños descubrían maneras
más activas de enfrentar las ausencias de la madre, se relacionaban con adultos
sustitutos y se dedicaban al juego simbólico.
Ampliación del ámbito emocional y comienzo de la empatía.
Durante el período de las más agudas crisis de acercamiento, todos los niños son cc de
la ausencia de la madre y se preocupan por averiguar dónde se encuentra. Comienzan
a producirse dificultades en el momento de la despedida, expresadas en la reacción de
aferrarse a la madre. Durante esos momentos de intensa angustia, el deambulador se
adhiere a una persona adulta, aunque no sea otro objeto de amor, sino más bien un
sustituto simbólico de la madre.
Si bien los deambuladores necesitan saber durante este período donde se encuentra la
madre, y no les gusta en general que los dejaran pasivamente (porque reaccionan a la
despedida de la madre), se van volviendo cada vez más capaces de dejar a la madre
activamente y por propia iniciativa.
● Elementos de la creciente individuación, que posibilitan la capacidad para
funcionar a mayor distancia, y sin la presencia de la madre:
- El desarrollo del lenguaje, la designación de objetos y la expresión de deseos
con palabras específicas, lo que parece haber brindado al deambulador un
sentimiento de capacidad de controlar su ambiente.
- El proceso de internalización
- El progreso en la capacidad de expresar deseos y fantasías mediante el
juego simbólico, así como el uso del juego para fines de dominio.

D) LA CUARTA SUBFASE: LA CONSOLIDACIÓN DE LA INDIVIDUALIDAD Y LOS


COMIENZOS DE LA CONSTANCIA OBJETAL EMOCIONAL (3ER AÑO)
Tarea de la 4ta subfase:
- Por un lado, el logro de una individualidad definida y en ciertos aspectos
vitalicia; y
- Por otro lado, el logro de un cierto grado de constancia objetal.
En lo que respecta al sí-mismo hay una estructuralización de gran alcance del yo, y se
producen signos definidos de internalización de exigencias parentales, que indican la
formación de PRECURSORES DEL YO. El establecimiento de la constancia objetal
afectiva depende de la gradual internalización de una imagen constante positivamente
catexiada de la madre.
Se basará por supuesto en el logro cognitivo del objeto permanente. La última subfase,
constituye un período evolutivo intrapsíquico extremadamente importante, en el curso del
cual se logra un sentimiento estable de entidad. En esta subfase parece ocurrir también
la consolidación primitiva de la IDENTIDAD SEXUAL.
Pero la constancia objetal implica algo más que el mantenimiento de la representación
del objeto de amor ausente. Implica también la unificación del objeto “bueno” y
“malo” en una representación total. La constancia objetal debe considerarse como el
último estadio en el desarrollo de una relación objetal madura. Tiene una repercusión
sobre el destino de los impulsos agresivos y hostiles.

En el estado de constancia objetal, el objeto de amor no será rechazado ni cambiado por


otro, aunque ya no pueda proporcionar satisfacciones; en ese estado aún se añora al
objeto, y no se lo rechaza como insatisfactorio simplemente porque esté ausente.
Puede prolongarse y tolerarse mejor la separación temporaria. El establecimiento de
la permanencia del objeto y de una “imagen mental” del objeto en el sentido de Piaget,
es un prerrequisito necesario, pero no suficiente del establecimiento de la constancia
objetal libidinal.
La comunicación verbal se desarrolla durante ésta y en la cuarta subfase de la
separación-individuación y reemplaza lentamente a los otros modos de comunicación.
El juego se vuelve más planificado y constructivo. Hay un creciente interés en los
compañeros de juego y en los adultos que no son la madre. Comienza a desarrollarse un
sentimiento del tiempo y junto con él, una creciente capacidad de tolerar la demora en
la gratificación y de soportar la separación.
También es característica de esta subfase la recurrencia de un negativismo leve o
moderado, que parece ser esencial para el desarrollo del sentimiento de identidad.

WINNICOTT. (1963).

De la dependencia a la independencia en el desarrollo del individuo


● La socialización. En la salud o normalidad, el adulto es capaz de identificarse con la sociedad
sin tener que sacrificar su espontaneidad personal. La independencia jamás es absoluta.
El individuo sano no se aísla sino que se relaciona con el medio ambiente de tal forma que el
individuo y el medio podrían calificarse de interdependientes.
● El autor plantea tres categorías:
1) DEPENDENCIA ABSOLUTA: el recién nacido depende por completo de la provisión
física aportada por la madre. PERO el niño es a la vez dependiente e independiente
en términos psicológicos. Por un lado, está todo lo que el bebé hereda, incluyendo
procesos de maduración y ciertas tendencias patológicas. Por otro lado, la evolución
de los procesos de maduración depende de la provisión ambiental. La madre es al
principio el medio ambiente posibilitador. Este estado es el de PREOCUPACIÓN
MATERNAL PRIMARIA: durante el embarazo y las primeras semanas del bebé, la
madre se preocupa del cuidado del niño de forma extrema; el niño parece formar parte
de ella. La madre "sabe como se siente el niño". Por esto es una dependencia
absoluta del bebé.
Cuestión del sostenimiento del niño: nadie es capaz de sostener un bebé en brazos
a menos que sepa identificarse con él. La madre que sabe entregarse duramente un
breve período a esta misión natural, sabe igualmente proteger la continuidad
existencial de su hijo. Todas las amenazas, conflictos o fallos de adaptación
amenazan esta continuidad. La madre logra una adaptación sensible a las
necesidades del ego de la criatura que es breve. Crecimiento del niño coincide con
la reanudación de la independencia propia por parte de la madre. En esta etapa el
niño no es consciente de la provisión materna.
2) DEPENDENCIA RELATIVA: consiste en una fase de la adaptación en la que la
dependencia va disminuyendo poco a poco. La mayoría de las madres son capaces
de aportar una desadaptación gradual que esté acoplada a la rapidez con que el niño
hace progresos. La totalidad del procedimiento del cuidado infantil debe caracterizarse
principalmente por el modo firme y estable de presentarle el mundo a la criatura. La
criatura necesita el cuidado y la atención de alguien que sigue siendo "ella
misma". La criatura sólo recibirá una presentación clara de la realidad externa cuando
sea cuidada por un ser humano consagrado a la criatura y a la tarea de cuidarla. La
criatura empieza a ser consciente de su dependencia. La angustia que aparece
cuando la madre se aleja un tiempo es indicio de que la criatura es consciente.
3) HACIA LA INDEPENDENCIA: el niño, poco a poco, se va viendo capacitado para
enfrentarse con el mundo y todas sus complejidades, ya que cada vez ve más y más
cosas de las que se hallan presentes en su propia personalidad. El niño se identifica
con la sociedad a través de una serie de círculos de la vida social cada vez más
amplios. El niño se halla en situación de vivir una existencia personal satisfactoria al
mismo tiempo que se ve envuelto en los asuntos de la sociedad. Los padres son
necesarios debido especialmente a las tensiones instintivas y a los patrones
susceptibles de reaparecer tras haber sido abandonados por primera vez a la edad en
que se dan los primeros pasos. El proceso de crecimiento sigue en la adultez. Una
vez que se encuentra un lugar en la sociedad, a través del trabajo, matrimonio, etc,
podemos decir que la vida como adulto ha empezado.

WINNICOTT. Objetos transicionales y fenómenos transicionales


● Primera hipótesis (1951)
El bebé se satisface oralmente primero con el puño y dedos de la mano. Luego de unos
meses encuentra placer jugando con muñecas o juguetes, blandos o duros.
● Primer posesión no-yo.
● Términos objetos transicionales y fenómenos transicionales para designar la zona
intermedia de experiencia, entre el pulgar y el osito, entre la actividad creadora primaria y
la proyección de lo que ya se ha introyectado, entre el desconocimiento primario de la
deuda y el reconocimiento de esta.
● Cada individuo posee una realidad externa y una realidad interna. PERO también existe una
tercera parte de la vida de un humano, una zona intermedia de experiencia a la cual
contribuyen la realidad interior y la vida exterior. Es una zona que no es objeto de desafío
alguno, no se le presentan desafíos.
● En el desarrollo del niño pequeño aparece una tendencia a entretejer en la trama personal
objetos-distintos-que-yo. Estos objetos representan el PECHO MATERNO.
● Fenómenos transicionales: experiencias funcionales que van acompañadas por la
formación de pensamientos o de fantasías (succión del pulgar acompañado de un objeto
exterior: sábana, servilletas, lana, etc.).
● Objeto transicional: el niño encuentra un objeto blando, o de otra clase, y lo use. La pauta
de los fenómenos transicionales aparece desde los cuatro a seis meses hasta los ocho a
doce.
● Las pautas establecidas en la infancia pueden persistir en la niñez, de modo que el primer
objeto blando sigue siendo una necesidad absoluta a la hora de acostarse, o en momentos
de soledad, o cuando existe el peligro de un estado de ánimo deprimido.
● En plena salud se produce una ampliación gradual de la gama de intereses.
● No existe una diferencia apreciable entre los varones y las niñas, en su uso de la primera
posesión "no-yo" (objeto transicional). HAY CASOS en los que no existe un objeto transicional
aparte de la madre misma.
● Cualidades especiales de la relación con el O.T. :
1) El bebé adquiere derechos sobre el objeto.
2) El objeto es acunado con afecto, y al mismo tiempo amado y mutilado con excitación.
3) Nunca debe cambiar el objeto a menos de que lo haga el bebé.
4) Tiene que sobrevivir al amor instintivo, así como al odio y agresión pura.
5) Al bebé debe parecerle que irradia calor, o que se mueve o posee textura.
6) Proviene de afuera desde nuestro punto de vista, pero no para el bebé. Tampoco
viene de adentro: no es una alucinación.
7) Se permite que su destino sufra una descarga gradual, de modo que a lo largo de los
años queda, no tanto olvidado como relegado al limbo. No se lo olvida ni se lo llora.
PIERDE SIGNIFICACIÓN.
● Los verdaderos O.T. son más importantes que la madre, una parte casi inseparable del
niño.
● Postulados psicoanalíticos aceptados:
1) El objeto transicional representa el pecho materno, o el objeto de la primera relación.
2) Es anterior a la prueba de la realidad establecida.
3) En relación con el objeto transicional el bebé pasa del DOMINIO OMNIPOTENTE
(mágico) al DOMINIO POR MANIPULACIÓN (que implica el erotismo muscular y el
placer de la coordinación).
4) A la larga el objeto transicional puede convertirse en un objeto fetiche y por lo tanto
persistir como una característica de la vida sexual adulta.
5) A consecuencia de la organización erótica anal, el objeto transicional puede
representar las heces.
● Melanie Klein: el O.T. no es un objeto interno; es una posesión. Pero (para el bebé) tampoco
es un objeto exterior.
● El bebé puede emplear un objeto transicional cuando el objeto interno está vivo, es real y lo
bastante bueno. Pero ese objeto interno depende, en lo referente a sus cualidades, de la
existencia, vivacidad y conducta del objeto exterior.
● Cuando subsiste la característica de insuficiencia del objeto exterior, el interno deja de tener
significado para el bebé, y entonces, y solo entonces, el objeto transicional se vuelve también
carente de sentido.
● El niño no puede pasar del principio del placer al de realidad, o a la identificación
primaria (PROCESO PRIMARIO) y más allá de ella (PROCESO SECUNDARIO: inserción
en la sociedad), si no existe una madre lo bastante buena.
● La madre "lo bastante buena" es la que lleva a cabo la adaptación activa a las necesidades
de este y que la disminuye poco a poco, según la creciente capacidad del niño para hacer
frente al fracaso en materia de adaptación y para tolerar los resultados de la frustración.
● La madre lo bastante buena comienza con una adaptación casi total a las necesidades de su
hijo, y se adapta poco a poco de forma menos completa en consonancia a la creciente
capacidad de su hijo para encarar ese retroceso.
Medios con los que cuenta el bebé para enfrentar el retroceso materno:
1) Su experiencia, repetida a menudo, en el sentido de que la frustración tiene un límite
de tiempo.
2) Una creciente percepción del proceso.
3) El comienzo de la actividad mental.
4) La utilización de satisfacciones autoeróticas.
5) El recuerdo, el revivir de experiencias, las fantasías, los sueños; la integración de
pasado, presente y futuro.
● Si todo va bien, el bebé puede incluso llegar a sacar provecho de la experiencia de
frustración, puesto que la adaptación incompleta a la necesidad hace que los objetos sean
reales.
● Los fenómenos transicionales representan las primeras etapas del uso de la ilusión, sin
las cuales no tiene sentido para el ser humano la idea de una relación con un objeto que otros
perciben como exterior a ese ser.
● La ilusión y su valor: la madre ofrece al bebé la ilusión de que su pecho es parte de él.
La tarea posterior de la madre consiste en desilusionar al bebé en forma gradual.
● Se desarrolla en el bebé un fenómeno subjetivo llamado PECHO MATERNO. Los
fenómenos transicionales representan las primeras etapas del uso de la ilusión, sin las
cuales no tiene sentido para el ser humano la idea de una relación con un objeto que otros
perciben como exterior a ese ser.
● Si el proceso de desilusión gradual sale bien, queda preparado el escenario para las
frustraciones que reunimos bajo la denominación de destete (fin de la lactancia). La simple
terminación de la alimentación a pecho no es un destete.
● Relación con la primera posesión: ésta se vincula en el tiempo con los fenómenos
autoeróticos y la succión del puño y del pulgar, y más adelante con el primer animal o muñeca
blandos y con los juguetes duros. Además tiene vinculaciones con el objeto exterior (el pecho
materno) y con los objetos internos (el pecho mágicamente introyectado) pero es distinta de
ellos.
Los objetos y fenómenos transicionales pertenecen al reino de la ILUSIÓN que constituye la
base de iniciación de la experiencia. Esa primera etapa del desarrollo es posibilitada por la
capacidad especial de la madre para adaptarse a las necesidades de su hijo con lo cual le
permite formarse la ilusión de que lo que él cree existe en la realidad. La ZONA INTERMEDIA
DE EXPERIENCIA constituye la mayor parte de la experiencia del bebé, y se conserva a lo
largo de la vida en las intensas experiencias que corresponden a las artes y la religión, a la
vida imaginativa y a la labor científica creadora.

