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GC Tema 8

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¿Quiénes son las autoridades o funcionarios públicos?

Según el artículo 24 del Código


Penal:
 Las autoridades son aquellas personas que tienen mando o ejercen jurisdicción
propia, es decir, los miembros del Congreso de los Diputados, del Senado, de
las Asambleas Legislativas de las Comunidades Autónomas y del Parlamento
Europeo, y los funcionarios del Ministerio Fiscal.
 Los funcionarios públicos, son todos aquellos que por disposición de la ley,
elección o nombramiento de una autoridad competente participe en el
ejercicio de las funciones públicas.

¿Cuáles son los delitos contra la Administración Pública?


Los delitos contra la administración pública se encuentran regulados en los artículos
404 al 445 del Código Penal, Ley Orgánica 10/1995, con fecha 23 de noviembre. Estos
se encuentran en el Título XIX y cada capítulo corresponde a un delito.
1.- El delito de prevaricación
Este delito de prevaricación viene regulado en el artículo 404 CP y se da cuando un
funcionario público o una autoridad dicta una resolución injustificada relacionada con
un asunto administrativo, pero sabe que es injusto.
Para considerar como delito el funcionario o autoridad debe obrar a sabiendas de que
el acto es arbitrario e injusto. Por lo que quedan excluidos los comportamientos
menos graves imputables a ignorancia, error o negligencia, los cuales conllevan a una
sanción disciplinaria.
La pena impuesta para quien comete este delito es la inhabilitación del cargo o
empleo público y para ejercer el sufragio pasivo. Esta pena será de nueve a quince
años.
Ejemplos de prevaricación
 Un abogado que no asesora a su cliente sobre la posibilidad de presentar un
recurso que se puede ganar fácilmente.
 Un funcionario que propone para ocupar otra plaza de funcionario a una
persona que sabe que ha pasado el proceso de oposición de forma ilegal,
porque se le había filtrado el examen a realizar.

2.- El delito de abandono de destino


El delito de abandono es cometido cuando un funcionario público o autoridad no
persigue los siguientes delitos:
 Delitos contra la Comunidad Internacional (Título XXIV).
 Delitos contra el orden público (Título XXII).
 Los delitos relacionados con la defensa nacional (Título XXIII).
 Los delitos contra la constitución (Título XXI).
 Los delitos contra la paz, de traición o de la independencia del Estado.
 Delitos contra el orden público (Título XXII).
La pena que establece el Código Penal para estos delitos contra la Administración
Pública es de prisión entre uno y cuatro años. Además de inhabilitación absoluta para
el ejercicio de cargo o empleo público entre seis y diez años.
El funcionario público o autoridad que abandone su destino para no perseguir o
impedir cualquier otro delito, será castigado. La pena que se impone por este delito es
de inhabilitación especial por tiempo de uno a tres años para ejercer cargo o empleo
público.
El delito de abandono colectivo está recogido en el artículo 409, este delito castiga a
las autoridades o funcionarios públicos que promuevan, dirijan u organicen el
abandono colectivo de un servicio de carácter público, con consideración de ilegal.
Se castiga con pena de multa de 8 a 12 meses y la suspensión del empleo o cargo
público por tiempo de 6 meses a 2 años.

3.- El delito de desobediencia


El funcionario público o la autoridad que se niegue a cumplir con órdenes, decisiones,
o resoluciones judiciales. Las cuales hayan sido dictadas por una autoridad estará
cometiendo un delito de desobediencia, por lo que será castigado.
Esto se hará de acuerdo con la regulación establecida en los artículos 410 y 411 del
Código Penal. La pena impuesta es inhabilitación especial para ejercer cargo o empleo
público por tiempo de seis meses a dos años y multa de entre tres y doce meses. El
código penal establece expresamente en el artículo 410.2, que no se considerará un
delito de desobediencia no dar el cumplimiento a un mandato claro y terminante que
infrinja una ley.
El funcionario público o la autoridad que una vez suspendida la ejecución de las
órdenes de sus superiores, lo vuelven a desobedecer. Estarán cometiendo el delito de
desobediencia y serán castigados con inhabilitación especial para ejercer cargo o
empleo público. Esto será por el tiempo de uno a tres años y una multa de doce a
veinticuatro meses.
4.- Denegación de auxilio
El delito de denegación de auxilio ocurre cuando el funcionario público no presta el
auxilio requerido por la autoridad competente para administrar la Justicia o cualquier
otro servicio público. Esta conducta será castigada con la suspensión del cargo o
empleo público. Lo cual será por un tiempo entre seis meses y dos años, además de la
pena de multa de tres a doce meses.
Cuando el delito es cometido por un agente de la autoridad o un responsable o jefe de
una fuerza pública, se castigará. La pena que se impondrán será la suspensión del
cargo o empleo público por tiempo de dos a tres años y una multa de doce a dieciocho
meses.
Se está ante el delito de denegación de auxilio cuando el funcionario público o
autoridad se abstenga de prestar auxilio al ser requerido por un particular. Estando
obligado por el cargo que ocupa para evitar un delito contra la vida de las personas.
Esta conducta será castigada con la inhabilitación especial para ejercer cargo o empleo
público por un tiempo de tres a seis años. Además de una multa de dieciocho a
veinticuatro meses.
Cuanto se trata de un delito contra la salud, libertad sexual, libertad de las personas o
la integridad será castigado. La pena impuesta será la suspensión de cargo o empleo
público entre uno y tres años y la pena de multa de doce a dieciocho meses.
En caso de que el requerimiento se hiciera para evitar cualquier otro tipo de delito,
también se castigaría. Lo cual se hará con la suspensión del cargo o público por un
tiempo de seis meses a dos años y la multa de tres a doce meses.

5.- Delito de infidelidad por la custodia de documentos


Este delito se comete cuando el funcionario público o autoridad está obligado
a proteger unos documentos, los inutiliza, destruye, sustrae u oculta. Esto lo hace de
forma intencional o estando totalmente consciente, por lo que será castigado de
acuerdo con el artículo 413.
La pena que se establece para este delito es de prisión que va de uno a cuatro años,
una multa entre siete a veinticuatro meses. Además de inhabilitación especial para
ejercer cargo o empleo público por un tiempo de tres a seis años.
el artículo 414.2 castiga al particular que destruya o inutilice los medios a los que se
hace mención en los apartados anteriores, con una pena de multa de 6 a 18 meses.
El artículo 415 establece castigo para la autoridad o funcionario público que les dé
acceso a documentos secretos a personas que no deben tenerlo. La pena impuesta es
una inhabilitación de uno a tres años y una multa de seis a doce meses.
6.- El delito de violación de secretos
Las autoridades o funcionario públicos cometen el delito de violación de secretos
cuando revelan información que sólo ellos conocen por su cargo. Esto es una conducta
indebida y que lleva una sanción que establece el artículo 417.
La sanción que se aplica es una multa que va de doce a dieciocho meses, además de
inhabilitación entre uno y tres años. En el caso de que la conducta ocasione daños
graves para terceros o para la causa pública el castigo será la pena de prisión de uno o
tres años. También se aplica inhabilitación para ejercer cargo público de tres a cinco
años.
La pena se agrava cuando los secretos pertenecen a un particular, que será de prisión
entre dos y cuatro años. Además de una multa entre doce y dieciocho meses y la
inhabilitación para ejercer cargos públicos de uno a tres años.
Uso de información privilegiada
La información privilegiada es aquella que se conoce por un número reducido de
personas. El artículo 418 trata el delito de uso indebido de esta información.
Castiga al particular que se aprovechara en beneficio propio o de un tercero de un
secreto o información privilegiada que obtenga de una autoridad o funcionario. La
multa será del triplo del beneficio obtenido y la pérdida de la posibilidad de obtener
subvenciones, ayudas públicas, incentivos fiscales o de la seguridad de 1 a 3 años.
Y se agravará el delito si se causara un perjuicio grave a la causa pública o tercero,
castigando con pena de prisión de 1 a 6 años y la pérdida de posibilidad de obtener
subvenciones, ayud… (como en el art. anterior) de 6 a 10 años.

7.- El delito de cohecho (soborno)


