UNIDAD 4

Química Cosmética

Definición de cosmético
Para la legislación actual (Resolución Nº155/98, ANMAT) , se entiende
como productos cosméticos, para la higiene personal y perfumes, a
aquellas preparaciones constituidas por sustancias naturales o
sintéticas o sus mezclas, de uso externo en las diversas partes del
cuerpo humano: piel, sistema capilar, uñas, labios, órganos genitales
externos, dientes y membranas mucosas de la cavidad oral, con el
objeto exclusivo o principal de higienizarlas, perfumarlas, cambiar su
apariencia, protegerlas o mantenerlas en buen estado y/o corregir
olores corporales. Estos productos no podrán proclamar actividad
terapéutica alguna.
Cualidades: un cosmético debe siempre respetar la integridad y
funciones vitales de la piel, mantener su Ph eudérmico poseyendo
requisitos para un retorno rápido a la normalidad, ser bien tolerado y
con una perfecta inocuidad microbiana y toxicológica para el usuario.

Componentes de un cosmético
Los cosméticos se componen fundamentalmente de tres partes:
 Base, vehículo o excipiente: Es el componente mayoritario y
será el encargado de vehiculizar el principio activo del cosmético
en el lugar en que es aplicado. Puede tener acción cosmética por
si mismo y tendrá una forma galénica determinada, definida por
la naturaleza de sus componentes.
Componentes Principales Forma galénica del cosmético
Agua y solubilizantes Soluciones (tónicos en general)
Agua y polímeros Geles
Agua, aceites y emulsiones Emulsiones (cremas y leches)
Microvesículas Liposomas, nanoesferas, etc.
Hay vehículos que pueden adquirir tanta importancia como los
principios activos presentes en la fórmula, ya que pueden
proporcionar una acción específica (descongestión, hidratación,
frescura, etc.). La naturaleza físico-química del vehículo influirá
En la estabilidad del principio activo, forma de liberación,
Duración o eficacia de acción.
Todo vehículo debe reunir las siguientes condiciones:
 Lo ideal es que sea liposoluble o lipofílico, con el fin de
atravesar el manto hidrolipídico y penetrar en la piel a lo largo
del folículo pilosebáceo.
 Mantener una composición constante.
 Mantener la estabilidad frente agentes externos.
 Deberá tener un Ph similar al de la piel.
 No inactivar ni reaccionar con los activos que transporta.
 No ser irritante, sensibilizante, ni tóxico.
 No tener características organolépticas indeseables, como mal

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 olor.
 Aditivos: Son sustancias que modifican los caracteres
organolépticos del excipiente, confiriéndoles color y olor
agradables. Encargándose de su conservación por determinado
tiempo. Dentro de los aditivos podemos citar a las sustancias
correctoras, las sustancias conservantes o preservantes, los
colorantes y perfumes o fragancias.
 Principios activos: Son sustancias químicas naturales o
sintéticas, responsables del efecto y eficacia de un cosmético.
Se emplean generalmente en pequeñas cantidades (del 0,1 al
15%), determinan sus efectos cutáneos y su función.
Los principios activos pueden ser orgánicos u inorgánicos
según sea su origen:
1- Origen vegetal: extractos glicólicos, fluidos, tinturas, etc.
2- Origen animal: colágeno, placenta, elastina, etc.
3- Origen sintético: urea, etc.
4- Origen mineral: óxido de zinc, microcristales amorfos, etc.

Formas cosméticas
La forma cosmética es la presentación final del producto y está
determinada por el excipiente o vehículo que contiene.
Estas pueden ser:
 Soluciones: Es la forma mas sencilla, donde el componente más
abundante suele ser el agua, en la cual se disuelven o
solubilizan los principios activos. A veces el agua puede ir
acompañado de alcohol. El ejemplo típico es el tónico, en el cual
el disolvente suele ser el agua o bien una mezcla hidroalcohólica
y el soluto está compuesto por extractos vegetales u otras
sustancias activas.
 Geles: Un gel es un sistema formado por dos fases: una fase
sólida constituida por polímeros que crean una red
tridimensional, en cuyo interior retiene a la otra fase que será
liquida (agua). El agua a su vez contendrá en disolución a los
principios activos incorporados a ella. Los geles son preparados
de consistencia viscosa, de aspecto homogéneo y
semitransparentes. Se emplean especialmente en aquellos casos
en donde no es conveniente la aplicación de excipientes grasos
(por ejemplo: zona de contorno de ojos) o en aquellas personas
que no toleran las grasas de las cremas. Suelen tener una
acción tensora importante, por lo cual se utilizan normalmente
en los preparados reafirmantes. Los geles no son compuestos
hidratantes, por cuyo motivo no son adecuados para aquellas
personas con piel seca.
 Emulsiones: Las emulsiones constituyen el vehículo mas
utilizado en los preparados cosméticos. Las emulsiones de alta
viscosidad reciben el nombre de cremas y las de baja viscosidad
(emulsiones fluidas) se denominan leches. Una emulsión está
compuesta por dos fases líquidas no miscibles entre sí. Una está
incorporada en pequeñas gotas dentro de la otra.

