Antecedentes: Editar
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Imperial Japonesa contra la base naval de los Estados Unidos en Pearl Harbor (Hawái) en
la mañana del domingo 7 de diciembre de 1941. El ataque pretendía ser una
acción preventiva destinada a evitar la intervención de la Flota del Pacífico de los Estados
Unidos en las acciones militares que el Imperio del Japón estaba planeando realizar en
el Sureste Asiático contra las posesiones ultramarinas del Reino Unido, Francia, Países
Bajos y Estados Unidos. Los japoneses hicieron coincidir esta ofensiva con el ataque a las
posesiones del Imperio británico en Hong Kong, Malasia y Singapur, las cuales estaban ya
en su poder a mediados de febrero de 1942.2
El ataque comenzó a las 7:48 a. m. hora local, y fue llevado a cabo por 353 aviones
japoneses,3 que incluían cazas de combate, bombarderos y torpederos que despegaron de
seis portaaviones.3 Resultaron dañados los ocho acorazados estadounidenses atracados
en el puerto, y cuatro de ellos se hundieron. De estos ocho, dos fueron reflotados y cuatro
reparados, por lo que seis pudieron volver a entrar en servicio más tarde, durante la
guerra. El ataque japonés también hundió o dañó tres cruceros, tres destructores,
un buque escuela y un minador. Los estadounidenses perdieron 188 aviones, murieron
2403 estadounidenses4 y otros 1178 resultaron heridos de diversa consideración.5 Sin
embargo, los japoneses no atacaron la central eléctrica, el astillero, las instalaciones de
mantenimiento, los depósitos de combustible y torpedos, los muelles de submarinos y el
edificio del cuartel general y de la sección de inteligencia. Los nipones perdieron 29
aeronaves y cinco minisubmarinos, además de sufrir 65 bajas militares entre muertos y
heridos. Uno de los tripulantes de los minisubmarinos, Kazuo Sakamaki, fue capturado.
El ataque conmocionó profundamente al pueblo estadounidense y llevó directamente a la
entrada de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial, tanto en los teatros de
guerra de Europa como del Pacífico. Al día siguiente de esta ofensiva, 8 de diciembre,
Estados Unidos le declaró la guerra al Imperio del Japón.6 La fuerte postura de no
intervención en el conflicto desapareció,7 mientras que la asistencia clandestina al Reino
Unido se le reemplazó por una alianza plena. La Alemania nazi y la Italia
fascista declararon la guerra a Estados Unidos el 11 de diciembre, en respuesta a las
operaciones puestas en marcha en contra de la potencia asiática del Eje.
La inexistencia de una declaración formal por parte nipona mientras se llevaban a cabo
negociaciones que parecían prosperar, llevó al presidente estadounidense Franklin D.
Roosevelt a calificar al 7 de diciembre de 1941 como «una fecha que vivirá en la infamia».
Además, el ataque a Pearl Harbor fue juzgado en los Juicios de Tokio como crimen de
guerra.89
Antecedentes[editar]
Artículo principal: Acontecimientos que condujeron al ataque a Pearl Harbor
El ataque a Pearl Harbor buscaba neutralizar la Flota del Pacífico de los Estados Unidos y
así proteger el avance de Japón en la Malasia británica y en las Indias Orientales
Neerlandesas, donde pretendían acceder a recursos naturales como petróleo y caucho. La
guerra entre Japón y los Estados Unidos era una posibilidad de la que ambas naciones
eran conscientes desde la década de 1920 y para la que habían hecho planes, aunque las
tensiones no comenzaron a surgir seriamente hasta la invasión japonesa de Manchuria en
1931. En la década siguiente el imperio nipón continuó su expansión en China, lo que dio
lugar a una guerra que se desató en 1937. Para asegurar su victoria en el continente
Japón trató de aislar a China y conseguir ser autosuficiente en recursos naturales. Con
esta finalidad diseñó la «Operación del sur».10 Sin embargo, desde diciembre de 1937
hechos como el ataque japonés al barco estadounidense USS Panay y la masacre de
Nankín, en la que fueron asesinadas más de 200 000 personas, puso a toda la opinión
pública occidental en contra de Japón e hizo que aumentara el miedo por el
expansionismo nipón. Ello llevó a los Estados Unidos, el Reino Unido y Francia a proveer
asistencia financiera a la República de China para la compra de armamento.11
En 1940 Japón ocupó la Indochina francesa en un esfuerzo por lograr el control de los