El delito de cohecho es uno de los más graves que puede cometer un funcionario
público o autoridad. Se encuentra regulado en el Capítulo V del Código Penal en los
artículos del 419 al 427.
Este delito consiste en la entrega de un soborno con el propósito de corromper a
alguien y obtener un favor en contraprestación. Este delito por lo general es la entrega
de dinero o regalos, que se dan a un funcionario público para que omita una acción.
Para que exista el delito de cohecho debe ocurrir entre un particular y un funcionario
público. Este se considera como un delito grave, el cual se castiga por el Código Penal
español con penas de multa, prisión y otras privaciones de derechos.
Este delito no sólo lo cometen las autoridades y funcionarios públicos sino cualquier
persona que ejerza en la Administración pública. La acción que se comete es la oferta
de contenido económico a cambio de la actuación del servidor público.
El castigo para este delito es la pena de prisión de tres a seis años, inhabilitación
especial para ejercer un cargo público. También se aplica una multa de doce a
veinticuatro meses e inhabilitación para ejercer el derecho de sufragio pasivo que será
de nueve a doce años.
Ejemplos de cohecho
Algunas conductas mediante las cuales se comete un delito de cohecho son las
siguientes:
 En el caso del funcionario, aceptar una suma de dinero a cambio de reconocer
una incapacidad cuando no se cumplen los requisitos para ello.
 Por parte de un particular, poner un coche de lujo a nombre de un funcionario
para que no admita a trámite un recurso interpuesto por otra persona y que
debería haber sido aceptado.
¿Son responsables penalmente las personas jurídicas por cohecho?
Sí, el artículo 427 bis del Código Penal contempla la responsabilidad penal de las
personas jurídicas en los delitos de cohecho, con las siguientes penas:
 Multa de 2 a 5 años, o del triple al quíntuple del beneficio obtenido si el
resultado es una cantidad más alta, cuando el delito tenga previsto una pena
de prisión superior a 5 años para las personas físicas.
 Multa de 1 a 3 años, o del doble al cuádruple del beneficio obtenido si la
cantidad que resulte es más alta, si para el delito se prevé una pena superior a
2 años de prisión e inferior a 5.
 Multa de 6 meses a 2 años, o del doble al triple del beneficio obtenido si la
cantidad que resulte es más elevada, en los demás casos.
Además, se pueden imponer las penas recogidas en el artículo 33.7, en las letras a) a
g):
 Disolución de la persona jurídica.
 Suspensión de sus actividades por un plazo máximo de 5 años.
 Clausura de sus locales y establecimientos hasta 5 años.
 Prohibición temporal o definitiva de realizar en el futuro las actividades en
cuyo ejercicio se haya cometido, favorecido o encubierto el delito. En caso de
que sea temporal, no podrá ser superior a 15 años.
 Inhabilitación para obtener subvenciones y ayudas públicas, para contratar
con el servicio público y para disfrutar de beneficios e incentivos de la
Seguridad Social o fiscales, por plazo máximo de 15 años.
 Intervención judicial para la salvaguarda de los derechos de los trabajadores o
de los acreedores por un plazo máximo de 5 años.
8.- Delito de tráfico de influencias
El tráfico de influencias tiene lugar cuando la principal intención es obtener un
beneficio económico debido a la posición que ocupa. Influir en un funcionario público o
una autoridad puede ser constitutivo de un delito de tráfico de influencias cuando permite al
autor generar un beneficio económico, de forma directa o indirecta, lucrándose de su posición
y relación personal o jerárquica.

El delito de tráfico de influencias se encuentra regulado en el Código Penal, Capítulo VI


en los artículos del 428 al 431.
El castigo para este delito es el siguiente:
En caso de que un funcionario influya en otro para obtener un beneficio, se castiga con
pena de prisión entre seis meses y dos años. Además de inhabilitación para ejercer un
cargo público y una multa.
Cuando quien influye en un funcionario es un particular se castiga con la pena de
prisión entre seis meses y dos años. Además se le impone una multa, no podrá recibir
ayudas del estado ni subvenciones, se le prohíbe contratar con el sector público,
tampoco recibir incentivos de la Seguridad Social ni fiscales.
En caso de que un particular contrate a un tercero para que realice cualquiera de las
acciones mencionadas se le castigará. Esto será con pena de prisión de entre seis
meses y un año. Cuando el delito sea cometido por un funcionario, será castigado con
inhabilitación para ejercer un cargo público y pena de prisión de seis meses a un año.
Ejemplos de tráfico de influencias
Algunos ejemplos de casos en los que se cometería un delito de tráfico de
influencias son los siguientes:
 Un juez que se ofrece a influir en otro por la amistad que ambos tienen para
que dicte una sentencia que establece una indemnización para un conocido, a
cambio de una cierta cantidad de dinero.
 Un particular que trata de influir en un funcionario de la Agencia
Tributaria por la relación de parentesco que les une para que dicte una
resolución por la que se le devuelva una cantidad de dinero.

9.- Delito de malversación de caudales públicos


El delito de malversación de caudales públicos ocurre cuando una autoridad o
funcionario público hace uso indebido o sustrae algo con carácter público o un
patrimonio de otra persona. Este delito se encuentra regulado en el Capítulo VII, del
Código Penal en los artículos del 432 a 435.
Este delito será castigado con la inhabilitación para el sufragio pasivo de seis a diez
años, para ejercer un cargo público. Además se impone una pena de prisión de entre
dos y seis años.
Cuando hay graves daños en el servicio público, que el valor sea mayor a los 50.000
euros, el castigo aumenta. Se impondrá inhabilitación de diez a veinte años y pena de
prisión de cuatro a ocho años. En caso de que los daños superen dicha cantidad, el
castigo se puede duplicar.
El castigo cuando los daños sean menores a 4.000 euros será inhabilitación para el
sufragio pasivo y para ejercer cargos públicos de uno a cinco años. Además de la pena
de prisión entre uno y dos años y una multa de tres años.
Cuando se falsean documentos se impondrá inhabilitación para ejercer cargos públicos
de uno a diez años y una multa de doce a 24 meses.
Requisitos para un delito de malversación de caudales públicos
El delito de malversación de caudales públicos se considera especial porque debe
cumplir con algunas condiciones:
 La persona que comete el delito de malversación de caudales públicos tiene
que ser un funcionario o autoridad pública.
 El autor del delito de malversación de caudales públicos debe tener capacidad y
competencia para disponer del patrimonio público. También deben tener el
poder de decisión jurídica.
 El hecho delictivo debe ser ocasiona a un patrimonio que este considerado
como patrimonio público.
 Es necesario que se produzca un abuso de la autoridad otorgada, una conducta
de administración desleal o un acto de apropiación del patrimonio.
 El delito cometido tiene que ser intencional o doloso. También la persona que
lo comete o lo facilita tiene que hacerlo para obtener un lucro.
 El funcionario o autoridad pública acusado de un delito de malversación de
caudales públicos requieren de la asesoría abogados especialista en derecho
penal. Este además debe estar especializado en malversación de fondos o
caudales públicos y contar con experiencia en este tipo de casos.

Diferencia entre prevaricación, malversación y cohecho


La principal diferencia entre el delito de prevaricación y el delito de cohecho es que
mientras que en el cohecho, el funcionario público o la autoridad recibe o solicita
algún regalo, favor o retribución para actuar de forma ilícita en el ejercicio de su
competencia, en la prevaricación no existe soborno alguno.
Además, el cohecho lo pueden cometer también jurados y árbitros, mediadores,
peritos, administradores o interventores designados judicialmente o cualquier persona
que ejerza la función pública. El delito de prevaricación solo lo pueden cometer
funcionarios públicos o la autoridad en general, los magistrados, jueces y otros
funcionarios de la administración pública en particular, y los abogados y procuradores.
Por otra parte, la malversación es un delito de apropiación indebida o administración
desleal, pero que puede ser cometido solo por funcionario o cargo público en el
ejercicio de su cargo, infringiendo la ley o excediéndose en el ejercicio de sus
actividades. Por lo tanto, se diferencia del delito de prevaricación en la propia
conducta llevada a cabo, que en este caso será específicamente un acto de desfalco.

10.- Delito de fraudes y exacciones ilegales


El delito de fraude y exacciones ilegales se comete cuando se hacen Concertaciones
fraudulentas, Exigencia de tarifas ilegales. También cuando se comete una estafa o
apropiación indebida por ser un funcionario público.
Estos delitos contra la Administración Publica se encuentran regulados en el Capítulo
VIII, en los artículos 436 al 438 del Código penal.
Cuando el funcionario público o autoridad comenten cualquier acción relacionada con
las concertaciones fraudulentas será castigado. Este castigo es de inhabilitación para
ejercer el derecho de sufragio pasivo y para ejercer un cargo público por el tiempo de
seis a diez años y prisión de uno a tres años.
El particular que haya acordado con la autoridad o funcionario público también será
castigado con la misma pena de prisión. Además no podrá recibir ayudas del estado ni
subvenciones, se le prohíbe contratar con el sector público, tampoco recibir incentivos
de la Seguridad Social ni fiscales por un tiempo entre dos y siete años.
Cuando el funcionario público o autoridad realiza exigencia de tarifas ilegales será
castigado. Con suspensión del cargo o empleo público por un tiempo entre seis meses
y cuatro años, las penas de multa de seis a veinticuatro meses y el reintegro de las
exigencias de las tarifas.
Los funcionarios públicos o autoridades que abusando de su cargo incurran en estafa o
apropiación indebida con prestaciones del Sistema de Seguridad Social, se les
castigará. Esto se hará con la pena establecida para estos casos y la inhabilitación para
ejercer el derecho al sufragio pasivo y para ejercer cargos públicos por un tiempo entre
tres y nueve años.

11.- Negociaciones y actividades que se prohíben a los funcionarios públicos


El delito de negociaciones y actividades prohibidas a los funcionarios públicos, se
cometen cuando pretende participar en algún contrato para obtener beneficios de la
situación. La regulación de este delito se encuentra en el Código Penal en el Capítulo
IX, en los artículos del 439 al 442.
Este delito se castiga con inhabilitación para el sufragio pasivo y para ejercer un cargo
público por un tiempo entre dos y siete años. Además pena de prisión de seis meses a
dos años y multa de doce a 24 meses.
Cuando el delito es cometido por contadores, peritos y árbitros se castiga con
inhabilitación para ejercer un cargo público por un tiempo que va de tres a seis años.
También se impone una multa de entre doce y 24 meses.
Para los casos en que la autoridad o el funcionario público empleen la información o
el secreto privilegiado para conseguir beneficios económicos, se le castigará. Para ello
se impone una multa y la cantidad será el triple del beneficio obtenido. Además se
inhabilitará para ejercer el sufragio y para ejercer un cargo público entre dos y cuatro
años.
Cuando el delito afecta gravemente a un tercero o al sector público, la sanción que se
impone será de prisión. Esta pena es de entre uno a seis años, además se inhabilita
para ejercer el sufragio pasivo y para ejercer un cargo público entre tres y seis años.