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 La fase dispersada recibe el nombre de fase interna o
discontínua.
La fase dispersante recibe el nombre de fase externa o contínua.
Varios son los tipos de emulsiones posibles, pero dos (2) son los
más utilizados en cosmética:
1- Emulsión w/o  fase interna hidrófila
(agua/aceite)  fase externa lipófila

2- Emulsión o/w  fase interna lipófila

(aceite/agua)  fase externa hidrófila

Emulsión w/o Emulsión o/w

Untuosa al tacto. Sensación grasa No untuosa. Sensación refrescante
Aspecto brillante Aspecto opaco o mate
Resistente al agua Lavable con agua
Penetra con dificultad Penetra fácilmente

En la actualidad predominan las formulaciones de fase externa

acuosa, en especial por su mayor grado de aceptación entre los
consumidores. Su principal ventaja radica en la vehiculización
de principios activos hidrófilos y lipófilos al mismo tiempo, éstos
se incorporan a la fase correspondiente en función de su
afinidad.
 Suspensiones: Son formas líquidas en las que uno o varios
componentes líquidos dispersan a unos componentes sólidos
insolubles. Se utilizan sobre todo en cosmética decorativa como
maquillajes fluidos o esmaltes de uñas.
 Pastas: Son formas semisólidas deformables y húmedas.
Contienen un alto porcentaje de sustancias sólidas
pulverizadas, dispersas en líquidos acuosos u oleosos.
 Pastillas: Son formas sólidas que se obtienen por moldeado y
prensado. Ejemplo: maquillaje compacto, pastilla de jabón.
 Barras: Son cosméticos sólidos, de forma cilíndrica, formados
por ceras, grasas y aceites, obtenidos por fusión en moldes, que
se aplican por deslizamiento sobre la piel. Ejemplo: barra para
labios.
 Polvos: Son sustancias sólidas, finamente divididas. Pueden
encontrarse comprimidos (polvos compactos) o sueltos.
 Espuma: Emulsión bifásica donde la fase interna es aire u otro
gas y la externa es un sólido o líquido. Ejemplo: espuma de
afeitar.

Biomoléculas utilizadas en cosmética

Liposomas: Son vesículas de una o varias capas, generalmente de
fosfolípidos que se utilizan como transportadores de diversas
sustancias entre el exterior y el interior de la célula. Tienen la
particularidad que sus capas tienen un gran parecido con las
membranas celulares de las células epidérmicas. A este fenómeno
se lo llama Biomimetismo, por lo que el paso del liposoma con

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 su rica carga de principios activos en su interior, será mucho más
fácil y expedita.
Nanopartículas: Son pequeñas esferas macizas, sin vesícula interior
(lo que las diferencia de los liposomas) y en cuyo interior hay
millones de canales donde los principios activos están adheridos
firmemente y en forma uniforme.
Según su diámetro pueden ser: Microesferas: son visibles al ojo
humano y su estructura corresponde al la descripción anterior. O
bien: Nanoesferas o microesponjas: constituidas por polímeros,
tienen una estructura porosa que las hace similares a esponjas
minúsculas. Los principios activos se adhieren tanto en la
superficie como dentro de las múltiples cavidades de esta red.

Lectura de formulas:

Todos los productos cosméticos deben estar debidamente etiquetados.

En su etiqueta debe figurar cual es su finalidad y cuales son sus
ingredientes. Al listado de ingredientes se lo denomina INCI
(Nomenclatura Internacional de Ingredientes Cosméticos), allí lo que
debe figurar es la fórmula cualitativa y NO la cuantitativa. O sea los
componentes figuran de mayor a menor según la concentración
utilizada, pero no se expresan cantidades.

Cosméticos Populares / Profesionales / Cosmecéuticos

Es función del profesional de estética conocer las diferencias existentes

entre estos términos, para recomendar oportunamente un apoyo
domiciliario acorde a las necesidades del paciente/cliente y poder
explicarle que no se persigue un fin comercial sino una continuidad del
tratamiento iniciado en gabinete.
Cosméticos populares: comprenden aquellos de uso diario que
pueden adquirirse en los comercios, ya que la gran demanda por
parte del público justifica su interés comercial. Deben estar
elaborados con concentraciones mínimas de principios activos ya
que no deber generar alergias y podrán ser utilizados por el
público en general.
Cosméticos profesionales: Son aquellos que por su formulación,
diseño y concentración de principios activos, permiten su uso NO
médico para tratar de corregir alteraciones estéticas o cosméticas
de superficie. Si bien son de venta libre se recomienda su uso
bajo la asistencia del profesional de estética
Cosmecéuticos: son preparados de uso tópico que contienen
principios activos capaces de influir en las funciones biológicas de
la piel, básicamente aportando nutrientes para lograr el efecto
deseado. La publicidad de los cosmecéuticos promete mantener la
piel sana, estimular su actividad biológica y ejercer funciones
reparadoras sobre ella. Existen cosmecéuticos para el
fotoenvejecimiento, las arrugas, las manchas, la piel grasa o seca,

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 el acné, la dermatitis, la celulitis y, en resumen, para casi todo lo
que potencie una piel sana y hermosa.