suministros que llegaban a China. Los Estados Unidos cancelaron los envíos de
aeronaves, repuestos, maquinaria y combustible de aviación, algo que los japoneses
percibieron como poco amistoso.12 Sin embargo, la nación norteamericana no detuvo
entonces las exportaciones de petróleo a Japón porque Washington creyó que sería una
medida extrema dada la dependencia nipona del crudo estadounidense y porque ello sería
visto como una provocación por Japón.131415
Plan de ataque[editar]
El plan de ataque a Pearl Harbor fue obra del almirante jefe de la Flota
Combinada, Isoroku Yamamoto, quien paradójicamente no creía que Japón pudiera ganar
una guerra con Estados Unidos y así lo había advertido al Estado Mayor de la Armada —
«No se debe librar una guerra con unas probabilidades tan pequeñas de victoria», había
escrito en su informe—. Pero Yamamoto pensaba que si la guerra finalmente estallaba su
obligación era explorar la más mínima posibilidad que hubiera de ganarla. Así desde la
firma del Pacto Tripartito en septiembre de 1940, al que se había opuesto porque estaba
convencido de que conduciría a la guerra con las potencias occidentales, había
comenzado a diseñar la estrategia de la guerra en el Pacífico, llegando a la conclusión de
que la única opción de victoria para Japón era asestar un golpe decisivo al inicio de la
guerra que quizá obligara a Estados Unidos a negociar, y que ese golpe debía ser el
ataque a la flota estadounidense del Pacífico en su propia base de Pearl Harbor, en
las islas Hawái. Una idea descabellada, y así se lo pareció al embajador estadounidense
en Tokio Joseph Grew, cuando a finales de enero de 1941 le llegaron «rumores de guerra»
de que «las fuerzas militares japonesas estaban planeando un ataque sorpresa masivo en
Pearl Harbor».30
En febrero de 1941 Yamamoto le envió una carta, por medio del contraalmirante jefe de la
Undécima División Aérea Takijiro Onishi, al capitán Minoru Genda, miembro de la plana
mayor de la Primera División Aérea y el mejor piloto de la Armada Imperial, en la que le
pedía que «investigara pormenorizadamente la viabilidad de un plan de ataque» con
aviones a Pearl Harbor, reconociendo que «no sería fácil llevar a cabo algo así». En la
carta le decía que se trataba de «asestar un golpe a la flota estadounidense en Hawái, de
forma que, durante un tiempo, Estados Unidos no pudiera avanzar hacia el pacífico
occidental». Dos meses después Yamamoto recibió la contestación redactada por el
contraalmirante Takijiro Onishi que le decepcionó porque él y Genda solo hablaban de
bombardeos en picado y en altura y habían descartado el uso de torpedos lanzados desde
los aviones debido a la escasa profundidad de las aguas de Pearl Harbor —los torpedos
japoneses necesitaban unos treinta metros para no incrustarse en el fondo y dirigirse hacia
su objetivo, mientras que la profundidad media en Pearl Harbor era de doce metros—.
Pero Yamomoto insistió en que era posible el ataque con torpedos y respondió que habría
que mejorarlos y entrenar a los pilotos en su uso.31
Genda y Onishi se pusieron a trabajar inmediatamente en la solución de los problemas que
planteaba el uso de torpedos. Con la ayuda de los técnicos consiguieron reducir
drásticamente la profundidad a la que tenían que hundirse para poder dirigirse al blanco, y
adiestraron a los pilotos para volar muy bajo y disminuir así la posibilidad de que los
torpedos se empotrasen en el fondo marino cuando eran lanzados desde los aviones. En
septiembre comenzaron los ejercicios de simulación bélica en la bahía de Kinko,
en Kagoshima, elegida por su parecido con Pearl Harbor. Ninguno de los pilotos que
participaron sabía cuál era el objetivo. A finales de septiembre el plan de ataque a Pearl
Harbor ya estaba listo. Además de Genda y Onishi, el principal colaborador de Yamamoto
en su elaboración final había sido Kameto Kuroshima, un extravagante oficial de
planificación al que Yamamoto estimaba mucho porque le ofrecía soluciones que nunca se
le habían ocurrido a él y que se atrevía a contradecirle.32
Inicialmente el plan de ataque a Pearl Harbor presentado por Yamamoto fue rechazado
por el Estado Mayor de la Armada Imperial por ser demasiado arriesgado y por emplear
demasiados recursos navales que serían necesarios en otros escenarios bélicos ya que se
requerían seis de los diez portaaviones con que entonces contaba la Armada Imperial.