12.- Delito de abusos en ejerciendo sus funciones


Los abusos en el ejercicio de la función pública, están relacionados con los delitos
sexuales. Este delito está regulado en el Capítulo IX del Código Penal en los artículos
que van desde el 443 al 444.
Los funcionarios o autoridades que cometan este delito se les castigará con prisión de
uno a dos años. Además será inhabilitado absolutamente entre seis a 12 años,
El funcionario perteneciente a una Institución Penitenciaria o centro de corrección o
protección de menores solicite favores sexuales a un menor. Quien esté sujeto a
guarda será castigado con inhabilitación absoluta entre seis a doce años y pena de
prisión de uno a cuatro años.

 UBICACIÓN SISTEMÁTICA
 REBELIÓN [ 472 a 484 ]
 CONCEPTO [ 472 ]
 PARTICIPACIÓN [ 473.1 ]
 AUTORÍA POR PRESUNCIÓN [ 474 ]
 SEDUCIR O ALLEGAR TROPAS O FUERZA ARMADA PARA LA
REBELIÓN [ 475 ]
 DEBERES DE CONTENER Y DENUNCIAR LA REBELIÓN [ 476 ]
 PROVOCACIÓN, CONSPIRACIÓN Y PROPOSICIÓN [ 477]
 REBELIÓN COMETIDA POR AUTORIDAD [ 478 ]
 INTIMACIÓN A LA DISOLUCIÓN [ 479 ]
 EXCUSA ABSOLUTORIA Y SUPUESTOS ATENUADOS [ 480 ]
 CONCURSO REAL [ 481]
 OMISIÓN DE RESISTENCIA A LA REBELIÓN [ 482 ]
 PROLONGACIÓN Y ABANDONO DEL CARGO [ 483 ]
 EMPLEO DE LOS REBELDES [ 484 ]
 DELITOS CONTRA LA CORONA [ 485 a 491 ]
 HOMICIDIO [ 485 ]
 LESIONES [ 486 ]
 ATAQUES A LA LIBERTAD PERSONAL [ 487 ]
 PROVOCACIÓN, CONSPIRACIÓN Y PROPOSICIÓN [ 488 ]
 COACCIONES [ 489 ]
 ALLANAMIENTO DE MORADA [ 490.1 ]
 AMENAZAS [ 490.2 ]
 CALUMNIAS O INJURIAS [ 490.3 y 491.1 ]
 DAÑAR EL PRESTIGIO DE LA CORONA [ 491.2 ]
 DELITOS CONTRA LAS INSTITUCIONES DEL ESTADO Y LA DIVISIÓN DE
PODERES [ 492 a 509 ]
 DELITOS CONTRA LAS INSTITUCIONES DEL ESTADO [ 492
a 505 ]
 IMPEDIR A LAS CORTES NOMBRAR REGENTE O
TUTOR DEL REY [ 492 ]
 DELITOS CONTRA LAS CÁMARAS LEGISLATIVAS O
SUS MIEMBROS [ 493 a 502 ]
 INVASIÓN CON VIOLENCIA O
INTIMIDACIÓN [ 493 ]
 PROMOVER, DIRIGIR O PRESIDIR
MANIFESTACIONES O REUNIONES QUE
ALTEREN SU NORMAL
FUNCIONAMIENTO [ 494 ]
 INTENTAR PENETRAR EN LA SEDE DE
LAS INSTITUCIONES PARA PRESENTAR
PETICIONES [ 495 ]
 INJURIAS GRAVES [ 496 ]
 PERTURBAR EL ORDEN DE LAS
SESIONES [ 497 ]
 IMPEDIR LA ASISTENCIA A REUNIONES,
LA LIBRE MANIFESTACIÓN DE
OPINIONES O LA EMISIÓN DE VOTO [ 498
]
 QUEBRANTAMIENTO DE LA
INVIOLABILIDAD POR AUTORIDAD O
FUNCIONARIO PÚBLICO [ 499 ]
 QUEBRANTAMIENTO DE INMUNIDADES
[ 500 ]
 INCULPACIÓN O PROCESAMIENTO
ILEGAL [ 501 ]
 INCOMPARECENCIA Y FALSO
TESTIMONIO ANTE COMISIONES DE
INVESTIGACIÓN [ 502 ]
 DELITOS CONTRA LOS GOBIERNOS CENTRAL O
AUTONÓMICOS O SUS MIEMBROS [ 503 ]
 DELITOS CONTRA OTROS ÓRGANOS
CONSTITUCIONALES O SUS MIEMBROS [ 504 ]
 DELITOS CONTRA LAS CORPORACIONES LOCALES
O SUS MIEMBROS [ 505 ]
 USURPACIÓN DE ATRIBUCIONES [ 506 a 509 ]
 USURPACIÓN DE ATRIBUCIONES LEGISLATIVAS
[ 506 ]
 ARROGACIÓN DE ATRIBUCIONES
ADMINISTRATIVAS O IMPEDIMENTO DE SU
EJERCICIO [ 507 ]
 ARROGACIÓN DE ATRIBUCIONES JUDICIALES,
IMPEDIMENTO DE SU EJERCICIO O ATENTADO A
LA INDEPENDENCIA JUDICIAL [ 508 ]
 CONFLICTOS JURISDICCIONALES [ 509 ]
 DELITOS RELATIVOS AL EJERCICIO DE LOS DERECHOS
FUNDAMENTALES Y LIBERTADES PÚBLICAS
 DELITOS COMETIDOS CON OCASIÓN DEL EJERCICIO DE
LOS DERECHOS FUNDAMENTALES Y DE LAS LIBERTADES
PÚBLICAS GARANTIZADOS POR LA CONSTITUCIÓN [ 510 a
521 ]
 FOMENTO DEL ODIO, HOSTILIDAD,
DISCRIMINACIÓN O VIOLENCIA [ 510, 510 bis ]
 DENEGACIÓN DE SERVICIOS PÚBLICOS [ 511 ]
 DENEGACIÓN DE PRESTACIONES [ 512 ]
 REUNIONES Y MANIFESTACIONES ILÍCITAS [ 513,
514 ]
 ASOCIACIONES ILÍCITAS [ 515 a 521 ]
 DELITOS CONTRA LA LIBERTAD DE CONCIENCIA, LOS
SENTIMIENTOS RELIGIOSOS Y EL RESPETO A LOS
DIFUNTOS [ 522 a 528 ]
 DELITOS COMETIDOS POR LOS FUNCIONARIOS PÚBLICOS CONTRA LAS
GARANTÍAS CONSTITUCIONALES
 DELITOS COMETIDOS POR LOS FUNCIONARIOS PÚBLICOS
CONTRA LA LIBERTAD INDIVIDUAL [ 529 a 533 ]
 ENTREGA INDEBIDA DE CAUSA CRIMINAL [ 529 ]
 DETENCIÓN ILEGAL POR FUNCIONARIO PÚBLICO [
530, 532 ]
 INCOMUNICACIÓN ILEGAL DE UN DETENIDO,
PRESO O SENTENCIADO [ 531, 532 ]
 SANCIONES O PRIVACIONES INDEBIDAS
COMETIDAS POR FUNCIONARIOS DE PRISIONES
[ 533 ]
 DELITOS COMETIDOS POR LOS FUNCIONARIOS PÚBLICOS
CONTRA LA INVIOLABILIDAD DOMICILIARIA Y DEMÁS
GARANTÍAS DE LA INTIMIDAD [ 534 a 536 ]
 DELITOS CONTRA LA INVIOLABILIDAD DEL
DOMICILIO [ 534 ]
 DELITOS CONTRA LA INVIOLABILIDAD DE LA
CORRESPONDENCIA [ 535 ]
 INTERCEPTACIÓN DE COMUNICACIONES [ 536 ]
 DELITOS COMETIDOS POR LOS FUNCIONARIOS PÚBLICOS
CONTRA OTROS DERECHOS INDIVIDUALES [ 537 a 542 ]
 IMPEDIMENTO U OBSTACULIZACIÓN DEL
DERECHO DE DEFENSA [ 537 ]
 DELITOS CONTRA LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN
[ 538 ]
 DELITOS CONTRA LA LIBERTAD DE ASOCIACIÓN
[ 539 ]
 DELITOS CONTRA LA LIBERTAD DE REUNIÓN [ 540
]

EXPROPIACIÓN ILEGAL [ 541 ]

DELITOS CONTRA EL LIBRE EJERCICIO DE LOS
DERECHOS CÍVICOS [ 542 ]
 ULTRAJES A ESPAÑA [ 543 ]

¿En qué consiste el delito de rebelión?

Es el delito más grave que puede cometerse contra el Estado y sus principales institucione

La rebelión consiste en alzarse pública y violentamente para obtener, por vía de hecho,
alguno de los objetivos que se establecen en el artículo 472 del Código Penal.

La rebelión cometida por particulares se contempla en el Título XXI, dentro de los


delitos contra la Constitución, en el capítulo I, artículos 472 a 484 del Código Penal,
pues la rebelión militar se rige por el Código Penal Militar -excepto la previsión del art.
476 CP-, al tener en él una regulación expresa como delito militar.

Este delito presenta varias diferencias con la sedición:

 - El delito de sedición se regula dentro de los delitos contra el orden público.


Comparte la finalidad de subversión política o social del delito de rebelión pero
se aparta de él, por dirigirse a atacar las funciones de administrar y juzgar, más
que las de legislar y gobernar, por lo que podemos considerarla una "rebelión
en pequeño" (Sentencia del Tribunal Supremo de 3 de julio de 1991).
 - En el delito de sedición no es requisito indispensable el uso de la violencia,
sino que el art. dice: "por la fuerza o fuera de las vías legales"

Bien jurídico protegido: Se tutela la Constitución, como norma suprema del Estado de
Derecho. Se protegen, por tanto, las instituciones más importantes del Estado, que
sólo pueden ser modificadas de acuerdo con lo establecido en la ley.

