Periodoncia y Osteointegración: Cirugía Plástica Periodontal en Relación A La
Periodoncia y Osteointegración: Cirugía Plástica Periodontal en Relación A La
Periodoncia y Osteointegración: Cirugía Plástica Periodontal en Relación A La
Periodoncia y
Osteointegración
Revista Oficial de
www.sepa.es
Volumen 18
Número 4
Año 2008
PERIODONCIA Y OSTEOINTEGRACIÓN
EDITORIAL . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .2 4 9
Normas de publicación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .3 1 4
PERIODONCIA Y OSTEOINTEGRACIÓN
H
oy es un honor para mí poder escribir estas líneas en nombre de nuestra sociedad, ya que
hay momentos en la vida que son imborrables, que merecen ser anunciados y, como en este
caso, disfrutados por todos. El año próximo, 2009, será un año especial para todos noso-
tros debido a que SEPA cumple 50 años (1959 - 2009), y por ello queremos que sea, como
no podría ser de otra manera, un homenaje a nuestra propia historia.
Desde la Junta Directiva estamos haciendo grandes esfuerzos para preparar un programa de activida-
des, sociales y de trabajo, que vincule nuestra historia con nuestro futuro, y que aglutine el esfuerzo de
todos los socios y de toda la industria para construir y conseguir una SEPA mejor.
Me gustaría aprovechar esta ocasión, también, para comentar que estas actividades, de las que re-
cibiréis información precisa y oportuna, culminarán con nuestra reunión anual, que se celebrará duran-
te el mes de noviembre en Las Palmas de Gran Canaria, donde disfrutaremos de una fiesta de fin de
cumpleaños y de alguna otra sorpresa.
Aquí os presentamos el logotipo que utilizaremos durante este 50 aniversario, con el que hemos in-
tentado representar, en una imagen, esos inicios de SEPA y su progreso a lo largo de los años. ¡Espe-
ramos que os guste!
Solo me queda desearos feliz año a todos, esperando que guardéis un recuerdo imborrable del
m i sm o .
Entrevista con el
doctor Yves Samama
Jeanne Monod-Broca, Philipe Doucet
Yves Samama, doctor en cirugía dental especializado en prótesis, antiguo asistente del Hospital Universitario de París 5, ha aceptado esta entrevista para hablar de los
temas que más le interesan: la prótesis implanto-soportada, las técnicas ceramo-cerámicas, pero también la importancia de la interdisciplinariedad, de la formación de los
odontólogos y los técnicos de laboratorio y la ética en el ámbito de la investigación científica biomédica.
ENTREVISTA
Caso 1:
Implante y puente cementado: ejemplo
E N T R E V I S T A
de tratamientos complementarios.
1g
que ciertos enfoques son más eficaces ro, 22.01.2008). En consecuencia, de- ca. Es preciso subrayar la importan-
de lo que son en realidad y pueden, en bemos reflexionar sobre la objetividad cia de la formación tanto de los odon-
consecuencia, influir en las decisiones de ciertas publicaciones en el ámbito de tólogos como de los técnicos de labo-
clínicas. A menudo, solo se publican los la investigación biomédica. ratorio. La prótesis necesita un
estudios con resultados positivos. To- aprendizaje largo, un dominio y una
memos como ejemplo, en farmacología, ¿La prótesis convencional re prese n - actitud rigurosa. El protesista debe
la polémica sobre la fluoxetina (Pro- ta un a m ej o r s o lu ci ó n es téti ca q ue l a conocer los límites de cada especiali-
zac©): después de que la FDA estadou- próte sis sobr e im pla nt es e n el tra ta - dad, ya que se encuentra al final de la
nidense evaluase el medicamento, las miento de edentaciones unitarias o cadena terapéutica. Debe cuestionar
consecuencias negativas de prescribir m ú lti ple s? siempre las técnicas y los tratamien-
esta molécula se han subestimado, o ni tos. Este aprendizaje no es tarea fácil.
siquiera se han publicado (New England No. Se trata de un problema de indi- Requiere horas de trabajo teórico y
Journal of Medicine, citado por Le Figa- caciones y de la calidad de la técni- de clínica.
E N T R E V I S T A
2a 2b 2c
3a 3b 3c
Fíg. 2a Vista de las preparaciones en dientes vitales Fig. 3a Situación clínica de partida después de la
después de la colocación de dos construcciones céramo- «transformación» de una antigua corona céramo-metálica en
metálicas realizadas quince años antes. El white score del onlay. La luminosidad es baja. La saturación es intensa.
sustrato dental es positivo, refleja una fuerte luminosidad
y una baja saturación. Fig. 3b Diseño por ordenador de la restauración, que será
de alúmina policristalina de alta densidad (procedimiento
Fig. 2b Prueba de la cerámica infiltrada (procedimiento In- Procera® de M. Andersen).
Ceram® de M. Saadoun).
Fig. 3c Vista vestibular de la restauración después de
Fig. 2c Vista vestibular de las coronas céramo-cerámicas cementada (laboratorio: L. Coudray).
después de cementado. (Laboratorio: L. Coudray).
¿Cuál es su temporización favorita en ferior (longitud y número de implan- sentan un avance muy considerable en
el tratamiento mediante implantes de tes, estabilidad, distribución, par de el dominio de la estética, ya que nos li-
una desdentación unitaria o múlti - torsión...). Estos criterios se han defi- beran de la interferencia decolorante
ple ? nido mejor en la arcada inferior y los del metal. En consecuencia es la cons-
resultados son más favorables. En la ar- trucción de elección en el sector ante-
Todo depende de la indicación. En el cada superior, si no se cumplen los cri- rior, en el que los problemas funciona-
caso de una desdentación unitaria, si terios de éxito, es preciso recurrir al les no son tan importantes como en los
el día de colocar el implante es posible la sentido común: en el marco de una re- dientes con cúspides, en donde se ob-
colocación inmediata de un diente pro- habilitación de una arcada completa o servan los fracasos más importantes con
visional, no hay por qué privarse de esta casi completa, 3 o 4 meses de tempori- las coronas ceramo-cerámicas. Cada
posibilidad, que simplifica de manera zación no hipotecan la vida de los pa- caso tiene indicaciones diferentes.
considerable la continuación de la re- cientes. Entonces, es preciso recurrir a También aquí deben buscarse criterios
habilitación protésica. Pero, si no es puentes provisionales clásicos que se de éxito (presencia o ausencia de para-
posible la puesta en función inmedia- agregan a dientes naturales conserva- funciones, altura clínica, antecedentes
ta, se orientará la elección hacia un dos transitoriamente o a la prótesis ad- de caries, prótesis, quejas estéticas, tipo
puente cementado temporal, es decir, junta parcial o total. de construcciones existentes...). No
una prótesis adjunta provisional. En lo se puede tratar de la misma forma a una
que concierne a las construcciones plu- ¿Cual es la duración de las rest aura - mujer de 25 o 30 años extremadamen-
rales, es cierto que existen indicaciones cion es c era mo- cerá mi cas u n itaria s o te precavida que se alimenta con tres
y circunstancias clínicas en las que no plu rale s? yogures y una manzana que a un pa-
puede plantearse la colocación de un ciente estresado y parafuncional.
puente provisional inmediato el día de Esta pregunta puede resumirse así: ¿po- Las CC necesitan un saber hacer
la colocación del implante. Existen cri- drá la corona ceramo-cerámica (CC) más acusado que las CCM, ya que téc-
terios precisos de carga inmediata tan- sustituir a la corona ceramo-metálica nicamente son más exigentes, en vir-
to en el maxilar superior como en el in- (CCM)? Las ceramo-cerámicas repre- tud de todos los criterios citados ante-
4a 4b 4c
Caso 4.
Ejemplo de una corona céramo-cerámica sobre implante.
4e
riormente. Es preciso insistir en la im- mo o agenesias en un paciente joven go plazo del paciente se convierte en
portancia de la competencia de los sin enfermedad periodontal ni parafun- fundamental. La elección de un siste-
dentistas y los técnicos de laboratorio ciones, el tratamiento es favorable y las ma atornillado sobre una infraestructu-
que han de evaluar conjuntamente ma- complicaciones son poco probables a ra metálica permite de manera más sen-
teriales y técnicas. corto y medio plazo; en estos casos es cilla una reintervención o el manejo de
posible utilizar estos nuevos materiales. posibles complicaciones. La evaluación
¿ Q u é p i e n s a d e lo s p i l a r e s d e i m p l a n - El problema de las grandes reconstruc- del riesgo sigue siendo siempre el pro-
tes d e cerám ica? ciones es diferente y es preciso saber blema esencial. En un paciente con pe-
qué imperativos clínicos se quieren fa- riodontitis o parafuncional, el manejo
En el caso de los pilares de implantes, vorecer. Si debemos realizar una re- de sus complicaciones y el pronóstico
es cierto que los componentes de cerá- construcción implantosoportada im- a medio y largo plazo siempre deben es-
mica aluminosa o de zirconio pueden portante en pacientes parafuncionales tar presentes, ya que a menudo han sido
optimizar eficazmente la integración o que tienen antecedentes de enferme- estas patologías las causas de la desden-
estética del complejo protésico. No dad periodontal y que pueden presen- tación.
obstante, también aquí, la competen- tar, por tanto, complicaciones, no po-
cia del técnico de laboratorio es un fac- demos librarnos del uso del metal, un ¿ Y l os i mp l a nt es d e cer á mi c a?
tor clave para el éxito, ya que a menu- material extremadamente convincen-
do deben corregirse las trayectorias de te y agradecido. Permite reintervencio- El día en que estos implantes presenten
los implantes. Si se trata de un diente nes y reparaciones porque ninguna téc- estudios a largo plazo tan evidentes
unitario o de una prótesis corta, las di- nica quirúrgica, médica o protésica está como los publicados por Brånemark y
ficultades pueden superarse con rela- libre de complicaciones o fracasos. En su equipo con el titanio, se podrá plan-
tiva facilidad. En una desdentación la medida en que los desafíos «médi- tear esta cuestión. Por ahora, no debe-
parcial en relación con un traumatis- cos» se complican, el seguimiento a lar- mos complicarnos la vida si ya tenemos
Caso 5.
Rehabilitación maxilar implanto-
E N T R E V I S T A
soportada una vez finalizada.
5g
soluciones sencillas, sobre todo cuando ca. No se puede primar un material so- to del profesional clínico como del téc-
esta sencillez se ha analizado, evaluado bre el otro. Si la cavidad es simple, pue- nico de laboratorio: la realización de
y publicado con rigor y a largo plazo. de plantearse el empleo del material onlays de cerámica es una labor ardua.
compuesto. Sin embargo, cuando se ne- En lo que concierne a las carillas, el
¿ Lo s m a te r ia le s c om pu e st o s ac t u a le s cesitan recubrimientos importantes, el problema es diferente: el material cerá-
c onst itu yen u n a bue na a lter na tiva a material cerámico presenta cualidades mico no tiene parangón y no puede
l a cer ám ica en l o q u e c on ci er ne a l os mecánicas que parecen superiores a las compararse con los materiales com-
o n la y s o l as car i l l as ? de los composites. Siempre hay que puestos. Se le asocian propiedades óp-
considerar la formación del profesio- ticas de resistencia mecánica. Desde el
En lo que concierne a los onlays, y con nal, ya que el resultado de estas técni- punto de vista clínico y de los resulta-
ello a la restauración de la pérdida de cas está muy en relación con la cali- dos a largo plazo presentados por diver-
sustancia en un diente posterior, toda- dad de la preparación, fabricación, sos equipos, la estabilidad de las cari-
vía es un problema de indicación clíni- colocación, es decir el saber hacer tan- llas es incomparablemente mejor con
del dentista general. Además, si la en- esencial, que es la calidad de la forma- científico. En Gran Bretaña, se ha crea-
señanza de la implantología quirúrgica ción en aras de un mejor tratamiento de do una comisión para la integridad de
está extremadamente bien protocoliza- nuestros pacientes. El conocimiento la investigación biomédica. En Alema-
E N T R E V I S T A
da, la enseñanza de la prótesis sobre im- de las «nuevas tecnologías» no puede nia, se ha nombrado a un mediador
plantes está peor organizada. sustituir a la formación y el aprendizaje para intentar arbitrar los litigios. Dina-
de los conocimientos tradicionales. No marca es el primer país europeo que ha
Hoy en día, la implantología está es posible sustraerse a ellos y sustituir- creado un comité contra la deshones-
c ada vez m ás asist ida y g ui ada por la los por una simulación informática sin tidad científica (Le Monde, 7.02.2008).
in for má tic a. Toda la te cn ología qu e control. En este campo asistimos a La investigación biomédica moderna
rode a a la impla n tología g en era e n el ejemplos devastadores, ya que no se se plantea retos fundamentales respec-
prof esion al c onf ian za qu e le em pu ja puede hacer de un profesional que no to al tratamiento de los pacientes y los
a atreverse con casos más y más com- haya seguido la formación necesaria, un desafíos de la sociedad, tanto económi-
plejos con una formación limitada. buen cirujano de implantes, o un buen cos como industriales que son, en los
¿Repre senta e sto un peligro? técnico de laboratorio, con la ayuda de países desarrollados, enormes. Es ne-
una nueva herramienta de trabajo. Algo cesario «publicar, valorar y comuni-
Por supuesto. La vulgarización de téc- similar concierne a la industria dental, car» los trabajos de mérito, pero no se
nicas tan sofisticadas no permite pres- que puede «autointoxicarse» respecto a puede dejar «publicar a cualquier pre-
cindir de unos conocimientos básicos las posibilidades reales de las máquinas. cio, valorar rápidamente y comunicar
indispensables. La enseñanza de los El problema de las desviaciones o prematuramente», porque ello condu-
«fundamentos», ya se trate de la ciru- de las faltas de ética en el dominio ce a consecuencias tanto más graves,
gía, prótesis, endodoncia o periodonto- científico está siendo cada vez más im- porque cuestionan ante la sociedad la
logía, es absolutamente esencial para portante. En 2005, la revista Nature credibilidad de las disciplinas médicas
permitir a los profesionales juzgar la per- publicó un estudio sobre más de 8.000 y odontológicas y las implicaciones in-
tinencia de la indicación planteada y el investigadores encuestados bajo anoni- dustriales relacionadas con ellas. Es
valor de una técnica. Es mejor tener en mato. Más del 30% de ellos confesó ha- preciso apoyar a las instituciones y so-
cuenta la opinión de profesionales com- ber faltado a la ética en el curso de los ciedades científicas conscientes y preo-
petentes, discretos y modestos que la de 3 años precedentes. En el campo médi- cupadas por estos problemas, pues en
comerciales comunicativos, incompe- co, y si nuestra especialidad no se pre- ellas descansa la oposición a estos com-
tentes e inexpertos, que dirán todo lo ocupa de ello, también en el dental, se portamientos inadecuados.
contrario dos años más tarde. La infor- impondrán normativas por parte de las
mática (CAM o fabricación asistida por estructuras administrativas y políticas Agrad ecim ien tos
ordenador) debe seguir siendo una he- para evitar estos problemas. En Estados El autor expresa su agradecimiento al
rramienta suplementaria a disposición Unidos, en la National Science Foun- Dr. Christian Bouniol por la relectura
de los profesionales y de los técnicos de dation, doce personas trabajan perma- de las declaraciones mantenidas duran-
laboratorio, pero no puede sustituir a lo nentemente para detectar el fraude te esta entrevista.