Aclaración: El término “cosmecéutico”, nace de la unión de las

palabras “cosmético” y “farmacéutico”, fue acuñado por el dermatólogo
Dr. Albert Klingman y como él mismo explicó en un artículo fue un
término controvertido desde el principio.
La razón de esta controversia reside en que no hay un límite claro que
nos permita decidir que es un cosmecéutico, existe un vacío legal al no
estar regulados como tal. En la legislación vigente encontramos que es
un cosmético y que no lo es, y si nos atenemos a ella, si un cosmético
ejerce alguna acción sobre la piel o sus funciones, entonces debemos
calificarlo como medicamento.
Según la FDA, Food Drug Administration USA, la finalidad del producto
es lo que define si es un cosmético o un medicamento, si ésta es
embellecer o mejorar la apariencia, es un cosmético, y si su finalidad es
curar o prevenir una enfermedad es un medicamento. Además a los
medicamentos se les exige que demuestren su seguridad y su eficacia, y
sin embargo a los cosméticos no, pero es más, la FDA dice claramente
que estos últimos no pueden tener ningún efecto demostrable sobre las
funciones de la piel.
Entonces, ¿qué son los cosmecéuticos? A falta de una definición legal
más clara, se podría decir que son cosméticos cuyos ingredientes
activos, o principios activos, son de más alto nivel ya que han sido
desarrollados y testados científicamente, y son capaces de mejorar las
funciones celulares y la estructura de la piel.
Un cosmecéutico, suele contener uno o varios de los siguientes
ingredientes: péptidos, factores de crecimiento, antioxidantes, vitaminas
A, C y E, alfa-hidroxiácidos, etc., junto con otros activos botánicos, pero
para que un cosmecéutico sea realmente efectivo, no vale solo con tener
estos ingredientes, lo importante es que estén en dosis lo
suficientemente altas como para lograr mejorar el estado de la piel.

PH de la piel

El pH es la medida de acidez o alcalinidad de una solución “acuosa”. El

pH indica la concentración de iones presentes en ésta. La sigla significa
‘potencial de hidrógeno’.
El concepto de "pH" proviene del latín pundus hidrogenit (pundus -
poder, hidrogenit - hidrógeno).
Se mide en una escala que va del 0 al 14 en donde el 7 es el punto
neutro. Las sustancias ácidas poseen un pH menor de 7 y las alcalinas
o básicas un pH mayor de 7.
El grado normal de pH que tiene la piel va de 4.5 a 5.5 (ligeramente
ácido). Es el producto de las sustancias solubles en agua del estrato

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córneo, como el sudor secretado, el sebo y la eliminación de dióxido de
carbono.
Si bien el valor que se considera normal es de 5.5, el valor normal en la
piel del hombre es de 5 y en las mujeres 5.5. Hay zonas menos ácidas
como las axilas (debido a la secreción de las glándulas apocrinas),
areola del pezón, ombligo, frente, pliegues inguinales, cuello, nuca,
pecho y espalda.
En el cuero cabelludo se observa la mayor acidez de todo el cuerpo, con
un pH que está algo por encima de 4. Esto se debe a la gran presencia
de glándulas sudoríparas.
El sudor es el principal factor productor de acidez cutánea: a mayor
sudor  pH más bajo, o sea mayor acidez. En definitiva, es el manto
hidrolipídico el que le otorga la acidez característica a cada zona del
cuerpo.

Acidez Alcalinidad

0 5,5 7 14
Piel normal neutro

Importancia del pH en la formulación de los cosméticos

Los productos cosméticos que poseen óptimos rangos de pH permiten
actuar a los principios activos por períodos de tiempo prolongado, sin
necesidad de ser neutralizados o retirados y sin producir agresiones o
irritación, aún en pieles sensibles. Logrando de esta manera que los
principios activos estén mucho mas tiempo en contacto con la piel para
su absorción o penetración.

Tratamiento cosmético desde el activo

Todos los cosmeticos, al momento de desarrollar un tratamiento, tienen

un objetivo o efecto preponderante. Teniendo en cuenta esto pueden
clasificarse en:
 Cosméticos pasivos, de cobertura o maquillajes: Son aquellos
que cubren las alteraciones estéticas y cosméticas una vez
aplicados sobre la superficie a cubrir. Cumplen con una función
bien determinada, preparando y hermoseando la piel y sus
anexos para su lucimiento momentáneo, siendo su efecto fugaz,
transitorio y efímero.
 Cosméticos activos o de acción correctora: Son aquellos que,
gracias a su diseño y a la formulación de sus principios activos,
resultan eficaces para corregir alteraciones estéticas de la piel y
sus anexos tanto superficial como medianamente profunda, con
resultados razonablemente prolongados.
Como se puede deducir, tienen tres puntos esenciales:
1. Corregir las alteraciones estéticas de la piel y anexos.

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 2. Ejercer acción sobre la superficie y la profundidad de la
piel.
3. Deben estar dotados de efectos prolongados, o sea no tener
acción efímera o breve.
Los cosméticos activos, según el orden de aplicación en las
prácticas de gabinete, pueden clasificarse en:
 Limpiadores o de higiene: son los primeros que deben
usarse antes de toda práctica o tratamiento cosmético,
como paso previo a la aplicación de cualquier otro producto
o método. Del buen uso del cosmético limpiador puede
depender el resultado exitoso de un tratamiento. Por lo
tanto se puede decir que el éxito en gabinete comienza con
la limpieza y preparación adecuada de la piel. La función de
estos productos es eliminar la suciedad y el exceso de sebo
de la piel, así como barrer la capa de células muertas,
especialmente en prácticas faciales. Su acción puede ser
superficial y suave en el caso de pieles sensibles, o mucho
mas profunda e intensa, pudiendo llegar a producir una
exfoliación persistente en pieles hiperqueratósicas,
engrosadas, o con manchas y/o cicatrices.
La finalidad de una buena higiene es facilitar la
penetración posterior del producto cosmético corrector
activo.
 Reguladores: se aplican a continuación de los productos
de higiene, tienen por función hidratar, regular el pH, el
sebo y la penetrabilidad cutánea, preparando la piel para
una mejor absorción de los principios activos. En general
tienden a regular los parámetros dermocosméticas: pH,
hidratación y sebo.
 Correctores: Se aplican una vez preparada correctamente
la piel con los cosméticos limpiadores y reguladores. Son
aquellos con principios activos capaces de corregir
alteración estéticas tales como: hiperqueratosis,
envejecimiento cutáneo, flacidez, acné y sus secuelas,
manchas, etc.
 Protectores: son aquellos que protegen la piel contra la
acción de diversas noxas. Por ejemplo: sol, radiaciones,
polución, smog, transgresiones alimenticias, clima,
enfermedades y terapéuticas que cursan con deterioro
cutáneo, etc. Deben, además, tener la capacidad de
prolongar los resultados obtenidos en el tratamiento que se
cursa.