ZONA INTERMEDIA
● La aceptación de la realidad nunca queda terminada, ningún humano está libre de la
tensión de vincular la realidad interna con la exterior, y el alivio de esta tensión lo proporciona
una ZONA INTERMEDIA de experiencia, que no es objeto de ataques (las artes, la religión,
etc). Dicha zona es una continuación directa de la zona de juego del niño pequeño que "se
pierde" en sus juegos.
● La zona intermedia es importante para la iniciación de una relación entre el niño y el mundo.
Es posibilitada por una crianza lo bastante buena en la primera fase crítica.
● Los objetos y fenómenos transicionales pertenecen al reino de la ilusión que constituye la
base de iniciación de la experiencia.
● Lo TRANSICIONAL no es el objeto. Este representa la transición del bebé, de un estado en
que se encuentra fusionado a la madre a uno de relación con ella como algo exterior y
separado.

UNIDAD 3. El desarrollo psicomotor. La representación psíquica del cuerpo.

CRATTY. Desarrollo perceptual y motor en los niños

Cratty, Brian. Cap. III “Comienzos del movimiento en el infante”

● El infante empieza a ejercitar sus capacidades motrices antes del nacimiento y los niveles de
actividad fetal permiten predecir aproximadamente la competencia motriz posterior. La
capacidad para la discriminación perceptual aparece poco después del nacimiento. El bebé
presenta un conjunto de características oculares notablemente maduras durante los primeros
días de vida.
● Reflejos del infante. Los primeros movimientos que se pueden provocar en el recién nacido
consisten en reflejos, es decir, en acciones involuntarias desencadenadas por estímulos
externos de distintos tipos. Nacido el infante, tiene importancia determinar si su sistema
nervioso es sano, lo cual se hace tratando de provocar en él los reflejos que cabe esperar.
● Muchos de los reflejos iniciales que se observan en los infantes son necesarios para mantener
los procesos vitales durante el tiempo que transcurre desde que el niño deja de nutrirse dentro
del líquido amniótico hasta que adquiere las acciones voluntarias útiles para ello. Por lo
general, estos reflejos desaparecen antes de que se advierta su equivalente voluntario.
● EL REFLEJO DE MORO: se advierte en el feto ya a la novena semana de concepción y
existe durante los tres primeros meses de vida. Si persiste más allá del noveno mes de vida,
puede sugerir la existencia de un retardo
● REFLEJO TÓNICO CERVICAL DE LAS EXTREMIDADES: si se hace girar el cuello del
infante, el estiramiento de los músculos cervicales provoca un aumento de tono de las
extremidades correspondientes al lado que la cabeza enfrenta. Las extremidades del lado
opuesto se flexionan. Se observa durante la primera semana de vida. Si persiste se considera
que los centros cerebrales superiores no suprimen correctamente los movimientos mediados
por la parte inferior del tallo cerebral.
● REFLEJOS DE PRENSIÓN PALMAR Y PLANTAR: tocar la palma de las manos, así como
la planta del pie, tiende a causar flexión, respectivamente, de las manos y de los pies.
● MOVIMIENTOS DE OJO Y DE MUÑECA: cuando se inclina hacia adelante la cabeza del
bebé, los ojos tienden a mirar hacia arriba; similarmente, si la cabeza es mantenida hacia
atrás, los ojos miran hacia el mentón. Este reflejo es normal durante el primer día de vida. En
los bebés normales, poco después del nacimiento es reemplazado por movimientos
voluntarios de los ojos.
● REFLEJOS DE ENDEREZAMIENTO DE LA CABEZA Y EL CUERPO: estos reflejos están
relacionados entre sí. Contribuyen en tiempo posterior a la ejecución de darse vuelta
voluntariamente en la cuna. Uno es el reflejo de enderezamiento del cuerpo cuando se rota
la cabeza; y, la acción opuesta, es decir, el reflejo de enderezamiento de la cabeza por
rotación del cuerpo.
● REFLEJO LABERÍNTICO DE ENDEREZAMIENTO: contribuye a la adopción de una
posición vertical de la cabeza y el cuerpo y al movimiento de avance del niño. El infante
manifiesta ese reflejo en su tendencia a mantener la posición vertical alzando la cabeza
cuando se inclina su cuerpo hacia adelante. La cabeza tiende a conservar su posición inicial
vertical en relación con la gravedad.
● REACCIONES DE SOSTÉN DE LOS BRAZOS Y LAS PIERNAS: alrededor de los cuatro
meses, el infante, cuando se acerca a una superficie, extiende los brazos, indicando su
disposición a sostenerse a sí mismo. Alrededor del noveno mes, se advierte el mismo reflejo
en las extremidades inferiores.
● REFLEJO DE TRACCIÓN HACIA ARRIBA CON LOS BRAZOS: varios meses después de
nacer, el infante, si se lo sostiene de ambas manos en posición vertical y se lo inclina hacia
un lado u otro, tenderá a flexionar el brazo apropiado y tratará de recuperar la posición vertical
inicial.
● REFLEJO DE MARCHA: hacia el fin de la segunda semana de vida, muchos infantes
“caminan” si se los sostiene en posición vertical de manera tal que sus pies puedan tocar una
superficie horizontal plana.
● REFLEJO DE GATEO: si se pone al infante boca abajo sobre una superficie y se aplica
prensión en la planta de uno y otro pie alternativamente, el bebé responde con una pauta de
gateo ejecutada con sus extremidades superiores e inferiores. Este reflejo se advierte en el
nacimiento. Por lo común, desaparece entre el tercer y el cuarto mes.
● MOVIMIENTOS DE NATACIÓN: consiste en los movimientos natatorios que ejecuta si se lo
mantiene en agua o por encima de esta
● MOVIMIENTOS DE TREPA: los recién nacidos presentan un reflejo similar a la ascensión
vertical. La mayoría de los observadores sitúan habitualmente este reflejo hacia fines del
primer año de vida y comienzos del segundo. Está asociado con la adopción de la marcha
erecta y las primeras tentativas por caminar voluntariamente.
● Tres tendencias en el desarrollo motor de infantes y niños:
1. El desarrollo del control voluntario avanza desde la cabeza hacia los pies
2. El control de los grandes músculos se adquiere antes que el de los pequeños
músculos
3. Los niños presentan una tendencia general a madurar en forma próximo distal,
lo cual significa que las funciones motrices tienden a madurar antes en las zonas
más cercanas a la línea media del cuerpo que en las zonas más alejadas de esa línea

Cratty, Brian. Cap. IV “Atributos motores gruesos a la edad preescolar”


● De 1 a 4 años, encontramos un período de experimentación por parte de los pequeños.
Están aprendiendo las destrezas motrices, y, por lo tanto, a menudo ejecutan gran número
de formas motrices relativamente simples. Durante este período los niños empiezan a
manifestar varias asimetrías en sus maneras de moverse. Se torna aparente la preferencia
por una mano, por un oído, un ojo. Hacia el fin del quinto año, los movimientos se tornan
más integrados. En general, los primeros cinco años de vida constituyen un período de
acentuados cambios. El niño de 4 a 5 años sustituye a menudo el movimiento por el
pensamiento.
● Una enseñanza persistente y sutil permite aceprelilerar durante la primera infancia la
adquisición de ciertos tipos de competencias motrices. Después de los 18 meses de
vida, una enseñanza especial permite mejorar perceptiblemente las destrezas; antes de ese
tiempo, hay menos probabilidad de mejorar por dicho medio las conductas básicas en que
intervienen actividades como caminar, subir escaleras y demás.
● Los primeros índices de funcionamiento perceptomotor o de actividad motriz
generalizada pueden servir para pronosticar las futuras características del individuo
en los órdenes intelectual, motor y/o emocional. Una evaluación de la conducta en la
primera infancia y en la edad preescolar permite a menudo predecir las tendencias
generales de conducta en la adolescencia y la vida adulta.
● En general, se comprobó que la conducta infantil consistía en seis atributos distintos y
mensurables:
1. Seguimiento visual, observado durante el segundo y el tercer mes.
2. Responsividad social, entre el tercero y el séptimo mes.
3. Interés perceptual, primero al tercero y decimoquinto al decimoséptimo mes
4. Destrezas manuales, durante el cuarto al séptimo mes
5. Vocalizaciones, quinto al decimocuarto mes
6. Relaciones con objetos, décimo y decimoséptimo mes

Locomoción: variaciones y exploraciones.