¿En qué consiste el tipo básico de Rebelión propia?

Sus notas objetivas son (art. 472 CP):

 • Es un alzamiento, es decir, un levantamiento contra la Autoridad.


 • Ha de ser público, en el sentido de que se exteriorice de modo visible y
evidente.
 • Debe ser violento, esto es, nopacífico.

EJEMPLO: La única sentencia que existe sobre el delito de rebelión se dictó conforme a
la regulación del CP de 1973, y en el orden militar, es la sentencia del golpe de Estado
del 23-F (Sentencia del Tribunal Supremo de 22 de abril de 1983) que descartaba la
violencia como elemento del delito de rebelión, pero ciertamente en el anterior
Código Penal este requisito no se preveía.

Las penas previstas para sus intervinientes son (art. 473.1 CP):
 • Los que induzcan, promuevan o sostenga la rebelión y los jefes principales:
tendrán una pena de prisión de 15 a 20 años e inhabilitación absoluta por el
mismo tiempo.

¿En qué consiste el tipo agravado?

Se prevén las penas de prisión de 25 a 30 años para los jefes, de 15 a 25 años para los
mandos subalternos y de 10 a 15 años para los participantes, si concurre alguna de las
siguientes circunstancias (art. 473.2 CP):

• Se han esgrimido armas.

• Ha habido combate entre la fuerza de su mando y los sectores leales a la autoridad


legítima.

• La rebelión hubiese causado estragos en propiedades de titularidad pública o


privada, cortado las comunicaciones telegráficas, telefónicas, por ondas, ferroviarias o
de otra clase.

• Se hubiese ejercido violencias graves contra las personas.

• Se hubiese exigido contribuciones o distraído los caudales públicos de su legítima


inversión.

Cuando la rebelión no haya llegado a organizarse con jefes conocidos, se reputarán


como tales los que de hecho dirijan a los demás, o lleven la voz por ellos, o firmen
escritos expedidos a su nombre, o ejerzan otros actos semejantes de dirección o
representación. (Art. 474 CP)

 • los que ejerzan un mando subalterno: tendrán una pena de prisión de 10 a


15 años e inhabilitación absoluta de 10 a 15 años.
 • Los meros participantes: tendrán una pena de prisión de 5 a 10 años e
inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de 6 a 10 años.

¿Cómo se castiga la infracción del deber de contención o denuncia de la rebelión por


militar?

El art. 476 CP recoge un delito de omisión pura en el que el sujeto activo es un militar,
por lo tanto es un delito especial propio que sólo puede ser cometido por militares.

Prevé dos conductas:

• El militar que no emplee los medios a su alcance para contener la rebelión en las
fuerzas de su mando, será castigado con las penas de prisión de 2 a 5 años e
inhabilitación absoluta de 6 a 10 años.
• El militar que, teniendo conocimiento de que se trata de cometer un delito de
rebelión, no lo denuncie inmediatamente a sus superiores o a las autoridades o
funcionarios que, por razón de su cargo, tengan la obligación de perseguir el delito
será castigado con las penas anteriores en su mitad inferior.

¿Cómo se castigan los actos preparatorios?

El artículo 477 CP castiga los actos preparatorios. Así la provocación, la conspiración y


la proposición para cometer rebelión serán castigadas con la pena de prisión inferior
en uno o dos grados a la del delito correspondiente y con la inhabilitación prevista en
los respectivos artículos.

¿Y si el delito es cometido por autoridad?

En el caso de que el que cometa cualquiera de los delitos de rebelión sea autoridad, la
pena de inhabilitación que estuviese prevista en cada caso se sustituirá por la
inhabilitación absoluta por tiempo de 15 a 20 años, salvo que tal circunstancia se halle
específicamente contemplada en el tipo penal de que se trate. (Art. 478 CP)

¿Cuáles son las disposiciones comunes?

El art. 479 CP recoge medidas para disolver a los sublevados, de manera que primero
la autoridad gubernativa intimará a los sublevados a que inmediatamente se disuelvan
y retiren. Si no lo hicieran prevé que la autoridad pueda hacer uso de la fuerza de que
disponga para disolverlos.

Se contiene, en el art. 480 CP, una modalidad de arrepentimiento activo o excusa


absolutoria, y otra de desistimiento.

Como norma concursal el art. 481 CP, en cuanto a los delitos cometidos con motivo de
rebelión, dispone:

«Los delitos particulares cometidos en una rebelión o con motivo de ella serán
castigados, respectivamente, según las disposiciones de este Código».

En cuanto a las autoridades, según la actitud adoptada durante la rebelión se


establece, en el art. 482 CP que las que no hayan resistido la rebelión, serán
castigadas con la pena de inhabilitación absoluta de 12 a 20 años.

En el art. 483 CP se castiga a los funcionarios que continúen desempeñando sus


cargos bajo el mando de los alzados o que, sin habérseles admitido la renuncia de su
empleo, lo abandonen cuando haya peligro de rebelión con la pena de inhabilitación
especial para empleo o cargo público de 6 a 12 años.

Finalmente el art. 484 CP castiga a los que aceptasen empleo de los rebeldes con la
pena de inhabilitación absoluta de 6 a 12 años.
DELITOS CONTRA LA CORONA
La regulación de estos delitos se encuentra dentro del Título XXI del Libro II del Código
Penal, dedicado a los "Delitos contra la Constitución", dentro del capítulo II, artículos
485 a491 CP, ambos inclusive.
El bien jurídico general es la Corona, en cuanto a los valores institucionales que
representa, que el artículo 56 de nuestra Constitución, expresa del siguiente modo: "El
Rey es el Jefe del estado, símbolo de su unidad y permanencia, arbitra y modera el
funcionamiento regular de las instituciones (y) asume la más alta representación del
estado español".
DEFINICION: Son delitos que sancionan penalmente una serie de hechos de gran
importancia, en cuanto delitos comunes, que llevan aparejados un "plus" de pena, por
la condición de los sujetos pasivos de dichos ataques. Se incluyen como tales: el Rey o
Reina, cualquiera de sus ascendientes o descendientes, la Reina consorte o el consorte
de la Reina, el Regente o algún miembro de la Regencia y el Príncipe o Princesa de
Asturias. Todos los demás miembros de la llamada Familia Real están excluidos de la
especial protección que brinda el Código Penal.

En concreto: en el artículo 485 CP se sanciona producir la muerte del Rey o demás


personas protegidas, en el artículo 486 CP las lesiones contra ellos, en el artículo 487
CP las detenciones ilegales, en el artículo 489 CP las coacciones, en el artículo 490 CP
el allanamiento de morada, las amenazas y las calumnias e injurias, y en el artículo
491 CP la indebida utilización de la imagen. Por otro lado, en el artículo 488 CP se
castigan los actos preparatorios de estos delitos, cuando no se consuman, es decir la
conspiración, la proposición y la provocación para delinquir.

El Regicidio

En el art. 485 del CP sanciona con la pena de prisión permanente revisable el


homicidio o asesinato del Rey o la Reina o el Príncipe o la Princesa de Asturias. Estamos
ante lo que la doctrina clásica llamaba "magnicidio", es decir, los crímenes contra las
personalidades más relevantes de un país, los cuales conllevaban la pena capital,
cuando ésta existía.

El homicidio o asesinato de cualquiera de los ascendientes o descendientes del Rey o


de la Reina, de la Reina consorte o de consorte de la Reina, del Regente o de algún
miembro de la Regencia, será castigado con la pena de prisión de veinte a veinticinco
años, salvo que los hechos estuvieran castigados con una pena más grave en algún
otro precepto de este Código. Si concurrieran dos o más circunstancias agravantes del
art. 22 CP, la pena a imponer será la de prisión de veinticinco a treinta años.
Para la tentativa se prevé la pena inferior en grado.

Lesiones

El art. 486 CP regula el delito de lesiones al Rey o Reina, o a cualquiera de sus


ascendientes o descendientes, a la Reina consorte o al consorte de la Reina, al Regente
o a algún miembro de la Regencia, o al Príncipe o Princesa de Asturias. También aquí el
elemento diferencial es la elevadísima pena -de quince a veinte años de prisión- en los
supuestos en que se cometa un delito de lesiones que afecte a un órgano principal (un
ojo, un pulmón) o deje impotente, estéril, o con grave deformidad o enfermedad
somática o psíquica a la víctima, es decir, en caso de las lesiones previstas en el art.
149 CP.
Pena que se reduce a la de 8 a 15 años, en el caso de producir la pérdida o inutilidad
de un órgano o miembro no principal (el bazo), es decir en el caso de las lesiones del
art. 150 CP y será de 4 a 8 años en el resto de lesiones menos graves.

Detenciones Ilegales
El art. 487 CP impone pena de prisión de quince a veinte años (el secuestro común se
sanciona con pena que sólo llega a los diez años) en los casos en que se prive al Rey o
Reina, o a cualquiera de sus ascendientes o descendientes, a la Reina consorte o al
consorte de la Reina, al Regente o a algún miembro de la Regencia, o al Príncipe o
Princesa de Asturias de su libertad personal. Se incluye aquí cualquier "retención" o
detención, con independencia de su duración y de la forma con que se materialice,
pues no se necesita un encierro, en el sentido físico del término (guardar o depositar a
una persona en lugar cerrado).

