Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

PUNTO 3 (B, C, D)

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 7

b) El fondomonetarismo en países endeudados.

Por fondo monetarismo neoliberal nos referimos al conjunto de medidas de política


económica que se implementan en un país endeudado en virtud de un acuerdo
internacional firmado entre ese país y el FMI, y por un documento conocido como
Carta de intención. Una característica de este acuerdo es que tiene que ser
aprobado y monitoreado por el FMI, por lo que difícilmente sería posible aceptar
cláusulas de incumplimiento. Con los intereses de los países ricos, sus bancos y
sus corporaciones también se caracteriza porque implica ajustes en la economía,
principalmente por el bienestar de la economía grandes mayorías, lo que resulta
impopular. Esta política tiene su origen en las antiguas corrientes del pensamiento
económico neoclásico que tuvo su apogeo en el Century y su esencia consistieron
en las ideas de Adam Smith y David Ricardo por considerar que las leyes de la
economía estaban regidas por las fuerzas de la naturaleza, obedeciendo las leyes
divinas y una mano invisible para que los individuos que actuaban en completa
libertad pudieran hacer riqueza a su alrededor. Para ti y para toda la nación.
El FMI fue una organización de cooperación y ayuda que funcionó más o menos
hasta fines de la década de 1970, pero gradualmente cambió esta apariencia
original para Estados Unidos como policía internacional de los países ricos, para
presionar a los países pobres para que se sometan a los intereses económicos de
los primeros.
De esta manera el FMI actuaría para ayudar a los países endeudados
proporcionándoles un préstamo de emergencia o acordando ser una garantía para
ellos deuda, pero condicionando siempre todo a una serie de cláusulas calificadas
como leoninas y en algunos casos prohibidas.
De esta forma, el FMI asume el papel de organismo representante del poder y
hegemonía internacional de los países ricos que representan los intereses de los
bancos transnacionales de los gobiernos de los 7 grandes Estados Unidos, Japón,
Alemania, Francia, Italia, Canadá e Inglaterra. En otras palabras, el FMI es el
representante de los poderosos en el mundo en desarrollo.
Las relaciones de dependencia entre países débiles y poderosos están reguladas
por otras nuevas formas de explotación global en las que organismos
internacionales como el FMI y el Banco Mundial tienen un papel coordinador.
Dentro de esta nueva división internacional del trabajo, el capitalismo ha
encontrado los mecanismos para justificar su hegemonía sobre la base de restar
el excedente económico producido en el Tercer Mundo. Los dientes tradicionales
de la explotación a nivel internacional han sido el comercio y la apropiación
desiguales de los recursos naturales y humanos de las naciones pobres, para que
la explotación sea posible y con ello se logre el suministro oportuno de materias
primas y mano de obra barata para el desarrollo de la gran industria. Cabe
recordar que la citada crisis de la deuda tiene tres períodos fundamentales a nivel
global, que se ubican entre 1967 y 1972 y se caracterizan por una alta inflación
con recesión en los países endeudados. La segunda llamada Crisis energética
que prevaleció en el tiempo de 1973 a 1980 y la que nos afecta, 1980-1989,
conocida como crisis financiera internacional, la sofoca a la mayoría de los países
del tercer mundo, sin embargo, de una manera especial como en América Latina,
donde México juega un papel tristemente original.
El aumento de la deuda del tercer mundo se intensificó en la década de 1970, a
medida que países miembros de la Organización de Países Exportadores El
petróleo (OPEP) depositó en los bancos transnacionales las enormes ganancias
que resultaron del alza de los precios del petróleo. Por tanto, los bancos
internacionales pedir prestado mucho dinero y prácticamente buscaban deudores,
especialmente en países como Venezuela y México otros que ofrecían la
perspectiva de producir lo que actualmente es el recurso natural más buscado.
c) El fondomonetarismo en México.
Previo a analizar los planes y los compromisos externos gubernamental, y la forma
como se aplicó aquel fondo monetarismo en México, conviene rememorar ciertos
precedentes, tratando no repetir la gran proporción de hechos que argumentan en
cierta medida por qué tuvo que caerse en la férula del Fondo Monetario
Internacional, de la banca trasnacional, y del Sistema de la Reserva Federal de los
EU. Baste insistir en que bajo el capitalismo dependiente la ley importante que
opera es la del desperdicio, la corrupción, la anarquía y la ineficiencia, la cual ha
sido característica general de la mayoría de los gobiernos, en particular desde que
el modelo nacionalista enarbolado por la revolución hasta Cárdenas fuera
derrotado. Esto ocurrió al posesionarse de la presidencia el conservador Ávila
Camacho en 1940, desde cuya etapa se tornan los ojos al capital extranjero, y de
forma bastante particular desde el alemanismo que nuevamente permitió e
inclusive propició el auge de las trasnacionales en México, así como el adeudo
externo como regulador y promotor del incremento económico.