● ETAPAS EN EL DESARROLLO DE LA CONDUCTA DE MARCHA.
● Las tentativas iniciales por caminar se caracterizan por una amplia separación entre los pies
y un ritmo irregular. A medida que aumenta la eficiencia de la marcha, los niños empiezan a
caminar con las piernas menos separadas y en forma más rítmica, así como a avanzar en
línea recta. A medida que el equilibrio del niño mejora, su marcha se torna más eficiente.
Variaciones en la locomoción
● Poco después de aprender a caminar, los niños intentan modificar la manera en que se
mueven. Hacia mediados del segundo año adquieren la capacidad para marchar de
costado y hacia atrás.
● CARRERA: a partir de los 18 meses pueden hacer una marcha que se asemeja a la
carrera. Sin embargo, no se trata en realidad de esta. Entre los dos y los tres años, los
niños denotan capacidad para la verdadera carrera
● SALTO: los niños cuando empiezan a intentar el salto mantienen uno de sus pies en
contacto con el suelo. Alrededor de los dos años, el niño salta impulsándose con ambos
pies.
● El EQUILIBRIO es una medida de la “salud” del sistema nervioso. Los niños adquieren
la capacidad de marchar sobre las líneas con bastante exactitud a una edad notablemente
temprana. La capacidad para marchar sobre un trayecto razonablemente recto se alcanza
alrededor de los tres años.

Cratty, Brian. Cap. VII “Conductas manipulativas”


● A los pocos días de nacer, el infante adquiere cc de que en su campo espacial hay objetos.
El presente cap. está centrado en las fases por las que pasa el infante a medida que va
tocando objetos, manipulandolos o utilizándolos.
● El infante pasa por cuatro fases generales en su relación con los objetos:
1. Primero se siente atraído por los objetos y por sus propios marcos.
2. En la segunda etapa manifiesta excitación motriz general al enfrentar al objeto, sin
ninguna tentativa por tomar contacto con él.
3. La tercera fase es de contacto y manipulación.
4. La cuarta etapa involucra diversas clases de explotación del objeto. Esta última fase
evoluciona hacia operaciones más cognitivas.

● Al madurar el niño, alcanzándose ya los tres o cuatro meses de edad, empieza a tocar cada
vez menos los objetos, pues parece haber incorporado en su cc las formas y superficies.
● La aparición de conductas manipulativas por parte del infante está asociada con el acto de
llevarse a la boca los objetos para inspeccionarlos con la lengua, los labios, y las zonas
interiores de la boca.
● Con el transcurso de las semanas los infantes comienzan a prestar más atención visual a los
objetos y tambien a ciertas partes de su propio cuerpo. Al combinarse, estas conductas
provocan una cantidad de conductas manipulativas cada vez más complejas.
● Las conductas manipulativas evolucionan en el infante humano de acuerdo con las
siguientes etapas:
1. Descubrimiento inicial de la mano
2. Segunda inspección visual de esa mano
3. Inspección de objetos en el campo espacial
4. Golpes a objetos en el campo espacial
5. Contacto con objetos en el campo espacial
6. Inspección táctil
7. El infante anticipa la manipulación de objetos abriendo y cerrando la mano
mientras el brazo se extiende y se acerca a los objetos.
● Desde el segundo hasta el sexto mes, la conducta manipulativa denota dos tendencias. Los
infantes empiezan a observar con mayor detalle cada objeto con el que toman contacto. La
simple prensión palmar evoluciona hasta convertirse en manipulación táctil definida,
en que se emplean las puntas de los dedos y el índice en oposición al pulgar y al resto de los
dedos.
● Los niños empiezan además a utilizar los objetos en distintas formas. Comienzan a apilar
bloques, a arrojar objetos contra superficies para hacer ruido, a sacudir objetos con el mismo
fin y a ejecutar innumerables actividades con las cosas que tocan. Desde el quinto mes y
hasta fines del octavo, por lo general los infantes se limitan a una actividad de prensión en
que ponen la palma de la mano y los dedos, pulgar inclusive, sobre el mismo lado del objeto,
y un mes después empiezan a utilizar los objetos valiéndose de los dedos. Estos son los
meses durante los cuales los infantes pueden efectuar “copias motrices” de los objetos.

Cratty, Brian. Cap. IX “Desarrollo motor del Niño de los seis a los doce meses”
● Capacidad de los niños para moverse y manejarse con eficacia en su ambiente mejora.
● Lo que más influye no son el crecimiento físico sino experiencias que exigen destreza motriz.
● Estudios factoriales de atributos motores NO son concluyentes.
● Mediciones de carácter predictivo: se comparan puntajes mentales y motores registrados en
distintos momentos de la vida de niño.

WALLON. Kinestesia e imagen visual del propio cuerpo del niño


● Kinestesia: sensaciones percibidas desde adentro del cuerpo.
3 TIPOS DE SENSIBILIDADES:
1) Interoceptiva (respiración, piel, tubo digestivo)
2) Propioceptiva (movimiento, equilibrio, postura)
3) Kinestésicas o Exteroceptiva
Estas sensibilidades son para Freud las fuentes de la pulsión.
● La importancia de un OTRO para erogenizar el cuerpo, para empezar a constituir el esquema
corporal.
DOLTO. Imagen inconciente del cuerpo.
Esquema corporal e imagen del cuerpo.
● IMAGEN DEL CUERPO: es el mediador de las tres instancias psíquicas: Ello, Yo, y
Superyó, en las representaciones simbólicas que el sujeto realiza.
● En las producciones artísticas como los dibujos, un niño antropoformiza lo que Freud
definió como instancias psíquicas.
● En cualquier representación libre, se representa la imagen del cuerpo: y las
asociaciones que el niño proporciona ayudan a actualizar la articulación conflictiva de
las tres instancias del aparato psíquico.
● La imagen del cuerpo NO ES la imagen dibujada o representada en el modelado;
tiene que ser revelada por el diálogo analítico con el niño.
● EL ESQUEMA CORPORAL NO ES LA IMAGEN DEL CUERPO. En los ejemplos
dados (niños con tics, inhibiciones, mutismo, sonrisa estereotipada, etc) se trataba de
niños sanos en cuanto a su ESQUEMA CORPORAL; pero el funcionamiento de éste
estaba recargado de IMÁGENES DEL CUERPO PATÓGENAS.
● El cuerpo en sí estaba sano PERO su utilización funcional adaptada al consciente del
sujeto estaba impedida.
● El uso adecuado de su esquema corporal estaba anulada por una libido que se había
enlazado a una imagen del cuerpo inapropiada, arcaica o incestuosa.
● El esquema corporal es una realidad de hecho, es nuestro vivir carnal al
contacto del mundo físico. AFECCIONES ORGÁNICAS pueden afectar nuestro
esquema del cuerpo provocando trastornos que pueden acarrear modificaciones
pasajeras o definitivas en la imagen del cuerpo.
● Cuando el niño se ve atacado por una invalidez, es indispensable que su déficit físico
le sea explicitado, referenciado a su pasado no inválido o, a la diferencia congénita
entre él y los demás niños. Además tendrá que poder, con el lenguaje mímico y la
palabra, expresar y fantasmatizar sus deseos, sean éstos realizables o no según este
esquema corporal lisiado.
● La EVOLUCIÓN SANA de un niño, simbolizada por una IMAGEN DEL CUERPO NO
INVÁLIDA, con un ESQUEMA CORPORAL dañado, depende de la relación
emocional de los padres con su persona: de muy precozmente éstos le ofrecen con
palabras, informaciones verídicas relativas a su estado físico de lisiado. Estos
intercambios son humanizadores dependen de que los padres hayan aceptado o no
la invalidez del cuerpo de su hijo.
● La NO ESTRUCTURACIÓN DE LA IMAGEN DEL CUERPO se debe en gran parte al
hecho de que los padres, desorientados por no obtener nunca las respuestas
esperadas de un niño de esta edad, ya no intentan comunicarse con él de otra manera
mediante un cuerpo a cuerpo dirigido sólo a la satisfacción de sus necesidades, y
abandonan su humanización.
● El esquema corporal es el intérprete activo o pasivo de la imagen del cuerpo, en el
sentido de que permite la objetivación de una intersubjetividad, de una relación
libidinal fundada en el lenguaje, relación con los otros y que, sin él, sería, para siempre,
un fantasma no comunicable.
● El ESQUEMA CORPORAL es el MISMO PARA TODOS. Es consciente,
preconsciente e inconsciente.
● La IMAGEN DEL CUERPO, por el contrario, es PROPIA DE CADA UNO: está ligada
al sujeto y su historia. Es puramente inconsciente. Puede hacerse independiente del
esquema corporal. Se articula con él a través del NARCISISMO, originado en la
canalización del sujeto en la concepción.
● Es la encarnación simbólica inconsciente del sujeto deseante. Gracias a nuestra
imagen del cuerpo portada por -y entre cruzada con- nuestro esquema corporal,
podemos entrar en comunicación con el otro.}
● En la técnica psicoanalítica, LA NEUTRALIZACIÓN DEL ESQUEMA CORPORAL
POR LA POSICIÓN ACOSTADA DEL PACIENTE ES LO QUE JUSTAMENTE
PERMITE EL DESPLIEGUE DE LA IMAGEN DEL CUERPO.
● El dibujo en terapia es un trabajo, una puesta en palabras de los fantasmas del
niño. No es un juego por placer sino una forma de expresarse dirigiéndose al analista
por medio de su juego, dado que aún no puede expresar con palabras lo que piensa,
siente. Sus dibujos están destinados a ser hablados.
● Partiendo de su dibujo, el niño acaba hablando, por asociación de ideas, de su padre,
madre, hermanos, entornos, etc.
● Sólo con la entrada en el orden simbólico, por obra de la castración edípica, la relación
verdadera en la palabra podrá expresar claramente a aquel que habla, en cuanto
sujeto responsable del obrar de su Yo, que su cuerpo manifiesta.
● El interés de descifrar la imagen del cuerpo a través de las ilustraciones gráficas y
plásticas que de ella proporciona el niño, radica en comprender de qué manera puede
entrar en comunicación de lenguaje, expresarse de verdad con un adulto, sin por ello
hablarle.
● Las PULSIONES DE VIDA, siempre ligadas a una representación, pueden ser activas
o pasivas, mientras que las PULSIONES DE MUERTE, carecen de representación y
no son ni activas ni pasivas. Se las vive en una falta de ideación. Predominan durante
el sueño profundo, las ausencias, el coma. No se trata de deseo de morir, sino de
descansar.
● La imagen del cuerpo está del lado del deseo, no ha de ser referida a la mera
necesidad. La imagen del cuerpo, da testimonio de la falta en ser que el deseo apunta
a colmar.