Pero Yamamoto no se conformó y envió a Tokio a Kuroshima para que defendiera el plan
y como último recurso amenazara con su dimisión y la de todo su equipo si no se
aceptaba. El 20 de octubre el Estado Mayor cedió —no podían perder al marino de más
prestigio de la Armada— y lo aprobó, a pesar de las dudas que seguía suscitando el
plan.33
La fecha para el ataque se fijó en el lunes 8 de diciembre (domingo, 7 de diciembre en
Hawái y los Estados Unidos) porque la luna proporcionaría ese día una luz favorable que
facilitaría el vuelo de los aviones japoneses antes de que amaneciera.34
El plan de ataque a Pearl Harbor, junto con el resto del orden de batalla organizado por los
Estados Mayores del Ejército y de la Armada, fue presentado al emperador Hirohito en la
tarde del 2 de noviembre, al día siguiente de la conferencia de enlace en la que se había
decidido fijar el 30 de noviembre como la fecha límite para las negociaciones con Estados
Unidos, después de la cual se desencadenarían las ofensivas previstas en el Pacífico y en
el Sudeste de Asia, simultáneamente al ataque a Pearl Harbor.34 Los objetivos principales
de la «campaña hacia el sur», junto con Pearl Harbor, eran el archipiélago de las Filipinas,
posesión norteamericana, y Malasia, colonia británica que incluía la estratégica base
de Singapur. También sería atacada Tailandia y a continuación la colonia británica
de Birmania.35 Operaciones secundarias tendrían como objetivo la colonia británica
de Hong Kong, y las islas de Wake y de Guam, donde la flota estadounidense del Pacífico
tenía sus bases de operaciones avanzadas y donde estaban los submarinos y los aviones
de reconocimiento. La conquista de las Indias Orientales Neerlandesas comenzaría
cuando todos esos objetivos se hubieran alcanzado. La ofensiva tenía que concluir en un
plazo máximo de 20 semanas, después de las cuales ya no quedaría ninguna fuerza
aérea, naval o terrestre de Estados Unidos o de Reino Unido capaz de impedir el dominio
japonés sobre el sudeste de Asia y el Pacífico occidental.3637
Sin embargo, el almirante Yamamoto seguía dudando de las posibilidades de una victoria
de Japón. «Durante los primeros seis o doce meses de guerra contra los Estados
Unidos y Reino Unido, causaré estragos en todos sus flancos y conquistaré una victoria
tras otra», pronosticó. «Después… no tengo esperanzas de ganar».38
Objetivos[editar]
Mapa de la bahía de Kinko, en la prefectura de Kagoshima (en verde), donde se realizaron los
ejercicios de simulación bélica por su parecido con la bahía de Pearl Harbor.
Desarrollo[editar]
Derrota seguida por la flota japonesa para ir y volver del ataque a Pearl Harbor.
Submarinos[editar]
Los submarinos de la flota I-16, I-18, I-20, I-22 e I-24 embarcaron cada uno
un minisubmarino Tipo A y lo transportaron a las aguas de la isla de Oahu.48 Los cinco
submarinos partieron desde el Distrito Naval de Kure el 25 de noviembre49 y llegaron a la
boca del puerto hawaiano el 7 de diciembre.5051 A las 03:42 (Tiempo de Hawái)52
el dragaminas USS Condor avistó el periscopio de uno de los minisubmarinos al suroeste
de la bocana de Pearl Harbor y alertó al destructor USS Ward.53 Este pequeño submarino
quizá entró en Pearl Harbor. Sin embargo, el Ward hundió otro minisubmarino a las
06:37,54 en lo que suponían los primeros disparos estadounidenses en el Teatro del
Pacífico. Al norte de la isla Ford otro minisubmarino estuvo cerca de torpedear
al portahidroaviones Curtiss y tampoco acertó a dañar al destructor Monaghan con su
segundo torpedo antes de que este lo hundiera a las 08:43.53
Un tercer minisubmarino, el Ha-19, encalló en dos ocasiones, una frente a la entrada del
puerto y otra al este de Oahu, lugar en que fue capturado el 8 de diciembre.55 Uno de sus
tripulantes, Kazuo Sakamaki, nadó hasta la orilla y fue capturado, con lo que se convirtió
en el primer prisionero de guerra japonés. Un cuarto minisubmarino resultó dañado por
una carga de profundidad y fue abandonado por su tripulación antes incluso de poder
disparar sus torpedos.56
Un análisis de las fotografías del ataque por parte del Instituto Naval de los Estados
Unidos en 1999 llevó a descubrir que uno de los minisubmarinos había conseguido
disparar con éxito uno de sus torpedos contra el acorazado West Virginia. Las fuerzas
japonesas recibieron un mensaje de radio de un minisubmarino a las 00:41 del 8 de
diciembre que afirmaba haber dañado uno o más grandes barcos dentro de Pearl Harbor.57
La posición final de este pequeño sumergible no se conoce,58 pero nunca regresó al
submarino desde el que partió.59 El 7 de diciembre de 2009 el periódico Los Angeles
Times informó que había evidencias de tres partes de submarino encontradas a unos 5 km
al sur de Pearl Harbor, halladas entre 1994 y 2001 y que podían pertenecer a este
minisubmarino desaparecido. También decía que había claras evidencias de que este
sumergible había disparado dos torpedos contra el canal de los acorazados en el interior
del puerto. Los restos habían sido sacados del puerto como parte de los esfuerzos por
ocultar el desastre de West Loch, una explosión de munición que se produjo en 1944 y que
destruyó seis buques de desembarco que se estaban preparando para la Operación
Forager.60
Primera oleada[editar]
Los japoneses atacaron en dos oleadas. La primera fue detectada por un radar del ejército a unos
250 km, pero fue erróneamente interpretada como una formación de bombarderos estadounidenses
que regresaban del continente.