De s cr i p ci ó n Ca n ti d a d
F O L L E T O S
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ORIGINAL
Estado periodontal
en pacientes con
enfermedad liquenoide
oral ulcerativa:
análisis de 22 casos
consecutivos
ORIGINAL
Borja Tejedor Palabras clave: enfermedad liquenoide oral, enfermedad periodontal, gingivitis descamativa crónica, índices periodontales
Licenciado en Odontología
Objetivo: Conocer el estado periodontal de los pacientes con enfermedad liquenoide oral (ELO) con lesiones ulcerativas y las posibles relaciones entre ambos procesos.
Gorka Larrea Pacientes y métodos: Hemos estudiado 22 pacientes consecutivos diagnosticados de ELO que mostraban lesiones ulceradas en el momento del diagnóstico y correspondian
Licenciado en Odontología
a 17 mujeres y 5 hombres. La edad media fue de 57,8 años con un rango de 24 a 73. Se formalizó el Protocolo Clínico para ELO de la SEMO, se realizó un diagnóstico
periodontal y se obtuvieron los índices CPTIN, gingival simplificado (Lindhe) y de higiene (O’Leary), así como un cultivo para levaduras. Se realizo un análisis estadístico
Dionisio Cortés descriptivo y comparativo.
Licenciado en Odontología
Resultados: Se diagnosticó enfermedad periodontal crónica en 21 pacientes (5 inicial, 13 moderada, 3 severa) y enfermedad gingival inducida por placa dental en 1 paciente.
El índice CPTIN medio fue de 2,9; el de Lindhe medio del 42,7% y el de higiene medio del 71,6%. Se reconoció gingivitis descamativa crónica (GDC) en 14 pacientes y 18
Maria A. Echebarria casos fueron Candida (+). No se reconocieron diferencias significativas en los índices periodontales en relación con la existencia o no de GDC.
Profesor Asociado
Conclusión: Los pacientes con ELO ulcerativa presentan en general una mala salud periodontal. No obstante, no parece existir una relación directa entre ambos procesos.
José M. Aguirre
Catedrático de Universidad
PACIENTES, MATERIAL
Y MÉTODOS
Tabla 1 Datos generales de los pacientes del estudio en concreto por la encía, en el colecti-
Hombres 5 (edad media 48,4 años)
vo de pacientes diabéticos.
Desde hace años diferentes estudios
O R I G I N A L
Mujeres 17 (edad media 60,5 años) (Chainani y cols. 2004; Lodi y cols.
Hipertensión arterial 4 (18,18 %)
2005) han relacionado las infecciones
hepáticas, específicamente la hepatitis
Diabetes (tipo II) 4 (18,18 %) C y la ELO. Se ha postulado que la he-
Alteraciones hepáticas 2 (9,09 %)
patitis C puede jugar un papel impor-
tante en la patogénesis en algunos ca-
Tabaco 1 (4,545) sos, sobre todo en aquellos que
Alcohol 0
muestran un mayor número de lesiones
atróficas y erosivas (Lodi y cols. 2005).
En nuestro estudio sólo 2 pacientes pre-
No se reconocieron alteraciones te, y como nuestro estudio señala, más sentaban una hepatopatía crónica re-
significativas en la analítica sanguínea común en las mujeres entre los 40 y los conocible, y sólo uno secundaria a he-
general. 60 años (Eisen 2002; Jing-Ling y cols. patitis C, por lo que es un dato que no
Se diagnóstico enfermedad perio- 2005; Lodi y cols. 2005). muestra relevancia.
dontal crónica en 21 pacientes (95,45 Algunos autores (Romero y cols. La existencia de levaduras del gé-
%) y enfermedad gingival inducida por 2002; Al-Hashimi y cols. 2007) han se- nero Candida en las lesiones de liquen
placa dental en un paciente (4,54 %). ñalado la asociación entre la diabetes ha sido descrita por diferentes autores
En los 21 pacientes con enfermedad pe- y la presencia de lesiones atrófico-ulce- (Lipperheide y cols. 1996; Vuckovic y
riodontal, 5 (23,8 %) correspondían a radas en pacientes con ELO. En nues- cols. 2004; Backman y Jontell 2007),
una periodontitis inicial, 13 (61,9 %) tro estudio 4 pacientes padecían diabe- con unas tasas variables entre el 37 y
a una moderada y 3 (14,2 %) a severa tes tipo II, de los cuales 3 presentaban el 50 %. A pesar de que en nuestro es-
(Figs. 2 y 3). lesiones de GDC en el momento del tudio se constato la presencia de Can-
El CPTIN medio fue de 2,9, con un diagnóstico. Esta circunstancia podría dida en el 81,8 % de los casos, sólo se
paciente (4,5 %) en el código 1, 6 (27,2 ser indicativa de un mayor grado de obtuvieron más de 50 UFC, dato in-
%) en el código 2, 9 (40,9 %) en el có- afectación por el proceso liquenoide y dicativo de infección activa, en 4 ca-
digo 3 y 6 (27,2 %) en el código 4.
El IGS medio fue del 42,7 % (d.s. Tabla 2 Diferencias en relación con la presencia o no de GDC
25,4), presentando un índice mayor del D AT O CON GDC SIN GDC p
40 % 10 pacientes (45,45 %) y un ín-
N (%) 14 (63,36 %) 8 (36,36 %)
dice menor del 25 % 6 pacientes (27,27
%). Ningún paciente presento un IGS Edad media 61,9 años 51,6 años
de 0, siendo el menor IGS del 9,6 %.
Mujeres 11 6
El IH medio fue del 71,61 % (d.s.
25,4), presentando 14 pacientes (63,63 Hombres 3 2
%) un índice mayor del 60 % y 19 pa-
Relación H:M 1:3,6 1:3
cientes (86,36 %) un índice mayor del
40 %. El menor IH fue del 32 %. >50 UFC Candida 3 1
El cultivo microbiológico para le-
Hipertensión 4 0
vaduras del género Candida fue positi-
vo en 18 pacientes (81,81 %), y se ob- Diabetes 3 1
tuvieron más de 50 UFC en 4 de estos
Alteraciones hepáticas 1 1
casos (18,18 %).
Presentaban lesiones de gingivitis CPTIN (Códigos 3 o 4) 10 (71,42 %) 5 (62,5 %) 0,66
descamativa crónica (GDC) en el mo-
Código 4 4 (28,57 %) 2 (14,28 %) 0,85
mento del diagnóstico de la ELO 14 pa-
cientes (63,63 %). En la Tabla 2 se reco- IGS medio 40,18 % 47,05 %
gen los principales aspectos de los
IGS>40 % 7 (50 %) 3 (37,5 %) 0,57
pacientes de nuestra serie en relación con
los grupos que presentaban o no GDC. IH medio 66,18 % 81,1 %
La enfermedad liquenoide oral es un GDC: Gingivitis descamativa crónica; Relación H:M: relación hombre/mujer; UFC: unidades
formadoras de colonias; CPTIN: índice de necesidades de tratamiento de las comunidades; IGS: índice
proceso mucocutáneo crónico frecuen- gingival simplificado; IH: índice de higiene
sos. Estos resultados son similares a los lesiones gingivales de nuestros pacien- ficultaría la realización de una correc-
obtenidos en otros estudios que cues- tes con liquen plano oral debe tener ta higiene bucal.
tionan el papel etiopatogénico de una repercusión directa sobre la salud En nuestro estudio no hemos obser-
O R I G I N A L
Candida en el liquen (Jainkittirong y periodontal (Mignogna y cols. 2005). vado diferencias estadísticamente sig-
cols. 2007), incluso en situaciones En este sentido, Holmstrup y cols. nificativas en los índices en relación
agresivas como es la existencia de le- (1990) en un estudio sobre pacientes con la presencia de GDC al contrario
siones ulceradas. Tampoco hemos po- con lesiones atrófico-erosivas gingiva- que los resultados obtenidos por otros
dido reconocer relaciones entre la in- les, encontraron que la reducción de la autores (Ramón Fluixá y cols. 1999).
fección candidiásica y la existencia de placa dental con métodos de higiene No obstante, nuestro estudio muestra
GDC. individual, ayudó a disminuir los sínto- un mayor número de casos con un ín-
Clásicamente se ha señalado que mas y la extensión de estas lesiones dice CPTIN de 4, así como de enfer-
los pacientes afectos de enfermedad li- pero sin llegar a resolver por completo medad periodontal moderada/severa en
quenoide oral ulcerativa muestran en la GDC, demostrando que la placa el grupo de pacientes con GDC. Estos
general una mala situación periodon- dental no era un factor etiológico prin- resultados sugieren la existencia de una
tal, y que la placa y el cálculo actúan cipal en la génesis de las lesiones lique- posible relación directa entre estos dos
como elementos irritantes y agravan- noides. procesos en algunos pacientes, por lo
tes de las lesiones, haciéndolas más ex- En el estudio realizado por Ramón- que es fundamental extremar su con-
tensas y erosivas (Holmstrup y cols. Fluixá y cols. (1999) en el que evalúan trol y tratamiento.
1990; Ramón Fluixá y cols. 1999). diferentes índices periodontales, no ob-
Nuestros resultados, a pesar de no ob- servan diferencias significativas entre CONCLUSIONES
tener diferencias estadísticamente sig- el grupo con liquen y el control. Sin
nificativas apoyarían esta idea, ya que embargo, encuentran unos mayores ín- Los pacientes con ELO ulcerativa en
una gran mayoría de los pacientes es- dices de placa y sarro en el subgrupo de nuestro medio presentan en general
tudiados tenían una mala salud perio- pacientes con lesiones atrófico-erosi- una mala salud periodontal, que puede
dontal en el momento del diagnóstico vas gingivales, así como una mayor ser agravada por el binomio lesión-gin-
de la ELO. No obstante, es difícil reco- afectación periodontal. Esto se debería gival-mala higiene. El control perio-
nocer cuál es el primer elemento deter- a la existencia de una mayor sintoma- dontal constituye un elemento funda-
minante de la patología periodontal. tología en este grupo de pacientes con mental en el manejo terapéutico de los
Cabe deducir que la alta prevalencia de lesiones erosivas gingivales, lo que di- pacientes con ELO.
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207-214. controversies in oral lichen planus: report of an
Elevación de seno
maxilar y su relación
con la arteria maxilar.
CASO CLÍNICO
A propósito de un caso
Encarnación Castillo, Mario Anderica, Jon Gurrea
Palabras clave: elevación sinusal, seno maxilar, arteria maxilar, complicación quirúrgica
La presencia de la arteria maxilar en la pared vestibular del seno puede dificultar la elevación de la membrana de Schneider con ventana lateral. En este caso clínico presentamos
una serie de recomendaciones a tener en cuenta para que el procedimiento sea lo más parecido a que la arteria no estuviera presente en la zona del campo quirúrgico.
Se presenta el caso de una paciente a la que se realizan dos elevaciones de seno maxilar con ventana lateral donde en ambos casos está presente la arteria maxilar en
la zona de la ventana (entre 12 mm y 10 mm respecto de la cresta en ambos casos). Se prepararon las ventanas sin dañar la arteria y cuando la membrana de Schneider
estaba casi totalmente separada, a excepción de la zona de la arteria, se cortó y, tras la inyección de vasoconstrictor intravascular, se taponó la arteria durante 5 minutos
con pinza hemostática. De este sencillo modo se controla el sangrado y se continúa con la elevación sinusal de modo normal.
La arteria maxilar es visible en el 53 % de los casos mediante TC pero solo en un 20 % de los casos tiene el potencial de producir complicaciones por una posición más
crestal de lo habitual (<15 mm respecto de la cresta). El sencillo protocolo citado previamente evita complicaciones como el sangrado incontrolado y la perforación de la
membrana por la escasa visibilidad.
MATERIAL Y MÉTODOS
C L Í N I C O
C A S O
cial de separación de la membrana de
Schneider (Van den Bergh y cols. 2000)
(Fig. 3). De este modo tuvimos una me-
jor visualización (Figs. 4, 5 y 6).
C L Í N I C O
Una vez la arteria adherida a la
membrana comenzó a impedir la eleva-
ción de la membrana se cortó. El san- 4 5
grado se controló con el uso de aneste-
sia con vasoconstrictor (epinefrina
1:100.000) y presionando la arteria ta-
ponándola durante 5 minutos con pin-
zas hemostáticas. Una vez la hemorra-
gia fue controlada se procedió a la
separación de la membrana de modo
completo, liberando las paredes mesial
y medial del seno. Se usó hidroxiapa-
tita bovina (Bio-Oss®) como material
de relleno (Piatelli y cols. 1999, Yildi-
rim y cols. 2000) y se tapó la ventana
con una membrana reabsorbible (Bio-
Gide®) (Tarnow y cols. 2000, Wallace
y cols. 2005, Jensen y cols. 1998) (Fig.
7). Se suturó usando puntos simples de
seda 4.0. 6
La medicación postoperatoria con- Fig. 4, 5 y 6 Obsérvese la integridad de la membrana y la integridad de la
sistió en Ibuprofeno 600 mg cada 6 ho- arteria.
ras durante 5 días como mínimo y
Amoxicilina 500 mg cada 8 horas du-
rante 8 días acompañados de enjuagues
de clorhexidina al 0,12%. de seccionarla. Desgarrarla con la fresa adecuada hemostasia es una compli-
Se retiraron las suturas al cabo de puede hacer que el segmento de arteria cación importante ya que dificulta la
dos semanas en cada una de las inter- que queremos sujetar sea intraóseo lo que visión y hace más posible que se pro-
venciones. dificulta la hemostasia. No obtener una duzcan perforaciones de la membrana
RESULTADOS
En ninguna de las intervenciones hubo
complicaciones intraoperatorias como
la perforación de la membrana sinusal,
ni postoperatorias como excesivo ede-
ma o hematoma. La paciente no refirió
molestias.
DISCUSIÓN
La presencia de la arteria maxilar en el
campo quirúrgico a la hora de realizar
una elevación sinusal con ventana la-
teral no debe alterar el plan quirúrgico
en la medida en que se puede contro-
lar el sangrado con relativa facilidad.
Es crucial mantener intacta la arte-
ria en la fase inicial de separación de la Fig. 7 Relleno del seno maxilar con hidroxiapatita bovina (Bio-Oss®) cubierto
ventana pues así podremos tener más por membrana de colágeno (Bio-Gide®)
control sobre la arteria en el momento
de Schneider, además del riesgo obvio con sencillas técnicas de hemostasia hemostasia que permita tener buena vi-
que supone una hemorragia no contro- como presión mecánica, inyección de sibilidad para poder terminar la inter-
C L Í N I C O
lada para el paciente. epinefrina anestésica intraarterial. No vención sin más complicaciones.