UNIDAD 4. Aspectos de la metapsicología freudiana. Nociones fundamentales en los


tiempos de estructuración psíquica.

FREUD. Freud: Ensayo II “La sexualidad infantil”


● Descuido de lo infantil: la opinión popular ignora la pulsión sexual, asumiendo que esta falta
en la infancia.
● Amnesia infantil: a causa del mecanismo de la represión.
● Se podrían comparar el estado anímico del niño con el psiconeurótico, pues la sexualidad de
estos últimos conserva el estado infantil.
● Latencia:
Inhibiciones sexuales: se edifican los poderes anímicos, inhibidores en el camino de la
pulsión sexual, que angostarán su curso a la manera de diques (asco, vergüenza, reclamos
ideales en lo estético y lo moral). Este desarrollo es condicionamiento orgánico, fijado
hereditariamente.
● Formación reactiva y sublimación: en el comienzo del período de latencia, el aflujo, la
energía de las mociones sexuales es desviada del uso sexual y aplicada a otros fines; la
pulsión sexual se orienta hacia metas nuevas (sublimación): con ello se adquieren
componentes para los logros culturales.
● Las emociones sexuales infantiles serían inaplicables, pues las funciones de la reproducción
están sin desarrollar, lo cual constituye el carácter principal del período de latencia. Por eso
suscitan fuerzas anímicas contrarias (mociones reactivas) que construyen para la sofocación
de ese displacer, los diques psíquicos.
● Exteriorizaciones de la sexualidad infantil
Chupeteo: es el modelo de las exteriorizaciones infantiles. Es el contacto de succión con la
boca, que no tiene por fin la nutrición, combinado con el frotamiento de partes sensibles.
● Autoerotismo: la pulsión se satisface en el cuerpo propio. La acción del niño chupeteador se
rige por la búsqueda de un placer ya vivenciado y ahora recordado. Los labios se comportaron
como zona erógena, y la estimulación por el cálido aflujo de leche fue la causa de la sensación
placentera. La satisfacción de la zona erógena se asoció con la satisfacción de la necesidad
de alimentarse. El quehacer sexual se apuntala en una de las funciones que sirven a la
conservación de la vida, y más tarde se independiza de ella (APUNTALAMIENTO). El
niño no se sirve de un objeto ajeno; prefiere una parte de su cuerpo, porque así se
independiza del mundo exterior al que no puede dominar, y así se procura una segunda zona
erógena, de menor valor.
● Los niños que chupetean llegan a hacerlo por reforzar el valor erógeno de la zona de los
labios. Si esta persiste, estos niños llegados a adultos serán gustadores perversos, tendrán
motivación para beber y fumar. En cambio, si sobreviene la represión, sentirán asco frente a
la comida.
● En el chupeteo se observan los tres caracteres de una exteriorización infantil:
● esta nace apuntalándose.
● es autoerótica.
● su meta sexual se encuentra bajo el imperio de una zona erógena

● Meta sexual infantil: consiste en producir la satisfacción mediante la estimulación de la zona


erógena escogida. Para que se cree una necesidad de repetirla, esta satisfacción tiene que
haber sido vivenciado antes. La necesidad de repetir se trasluce por un sentimiento de
tensión, que posee displacer, y una sensación de estímulo condicionada centralmente y
proyectada a la zona erógena. La meta sexual procurará sustituir la sensación de estímulo
proyectada sobre la zona erógena, por aquel estímulo externo que la cancela al provocar
satisfacción.
● Exteriorizaciones sexuales masturbatorias
Activación de la zona anal: apta para proporcionar un apuntalamiento de la sexualidad en
otras funciones corporales. Los niños que sacan partido de la estimulabilidad de la zona anal
se delatan por el hecho de retener hasta que se produce una gran acumulación, que luego al
ser expulsado ejerce un poderoso estímulo. Un lactante se rehúsa a vaciar el intestino;
cuando la persona encargada “lo desea”, se reserva esta función para él mismo. Lo trata
como a una parte de su cuerpo; representa el primer “regalo” por medio del cual el niño se
expresa obediente hacia el medio circundante exteriorizándolo, y su desafío rehusándolo. A
partir de ese significado de regalo, pasa a cobrar el significado de “hijo”, el cual, según una
de las teorías sexuales infantiles se adquiere por la comida y es dado a luz por el intestino.
● Activación de las zonas genitales: mediante el onanismo del lactante se establece el futuro
primado de esta zona erógena para la actividad sexual.
La preferencia por la mano señala la contribución que la pulsión de apoderamiento está
destinada a prestar a la actividad sexual masculina.
● (Diccionario de Laplanche: Fase fálica: fase de organización infantil de la líbido que sigue
a las fases oral y anal y se caracteriza por una unificación de las pulsiones sexuales bajo la
primacía de los órganos genitales; pero, a diferencia de la organización genital puberal, el
niño no reconoce en esta fase más que un solo órgano genital, el masculino, y la
oposición de los sexos equivale a la oposición fálico-castrado. La fase fálica
corresponde al momento culminante y a la declinación del complejo de Edipo; en ella
predomina el complejo de castración.
● Disposición perversa polimorfa: bajo la influencia de la seducción el niño puede convertirse
en un perverso polimorfo, siendo descaminado a practicar todas las transgresiones posibles.
En su disposición trae consigo la aptitud para ello; tales transgresiones tropiezan con escasas
resistencias porque, según la edad del niño, no se han erigido o están en formación los dique
anímicos.
● Pulsiones parciales: la vida sexual infantil, a pesar del imperio que ejercen las zonas
erógenas, muestra componentes que desde el comienzo envuelven a otras personas en
calidad de objetos sexuales. De esa índole son las pulsiones del placer de ver, de exhibir y
de la crueldad. Aparecen con independencia de las zonas erógenas, y más tarde entran en
relaciones con la vida genital, pero se hacen notables ya en la niñez como aspiraciones
autónomas, separadas al principio de la actividad sexual erógena. El niño carece de
vergüenza, y muestra una inequívoca complacencia en desnudar su cuerpo. Bajo la influencia
de la seducción, la perversión de ver alcanza importancia para la vida sexual del niño; puede
emerger en el niño la pulsión de ver como una exteriorización sexual espontánea. Niños cuya
atención se dirigió alguna vez a sus propios genitales, ulteriormente desarrolló un interés por
los genitales de los otros.
Se desarrollan en el niño los componentes crueles de la pulsión sexual. La moción cruel
proviene de la pulsión de apoderamiento y emerge en la vida sexual en una época en la que
los genitales no han asumido aún el papel que luego desempeñarán
● La investigación sexual infantil
La pulsión de saber: su acción corresponde a una manera sublimada del apoderamiento, y
trabaja con la energía de la pulsión de ver. La pulsión de saber de los niños recae sobre los
problemas sexuales, y quizás es despertada por estos.
● El enigma de la esfinge: son intereses prácticos los que ponen en marcha la actividad
investigadora del niño. La amenaza que para sus condiciones de existencia significa la
llegada de un nuevo niño, lo vuelven reflexivo. El primer problema que lo ocupa es el enigma:
¿de dónde vienen los niños?
● Complejo de castración y envidia del pene: el supuesto de que todos los humanos poseen
idéntico genital (masculino) es la primera de las teorías sexuales infantiles.
● (1920: se habla de un complejo de castración también en las mujeres. Tanto varones
como mujeres forman la teoría de que también la mujer tuvo originariamente un pene que
perdió por castración)
● Teorías del nacimiento: la investigación correspondiente ha caído bajo represión. Sus
resultados fueron uniformes: los hijos se conciben por algo comido, y se los da a luz por el
intestino, como a la materia fecal.
● Concepción sádica del comercio sexual: si el niño es espectador del comercio sexual entre
adultos, concebirá el acto sexual como una especie de maltrato o sojuzgamiento, en sentido
sádico. Buscan la solución del secreto sobre qué consiste el comercio sexual (o el estar
casado) en alguna relación de comunidad proporcionada por las funciones de la micción o la
defecación.
● El típico fracaso de la investigación sexual infantil: las teorías sexuales infantiles son
reflejos de la propia constitución sexual del niño, y dan pruebas de una comprensión sobre
los procesos sexuales. Pero como su investigación ignora el semen fecundante y la abertura
sexual femenina, los esfuerzos del pequeño investigador resultan infructuosos y terminan en
una renuncia que puede dejar como secuela un deterioro de la pulsión de saber. La
investigación sexual infantil es solitaria, implica un primer paso hacia la orientación
autónoma en el mundo y establece un fuerte extrañamiento del niño respecto de las
personas de su contorno, que antes habían gozado de su confianza.

● Fases de desarrollo de la organización sexual


La vida sexual infantil es autoerótica y sus pulsiones parciales singulares aspiran a conseguir
placer cada una por su cuenta. El punto de llegada lo constituye la vida sexual del adulto
“normal”; en ella la consecución del placer se ha puesto al servicio de la función de
reproducción, y las pulsiones bajo el primado de una única zona erógena.
● Organizaciones pregenitales: organizaciones de la vida sexual en que las zonas genitales
todavía no han alcanzado su papel hegemónico.
1) Primera fase: oral o canibálica. La actividad sexual no se ha apartado de la nutrición,
ni se diferenciaron opuestos. La meta consiste en la incorporación del objeto.
2) Segunda fase: anal o sádica. Se despliega la división en opuestos (activo y pasivo).
La actividad es producida por la pulsión de apoderamiento, y la meta pasiva tiene
como órgano el intestino. Sus objetos no coinciden.
● Ambivalencia: pares opuestos pulsionales están plasmados en un grado igual.
En la niñez se consuma una elección de objeto. El conjunto de los afanes sexuales se dirigen
a una única persona, y en ella quieren alcanzar su meta.
● Dos tiempos de la elección de objeto: La primera se inicia entre los 2 y los 5 años. Se
interrumpe por el período de latencia: se caracteriza por la naturaleza infantil de sus metas
sexuales. La segundo viene con la pubertad, que determina la conformación definitiva de la
vida sexual (corriente sensual), la cual debe renunciar a los objetos infantiles..
● El primer tiempo puede perturbar el estado final; se prolongan hasta una época tardía. Pero
demuestran ser inaplicables, a consecuencia del desarrollo de la represión. Sus metas
sexuales experimentan un atemperamiento, y figuran la corriente tierna de la vida sexual.
● Fuentes de la sexualidad infantil
La excitación sexual nace: como calco de una satisfacción vivenciada a raíz de otros procesos
orgánicos, por una estimulación periférica de zonas erógenas, como expresión de algunas
“pulsiones”.
● Excitaciones mecánicas: producción de excitación sexual mediante sacudimientos
mecánicos del cuerpo (sensaciones de movimiento pasivo).
● Activación muscular: intensa actividad muscular constituye para el niño una necesidad de
cuya satisfacción extrae un placer extraordinario.
● Procesos afectivos: los procesos afectivos más intensos desbordan sobre la sexualidad.
● Trabajo intelectual: la concentración de la atención en una tarea intelectual, y el esfuerzo
mental, tienen por consecuencia una excitación sexual. Hace derivar las perturbaciones
nerviosas de un “exceso de trabajo mental”.
● Diversas constituciones sexuales: fuentes indirectas de excitación sexual. Estas fuentes
brindan su aporte en todos los individuos, pero no con la misma intensidad en todos. La
plasmación privilegiada de cada una de las fuentes de la excitación sexual contribuye a
diferenciar las diversas constituciones sexuales.
FREUD: Formulaciones sobre los dos principios del acaecer psíquico

