Itzel, Compilación
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02)
Cita 2:
“La triste verdad es que casi siempre el mal está hecho por quiénes nunca se han detenido a
pensar si querían hacer el bien o el mal.”
Hannah Arendt, La vida del espíritu (1978).
Con la redacción de este ensayo mi objetivo es reflexionar acerca del “bien” y del
“mal”, porque lo que a mi parecer es malo para otra persona puede ser bueno y viceversa.
Todos nos basamos en cosas diferentes para obtener nuestra perspectiva ante acciones,
cosas y personas. Lo cual es muy interesante.
¿El hombre desde que nace es malo o bueno? Según Rousseau “El hombre es bueno
por naturaleza, es la sociedad la que lo corrompe”. Pero, en cambio, Maquiavelo propone
que “El hombre es malo y perverso por naturaleza a menos que precise ser bueno”.
Personalmente, me he puesto mucho en duda sobre cuál es mi posición ante esa pregunta.,
por Por un tiempo estuve de acuerdo con Rousseau, pero Maquiavelo me hace dudar.
Teniendo en cuenta que las acciones de: gritar, llorar, dormir mucho y no hacer nada son
malas, entonces un bebé recién nacido es malo, porque él hace todo eso. Esas actividades
están normalizadas en un infante, pero si un adolescente o adulto hiciera lo mismo sería mal
visto. Pero entonces puedo estar de acuerdo con la cita de Hannah, ya que un bebé no
piensa si quiere hacer el bien o el mal, solo actúa conforme sus instintos.
Entonces, ¿hacer el mal nos convierte en una persona mala o hacer el bien en una
buena?. La respuesta es sí, pero no, porque depende de cómo lo vea la sociedad en su
mayoría. Por ejemplo, lo que escribió Hannah Arendt en su libro Eichmann en Jerusalén
estaba basado en sus propias observaciones de un hombre y el lenguaje y justificaciones de
esteéste. Arendt le describió como superficial y no muy inteligente, era un hombre común
que, al no poner en cuestión lo que estaba haciendo, tomó parte en algunos de los actos más
atroces conocidos por la humanidad. Pero en esa maldad en un estado totalitario hubo
quienes no se opusieron a su forma de reflexionar.
Todas las personas tenemos pensamiento crítico, aunque unas lo usan más que otras.
Así que eso me lleva a pensar que las personas si son conscientes de que están haciendo el
bien o el mal de manera personal, porque lo conocen y saben que es para ellos. Sin
embargo, no pueden hacer nada con la perspectiva que los demás tienen. Aunque hay cosas
que por lógica e intuición sabemos que son malas o porque la sociedad nos lo ha inculcado.
Me pongo a reflexionar sobre el problema ambiental que genera el tirar basura en las calles,
ríos, lagos, etc. Sabemos que está mal hacer eso porque afecta a nuestro planeta y vemos las
consecuencias que eso provoca. Y a pesar de eso lo seguimos haciendo, sin darle
importancia a la problemática, pero es evidente que si nos hemos puesto a pensar aunque
sea una vez que no lo deberíamos hacer.
En una situación diferente, hablaré acerca del suicidio. Es el acto por el que una
persona se provoca la muerte de forma intencionada. Si tomamos la perspectiva mayoritaria
de las personas sobre este acto, tiende a ser algo malo, y más si se le pregunta a alguien
religioso. Nuestras creencias, hábitos, conocimientos, entre otras cosas hacen que
formemos nuestro punto de vista acerca del bien y mal. Aunque él hombre que piensa en el
suicidio como una opción sabe que eso está mal, se encuentra totalmente desesperanzado y
en una situación de sufrimiento permanente la cual lo lleva a cometer la acción. Ya no les
importa si está bien o mal y desde mi perspectiva eso no los convierte en personas malas.
Pero, por el contrario, si alguien le hace daño a otra persona sea consciente o no, aun así es
mala persona para mí.
Después de esta reflexión puedo concluir que no hay una visión general para saber
que es bueno y malo, depende de la situación, contexto y de las personas. Vivimos en una
sociedad que está regida por normas y leyes en todas partes. Siento que siguiéndolas
podemos seguir conviviendo sanamente y en paz. Son muy necesarias y debemos tomar en
cuenta nuestra opinión personal aunque no la pongamos en práctica siempre.