Las grandes hemorragias durante se recomienda el uso del bisturí eléctri- Así el uso de instrumental piezoe-
este tipo de intervenciones son raras ya co para hemostasia según el estudio re- léctrico (Wallace y cols. 2007) puede
que las arterias de gran calibre están le- alizado por Van den Bergh y cols. ser de utilidad para la apertura de la
jos de la zona quirúrgica, el diámetro (2000) ya que puede producir una ne- ventana sin dañar la arteria de un
medio que solemos encontrar en este crosis de la membrana de Schneider modo más sencillo; aunque luego sí que
C A S O
tipo de arterias según el estudio anató- que podría causar la pérdida del mate- haya que cortarla en ocasiones pues
mico realizado por Solar y cols. (1999), rial de relleno dando lugar al fracaso de permanece adherida a la membrana si-
es de 1,6 mm para las ramas de las ar- la elevación de seno. nusal impidiendo la reubicación de la
terias infraorbitaria y alveolar superior Pocos son los casos en los que estos membrana en una posición más apical,
posterior, lo cual puede ser controlada métodos no logran el objetivo de una la arteria es flexible pero no tanto.
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Prevención de las
enfermedades
periimplantarias:
el mantenimiento
en pacientes con
implantes dentales.
José Antonio Pascual, Agustín Casas, Jorge Serrano, David Herrera
REVISIÓN
José Antonio Pascual La aparición de los implantes osteointegrados ha supuesto un gran avance en la odontología moderna. Como consecuencia del incremento en la colocación de implantes,
Máster en Periodoncia por la Universidad incluso en indicaciones y pacientes que antes no se contemplaban, también pueden aumentar los fracasos producidos por las infecciones periimplantarias. Las enfermedades
Complutense de Madrid periimplantarias se han considerado en paralelo con las enfermedades periodontales: se han evaluado las analogías entre ambas enfermedades, pero existen una serie de
Profesor colaborador Máster Periodoncia diferencias que conviene reseñar y que confieren ciertas particularidades a las enfermedades periimplantarias.
y Osteointegración En el presente artículo se revisan las nociones actuales sobre las enfermedades periimplantarias, cómo reconocer su aparición y cuáles son las pautas a seguir para
Dedicación exclusiva en Periodoncia evitar su desarrollo. La prevención, el diagnóstico y el tratamiento de las patologías periimplantarias son importantes para conseguir una supervivencia mayor de los implantes
e Implantes. a largo plazo.
Agustín Casas
Doctor en Odontología por la Universidad
Complutense de Madrid
Máster de Periodoncia y especialista INTRODUCCIÓN periimplantarias. Para evitar dichas pa-
en Osteointegración por la Universidad tologías que pueden conllevar la pérdi-
Complutense de Madrid
Dedicación exclusiva en Periodoncia En las últimas décadas, la aparición de da de los implantes, es necesario incor-
e Implantes los implantes osteointegrados ha su- porar al paciente a un programa de
puesto una revolución en la odonto- mantenimiento en el que se controlen
Jorge Serrano logía moderna. El alto porcentaje de varios parámetros que permitan valo-
Doctor en Odontología por la Universidad
Complutense de Madrid éxito de los tratamientos, la simplifi- rar su evolución.
Máster en Periodoncia e Implantes por cación de las técnicas, las mejoras tec-
la Universidad Complutense de Madrid nológicas de los implantes o la dismi- Los fracasos de los implantes se pue-
Profesor colaborador en el Máster
de Periodoncia y Osteointegración
nución del tiempo de tratamiento han den dividir en dos grandes grupos:
provocado que la colocación de im-
David Herrera plantes osteointegrados sea la prime- ■ Fracasos iniciales o prematuros
Profesor Titular de Periodoncia de la ra opción para resolver la reposición (early failures). Son aquellos en
Universidad Complutense de Madrid
de dientes. los que no se ha producido una
Como consecuencia de la coloca- correcta cicatrización. Son debidos
Correspondencia a: ción de implantes en indicaciones y en a la incapacidad de conseguir la
José Antonio Pascual
pacientes que antes no se contempla- osteointegración (el implante se
C/ San Lorenzo 9 1º dcha
47001 Valladolid ban, también pueden aumentar los fra- pierde antes de colocar la prótesis)
E-mail: japaramburu@terra.es casos producidos por las enfermedades o la osteointegración suficiente
para soportar carga funcional (el tes es una superficie rugosa que, en la
implante se pierde al poco tiempo mayoría de los diseños, llega hasta el
de haber colocado la prótesis). hombro del implante. La exposición de
R E V I S I Ó N
1. DIFERENCIAS DIENTES-IMPLANTES
R E V I S I Ó N
lio de unión en la mucosa periimplan-
taria sólo recibe aporte vascular de los
vasos sanguíneos supraperiósticos,
mientras que en los dientes esta mis-
ma zona recibe aporte vascular de los
vasos supraperiósticos y del plexo vas-
cular del ligamento periodontal (Ber-
glundh y cols. 1994). (Figs. 3 y 4).
La relación del implante con los te-
jidos duros se basa en la osteointegra-
ción, consistente en una unión íntima
del hueso con el titanio del implante.
En los dientes existe un ligamento pe-
riodontal compuesto por haces de fibras Fig. 5 Defecto óseo en forma de bañera alrededor del implante.
colágenas que tienen su origen en el
hueso alveolar y se insertan en el ce-
mento radicular.
Estas diferencias anatómicas entre 3. ENFERMEDADES PERIIMPLANTARIAS riimplantarias harían referencia a un
los tejidos periimplantarios y los teji- Las enfermedades periimplantarias se término colectivo de las reacciones in-
dos periodontales se traducen en que la dividen en dos entidades: flamatorias que ocurren en los tejidos
mucosa periimplantaria podría ser me- de alrededor del implante (Zitzmann y
nos eficaz ante la agresión biológica que a) Mucositis periimplantaria. Berglundh 2008). El término mucosi-
suponen las bacterias de los biofilms. b) Periimplantitis. tis periimplantaria se usaría para des-
cribir la presencia de inflamación en la
2. ¿EXISTEN DIFERENCIAS EN LOS Las definiciones de mucositis y periim- mucosa alrededor de un implante sin
BIOFILMS BACTERIANOS FORMADOS
SOBRE DIENTES O SOBRE IMPLANTES?
plantitis han sufrido ligeras modifica- que existan signos de pérdida de hueso
ciones con el paso del tiempo. La pri- de soporte (Zitzmann y Berglundh
No se han observado diferencias en la mera definición de ambas entidades se 2008). En cambio, el término periim-
cantidad y calidad de los biofilms for- realizó en el Primer Workshop Europeo plantitis se utilizaría cuando además de
mados en dientes e implantes tras tres de Periodoncia (1993). La mucositis se la inflamación en la mucosa existe pér-
semanas y tras tres meses de formación definió como una inflamación reversi- dida de hueso alveolar (Zitzmann y
de placa de novo en estudios en anima- ble de los tejidos blandos periimplan- Berglundh 2008) (Fig 5).
les. La colonización bacteriana y su es- tarios sin pérdida de hueso de soporte En el mencionado Workshop Euro-
tablecimiento en los implantes de tita- en implantes sometidos a una carga peo se ha concluido que ambas entida-
nio siguió la misma pauta que en los funcional (Albrektsson e Isidor 1994). des son enfermedades infecciosas. Se
dientes (Berglundh y cols. 1992; Erics- Mientras que periimplantitis se definió describe la mucositis como una lesión
son y cols, 1992; Leonhardt y cols. como el proceso inflamatorio que afec- inflamatoria en la mucosa periimplan-
1992). Se ha demostrado la transmi- ta a los tejidos adyacentes a los implan- taria, mientras que en la periimplanti-
sión intraoral de los patógenos perio- tes, osteointegrados y en función, y que tis también está afectado el hueso pe-
dontales entre los diferentes nichos de produce una pérdida del hueso de so- riimplantario (Lindhe y Meyle 2008).
la cavidad oral. Es decir, se ha demos- porte (Albrektsson e Isidor 1994). Se
trado que al colocar implantes los pa- han modificado algunos términos de es- a) Mucositis periimplantaria: En un
tógenos de los dientes colonizan el sur- tas definiciones porque el término mu- ensayo clínico (Pontoriero y cols. 1994)
co periimplantario (Quirynen y cols. cositis periimplantaria se considera se reprodujo el modelo de gingivitis ex-
1990; Quirynen y cols. 1996; Papaioan- como un proceso inflamatorio reversi- perimental, desarrollado por el grupo de
nou y cols. 1995). Además, la similitud ble, mientras que en la definición de Löe (Löe y cols. 1965) para comprobar
de la microbiota en las bolsas alrededor periimplantitis no se hacía mención a la relación causa-efecto entre la acumu-
de dientes e implantes ha sido confir- esta cualidad, por lo que se podría su- lación de placa y el desarrollo de la mu-
mado en diferentes estudios, siendo la poner que la periimplantitis es una le- cositis. Se eliminaron las medidas de hi-
presencia de los patógenos periodonta- sión irreversible y por tanto, sin trata- giene oral durante 3 semanas en
les tan frecuente en los implantes como miento posible. Zitzmann y Berglundh pacientes con implantes y se observó
en los dientes del paciente (Leonhardt han sugerido en el Sexto Workshop Eu- que se produjo gingivitis y mucositis pe-
y cols. 1993; Kohavi y cols. 1994; ropeo de Periodoncia unas nuevas de- riimplantaria, demostrando así que la
Mombelli y cols. 1995). finiciones. Así, las enfermedades pe- falta de higiene oral y la acumulación
de placa bacteriana alrededor de los im- plantes. Una vez que se ha producido (Zitzmann y Berglundh 2008), en
plantes provoca una inflamación de los la mucositis, ésta se puede solucionar el que se puede apreciar un defecto
tejidos blandos periimplantarios. Las le- mediante la remoción de los biofilms con forma de bañera alrededor del
R E V I S I Ó N
siones iniciales debidas a la coloniza- patogénicos que la produjeron median- implante, aunque la porción más
ción bacteriana son similares tanto en te medios mecánicos y, si fuera necesa- apical permanece osteointegrada
la encía como en la mucosa periimplan- rio, la utilización coadyuvante de anti- (Fig. 8).
taria, tanto en tamaño como en ubica- sépticos (Renvert S, 2008). ■ dolor ocasional: no es típico de las
ción. Pero a medida que aumenta la du- lesiones de periimplantitis.
ración de la exposición al biofilm se b) Periimplantitis: el grupo de Lang
observa una mayor progresión hacia (Lang y cols. 1993) provocó periim- Determinar la prevalencia de periim-
apical de las lesiones periimplantarias y plantitis en monos por acumulación de plantitis es complicado porque no exis-
una menor presencia de fibroblastos placa inducida por ligaduras. Este bio- ten suficientes datos en la literatura. En
(Leonhardt y cols. 1992). Por lo tanto, film produjo un aumento en el índice el Workshop Europeo de 2008, basán-
la mucosa periimplantaria podría ser de placa y en el índice gingival, aumen- dose en dos únicos estudios clínicos, se
menos eficaz en encapsular las lesiones to de la profundidad de bolsa y pérdida señalaba que la prevalencia era entre
asociadas a los biofilms. de inserción alrededor de los implantes un 28 % y un 43 % de los individuos y
La mucositis periimplataria se ca- con ligaduras, con respecto a los que no entre un 12 y 43 % de los implantes
racteriza clínicamente por (Fig. 6): se colocaron ligaduras. La presencia de (Zitzmann y Berglundh 2008; Lindhe
las ligaduras también ocasionó cambios y Meyle 2008).
■ tumefacción, microbiológicos y presencia de defec- Actualmente no existe un «trata-
■ enrojecimiento, tos intraóseos significativos. Los auto- miento de referencia» predecible para
■ sangrado al sondaje, res concluyeron que la acumulación de las periimplantitis (Claffey 2008). Por
■ profundidad de sondaje placa durante un periodo largo de tiem- lo tanto, el mejor tratamiento de la pe-
periimplantaria de 2 a 4 mm. La po puede provocar lesiones en los teji- riimplantitis es la prevención y el man-
profundidad de sondaje, como se dos de soporte de los implantes. tenimiento nuestra forma de realizar
explica más adelante, va a Los signos clínicos de la periim- esa labor preventiva.
depender de varios factores, plantitis son:
aunque a mayor profundidad de OBJETIVOS DEL MANTENIMIENTO
sondaje, más probabilidad de que ■ profundidad de sondaje DE IMPLANTES
se establezca un biofilm subgingival periimplantario mayor de 4 mm;
patogénico. relacionada con la formación de Si el mantenimiento es muy importan-
defectos infraóseos (Fig. 7), te en dientes, en implantes adquiere un
Aunque la evidencia científica es limi- ■ sangrado y supuración al sondaje o valor fundamental por todo lo visto an-
tada, la prevalencia de la mucositis pe- espontánea (Fig. 7), teriormente. Por tanto, se deben perse-
riimplantaria se puede cifrar en el 80 % ■ tumefacción y rubor del tejido guir los siguientes objetivos durante las
de los individuos y en el 50 % de los marginal: suele haber hiperplasia visitas de mantenimiento:
implantes (Zitzmann y Berglundh cuando se presenta en áreas de
2008; Lindhe y Meyle 2008) encía no queratinizada, 1. Mantenimiento de la salud
Para evitar la aparición de la muco- ■ evidencia radiológica de pérdida periodontal de los dientes
sitis periimplantaria estaría indicado ósea vertical: es importante remanentes.
tomar medidas de prevención primaria, distinguir entre la remodelación 2. Mantenimiento de la
tales como el adiestramiento de los pa- ósea que ocurre durante el periodo osteointegración de los implantes.
cientes en técnicas de higiene oral ade- de cicatrización y la pérdida de 3. Prevención del comienzo o
cuadas y eficaces en la remoción de los hueso marginal que se puede progreso de lesiones de tejidos
biofilms bucales alrededor de los im- detectar en el implante en función duros y/o blandos.
4. Diagnóstico de fracasos biológicos:
mucositis - periimplantitis.
5. Diagnóstico de fracasos técnicos:
aflojamiento o falta de ajuste de
prótesis.
6. Tratamiento en el caso que fuera
necesario.
R E V I S I Ó N
da en el surco (Ericsson y Lindhe
1993).