● Como punto de arranque en el psicoanálisis, se toman los procesos psíquicos inconscientes,


los más antiguos, primarios, provenientes de una fase de desarrollo en que eran la única
clase de procesos anímicos. Obedecen al principio de placer-displacer. Aspiran a ganar
placer, y de los actos que pueden suscitar displacer, la actividad psíquica ejerce represión.
● La ausencia de satisfacción trajo por consecuencia que se abandone el intento de satisfacción
por vía alucinatoria. El aparato psíquico debió resolverse a representar las constelaciones
reales del mundo exterior y a procurar la alteración real. Así se introdujo un nuevo principio
en la actividad psíquica; no se representó lo agradable, sino lo real (aunque fuese
desagradable): PRINCIPIO DE REALIDAD. Consecuencias:
1) Adaptaciones del aparato psíquico. Al aumentar la importancia de la realidad
exterior, cobró relieve la de los órganos sensoriales dirigidos a ese mundo y de la
conciencia acoplada a ellos, que captaba las cualidades sensoriales (además de las
cualidades de placer y displacer). Se instituyó la atención, que explora el mundo a fin
de que sus datos fueras consabidos antes que se instale una necesidad interior
inaplazable. En lugar de la represión, surgió el fallo imparcial que decidiría si una
representación era verdadera o falsa. La descarga motriz, que durante el imperio del
principio de placer servía para aligerar de aumentos de estímulo al aparato, se la usó
para alterar la realidad con arreglo a fines: acción. La suspensión de la descarga
motriz fue procurada por el proceso del pensar, dotado de propiedades que
posibilitaron al aparato soportar la tensión de estímulo elevada durante el
aplazamiento de la descarga. Se requirió un transporte de las investiduras libres a
investiduras ligadas.
2) Tendencia de nuestro aparato anímico en aferrarse a las fuentes de placer de que se
dispone y en la dificultad con que se renuncia a ellas. Al establecerse el principio de
realidad, una clase de actividad del pensar se escindió, apartándose del examen de
la realidad, sometida al principio de placer. Es el fantasear, (juego en niños, sueños
diurnos en adultos).
3) El relevo del principio de placer por el de realidad no se cumple de una vez, pues
mientras se cumple en las pulsiones yoicas, las sexuales deshacen de él; se
comportan primero de forma autoerótica, de ahí que no lleguen a la situación de
frustración que obligó a instituir el principio de realidad. Cuando empieza el proceso
de hallazgo de objeto, este proceso se interrumpe por el período de latencia. Por
ambas (latencia y autoerotismo), las pulsiones sexuales permanecen más tiempo bajo
el principio de placer. La represión inhibe represiones, lo cual es el lugar más lábil
para llevar bajo el imperio del principio de placer procesos de pensamiento.
4) Como el yo-placer no puede más que desear ganancia de placer, el yo-realidad aspira
a beneficios y se asegura contra perjuicios. En verdad, la sustitución del principio
de placer por el de realidad no implica el destronamiento del primero, sino su
aseguramiento. Se abandona un placer momentáneo e inseguro, por ganar el nuevo
camino un placer seguro, que vendrá después.
5) La educación como incitación a vencer el principio de placer y sustituirlo por el de
realidad.
6) Arte como reconciliación de los dos principios. El artista se extraña de la realidad
porque no puede avenirse a la renuncia de satisfacción pulsional, por lo que da libre
curso de la fantasía a sus deseos. Pero encuentra el camino de regreso a la realidad,
plasmando sus fantasías en un nuevo tipo de realidades efectivas que los hombres
consideran valiosas. Y lo alcanza porque los otros hombres sienten la misma
insatisfacción que él.
7) Mientras el yo recorre la trasmudación del yo-placer al yo-realidad, las pulsiones
sexuales experimentan modificaciones que las llenan desde el autoerotismo inicial
hasta el amor de objeto al servicio de la reproducción de la especie.
8) En los procesos inconscientes el principio de realidad no rige para nada. La
realidad del pensar es equiparada a la realidad efectiva exterior, y el deseo a su
cumplimiento, al acontecimiento, como se deriva del imperio del principio de placer.
Por eso es difícil distinguir fantasías inconscientes de recuerdos que han devenido
inconscientes.

FREUD: Un recuerdo infantil de Leonardo Da Vinci


● Los afectos de Leonardo eran domeñados, sometidos a la pulsión de investigar, no amaba
y odiaba, sino que se preguntaba por qué debía amar u odiar, y qué significaba ello, de ese
modo, tuvo que parecer a primera vista indiferente hacia el bien y el mal, hacia lo bello y lo
feo. No era desapasionado, no estaba desprovisto de la fuerza pulsionante. Evita todo lo
sexual de manera que parece que Eros, que conserva todo lo vivo, no fuese material digno
del esfuerzo de saber.
● No había hecho sino inundar la pasión en esfuerzo de saber; se consagraba a la investigación
con la tenacidad, la constancia, el ahondamiento que derivan de la pasión, y en la cima del
trabajo intelectual, tras haber ganado el conocimiento, dejaba que estallara el afecto
largamente retenido.
● Su esfuerzo de saber permaneció circunscrito al mundo exterior, algo lo mantenía alejado de
la exploración de la vida anímica de los seres humanos.
● Esa pulsión hiperintensa se habia manifestado ya en la primera infancia de esa persona, y
consolidaría su soberanía por obra de unas impresiones de la vida infantil, suponemos que
originariamente se atrajo como refuerzo unas fuerzas pulsionales sexuales, de suerte que
más tarde pudo subrogar un fragmento de la vida sexual. Y no sólo respecto de la pulsión de
investigar, sino en la mayoría de los otros casos de particular intensidad de una pulsión nos
atreveríamos a inferir un refuerzo sexual de ella.
● La observación de la vida cotidiana de los seres humanos nos muestra que la mayoría
consigue guiar hacia su actividad profesional porciones muy considerables de sus fuerzas
pulsionales sexuales. Y la pulsión sexual es idónea para prestar esas contribuciones,
pues está dotada de la aptitud para la sublimación.
● Los niños suelen presentar un apetito de saber. A través de sus preguntas, quieren sustituir
una pregunta única, que no formula.
● La investigación sexual infantil es despertada por la impresión de una vivencia en que el niño
ve una amenaza para sus intereses. La investigación se dirige a averiguar de dónde
provienen los niños. Guiado por las mociones de su sexualidad, se forma opiniones sobre la
concepción del hijo, por algo que se come. Le es difícil averiguar el papel del padre, pero
sospecha del acto sexual, el cual le parece algo hostil y violento. Pero como su
constitución sexual no está a la altura, tiene que resultar estéril su investigación, y
abandonarla por no consumable.
● Tres destinos de la pulsión de investigar:
1. INHIBICIÓN NEURÓTICA: la pulsión de saber comparte el destino de la sexualidad.
Permanece reprimido.
2. COMPULSIÓN A CAVILAR: luego de la represión de la investigación sexual infantil, la
conexión le ofrece su auxilio para sortear la represión y la investigación sofocada
regresa del inconsciente. Sexualiza el pensar, y tiñe las operaciones intelectuales con
el placer y angustia de los procesos sexuales. El sentimiento de la tramitación por medio
del pensamiento de la aclaración. Ese cavilar no encuentra nunca un término (como el
carácter inacabable de la investigación). Compulsión a la duda
3. SUBLIMACIÓN: la libido escapa del destino de la represión sublimándose en un apetito
de saber y sumándose como refuerzo a la pulsión de investigar. El investigar deviene
compulsión y sustituto del quehacer sexual. La pulsión puede desplegar su quehacer al
servicio del interés intelectual.

FREUD: El yo y el superyó (ideal del yo)