Simplemente, haz cosas y actúa sin afectar a otros y LISTOOOOO, pero ¿por qué te
deberían de preocupar los demás y no tú mismo? O sea, puede que sepas que algo está bien
pero que para la otra persona este mal y lo afecte, por ejemplo: comer carne, ¿vas a dejar de
hacerlo solo para evitar afectar a la persona? Aun cuando tú amas comer eso, se puede
llegar a decir que eres una mala persona por seguir haciéndolo pero también el otro puede
ser malo por hacer que dejarás de comer algo que te gusta y pueda afectar a tu salud. This is
very complicated AAAAA. Tremenda reflexión personal me di JAJAJA. Aparte malo
también es un adjetivo que puede decirnos por ejemplo que alguien es malo en un juego.
Para unas personas está mal andar con alguien de su mismo género, pero para otras no y
debería ser algo normalizado. Para mí es bueno trabajar a presión y estoy segura de que
muchos dirán lo contrario. En fin, cada cabeza es un mundo y nunca vamos a pensar igual
que el otro. Pero tal vez podamos ser empáticos y usar más el pensamiento crítico día a
día:D
Y colorín colorado este cuento se ha acabado, gracias.
El último párrafo ya no es parte del ensayo, nada más que me enoje y revolví xd.
Hablar acerca del amor es un tema interesante para muchos pero para otros es algo
de lo que no quieren escuchar ni saber nada. Es ese estado en el cual la mayoría de las
veces, el hombre ve las cosas como no son, o bueno, así lo propone el filósofo Friedrich
Nietzsche. Como en todo, cada persona tiene su perspectiva y diferente forma de pensar. Se
sabe que existen: el amor platónico, aristotélico, descártico, spinozo, hóbbico, lockiano,
entre otros muchos.Y si nos preguntamos ¿Qué es el amor? tal vez no podamos llegar a una
respuesta en si. Cada quien le da un significado diferente. Pero todos estamos de acuerdo
con que es un sentimiento. Bueno o malo, pero lo es. Y desear es un acto. Entonces
podemos decir que “cuando se ama se desea; pero cuando se desea no siempre se ama”.
Todos alguna vez en nuestra vida hemos amado, ya sea a una persona, objeto,
canción, película, etc. Pero, ¿qué es lo qué nos ha llevado a sentir ese amor? ¿Cómo llegó el
amor a nuestras vidas?... Desde pequeños se nos enseña e inculca este gran sentimiento
pero no es forzado, es muy distinto que tu madre te diga “tienes que amar las verduras” a
“tienes que recoger tu habitación”, lo segundo si se hace por obligación, lo primero no, es
algo que solamente se deja fluir, solo pasa y llega de repente. Pero también si escuchas
mucho una canción puedes llegar a amarla inconscientemente, vaya, el amor es
complicado. O bueno, tal vez solo sea con las cosas, al hablar de las personas sería muy feo
el decir que las estás amando por obligación (cosa que si pasa). Entonces sí, es complicado
y un tanto difícil.
El desear algo/alguien solo es una ilusión que nos hacemos, porque cuando se
consigue tal vez nos demos cuenta de que en realidad no era lo que nos esperábamos o
queríamos. Pienso en que puedes desear mucho estar en una universidad, entonces buscas
hacer todo lo posible por entrar pero cuando lo logras después puedes ver que no era lo que
imaginabas, tuviste una visión y lamentablemente no fue así, te desgastaste en vano e
incluso puede que hayas sido infeliz todo ese tiempo por querer alcanzar una felicidad no
asegurada. El futuro es algo desconocido para nosotros, entonces creo que es mejor poder
llegar a decir que las cosas que hiciste fueron por amor y no por un simple deseo tal vez
momentáneo o inculcado.
Itzel (18.02)
“Otro problema con las personas que no hacen un examen crítico de sí mismas es que, con
frecuencia, resultan demasiado influenciables. Cuando un orador con talento para la
demagogia se dirigía a los atenienses con una retórica conmovedora, aunque sus
argumentaciones no fueran coherentes éstos se dejaban llevar sin analizar esas
argumentaciones”.
Martha C. Nussbaum, Sin fines de lucro. Porqué la democracia necesita de las
humanidades
(2010).