Cosméticos Antioxidantes

El envejecimiento cutáneo es un proceso dinámico y complejo en el que

están involucrados múltiples factores genéticos, hormonales y
ambientales; en él la piel sufre una serie de alteraciones a nivel de la
dermis y epidermis, y una reducción del tejido graso subcutáneo. Como

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consecuencia de esto la piel se vuelve seca, descamante, aparecen
arrugas, manchas y pueden surgir alteraciones como las
telangiectasias, nevos, quistes, etc. La cosmética profesional
actualmente cuenta con un arsenal de ingredientes activos
antioxidantes que busca paliar el proceso de envejecimiento.
Repasemos los básicos para formulación de productos:
La vitamina C
Como activo cosmético está más que demostrada su acción
antioxidante. Las aplicaciones locales de vitamina C disminuyen la
fototoxicidad cutánea de los rayos UVA y UVB, tiene una intensa
capacidad neutralizadora de los radicales libres, estimula la síntesis de
colágeno, tiene efectos descongestivos y regenerantes. La vitamina C es
un gran aliado en la lucha contra el envejecimiento.
La vitamina E
La vitamina E o tocoferol es una de las vitaminas más interesantes en
formulación de cosméticos antioxidantes. Posee cualidades hidratantes
y cicatrizantes, pero sobre todo es uno de los más potentes
antioxidantes debido a su función protectora de las membranas
celulares frente a la oxidación de los lípidos.
El ácido lipoico
Es un antioxidante de amplio espectro que funciona en agua y en
tejidos grasos. El ácido lipoico o ácido tióctico es una sustancia natural
producida en pequeñas cantidades por nuestro organismo, juega un rol
fisiológico importante en el metabolismo de los azúcares y provee de
energía a las células.
Los alfahidroxiácidos
Son ácidos orgánicos cuya acción se basa en la disminución de los
corneocitos, logrando una acción queratolítica que facilita la
descamación suave y progresiva de las células muertas, al mismo
tiempo que reactivan la renovación celular. Los más importantes son los
ácidos láctico, glicólico, mandélico, málico, cítrico y tartárico. Estos
ácidos atenúan las arrugas, mejoran la textura epidérmica, y ayudan a
recuperar la firmeza y flexibilidad cutánea.
El retinol
Es la forma más pura que existe de la vitamina A y un antioxidante
natural que estimula la producción de colágeno. La vitamina A es
indispensable para regular la proliferación y diferenciación epidérmica,
mejora la pigmentación, la elasticidad, la rugosidad cutánea y las
queratosis actínicas, ayuda a la renovación celular de la piel y regula la
producción de grasa de las glándulas sebáceas.
Coenzima Q10
La aplicación tópica de este activo puede prevenir el daño en la
producción de colágeno y elastina. La coenzima Q10 es liposoluble y la
produce el cuerpo humano en las mitocondrias, está involucrada en la
regeneración de vitamina E y su función antioxidante se da a nivel de
membranas lipídicas y en las mismas mitocondrias. De esta manera las
células de nuestro organismo se ven protegidas de los efectos
destructivos de los radicales libres.

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Los flavonoides
“Flavonoides” es el nombre genérico de un grupo de moléculas
generadas por el metabolismo secundario de los vegetales, estas
sustancias actúan en contra de los radicales libres tanto en su fase
inicial como en la de propagación. En consecuencia, protegen la
membrana de la célula y por ende todos los procesos de la misma,
frenando su deterioro.
Los polifenoles
Son un grupo de sustancias químicas encontradas en diversas plantas.
Químicamente se caracterizan por la presencia de más de un grupo
fenol. Hay una fracción en la molécula de los polifenoles que es la más
activa y a la que se le conceden propiedades antioxidantes muy
importantes. Los polifenoles logran su acción antioxidante al actuar
como trampas de radicales libres.