● El Yo como una parte del ello modificada por el influjo del sistema percepción.
● Existe un grado en el interior del yo, una diferenciación dentro de él. Esta alteración del yo
recibe su posición especial: se enfrenta al otro contenido del yo como Ideal del yo o Superyó,
el cual mantiene un vínculo menos firme con la conciencia,
● En la fase oral, no es posible distinguir entre investidura de objeto e identificación. Las
investiduras de objeto parten del ello, que siente las aspiraciones eróticas como necesidades.
El yo, endeble al principio, recibe noticia de las investiduras de objeto, les presta su
aquiescencia o busca defenderse de ellas mediante represión.
● Si un objeto sexual es resignado, sobreviene la alteración del yo. Mediante esta introyección
(que es una regresión al mecanismo de la fase oral), el yo facilita la resignación del objeto.
Esta identificación es condición bajo la cual el ello resigna sus objetos. El carácter del yo es
una sedimentación de las investiduras de objeto resignadas, contiene la historia de estas
elecciones de objeto. El carácter de una persona adopta estos influjos proveniente de la
historia de las elecciones eróticas de objeto, o se defiende de ellos.
● Esta trasposición de una elección erótica de objeto en una alteración del yo es un
camino que permite al yo dominar al ello, y profundizar sus vínculos con el ello, aunque a
costa de una docilidad hacia sus vivencias. Cuando el yo cobra los rasgos del objeto, se
impone él mismo al ello como objeto de amor. La trasposición de líbido de objeto en líbido
narcisista conlleva una resignación de las metas sexuales, una desexualización, una
sublimación.
● Los efectos de las primeras identificaciones serán universales y duraderos. Esto
reconduce a la génesis del ideal del yo, pues tras este se esconde la identificación primaria:
identificación con el padre de la prehistoria personal. Las elecciones de objeto en los primeros
períodos sexuales y atañen a madre/padre tienen su desenlace en identificación de esta
clase.
● El niño desarrolla una investidura de objeto hacia la madre; del padre se apodera por
identificación. Ambos vínculos marchan juntos hasta que por el refuerzo de los deseos
sexuales hacia la madre, y por la percepción de que el padre es un obstáculo para esos
deseos, nace el complejo de Edipo. La identificación-padre cobra tonalidad hostil: desea
eliminarlo para sustituirlo junto a la madre; la relación con él pasa a ser ambivalente. Esto
caracteriza al Edipo en su forma simple.
● Con la demolición del Edipo, pueden surgir dos reemplazos:
1) identificación con la madre, o
2) refuerzo de la identificación-padre.
● La salida de la situación de Edipo depende de la intensidad relativa de las dos disposiciones
sexuales (bisexualidad interviene en los destinos del complejo de Edipo).
● El complejo de Edipo más completo es duplicado; puede mostrar también actitud tierna al
padre, y hostil hacia la madre.
● Como resultado más universal de la fase sexual gobernada por el complejo de Edipo, se
puede suponer una sedimentación en el Yo, que consiste en el establecimiento de dos
identificaciones, unificadas de alguna manera entre sí. Esta alteración del yo recibe su
posición especial: se enfrenta al otro contenido del yo como Ideal del yo o Superyó.
● El SUPERYÓ no es simplemente un residuo de las primeras elecciones de objeto del ello,
sino que tiene también significatividad de una energética reactiva frente a ellas. Su vínculo
con el yo no se agota en la advertencia: “Así (como el padre) debes ser”, también comprende
la prohibición: “Así (como el padre) no te es lícito ser”. Esta doble faz deriva de la represión
del Complejo de Edipo.
● El superyó conservará el carácter del padre, y cuando más intenso fue el complejo de
Edipo y más rápido se produjo su represión (por el influjo de la autoridad, la doctrina
religiosa, la enseñanza, etc.), tanto más riguroso devendrá después el imperio del
superyó como conciencia moral, como sentimiento inconsciente de culpa, sobre el yo.
● Génesis del superyó, como resultado de dos factores:
1) el desvalimiento y la dependencia del humano durante su infancia, y
2) el hecho de su complejo de Edipo, reconducido a la interrupción del desarrollo libidinal
por el período de latencia, a la acometida en dos tiempos de la vida sexual.
● Es la entidad más alta, el ideal del yo o superyó, la agencia representante de nuestro vínculo
parental. Para los niños, esas entidades superiores les son notorias y familiares, las admiran
y temen; más tarde, las acogen en el interior
● El Ideal del Yo, es la herencia del Complejo de Edipo, expresión de las más potentes
mociones y destinos libidinales del ello. Mediante su institución, el yo se apodera del complejo
de Edipo y simultáneamente se somete al ello. Mientras que el Yo es representante del mundo
exterior, de la realidad, el superyó se le enfrenta como abogado del mundo interior, del ello.
Los conflictos entre el yo y el ideal reflejan, la oposición entre lo real y lo psíquico, el mundo
exterior y el mundo interior.
● En el posterior desarrollo, maestros y autoridades retoman el papel del padre: sus
mandatos y prohibiciones permanecen vigentes en el ideal del yo y ejercen, como conciencia
moral, la censura moral. La tensión entre las exigencias de la conciencia moral y las
operaciones del yo es sentida como sentimiento de culpa. Los sentimientos sociales
descansan en identificaciones con otros sobre el fundamento de un idéntico ideal del yo.
● La historia genética del superyó permite comprender que conflictos anteriores del yo con las
investiduras de objeto del ello se pueden continuar en conflictos con su heredero, el superyó.
● Si el yo no logra dominar bien el complejo de Edipo, la investidura energética de éste,
proveniente del ello, retomará su acción eficaz en la formación reactiva del Ideal del Yo.

UNIDAD 6. Aspectos del desarrollo y su relación con el trabajo psíquico en la infancia:


juego, dibujo, desarrollo cognitivo, socialización.

ERIKSON ERIK (1950). Juguetes y razones


● El juego es una función del yo, un intento por sincronizar los procesos corporales y sociales
con el sí mismo.
● El propósito del juego consiste en alucinar un dominio yoico y también practicarlo de todos
modos en una realidad intermedia entre la fantasía y el mundo real.
● Incluso la forma de juego más esforzado y peligroso no constituye un trabajo: no implica la
creación de nuevos artículos de consumo. EL JUEGO NUNCA ES UN TRABAJO
● En el juego dramático podemos ser lo que en la vida nos está prohibido ser o nos negamos
a ser. A medida que el actor comienza a creer en su personificación en el juego, se acerca a
un estado de histeria.
● El juego sexual termina cuando el acto final comienza, y al hacerlo disminuye las
posibilidades de elección (el carácter juguetón se desvanece y la perversión comienza).
● En el juego encontramos el área estrecha dentro de la cual nuestro yo puede sentirse superior
a las limitaciones de espacio y tiempo y al carácter definitivo de la realidad social, libre de las
compulsiones de la conciencia y de los impulsos de la irracionalidad. Sólo en el juego, el
hombre puede sentirse como una sola cosa con su yo
● PERO el H debe jugar poco y trabajar más
● El niño que juega plantea un problema: quien no trabaje no jugará. Es por esto, que para
ser tolerante frente al juego, el adulto inventa teorías que demuestran que el juego en la
infancia es un trabajo, o bien que no sirve.
● Juego de Fort Da de FREUD: a Freud le interesaba la compulsión de repetición. El individuo
prepara inconscientemente variaciones sobre un tema original que no ha aprendido a superar
o a tolerar: trata de dominar una situación que en su forma original fue excesiva para él
enfrentándola repetidamente y por su propia voluntad. El niño convierte la pasividad en
actividad; juega a hacer algo que en realidad le hicieron a él.
● El juego puede haberse convertido en el comienzo de una creciente tendencia en el niño a
sobrellevar las experiencias de la vida en un rincón solitario y a rectificarlas en la fantasía y
sólo allí.
● Lo que tiene un significado común para todos los niños de una comunidad puede encerrar
un significado especial para algunos niños. No obstante, todo esto puede tener, además,
un significado único para los niños individuales que han perdido a una persona o a un animal
y que, en consecuencia, confieren al juego una significación particular.
● Para comprender el significado único se necesita observar no sólo el contenido y la forma
del juego, sino también las palabras que lo acompañan y los afectos visibles.
● Juego de los niños de armar una torre y luego desarmarla intencionalmente: además
del dominio activo sobre un hecho previamente pasivo, lo hace sentir más fuerte saber que
hay algo más débil, y las torres, al revés que las hermanas menores, no pueden llorar y llamar
a mamita.
● El juego del niño comienza y se centra en su propio cuerpo. Esto es el JUEGO
AUTOCÓSMICO. Empieza antes de que lo observemos como juego, y consiste al principio
en la exploración por repetición de percepciones sensuales, sensaciones kinestésicas,
vocalizaciones, etc. Luego, el niño juega con personas y objetos accesibles.
● La MICROESFERA: el pequeño mundo de juguetes susceptibles de manipular, es un puerto
que el niño establece, para volver a él cuando su yo necesita reparaciones. A menudo la
MICROESFERA lo induce por seducción a una expresión desprevenida de temas y actitudes
peligrosos, que despiertan ansiedad y conducen a una súbita desorganización del juego. Esto
puede impedir que el niño intente jugar.
● Dos posibilidades durante el juego:
1) Si resulta atemorizado o desilusionado en la microesfera, el niño puede hacer una
regresión a la autoesfera, el ensueño diurno la succión del pulgar y la masturbación.
2) Si el primer contacto con el mundo de las cosas es exitoso y está adecuadamente
guiado, el placer de dominar los juguetes se asocia con el dominio de los traumas que
se proyectaron en ellos, y con el prestigio obtenido a través de ese dominio.
● A eso de los 5 años el juego llega a la MACROESFERA: el mundo compartido con otros. Al
principio esos otros son tratados como cosas. Durante un período bastante prolongado,
entonces, el juego solitario sigue siendo un puerto indispensable para la reparación de las
emociones destrozadas después de períodos de tormentas en los mares sociales.
● El JUEGO INFANTIL no es equivalente al JUEGO ADULTO, no se trata de una recreación.
El adulto que juega pasa a otra realidad; el niño que juega avanza hacia nuevas etapas de
dominio.
● El juego infantil es la capacidad humana para manejar la experiencia mediante la creación de
situaciones modelos y para dominar la realidad mediante el experimento y el planeamiento.

Juego y curación
● El acting out a través del juego es la medida autocurativa más natural que ofrece la infancia.
● El fenómeno de la transferencia en el niño que juega, así como en el adulto que verbaliza,
señala el punto en que las medidas simples fracasan, a saber, cuando una emoción se
vuelve tan intensa que derrota la actitud de juego, obligando a una descarga inmediata en
el juego y en la relación con el observador. El fracaso está caracterizado por una
DESORGANIZACIÓN DEL JUEGO: la incapacidad repentina y completa, o difusa y de lenta
expansión, para jugar.
● La antítesis de la desorganización del juego es la SACIEDAD EN EL JUEGO, del que un
niño emerge refrescado como alguien que se despierta después de haber tenido sueños
que "terminan bien".

→ Una niña que juega con su padre seguidamente, un día recibe un castigo por parte de él
porque entra al baño mientras él se afeita. El padre le grita "Quédate afuera!". Ahora se produce
una "transferencia paterna" con su psicólogo, al que transfiere su conflicto con su padre. Este
tipo de razonamientos tiene lugar inconsciente y automático: nunca se debe subestimar el
poder del yo.
● Este ejemplo ilustra la tendencia autocurativa en el juego espontáneo; ya que la terapia y
el diagnóstico a través del juego deben hacer un uso sistemático de tales procesos
autocurativos. Pueden ayudar al niño a ayudarse a sí mismo, y pueden ayudarnos para
aconsejar a los padres.
● Cuando los niños son más grandes, la conversación prolongada reemplaza al juego.
● Unas pocas horas de juego pueden servir para informarnos sobre cuestiones que el
niño nunca podría verbalizar.
Los comienzos de la identidad
● La IDENTIDAD NACIENTE establece un puente entre las etapas de la infancia en que el sí
mismo corporal y las imágenes de los padres adquieren sus connotaciones culturales, y hace
lo mismo con la etapa de la temprana juventud en que una variedad de roles sociales se
vuelve accesible y, de hecho, cada vez más imperativa.
● La internalización de una versión particular de "alguien que puede caminar" constituye
uno de los múltiples casos en el desarrollo del niño que contribuyen a una
AUTOESTIMACIÓN más realista. Dicha autoestimación llega a convertirse en la convicción
de que uno se va transformando en un individuo definido dentro de una realidad social.
● La identidad del yo del niño adquiere verdadera fortaleza sólo a partir del reconocimiento
sincero y permanente de los logros reales. NO SIRVEN las alabanzas vacías y
condescendientes.
● Un niño tiene muchas oportunidades para identificarse, en forma más o menos experimental,
con hábitos, rasgos, ocupaciones e ideas de personas reales o ficticias de ambos sexos.
Ciertas crisis lo obligan a hacer selecciones radicales. No obstante, la era histórica en la que
vive le ofrece un número limitado de modelos socialmente significativos para combinaciones
posibles de identificaciones fragmentarias.
● La identidad psicosocial se desarrolla a partir de una integración gradual de todas las
identificaciones, pero el todo tiene una cualidad diferente de la suma de sus partes.