Coacciones
El empleo de violencia o intimidación grave a las personas a las que venimos
refiriéndonos, para obligarlas a ejecutar un acto contra su voluntad, se castiga en el
art. 489 CP con pena de ocho a doce años de prisión. Y si se emplease violencia menos
grave, la pena será de cuatro a ocho años. Conviene recordar la diferencia entre
violencia física o material e intimidación o violencia moral, pues en la primera se usa
realmente la fuerza y en la segunda únicamente se presiona o intimida de tal modo,
que se obliga a realizar el acto que, en otro caso, no se hubiera realizado.
Allanamiento de morada

Consiste en entrar en casa ajena o mantenerse en ella contra la voluntad del morador.
No se necesita que se encuentre en ese momento ninguna de las personas
especialmente protegidas en este capítulo. La expresión "morada" equivale a
domicilio, en este caso comprende, obviamente, el Palacio o Residencia de los Reyes y
su familia, tanto la oficial como la que puedan ocupar temporalmente, así la Residencia
de Verano. La pena prevista en el art. 490.1 CP puede llegar a seis años de prisión, si se
hubiera empleado violencia o intimidación, y a cuatro años si no la hubiese.

Amenazas

Conminar con un mal, ya de modo grave o leve, comporta una pena superior a las
amenazas comunes. El art. 490.2 CP prevé seis años en el primer caso y hasta tres en
el segundo. Como se sabe, para que la amenaza tenga entidad delictiva ha de revestir
credibilidad, por tratarse de un acto inequívoco en tal sentido, que perturbe la
tranquilidad síquica o de ánimo de la persona afectada.

Calumnias e injurias
Estos delitos, que tienen en común el suponer ataques contra el honor de las personas
afectadas, se diferencian en que el primero supone imputar un delito mientras el
segundo consiste en ejecutar actos de menosprecio o descrédito afectantes a la
dignidad y respetabilidad que merece cualquier persona por el hecho de serlo.
El art. 490.3 CP, prevé la calumnia o injuria en el ejercicio de sus funciones o con
motivo u ocasión de éstas, lo que conlleva una pena de prisión de seis meses a dos
años si las calumnias o injurias fueran graves, y multa de seis a doce meses si no lo son.
Fuera de estos supuestos, serán castigadas con la pena de multa de cuatro a veinte
meses (art. 491.1 CP) (SAN, Sección Pleno, núm. 1/2009 de 18 mayo) (S JC de lo Penal
42/2009 de 9 junio)

Calificar al Rey de "el responsable de los torturadores y que ampara la tortura y que
impone su régimen monárquico a nuestro pueblo mediante la tortura y la violencia",
supone atribuirle una de las manifestaciones delictivas más graves de un Estado de
Derecho, ya que "son claramente ultrajantes e insultantes", integrando el delito de
injurias al Rey previsto en el artículo 490.3 del Código Penal (Sentencia del Tribunal
Supremo 1284/2005, de 31 de octubre).Proferir expresiones de menosprecio contra la
imagen del Jefe del Estado, cuando aparece por televisión, revela el ánimo tendencial
que constituye la esencia del delito de injurias (Sentencia del Tribunal Supremo de 27
de enero de 1992).

La SAN, Sala de lo Penal, Sección Pleno, de 5 diciembre 2008, confirma la condena por
delito de injurias contra la Corona a los dos imputados por quemar una fotografía de
los Reyes de España.

Utilización irrespetuosa de la imagen


Se castiga, igualmente, en este caso con multa, una conducta que en el resto de las
personas suele protegerse por la vía de la Ley Orgánica 1/1982, de 5 de mayo de
Protección al Derecho al Honor, a la Intimidad Personal y Familiar y a la Propia Imagen.
En el art. 491.2 CP, la concreta conducta penada es utilizar la imagen del Rey o Reina o
de cualquiera de sus ascendientes o descendientes, o de la Reina consorte o del
consorte de la Reina, o del Regente o de algún miembro de la Regencia, o del Príncipe
o Princesa de Asturias de cualquier forma que pueda dañar el prestigio de la Corona.
La conducta está construida con cierta imprecisión pero la doctrina y jurisprudencia se
refieren no a casos de crítica aceptable sino a supuestos de menosprecio, ofensa o
burla tendentes al desprestigio de la Institución. Por su parte, y a efectos de una mayor
clarificación, la Ley Orgánica 1/1982 incluye como supuestos de utilización indebida de
la imagen "la captación, reproducción o publicación por fotografía, filme o cualquier
otro procedimiento, de la imagen de una persona en lugares o momentos de su vida
privada" y "la utilización del nombre, de la voz o de la imagen de una persona para
fines publicitarios, comerciales o de naturaleza análoga" así como las manifestaciones
a través de expresiones que de cualquier modo "lesionen la dignidad de otra persona,
menoscabando su fama o atentando contra su propia estimación". Exceptuándose se
trate de imágenes captadas "durante un acto público o en lugares abiertos al público".
(S JC Penal 62/2007, de 13 de noviembre, caso «El Jueves»)

Delitos contra las instituciones del Estado


Son los delitos que tratan de proteger las principales Instituciones a través de las que
la Constitución organiza el Estado, bajo los valores superiores que recoge en su artículo
1 para la efectividad de los derechos fundamentales y libertades públicas de los
ciudadanos y el desarrollo de su personalidad: libertad, justicia, igualdad y pluralismo
político.
artículos 492 a505 CP.
Los delitos se estructuran en dos apartados:
a) Delitos contra las Instituciones Legislativas, tanto del Estado (Cortes Generales)
como de las Comunidades autónomas:
- Delitos contra las Cortes Generales y las Asambleas Legislativas de las Comunidades
Autónomas.
- Delitos contra los parlamentarios.

b) Delitos contra otras altas Instituciones no legislativas del Estado, de las


Comunidades Autónomas y contra las Corporaciones Locales:
- Delitos contra Altas Instituciones del Estado.
- Delito contra Instituciones de Defensa y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
- Delitos contra las Instituciones de las Comunidades Autónomas.
- Delitos contra las Corporaciones Locales.

1. Delitos contra las Cortes Generales y las Asambleas Legislativas de las


Comunidades Autónomas
Conductas de coacción desde el exterior de las sedes

Son las previstas en los artículos 492 a495 del Código Penal:

- Impedir a las Cortes Generales reunirse para nombrar la Regencia o el tutor del
Titular de la Corona menor de edad, en los supuestos de Corona vacante o
inhabilitación de su titular. La pena para este delito es de prisión de 10 a 15 años e
inhabilitación absoluta por tiempo de 10 a 15 años. Esta última pena, conforme al
artículo 41 del Código Penal, supone la privación definitiva de todos los honores,
empleos y cargos públicos que tenga el penado, aunque sean electivos, y la
incapacidad para obtener los mismos o cualesquiera otros honores, cargos o empleos
públicos, y la de ser elegido para cargo público, durante el tiempo de la condena
(véase: Penas privativas o restrictivas de derechos).
- Invadir con fuerza, violencia o intimidación, sin alzarse públicamente, las sedes del
Congreso de los Diputados, del Senado o de una Asamblea Legislativa de Comunidad
Autónoma, si están reunidos. La pena es de prisión de 3 a 5 años.
- Promover, dirigir o presidir manifestaciones o reuniones ante el Congreso de los
Diputados, Senado o una Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma, cuando estén
reunidos, alterando su normal funcionamiento. La pena prevista es de prisión de 6
meses a 1 año o multa de 12 a 24 meses.
- Los que, sin alzarse públicamente, portando armas u otros instrumentos peligrosos,
- Intentar entrar, sin alzarse públicamente, portando armas u otros instrumentos
peligrosos, en el Congreso de los Diputados, el Senado o la Asamblea Legislativa de una
Comunidad Autónoma para presentar peticiones a los mismos. La pena será de prisión
de 3 a 5 años, y se aplicará en su mitad superior (prisión de 4 a 5 años), a quienes
promuevan dirijan o presidan el grupo.
Conductas contra el orden en el interior de las sedes

Están tipificadas en el artículo 497 del Código Penal: perturbar gravemente el orden
de las sesiones, sin ser miembros del Congreso de los Diputados, del Senado o de una
Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma. Incurrirán en la pena de prisión de 6
meses a 1 año si la perturbación es grave y si no es grave la pena de multa de 6 a 12
meses.

Conductas de desacato
Reguladas en el artículo 496 del Código Penal, consisten en injuriar gravemente a las
Cortes Generales o a una Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma, hallándose
en sesión, o a alguna de sus Comisiones en los actos públicos en que las representen, y
se castigan con la pena de multa de 12 a 18 meses.
Conducta de coacción
El artículo 498 CP califica como delito el empleo de fuerza, violencia, intimidación o
amenaza grave para impedir a un miembro del Congreso de los Diputados, del Senado
o de una Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma asistir a sus reuniones, o, por
los mismos medios, coartar la libre manifestación de sus opiniones o la emisión de su
voto. La pena es de prisión de 3 a 5 años.

Acciones contra la garantía institucional de inviolabilidad parlamentaria

El artículo 499 del Código Penal, impone la pena de inhabilitación especial para
empleo o cargo público por tiempo de 10 a 20 años a la autoridad o funcionario
público que quebrantare la inviolabilidad de las Cortes Generales o de una Asamblea
Legislativa de Comunidad Autónoma. La pena de inhabilitación especial, de acuerdo
con lo dispuesto en el artículo 42 del Código Penal, produce la privación definitiva del
empleo o cargo sobre el que recayere, aunque sea electivo, y de los honores que le
sean anejos. Produce, además, la incapacidad para obtener el mismo u otros análogos,
durante el tiempo de la condena. En la sentencia habrán de especificarse los empleos,
cargos y honores sobre los que recae la inhabilitación.