El mejor indicador de la situación
periimplantaria sería la comparación de
la profundidad de sondaje entre las dis-
tintas visitas de mantenimiento para
poder valorar si hay o no hay pérdida
de inserción periimplantaria. El regis-
7 tro inicial de la profundidad de sonda-
je se debería registrar aproximadamen-
te un mes después de la colocación de
la prótesis definitiva para permitir una
remodelación fisiológica de los tejidos
duros y blandos periimplantarios (Ber-
glundh y cols. 2007). El registro de son-
8 daje periimplantario se hará en un mí-
nimo de cuatro localizaciones por
Fig. 7 Es necesario realizar un sondaje alrededor de los implantes para
observar si hay aumento en la profundidad de sondaje y sangrado.
implante. Para poder valorar la pérdi-
da de inserción periimplantaria se de-
Fig. 8 Periimplantitis: evidencia radiológica de pérdida ósea periimplantaria con bería tomar un punto fijo como refe-
defecto en forma de bañera; situación después de realizar un procedimiento
regenerativo y tratamiento de conductos en el diente adyacente.
rencia. Igual que en el nivel de
inserción periodontal se toma la línea
amelocementaria, en los implantes se
podría tomar el hombro del implante
■ Prevención primaria: control de conocer y manejar los siguientes pará- para valorar la pérdida de inserción que
placa para evitar inflamación e metros diagnósticos: se pueda producir en ese implante. Se-
infección en tejidos gún el tipo de implante utilizado y el
periimplantarios. ■ profundidad de sondaje, tipo de prótesis que lleva el paciente
■ Terapia causal: remoción de ■ índice de placa, puede ser muy complicado valorar el
depósitos bacterianos (duros y ■ índice gingival: inflamación y nivel de inserción.
blandos) esencial para el sangrado al sondaje, En la profundidad de sondaje alre-
tratamiento de infecciones ■ movilidad, dedor de los implantes influyen facto-
periimplantarias. ■ supuración, res como el estado de los tejidos periim-
■ Prevención de recidivas: inducir ■ examen radiológico, plantarios y la fuerza que aplicamos a
un cambio en la microflora ■ examen microbiológico. la sonda. En tejidos sanos o con muco-
periimplantaria para evitar una sitis periimplantaria, la mucosa presen-
recolonización de patógenos. Profundidad de sondaje ta más resistencia a la inserción de la
El sondaje periimplantario es esencial sonda y la medida refleja el nivel de in-
QUÉ HACER EN LA CITA DE
para el diagnóstico de las enfermedades serción verdadero alrededor del im-
MANTENIMIENTO DE IMPLANTES periimplantarias (Lindhe y Meyle plante. Sin embargo, en situaciones de
2008), y es el parámetro clínico impres- periimplantitis, la sonda penetra con
1. REVISAR LA HISTORIA MÉDICA
cindible para la monitorización a largo más facilidad el epitelio de unión obte-
DEL PACIENTE plazo de los tejidos periimplantarios. niendo profundidades de sondaje 1.2
La profundidad de sondaje alrede- mm más apicales al verdadero nivel de
Se debe determinar las patologías del dor de implantes es mayor que alrede- inserción (Lang y cols. 1994). Se reco-
paciente que puedan ser factores de dor de los dientes. El significado clíni- mienda una fuerza en el sondaje de 0,25
riesgo y que condicionan la frecuencia co de los valores de la profundidad de N (Lindhe y Meyle 2008). También el
con la que han de realizarse los mante- sondaje alrededor de los dientes no es sistema de implantes utilizado y del ac-
nimientos. igual que alrededor de los implantes. ceso que se tenga al surco periimplan-
Alrededor de los dientes con salud pe- tario después de colocar la prótesis im-
riodontal, la profundidad media es de plantosoportada influyen en la
2. EXPLORACIÓN DE LOS PACIENTES 0,7 mm, mientras que en los tejidos pe- profundidad de sondaje. Dependiendo
Para un correcto diagnóstico de las en- riimplantarios sanos, la profundidad de del sistema de implantes y de las nece-
fermedades periimplantarias se han de sondaje media es de 2,0 mm. Esto es de- sidades quirúrgicas se pueden conside-
Tabla 1 Índice de placa modificado de Mombelli (Mombelli y cols. 1987) nes por aflojamientos de los tornillos
0 No detección de placa.
y/o pilares de la prótesis.
Se ha sugerido en la literatura que
R E V I S I Ó N
Tabla 2 Índice de hemorragia en el surco modificado (Mombelli y cols. 1987) ■ dificultad para detectar pequeños
0 No sangrado al pasar la sonda periodontal por el surco cambios en la altura ósea
periimplantario. periimplantaria (De Smet y cols.
1 Puntos de sangrado aislados.
2002),
■ incapacidad para detectar cambios
2 Línea continua de hemorragia alrededor del implante. en zonas que se pueda superponer
3 Sangrado profuso. el implante (De Smet y cols.
2002),
R E V I S I Ó N
apariencia radiológica de contacto
hueso-implante, no implica una
osteointegración a nivel
histológico).
Examen microbiológico
La detección de determinadas bacterias
periodontopatógenas (Aggregatibacter
actinomycetemcomitans, Porphyromonas
gingivalis, Prevotella intermedia, Trepone-
ma denticola) puede aumentar el valor
diagnóstico del sangrado al sondaje
10 11
(Luterbacher y cols. 2000).
Se han sugerido otros métodos, Fig. 10 Eliminación de los biofilms mediante curetas de plástico.
como la sustracción digital radiográfi-
Fig. 11 Es necesario enseñar al paciente el uso de cepillos interproximales
ca o el análisis bioquímico del fluido para una adecuada remoción de la placa adherida a los implantes.
crevicular periimplantario, para la de-
tección precoz de las patologías periim-
plantarias, aunque de momento no
existe suficiente evidencia científica en ción del biofilm. En este sentido las 4. ASIGNACIÓN DE LA FRECUENCIA
la literatura (Nicopoulou-Karayianni y prótesis atornilladas ofrecen una ven- DE LAS VISITAS DE MANTENIMIENTO
DE LOS IMPLANTES
cols. 1997). taja a la hora de tener que retirar la
prótesis. Para asignar la frecuencia con la que
3. REALIZACIÓNDEL A continuación se procede a reali- debería realizar las citas de manteni-
MANTENIMIENTO DE LOS IMPLANTES
zar la remoción de los biofilms median- miento de los implantes hay que tener
Antes de realizar el mantenimiento de te curetas de plástico, cerámica o teflón en cuenta una serie de factores que
los implantes se debería realizar un (Fig.10). También se pueden utilizar condicionan el riesgo del paciente para
mantenimiento del resto de la denti- aparatos de ultrasonido con puntas de desarrollar las patologías periimplanta-
ción del paciente, mediante profilaxis cerámica o teflón. rias. No existen estudios clínicos ex-
y raspado y alisado radicular en las lo- Por último, la utilización de pastas haustivos valorando estos factores de
calizaciones necesarias. de pulido es un tema controvertido. En riesgo. Con los conocimientos actuales
Dependiendo del diseño (más o el caso de utilizarse habría que seleccio- (Lindhe y Meyle 2008; Heitz-Mayfield
menos higiénico) y del tipo de próte- nar pastas de bajo índice de abrasión 2008) se considera que hay evidencia
sis sobre implantes (cementadas o ator- para evitar arañar la superficie del tita- de la asociación de las enfermedades
nilladas) se procederá a levantar la nio. periimplantarias con los siguientes tres
prótesis sobre los implantes para faci- La aplicación de antisépticos va a factores:
litar el acceso a los implantes y conse- depender de la presencia o no de pato-
guir una adecuada exploración y remo- logía periimplantaria. a) Mala higiene oral. Se considera
Se debe explicar cuidadosamente y una tasa de riesgo (odds ratio) de
motivar a los pacientes en la realización 14.3 (Intervalo de confianza de 95
de las técnicas de remoción de placa de %: 2.0-4.1).
sus implantes y los medios de los que b) Historia previa de periodontitis.
disponen para ello: Se ha determinado un aumento del
riesgo de padecer enfermedades
■ Cepillos de diseño especial: periimplantarias para los pacientes
unipenachos, etc. con periodontitis previa.
■ Cepillos interproximales (hay que c) Tabaco. Se asocia el hábito del
tener cuidado con los que tienen el tabaco a las enfermedades
núcleo metálico, pues podrían periimplantarias.
dañar la superficie del implante)
(Fig.11). Se han estudiado otros factores de ries-
Fig. 9 Exploración radiológica
para visualizar la falta de ajuste de
■ Seda enhebrada (tipo Superfloss go, pero la evidencia es limitada, con
los componentes protésicos. ®). la diabetes, con un mal control meta-
■ Irrigadores. bólico y el consumo de alcohol. A ve-
■ en el momento de colocar la
Fig. 12 Programa de mantenimiento de implantes basado en la situación de
los tejidos periimplantarios, la prótesis y los acúmulos de depósitos blandos y prótesis,
duros (Buitrago y cols. 2001). ■ al año de colocar la prótesis,
■ a los tres años de colocar la
prótesis,
ces los datos son controvertidos como de los implantes, ■ a los cinco años de colocar la
en el caso de la predisposición genéti- inclinaciones...). prótesis,
ca y la superficie rugosa de los implan- – Presencia de especies ■ cada cinco años, siempre que haya
tes (Lindhe y Meyle 2008; Heitz-May- bacterianas específicas. estabilidad clínica de los tejidos
field 2008). – Cumplimiento de las citas de periimplantarios.
Aunque aún no exista evidencia mantenimiento: Aquellos
científica sobre ellos, se deberán tener pacientes que no cumplen con
en cuenta otros factores para determi- las visitas de control tienen un CONCLUSIONES
nar la frecuencia en la realización de riesgo mayor.
los mantenimientos en los pacientes Los implantes osteointegrados son sus-
portadores de implantes. Estos factores A mayor riesgo asignado al paciente la ceptibles a infecciones a partir de la mi-
podrían ser: frecuencia de las citas de mantenimien- crobiota de la cavidad bucal. Las infec-
to debería ser más elevada. ciones más frecuentes de los tejidos
■ Factores relacionados con el Buitrago y cols. ( 2001) diseñaron duros y blandos periimplantarios pue-
paciente: Entre estos estarían la un programa de citas de mantenimien- den ser de dos tipos: mucositis y periim-
presencia de otras posibles to, que aunque no tiene un apoyo ba- plantitis. La mucositis es una lesión in-
enfermedades sistémicas además de sado en la evidencia, es bastante prác- flamatoria que reside en la mucosa,
la diabetes como las enfermedades tico: mientras que en la periimplantitis hay
sistémicas que afectan a la función Una semana después de colocar la una pérdida de tejidos duros evidente.
de los neutrófilos, la osteoporosis... prótesis: instrucciones de higiene oral La prevención, el diagnóstico y el
■ Factores ambientales o y radiografía basal. tratamiento de estas patologías es im-
adquiridos, además de tabaco y Al mes de colocar la prótesis: eva- portante para conseguir una supervi-
alcohol, como el estrés o luación de técnicas de higiene oral y vencia mayor de los implantes afecta-
tratamientos con radioterapia. control de placa por parte del paciente dos. La prevención se debe realizar
■ Factores clínicos y y recogida de los parámetros iniciales mediante un programa de manteni-
microbiológicos: de profundidad de sondaje, índice de miento con visitas regulares depen-
– Factores locales como la placa e índice gingival. Estos paráme- diendo de factores como el control de
presencia o ausencia de encía tros son fundamentales para poder mo- placa del paciente, el estado de salud
queratinizada, factores nitorizar los tejidos periimplantarios a general del paciente o el estado de la
relacionados con las prótesis largo plazo. prótesis. El diagnóstico debe ser lo más
(implantes no accesibles, Durante el primer año: se hacen vi- precoz posible para poder instaurar un
prótesis poco higiénicas, etc), sitas de mantenimiento cada 3 meses, tratamiento adecuado en cada situa-
factores relacionados con los registrando todos los parámetros anali- ción sin necesidad de tener que llegar
implantes (posición en la arcada zados anteriormente y comparándolos a la retirada del implante.
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Cirugía plástica
periodontal en relación
a la ortodoncia.
Revisión de la
literatura
Luis Antonio Aguirre, Mónica Campos, Raúl Diez, Alberto Remolina, Jon Bayona
Las recesiones gingivales son relativamente frecuentes en pacientes sometidos a tratamientos ortodóncicos. Existe controversia en la literatura científica sobre su prevalencia,
los movimientos de riesgo y sobre cuál es el momento idóneo para tratar quirúrgicamente este tipo de manifestaciones: pre, intra o post-ortodoncicamente.
En este trabajo se revisan distintas alternativas terapéuticas y se muestran algunos casos tratados en diferentes momentos del tratamiento, con diferentes técnicas.
R E V I S I Ó N
3 4 5
6 7 8
9 10 11
Fig.3 Imagen clínica del lado derecho, al inicio del tratamiento ortodóncico.
Fig. 4 Imagen clínica del lado izquierdo, al inicio del tratamiento ortodóncico.
Fig. 12 Imagen frontal del maxilar superior. Detalle de las recesiones que
presentan el 1.1 y el 2.1.
14
15 16 17
La paciente ha continuado acu- cesión dado que por la exploración se Con respecto a la primera pregun-
diendo a terapia de mantenimiento, podía deducir la presencia de dehiscen- ta y basándose en experiencias clínicas,
siendo el resultado final estable duran- cias óseas en los otros incisivos (Figs. se ha afirmado que el movimiento ha-
te estos 13 años (Figs. 18-21). 22-25), lo que permitió la cobertura cia vestibular de los dientes anteriores
completa de la recesión y la consecu- y hacia lateral de los posteriores provo-
CASO CLÍNICO 2 ción de una banda de encía insertada caba la aparición de recesiones y que
previamente ausente (Fig. 26). estas ocurrían en zonas con «insuficien-
Paciente de 23 años, mujer, que acude te» encía (Coatoam y cols. 1981). Este
a nuestra consulta remitida por su or- DISCUSIÓN autor afirmó que 2 mm de encía quera-
todoncista. La paciente refiere que dos tinizada era el prerrequisito mínimo
años después de haber concluido el tra- Ante el tratamiento ortodóncico y en para asegurar salud gingival después del
tamiento ortodóncico, de forma brus- relación con los problemas mucogingi- tratamiento de ortodoncia. Razonaba
ca, empieza a tener molestias en los in- vales que nuestros pacientes previa- esta aseveración en el hecho de que el
cisivos inferiores y que en pocos meses mente presentan o que surgen durante 6,1 % de los pacientes que presentaban
desarrolla una recesión gingival que la terapia, nos podemos plantear una menos de 2 mm de encía queratinizada
clasificamos como clase II de Miller serie de cuestiones: ¿existen unos pre- la perdieron después del tratamiento
(Fig. 22). Tras insistir en la importan- rrequisitos mucogingivales mínimos ortodóncico, frente al 0,1 % que la per-
cia que el control de placa tiene en el para movilizar dientes? ¿Cuál es la pre- dieron teniendo más de 2 mm de encía
mantenimiento de la salud periodontal valencia de las recesiones en relación al comienzo. Estudios como este avala-
y posteriormente a realizar RAR, se lle- con los movimientos ortodóncicos? ¿Es rían la necesidad de cirugía mucogin-
vo a cabo un procedimiento de cirugía predecible el aumento de encía quera- gival previa al tratamiento ortodónci-
mucogingival mediante técnica bilami- tinizada con la lingualización? ¿Cuán- co donde no se diesen dichos requisitos
nar (Nelson 1987), en la que se inclu- do suelen aparecen recesiones? ¿Cuán- mínimos (Hall 1981; Maynard 1987).
yeron los dos dientes adyacentes a la re- do hay que tratarlas? Por contra, cuando en 1987 Wenns-
R E V I S I Ó N
22 23 24
Fig. 22 Imagen clínica inicial del caso 2. Obsérvese la gran inflamación asociada
a la recesión.