FREUD. (1908) El creador literario y el fantaseo


● Todo niño que juega se comporta como un poeta, ya que se crea un mundo propio.
● Toma muy en serio su juego, en él emplea grandes montos de afecto.
● Lo opuesto al juego no es la seriedad, sino la REALIDAD EFECTIVA.
● El niño diferencia realidad de juego y tiende a apuntalar sus objetos y situaciones imaginados
en cosas palpables y visibles del mundo real. Ese apuntalamiento es lo que diferencia su
jugar del fantasear.
● El poeta hace lo mismo que el niño que juega: crea un mundo de fantasìa al que toma muy
en serio, lo dota de grandes montos de afecto y lo separa de la realidad efectiva.
● El adulto deja de jugar; aparentemente renuncia a la ganancia de placer que extraía del juego.
PERO NO RENUNCIAMOS A NADA: sólo permutamos una cosa por otra.
● Cuando el adulto deja de jugar sòlo resigna el apuntalamiento en objetos reales. EN VEZ DE
JUGAR, AHORA FANTASEA. Crea SUEÑOS DIURNOS.
● El jugar del niño motivado por un deseo: ser grande y adulto.
● El fantasear del adulto lo avergüenza por infantil y por no permitido.
● Sólo fantasea el insatisfecho, no el dichoso.
● El trabajo anímico se anuda a una impresión actual, a una ocasión del presente que fue
capaz de despertar los grandes deseos de la persona; desde ahí se remonta al recuerdo de
una vivencia anterior, infaltil las más de las veces, en que aquel deseo se cumplía, y crea una
situación referida al futuro, que se figura como el CUMPLIMIENTO DE ESE DESEO: el sueño
diurno o la fantasía, en que van impresas las huellas de su origen en la ocasión y en el
recuerdo.
● El deseo aprovecha una ocasión del presente para proyectarse un cuadro del futuro siguiendo
el modelo del pasado. El hecho de que las fantasías proliferen y se vuelvan
HIPERPOTENTES crea las condiciones para la caída en una neurosis o una psicosis.
● En todo cuento o relato fantasioso, hay un héroe en la historia que siempre termina
salvándose, y es que "en la invulnerabilidad se discierne a Su Majestad el Yo, el héroe de
todos los sueños diurnos y de todas las novelas.
● Si el SOÑANTE DIURNO nos expone sus fantasías nos espantaríamos. Pero si lo hace el
POETA, sentimos placer.
● El poeta atempera el carácter del sueño diurno egoísta mediante variaciones y
encubrimientos, y nos soborna por medio de una ganancia de placer puramente formal,
estética, que él nos brinda en la figuración de sus fantasías. Esa ganancia de placer que se
nos ofrece para posibilitar el desprendimiento de mayor placer, proviene de fuentes psíquicas
más profundas y se llama prima de incentivación o placer previo.
● Todo placer estético que el poeta nos procura conlleva el carácter de ese placer previo, y que
el goce genuino de la obra poética proviene de la liberación de tensiones en el interior de
nuestra alma.

LOWENFELD. (1961) Desarrollo de la capacidad creadora


1) LA ETAPA DEL GARABATEO: DE 2 A 4 AÑOS: los comienzos de la autoexpresión
● El niño establece pautas de aprendizaje, actitudes y cierto sentido de sí mismo como ser. El
primer registro permanente por lo general toma la forma de un garabato. El primer trazo es
importante ya que constituye el comienzo de la expresión que va a conducir al dibujo y la
pintura PERO también a la palabra escrita.
● La forma en que se reciban los primeros trazos y la atención que se les preste pueden ser la
causa de que el niño desarrollo actitudes que aún poseerá cuando comience su escolaridad
normal.
● Los garabatos se clasifican en tres categorías principales:
1. GARABATOS DESORDENADOS
Los primeros trazos no tienen sentido, y el niño no se da cuenta de que podría hacer
de ellos lo que quisiera. El niño garabatea empleando sus GRANDES
MOVIMIENTOS, aunque para un adulto resulten movimientos pequeños. Los
garabatos no son intentos de reproducir el medio visual presente.
Los garabatos mismos tienen como base el desarrollo físico y psicológico del niño, y
NO una INTENCIÓN de representar algo. El niño goza con esta actividad. Es
importante que tenga la oportunidad de garabatear. Mientras un niño está en la etapa
del garabateo desordenado, trazar un dibujo de algo “real” es inconcebible.
Es importante interesarse por lo que el niño está haciendo, porque él debe sentir que
este camino de comunicación es bien mirado o aceptado por los adultos.
Mientras el niño no haya establecido control visual sobre sus movimientos de
garabateo, no tendrá sentido pedirle control sobre otras actividades.
El garabateo es una parte natural del desarrollo total de los niños, que fija su evolución
psi y fisiológica.

2. GARABATOS CONTROLADOS
El niño descubre que hay un vínculo entre sus movimientos y los trazos que ejecuta
en el papel. Esto puede suceder unos 6 meses aproximadamente después que ha
empezado a garabatear (a los 2 años y medio aprox). El niño ha descubierto el
control visual sobre los trazos que ejecuta.
La coordinación entre su desarrollo visual y motor es una conquista muy importante.
En esta etapa le gusta llenar toda la página.
El niño comprende mejor lo que es tratar de copiar una raya o una cruz, pero no se
va a someter al modelo que se le ha dado y sus trazos tienen una dirección
impredecible.
A los 3 años puede dibujar un círculo pero no un cuadrado.
Los garabatos son mucho más elaborados y el niño descubre a veces cierta relación
entre lo que dibuja y el medio que lo rodea.
Este control sobre el garabato también se refleja en el dominio que el niño adquiere
sobre otras partes del ambiente.
Las intenciones del niño no son otras que mover el lápiz, y su goce proviene
esencialmente de la sensación kinestésica y de su dominio.

3. GARABATOS CON NOMBRE


Esta nueva etapa es de mucha trascendencia en el desarrollo del niño, éste
comienza a dar nombre a sus garabatos. Esto es indicio de que el pensamiento del
niño ha cambiado.
Ahora el niño ha empezado a conectar sus movimientos con el mundo que lo rodea.
Ha cambiado del PENSAMIENTO KINESTÉSICO al PENSAMIENTO
IMAGINATIVO.
Esta etapa tiene lugar alrededor de los 3 años y medio.
Se desarrolla una fase para la retención visual.
Antes el niño podía ver una relación entre lo que había dibujado y algún
objeto, AHORA DIBUJA CON UNA INTENCIÓN.
La cantidad de tiempo que un niño le dedica ahora al dibujo aumenta y los garabatos
son muchos más diferenciados. Los trazos suelen acompañarse con una
DESCRIPCIÓN VERBAL de lo que se hace. (COMUNICACIÓN CON EL PROPIO
YO).
El dibujo ahora es una constancia de cómo siente el niño acerca de ciertas cosas de
su ambiente y la manera como dibuja convierte al garabato en un importante medio
de comunicación.
Las líneas NO SON siempre representaciones visuales, pueden ser
representaciones NO visuales (suavidad, rugosidad o prisa).
Los garabatos o líneas que los adultos pueden considerar sin sentido alguno tienen
en cambio un SIGNIFICADO REAL para el niño que los está dibujando.

● LA EXPERIENCIA DEL GARABATEO ES UNA ACTIVIDAD MOTRIZ. (el color no


importa)
Al principio la satisfacción deriva de la experiencia de movimientos kinestésicos. Es
indispensable que haya un marcado contraste entre los materiales de dibujo elegidos
(papel y lápiz).
● Sólo cuando el niño entra en la etapa de dar nombre a sus garabatos desea realmente
emplear diferentes colores para distintos significados.
● El color es principalmente exploratorio, y el uso de ciertos colores puede estar vinculado
más íntimamente con la distribución física de los colores que con problemas emocionales
del niño.
EL MEDIO Y EL PROCESO DE DESARROLLO
● El niño muy pequeño, antes de los 18 meses de edad, se expresa con la voz y el cuerpo.
● Los niños criados sin estímulos ni atractivos y con carencias afectivas parecen quedar fuera
del desarrollo normal en todas las fases de su crecimiento. LA INTERACCIÓN DEL NIÑO Y
SU AMBIENTE ES EL ELEMENTO MÁS IMPORTANTE PARA EL APRENDIZAJE. Un
medio pasivo, neutro, estéril. no es el ideal para el desarrollo de un niño.
● La ACTITUD DE LOS PADRES hacia el comportamiento del niño en el dibujo es
representativa de la actitud de esos padres hacia el niño mismo.
● El padre o maestro que proporcionan la tarea conveniente y su solución pueden estar
perjudicando al niño.
● Hay un relación directa entre cómo ensaya el niño su garabateo y cómo se relaciona con el
resto de su ambiente..
EL GARABATEO COMO UN REFLEJO DEL DESARROLLO
● El proceso de DESARROLLO es CONTINUO pero NO UNIFORME. El garabateo puede
considerarse como un reflejo del desarrollo físico y afectivo del niño.
● Los garabatos tienen un sentido simbólico para el niño de más de tres años, aun cuando el
adulto no pueda comprender ese significado con sólo mirarlos. Tenemos que escuchar
también.
● En las primeras etapas del desarrollo la actividad motriz juega un papel más importante que
el lenguaje en el descubrimiento de la realidad.
MOTIVACIÓN ARTÍSTICA
● En las primeras etapas del garabateo no es necesaria ninguna motivación, salvo la de
proveer al niño de los materiales apropiados y animarlo para que siga adelante con su
actividad.
● Hay un efecto inhibitorio en el tratar de ver cierta representación en los garabatos. Esto
puede interrumpir el desarrollo normal de las actividades motrices del niño,
MATERIALES ARTISTICOS
● Cualquier material artístico usado por los niños debe ajustarse a las necesidades de estos.
El material artístico usado, debe facilitar la expresión y no entorpecerla.
RESUMEN DE LAS CARACTERÍSTICAS DE DESARROLLO EN LA ETAPA DEL
GARABATEO
● Durante esta etapa, el niño reflejara en su trabajo creador su desarrollo intelectual y
emocional.
● El niño disfrutará con su desarrollo kinestésico a través de sus garabatos e irá gradualmente
logrando el control visual sobre estos trazos.
● El niño explorará libremente su ambiente a través de toda una variedad de sensaciones y
algunas de esas experiencias aparecerán en sus dibujos cuando comience a asignarles
nombre. Los dibujos por su parte ofrecerán una saludable variación, desde una serie de
trazos al azar hechos alrededor de los dos años, que se transforman en movimientos
continuos o controlados seis meses más tarde hasta convertirse en movimientos mucho
más complicados, cuando el niño comienza a asignarles nombre.
● Este periodo de la vida es sumamente importante para el desarrollo de actitudes
respecto del propio yo, y para el convencimiento de que el mundo es un lugar
interesante y atractivo.