Máscaras: Definición. Principios activos. Acciones

Visión histórica
El uso de las máscaras se observa a través de la historia en todas sus
épocas, reconociendo un fundamento físico y químico. Su utilización fue
producto de la influencia de tradiciones que van de lo religioso a lo
alquímico. Los objetivos buscados van desde la prevención en la
propagación de las enfermedades, a los usos terapéuticos y también
cosméticos. La búsqueda de la belleza y la preservación de la juventud
han orientado al hombre hacia prácticas que incluían enmascaramiento
total o parcial. La industria cosmética ha ido incrementando su
desarrollo hasta los días presentes y ha tomado de la naturaleza los
principios que producen una acción diversa y efectiva en la
conservación de la salud y la belleza cutánea.
Definición:
Las máscaras se utilizan para potenciar los efectos de los productos
aplicados con anterioridad con el fin de refrescar, lubricar, tonificar,
humectar, etc. la piel.
La función de las máscaras es variada, ya que van desde una acción de
higiene de la piel, hasta una corrección de ésta, por medio de distintas
acciones y a través de sus principios activos. Debemos agregar el efecto
"psicológico" aportando relax, bienestar, etc., que se logra con su
aplicación.
Se presentan en diferentes formas cosméticas: geles, cremas, láminas
soporte, polvos, pastas al agua, (arcillosas) pastas al aceite, etc.
En lo que respecta a la acción de las máscaras en los distintos tipos de
piel, es de suma importancia que el principio activo esté contenido en
un vehículo apropiado para la acción que se desee realizar, ya que el
excipiente es tan importante como el activo. Cabe recordar que el tipo
de piel será quien determine el vehículo y activo de la máscara a
emplear.
Entre las más empleadas, podemos citar:

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Máscaras blanqueadoras:
Su acción es aclarar la superficie cutánea, al provocar una leve
descamación. Se aplican en pieles con hiperpigmentaciones.
Se presentan en polvos de preparación extemporánea, máscaras
cremosas y arcillas.
Máscaras con acción depuradora:
Actúan secuestrando o absorbiendo la suciedad depositada en el estrato
córneo. Se las utiliza en pieles seborreicas o acnéicas.
Estas máscaras no pueden hacerse en vehículos cremosos, porque
pueden fermentar.
Máscaras enzimáticas:
Producen un ablandamiento y posterior desprendimiento de las células
queratinizadas. De acción queratolítica leve y suave. Puede aplicarse en
todo tipo de piel. Se presentan en vehículos polvos o arcillosos.
Máscaras cremosas:
Aportan a la piel: emoliencia, lubricación, hidratación a través de la
oclusión que producen.
Indicadas para pieles secas, involutivas, fotoenvejecidas. No deben ser
aplicadas en pieles seborreicas y/o acnéicas.
Máscaras de parafina:
Actúan rehidratando o macerando el estrato córneo por la temperatura
y oclusión.
Indicadas en pieles secas, involutivas, fotoenvejecidas. No deben ser
utilizadas en pieles sensibles, rosácea, acné, seborrea.
Máscaras plásticas frías:
Actúan modelando el contorno facial, favorecen la hidratación
epidérmica a través de la oclusión produciendo la imbibición de las
células córneas.
Máscaras descongestivas:
Efecto refrescante, calmante. En su composición se utilizan extractos
glicólicos de vegetales: sauco, manzanilla, aloe vera, arándanos, mentol,
alcanfor, malva, tilo, caolín, etc.
Se presentan en vehículos geles.
Máscaras para párpados:
Se utilizan en vehículos cremosos, en geles o en láminas o soportes
especiales para el área. Su función es hidratar, descongestionar y
tensar la zona periorbitaria.

Ácidos

Los ácidos en general, tanto de origen natural como químico, en breves

palabras actúan exfoliando la piel, renovándola y estimulando la
producción de colágeno. Son unos de los componentes mas usados en
cosmética antiedad, ya que son efectivos y pueden mejorar el problema
de fotoenvejecimiento, arrugas, hidratación de la piel y elasticidad.
Estos actúan en los niveles dérmico y epidérmico de la piel. Al aplicarlos
se estimula la exfoliación de las células epidérmicas del estrato córneo
al interferir en los enlaces iónicos entre ellas y así ir eliminando las más
antiguas mejorando el aspecto exterior de la piel. Esto es muy efectivo

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en problemas de hiperqueratosis al estimular “el turnover” natural de la
piel.
Los ácidos tienen la capacidad de penetrar hasta la dermis donde tienen
una importante acción antiedad al estimular la producción de
mucopolisacáridos, como el ácido hialurónico, mejorar la calidad de las
fibras de elastina y mejorar la densidad del colágeno, con ello se logra
un mayor grosor y tensión de la capa dérmica.
Hace años ya que se conoce que los AHA (alfa hidroxiácidos) y los BHA
(beta hidroxiácidos) son muy efectivos en la piel, la mayoría de estos
son procedentes de frutas y vegetales.
AHAs, Alfa- hidroxiácidos
Son ácidos hidrosolubles que se encuentran de forma natural en
muchos alimentos, como son el glicólico en el azúcar de caña, el láctico
en la leche, el cítrico en los cítricos, el málico en las manzanas, el
mandélico en almendras amargas.
BHAs, Beta- hidroxiácidos
Son similares a los AHAs pero son liposolubles, o sea no se disuelven en
agua. Al tener una estructura lipídica, pueden penetrar en la piel a
través de los folículos sebáceos por lo que son especialmente apropiados
en personas con problemas de poros dilatados y acné.