Mapa superior:
A. Isla Ford
B. Base Hickam
C. Base Bellows
D. Base Wheeler
E. Kaneohe
F. Ewa MCAS
R-1. Radar de Opana
R-2. Kawailoa RS
R-3. Kaaawa RS
G. Haleiwa
H. Kahuku
I. Wahiawa
J. Kaneohe
K. Honolulu
0. B-17 del continente
1. Primer grupo de ataque
1-1. Bombarderos
1-2. Torpederos
1-3. Bombarderos en picado
2. Segundo grupo de ataque
2-1. Bombarderos
2-1F. Cazas
2-2. Bombarderos en picado
Mapa inferior:
A. Isla Wake
B. Islas Midway
C. Isla Johnston
D. Hawái
D-1. Oahu
1. USS Lexington
2. USS Enterprise
3. Primera Flota Aérea
El primer ataque lo llevaron a cabo 183 aeronaves que partieron desde el norte de Oahu.
Liderada por el comandante Mitsuo Fuchida,68 comprendía:69
El radar SCR-270 del ejército estadounidense en Punta Opana que detectó a las aeronaves
japonesas.
A medida que la primera oleada se acercaba a Oahu, un radar SCR-270 del Ejército de los
Estados Unidos ubicado en Punta Opana, en el extremo norte de la isla, la detectó y dio la
señal de alarma. El radar había estado en modo de pruebas por el Departamento
hawaiano del Ejército durante un tiempo, pero no estaba completamente operativo. A
pesar de que sus operadores, los soldados George Elliot Jr. y Joseph Lockard,71
informaron del objetivo, el teniente Kermit A. Tyler supuso que se trataba del regreso de
seis bombarderos B-17. Las aeronaves se encontraban muy cerca (a solo unos pocos
grados, divididas en dos grupos)72 y aunque los operadores nunca habían visto una
formación tan grande en el radar,73 olvidaron decirle a Tyler su tamaño74 y este a su vez no
les pudo decir, por razones de seguridad, que podría tratarse de los B-17 (aunque esto era
conocido por todos).74
Mientras la primera oleada se acercaba a tierra fueron derribadas varias aeronaves
estadounidenses, y al menos una radió una advertencia incoherente. Otras advertencias
emitidas por los buques que se hallaban frente al puerto se estaban procesando todavía
cuando los aviones japoneses comenzaron a lanzar bombas y a ametrallar. A pesar de
todo, no está claro que ninguna advertencia hubiera tenido mucho efecto aunque hubiera
sido interpretada correctamente y de manera más rápida. La parte aérea del ataque a
Pearl Harbor comenzó a las 7:48 a. m., hora hawaiana75 (3:18 a.m. del 8 de diciembre
según la hora estándar japonesa, marcada por los buques de la Kido Butai),76 con el
ataque a Kaneohe. Un total de 353 aviones japoneses3 en dos oleadas llegaron a Oahu,
encabezados por los lentos y vulnerables torpederos, que explotaron los primeros
momentos de sorpresa para atacar a los buques más importantes presentes en el puerto,
los acorazados. Al tiempo, los bombarderos en picado se lanzaban contra las bases
estadounidenses a lo largo de Oahu, empezando por el aeródromo Hickam, el más
grande, y siguiendo por el campo Wheeler, la principal base de la fuerza de cazas del
ejército norteamericano. Los 171 aviones de la segunda oleada atacaron el aeródromo de
Bellows, cerca de Kaneohe, en el lado de barlovento de la isla, y la isla Ford. La única
oposición estadounidense por aire fue la de un puñado de aeronaves P-36 Hawk, P-40
Warhawk y algún bombardero en picado SBD Dauntless que despegaron desde el
portaaviones Enterprise.3
Los hombres a bordo de los buques estadounidenses se despertaron con el pitido de las
alarmas, las explosiones de las bombas y el tiroteo. Aún somnolientos hubieron de vestirse
rápidamente mientras corrían a las estaciones de zafarrancho de combate (el famoso
mensaje «Ataque aéreo en Pearl Harbor, esto no es un ejercicio» fue emitido por la
Segunda Ala de Patrulla, el primer alto mando de Hawái en responder). Los defensores no
estaban preparados: los almacenes de munición estaban cerrados, los aviones
estacionados ala con ala a la intemperie para evitar su sabotaje77 y casi nadie disparaba
las ametralladoras (ningún calibre 5"/38, solo un cuarto de las ametralladoras y 4 de 31
baterías antiaéreas entraron en acción).77 A pesar de este bajo nivel de alerta, numerosos
militares estadounidenses respondieron con eficacia durante la batalla. El alférez Joe
Taussig, Jr., único oficial a bordo del Nevada, tomó el mando de la nave pero perdió una
pierna. El barco acabó varado en el puerto por el intendente.78 Uno de los destructores, el
USS Aylwin, fue puesto en marcha con solo cuatro oficiales a bordo, todos con el rango de
alférez y ninguno con más de un año en el mar. Este barco permaneció 36 horas en el mar
antes de que su comandante en jefe consiguiera regresar a bordo.79 El capitán Mervyn
Bennion, comandante del USS West Virginia, lideró a su tripulación hasta que resultó
herido por los fragmentos de una bomba que impactó en el USS Tennessee, amarrado
justo al lado.80
Segunda oleada[editar]
Agua Edificios Base del Ejército Base de la ArmadaObjetivos atacados:
1: USS California
2: USS Maryland
3: USS Oklahoma
4: USS Tennessee
5: USS West Virginia
6: USS Arizona
7: USS Nevada
8: USS Pennsylvania
9: Isla Ford
10: Base Hickam
Infraestructuras ignoradas:
A: Tanques de petróleo
B: Edificio del Cuartel General
C: Base de submarinos
D: Arsenal de la marina
Panorama de Pearl Harbor durante el ataque, en el que destacan las columnas de humo y el nutrido
fuego antiaéreo.