Rousseau nos dice que a pesar de que se encuentra encadenado en todas partes, el
hombre nace libre. Esta cita siento supongo que se refiere más que nada a las acciones que
podemos hacer en un determinado lugar. Sí, somos libres, pero por ética, moral y leyes
sabemos que hay cosas que no se deben hacer. Sin embargo, nada ni nadie nos dice en qué
opinar o creer y mucho menos nos limitan, ni siquiera nosotros mismos. ¿Cuántas veces
hemos sobrepensado sobre algo sin siquiera quererlo? O? Incluso? o incluso al estar en una
iglesia es común que nos vengan pensamientos sobre la creencia de un Dios de la nada y
podemos llegar hasta sentirnos mal porque la voz en nuestra cabeza nos dice que no existe e
inmediatamente recurrimos a pedir perdón mentalmente e intentar pensar en otra cosa.
Hay pensamientos que nacen de la nada pero hay otros que nosotros provocamos al
preguntarnos cosas o dudar. Podemos meter una idea en la cabeza de alguien, ya que la
mente es fácil de engañar y este es un gran problema. Si un amigo nos cuenta algo de su
vida, lo normal es que le creamos, pero ¿qué o quién nos confirma que eso sea verídico?, en
este caso solo la confianza que le tenemos y hay entre nosotros nos hace saber que nos está
diciendo la verdad. Aunque con una persona que acabamos de conocer no sucede lo mismo.
Tenemos que estar constantemente dudando de todo, aunque personalmente no creo que se
pueda vivir así porque seríamos muy paranoicos al creer que todo es mentira y nada es
verdad, lo cual proponen varios filósofos como Descartes, pero no quita que eso sea un
trastorno mental. En lugar de eso lo que podemos hacer es ser críticos y estar siempre con
mente abierta a todo lo que nos dicen o vemos.
Hasta hace menos de 500 años los hombres pensaban y afirmaban que la Tierra era
plana, sin embargo, ya en Grecia Anaximandro de Samos (S.VI a. de C.) demostró la
redondez de la Tierra. Esto ocurrió porque no fue conformista con lo que se afirmaba, él
pensaba diferente y buscó la manera de demostrar su creencia. Al dar el ejemplo de un
orador con talento para la demagogia (una estrategia utilizada para conseguir el poder
político que consiste en apelar a prejuicios, emociones, miedos y esperanzas del público
para ganar apoyo popular, frecuentemente mediante el uso de la retórica, la desinformación,
la agnotología y la propaganda política). Si nosotros asistimos a una charla impartida por
ese tipo de persona es obvio que no nos dirá que tiene ese talento porque no conseguiría su
objetivo. Nosotros somos los que debemos ir con conocimientos sobre el tema, podemos
investigar antes. Si no queremos hacer eso, simplemente hay que estar abiertos a lo que nos
diga, preguntar y dudar. No debemos dejarnos llevar porque es un experto o capacitado en
el tema, porque no nos consta eso.
Cada cabeza es un mundo. Si todos pensaramos de la misma manera que los otros, la vida
sería aburrida. No existirían las increíbles controversias ni los puntos de vista diferentes.
Eso es lo interesante. En este ensayo escribiré sobre mi perspectiva de la cita que escogí y
de lo maravilloso que es no estar de acuerdo con alguien.
El limitarnos a hablar o decir lo que pensamos acerca de algo pasa muy seguido en
las personas, ya sea por evitar problemas, abandono y en casos más graves la muerte.
Imaginemos que decidiste ir al cine con unos amigos y en la salida se ponen a hablar de la
película que vieron, a juzgarla, decir que tal les parecio, algunas críticas y demás, después
de escuchar lo que dijeron tus amigos te das cuenta de que a todos les pareció increíble y
les ha gustado bastante, en cambio, a ti te pareció una mala película, fue desagradable y
tienes mucho qué decir al respecto, pero no lo haces. ¿Por qué?, es simple, porque te das
cuenta que ellos están felices, pasando un buen rato teniendo una buena charla, si tu les
dices tu punto de vista puede que se arruine ese momento que están teniendo e incluso que
empiecen a juzgarte a ti por no estar de acuerdo con ellos. Entonces, para evitar eso
prefieres ahorrarte tus comentarios.