Fig. 23 Imagen del lecho receptor preparado a espesor total de acuerdo con la
«técnica de Nelson».
Fig. 24 Sutura del injerto donde se aprecia la perfecta adaptación del mismo a
las tres raíces que presentaban dehiscencias óseas.
Fig. 25 Sutura del colgajo. Obsérvese la sutura de las dos papilas adyacentes a
25 la recesión del 3.1 de acuerdo al protocolo de Nelson.
26
tröm y cols. realizaron un estudio expe- go de provocar una recesión, se debe re- to de este movimiento en niños y ado-
rimental en monos observaron que un alizar una cirugía mucogingival profi- lescentes, no observando interrelación
diente movido ortodóncicamente den- láctica. Esto fue corroborado por Bonu- entre la proclinación de los incisivos y
tro de su alveolo, es decir, sin provocar gli (2000) que recomendó la realización la presencia de recesiones, aunque ad-
una dehiscencia ósea durante el movi- de injertos profilácticos en casos de pe- mitían que un 3 % de los incisivos des-
miento, tiene muy poco riesgo de alte- riodonto fino vestibular cuando se va- arrollaban recesiones nuevas o se dete-
rar los tejidos gingivales. Así mismo, yan a vestibulizar de piezas. rioraban y progresaban otras ya
afirmaban que cuando la dehiscencia Respecto a la prevalencia de las re- existentes al comienzo del tratamiento.
se producía, los factores que determi- cesiones gingivales surgidas durante el Artun y cols. (2001) publicaron un
nan la aparición de una recesión eran: tratamiento ortodóncico, sobre todo estudio en un grupo de adolescentes
a) la presencia de inflamación induci- como consecuencia de los movimien- con clase II. Observaron que no había
da por placa y b) el grosor de tejido tos de proclinación de los incisivos in- diferencias estadísticamente significa-
blando alrededor del defecto. Es impor- feriores, no existe unanimidad. Artun y tivas entre los 30 pacientes que se les
tante resaltar que hasta ese momento Krogstad (1987) estudiaron la evolu- había realizado un movimiento hacia
se insistía en la importancia de la an- ción del margen gingival en pacientes vestibular de los incisivos inferiores y
chura o altura de la encía insertada par adultos involucrados en cirugía ortog- los 21 sin avance ortodóncico. Sin em-
mantener la salud y que a partir de este nática y cuyos incisivos mandibulares bargo, aquellos pacientes que desarro-
estudio se demostró sin embargo que el fueron sometidos a una «excesiva» pro- llan recesión sobre distintos dientes du-
factor determinante para evitar el des- clinación. Sus resultados demostraron rante la terapia tendrían un mayor
arrollo de una recesión durante el mo- una prevalencia mayor de recesiones, riesgo de experimentar alguna otra re-
vimiento ortodóncico era el grosor, el tanto durante el tratamiento ortodón- cesión, en otros dientes, después del
volumen del tejido en torno a un dien- cico como durante los tres años poste- tratamiento.
te. En 1990, este mismo autor, publicó riores a su terminación, existiendo una Allais y Melsen, en 2003, estudia-
una revisión de la literatura sobre la an- relación estadísticamente significativa ron si el movimiento labial de los inci-
chura y grosor de la encía en tratamien- entre la proclinación y la presencia de sivos inferiores influía en el nivel del
tos de ortodoncia y concluyó que solo recesiones. Por el contrario, numerosos margen gingival de 300 pacientes adul-
en el caso de que, por las condiciones estudios contradicen esta afirmación, tos, llegando a la conclusión que la di-
clínicas antes expuestas, se prevé ries- así Ruf y cols. (1998) estudiaron el efec- ferencia entre los casos y los controles
no era clínicamente relevante: 0,14 vestibular, la corrección de su posición cols. 2005; Melsen y Allais 2005) Por
mm de diferencia de media, lo cual pa- mediante movimiento hacia lingual no contra, si el movimiento es favorable,
recería contraindicar la realización de crearía tejido queratinizado adicional. y no hay problemas con el control de
R E V I S I Ó N
extracciones para evitar el movimien- Así mismo, Dorfman (1978) realizó un placa, el correcto alineamiento de los
to labial de los incisivos mandibulares. estudio para determinar los cambios en dientes mejorará la adaptación del in-
Estos mismos autores (Melsen y Allais la anchura de encía queratinizada de los jerto sobre el lecho receptor y parece
2005) evaluaron retrospectivamente la incisivos inferiores durante el trata- lógico que por lo tanto aumente el por-
prevalencia de las recesiones gingiva- miento de ortodoncia y observó que so- centaje de éxito. Así mismo, dada la
les en los 150 pacientes a los que se les lamente disminuía en el 1,3 % de los ca- alta predictibilidad de las técnicas mu-
vestibularizaron los incisivos e identi- sos que se vestibulizaban mientras que cogingivales (Roccuzzo y cols. 2002),
ficaron los parámetros que predecían la cuando el movimiento era hacia lingual si la recesión aparece durante el trata-
aparición de recesiones. De los 50 pa- el aumentó de la anchura afectaba al miento ortodóncico o se produce un
cientes que presentaron recesión al fi- 0,69 % de los casos. empeoramiento en una recesión pree-
nal del tratamiento, 13 (5 %) mostra- Por contra, en un estudio en mo- xistente, detendremos la aplicación de
ron un empeoramiento de la recesión nos, Engelking y Zachrisson (1982) ob- fuerzas ortodóncicas sobre el diente, re-
preexistente, 24 (10 %) no tenían re- servaron que el movimiento hacia lin- alizaremos le técnica quirúrgica que
cesión al inicio y 13 (5 %) experimen- gual de dientes que presentaban una consideremos oportuna en ese caso
taron una disminución de la recesión, recesión gingival provocaba la repara- concreto y una vez concluida la cura-
presentando al final del tratamiento ción de la tabla ósea vestibular perdida ción gingival, reforzadas las medidas de
una recesión mayor de 2 mm el 7 % de y el aumento de la altura de la encía. control de placa e introducido el pa-
los incisivos inferiores. Así mismo, cua- Podemos tratar de justificar esta ganan- ciente en un programa de manteni-
tro parámetros resultaron correlaciona- cia si partimos de dos premisas, que ese miento, retomaremos el tratamiento
dos (P<0'05) con la recesión gingival: movimiento hacia lingual provoca un ortodóncico hasta su finalización.
la presencia de recesión gingival al ini- aumento en el grosor del tejido gingi-
cio del tratamiento, la anchura de la val, de gran importancia como hemos CONCLUSIONES
encía queratinizada, el biotipo gingival visto para determinar los cambios del
fino y la presencia de inflamación gin- nivel gingival, y que la posición de lí- Las recesiones gingivales son compli-
gival, no existiendo variables ortodón- nea mucogingival esta genéticamente caciones que pueden surgir durante el
cicas relacionadas con la recesión. Ba- determinada, de tal manera que su po- tratamiento ortodóncico de un pacien-
sándose en estos resultados, los autores sición no cambiará aunque movamos te y, si bien no tienen una elevada pre-
recomiendan realizar cirugía mucogin- el diente y por lo tanto su anchura au- valencia, pueden suponer un problema
gival antes de iniciar el tratamiento de mentará. estético y funcional para quien las pa-
ortodoncia en pacientes con estos fac- Por último nos debemos preguntar dece. Si embargo, la gran predictibili-
tores de riesgo. cuando debemos realizar un injerto en dad de los procedimientos quirúrgicos
Con respecto a las dudas que plan- un paciente de ortodoncia. Parece ra- actuales hace que esta complicación no
tea la tercera cuestión, es decir, si el mo- zonable plantear que aquellos pacien- sea un obstáculo para recomendar el
vimiento hacia lingual de los dientes tes que van a ser sometidos a una ves- tratamiento ortodóncico incluso en
provocará ganancia de tejido queratini- tibulización de los dientes por fuera del aquellos pacientes con una alta exigen-
zado, Maynard y Ochsenbein (1975) reborde alveolar, con encía fina y que cia estética.
observaron la encía de los incisivos in- no son capaces de controlar bien la in- Por otra parte, deberemos analizar las
feriores de más de 200 niños de 4 a 16 flamación gingival, es aconsejable la re- características individuales de cada pa-
años de edad y su conclusión fue que en alización de injertos de tejido conecti- ciente para determinar el momento
un diente vestibulizado con poco o nada vo previos a la terapia ortodóncica adecuado en el que intervengamos, así
de tejido queratinizado en su superficie (Bueno, 2004; Ami Vivas Kaneda y como la técnica quirúrgica a emplear.
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Problemas mucosos
SERIE DE CASOS
periimplantarios:
tratamiento mediante
injerto palatino
epitelizado
Reyes Jaramillo, Alberto Gómez, J. Vicente Ríos, Pedro Bullón,
Mariano Herrero, Pedro Lázaro
Reyes Jaramillo
Palabras clave: problemas mucosos periimplantarios, mucositis perimplantaria, mucosa queratinizada, injerto palatino epitelizado, mucosa periimplantaria
Odontólogo. Máster de Periodoncia
e Implantología
Introducción: La necesidad de una banda adecuada de mucosa queratinizada alrededor de los implantes para el mantenimiento de la salud de los tejidos periimplantarios ha
sido un tema controvertido. Se acepta como banda adecuada de mucosa queratinizada alrededor de implantes aquella de al menos 2 mm alrededor de cualquier perímetro del
Alberto Gómez
pilar.
Odontólogo. Máster de Periodoncia
Objetivo: El objetivo de este trabajo es ver la importancia o la necesidad de esta mucosa queratinizada alrededor de los implantes. Se analizará también el tratamiento de
e Implantología
los problemas mucosos periimplantarios cuando surjan en el devenir del tratamiento.
Desarrollo: Se presenta la realización de la técnica del injerto palatino epitelizado para el tratamiento de problemas mucosos persistentes en cinco casos clínicos con diferente
J. Vicente Ríos
etiología.
Estomatólogo. Director del Máster
Resultados y conclusiones: La ausencia o presencia de una banda inadecuada de mucosa queratinizada no justifica una intervención quirúrgica, sin embargo en situaciones
de Periodoncia e Implantología
clínicas con inflamación persistente, molestias al cepillado y mal control de placa debe considerarse la realización de un procedimiento de tejidos blandos para aumentar la
Profesor Titular de la US
banda de mucosa queratinizada. La utilización de un injerto palatino epitelizado es una forma adecuada y predecible de crear o aumentar la banda de mucosa queratinizada.
Desde el punto de vista clínico el resultado del tratamiento en todos los casos fue satisfactorio pues se consiguió eliminar la sintomatología y estabilizar la situación de los
Pedro Bullón
Estomatólogo
Catedrático de Medicina Bucal
y Periodoncia
Director del Máster de Periodoncia INTRODUCCIÓN El mantener en situación de salud
e Implantología la interfase implante –hueso e implan-
Mariano Herrero La rehabilitación protésica mediante te– tejido blando será el objetivo du-
Estomatólogo implantes osteointegrados, como alter- rante la fase de mantenimiento, una
Director del Máster de Periodoncia nativa al tratamiento con prótesis fija vez instalada la prótesis sobre los im-
e Implantología
o removible, se ha ido incorporando a plantes (Espósito y cols. 1998 a y b).
Pedro Lázaro la práctica odontológica cotidiana des- El pronóstico de los implantes oste-
Odontólogo de que Brånemark y sus colaboradores ointegrados dependerá inicialmente de
Máster en Periodoncia por UCM. Profesor presentaran su experiencia con el uso la integración del implante al tejido óseo
del Máster de Periodoncia e Implantes de
la Universidad de Sevilla
de implantes en pacientes desdentados (osteointegración), y de la adhesión del
(Brånemark y cols. 1977). tejido epitelial y del tejido conectivo a
Facultad de Odontología El éxito a largo plazo del tratamien- la superficie de titanio, produciendo así
Máster de Periodoncia e Implantes to rehabilitador con implantes en su un cierre completo de la mucosa periim-
Universidad de Sevilla
conjunto, no depende exclusivamente plantaria, protegiendo al tejido óseo ad-
de un proceso quirúrgico o posquirúr- yacente de la microbiota bucal (Aspe y
Correspondencia a: gico libre de complicaciones, si no que cols. 1991; Adell y cols. 1981).
Reyes Jaramillo
depende además de otros factores rela- El objetivo de este trabajo es ver la
C/ Erizo, nº 9
41020 Sevilla cionados con el implante y con la re- importancia o la necesidad de mucosa
E-mail: mrjaramillo@us.es habilitación prostodóncica. queratinizada alrededor de los implan-
que las fibras colágenas van paralelas menos 2 mm en cualquier punto del pe-
a la superficie del implante insertadas rímetro de la porción transmucosa.
en la cresta ósea y el tejido epitelial. Warrer y col. 1995, sugieren que la
ausencia de mucosa queratinizada alre-
¿ES dedor de los implantes, incrementa la
D E
NECESARIO UN MÍNIMO
DE ENCÍA QUERATINIZADA PARA susceptibilidad de los tejidos periim-
MANTENER LA SALUD DE LOS plantarios a la destrucción inducida por
S E R I E
S E R I E
D E
C A S O S
2 3 4
5 6 7
Fig. 2 Incisión horizontal a nivel del cuello del diente. Fig. 5 Tras extraer el injerto se aplican técnicas de sutura
y hemostasia.
Fig. 3 Desbridamiento de la superficie radicular.
Fig. 6 Adaptación del injerto al lecho receptor preparado.
Fig. 4 Se diseca del paladar un injerto gingival libre 2-3
mm de espesor. Fig. 7 Control al año.
Han y col. 1995 propusieron el uso TÉCNICA QUIRÚRGICA se realiza una incisión divisora para di-
del injerto gingival para aumentar la secar el epitelio y la porción externa
banda de mucosa queratinizada alrede- DESCRIPCIÓN DE LA TÉCNICA del tejido conectivo dentro del área
dor de los implantes. El reemplazo de demarcada. Será fundamental desbri-
una mucosa no queratinizada ni inser- Los principios para la utilización de in- dar el diente (Fig. 3) y eliminar el ce-
tada por una mucosa queratinizada per- jertos libres de encía fueron diseñados mento necrótico, procediendo así al
mitió una inserción gingival firme y por Sullivan y Atkins 1968 y más tar- acondicionamiento radicular antes de
una mejora en el sellado alrededor de de modificados por Miller 1982. colocar el injerto. Se transfieren las di-
los implantes. Esta nueva inserción re- Por lo general se selecciona un injer- mensiones necesarias de injerto de la
sultó más saludable y resistente a la to libre de tejido blando procedente de la zona receptora a la zona donante me-
inflamación. Esta misma técnica de in- mucosa masticatoria cuando no hay teji- diante el uso de un plantilla.
jerto palatino epitelizado para el tra- do donante disponible en el área adya- Se diseca del área donante un injer-
tamiento de los problemas mucosos cente a la recesión o cuando se desea con- to de 2-3 mm de espesor (Fig. 4). Des-
periimplantarios fue propuesta por Sil- tar con un tejido marginal más grueso. pués de cosechado e injerto se aplican
verstein y cols. 1994, Sevor 1992, La preparación del lecho receptor técnicas de hemostasia para control de
Campbell y cols. 1993. es determinante para el éxito del injer- la posible hemorragia (Fig. 5).
