Profeta No Canónico - Principios Bíblicos

UNIVERSIDAD PERUANA UNIÓN
FACULTAD DE TEOLOGÍA
ASIGNATURA: Orientación profética
DOCENTE: Saulo Cruz
ALUMNO: Neyler Heredia
PRINCIPIOS BÍBLICOS DEL MINISTERIO PROFÉTICO
Cuando hablamos de principios bíblicos principalmente nos referimos al Decálogo,
pero también a aquellos que son la base para la interpretación de las doctrinas correctas.
Dentro del ministerio profético se podrían establecer los siguientes principios:
1. El profeta sirve a la voluntad de Dios y no viceversa: el apóstol Pedro menciona
que los “santos hombres de Dios”, presentaban un mensaje inspirado por el Espíritu
Santo (1 P 1:21)1. Algunos ejemplos solo del Antiguo Testamentos son: Abraham
(Gn 12) ante la orden de salir de su tierra a una que no conocía obedeció sin
cuestionar. Posteriormente cuando tuvo que pasar por diversas pruebas, siempre
recibió el cuidado y orientación de Dios (Gn 20). Asimismo, se puede mencionar a
Moisés (Éx 3), Samuel (1 S 3), David (1 S 16), Jeremías, Isaías, etc. Aquí es
importante mencionar que, algunas profecías eran condicionales, como lo menciona
Elena de White: “Las promesas y amenazas de Dios son igualmente
condicionales”2; lo que no invalida la autenticidad del profeta, pero al ser un
mensaje enviado por Dios, el profeta como trasmisor tenía la obligación de
comunicar al pueblo so pena de juicio posterior y acusación como falso mensajero.
Tal es el caso de la nación de Israel, quienes no recibieron el cumplimiento de las
promesas que Dios tenía para ellos, porque rechazaron al Mesías (Jn 1:11); estas
Todos los versículos bíblicos serán tomados de la versión Reina Valera 1960, a
1
menos que se indique lo contrario.

2
Elena G. de White, Mensajes selectos, tomo 1, p. 77.
1
profecías se cumplirán con el Israel espiritual como lo menciona el apóstol Pablo
(Gál 3:15-29).
2. Sus profecías tienen un cumplimiento actual y futuro: cuando el Señor envió la
profecía del cautiverio de Israel mediante Jeremías (Jer 25:11, 12), se cumplió
mientras el profeta vivía; por otro lado, su profecía también predecía la caída de
Babilonia, que se cumplió después de los 70 años de cautiverio cuando el profeta ya
no estaba. Daniel, también tiene esta característica de cumplimiento actual
(mientras él vivía) y futura (extensión a cientos de años). La interpretación de los
metales de la estatua (Dan 2), las bestias (Dan 7-8), entre otras profecías del libro.
El profeta pudo estar presente en la caída de Babilonia, pero no presenció el fin de
los demás reinos. Hubo revelaciones que él mismo no entendió, como es el caso de
las 2 300 tardes y mañanas (Dan 8:14) o las 70 semanas (Dan 9:24-27), pero que a
la fecha ya se han cumplido.
3. Su vida es coherente con la Ley de Dios: Isaías escribió con autoridad “A la ley y al
testimonio” (Is 8:20) denunciando a todos los que no hablasen conforme a esto. La
vida del profeta de Dios está en completa armonía con los mensajes que predica.
4. Predican arrepentimiento y reforma: su propósito es llevar a las personas al
arrepentimiento y anunciar el juicio divino. Muchas veces los profetas debían
cumplir acciones vergonzosas a los ojos de los hombres, con el fin de dar un
mensaje vívido de lo que Dios quería mostrar al pueblo, es el caso de Oseas cuando
Dios le pide que tome por esposa a una mujer prostituta y que la reciba varias veces
incluso después de haberle traicionado (Os 1:3; 3:1-4). Ezequiel quien vivió durante
los 70 años de cautiverio babilónico, fue designado para animar al pueblo