Dañado por un torpedo y en llamas, el acorazado USS Nevada intentó salir del puerto,
pero acabó siendo blanco de muchos bombarderos japoneses, que le hicieron numerosos
impactos con bombas de 113 kg y lo incendiaron. El barco fue encallado deliberadamente
para evitar el bloqueo de la entrada del puerto. El USS California recibió impactos de dos
bombas y dos torpedos. Su tripulación podría haberlo mantenido a flote, pero recibió la
orden de abandonar la nave justo cuando estaban haciendo funcionar las bombas
extractoras a pleno rendimiento. El aceite en llamas vertido por los
acorazados Arizona y USS West Virginia produjo unas enormes columnas de humo negro
que hicieron parecer la situación en el puerto aún peor. El buque objetivo
desarmado Utah resultó horadado por dos torpedos y el West Virginia por siete, el último
de los cuales arrancó su timón. El USS Oklahoma recibió cuatro impactos de torpedos, los
dos últimos por encima de su cinturón blindado, lo que causó su vuelco.
El USS Maryland encajó dos bombas de 800 kg, pero ninguna le provocó daños de
seriedad.82
Aunque los japoneses concentraron su fuego en los acorazados, que eran los objetivos
más grandes presentes en el puerto, no ignoraron otros objetivos secundarios. Así,
el crucero ligero USS Helena fue torpedeado y la conmoción de la explosión hundió
el USS Oglala, un minador amarrado a su lado. Dos destructores que estaban en dique
seco, el USS Cassin y el USS Downes, fueron destruidos por bombas que penetraron sus
tanques de combustible e incendiaron todo el combustible. El dique fue inundado para
intentar apagar el fuego, pero solo consiguieron que el combustible en llamas ascendiera y
quemara ambos buques. El Cassin se deslizó sobre los bloques en los que se apoyaba su
quilla y rodó sobre el Downes. El crucero ligero USS Raleigh fue penetrado por un torpedo
y el USS Honolulu también recibió daños pero fue reparado y permaneció en servicio. El
buque de reparación Vestal, amarrado junto al malogrado Arizona, sufrió graves
desperfectos y encalló. El portahidroaviones USS Curtiss también resultó afectado y el
destructor USS Shaw quedó en muy mal estado por el impacto de dos bombas que
penetraron su santabárbara.83
De los 402 aviones estadounidenses presentes en Hawái,3 188 fueron destruidos y 159
dañados,3 155 de ellos en tierra. Prácticamente ninguno estaba listo para despegar y
defender la base y solo ocho pilotos del ejército estadounidense lograron despegar durante
la batalla.84 Seis de ellos tienen acreditado el derribo de al menos un aparato japonés
durante el ataque, los tenientes Lewis M. Sanders, Philip M. Rasmussen, Kenneth M.
Taylor, George S. Welch, Harry W. Brown y Gordon H. Sterling Jr. Este último fue
derribado y murió por fuego amigo mientras regresaba del combate con los nipones.85
Dicho fuego amigo derribó algunos aparatos estadounidenses más, incluidos cinco aviones
que regresaban del portaaviones USS Enterprise. De los 33 hidroaviones PBY
Catalina que había en Hawái, 24 resultaron destruidos y otros seis gravemente dañados,
por lo que solo se salvaron los tres que estaban de patrulla. Los ataques japoneses
también causaron víctimas en los barracones del personal militar.85
En el ataque murieron 55 pilotos y nueve marinos japoneses, y uno fue hecho prisionero.