En el presente articulo se presentan to. Debe prepararse un lecho receptor El injerto se coloca de inmediato en
una serie de casos tratados mediante in- 3-4 mm mayor en todo el contorno del el lecho receptor preparado (Fig. 6).
jerto palatino alrededor de implantes. defecto a tratar. Para inmovilizarlo, deben anclarse las
La técnica empleada es la misma que la El área se delimita haciendo pri- suturas en el periostio o en la encía ad-
que se aplica tradicionalmente en dien- mero una incisión horizontal a nivel herida adyacente. Se deben realizar su-
tes, se explica la técnica quirúrgica pro- de la porción cervical del diente (Fig. ficientes puntos de sutura para asegu-
puesta por Han y cols. para implantes, 2). Después se efectúan dos incisiones rar una adaptación estrecha del injerto
con un caso clínico en el que se trata verticales que se extienden desde la sobre el lecho receptor de tejido conec-
una recesión vestibular en un diente. incisión horizontal hasta un nivel tivo y sobre la superficie radicular. An-
Así mismo, se presentan cinco casos aproximado de 4-5 mm por apical de tes de aplicar un apósito de cemento
clínicos en los que se aplicó dicha téc- la recesión. Se hace una incisión ho- periodontal se ejerce presión sobre el
nica en pacientes, rehabilitados con rizontal que conecte las dos incisiones injerto durante unos minutos, para eli-
implantes, y que referían sintomatolo- verticales en su terminación apical. A minar la sangre que quede entre el in-
gía clínica. partir de una incisión intracrevicular, jerto y el lecho receptor.
Caso clínico 2
Paciente de 40 años, no fumadora, con
S E R I E
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C A S O S
13 14
15
Así pues, el objetivo de nuestro te se realizó la técnica de injerto pala- Caso clínico 4
procedimiento resolver la sintomato- tino epitelizado propuesta por Han y Paciente de 54 años, no fumador, con
logía del paciente, conseguir una ade- col (Fig. 17), aumentando el grosor de buen estado general y problema muco-
cuada banda de mucosa queratinizada la mucosa periimplantaria, desplazan- so periimplantario en zona de 45 y 46.
periimplantaria y estabilizar los tejidos do hacia apical la línea mucogingival, El paciente era portador de una prótesis
periimplantarios. De la misma forma desapareciendo así el disconfort del pa- metal-cerámica implantosoportada so-
que en los casos expuestos previamen- ciente (Fig. 18). bre tres implantes (Straumann Estándar
16 17 18
Fig. 16 Paciente de 60 años, con mucositis periimplantaria alrededor de los implantes colocados en posición de 21, 22 y 23.
Fig. 18 Resultado clínico tras el tratamiento, donde vemos aumento del grosor de mucosa periimplantaria.
19
20 21 22
Se realizó el mismo tratamiento vis- utilizan implantes de superficie lisa Actualmente la literatura nos dice
S E R I E
to en los casos anteriores (Figs. 24 y (Block y Kent 1990; Kirsch y Acker- que no es necesario un mínimo de mu-
25), injerto palatino epitelizado consi- mann 1989; Deporter y cols. 1988; Za- cosa queratinizada para mantener la sa-
guiendo así nuestro objetivo (Figs. 26 blotsky 1992; Warrer y cols. 1995). Por lud de los tejidos periimplantarios y
y 27). otro lado, los estudios que se cuestionan que por tanto la intervención quirúr-
la necesidad de mucosa queratinizada gica para aumentar dicho tejido no
D E
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
periimplantiria, solo tratan implantes está justificada a menos que el pacien-
de superficie rugosa (Wennström 1994; te presente signos de inflamación per-
C A S O S
La necesidad de mucosa queratinizada Strub 1991; Adell y cols. 1986). sistente, molestias al cepillado o mal
e insertada alrededor de los implantes Aunque la presencia de mucosa que- control de placa. En estos casos, el in-
dentales ha sido un tema muy contro- ratinizada o insertada no es un factor crí- jerto palatino epitelizado es un proce-
vertido y aún permanece sin resolver. tico en la reducción de la perdida ósea dimiento quirúrgico que ha demostra-
Curiosamente en los estudios que se anual, parece que esto supone una ven- do ser predecible para aumentar el
propone un mínimo de mucosa quera- taja en la reducción de la inflamación espesor de mucosa queratinizada pe-
tinizada alrededor de los implantes se gingival y en la acumulación de placa. riimplantaria.
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Tratamientos
periodontales en
molares con furcas
expuestas: ¿pasado
o presente?: revisión
a la luz de la evidencia
científica
REVISIÓN
Palabras clave: lesiones de furcación, tratamiento periodontal, técnicas resectivas, técnicas regenerativas, implantes dentales
El objetivo de este trabajo es establecer el plan de tratamiento más adecuado ante situaciones de molares con furcas expuestas. Se revisan las técnicas tradicionales para el
Ziortza Ugarte tratamiento, sus indicaciones y contraindicaciones y se observan los resultados obtenidos en los distintos estudios.
Estudiante de Postgrado de Periodoncia Como se desprende de la revisión bibliográfica realizada, podemos concluir que si bien la tasa de supervivencia para los implantes dentales, como alternativa a los
de la Universidad del País Vasco-Euskal tratamientos convencionales, es alta a largo plazo, no se debe obviar que las técnicas resectivas en molares con lesiones de furcación tienen un buen pronóstico a corto y
Herriko Unibertsitatea (UPV-EHU) medio plazo.
La elección de un tipo de tratamiento u otro dependerá de la habilidad del operador y de las necesidades y deseos de cada paciente, una vez expuestas las diversas
Juan Ramón Velilla alternativas.
Postgrado de Periodoncia por la UPV-EHU
R E V I S I Ó N
el maxilar superior y la mandíbula toda la anchura del complejo
(Ross y Thompson 1980). furcal.
El examen clínico detecta la presen- 3) Grado III: Pérdida de inserción
cia de afectación de furca únicamente periodontal de tipo horizontal que
en el 3 % de los molares maxilares y en afecta a toda la anchura del
el 9 % de los mandibulares. La combi- complejo furcal.
nación del examen clínico y radiográ-
fico aumenta la capacidad de detección TRATAMIENTOS PERIODONTALES
de las mismas a un 65 % en molares ma- DE LAS LESIONES DE FURCACIÓN
xilares y del 23 % en molares mandibu- Fig. 4 Cepillo interproximal a
lares (Ross y Thompson 1980). RASPADO Y ALISADO RADICULAR
nivel de una lesión de furcación
tipo III, tras realizarse una
Una vez establecido el grado de le- tunelización.
sión de la furca hemos de realizar el El raspado y alisado radicular de las su-
diagnóstico diferencial que nos permi- perficies en la entrada de la furcación
ta confirmar el origen de la misma. de las lesiones de grado I, en la mayo-
Así, además del origen periodontal de ría de los casos, conseguirá controlar tronco radicular corto, ángulo amplio
estas lesiones, podemos encontrarnos la lesión inflamatoria. La curación re- de separación y larga divergencia de las
con situaciones de origen pulpar, en las establecerá una anatomía gingival raíces (Lindhe 2005). Con el fin de ase-
que la ausencia de vitalidad determi- normal con el tejido blando bien gurar el acceso al túnel por parte del pa-
nará la necesidad de un tratamiento de adaptado a las paredes de los tejidos ciente y así poder obtener un adecua-
conductos para su solución; lesiones de duros de la entrada de la furca (Lind- do control de placa postoperatorio, el
origen oclusal, en las que una adapta- he 2005). tronco radicular no debería ser mayor
ción del periodonto a las fuerzas gene- a 1/3 de la longitud radicular, aproxi-
radas se traduce en una radiolucidez en PLASTIA DE LA FURCACIÓN madamente 4 mm (Paolantonio y cols.
la zona, así como una mayor movilidad Es una modalidad de tratamiento re- 1998). Esto se cumple en la gran mayo-
dentaria; sin embargo, no existe pérdi- sectivo que tiene como objetivo la eli- ría de los primeros molares mandibula-
da de inserción, con lo que la profun- minación del defecto interradicular. res, pero sólo el 40 % de los molares
didad de sondaje es normal. Además Se utiliza principalmente en lesiones maxilares y segundos molares mandi-
de las anteriores, pueden darse situa- de furcación vestibulares y linguales bulares (Hou y Tsai 1997; Kerns y cols.
ciones de origen endoperiodontal, en de grado I y II. Este tipo de procedi- 1999). También debemos de tener en
las que se produce una combinación miento se basa en la realización de un cuenta las dimensiones de la entrada a
entre una lesión pulpar y otra perio- colgajo de espesor completo en el área la furca, este factor favorece a los pri-
dontal. El tratamiento adecuado sería interradicular para, una vez elimina- meros molares inferiores con entradas
realizar la terapia endodóncica de la do el tejido de granulación, realizan mayores a 0,5 mm, mientras que el 62
pieza, una vez confirmada la ausencia una odontoplastia en la zona con el % de los molares maxilares presentan
de vitalidad, para a continuación pro- objeto de eliminar o reducir el com- entradas de menos de 0,5 mm (Chiu y
ceder a un correcto tratamiento perio- ponente horizontal del defecto. Ade- cols. 1991).
dontal (Lindhe 2005). más, se remodela la cresta alveolar El procedimiento de tunelización
Las lesiones de origen estrictamen- para disminuir la dimensión vestíbu- consiste en la apertura de un colgajo de
te periodontal, por el contrario, son lo-lingual del defecto óseo. En este espesor total y la ampliación de la en-
aquellas en las que se produce pérdida tipo de tratamientos hemos de tener trada a la furca mediante odontoplas-
de inserción en el área de la furca como especial cuidado de no eliminar exce- tia y osteoplastia, dejando un perfil
consecuencia de la progresión de dicha sivo tejido dentario en dientes vitales, óseo plano. La reposición de los colga-
pérdida (Lindhe 2005). Confirmada la ya que, a pesar de que se producirá una jos se realiza apicalmente, al nivel del
etiología periodontal de la lesión, para aposición de cemento, la pulpa en esta hueso interradicular, todo ello dirigido
establecer el plan de tratamiento debe- zona se localiza a una distancia de en- a permitir el acceso de los dispositivos
mos precisar la gravedad de la misma. tre 1,6 y 4,2 mm (Sterret y Pelletier de limpieza (Fig. 4) que se utilizan para
Para ello utilizamos la clasificación de 1996). el adecuado control de placa (Lindhe
este tipo de lesiones establecida por 2005).
Hamp y cols. (1975): TUNELIZACIÓN Esta técnica ha sido cuestionada
La tunelización es una técnica emple- por la aparición de complicaciones de-
1) Grado I: Pérdida de inserción ada fundamentalmente en el trata- rivadas del tratamiento, como son el
periodontal de tipo horizontal miento de lesiones de furcación de gra- aumento en la incidencia de caries ra-
menor de 3 mm. do III. Está indicada en molares con diculares en la zona expuesta (Hamp y
Tabla 1 Separación de raíces, radectomía y hemisección. Indicaciones cols. 1975) y la aparición de problemas
1. Pérdida de hueso vertical severa que afecta a una raíz de un molar mandibular.
endodónticos debido a la exposición de
canales radiculares accesorios que po-
R E V I S I Ó N
2. Pérdida de hueso que afecta a una o dos raíces vestibulares o a la raíz palatina drían conectar el periodonto con el te-
de un molar maxilar.
jido pulpar, si bien, los estudios histo-
3. Raíces expuestas que al estar muy próximas no permiten un correcto lógicos Langeland y colaboradores en
mantenimiento de las furcas. 1974 demostraron que la mera presen-
cia de un conducto accesorio no impli-
4. Exposición furcal con caries o pérdida tal de hueso interradicular que no
permitiría un tratamiento adecuado, o cuando por lo menos una raíz se ca la aparición de necrosis. Estos resul-
considera que esta en buenas condiciones. tados histológicos coinciden con los
obtenidos en la observación clínica por
5. Dientes multirradiculares que han sufrido fractura de alguna de sus raíces y las
restantes presentan buen soporte periodontal. Helldén y cols. (1989) y Little y cols.
(1995), que afirmaban que los proble-
6. Raíces de dientes no vitales que no pueden ser tratados por métodos mas endondónticos no eran las compli-
convencionales por presencia de conductos laterales, calcificaciones parciales,
pulplitos, perforaciones o rotura de instrumentos en su interior.
caciones más comunes en molares tu-
nelizados. Algunos autores han
informado de cierto grado de pérdida
de inserción, principalmente en la pa-
Tabla 2 Separación de raíces, radectomía y hemisección. Complicaciones red palatina/lingual de dientes tuneli-
1. Lesiones periapicales (33 %). zados relacionada con la mayor canti-
dad de hueso que rodea la furca en la
2. Caries radiculares (25 %). pared palatina y lingual, lo que signifi-
3. Recurrencia de la enfermedad periodontal (25 %). ca que hay que sacrificar mayor canti-
dad de tejido óseo al realizar la cirugía
4. Fractura de la raíz (17 %). (Little y cols. 1995).
SEPARACIÓN DE RAÍCES,
RADECTOMÍA Y HEMISECCIÓN:
R E V I S I Ó N
La presencia de un tronco radicu-
lar (suficiente soporte periodontal re-
manente) y raíces divergentes facili-
dad para la realización del
tratamiento. Por contra, los conos ra-
diculares cortos y pequeños, después 9 10
de la separación, tienden a aumentar
su movilidad y además poseen conduc-
tos radiculares estrechos, difíciles de
instrumentar. En los molares maxila-
res es habitual eliminar la raíz disto-
vestibular, que posee menor soporte
periodontal, y conservar las dos res-
tantes, o eliminar dos conservando ge-
neralmente la raíz palatina que resul- 11 12
ta más fácil de instrumentar y no
Fig. 9 Imagen intraquirúrgica de un paciente con una forma agresiva
presenta la concavidad distal de la raíz de periodontitis. Obsérvese la presencia de lesiones óseas verticales.
mesio-vestibular (Figs. 5-8). En los
Fig. 10 La radiografía muestra los defectos óseos verticales y la lesión
molares inferiores se pueden separar de furcación en el primer molar.
dos raíces conservándolas o eliminan-
do una de ellas. En caso de duda, es Fig. 11 Imagen clínica tras la adaptación de dos membranas reabsorvibles
para el tratamiento de los defectos óseos y de furcación mediante la aplicación
conveniente elegir mantener la raíz de Regeneración Tisular Guiada.
distal, ya que posee una sección trans-
versal ovalada y un único y amplio Fig. 12 Imagen radiológica tomada un año después de realizar el
procedimiento quirúrgico. Obsérvese el relleno óseo obtenido en el defecto
conducto radicular. óseo y la mejoría de la situación del defecto de furcación.