Un ejemplo más antiguo es el que se veía en las mujeres que no estaban de acuerdo
con todo lo que sucedía en su época, los maltratos, infidelidades, y limitaciones que tenían,
ahí lo malo era que si ellas decidían decir algo les ocurrían desgracias, por los hombres que
decían “amarlas”. Podríamos decir que los tiempos cambian, pero sin embargo, sigue
habiendo muchas personas conservadoras y creo que por ellos es que aún no hay una buena
libertad de expresión, mayor que la de antes sí, pero no del todo. Los adolescentes son los
que ahora más que nadie no se limitan a decir lo que piensan, a estar en desacuerdo con sus
familiares y la sociedad en general, pero son fuertemente criticados por la generación
“millenial” llamándolos “generación de cristal” porque según ellos ya no aguantan nada y
todo les ofende. Y también entre ellos mismos a veces existen las famosas “funas” que se
les hacen a jóvenes que dicen algo con lo que los demás no están de acuerdo. Los tiempos
no cambian, simplemente se van transformando. Mínimo ahora solo te exponen ante redes
sociales y no ocurre un homicidio.
Gracias a que no se piensa igual que las otras personas es que se han logrado varias
cosas, en política: la interrupción legal del embarazo y el voto en las mujeres. Por medio de
la negociación se llega a acuerdos, pero si no hablamos sobre lo que estamos en desacuerdo
las cosas seguirán estando igual. Si en una relación siempre estás conforme y de acuerdo
con todo lo que dice tu pareja no estarás en total libertad, eso no es sano. Y eso se puede
resolver con la comunicación y comprensión, si no, no estás con la persona correcta y tal
vez debería ir al psicólogo. Deberías estar rodeado de personas críticas pero no mucho, con
las que te sientas en confianza sin sentir miedo de decir lo que opinas.
A todo eso puedo concluir que no hay que pensar por los otros, ni a suponer cosas.
También hay que empezar a tener la mente más abierta ante diversos temas, opiniones,
conflictos, etc. Porque si vivimos en nuestra burbuja pensando que todos van a estar de
acuerdo con lo que nosotros decimos nos vamos a ver metidos en grandes problemas.
Deconstruyamos nuestra persona y lo que pensamos si es necesario, al escuchar diferentes
posturas acerca de algo podemos darnos cuenta que tal vez las cosas no son como lo
creíamos. Seamos personas abiertas a la crítica también, de nada sirve que pienses que
alguien no va a estar de acuerdo contigo si tu te la pasas estando de acuerdo con los demás
por caer bien, encajar o evitar conflictos. Terminaré con “No es bueno tomar posturas sobre
nada en la vida, lo que hoy piensas mañana puede verse influenciado por algún motivo y
hacerte cambiar de pensamiento”. Si no estás de acuerdo con alguien o algo, haz filosofía.
Lynette 05.03
Hablar acerca de la vida es un tema muy extenso y con diferentes puntos de vista.
Conservarla es un deseo para muchos pero también es un tormento para algunos otros.
Desde pequeños nos hablan y enseñan acerca del ciclo de esta, el cual es inmutable:
“Nacer, vivir y morir”. No me pondré a reflexionar sobre la típica pregunta que todos nos
hacemos en algún momento de nuestra existencia “¿Qué sentido tiene la vida?”. Porque si
algo me ha enseñado la filosofía es que no hay una respuesta como tal. Buscar un sentido es
aburrido, que no lo tenga es lo que nos abre oportunidades.
Las personas no tienen la culpa de que las cosas no sean como nosotros queremos,
no deberían verse afectadas. Esta situación se ve más que nada en la familia, los padres la
mayoría de veces les dicen como vivir su vida a sus hijos, lo que deben y no hacer,
justificándose con la frase “Lo hago por tu bien” o “Cuando seas más grande lo entenderás
y me lo agradecerás”. Desde la perspectiva de un joven, ¿Pensar que eso es egoísta es una
falta de respeto hacia ellos?. Es difícil hacerles entender que podemos tomar nuestras
propias decisiones sin que se provoque una discusión o un problema. Es muy normal ver
casos donde en las familias se tiene la misma profesión por generaciones, no sabemos si en
verdad era lo que querían, si fue por obligación o solo para seguir el legado familiar. Esta
de más suponer ya que lo que se ve a simple vista no nos dice nada.
El presente tan solo dura un instante. Un minuto que ya haya pasado se puede
considerar pasado y el minuto después es nuestro futuro. El tiempo es efímero y relativo,
saborearlo es difícil. Sin darnos cuenta, cuando menos lo pensamos ya es demasiado tarde.