De los 414 aviones japoneses que intervinieron,69 fueron derribados 2986 (nueve en la
primera oleada y veinte en la segunda), mientras que otros 74 aparatos recibieron daños
de la artillería antiaérea.86
El vicealmirante Chūichi Nagumo, comandante en jefe de la flota japonesa de ataque, la Kidō Butai.
Varios oficiales japoneses, entre ellos Mitsuo Fuchida y Minoru Genda, arquitecto jefe del
plan de ataque, instaron al vicealmirante Chūichi Nagumo a lanzar una tercera oleada que
destruyera los depósitos de combustible y torpedos de Pearl Harbor, las instalaciones de
mantenimiento y el dique seco.87 Los capitanes de los otros cinco portaaviones de la
formación nipona informaron que estaban dispuestos y preparados para lanzar una tercera
ofensiva.88 Los historiadores militares opinan que la destrucción de todas estas
instalaciones y suministros habrían tocado mucho más profundamente a la Flota del
Pacífico estadounidense que la pérdida de sus acorazados.89 Si todo esto hubiera sido
destruido, «las grandes operaciones norteamericanas en el Pacífico tendrían que haberse
pospuesto más de un año».90 De acuerdo con el almirante estadounidense Chester Nimitz,
que llegaría a ser comandante en jefe de la Flota del Pacífico, «hubiera prolongado la
guerra otros dos años».91 Sin embargo, Nagumo decidió retirarse por las siguientes
razones:
Fotografías[editar]
Las primeras fotografías aéreas del ataque a Pearl Harbor fueron tomadas por Lee
Embree, que volaba en un bombardero Boeing B-17 Flying Fortress en ruta desde la Base
Hamilton, California, a las Filipinas.99 El 38.º Escuadrón de Reconocimiento de Lee había
programado una parada de repostaje en el aeródromo Hickam en el momento del
ataque.99
Un caza Mitsubishi A6M2 Zero japonés de la segunda oleada despega del
portaaviones Akagi en la mañana del 7 de diciembre.
Varios cazas Zero de la segunda oleada se preparan para partir desde el Shōkaku hacia Pearl
Harbor.
Bombarderos en picado Aichi D3A1 Tipo 99 Val de la segunda oleada se preparan para
despegar. Al fondo se ve el portaaviones Sōryū.
Un Aichi D3A Tipo 99 Val kanbaku (bombardero en picado) parte del portaaviones Akagi para
participar en la segunda oleada.
El acorazado USS West Virginia recibió impactos de varios torpedos, uno de ellos
probablemente lanzado por un minisubmarino.
El acorazado USS Pennsylvania (al fondo) y los destructores Cassin y Downes tras el ataque.
Acorazados
USS Cassin: en dique seco con el Downes y el Pennsylvania, una bomba. Ardió y
volvió al servicio en febrero de 1944.
USS Downes: en dique seco con el Cassin y el Pennsylvania, prendió del fuego
del Cassin. Ardió y volvió al servicio en noviembre de 1943.
USS Shaw: tres bombas; volvió al servicio en junio de 1942.
Auxiliares
USS Oglala (minador): Dañado por un impacto de torpedo en el Helena. Volcó y volvió
al servicio en febrero de 1944.
USS Vestal (barco de apoyo logístico): Dos bombas y la deflagración de la explosión
del Arizona. Encallado, volvió al servicio en agosto de 1942.
USS Curtiss (portahidroaviones): Una bomba y un avión japonés estrellado. Volvió al
servicio en enero de 1942. 19 muertos.
Consecuencias[editar]
Reacciones inmediatas[editar]
Existen desacuerdos sobre la neutralidad en el punto de vista de la
versión actual de este artículo o sección.
En la página de discusión puedes consultar el debate al respecto.
Pocas horas después de que se iniciase el ataque a Pearl Harbor (sin embargo, al día
siguiente, 8 de diciembre de 1941, al otro lado de la línea internacional de cambio de
fecha), las tropas japonesas iniciaron un ataque matutino en los Nuevos Territorios
de Hong Kong, seguidos de ataques en las Filipinas, la isla Wake, Malasia, Tailandia así
como el hundimiento del HMS Prince of Wales y del HMS Repulse.102
El presidente Roosevelt firma la Declaración de Guerra contra Japón el día después del ataque.
Cartel de propaganda del Pacto Tripartito exaltando el ataque japonés a Pearl Harbor
El ataque inflamó los sentimientos de los Estados Unidos (Vengad Pearl Harbor - Nuestras balas lo
harán).
Una opinión común es que los japoneses fueron víctimas del llamado «mal de la victoria»
debido a la facilidad con que obtuvieron sus primeras victorias. A pesar de la percepción
de esta batalla como un golpe devastador contra los Estados Unidos, solo cinco
embarcaciones de la Armada de los Estados Unidos se perdieron de forma definitiva.