Los resultados obtenidos por los
distintos autores indican una tasa de su-
pervivencia de entre un 93 % y un 62
% a los 10 años (Langer y cols. 1981; Algunos autores han intentado de- en dientes multiradiculares con furcas
Buhler 1988; Carnevale y cols. 1991; mostrar la eficacia de este tipo de téc- afectadas, una vez confirmado que la
Carnevale y cols. 1998). Todo ello, gra- nicas en molares superiores (Rosen y pérdida de inserción es tan extensa que
cias al mantenimiento de una correcta Marks 1997) (Figs. 9-12), sin embargo no es posible mantenerlo (Figs. 13 y
morfología de los tejidos blandos y a un es mayoritario el número de estudios 14). Mas aún, la extracción debe con-
exquisito control de placa por parte del que demuestran que en los molares su- siderarse una alternativa de tratamien-
paciente y del equipo periodontal. Las periores y en lesiones de clase III en to cuando el mantenimiento del dien-
complicaciones más habitualmente molares inferiores las técnicas regene- te afectado no mejora el plan de
descritas para esta técnica se las mues- rativas no ofrecen resultados predeci- tratamiento o cuando la conservación
tran en la Tabla 2. bles (Pontoriero y cols. 1987, 1989; del diente, debido a lesiones endodón-
Pontoriero y Lindhe 1995 a, b). cicas o cariosas, representa un factor de
TÉCNICAS REGENERATIVAS Dentro de estas técnicas existe con- riesgo para el pronóstico general a lar-
Nos referimos en esta apartado al uso troversia en cuanto al uso de membra- go plazo de nuestros pacientes.
de la Regeneración Tisular Guiada me- nas reabsorbibles o no reabsorbibles, si No podemos cuestionar que la apa-
diante la utilización de membranas. Los bien diversos estudios demuestran que rición de los implantes, su predictibili-
distintos estudios indican buenos resul- las membranas reabsorbibles obtienen dad y su aceptación por parte de los pa-
tados en molares inferiores con furcas similares resultados y evitan la necesi- cientes han modificado las opciones de
de clase II (Pontoriero y cols. 1987, dad de una segunda cirugía. (Gottlow tratamiento tanto periodontales como
1989; Gantes y cols. 1988; Leckovic y 1993; Caffese y cols. 1994; Laurell y prostodóncicas.
cols. 1989, 1991; Wang y cols. 1994). cols. 1994; Hugoson y cols. 1995; Ga- La literatura científica ha descrito
Así mismo, se ha informado que si el rret y cols. 1996). el gran éxito de los implantes para la
defecto es mayor de 3 mm o si está re- reposición de las piezas perdidas. Los
lacionado con una pérdida ósea circun- EXTRACCIÓN Y COLOCACIÓN DE UN resultados obtenidos por los distintos
ferencial, una ganancia de inserción IMPLANTE autores superan tasas de supervivencia
completa será difícil de obtener (Pon- La extracción dental debe ser conside- del 94 %, para implantes colocados en
toriero y cols. 1992). rada como una posibilidad terapéutica pacientes parcialmente desdentados y
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Toma de decisiones
Stefan Fickl
Institute for Periodontics
en periodoncia:
caso clínico
and Implantology (IPI)
CASO CLÍNICO
Munich, Alemania
Department of Periodontology
and Implant Dentistry
New York University
College of Dentistry
Stefan Fickl, Wolfgang Bolz, Tobias Thalmair, Otto Zuhr,
New York, Estados Unidos Hannes Wachtel, Markus B. Hürzeler
Wolfgang Bolz
Institute for Periodontics Palabras clave: toma de decisiones, implantes, tratamiento periodontal, determinación del riesgo
and Implantology (IPI)
Munich, Alemania La estabilidad periodontal a largo plazo es uno de los aspectos más importantes del tratamiento periodontal. Además del tratamiento periodontal activo y una meticulosa fase
de mantenimiento, es de gran importancia la determinación inicial del riesgo de cada diente. Sin embargo, la literatura ofrece escasas recomendaciones y guías de actuación
Tobias Thalmair en relación con la determinación del riesgo periodontal. Concretamente, se espera estabilidad periodontal cuando los dientes deben utilizarse como pilares para una nueva
Institute for Periodontics reconstrucción protésica. Este artículo discute tanto las consideraciones clínicas referentes a la determinación del riesgo periodontal como a los factores que ayudan en el
and Implantology (IPI) proceso de toma de decisiones.
Munich, Alemania
Otto Zuhr
Institute for Periodontics
and Implantology (IPI) INTRODUCCION El caso que se presenta muestra
Munich, Alemania ejemplos de los factores de los cuales
Hannes Wachtel El fundamento del éxito de cualquier depende la toma de decisiones clínicas,
Clinic and Polyclinic for tratamiento periodontal se basa en un que son valoradas crítica y científica-
Dentistry, Stomatology and correcto pronóstico de los dientes. Sin mente.
Orthodontics, Department
embargo, la toma de decisiones que lle-
of Restorative Dentistry,
Campus Benjamin Franklin, va al pronóstico individual depende de DATOS GENERALES
Charite-Universitätsmedizin numerosas variables y factores. Basán-
Berlin, Alemania dose en la serie de tests de McGuire y El tratamiento de la paciente (nacida
Institute for Periodontics
Nunn (1-4) la Fig. 1 muestra una clasi- el 14-04-1968) empezó el 24-05-2005
and Implantology (IPI) ficación en tres niveles de los dientes y finalizó el 27-02-2007, iniciándose
Munich, Alemania desde un punto de vista periodontal. En entonces la fase de mantenimiento.
estos estudios, un elevado porcentaje de
Markus B. Hürzeler ANAMNESIS
Polyclinic for Restorative dientes a los cuales se les dio un buen
Dentistry and Periodontics, pronóstico individual fueron manteni- General
Albert-Ludwigs University, dos por periodos de entre 5 y 8 años (1- Al empezar el tratamiento, la pacien-
Freiburg im Breisgau, Alemania
4). Además, la determinación del pro- te, de 37 años, tenía buena salud y no
Clinical Assistant Professor, nóstico distinguió entre dientes tomaba medicación. Era alérgica a la
University of Texas, uniradiculares y multiradiculares. Estu- penicilina y con una sensibilidad au-
Dental Branch, Houston, dios a largo plazo han demostrado que mentada frente a la adrenalina. La
Texas, Estados Unidos
los molares (especialmente los que pre- anamnesis familiar no era relevante, y
Institute for Periodontics sentan furcaciones) demuestran los pe- la paciente estaba expuesta a un eleva-
and Implantology (IPI) ores porcentajes de supervivencia (5-7). do stress profesional.
Munich, Alemania En este contexto, un importante
Correspondencia a: factor de decisión es determinar si un Dental
Stefan Fickl diente puede utilizarse o no como pilar La paciente acudió a su dentista en oc-
Institute for Periodontics protésico. Un diente con pronóstico tubre de 2005 debido a un problema
and Implantology (IPI)
dudoso no debe utilizarse como pilar, periodontal. La paciente señaló que se
Rosenkavalierplatz 18,
81925 Munich, Alemania porque si se pierde, se pierde también habían extraído algunos dientes un año
e-mail: fickl@ipi-muc.de la prótesis. antes debido a su movilidad. A causa
Fig. 1 (izqda)
C L Í N I C O
(derecha)
Pronóstico y evaluación del riesgo.
Bueno
■ <25 % de pérdida de soporte
■ buena higiene oral
C A S O
Sin esperanza
■ más del 80 % de pérdida de soporte
de una caries extensa el diente 46 fue didas dentarias correspondían a los gular, existiendo cálculo, placa y san-
tratado con un composite antes de ini- dientes 27, 28, 37, 38 y 48. Los dientes grado al sondaje. La encía mostraba evi-
ciar el tratamiento periodontal. 16, 15, 13, 24, 25 26 y 45 no reacciona- dencia de inflamación marginal.
ron al test del frío con CO2. El diente Las profundidades de sondaje varia-
HALLAZGOS 17 mostraba un onlay de oro y los dien- ban entre 3 y 12 mm. Los dientes 16 y
Extraoral tes 16, 15 13, 45 y 47 tenían coronas de 17 (mesial, medial y distal) mostraban
La exploración extraoral fue normal. metal cerámica incorrectas. Los dientes una lesión de la furca de tipo II, de
24, 25 y 26 se habían restaurado con co- acuerdo con la clasificación de Hamp
Intraoral ronas de metal cerámica. Los dientes y cols. (8). Los dientes 36 y 47 (medial)
La inspección de mucosa oral, labios 12, 11, 23, 36 y 35 tenían obturaciones tenían una lesión de la furcación de
suelo de la boca y lengua no mostraron de composite. Los dientes 16, 25 y 47 tipo I. No existían movilidades denta-
cambios patológicos. La saliva era nor- mostraban cavidades de acceso selladas rias patológicas. El nivel de inserción
mal en cantidad y consistencia. Las per- con composite. La higiene oral era re- al sondaje (PAL) estaba entre 4 y 13
2 3 4
5 6 7
Fig. 2 Vista anterior de la situación inicial (maxilar). Fig. 5 Vista oclusal (mandíbula).
Fig. 3 Vista anterior de la situación inicial (mandíbula). Fig. 6 Vista lateral derecha.
C A S O
ración inicial, mientras que la Fig. 8
muestra los hallazgos periodontales.
Funcional
C L Í N I C O
La paciente no señalaba molestias a la
presión, ni ningún otro dolor a nivel de
las articulaciones o los músculos de la
masticación. Fig. 8 Estado periodontal inicial.
Radiografías
La paciente aportó una ortopantomo-
grafía reciente (Fig. 9). Además, el 7-
12-2005 se le habían realizado radio-
grafías intraorales (Figs. 10 a 13). Los
dientes 16, 15, 13, 24, 25, 26 y 45 mos-
traban tratamiento de canales, con le-
siones apicales en 16 y 15. Una pérdi-
da de hueso generalizada con
componente vertical se podía observar 9 10
en los dientes 15, 16, 17 y 36. La pér-
dida ósea variaba entre 2 y 12 mm, me-
dida como la distancia entre la línea
amelocementaria o el margen de la res-
tauración y la cresta alveolar. En la
zona del 18 se observó una muela del
juicio rudimentaria.
11 12
Hallazgos microbiológicos
Sospechándose una forma grave de pe- Fig. 9 Ortopantomografía inicial.
riodontitis, se llevó a cabo un test diag-
Fig. 10 Radiografía de la zona 17 a 15.
nóstico microbiológico de la placa sub-
gingival, utilizando el test micro-IDent Fig. 11 Radiografía de la zona 26 a 25.
(Hain Lifescience, Neren, Germany)
Fig. 12 Radiografía de la zona 47 a 45.
(Fig. 14), tomándose la muestra bacte-
riana de la bolsa más profunda de cada Fig. 13 Radiografía de la zona 36.
cuadrante (9). La concentración mi- 13
crobiana de Porphyromonas gingivalis,
Tannerella forsythensis y Treponema den-
ticola estaban muy aumentados (< 106
célula/ ml), y también fue posible de-
tectar Actinobacillus actinomycetemco-
Ensayo genético molecular para el análisis combinado de 5 patógenos periodontales.
mitans (< 103 células/ ml).
PLAN DE TRATAMIENTO
bueno dudoso sin esperanza ■ Tratamiento antiinfeccioso
C L Í N I C O
■ Reevaluación
■ Exodoncia de 18 a 15
■ Colocación de implantes en 17 a
15
■ Cirugía periodontal 35 y 36
Reevaluación II
C A S O
■
■ 2ª cirugía de implantes
■ Tratamiento protésico definitivo
■ Mantenimiento periodontal
TRANSCURSO DEL
Fig. 15 Determinación pronóstica de los dientes.
TRATAMIENTO
Tratamiento antiinfeccioso
Se llevó a cabo desde el 27-06-05 al 28-
vado estrés profesional son los factores del 16. Particularmente tras medidas 08-05. Se inició con una sesión de in-
de riesgo propios de este caso. Además, de aumento óseo, la colocación de tres formación al paciente, enseñanza de la
teniendo en cuenta la edad de la pa- implantes en interlock en la zona pos- higiene oral, motivación y eliminación
ciente y lo avanzado del caso, hay que terior contribuyen a un buen pronós- de placa y cálculo supragingivales. Se
asumir que tenía una sensibilidad au- tico a largo plazo. Todos estos extre- recomendó a la paciente un cepillo de
mentada a las bacterias periodontopa- mos llevaron a la decisión de extraer dientes ultrasónico (Philips Sonicare®,
tógenas, y, en consecuencia, una inmu- 18 a 15 y reemplazarlos con una re- Philips), el método de cepillado ade-
nocompetencia alterada. construcción implanto-soportada. cuado y el uso de los cepillos interden-
Los dientes 24 a 26 tenían un pro- tales adaptados a los diferentes espacios
PRONÓSTICO nóstico cuestionable debido a su pro- interproximales. Una semana después
El pronóstico de los dientes (Fig. 15) se fundidad de sondaje. La lesión de la de esta sesión inicial se llevó a cabo,
llevó a cabo basándose en considera- furcación de 26 empeoraba su pronós- bajo anestesia local, un curetage sub-
ciones individuales del caso y con la tico, aunque este no era desesperado, gingival de las bolsas, en dos sesiones
ayuda de la determinación del riesgo de debido a que no era necesario en este consecutivas (desinfección completa
McGuire y Nunn (1-4). molar rehacer la endodoncia ni una re- de la boca, de acuerdo con Quirynen y
El pronóstico para los dientes 18-15 construcción protésica. Como no ha- cols. (11)). Además, las bolsas se irri-
se determinó como sin esperanza; ade- bía que gastarse nada en este diente, garon con una solución de clorhexidi-
más de la gran destrucción ósea y la pa- podía mantenerse, incluso a largo pla- na al 0,2 % y se dijo a la paciente que
tología periodontal, la reconstrucción zo, a pesar de su pronóstico y, en todo se limpiase los dientes con un gel de
protésica del 16 era incorrecta. Estos caso, si fuera necesario, podía llevarse clorhexidina al 0,12 %.
factores llevaron a la conclusión de que a cabo alguna medida en un momento Teniendo en cuenta el perfil micro-
el coste de la reconstrucción sería de- dado. Los dientes 35, 36 y 45 a 47 te- biológico, y siguiendo a van Winkel-
masiado elevado tratándose de un dien- nían un pronóstico dudoso, debido a hoff y cols. (12), se recetó a la pacien-
te con un pronóstico cuestionable. De- las lesiones de furcación y a las bolsas te 3 x 500 mg de amoxicilina y 3 x 400
bido a la lesión de la furca y a la pérdida existentes. mg de metronidazol, durante 7 días.
ósea hasta el ápice, el diente 17 no se
Representación esquemática de los índices de placa y sangrado
podía utilizar como pilar protésico. El
100
diente número 15, además de una gran
PI=índice de placa
pérdida ósea y de la presencia de bol- PBI=índice de sangrado papilar
sas, mostraba también una reconstruc- 75
ción mediante pin con muy poca es-
Índice [%]
C A S O
reevaluación.
C L Í N I C O
Fig. 19 Vista oclusal del maxilar en la
reevaluación.
19 20
21 22
Reevaluación
Se llevó a cabo ocho semanas des-
pués de la fase antiinfecciosa. Los sig-
nos clínicos de inflamación perio-
dontal mejoraron claramente (Figs.