esclavizado. Dios le puso por centinela de la nación destruida y le dio un mensaje
de amonestación (Ez 3:16-21) con el fin de reformar sus vidas.
5. Dependen de Dios para su manutención: casi todos los profetas de Dios no fueron
gente pudiente con riquezas terrenales que ostentar. El mismo Bautista, vestía ropa
de pieles de animales y su dieta no eran manjares de las mesas de los ricos (Mt 3:4).
Al profeta Elías, Dios lo alimentó con pan, carne y agua mediante un cuervo (1 R
17:6), y con la provisión escasa de una pobre viuda (1 R 17:15).
6. Dios llama al profeta según su voluntad: ningún profeta se presentó delante de Dios
pidiendo el cargo de profeta. Siempre fue el Señor quien eligió a los hombres según
su soberanía, como el caso de Jeremías (Jer 1:5) que fue designado desde el vientre
de su madre.
7. Cristo es exaltado, el profeta nunca se atribuye el honor a sí mismo: cuando Daniel
tuvo que dar la interpretación al rey de Babilonia respecto a la estatua, después que
recibiera la revelación de Dios, se presentó delante del rey no como alguien capaz
de decir al rey el sueño (Dan 2:27,28), sino para dar toda la gloria a Dios.
8. El profeta es un ser humano con emociones y con tendencia pecaminosa: aunque
algunos críticos no consideran a Jonás como profeta, la Biblia deja en claro que sí
lo fue. Recordemos que los profetas fueron hombres y mujeres de Dios, pero que
seguían siendo seres humanos con debilidades, al punto de desobedecer mandatos
divinos. Cuando Jonás es enviado a pregonar un mensaje de juicio contra Nínive
(Jon 1:2), trata de huir a su cometido y va para Tarsis (1:3); pero es interceptado por
el Señor como ya conocemos.

El profeta Elías
En la sección anterior listamos algunos principios que podrían considerarse como
regla de medición, al momento de determinar si un profeta es verdadero o falso.
Intentaremos aplicar estos principios bíblicos a la vida del profeta Elías, quien es
considerado como un profeta no canónico.
La primera vez que aparece Elías en la Biblia es en 1 Reyes 17 durante el reinado
de Acab y vive hasta el gobierno de Ocozías.
1. El profeta sirve a la voluntad de Dios y no viceversa: ante la apostasía de Acab (1 R
16:30-34), Elías es enviado con un mensaje directo de juicio. No iba a llover
durante tres años, esto afectaría a toda la nación, incluso al mismo profeta; sin
embargo, él tuvo que cumplir con lo que Dios le había ordenado.
2. Sus profecías tienen un cumplimiento actual y futuro: la profecía de la sequía se
cumplió mientras el profeta vivía, así como la muerte de Jezabel, Acab y Ocozías.
3. Su vida es coherente con la Ley de Dios: Elías vivía en la presencia de Dios (1 R
17:1; 18:15).
4. Predican arrepentimiento y reforma: mediante palabras de reprensión, Elías hace
ver al rey su pecado (1 R 18:18). Después de dar muerte a los profetas de Baal, el
pueblo reconoce al Señor como el Dios verdadero (1 R 18:39), y Elías le pide a
Acab que vaya tranquilo a su casa porque Dios había retirado su ira, la prueba de
esto es que iba a llover nuevamente.
5. Dependen de Dios para su manutención: Elías fue alimentado por cuervos a base de
pan y carne (1 R 17:4) y saciado por el arroyo que Dios había provisto para él.
Después, a través de una viuda, calma el hambre de su siervo (1 R 17:13).

6. Dios llama al profeta según su voluntad: aunque no se registra el llamamiento de
Elías, el autor del primer libro de Los Reyes, lo ingresa durante el inicio del reinado
de Acab. Sin embargo, su vida deja notar que vivía en la presencia del Señor.
7. Cristo es exaltado, el profeta nunca se atribuye el honor a sí mismo: en el milagro
de la harina y del aceite, Elías atribuyó a Dios el milagro (1 R 17:14). Cuando
desafío a los falsos profetas de Baal, en su temor pidió al Señor enviar fuego y
consumir su ofrenda (1 R 18:37), el resultado fue que el pueblo de Israel reconoció
a Dios como el Dios verdadero (1 R 18:39).
8. El profeta es un ser humano con emociones y con tendencia pecaminosa: Elías tuvo
su momento de desánimo espiritual (1 R 19:4), el apóstol Pablo se refiere al profeta,
como “un hombre sujeto a pasiones” humanas, pero que aprendió a depender de
Dios en toda circunstancia.