Estas cinco embarcaciones fueron los acorazados Arizona, Oklahoma, el viejo
acorazado Utah (el cual era usado como barco objetivo) y los
destructores Cassin y Downes. Además, mucho material útil pudo ser salvado de la
destrucción, incluyendo dos torretas principales del Arizona. Las mayores pérdidas se
debieron a la explosión de la santabárbara del Arizona y al vuelco del Oklahoma. Cuatro
barcos que se hundieron durante la batalla fueron posteriormente reflotados y devueltos a
la actividad, incluyendo los acorazados California, West Virginia y Nevada. El California y
el West Virginia tenían un efectivo sistema de defensa contra torpedos que aguantó
excepcionalmente bien, a pesar de la dureza de los ataques que tuvieron que soportar,
permitiendo que la mayoría de sus respectivas tripulaciones pudiera salvarse. Muchos de
los acorazados que se salvaron fueron reparados y reforzados de nuevo, lo que les
permitió hacer frente a las amenazas japonesas. De los 22 navíos japoneses que tomaron
parte en el ataque, solo uno sobrevivió a la guerra. A fecha de 2005, el único barco de los
Estados Unidos que aún seguía a flote y que estuvo en Pearl Harbor durante el ataque era
el guardacostas Taney.
A largo plazo, el ataque sobre Pearl Harbor fue una estrategia no disimulada que resultó
errónea para Japón. En efecto, el almirante Isoroku Yamamoto, quien concibió el ataque a
Pearl Harbor, había predicho que incluso un ataque exitoso sobre la flota estadounidense
no permitiría ganar una guerra contra los Estados Unidos, ya que la capacidad de
producción estadounidense era demasiado grande. Uno de los principales objetivos
japoneses era destruir los tres portaaviones estadounidenses que se encontraban en el
Pacífico, pero estos realmente no estaban presentes —el Enterprise volvía de una
travesía, el Lexington había partido unos días antes y el Saratoga se encontraba en San
Diego siendo reparado en el Puget Sound Naval Shipyard. El hecho de poner la mayoría
de los navíos de guerra de los Estados Unidos fuera de circulación era considerado, en los
dos ejércitos y por la mayoría de los observadores en todo el mundo, como un rotundo
éxito para los japoneses.
La eliminación de los acorazados, casi todos anticuados respecto a los que tenía el
Imperio del Japón, dejó a los Estados Unidos sin otra elección que confiar en sus
tres portaaviones y en sus submarinos, siendo estos la mayor parte de lo que había
quedado indemne. También fueron estas las armas con las que los Estados Unidos
frenaron y revirtieron el avance japonés: solamente la acción del USS Enterprise hundió a
un mayor número de naves japonesas y derribó a un mayor número de aviones que
cualquiera de sus pares japoneses. La pérdida de los acorazados resultó ser realmente
menos importante de lo que Japón había pensado antes del ataque y también menos
relevante que lo que tanto los japoneses como los estadounidenses habían creído justo
después del ataque. De hecho, el ataque japonés a Pearl Harbor dio como resultado el
hundimiento del concepto del acorazado como arma principal. En efecto, el Imperio del
Japón tenía en sus modernísimos e impresionantes acorazados su fortaleza: después de
los clase Yamato no se construyeron nunca más acorazados en todo el mundo.
Una de las proyecciones de la estrategia japonesa fue pensar que la última y decisiva
batalla del Pacífico sería entre acorazados de ambos bandos, un enfrentamiento épico al
estilo de la batalla de Tsushima; de hecho todo el entrenamiento y la construcción misma
de la batalla, comandada por Isoroku Yamamoto, estuvo pensada para esa ocasión, es
decir, asestar en una batalla decisiva, que se predecía en las cercanías de las islas
Marshall, un ataque contundente a la flota estadounidense. Como resultado, Yamamoto
construyó, entrenó y puso a punto a sus acorazados para una batalla decisiva que nunca
tuvo lugar.
Importancia histórica[editar]
El ataque japonés a Pearl Harbor solo tuvo un pequeño impacto militar debido al fallido
intento de la Marina japonesa por hundir los portaaviones de Estados Unidos, pero aunque
los portaaviones hubieran sido hundidos, no hubiera ayudado significativamente al Imperio
del Japón. Las islas Hawái están situadas en el centro del Pacífico y tenían depósitos de
combustible para la flota norteamericana que no fueron atacados. Haber destruido esos
depósitos habría significado retrasar por bastante tiempo las operaciones militares
norteamericanas en el Pacífico, pues habrían tenido que reconstruir y reponer todo lo
perdido desde California. Un error muy importante, pues no destruyó la logística
norteamericana (cita: Prof. Zelikow, Universidad de Virginia).
El ataque arrastró firmemente a los Estados Unidos y a su economía industrial y de
servicio a la Segunda Guerra Mundial, lo que llevó a la derrota del Eje en todo el mundo. El
primer ministro del Reino Unido, Winston Churchill, al enterarse de que el ataque a Pearl
Harbor había por fin dirigido a Estados Unidos hacia la guerra, escribió: «Estando saturado
y saciado, con emoción y sensación; fui a la cama y dormí el sueño de los seguros y
agradecidos».107 La victoria aliada en esta guerra y el subsiguiente surgimiento de Estados
Unidos como una potencia mundial dominante han dado forma a la política internacional
desde entonces.