La aplicación del neoliberalismo en México aumenta en la ilógica política de
adeudo externo seguida en particular por López Portillo, quien en solamente 6
años aumentó la deuda externa de 19 mil millones de dólares a 80 mil, o sea en
alrededor de un 300%. Las causas son enormemente conocidas y únicamente
conviene rememorar que ha sido la falsa ilusión de un petróleo que se suponía
que iba al alza en sus costos hasta niveles fuera de todo cálculo, por lo cual era
adecuado endeudarnos pues la deuda se pagaría sin inconvenientes. Sin
embargo, es además evidente que había fuertes presiones para endeudarnos en
ventaja del problema que se manifestó a raíz del embargo petrolero árabe, debido
a que los USA en particular necesitaban el petróleo de México, razón por la cual
presionaron al régimen de Echeverría a que aceptara créditos, a eso que se
plantea que se había contrario hacia finales de su sistema, por lo cual vino la
devaluación del 76 y la desestabilización de su régimen. A raíz de que se
descubrieron los mantos petroleros de Chiapas y de Tabasco se desencadenó la
ambición extranjera por el sureste del territorio y por el petróleo de México. Hay
pruebas de que Echeverría no admitió varios créditos atados y presiones sin
fronteras de la banca mundial, y de ahí que hubiera un rompimiento con el
régimen de USA, que se presentó en una guerra verbal, en particular una vez que
manifestó Echeverría a la prensa mundial que los “USA tenían más negocios que
amigos”. Por esto quiso redistribuir el ingreso, realizando una política de más
grande desarrollo social y de trabajo; esto implicó más grande adeudo externo y
unificado a una sobrevaluación del peso y a un desequilibrio en el negocio
exterior, únicamente traería secuelas funestas, una vez que asumió una reacción
soberana ante los EU, cuyos gobiernos, apoyándose en la burguesía local
propiciaron un ambiente de desconfianza en el peso, y una consecuente fuga de
capitales que se tradujo en el principio de la de hoy crisis desde 1976.
Este criterio lo manejarían mañosamente para reprimir todo intento de retomar el
modelo nacionalista que habría sido derrotado des de Cárdenas a la fecha,
solamente que, desde López Portillo, y más todavía con De la Madrid, hablado
modelo ha sido plenamente sepultado.
En realidad, la banca mundial y los Estados Unidos usaron cada una de sus armas
de chantaje nacional y universal para imponer a un régimen que se ciñera a sus
intereses; tal cual Echeverría concluyó desprestigiado y debilitado y JLP terminó
ser el ser humano apropiado para los planes de extensión petrolera
gubernamental de USA, o sea ha sido el que permitió la desnacionalización de la
industria petrolera y la crisis más aguda del México de hoy.
Frente a este caso no quedó más remedio que pedir el ayuda inmediato de la
banca universal, para que se evitara una moratoria que podría ser un mal ejemplo
para los demás territorios endeudados.
En ventaja de la intermitente fuga de capitales de aquellas fechas, el Estado
decretó a fines de 1982 la nacionalización de la banca y el establecimiento del
control generalizado de cambios. Basta rememorar que frente a esto la burguesía
nacional reaccionó rabiosa y visceralmente, tildando al régimen de “comunista”,
acrecentándose la desconfianza y la fuga de capitales. En impacto, Miguel de la
Madrid comenzaría su régimen heredando un compromiso con la banca mundial
avala do por el Fondo Monetario Internacional.
Con un grado de deuda que propició una insolvencia transitoria hacia finales de
82- el Fondo Monetario Internacional afiló sus garras sobre la economía mexicana,
y al aceptar el régimen Miguel de la Madrid hubo acuerdo en suscribir la segunda
Carta de Intención o Pacto de Facilidad Ampliada entre el régimen de México y el
Fondo Monetario Internacional. Miguel de la Madrid sin lugar a duda era el ser
humano apropiado para llevar a la práctica las recetas fondistas, pues tenía que
ver con un jurista de familia acomodada, de corte conservador que aun cuando
egresado de la Universidad de México hizo estudios en Harvard, en donde
aprendió a actuar según los banqueros mundiales y el régimen de los Estados
Unidos. Era indudable que Miguel de la Madrid pasaría a la historia como el
“hombre del Fondo Monetario Internacional”. Tal cual su régimen estaría
extensamente influido por estas políticas económicas, razón por la cual MMH se
rodeó de un equipo de ayudantes tecnócratas de corte monetarista y conservador,
en la mayor parte de los casos con posgrado en universidades conservadoras del
continente europeo y de USA.
d) México en el fondomonetarismo 1982 - 1988: la carta de intención 1982.
