El Medico A Palos
El Medico A Palos
El Medico A Palos
ACTO 1
Bartolo: ¡Que duro está éste tronco, el hacha se desafila toda y él ni se parte! Que calor
hace hoy, bah! Mejor lo dejo para mañana, yo dejo para mañana lo que puedo
hacer hoy. Ahora viene bien un descanso y un buen cigarro. ¡Oh! Ahí viene mi
mujer, que traerá de bueno.
Mart: ¿Que haces haragán fumando sin trabajar, tenés q terminar de partir esa leña
antes del mediodía.
Bartolo: Bueno, si no es hoy será mañana.
Mart: ¡Pero mirá que respuesta! Levantate y trabajá.
Bartolo: Despacito mujer que acabo de sentarme.
Mart: ¡Levantate!
Bartolo: Ahora no quiero dulce esposa.
Mart: ¡Ay que desdichada de mí!
Bartolo: Maldita sea la hora q me casé con vos.
Mart: Y sos vos el que se lamenta ¡tendrías que agradecer al cielo el haberte casado
conmigo. Un hombre que no hace otra cosa que comer y beber todo el tiempo.
Bartolo: Mentira.
Mart: Me vendés todo lo que tengo en mi casa, me vendiste la cama.
Bartolo: Te levantarás más temprano.
Mart: Me vendiste todos los muebles.
Bartolo: Va a ser más fácil mudarnos.
Mart: Tengo cuatro hijitos en los brazos.
Bartolo: Ponelos en el suelo.
Mart: Quieren comer a cada rato.
Bartolo: Dales látigo. Mientras Bartolo halla comido y chupado la casa está en orden.
Mart: ¡Haragán! ¡Borracho! Mirá q me vas a hacer enojar.
Bartolo: Mirá que te agarro con el látigo.
Mart: ¡Bribón!
Bartolo: ¡Ah! Si tomá, esta es la única forma de que te calles.
ESC 2
ESC 3
Gin: Pobre nuestra ama, ha enfermado por que su padre no lo deja casarse su amor, Leandro.
Luc: Es verdad, hay que conseguir un remedio y un medico urgente. La han visto 20 médicos
y nada…
Mart: Ya se cómo vengarme… Perdonen Sres, ¿Uds buscan a un médico? Bueno yo conozco
a uno que vive en ésta región, posee secretos maravillosos para curar a la gente. Hace
dos meses a una mujer la daban por muerta, y el le echó unas gotitas de no se qué, y
la muerta se levantó como si no hubiese pasado nada y hace dos semanas, un chico se
se cayó de un campanario y se rompió las dos piernas y él le frotó con una pomadita
y el chico corrió a jugar a la rayuela como antes.
Luc: Ese es el hombre que necesitamos, ¿Dónde está?
Mart: Cortando leña en el bosque.
Gin: Debe estar buscando algunas hierbas curativas.
Mart: No señor, es un hombre muy extravagante, va vestido como un croto, porque no quiere
demostrar el talento de sabio que Dios le dio.
Gin: ¡Qué admirable!, pero ¿nos dirá a nosotros que es médico?
Mart: No, pero para que confiese ustedes agarran dos barrotes; y le dan unos buenos palos.
Luc: ¡Que original! ¿Cómo se llama?
Mart: Bartolo.
Ambos: Muchas gracias, muchas gracias. Adiós.
Mart: No se olviden, si no confiesa, PUM
ESC 4
Bart: Qué dulce sos / preciosa botella / que dulce sos / tus pequeños Glu…Glu… / botellita
mía / ¿Porqué te vacías? / (Off)
Gin: ¿Usted es un caballero que se llama Bartolo?
Bart: Según para quién me quiera.
Gin: Queremos hacerle a Ud unos cuántos obsequios.
Bart: Si señor, me llamo Bartolo.
Luc: Pero antes quisiéramos pedirle se auxilio, para una cosa muy importante.
Gin: Si, porque nos enteramos de su gran talento.
Bart: Si, es verdad, soy el mejor leñador de éste bosque.