2) LA ETAPA PREESQUEMÁTICA: DE 4 A 7 AÑOS. PRIMEROS INTENTOS DE


REPRESENTACIÓN
● Comienza un método distinto de dibujo: la creación consciente de la forma
● El niño crea ahora conscientemente ciertas formas que tienen alguna relación con el mundo
que lo rodea.
● Comienzo de la comunicación gráfica.
● Generalmente, el primer símbolo logrado es un hombre (primero renacuajo).
● Son las formas en sí lo que genera entusiasmo en el niño, no tanto el color. Hay poca
relación entre el objeto elegido para dibujar y el color.
● La representación del espacio depende del individuo pero también de la cultura en la que
vive.
● El espacio se concibe como lo que rodea al niño. No se ha establecido relación entre los
objetos.
● La incapacidad del niño para relacionar las cosas entre sí en el espacio, en sus dibujos, es
una clara indicación de que no está aún maduro para cooperar socialmente y de que
todavía no puede relacionar las letras entre sí para aprender a leer.
● ETAPA DE EGOCENTRISMO: es él mismo el centro del ambiente. Las experiencias que
están directamente relacionadas con él resultan más significativas.
● Uno de los indicios más importantes de esta etapa preesquemática es la flexibilidad del
niño. Esto se puede apreciar en los frecuentes cambios que se producen en sus conceptos.
● La manera de representar las cosas es un indicio de las experiencias que el niño ha tenido
con ellas.
● Puesto que todo contacto o comunicación con el ambiente se establece a través del yo, es
de gran importancia estimular la sensibilidad hacia el yo. Cualquier motivación artística a
esta edad debe empezar con el niño mismo.

3) LA ETAPA ESQUEMÁTICA: DE 7 A 9 AÑOS. LA OBTENCIÓN DE UN CONCEPTO DE


LA FORMA
● El niño llega a formarse un concepto distinto del hombre y su ambiente. Estos conceptos
tienen un carácter individual.
● ESQUEMA: concepto al cual ha llegado un niño respecto de un objeto, y que repite
continuamente mientras no haya alguna experiencia intencional que influya sobre él para
que lo cambie.
● El esquema puede estar determinado por la forma en que un niño ve algo, el significado
afectivo que él le adjudica, sus experiencias kinestésicas, la impresión táctil de un objeto, o
la manera en que éste funciona o se comporta.
● Es importante estudiar el tipo de modificaciones que sufre un esquema. Nos permite
comprender la intención subyacente en la representación.
● El dibujo que vemos en el papel es el símbolo de esa imagen mental, el símbolo que
representa el objeto.
● ESQUEMA HUMANO: el niño desarrolla gradualmente un símbolo para representar a un
hombre y lo repite continuamente mientras no tenga una experiencia particular que le haga
cambiar ese concepto.
● Principal descubrimiento de esta etapa: la existencia de un ORDEN DE LAS
RELACIONES ESPACIALES.
● El esquema del niño no es todavía tridimensional, sino que es bidimensional.
● La LÍNEA DE BASE: es universal. Es un indicio de que el niño se ha dado cuenta de la
relación entre él y su ambiente.
● Representaciones de espacio y tiempo: inclusión en un mismo di bujo de diferentes
secuencias de tiempo o de impresiones espacialmente distintas.
● Dibujos del tipo de rayos x.
● Si aceptamos que el esquema es el concepto que sobre el hombre y el ambiente el niño ha
llegado a dominar, entonces toda desviación adquiere una importancia especial de acuerdo
con su origen y su significado.
● Formas de cambio en los esquemas:
a) exageración de partes importantes
b) desprecio o supresión de partes no importantes
c) cambio de símbolos para partes afectivamente significativas
● El niño descubre que hay una relación entre el color y el objeto. PERO no es una elección
casual o de tipo afectivo la que determina el color que va a usar en sus pinturas. El
establecimiento de un color definido para un objeto y su constante repetición es un reflejo
directo del desarrollo progresivo del proceso intelectual.
● Cada niño desarrolla sus propias relaciones de color.
● El esquema de color es un indicio del proceso que conduce al pensamiento abstracto, y
muestra que el niño puede generalizarlo a otras situaciones, a partir de su propia
experiencia.
● Un niño a esta edad ignora aspectos formales del arte. Es para él un MEDIO DE
EXPRESIÓN.
● El niño ya no representa objetos en relación consigo mismo, sino que comienza a
representar objetos en relación lógica con otros objetos.
● El empleo de un esquema de forma rígida puede ser un modo de eludir el abordaje de los
propios sentimientos y emociones. La FLEXIBILIDAD es el atributo más importante del
desarrollo afectivo.
4) LA EDAD DE LA PANDILLA: DE 9 A 12 AÑOS. EL COMIENZO DEL REALISMO
● Descubrimiento que hace el niño de que es un miembro de la sociedad: una sociedad
constituida por sus pares.
● Los niños construyen en esta etapa, la trama de lo que luego será su capacidad para trabajar
en grupo y cooperar en la vida de los adultos.
● Existe una conciencia creciente de que uno puede hacer más en un grupo que solo.
● Creciente desarrollo de la independencia social respecto de la dominación de los adultos.
Aprendizaje de las estructuras sociales en forma muy personal.
● Los grupos o pandillas son generalmente del mismo sexo.
● A esta edad, el niño va tomando conciencia de su mundo real, un mundo lleno de emociones.
Un mundo real con amigos, planes y recuerdos.
● Para el niño, esta edad puede ser el más emocionante y saludable periodo de
descubrimientos, como se aprecia en sus trabajos de creación. El esquema ya no es
adecuado para representar la figura humana. Ahora el niño está interesado en expresar
características vinculadas al sexo, ej: niños con pantalones, niñas con pollera.
● La generalización esquemática ya no le es suficiente.
● Las líneas geométricas ya no bastan. El niño se encamina hacia otra forma de
expresión más ligada con la naturaleza. Pero aún está lejos de una representación visual.
● El niño ya no emplea el recurso de la exageración, omisiones u otras desviaciones para
expresarse.
● El niño usa otros medios de expresión para acentuar algo: acumulación de detalles en
partes que son emocionalmente significativas.
● El niño va desde una rígida relación color-objeto hasta una caracterización del color. Goza
con los colores y ahora es capaz de una mayor sensibilidad hacia sus diferencias y
semejanzas.
● Se aleja de su dependencia respecto a lo concreto y comienza a manejar conceptos
abstractos.
● Descubre que el espacio entre las líneas de base adquiere significado, y además también
descubre el PLANO.
● La línea de base comienza a desaparecer. El niño todavía no comprende el significado
del HORIZONTE.
● No ha desarrollado todavía una percepción visual consciente de PROFUNDIDAD.

WINNICOTT. (1971) Realidad y juego


● La psicoterapia se da en la superposición de dos zonas de juego: la del paciente y la del
terapeuta. Está relacionada con dos personas que juegan juntas. Cuando el juego no es
posible, la tarea del terapeuta se orienta a llevar al paciente, de un estado en que no puede
jugar a uno en que le es posible hacerlo.
● El juego debe ser estudiado como un tema por sí mismo, complementario del concepto de
sublimación del instinto. (No hay que relacionar tanto juego y masturbación).
● El jugar resulta tan evidente en los análisis de los adultos como en los niños. Se manifiesta,
por ejemplo, en la elección de palabras, en las inflexiones de la voz, y en el sentido del humor.
● El jugar tiene un lugar y un tiempo. No se encuentra adentro según acepción alguna de esta
palabra. Tampoco está afuera, es decir, no forma parte del mundo repudiado, el no-yo, lo que
el individuo ha decidido reconocer como verdaderamente exterior, fuera del alcance del
dominio mágico. Para dominar lo que está fuera del alcance del dominio mágico. Para
dominar lo que está afuera es preciso hacer cosas, no sólo pensar o desear, y hacer cosas
lleva tiempo. JUGAR ES HACER.
● Lo universal es el juego, y corresponde a la salud: facilita el crecimiento, conduce a
relaciones de grupo; puede ser una forma de comunicación en terapia y, el psicoanálisis se
convirtió en una forma muy especializada de juego al servicio de la comunicación consigo
mismo y con los demás.

● TEORÍA DEL JUEGO


A) El niño y el objeto se encuentran fusionados. La visión que el primero tiene del objeto es
subjetiva, y la madre se orienta a hacer real lo que el niño está dispuesto a encontrar.
B) El objeto es repudiado, reaceptado y percibido en forma exista una madre o figura materna
dispuesta a participar y a devolver lo que se ofrece.
● La madre (o parte de ella) se encuentra en un "ir y venir" que oscila entre ser lo que el niño
tiene la capacidad de encontrar y (alternativamente) ser ella misma, a la espera que la
encuentren. Si puede representar ese papel durante un tiempo, sin impedimentos, entonces
el niño vive una experiencia de control mágico (omnipotencia).
● La CONFIANZA en la madre constituye entonces un campo de juegos intermedio, en el que
se origina la idea de lo mágico, ya que el niño experimenta la OMNIPOTENCIA. Es un
ESPACIO POTENCIAL que existe entre la madre y el hijo, o que los une.
● C) La etapa siguiente consiste en encontrarse solo en presencia de alguien. El niño juega
entonces sobre la base del supuesto de que la persona a quien ama y que por lo tanto es
digna de confianza se encuentra cerca, y que sigue estándolo cuando se la recuerda, después
de haberla olvidado. Se siente que dicha persona refleja lo que ocurre en el juego.
● D) Esta etapa consiste en permitir una superposición de dos zonas de juego y disfrutar
de ella. Primero es la madre quien juega con el bebé, pero cuida de encajar en sus
actividades de juego. Luego introduce su propio modo de jugar, y descubre que los bebés
varían según su capacidad para aceptar o rechazar la introducción de ideas que les
pertenecen.

PIAGET. La función semiótica o simbólica


● Alrededor del primer año de vida surge la noción de objeto permanente.
● Cuando termina el periodo senso-motor a los 2 años aparece la función simbólica: poder
representar algo (un significado: objeto, acontecimiento, esquema conceptual, etc) por
medio de un significante diferenciado que sólo sirve para esa representación: lenguaje,
imagen mental, gesto simbólico, etc.
● Conjunto de conductas que implica la evocación representativa de un objeto o de un
acontecimiento ausentes y que supone la construcción o el empleo de significantes
diferenciados, ya que deben poder referirse a elementos no actualmente perceptibles tanto
como los que están presentes. Esas conductas son 5:
1) Imitación diferida: se inicia en ausencia del modelo. El niño comienza por imitar en
presencia del modelo y luego puede hacerlo sin éste.
2) Juego simbólico: juego de ficción. Ej: la niña se hace la dormida, y hace que su
juguete duerma también. La representación es neta y el significante diferencia es un
gesto imitador, pero acompañado de objetos que se han hecho simbólicos.
3) Dibujo o imagen gráfica: intermediario entre el juego y la imagen mental.
4) Imagen mental: aparece como imitación interiorizada.
5) Lenguaje: evocación verbal de acontecimientos no actuales.

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