Ácidos más utilizados en Estética:

Ácido Glicólico- indicado para el cuidado intensivo de pieles con
fotoenvejecimiento, manchas cutáneas e imperfecciones de pieles como
secuelas de acné. Este ácido ayuda a desprender las capas de células
muertas que se acumulan en la superficie, ayudando a oxigenarla y
mejorando significativamente su apariencia y textura. Además, tiene
una gran capacidad humectante, lo que ayuda a mantener la piel fresca
evitando el envejecimiento prematuro.
Ácido Salicílico: indicado principalmente para pieles grasas o con
tendencia acnéica, este ácido al entrar en contacto con el material
sebáceo que se encuentra estancado en los folículos reacciona
provocando la exfoliación y descamación tanto de la superficie de la piel
como del interior del folículo.
Ácido Láctico: indicado para el tratamiento de pequeñas arrugas y del
fotoenvejecimiento cutáneo, además de tener propiedades
despigmentantes que ayudan a dar uniformidad al tono de la piel y
devolverle luminosidad. Este ácido estimula la formación de fibras de
colágeno y elastina y tiene una gran acción hidratante.
Ácido Mandélico: indicado especialmente para el tratamiento de acné e
hiperpigmentación. Este ácido exfolia suavemente favoreciendo la
eliminación de las capas superficiales de la piel con lo que el resultado
es una piel más luminosa. Del mismo modo, tiene propiedades
bactericidas que son de gran ayuda en los tratamientos del acné. Es
especialmente recomendado para pieles sensibles por no causar
irritación, pudiéndose utilizar también en verano.
Ácido retinoico: indicado para reducir el aspecto de las líneas de
expresión, arrugas y manchas ya que ayuda a acelerar la regeneración
celular y estimula la síntesis de colágeno. Este ácido actúa provocando

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la división celular desde las capas más profundas de la piel. Se
recomienda la supervisión de un profesional con estos tratamientos
para minimizar la irritación asociada a su uso.
Ácido hialurónico: indicado en caso de pieles deshidratadas. Esta
molécula, presente naturalmente en el organismo, es la responsable de
mantener la tensión del tejido. Con el agua, el ácido hialurónico forma
un gel muy voluminoso capaz de redensificar los tejidos dando un
aspecto de turgencia.
Ácido ascórbico (Vitamina C) – indicado para mejorar las arrugas
superficiales, la textura de la piel y para retrasar el envejecimiento, así
como para unificar el tono de las manchas solares y aportar
luminosidad. Este ácido protege la piel del daño oxidativo y mejora la
elasticidad cutánea.

Renovadores celulares
Toman este nombre determinados alfa-hidroxiácidos, como por ejemplo
el ácido glicolico y el mandélico, cuando se los utiliza en bajas
concentraciones y son recomendados para uso domiciliario.
Su función en estimular en forma lenta y constante la renovación
celular cutánea, que a determinada edad o bien por distintos factores
desencadenantes como el fotoenvejecimiento se enlentece ocasionando
un envejecimiento más pronunciado.
Los renovadores celulares se usan diariamente, el lo posible en horario
nocturno, se colocan previo al descanso y su función primordial es la
descamación de la células muertas de superficie.

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Cuestionario Unidad 4

1- El agua puede ser el mayor componente del vehículo o del conservante de un

producto cosmetológico?
2- Es el vehículo de un producto cosmetológico tan importante como los principios
activos que lo componen?
3- Un extracto glicolico de aloe vera es un excipiente, un aditivo o un principio
activo?
4- Que forma cosmetológica tiene una loción tónica descongestiva?
5- Las cremas son emulsiones pesadas, de alta viscosidad o ligeras y livianas?
6- En la siguiente lectura de componentes (INCI) cual es el elemento de mayor
contenido y cual es menor?.

Water-Carbomer-Mineral oil-Trietanolamine-Methylparaben-Fragance

7- El producto cosmetológico que suele encontrarse en la góndola de un

supermercado es un cosmético popular o profesional?
8- Si un producto cosmetológico lleva el pH de la piel a 3.5 lo acidifica?
9- Es un producto de acción correctiva el encargado de barrer las células muertas
de la superficie cutánea?
10- Investiga de donde proviene el ácido glicólico y el ácido mandélico?

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UNIDAD 5

Envejecimiento Cutáneo

Concepto:
El envejecimiento puede definirse como el conjunto de cambios
fisiológicos que se suceden con el paso de los años y que provocan un
aumento de la susceptibilidad del individuo frente a factores que
pueden desencadenarle la muerte.
El envejecimiento de la piel es el que generalmente más preocupa al
hombre, y esto tiene mucha relación con la importancia que
socialmente tiene la piel y también con el hecho de que por ser ella el
órgano más extenso y también el más visible es el que muestra el
envejecimiento en forma más obvia.

Factores desencadenantes intrínsecos y extrínsecos

Al envejecimiento se lo puede dividir en:

 Envejecimiento intrínseco referido a aquellos cambios cutáneos
que se producen como resultado de factores endógenos
desconocidos y de factores genéticos.
 Fotoenvejecimiento llamado también heliodermatitis constituido
por aquellos cambios cutáneos producidos por la exposición solar
crónica, los cuales se superponen al envejecimiento intrínseco y
que a menudo son erróneamente atribuidos a él.