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PRINCIPIOS BÍBLICOS DEL MINISTERIO PROFÉTICO

Cuando hablamos de principios bíblicos principalmente nos referimos al Decálogo,

Dentro del ministerio profético se podrían establecer los siguientes principios:

1. El profeta sirve a la voluntad de Dios y no viceversa: el apóstol Pedro menciona

recibió el cuidado y orientación de Dios (Gn 20). Asimismo, se puede mencionar a

importante mencionar que, algunas profecías eran condicionales, como lo menciona

Elena de White: “Las promesas y amenazas de Dios son igualmente

condicionales”2; lo que no invalida la autenticidad del profeta, pero al ser un

mensaje enviado por Dios, el profeta como trasmisor tenía la obligación de

comunicar al pueblo so pena de juicio posterior y acusación como falso mensajero.

Tal es el caso de la nación de Israel, quienes no recibieron el cumplimiento de las

menos que se indique lo contrario.

2. Sus profecías tienen un cumplimiento actual y futuro: cuando el Señor envió la

Babilonia, que se cumplió después de los 70 años de cautiverio cuando el profeta ya

no estaba. Daniel, también tiene esta característica de cumplimiento actual

(mientras él vivía) y futura (extensión a cientos de años). La interpretación de los

El profeta pudo estar presente en la caída de Babilonia, pero no presenció el fin de

la fecha ya se han cumplido.

4. Predican arrepentimiento y reforma: su propósito es llevar a las personas al

arrepentimiento y anunciar el juicio divino. Muchas veces los profetas debían

los 70 años de cautiverio babilónico, fue designado para animar al pueblo

de amonestación (Ez 3:16-21) con el fin de reformar sus vidas.

17:6), y con la provisión escasa de una pobre viuda (1 R 17:15).

7. Cristo es exaltado, el profeta nunca se atribuye el honor a sí mismo: cuando Daniel

8. El profeta es un ser humano con emociones y con tendencia pecaminosa: aunque

seguían siendo seres humanos con debilidades, al punto de desobedecer mandatos

divinos. Cuando Jonás es enviado a pregonar un mensaje de juicio contra Nínive

el Señor como ya conocemos.

En la sección anterior listamos algunos principios que podrían considerarse como

regla de medición, al momento de determinar si un profeta es verdadero o falso.

considerado como un profeta no canónico.

La primera vez que aparece Elías en la Biblia es en 1 Reyes 17 durante el reinado

de Acab y vive hasta el gobierno de Ocozías.

1. El profeta sirve a la voluntad de Dios y no viceversa: ante la apostasía de Acab (1 R

16:30-34), Elías es enviado con un mensaje directo de juicio. No iba a llover

embargo, él tuvo que cumplir con lo que Dios le había ordenado.

2. Sus profecías tienen un cumplimiento actual y futuro: la profecía de la sequía se

3. Su vida es coherente con la Ley de Dios: Elías vivía en la presencia de Dios (1 R

4. Predican arrepentimiento y reforma: mediante palabras de reprensión, Elías hace

pueblo reconoce al Señor como el Dios verdadero (1 R 18:39), y Elías le pide a

esto es que iba a llover nuevamente.

Después, a través de una viuda, calma el hambre de su siervo (1 R 17:13).

7. Cristo es exaltado, el profeta nunca se atribuye el honor a sí mismo: en el milagro

de la harina y del aceite, Elías atribuyó a Dios el milagro (1 R 17:14). Cuando

consumir su ofrenda (1 R 18:37), el resultado fue que el pueblo de Israel reconoció

a Dios como el Dios verdadero (1 R 18:39).

su momento de desánimo espiritual (1 R 19:4), el apóstol Pablo se refiere al profeta,

Dios en toda circunstancia.

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