Gin: Sr,
Bart: Si quieren que le corte un pino son tres monedas, si es un paráiso ocho más dos de IVA.
Gin: ¡No se burle señor!
Luc: Pero, ¿Cómo es posible que un médico tan genial como usted necesite ocultar su talento?
Gin: Es ud un sabio, no lo niegue.
Bart: ¿Quién? yo, estos tipos están borrachos, yo no soy médico ni mucho menos.
Luc: Pues con toda cortesía.
Gin: Y con la mayor reverencia. (le pegan)
Bart: ¡Ay! ¡Ay! Basta yo soy médico y todo lo que uds quieran.
Gin: ¿Es verdad lo que ud dice?
Bart: No, no lo soy, no soy médico.
Luc: Con que no es médico. (le pegan otra vez)
Bart: Si señor, soy cirujano, farmacéutico y sepulturero.
Gin: Muy bien.
Bart: Maldita sea, seré médico y no me habré dado cuenta.
Luc: No se va a arrepentir, se le pagará muy bien su servicio.
Bart: Dígame, ¿es cierto que yo soy médico?
Gin: Segurísimo.
Luc: Y ha curado gente que ya estaba muerta.
Bart: No me diga.
Luc: Así que ánimo, tiene que curar a una señorita muy rica que vive en un castillo.
Luc: Allí estará bien comido y bebido y lo recibirá como a un Rey.
Bart: Comido, bebido, pues vamos para allá.
ACTO 2
ESC 2
Jul: ¡Ay! Señor amo, aunque el médico sea un sabio, me parece que Paulita no se va a curar.
Ger: ¿Por qué?
Jul: Porque Paulita, Señor no necesita un médico, necesita un marido, con un buen marido se
va a sanar de una buena vez.
Luc: Vamos, calláte no hables tonterías.
Ger: La chica no piensa en eso todavía es muy niña.
Jul: Cásela ud y verá si es niña.
Ger: Te querés callar charlatana.
Jul: Hay que tirar todos esos brebajes que le dieron y llamar al novio.
Ger: Un momentito, ¿dónde está ese novio que ud habla?
Jul: ¿Cómo? No sabe ud que Leandro la quiere, le ama y ella le corresponde.
Ger: Bah, a ese muchacho hace mucho tiempo que no lo veo, mucho estudio en la Universidad
pero en el bolsillo no tiene ni un peso. No puedo casarla con alguien sin dinero.
Jul: Pero su tío, es muy rico Señor y cuando muera le dejará una fortuna.
Ger: ¡Fuera, fuera de aquí!
Luc: Vamos, no te metas en lo que no te importa.
Gin: El médico viene.
ESC 3
ESC 4
Ger: Anímate a entrar hija mía. Este gran sabio médico te curará por completa.
Bart: Así que ésta es su hija.
Ger: Si, y si se muere yo me mataría también.
Bart: Bonita cara tiene. Y bien qué le duele a ud.
Pau: Ba, ba, ba.
Bart: ¿Cómo? ¿Qué dice ud?
Pau: Ba, ba, ba.
Bart: Ah… no entiendo.
Pau: Ba, ba, ba.
Bart: ¿Qué clase de lengua es esa?
Ger: Esa es su enfermedad, se ha quedado muda.
Bart: A ver el pulso (juego)
Bart: Muy bien, el gran sabio Aristóteles dijo una vez… digame ¿ud sabe latín?
Juan: No Señor.
Bart: No importa dijo: bonus, sunt maribus, honora medicum, salivas, bencina, que significa
falta de coagulación en la lengua. Epidermis papoteus brevis, en la región lumbar,
archines relicuom, en la región izquierda donde está el hígado y derecha donde está el
corazón. ¿Me explico?
Ger: Si, perfectamente.
Bart: Vadercaun lotus.
Ger: Si, si, pero hay una equivocación.
Bart: No puede ser yo nunca me equivoco.