Envejecimiento intrínseco: cambios fundamentales

En epidermis: El cambio histológico más llamativo y constante es el
aplanamiento de la unión dermoepidérmica, lo que conlleva a una
menor comunicación y transferencia de nutrientes en la capa basal.
También se registra una disminución importante en el número de
melanocitos, células encargadas de la pigmentación de la piel. Y una
disminución de un 50% del número de células de Langerhans,
encargadas de proteger al individuo de infecciones superficiales (células
macrófagos).
En dermis: Es a este nivel donde se suceden los cambios más
importantes tanto cualitativa como cuantitativamente.
Se produce una disminución del espesor de aproximadamente el 20%
Una disminución evidente en el número de mastocitos, células
importantes en el sistema inmune del organismo.
Disminución en número y alteración en la forma de los fibroblastos,
células responsables de la proliferación celular y de la síntesis de
colágeno y elastina.
Ensanchamiento y rigidez de las fibras de colágeno
Perdida de elasticidad y fragmentación de las fibras de elastina.
Degradación de la sustancia fundamental (medio acuoso que contiene a
las fibras).
Perdida de acido hialurónico.

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En hipodermis: Disminución de la grasa acumulada en los adipositos.
Pérdida de energía almacenada. Perdida de aislamiento térmico.
Problemas de irrigación sanguínea.
En anexos: Las glándulas sudoríparas disminuyen en número y
tamaño, también disminuye su secreción. Las glándulas sebáceas
permanecen igual pero disminuye la secreción de sebo. Disminución del
espesor y de la velocidad del crecimiento de las uñas. Alteraciones de
los vasos sanguíneos (capilares más permeables), presencia de
telangiectaceas y varículas. Alteraciones y debilidad del pelo.
A nivel muscular se produce una disminución del volumen con pérdida
de tonicidad.

Funciones que declinan en el envejecimiento:

Función de barrera  mas susceptibilidad a agresiones externas
Respuesta a las agresiones  función enlentecida
Reemplazo celular  renovación celular lenta, cicatrización lenta
Disminución de la producción de sebo y sudor
Alteraciones en la termorregulación
Percepción sensorial y mayor tolerancia al dolor
Respuesta inmune

Los Factores que influyen en la edad de piel son:

 La herencia genética: es un factor invariable que viene dado por

nuestros progenitores y sus ascendentes genéticos. Puede ser una
predisposición positiva o negativa y puede ser acentuada o
activada por factores ambientales.
 La edad cronológica: es un factor invariable, son los años
numéricos que hemos vivido.
 El tipo de piel y el fototipo cutáneo: éste es un factor
importante ya que, según el tipo de piel y el cuidado que se le dé
(sobre todo la exposición al sol), el envejecimiento actuará de una
u otra manera.
 El estilo de vida y la relación con el entorno: influyen diversas
consideraciones, como el sol, el clima, la sequedad ambiental, los
radicales libres, la contaminación, el tabaco, la higiene y el uso de
cosméticos.

Radicalización de los tejidos – Radicales libres

El organismo humano esta compuesto por moléculas, o agrupaciones

de átomos, cuyos electrones están habitualmente emparejados. Este
emparejamiento da estabilidad electroquímica a la molécula.
Si por algún motivo un electrón de un átomo o una molécula queda
libre, su inestabilidad le llevará a buscar otro para completar el par.
Esto es un radical libre (RL). Dado que los electrones no circulan solos
por ahí, lo robará de otra molécula, que a su vez se quedará con un
electrón desapareado, convirtiéndose así en otro radical libre, que a su
vez tratará de emparejar su electrón. Y así sucesivamente. Si esto no se

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frena a tiempo se desencadena un proceso que puede acabar por
lesionar las células. Esta reacción química en cadena lleva al estrés
oxidativo y al envejecimiento de los tejidos. Cuando esto sucede en un
organismo joven, se dice que el estrés oxidativo conduce a un
envejecimiento prematuro.
Para evitar esta cadena de reacciones, nuestro organismo tiene un
sistema interno de producción de sustancias antioxidantes que tienen
la capacidad de neutralizar los radicales libres sin por ello quedar
oxidadas. El metabolismo normal de los nutrientes produce de forma
continua una cierta cantidad de RL. Incluso, a veces el organismo los
utiliza en su lucha contra bacterias y virus. Pero los antioxidantes
internos evitan que estas sustancias nos oxiden y envejezcamos
prematuramente.

Fotoenvejecimiento

El fotoenvejecimiento resulta de la combinación de los efectos del

envejecimiento biológico y los efectos a largo plazo causados por la
exposición a la radiación ultravioleta proveniente del sol.
De acuerdo con diferentes investigaciones, los rayos ultravioleta
emitidos por el sol (UVA – UVB) generan daños en las diferentes capas
de la piel debido a que propician la formación de radicales libres
(moléculas tóxicas que destruyen a las células del organismo), y aunque
se reconoce que este hecho también es ocasionado por el paso del
tiempo, se especula que 75% de las arrugas y falta de elasticidad en la
piel de una persona mayor, se deben al sol, y sólo 25% a la edad.
Pero cabe destacar que no es el sol el único responsable del
fotoenvejecimiento, también son responsables otros factores
ambientales como heladas, viento, nieve, humedad, etc.
Los cambios que se producen por el fotoenvejecimiento en la piel son:
 Arrugas finas y gruesas más marcadas, que en el cuello dibujan
profundos surcos con figuras geométricas.
 La textura de la piel es áspera, excesivamente seca, descamativa,
laxa y con una coloración amarillenta.
 Los poros son más grandes, llenos de material córneo, a veces
formando comedones gigantes.
 La piel tiene una pigmentación moteada. Con aparición de
manchas de color marrón claro u oscuro, de superficie lisa y
plana y de tamaño variable, sobre todo en el dorso de las manos,
llamados léntigos seniles solares.
También, es posible la aparición de tumoraciones benignas como
puntos rubí o verrugas seborreicas; lesiones premalignas como la
queratosis actínica o lesiones malignas, como los epiteliomas o el
melanoma maligno.
Recomendaciones para prevenir el fotodaño
 Utilizar un filtro con graduación de factor de protección solar
(FPS) 15, al menos.