Delitos contra los parlamentarios


Previstas en los artículos 500 y 501 del Código Penal tiene dos tipos de conductas:

- La de la autoridad o funcionario público que detuviere a un miembro de las Cortes


Generales o de una Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma fuera de los
supuestos o sin los requisitos establecidos por la legislación vigente incurrirá en las
penas previstas para los delitos de detención ilegal (artículos 163 y siguientes del
Código Penal; véase: Detención ilegal) impuestas en su mitad superior, y además en la
de inhabilitación especial para empleo o cargo público de 6 a 12 años.
- La de la autoridad judicial que inculpare o procesare a un miembro de las Cortes
Generales o de una Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma sin los requisitos
establecidos por la legislación vigente, con la pena de inhabilitación especial para
empleo o cargo público de 10 a 20 años. Se refiere a la falta de solicitud del
suplicatorio o permiso que ha de pedir el Juez a la Cámara legislativa conforme al
artículo 750 de la LECrim, los artículos 57.1.2 y 73.3 a) de la LOPJ y el artículo 71 de la
Constitución Española.
Desobediencia y falso testimonio en comisiones de investigación y comparecencias
Se regula en el artículo 502 del Código Penal que prevé varias conductas:

- Dejar de comparecer ante una comisión de investigación de las Cortes Generales o de


una Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma, habiendo sido requeridos en
forma legal y bajo apercibimiento. La pena es la misma que para el delito
desobediencia del artículo 556 del CP, es decir, de 6 meses a 1 año de prisión. Si el
autor fuera autoridad o funcionario público, se le impondrá además la pena de
suspensión de empleo o cargo público por tiempo de 6 meses a 2 años, pena que tiene
como efecto, conforme al artículo 43 del CP, la privación del empleo durante el tiempo
de la condena.
- Faltar a la verdad en su testimonio ante una Comisión parlamentaria de investigación,
castigado con la pena de prisión de 6 meses a 1 año o multa de 6 a 12 meses.

2. Delitos contra las instituciones no legislativas del Estado

Delitos contra Altas Instituciones del Estado


Los artículos 503 y 504.1 del Código Penal castigan diversas conductas cometidas, en
el primer caso contra el Consejo de Ministros, y en el segundo contra el Gobierno de la
Nación, el Consejo General del Poder Judicial, el Tribunal Constitucional, el Tribunal
Supremo y el Tribunal Superior de Justicia de una Comunidad Autónoma. Las
conductas son:

a) Desacato: Se castiga a los que calumnien, injurien o amenacen gravemente a dichas


Instituciones con la pena de multa de 12 a 18 meses.
b) Coacción: Se castiga a los que empleen fuerza, violencia o intimidación para impedir
a los miembros de dichos Organismos asistir a sus respectivas reuniones con la pena de
prisión de 3 a 5 años.
c) Invasión coactiva: En este caso se impone la pena de prisión de 2 a 4 años a quienes
invadan violentamente o con intimidación el local donde esté constituido el Consejo de
Ministros, o los que coarten o por cualquier medio pongan obstáculos a la libertad de
dicho Gobierno.

Delito contra Instituciones de Defensa y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad


Se prevé en el artículo 504.2 del Código Penal una conducta de desacato en el que
impone la pena de multa de 12 a 18 meses a quien injuriare o amenazare gravemente
a los Ejércitos, Clases o Cuerpos y Fuerzas de Seguridad.

Delitos contra las Instituciones de las Comunidades Autónomas


Varias acciones contra instituciones no legislativas de las Comunidades Autónomas se
regulan en los artículos 502.2, 503 y 504.1 del Código Penal, que son las siguientes:

Acciones contra el Consejo de Gobierno

Se prevén dos tipos de conductas:

a) Coacción. Dos conductas son, a su vez, castigadas:


- Invadir violentamente o con intimidación el local donde esté constituido el Consejo
de Gobierno, o de cualquier modo poner obstáculos a la libertad de dicho Consejo o de
sus miembros reunidos en Consejo. La pena es de prisión de 2 a 4 años.
- Emplear fuerza, violencia o intimidación para impedir a los miembros del Consejo de
Gobierno asistir a sus reuniones. La pena en este caso es de 3 a 5 años de prisión.
b) Desacato. Se castiga a los que calumnien, injurien o amenacen gravemente al
Consejo de Gobierno de una Comunidad Autónoma con la pena de multa de 12 a 18
meses.
Acciones contra otras Instituciones autonómicas

El artículo 502.2 del Código Penal dispone que la autoridad o funcionario que
obstaculizare la investigación del Defensor del Pueblo, Tribunal de Cuentas u órganos
equivalentes de las Comunidades Autónomas, negándose o dilatando indebidamente
el envío de los informes que éstos solicitaren o dificultando su acceso a los
expedientes o documentación administrativa necesaria para tal investigación, incurrirá
en la pena de 6 meses a 1 año de prisión y suspensión de empleo o cargo público por
tiempo de 6 meses a 2 años.

Delitos contra las Corporaciones Locales


Dos conductas se contemplan en el artículo 505 del Código Penal, que protegen a las
Corporaciones Locales de acciones que se enmarcan en el ámbito del apoyo al
terrorismo:

a) Desórdenes en los plenos:


Con la pena de prisión de 6 meses a 1 año se castiga a quienes, sin ser miembros de la
corporación local, perturben de forma grave el orden de sus plenos impidiendo el
acceso a los mismos, el desarrollo del orden del día previsto, la adopción de acuerdos o
causen desórdenes que tengan por objeto manifestar el apoyo a bandas armadas,
organizaciones o grupos terroristas. Esta es una conducta que agrava las consecuencias
de estos actos respecto al delito regulado en el genérico artículo 558 del Código Penal,
cuya pena es de prisión de 3 a 6 meses o, alternativamente, la de multa de 6 a 12
meses.

b) Desacato y coacciones:
Quienes, amparándose en la existencia de bandas armadas, organizaciones o grupos
terroristas, calumnien, injurien, coaccionen o amenacen a los miembros de
corporaciones locales, son castigados por el Código Penal con la pena superior en
grado a la que corresponda por el delito cometido.

Usurpación de atribuciones
Son aquellos delitos cometidos por funcionarios públicos titulares de uno los poderes
del Estado que vulneran el principio de división de poderes, consistentes en la
atribución de facultades privativas que corresponden a los integrantes de otro de los
poderes del Estado.
Usurpación de atribuciones normativas. Invasión del poder legislativo
El artículo 506 del Código Penal castiga con la pena de prisión de uno a tres años,
multa de seis a doce meses e inhabilitación especial para empleo o cargo público por
tiempo de seis a doce años, a la autoridad o funcionario público que, careciendo de
atribuciones para ello, dictase una disposición general o suspendiese su ejecución.

La acción típica, consiste tanto en dictar una disposición general como en suspender o
no aplicar una disposición general vigente de obligado cumplimiento, por el sujeto
activo que deberá ser un funcionario que carece de facultades legales para ello. Como
ejemplo de esta figura se encuentra el supuesto donde un funcionario público dicte
reglamentos que pretendan derogar o suspender la ejecución de una norma de rango
superior o que, sin tal finalidad, supongan un exceso de atribuciones atribuidas al
funcionario en su potestad reglamentaria.

-Usurpación de atribuciones administrativas o ejecutivas. Invasión de funciones


administrativas por miembros del poder judicial
El artículo 507 del Código Penal castiga con la pena de prisión de seis meses a un año,
multa de tres a seis meses y suspensión de empleo o cargo público por tiempo de uno
a tres años, al Juez o Magistrado que se arrogase atribuciones administrativas de las
que careciese, o impidiese su legítimo ejercicio por quien las ostentase.

La acción típica, consiste tanto en arrogarse atribuciones administrativas que no le


corresponden o impedir el legítimo ejercicio de las mismas por quien legalmente las
tuvieren encomendadas, por parte del sujeto activo que deberá ser un Juez o
Magistrado.

Se exige en todo caso, a tenor de la doctrina jurisprudencial del Tribunal Supremo,


para la existencia de esta modalidad de usurpación de atribuciones, la concurrencia de
los siguientes requisitos:

• Que los actos realizados por el sujeto activo, afecten a materias de índole
administrativa claramente deslindadas.
• Que estén asimismo delimitadas con absoluta precisión las atribuciones de una y
otra autoridad, pues de lo contrario difícilmente podrá determinarse si ha existido
invasión de la actuación del uno en la esfera de actuación propia del otro.

Usurpación de atribuciones judiciales. Invasión de funciones judiciales y ataques a la


independencia judicial
El artículo 508 del Código Penal castiga a:

a) La autoridad o funcionario público que se arrogase atribuciones judiciales o


impidiese ejecutar una resolución dictada por la autoridad judicial competente, con
pena de prisión de 6 meses a 1 año, multa de 3 a 8 meses, y suspensión de empleo o
cargo público de 1 a 3 años.
Ejemplo de esta figura el alcalde que se negó a dar cumplimiento a la orden del Juez de
Paz de ingresar a una persona condenada en el depósito municipal para cumplir la
pena de tres días de arresto sustitutorio, sin que pueda aceptarse la alegación de la
aceptación de que el retén o depósito municipal no era establecimiento destinado
para el cumplimiento de las penas de arresto.

b) La autoridad o funcionario administrativo o militar que atentase contra la


independencia de los Jueces o Magistrados, garantizada por la Constitución,
dirigiéndoles instrucción, orden o intimación relativas a causas o actuaciones que
estén conociendo, con pena de prisión de prisión de 1 a 2 años, multa de 4 a 10 meses,
e inhabilitación especial para empleo o cargo público de 2 a 6 años.
Inhibición no atendida en caso de conflicto de jurisdicción

A este supuesto se refiere el artículo 509 del Código Penal que castiga con multa de
tres a diez meses e inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de
seis meses a un año al Juez o Magistrado o a la autoridad o funcionario público que,
legalmente requerido de inhibición, continuase procediendo sin esperar a que se
decida el correspondiente conflicto jurisdiccional, salvo en los casos permitidos por la
Ley.