17 a 22). Con el tratamiento mecá-
nico se redujo la profundidad de son-
daje, aunque se mantenían algunos
puntos con bolsas mayores de 6 mm,
y sangrado al sondaje (Fig. 23). De-
bido a estos hallazgos, se extrajeron Fig. 24 Nuevo estado periodontal 8 semanas después de la extracción dentaria.
los dientes 18 a 15 y se volvieron a
tratar mecánicamente las zonas toda-
vía activas.
sondaje. Ocho semanas después, se radiográficos de un contorno óseo de-
Extracción de 18 a 15 evaluó el estado periodontal. Las bol- fectuoso se decidió actuar quirúrgica-
Estos dientes se extrajeron sin compli- sas habían mejorado, aunque aún ha- mente con microcolgajos de acceso y
caciones, y se volvieron a instrumen- bía profundidades de sondaje > 6 mm tratar conservadoramente los dientes
tar las zonas con bolsas y sangrado al en 26, 36 y 46. Debido a los hallazgos 26 y 47 (Fig. 24).
26 27 28
29 30 31
C A S O
C L Í N I C O
33 34
Fig. 34 Radiografía del molar 36, 6 meses después del tratamiento. Se puede
observar el relleno del defecto.
35
La paciente fue después visitada talmente libre de inflamación, mien- individualizadas utilizando un méto-
cada semana durante cuatro, para pro- tras que la zona intervenida presenta- do de impresión abierto y un mate-
ceder a un pulido supragingival con gel ba surcos de 4mm. El relleno del defec- rial polieter (Permadyne Garant 2:1,
de clorhexidina, de acuerdo con las re- to se monitorizó radiográficamente 3M ESPE). La prótesis se conectó di-
comendaciones (modificadas) de Heitz (Fig. 34). rectamente sobre los implantes, me-
y cols. (18). diante tornillos, sellándose con boli-
Exposición de los implantes tas de espuma y Fermit ® (Ivoclar
Colocación de implantes en las zonas Seis meses después de haberse coloca- Vivadent)
17 a15 do, se expusieron los implantes. Para La prótesis provisional fue coloca-
Seis meses después de la elevación del aumentar la cantidad de tejido quera- da en infraoclusion, y luego progresi-
seno se colocaron tres implantes Osse- tinizado, la encía palatina se desplazó vamente cargada, utilizando modela-
otite® (3i Implant Innovations) con es- hacia vestibular. Finalmente se suturó do intraoral de las superficies de
tabilidad primaria. Los implantes fueron la herida (Fig. 35) contacto con un composite híbrido de
tapados con tornillos de cierre y la heri- partícula fina (Tetric Ceram®, Ivoclar
da se cerró con macrosutura. La Fig. 33 Prótesis superior implanto-soportada Vivadent)
muestra la radiografía post-operatoria. provisional
Cuatro semanas después del segundo Prótesis definitiva
Reevaluación II tiempo, se tomaron impresiones para Dos meses después de colocar la próte-
Doce meses después del tratamiento realizar una prótesis provisional so- sis provisional se realizó la definitiva.
periodontal, la zona operada estaba to- bre los implantes. Se usaron cubetas También se llevó a cabo la prótesis de
los dientes 13, 47, 46 y 45. Previamen-
te se revisaron las endodoncias de 13
y 45.
La prótesis sobre implantes incluyó
pilares de titanio atornillados y coro-
nas de cerámica en interlock en base de
óxido de zirconio. Después de colocar
los pilares con ayuda de una herramien-
ta plástica preparada por el técnico de
laboratorio, se fijaron con un torque de
37 20 Ncm.
Las aberturas a nivel de los tornillos
Fig. 36 Prótesis definitiva implanto- se cerraron con gutapercha y composi-
soportada.
te de resina híbrida de grano fino,
Fig. 37 Vista lateral de la prótesis mientras que la prótesis se fijó con un
36 definitiva implanto-soportada. cemento temporal (TempBond, Kerr)
(Figs. 36 y 37).
EPICRISIS Y PRONÓSTICO
90
Este caso demuestra el tratamiento de
PI=índice de placa
la periodontitis avanzada. Es especial- PBI=índice de sangrado papilar
mente interesante señalar como se 68
tomó la decisión de extraer e implan-
Índice [%]
concepto (platform switching) parece ca- Los hallazgos finales muestran que buena higiene oral, puede esperarse
paz de evitar cualquier defecto «en cu- el tratamiento combinado periodontal buen pronóstico a largo plazo y el man-
C A S O
chara» una vez conectado el pilar (28). e implantológico debe considerarse un tenimiento de los dientes. El pronósti-
No se dispone de radiografías prospec- éxito, de manera que con buena cola- co de 26 todavía es dudoso, pero pue-
tivas a largo plazo. boración por parte de la paciente y de tratarse si la situación empeora.
C L Í N I C O
40 41 42
43 44 45
NORMAS DE PUBLICACIÓN
Periodoncia y Osteointegración es la revista oficial de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA).
El objetivo de la revista Periodoncia y Osteointegración es actuar como plataforma para el intercambio de información
clínica y científica relativa a la periodoncia, la osteointegración y otras materias odontológicas relacionadas con ellas, es-
tando dirigida, principalmente, hacia el profesional clínico.
Los artículos remitidos a esta revista deberán ser originales, no publicados ni enviados a otra publicación, siendo los
autores los únicos responsables de las afirmaciones sostenidas en ellos.
Los autores seguirán de forma estricta las directrices expuestas a continuación. Los artículos que no las sigan serán de-
vueltos para corrección, antes de valorar su publicación.
Tipos de artículos
1. Artículos originales, que aporten nuevos datos clínicos o de investigación básica relacionada con la especialidad. Traba-
jos adecuadamente resumidos pueden ser publicados con rapidez como comunicaciones cortas.
2. Artículos de revisión, que supongan la actualización de un tema concreto, desde un punto de vista crítico científico y ob-
jetivo. En esta categoría también se aceptarán guías terapéuticas, resúmenes anuales de la literatura, resúmenes de consen-
sos y actualizaciones médicas de temas relacionados directamente o indirectamente con la periodoncia y la osteointegración. Ha-
bitualmente las revisiones serán encargadas por el director o algún director asociado, a personas especializadas en el
campo de interés. Las revisiones no deberán exceder de 5000 palabras, 100 citas bibliográficas y 6 tablas o figuras. Se
recomienda a los autores interesados en colaborar en este apartado, que contacten con el director para consultar la ade-
cuación y originalidad del tema propuesta.
3. Análisis de artículos científicos. Los artículos a criticar serán elegidos por el director o por los directores asociados y serán
asignados a personas que puedan estar interesadas en prestar su colaboración.
4. Casos clínicos. Podrán ser seleccionados para su publicación casos clínicos poco frecuentes o casos que aporten nuevos
conceptos terapéuticos. Deben contener documentación clínica e iconográfica completa preoperatoria, postoperatoria
y del seguimiento, incluyendo de forma clara el tratamiento realizado. El texto debe ser conciso –menos de seis páginas
y las citas bibliográficas se limitarán a las estrictamente necesarias–. Resultarán especialmente interesantes secuencias
fotográficas de tratamientos multidisciplinarios de casos complejos o técnicas quirúrgicas. El director o director asocia-
do orientará al autor sobre la selección y calidad del material fotográfico.
5. Editoriales por invitación, que ofrezcan comentarios o críticas educadas sobre artículos de la revista u otros temas de in-
terés para el lector. Deben ser escuetos, centrados en un tema específico y estar firmadas. Las citas bibliográficas, si exis-
ten, aparecerán en el texto entre paréntesis. En caso de que se viertan comentarios sobre un artículo publicado en esta
revista, el autor del mismo dispondrá de la oportunidad de respuesta.
6. Artículos seleccionados traducidos de la literatura internacional publicados en determinadas revistas del fondo odontológi-
co de la editorial Quintessence, cuando el interés de los mismos así lo justifique.
7. Entrevistas y coloquios: Las entrevistas se realizarán a personas relevantes que puedan aportar su punto de vista personal
a temas científicos actuales. Los coloquios se establecerán en relación con un tema específico, potencialmente contro-
vertido, con el objetivo de recoger la opinión contrastada de varios expertos en el tema a tratar.
Autores
Únicamente serán autores aquellos individuos que por su contribución significativa al desarrollo del artículo, y en calidad de
tales, puedan tomar pública responsabilidad de su contenido. Su número no será, de acuerdo a los criterios de la AMA,
superior a 6 (Barclay WR, Southgate MT, Mayo RW.(1981) Manual for Authors and Editors: Editorial Style and Manuscript
Preparation. Lange Medical Publication. Los Altos, California.). Se entiende por contribución significativa cumplir las tres
condiciones que se especifican a continuación: 1) participar en el desarrollo del concepto y diseño del trabajo, o el análi-
sis y la interpretación de los datos; 2) contribuir a la redacción o revisión fundamental del artículo; 3) colaborar en la su-
pervisión final de la versión que será publicada. La simple participación en la adquisición de fondos o en la recopilación
de datos no justifica la autoría del trabajo, no siendo tampoco suficiente la supervisión general del grupo responsable de
la investigación. Los directores pueden requerir a los autores que justifiquen su calidad de tales. A las personas que hayan
contribuido en menor medida les será agradecida su colaboración en el apartado de agradecimientos y sus nombres serán
mencionados en página independiente. La dirección de correo electrónico de todos los autores deberá aparecer en la car-
P U B L I C A C I Ó N
electrónico revista@sepa.es incluyendo un archivo adjunto que contenga tanto el texto del manuscrito como las tablas
de este en un documento de Word. Las figuras deberán ser incluidas como archivos independientes siguiendo las indica-
ciones que se detallan a continuación.
Ejemplos:
1. Artículo en una revista:
Zabalegui J, Gil JA, Zabalegui B.(1990) Magnetic resonance imaging as an adjunctive diagnostic aid in patient
selection for endosseous implants: preliminary study. International Journal of Oral and Maxillofacial Implants 3,
283-287.
Cuando el autor es una sociedad o corporación:
FDI/OMS.(1986) Patrones cambiantes de salud bucodental e implicaciones para los recursos humanos dentales:
Parte primera. Informe de un grupo de trabajo formado por la Federación Dental Internacional y la Organización
Mundial de la Salud. Archivos en Odontoestomatología 2, 23-40.
2. Libros o monografías:
Autor personal:
Doménech JM, Riba MD.(1987)Una síntesis de los métodos estadísticos bivariantes. Barcelona: Herder.
Capítulo de un libro:
Barmes A. Prevalence of periodontal disease.(1984) En: Frandsen A, editor. Public Health Aspects of Periodontal
Disease. Chicago: Quintessence Books, págs. 21-32.
3. Publicación de una entidad o corporación:
Instituto Nacional de Estadística.(1986) Censo de la población de 1981. Resultados por Comunidades Autónomas.
Madrid: INE, Artes Gráficas.
4. Tesis Doctoral o Tesina de Licenciatura:
López Bermejo MA. (1988) Estudio y evaluación de la salud bucodentania de la comunidad de la Universidad
Complutense. Tesis Doctoral. Universidad Complutense de Madrid, Facultad de Medicina. Madrid.
Tablas: Se incluirán tras el texto principal, en hojas independientes, e iran numeradas según su orden de aparición en el
texto con números arábigos. Se emplearán para clarificar puntos importantes, no aceptándose la doble documentación
bajo la forma de tablas y figuras. Su localización aproximada en el texto puede ser indicada por una nota marginal entre
paréntesis. Los títulos o pies que las acompañen deberán explicar perfectamente el contenido de las mismas.
Figuras: Se incluirán en archivos individuales independientes del texto principal. Serán consideradas figuras todo tipo de foto-
grafías, gráficas o dibujos y su número estará reducido al mínimo necesario. Se les asignará un número arábigo, según el
orden de aparición en el texto, siendo identificadas por el término abreviado fig.(s), seguido del correspondiente guaris-
mo. Las leyendas de cada una deben ir mecanografiadas y numeradas en una hoja aparte tras el texto principal y las tablas.
Cada uno de los archivos individuales que contenga figuras, deberá ser nombrado con el término fig. y su correspondien-
te número. Las figuras se enviarán en formato digital y deberán contener una resolución mínima de 300 dpi. Estas deben
ser guardadas en formato TIFF, EPS o JPEG de mínima compresión (máxima calidad). No se admitirán imágenes inclui-
das en documentos de Word, Power Point, Excel o similar.
Alternativamente, se admitirán figuras en forma de diapositivas. Estas deberán remitirse a la dirección: Secretaría de
Redacción «Periodoncia y Osteointegración», Antonio López Aguado 4, bajo dcha. 28029 Madrid. En este caso, tanto la
carta de remisión como el archivo de Word que incluya el texto y las tablas se mandarán por correo electrónico, mientras
que las diapositivas se mandarán por correo convencional. Los autores deberán informar del envío de las diapositivas
en su carta de remisión. Si el artículo remitido es aceptado para su publicación, las diapositivas no serán devueltas a los
autores.
Para que las fotografías de personas puedan ser publicadas, deberá obtenerse una renuncia, a menos que las caras apa-
rezcan ocultas, con el objetivo de que sea imposible la identificación de la persona.
Abreviaturas y unidades de medida: sólo deberán ser empleadas abreviaturas estándar universalmente aceptadas; con-
sultar Units, Symbols and Abbreviations. The Royal Society of Medicine. London. Cuando se pretenda acortar un término
frecuentemente empleado en el texto, la abreviatura correspondiente, entre paréntesis, debe acompañarle la primera vez
que aparezca el mismo. Los dientes se numerarán de acuerdo al sistema de la FDI: Two digit system. (1971) International
Dental Journal 21, 104-106 y los implantes siguiendo la misma metodología, es decir citando el número correspondiente
al diente de la posición que ocupan, y añadiendo una «i» minúscula (ej.: un implante en la posición del 1.3 será el 1.3i;
Sicilia A. Reader Communication. Scientific Notacion of Dental Implants. (1995) International Journal of Oral and Ma-
xillofacial Implants 10,5, 527-528). No serán usados números romanos en el texto. Los nombres comerciales no serán uti-
lizados salvo necesidad, en cuyo caso la primera vez que se empleen irán acompañados del símbolo ®.
Se utilizará el sistema métrico decimal para todas aquellas mediciones de longitud, altura, peso y volumen. La tempe-
ratura se medirá en grados centígrados, y la presión sanguínea en milímetros de mercurio. Para los valores hematológicos
y bioquímicos se utilizará el sistema métrico de acuerdo al International System of Units.
P U B L I C A C I Ó N
mínimo.
Dirección de remisión
El material publicable previamente indicado deberá ser enviado al director de la revista a la siguiente dirección de correo
electrónico: revista@sepa.es. Los anuncios de importantes reuniones científicas y otras informaciones de interés de tipo
social o profesional, deberá ser enviado a: Secretaría de Redacción «Periodoncia y Osteointegración», Antonio López
Aguado 4, bajo dcha. 28029 Madrid o a la dirección de correo electrónico sepa@sepa.es.