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  Aplicar filtro solar 15 a 30 minutos antes de salir, especialmente
en rostro, orejas, manos, brazos, y otras zonas de la piel no
cubiertas por ropa.
 Evitar broncearse deliberadamente y limitar la exposición al sol
durante las horas de mayor intensidad (entre las 11 y las 15
horas).
 Repetir la aplicación de filtro de manera periódica, pues sin
importar dónde se encuentre (playa, montaña, desierto o ciudad),
la efectividad de estos productos decrece luego de dos horas,
aproximadamente. Debe actuarse de igual manera luego de nadar
o realizar alguna actividad que produzca sudor, el cual puede
eliminar la protección.
 Consumir alimentos con vitaminas C y E (naranja, limón, coliflor,
kiwi, melón, tomate, zanahoria, arándanos, fresas, etc.).
 Uso diario de productos cosméticos hidratantes, con principios
activos que frenen la radicalización de los tejidos.
 Realizar exfoliaciones periódicas.
 Estimular la renovación celular utilizando a diario productos que
cumplan este fin.

Fotoprotectores

Para resguardar al organismo de los rayos ultravioleta se puede optar

por cubrir el cuerpo mediante ropa o prendas que lo protejan
(sombreros, gorras, etc.) o utilizar una crema solar. Las cremas solares
son filtros que permiten exponer la piel al sol de manera que esta pueda
broncearse adecuadamente y, al mismo tiempo quede más protegida de
las quemaduras, de los eritemas, del envejecimiento o del desarrollo de
melanomas. Las cremas solares toman el nombre de fotoprotectores.
Muchas personas no utilizan estas cremas porque suponen que su uso
disminuye el bronceado, lo cual es falso dado que en realidad permiten
que la piel se broncee adecuadamente, que los efectos del bronceado
duren más y que la piel no sufra los efectos negativos de los rayos UV.
¿Qué es el factor de protección solar (FPS)?: Es el valor que mide la
efectividad del producto para prevenir las quemaduras solares causadas
por los rayos UVA y UVB. Indica cuánto tiempo puede prolongar el
fotoprotector el enrojecimiento de la piel. Suponiendo que sin usar el
producto adecuado, la piel se enrojece luego de diez minutos de
exposición, al aplicarle, por ejemplo, un fotoprotector con FPS 20,
demorará en enrojecerse 20 veces más, es decir 200 minutos.

Tipos y cobertura de los fotoprotectores solares

Los fotoprotectores son sustancias químicas que actúan mediante dos
tipos de mecanismo: absorción o reflexión. En función de estos dos
mecanismos, se dividen en dos grandes grupos:
-Fotoprotectores químicos u orgánicos: Son sustancias que aplicadas
en la piel absorben los fotones de la luz solar, a través de reacciones
fotoquímicas, y los modifica para que no perjudique la piel. Necesita
unos 30 minutos para hacer efecto, por lo que no es suficiente aplicarlo

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inmediatamente antes de tomar el sol. Dado que se absorben en la piel,
tienen más riesgo de alergia, por lo que su uso está restringido en los
niños. De todas formas, son los fotoprotectores más usados por que son
los más cosméticos.
Las sustancias químicas más utilizadas son el PABA y sus derivados,
las benzofenonas, los cinamatos, los derivados de dibenzoilmetano, etc.,
que son selectivas para una determinada longitud de onda del espectro
lumínico.
-Filtros físicos, inorgánicos o pantalla total: Son sustancias inertes
que aplicadas en la piel reflejan la luz solar como un espejo (no
absorben la radiación). Son mucho más efectivas en cuanto a la
protección por que protegen todo el espectro solar y tienen menos riesgo
de alergia, pero son menos cosméticas, al dejar una fina capa
blanquecina sobre la piel (los fotoprotectores físicos presentan diversas
ventajas: puede verse fácilmente la zona donde han sido aplicados).
Estos últimos, están especialmente indicados en niños. Son sustancias
impermeables a la radiación solar (habitualmente polvos minerales) y
los más utilizados son la mica, el dióxido de titanio, petrolato rojo, el
óxido de zinc o de hierro, salicilatos, cloruro férrico e ictiol, el talco, etc.
Presentan en raras ocasiones dermatitis de contacto o fotocontacto.
Los recientes preparados micronizados son suspensiones de finas
partículas que superan el problema de los preparados antiguos que
debían aplicarse en capa gruesa y eran opacos, por ello, poco
cosméticos. Cuando se dice que un filtro es pantalla total quiere decir
que protege frente a los rayos UVA, UVB, UVC e IR, independientemente
del factor de protección que tenga frente a cada una de estas
radiaciones.

Actualmente todos los envases de los fotoprotectores comercializados

deben indicar claramente el tipo de filtro que es y el espectro de
absorción que protegen. En nuestro país hay una nueva normativa
impartida por el ANMAT que todo fotoprotector protege como “máximo”
un 99% de las radiaciones UVA y UVB por ende no existen los
fotoprotectores totales.

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