El sujeto activo de este delito puede ser tanto un miembro del poder judicial como un
funcionario administrativo.
El tipo subjetivo exige el conocimiento de que ha existido un previo requerimiento de
inhibición y que no está incurso en los supuestos legales que permiten continuar con
las actuaciones

Delitos contra los derechos fundamentales y las libertades públicas


Son aquellos delitos que sancionan las conductas que vulneren algunos de los más
importantes derechos que la Constitución garantiza a todo individuo, el derecho a la
igualdad del art. 14 CE, el derecho de reunión y manifestación del art. 21 CE y el
derecho de manifestación del art. 22 CE.
• La sección 1ª, arts. 510 a521 bis CP , que regula los delitos cometidos con ocasión del
ejercicio de los derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizados por la
Constitución, de los que nos ocuparemos en esta voz.
• La sección 2ª, arts. 522 a528 CP : reguladora de los delitos contra la libertad de
conciencia, los sentimientos religiosos y el respeto a los difuntos"
Son delitos de actividad, bastando la realización de la conducta prohibida para
entender producido (consumado) el delito, aunque en otros casos se requiere la
obtención de un resultado. Así, en el primer caso, es ilícita una reunión o
manifestación con el fin de cometer un hecho delictivo, aunque éste no se produzca.
En cambio, es delito de resultado, en su modalidad de omitir una conducta debida, el
denegar una prestación por razones o causas discriminatorias, por lo que si no se logra
dicho resultado no se habrá consumado el delito pero podrá castigarse como tentativa,
que tiene una pena inferior.
• Incitación al odio (art. 510 CP)
– Tipo básico. El art. 510.1 CP recoge 3 conductas delictivas:
1. Fomentar, promocionar o incitar al odio, hostilidad, discriminación o violencia
contra ciertos grupos
2. Producir, elaborar o poseer con la finalidad de distribuir, facilitar a terceras personas
el acceso, distribución, difusión o venta, material incitador,directo o indirecto, del
odio, la hostilidad, la discriminación o la violencia.
3. Negación o enaltecimiento favorecedor de un clima de odio, hostilidad,
discriminación o violencia.
– Tipos atenuados: la LO 1/2015, de reforma del CP introdujo los siguientes tipos
atenuados: Actos de humillación o menosprecio y el enaltecimiento o justificación
pública.
– Tipos agravados. Son dos: comisión de cualquiera de las conductas a través de medio
de comunicación social, internet o tecnologías de la información o la alteración de la
paz pública o sentimiento de inseguridad o temor
• Prestación discriminatoria de un servicio público (art. 511 CP). Consiste en denegar
una prestación a la que tenga derecho una persona física o jurídica, en virtud de la
normativa administrativa, por parte de un funcionario o un particular encargado de un
servicio público, por razón de su ideología, religión o creencias, su pertenencia a una
etnia o raza, su origen nacional, su sexo, orientación sexual, situación familiar,
enfermedad, género o discapacidad.
Aquí el delito se comete tanto si se discrimina a una persona individual como a un
grupo, asociación fundación, sociedad o corporación. Y pueden ser autor del mismo,
tanto un funcionario como un particular encargado del servicio público. En cuanto al
concepto de servicio público no es cualquier actividad de trascendencia pública -
prácticamente todas las que se desempeñan en una sociedad- sino sólo aquéllos que
tienen reconocido tal condición por la ley.

• Denegación de una prestación empresarial o profesional (art. 512 CP). Consiste en la


no concesión de una prestación a la que se tenga derecho por razón de su ideología,
religión o creencias, su pertenencia a una etnia o raza, su origen nacional, su sexo,
orientación sexual, situación familiar, enfermedad, género o discapacidad.
No se admite en estos casos como defensa o excusa para impedir el acceso a estos
establecimientos la mención de la "reserva del derecho de admisión", ya que este lo es
para cuando una persona se comporta en un establecimiento comercial de forma
indebida de tal manera que sea preciso obligarle a abandonar el establecimiento
comercial. (SAP Albacete 186/2017 de 27 de Abril)

Delitos contra los derechos políticos

Se castigan:

• Reuniones y manifestaciones ilícitas (arts. 513 y 514 CP). Son las que se realizan con
el fin de cometer algún delito o aquellas en que concurran personas con armas,
explosivos u objetos contundentes o de cualquier otro modo peligroso.
Se castigan, en primer lugar, las reuniones y manifestaciones ilícitas; a continuación, se
distingue entre los promotores-directores, asistentes, quienes realizaren actos de
violencia, quienes impidieren el legítimo ejercicio de tales derechos y los promotores-
directores que trataren de quebrantar la prohibición de reunirse-manifestarse, cuando
con ello pretendieren "subvertir el orden constitucional o alterar gravemente la paz
pública", imponiéndose penas distintas en función del papel desempeñado en dichas
actividades ilícitas.
• Asociaciones ilícitas. El art. 515 CP declara que son punibles las asociaciones ilícitas
que:
1.º Tengan por objeto cometer algún delito o, después de constituidas, promuevan su
comisión.
2.º Aun teniendo por objeto un fin lícito, empleen medios violentos o de alteración o
control de la personalidad para su consecución.
3.º Sean organizaciones de carácter paramilitar.
4.º Fomenten, promuevan o inciten directa o indirectamente al odio, hostilidad,
discriminación o violencia contra personas, grupos o asociaciones por razón de su
ideología, religión o creencias, la pertenencia de sus miembros o de alguno de ellos a
una etnia, raza o nación, su sexo, orientación sexual, situación familiar, enfermedad o
discapacidad.
La asociación ilícita precisa la unión de varias personas organizadas para determinados
fines. La jurisprudencia (STS 3 de mayo de 2001 y 23 de marzo de 2005) ha señalado
como rasgos definidores los siguientes:

– La agrupación de personas para la consecución de un fin, unión que no ha de ser


esporádica sino que ha de tener cierta duración en el tiempo o estabilidad;
– Que la unión esté presidida por ideas de estructura jerárquica y disciplina,
entendiendo por tal el sometimiento de sus miembros a las decisiones de otro u otros
miembros que ejercen la jefatura;
– Que exista una voluntad colectiva de comisión de delitos, sin llegar a la precisión
total de cada acción individual en tiempo y lugar, y
– Una estructura adecuada para la comisión de los fines propuestos.
Delitos cometidos por los funcionarios públicos contra las garantías constitucionales
Se trata de una serie de conductas punibles, cometidas por las autoridades o
funcionarios contra determinados derechos y libertades fundamentales recogidas en la
Constitución, en cuanto suponen límites (garantías) al ejercicio del poder por parte de
quienes tienen conferida legitimación para el ejercicio de funciones públicas.

La sanción penal se debe a que estamos ante manifestaciones abusivas del ejercicio
del poder público en cuanto con ello se actúa de forma arbitraria, conculcando los
derechos y libertades ciudadanas.
la sanción penal en estos casos, deriva de que nos encontramos ante unos graves
atentados a los derechos y libertades, cometidos por quienes están considerados
como los más obligados a respetarlos y a hacerlos respetar, por lo que el recurso al
instrumento penal, considerado como "ultima ratio" en base al principio de
"intervención mínima", está plenamente justificado. El Código Penal, de este modo,
sanciona como delitos, las infracciones -de cierta entidad- a los derechos y libertades
reconocidas en la Constitución, complementando la protección que se efectúa en otras
partes del Código (así, en el delito de homicidio en cuanto ataca el derecho a la vida -
artículo 15 de la Constitución Española-, el delito de lesiones, al infringir el derecho a la
integridad física -artículo 15 de la Constitución Española-, la injuria y calumnia por
suponer un ataque al honor de las personas -artículo 18 de la Constitución Española-,
etc).
La regulación de los presentes delitos se halla dentro del Título XXI, de los "Delitos
contra la Constitución", en el Capítulo V y consta de tres secciones: la primera, que va
de los artículos 529 a533 CP se ocupa de "los delitos cometidos por los funcionarios
públicos contra la libertad individual"; la segunda, artículos 534 a536 CP, trata de los
"delitos cometidos por los funcionarios públicos contra la inviolabilidad domiciliaria y
demás garantías de la intimidad" y finalmente, la sección tercera, artículos 537 a542
CP, inclusive, comprende los "delitos cometidos por los funcionarios públicos contra
otros derechos individuales".
• Se trata de delitos especiales, es decir que sólo pueden ser cometidos por un tipo
específico de personas: quienes ostenten la condición de autoridad o funcionario. Lo
cual, a tenor de la definición comprendida en el artículo 24 del Código penal, significa
lo siguiente: "Se reputará autoridad al que por sí solo o como miembro de alguna
corporación, Tribunal u órgano colegiado, tenga mando o ejerza jurisdicción propia. En
todo caso, tendrán la consideración de autoridad, los miembros del Congreso de los
Diputados, del Senado, de las Asambleas Legislativas de las Comunidades Autónomas y
del Parlamento Europeo. Se reputará también autoridad a los funcionarios del
Ministerio Fiscal. Se considerará funcionario público todo el que por disposición
inmediata de la Ley o por elección o por nombramiento de autoridad competente
participe en el ejercicio de funciones públicas"
Lo cual incluye, al juez, magistrado, autoridad militar o administrativa y funcionarios de
Instituciones Penitenciarias, expresamente citados en los artículos 529 y 533 CP.

Por otro lado, es preciso que estas conductas se realicen por los referidos sujetos
cuando se hallen en el ejercicio de funciones propias de sus cargo pues en otro caso,
cometerían un delito común, como cualquier ciudadano, pero agravada por su
condición, ya que el artículo 22.7 del Código Penal, considera agravante realizar un
delito prevaliéndose del carácter público que tenga el culpable.