En términos de historia militar, el ataque a Pearl Harbor marcó el surgimiento
del portaaviones como el centro del poder naval, reemplazando al acorazado como piedra
angular de una flota de guerra. Sin embargo, no fue sino hasta después de las batallas del
mar del Coral y de Midway cuando este adelanto se hizo patente para los poderes navales
de todo el mundo.
El USS Utah fue alcanzado por un torpedo y volcó pronto en la batalla. Los restos permanecen en
Pearl Harbor.
USS Arizona hundido en Pearl Harbor, el 7 de diciembre de 1941, los restos continúan en Pearl
Harbor.
Sesenta años después esas opiniones siguen siendo válidas en Japón. Por ejemplo, el
periódico Japan Times, el primer diario de Japón en lengua inglesa, ha publicado una serie
de columnas a principios del siglo XXI que se hacen eco de los comentarios de Saburo
Kurusu en referencia a Pearl Harbor.109Situando Pearl Harbor en su contexto, los
escritores contrastan repetidamente los miles de soldados estadounidenses muertos en el
ataque con los cientos de miles de civiles japoneses muertos más tarde como resultado de
los ataques aéreos de Estados Unidos.110 Un columnista disculpa el ataque de esta
manera:
El ataque de Pearl Harbor no fue una táctica brillante, sino una parte de la
estrategia basada en la creencia de que un espíritu firme como el hierro y
hermoso como la flor del cerezo podía superar a la superioridad material de
Estados Unidos. Esta estrategia resultó defectuosa y la derrota total de Japón la
seguiría.111
En 1991 se rumoreaba que Japón iba a presentar una disculpa oficial a Estados
Unidos por el ataque. Por el contrario, la disculpa no vino en la forma que muchos
esperaban. El Ministerio japonés de Asuntos Exteriores hizo unas declaraciones en las
que decía que en 1941 Japón había intentado hacer una declaración de guerra formal
a Estados Unidos a la 1 de la tarde, hora de Washington, 25 minutos antes de la hora
en que había sido previsto que comenzaran los ataques a Pearl Harbor. Parece ser
que el gobierno japonés se estaba refiriendo al «Mensaje de 14 partes» que no rompió
siquiera formalmente las negociaciones, permitiendo declarar la guerra. Sin embargo,
debido a los numerosos retrasos, el embajador japonés fue incapaz de hacer la
declaración hasta mucho después de que los ataques hubieran comenzado. La
disculpa del gobierno japonés de 1991 solo hacia referencia a este retraso.
From Here to Eternity (1953) Se trata de los asuntos sociales dentro del ejército.
Tiene lugar en la ciudad de Honolulú en 1941, y el ataque sale de rol menor.
Tora! Tora! Tora! (1970) Se considera el mejor retrato cinematográfico del ataque
de Pearl Harbor.
The Final Countdown (1980) Es una película de ciencia ficción en la cual los
protagonistas regresan al pasado al momento del ataque y tienen que decidir si
deben intervenir.
Pearl Harbor (2001) Es un romance ambientado en el ataque, pero de incierta
precisión histórica.
Midway (2020) Aunque la película se centra en la batalla del mismo nombre, en los
compases iniciales de la misma se recrea el bombardeo de Pearl Harbor.
Videojuegos
Pearl Harbor: Zero Hour (2001). Juego para PC en el que se tiene una recreación
del ataque y una serie de batallas aeronavales que son (luego del entrenamiento y
el primer ataque): Secuelas de Pearl Harbor, Guadalcanal, Midway, Truk, Islas
Solomón, Filipinas, Okinawa, Japón.
Medal of Honor: Rising Sun (2003). El juego recrea desde el principio de manera
sorpresiva el ataque a Pearl Harbor. El jugador inicia de inmediato la acción al
despertar el personaje en medio del bombardeo. Posteriormente, las batallas van
desde Guadalcanal hasta Singapur.
Medal of Honor: Pacific Assault (2004). En esta edición se recrea en primera
persona a un soldado de nombre Tom Conlin. La trama trata principalmente el
conflicto de Pearl Harbor hasta la Batalla de Tarawa.
Heroes of the Pacific (2005). El juego permite al jugador asumir el rol de un piloto
de combate llamado William Crowe mientras experimenta las fases de la Guerra
del Pacífico con Japón, comenzando con el ataque a Pearl Harbor.
Battlestations Pacific (2009). En la primera misión de la campaña japonesa.
Azur Lane (2017). Videojuego de disparos de desplazamiento lateral donde
algunos de sus personajes son representaciones de los barcos que estuvieron
involucrados en esta contienda.