Ger: Ud dijo que el corazón está del lado derecho y el hígado del lado izquierdo, me parece
que es al revés, el corazón del lado izquierdo y el hígado del derecho.
Bart: Hombre ignorantísimo, eso era la antigüedad, con el avance de la medicina se descubrió
lo contrario.
Ger: Disculpe Señor, si lo ofendí.
Bart: Está ud perdonado, pero debería aprender un poco de latín.
Ger: Y qué debemos hacer con la enferma.
Bart: Primero hay que acostarle bien calentita y luego debería tomar una sopa de letras con
vino.
Jul: ¡Jesús, que disparate!
Ger: ¿Y para qué es buena la sopa de letras con vino?
Bart: ¡Hay señor! que falta de ortografía. La sopa de letras con vino es buena para hacerla
hablar, porque el pan, el vino y las letras se mezclan en el tejido celular y en la máscula
mater y hace hablar hasta por los codos.
Ger: No lo sabía.
Bart: Si ud no sabe nada. Dentro de muy poco hablará mas que siete papagayos.
Ger: Gracias Señor, ud es un sabio. Enseguida vuelvo voy a llevar a mi hijita a descansar
¿Cómo era su gracia?
Bart: (hace una gracia)
Ger: No, su nombre.
Bart: Dr. Bartolo. Tapenla bien para que no se resfríe. Adiós señorita.
Pau: Ba, ba, ba.
Ger: Ginés, que al Dr. no le falte nada.
Bart: Hay en que lío me he metido, en la espalda siento un ardor que no me deja, y no es
por los palos recibidos, sino es por los palos que voy a recibir.
ACTO 3
Bart: Hay Bartolo en qué lío te han metido, miren si yo voy a ser médico, lo único que he
hecho en mi vida es hachar y hachar. Cómo extraño a mi mujer acá no tengo a nadie
a quién golpear. ¡Hay pobre Bartolo! Saquemos pecho y que pase lo que Dios quiera.
Ger: No hubo forma para convencerla de que se acueste, están preparando la sopa de vino
que ud recetó. Vamos a ver que resulta.
Bart: No hay que dudar, el resultado será espectacular.
Ger: Ud doctor, en mi casa estará servido como un príncipe, pero mientras tanto, tenga la
bondad de recibir estos billetes.
Bart: ¡No! por favor.
Ger: ¡Si! por favor.
Bart: ¡No! por favor.
Ger: ¡Si! por favor.
Bart: Bueno, por favor.
Ger: Bueno, veré si hay novedad y enseguida vuelvo. Ay esta chica me tiene tan intranquilo.
ESC 2
Ger: ¡Hay señor doctor, la niña desde que tomó la sopa con vino está peor!
Bart: ¡Trágame tierra! ejem… bueno, eso es señal de que el remedio está haciendo efecto.
Llamaré al enfermero. ¡Doctor Casimiro!
Lea: Sí, doctor.
Ger: ¿Y éste hombre?
Bart: Este hombre es un inminente profesor especialista en rocolis, julanes y emolentos
pirotécnicos.
Ger: Ah, aquí le traigo a mi hija.
Pau: ¡Leandro, sos vos! Siempre te amaré.
Ger: ¿Habrá sido una ilusión o ha hablado?
Jul: Sí, dos o tres palabritas ha dicho.
Ger: Ah, médico admirable ¡Genio!
Bart: ¡Qué trabajo me ha costado curar esa terrible enfermedad!
Ger: Bueno hijita, ya que podes hablar, decí algo por favor
Pau: Papá quiero casarme con Leandro, él me ama y yo también.
Ger: ¡Pero hija! Ese tal Leandro es un pobretón.
Pau: El cobrará una herencia papá, además a mí el dinero no me importa.
Ger: ¡Pero cuántas palabras te han venido a la boca! Doctor, hágame el favor de volverla
muda.
Bart: Bueno, Señor, no hay que alterarse, la niña debe tomar un poco de aire en el jardín.
Acompañela enfermero, haber si se olvida un poco de ese Leandro.
ESC 5
ESC 6