Con la suscripción de la carta de intención de 1982 se inició una gran crisis
económica para México que solo beneficio a nuestros acreedores como el FMI.
La carta de intención 1982.
Es una carta que el gobierno mexicano redactó para ser aceptado en el FMI, se le
llama “de intención” porque el país promete ajustar su política económica a la
política económica establecida internacionalmente por el FMI.
Este Fondo funciona como una caja de ahorros, donde se tiene que dar una cuota
para después poder solicitar créditos emergentes, y a su vez el FMI sirve de aval
por si se necesita un nuevo préstamo.
En 1981 México tenía un 8.5% de crecimiento del PIB, mientras el mundo tenía
una recesión, inflación y desempleo; debido al acuerdo México bajó los precios de
sus materias primas ocasionando pérdidas de divisas en diez mil millones de
dólares.
De 1981 a 1984 se hicieron ajustes en el gasto público, se redujeron los subsidios,
se aumentaron los aranceles, todo esto para poder controlar la inflación. En
septiembre de 1982 se nacionalizó la banca y se estableció el sistema
generalizado de cambios, para hacer frente a la fuga de capitales. El estado
intenta abatir la evasión fiscal para fortalecer las finanzas públicas. Cobra mucha
importancia hacer atractivo el ahorro y el mercado de valores, mismo que tuvo el
apoyo del gobierno para especular hasta que llegó el crack bursátil de 1987, con
las consecuencias de la macro devaluación e híper inflación que lo acompañaron.
En el punto 24 de esta carta dice sobre la futura libertad de precios causante de la
inflación más elevada de la historia, que solo benefició a unos cuantos, como
inversionistas extranjeros, bancos internacionales, compañías trasnacionales, y en
especial al gobierno de Estados Unidos. López Portillo tardíamente decreto un
control cambiario integral, que solo duro 3 meses de 1982 sin poder dar
resultados.
En general la carta de intención solamente establece puntos que benefician a
externos pues nos ajustamos a las leyes comerciales de los Estados Unidos,
perjudicando la economía del país.
Recuento esquemático de los puntos aprobados en la Carta de Intención con el
FMI, y análisis de implicaciones. En resumen, en dicha carta se proponen los
siguientes lineamientos, en base en los cuales México deberá ajustar su
economía: 1. Mejorar las finanzas públicas del Estado, a) Reducir el déficit público
en relación al PIB, de un 16.5% en 1982 a 8.5% en 83 y a un 5.5% en 84. b)
Revisar precios deficitarios y servicios que presta el Estado. c) Combatir la
evasión fiscal. d) Racionalizar el gasto público. e) Reducir subsidios. 2. Alentar al
ahorrador con tasas de interés atractivas y fomentar el mercado de valores. '0
Carta de Intención 1982, (texto íntegro) 06, cit. p. 1209. 54 EL FRACASO
NEOLZBERAL EN MEXZCO 3. Flexibilización de la política de precios. 4.
Flexibilización del control de cambios. 5. Apertura a las mercancías del exterior y
eliminación del proteccionismo a nuestra industria. En estos 5 puntos se resume lo
que puede llamarse el "fondomonetarismo a la mexicana" y que más tarde se
habría de plasmar e incluso ampliar en el programa gubernamental hecho
exprofeso para recoger estos lineamientos, bajo el nombre de Programa Inmediato
de Reordenación Económica (PIRE) que se dio a la luz pública el 9 de diciembre
de 1982.
El Programa Inmediato de Reordenación Económica (PIRE) como
fondomonetarismo "a la mexicana”.
El Programa Inmediato de Reordenación Económica plantea en diez puntos las
líneas estratégicas para enfrentar la crisis. Combatir la inflación, inestabilidad
cambiaria y escasez de divisas, proteger el empleo y la planta productiva.
El programa plantea la austeridad en el gasto público y la reorientación del
programa de inversiones; acelerar el proceso de reforma tributaria y de los
ingresos de las empresas públicas; moderación en las utilidades y los salarios;
programas de protección al empleo y al abasto popular; apoyo a la planta
productiva para conservar la ocupación; la reestructuración del sistema financiero
nacional; un nuevo esquema cambiario y de política comercial; fomento al ahorro,
y reformas constitucionales para reforzar el principio de rectoría del Estado.