• En cuanto a la culpabilidad, se trata de conductas dolosas, es decir que requieren el


conocimiento de los deberes a cumplir y su voluntaria vulneración. Dicho
conocimiento, no obstante, se presume, dada la formación que se supone a quienes
acceden a un cargo público aunque, por excepción, podrá ser impune la conducta
ilícita de quien probare que desconocía lo que le obligaba la norma.
Además, en los delitos de la sección primera (arts. 530 y 531 CP), que afectan al
derecho al juez predeterminado por la ley y al respeto de la garantía de la libertad
personal, son admisibles tanto su comisión por dolo como por imprudencia grave (art.
532 CP).
Delitos contra la libertad individual

Se incluyen aquí una serie de conductas delictivas que atentan contra el derecho al
juez predeterminado por la ley, artículo 24.2 de la Constitución Española y a la libertad
personal, derecho reconocido en el artículo 17 de la Constitución Española, en cuanto
supongan su privación de modo contrario a la ley. Son las siguientes:

• Entrega de causa criminal a la autoridad o funcionario que ilegalmente la reclama.


Agravándose el delito si, además, se entrega la persona del detenido (art. 529 CP).
• Detenciónirregular (art. 530 CP), tanto dolosa como imprudente, por acordar,
practicar o prolongar la privación de libertad de un detenido, preso o sentenciado, con
violación de los plazos o demás garantías constitucionales o legales. La detención debe
durar el tiempo imprescindible para evacuar las diligencias necesarias al respecto, y en
todo caso menos de 72 horas..
Detener a alguien, pero dar curso al "habeas corpus" presentado contra tal detención,
impide considerar dolosa tal conducta (Sentencia del Tribunal Supremo 443/2001, de
22 de marzo).

• Decretar la incomunicación (art. 531 CP), dolosa o imprudente, vulnerando los plazos
o garantías previstas en el art. 509 de la LECrim.
• Delitos contra los derechos penitenciarios. Se prevé en el art. 533 CP:
○ La conducta de: imponer sanciones o privaciones indebidas o usar un rigor
innecesario.
La expresión "rigor innecesario" supone adoptar medidas desproporcionadas e injustas
que no eran necesarias (STS 285/1998, de 2 de marzo).

○ Sujeto activo: funcionario penitenciario o de centros de protección o corrección de


menores.
○ Sujeto pasivo: reclusos o internos.
Delitos contra la inviolabilidad del domicilio y demás garantías de la intimidad.

Se castiga, a continuación, una serie de vulneraciones al derecho a la vida privada, en


cuanto manifestaciones especialmente relevantes de la intimidad personal,
reconocidos en los artículos 18 y 20 de la Constitución Española. Se trata de las
siguientes:

• Entrada en un domicilio sin respetar las garantías constitucionales y sin


consentimiento del morador (art. 534 CP).
Registro de papeles o documentos de la persona en cuyo domicilio se haya entrado,
sin consentimiento de éste

Retención de documentos habidos en un registro domiciliario, practicado del modo


indicado en el punto anterior .

Producción de vejación injusta o daño innecesario en los bienes de la persona cuyo


domicilio se registra de modo lícito. La "vejación injusta" no supone causar lesión,
bastando un trato afrentoso o ignominioso, de todo punto improcedente.

• Interceptación de cualquier clase de correspondencia con violación de las garantías


constitucionales o legales. Si se difundiera la información obtenida del modo indicado,
se agrava la pena (art. 535 CP).
• Interceptación de telecomunicaciones o utilización de aparatos para escuchar o
grabar imagen o sonido, con violación de las garantías constitucionales o legales. Si se
difundieran dichas informaciones, se agrava la pena (art. 536 CP).
Se vulnera el secreto de las comunicaciones cuando se accede sin autorización judicial
ni consentimiento del interesado a sus comunicaciones -telefónicas, postales, por
correspondencia electrónica, fax, etc- lo cual incluye escuchar conversaciones
practicadas por teléfono, por hilos o telefonía inalámbrica (Sentencia del Tribunal
Supremo 3583/1999, de 22 de marzo de 2001).

Delitos contra otros derechosindividuales.

Se incluyen aquí violaciones de otros derechos reconocidos en la Constitución, en


concreto artículos 24.2, 20, 21, 22 y 33 CE.
• Atentar al derecho de defensa del detenido o preso, impidiendo u obstaculizando el
derecho a la asistencia de abogado o favoreciendo la renuncia del mismo, así como no
informar de forma inmediata y de modo comprensible, de sus derechos y de las
razones de su detención (art. 537 CP).
• Establecer la censura previa, recoger libros o periódicos o suspender la emisión de
cualquier programa radiotelevisivo sin causa legal (art. 538 CP).
• Disolver o suspender una asociación legalmente constituida, sin previa resolución
judicial o sin causa legítima que impida la celebración de sus sesiones (art. 539 CP).
• Prohibir una reunión pacífica o disolverla fuera de los casos autorizados por la ley
(art. 540 CP).
• Expropiar a una persona sus bienes fuera de los casos permitidos y sin cumplir los
requisitos legales, en particular el pago del justiprecio (art. 541 CP).
Se comete un delito de expropiación ilegal cuando se prescinde en absoluto del
procedimiento legal establecido (Sentencia del Tribunal Supremo de 28 de diciembre
de 2001).

• Además, en una especie de cláusula de cierre, el art. 542 CP castiga impedir, a


sabiendas, el ejercicio de cualesquiera otros derechos cívicos reconocidos por la
Constitución o las leyes. Se trata de todos aquellos considerados fundamentales por la
Constitución (Sentencia del Tribunal Supremo de 1 de octubre de 1993), es decir, los
artículos 14 a30 de la Constitución Española, no incluidos en las anteriores conductas
delictivas.
Impedir a una persona ejercer sus derechos cívicos no requiere especiales exigencias,
basta la simple negativa a ejercerlo al sujeto que intenta actuarlo (Sentencia del
Tribunal Supremo de 23 de marzo de 2000).

Impedir la presentación de una moción de censura o su discusión pública en la sesión


correspondiente, supone la comisión del delito del artículo 542 del Código Penal,
(Sentencia del Tribunal Supremo de 19 de octubre de 1995).

Ultrajes a la nación, su unidad o sus símbolos


El delito de ultrajes a la nación, su unidad o sus símbolos, implica la conducta delictiva
consistente en ajar, injuriar o despreciar a través de palabras, escritos, o hechos,
mediante publicidad, a la nación española, sus comunidades autónomas, o los
símbolos o emblemas de una u otras, tales como banderas, himnos o escudos entre
otros.
¿Cuál es el bien jurídico protegido?

El delito de ultrajes a la nación su unidad o sus símbolos, al igual que el resto de las
figuras delictivas que integran los seis capítulos del Titulo XXI, tiene por objeto la
protección del interés general del Estado en la sumisión a la Constitución, a las leyes, a
las autoridades legítimas y el mantenimiento de la paz pública y en definitiva, a la
organización democrática del Estado.

¿Cuáles son los caracteres principales de este delito?

La regulación del delito de ultrajes a España, se encuentra en nuestro Código Penal en


el Título XXI que lleva como rúbrica “Delitos contra la Constitución”, en su Capitulo VI,
bajo la denominación “De los ultrajes a España”.

Así, dispone el artículo 543 Código Penal, que las ofensas o ultrajes de palabra, por
escrito o de hecho a España, a sus Comunidades Autónomas o a sus símbolos o
emblemas, efectuados con publicidad, se castigarán con la pena de multa de siete a
doce meses.

De la anterior regulación se extraen los siguientes requisitos de esta figura delictiva,


así:
a) Acción típica. Consiste en “ofender o ultrajar”, equiparándose estos verbos según la
doctrina mayoritaria a injuriar, ajar, o despreciar, ya sea mediante la palabra (por
ejemplo mediante gritos proferidos en el curso de una manifestación publica), por
escrito (por ejemplo mediante artículos periodísticos), o mediante hechos (por
ejemplo pisando, quemando una bandera española, o de una comunidad autónoma,
ante un concurso de personas), siendo indispensable que se ejecuten con publicidad,
toda vez en caso contrario, es decir, la ofensa o ultraje cometida sin publicidad, no
tendrá castigo alguno.
El objeto de tales ofensas deberá ser concretamente España, sus comunidades
autónomas, o los símbolos o emblemas de una u otras, tales como banderas, escudos,
himnos nacionales entre otros. El uso de la bandera de España se regula por Ley
39/1981 de 28 de octubre (declarándose inconstitucional los párrafos 10. 2.º y 3.º por
STC 118/1992, de 16 de septiembre y STC 119/1992, de 19 de septiembre). El escudo
de España se regula por Ley 33/1981 y el Himno nacional por RD 1560/1997, de 10 de
octubre.
b) Elemento subjetivo. Será necesario que el sujeto activo actúe movido con un ánimo
de injuriar, de ultrajar, por lo que la Jurisprudencia del Tribunal Supremo ha exigido en
numerosas ocasiones la presencia de un dolo especifico de ofender, de ultrajar a la
nación española, por lo que quedara impune esta conducta cuando el propósito del
autor sea el de criticar o algún otro motivo distinto al de ofender. Se trata de un delito
intencional, por lo que se declara de forma expresa que determinadas expresiones o
actos son de tal modo insultantes o agraviantes que el animo de injuriar se encuentra
implícito en ellas, por lo que no será necesario acreditar ese animo, y sí en cambio será
necesario que quede acreditado la posible existencia de otros ánimos distintos.

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