Aquí están ya incluidos tres elementos sustanciales presentes en la ideología
neoliberal: reducción del gasto público, racionalización de subsidios, abatir el
déficit público y aumentar la carga tributaria.
Pero lo más sobresaliente de este decreto es que acepta proteger a empresas
privadas contra riesgos cambiarios. Esto se instrumenta allí mismo en el famoso
Fideicomiso de Cobertura de Riesgos Cambiarios (FICORCA), cuyo papel en la
especulación fue muy significativo.
El 20 de diciembre de 1982 entra el nuevo control de cambios con un doble
mercado, uno controlado por el estado y otro completamente libre. Los
exportadores prefirieron abrir cuentas y dólares en bancos extranjeros y el valor de
las exportaciones no llego completo al país, de esta manera se sentaron las bases
para la futura especulación contra el peso, que en solo seis años hundió al peso a
niveles sin precedente propiciando fuga de capitales.
La apertura al exterior en México (1983-88): elemento central de la
instrumentación del proyecto.
Uno de los conceptos de política económica apoyados por el fondo fue la apertura
al exterior. Por esto se entendió que el país se debía modernizar en tecnología
para crear artículos competitivos con el exterior (“reconversión industrial”). Pero
este punto privilegia a las empresas grandes y eficientes en detrimento de las
medianas y pequeñas. Por consiguiente, por apertura al exterior de la economía
mexicana, se entiende la modificación de la política comercial externa de México,
con el propósito de eliminar la protección arancelaria que se aplicó desde 1940 a
la industria establecida en territorio nacional. Tal cosa con el objeto de facilitar
mediante la asignación de aranceles bajos o libres del pago de estos la entrada de
mercancías del exterior que anteriormente estaban limitadas y condicionadas en
su entrada al país, por los llamados Sistemas de Permisos Previos.
En pocas palabras la apertura al exterior de México significa abandonar la política
comercial e industrial de protección, y sustituirla por una doctrina libre cambiaria.
Adoptando lo contrario a la tesis de neoprotección de Estados Unidos, Europa y
Japón.
Otro elemento destaca la política de atracción y simplificación de trabas para la
inversión extranjera directa, y sin reglamentación que vayan más allá de no
introducirse en áreas que solo el estado pueda participar.
Todo esto es producto de presiones externas por parte de Estados Unidos y su
Ley de Comercio y Aranceles de 1984 que especifica la obligación por parte de
sus socios comerciales de abrir en mayor grado sus fronteras a las mercancías
provenientes de los EU, y de no hacerlo quedan fuera del Sistema Generalizado
de Preferencias Arancelarias de los EU, que es la única manera de participar en
su mercado.
Todas estas modificaciones, así como el ingreso al GATT fueron la base para
poder crear un modelo de dependencia externa siendo la última pieza para que el
siguiente paso pueda ser la integración de un MERCADO COMÚN DE AMÉRICA
DEL NORTE. Obedeciendo a una estrategia perfectamente diseñada por el
imperialismo norteamericano, para que los países subdesarrollados ajusten sus
políticas a los intereses y objetivos de los Estados Unidos.
CONCLUSIÓN
En el Modelo Neoliberal que llegó con la presidencia de Miguel de la Madrid,
nuestro país entro en una crisis de muchas. Miguel de la Madrid dejó de cobrar
impuestos a grandes empresas internacionales, pidió dos préstamos al Fondo
Monetario Internacional, firmando la Carta de Intensión que cualquier país que
solicite un préstamo debe firmar, la cual les imponía realizar acciones que
afectaran a su país, para acceder al préstamo de los cuales ninguno pudo pagar
porque claramente el no gobernaba para el pueblo sino para el mismo. De 1940 a
1982 cerro el comercio mexicano para así tener más tiempo de detener la inflación
y recuperarse económicamente, ya que el peso mexicano no tenía valor,
implementado el PIRE (Programa Inmediato de Reorganización Económica) para
así hacerle pensar al pueblo que mejoraría la economía, pero sólo estaría
cumpliendo con la Carta de Intención. A un año de terminar su presidencia M. de
la Madrid se aleja del FMI, se reúne con los líderes (campesinos, trabajadores,
empresarios) en Palacio Nacional para crear El Pacto de Solidaridad Económica
(PSE), el objetivo de este era detener de nuevo la inflación que había provocado,
para ello no tenían que subir los precios de productos y no pedir aumentos de
salario, cumpliéndose el objetivo pero con demasiadas consecuencias...

También podría gustarte