Thomas Hobbes. Punto de Vista Sobre El Estado

Thomas Hobbes (1588-1679). Nació en Westport, Inglaterra.
Habiendo obtenido el título de master of arts

en la Universidad de Oxford.
● Hobbes es el más célebre de los teóricos del absolutismo. No está referido exclusivamente a la
restauración monárquica, sino también al origen secular del gobierno, cuya centralización podía recaer aún en el
parlamento. De ahí que el soberano, titular del poder ilimitado, podía ser un hombre (el rey) o una asamblea de
hombres (el parlamento).
● Sus obras tratan de problemas de naturaleza gnoseológica, ontológica y política.
Así, la percepción y los modos del conocimiento son el tema de uno de sus primeros libros titulados “Tratados
sobre los primeros principios”. Y en 1651 publica su obra fundamental “Leviatán o la materia, forma y
poder de una República eclesiástica y civil”. Leviatán en realidad, es un monstruo bíblico que aparece en el
libro Job gobernando el caos inicial.
En el pensamiento de Hobbes, y así aparece en la tapa del libro, es un hombre artificial compuesto por infinidad
de hombres, una especie de gigante coronado, que domina todo sobre la tierra. En su mano derecha tiene una
espada, símbolo del poder civil y en la izquierda un báculo, símbolo del poder eclesiástico y a sus pies se
extiende el campo y la ciudad. En efecto, gracias al arte se crea ese gran Leviatán que llamamos República o
Estado.
Hobbes es estrictamente un mecanicista, y así surge de todo su pensamiento.
La analogía del “hombre artificial”, por lo demás, es común al racionalismo del siglo XVII. En cuanto a su
metodología, se utiliza el razonamiento especulativo y matemático, tratando cuestiones políticas sin pasión. El
método deductivo matemático facilita el encadenamiento lógico de las proposiciones, que adquieren carácter
axiomático.
● Tiene una concepción pesimista de la naturaleza del hombre, a la que considera egoísta, insaciable,
guiada por el interés y la utilidad, con tendencia instintiva a la dominación y a la guerra. El estado de naturaleza
es, para él, un estado de guerra de todos contra todos.
● En la naturaleza del hombre hay tres causas principales de discordia, 1ra: La competencia, 2da: La
desconfianza, 3ra: La gloria. La primera causa impulsa a los hombres a atacarse para lograr un beneficio; la
segunda, para lograr seguridad; la tercera, para ganar reputación.
● El estado de naturaleza es un estado de guerra universal, de inseguridad y temor perpetuos, bajo el
imperio del derecho natural, en virtud del cual cada uno se encuentra en libertad de usar de su poder contra
todos y sobre todas las cosas para conservar su vida y protegerse de los demás. Pero el derecho natural
encuentra sus límites en la ley natural, que prescribe conforme recta razón lo que es necesario obtener o
evitar para la propia conservación. La ley natural impone como necesidad, buscar la paz, mediante la
renuncia recíproca del derecho absoluto sobre todas las cosas, observando las convenciones o pactos
contraídos, que tienen así carácter inviolable.
El tránsito del estado de naturaleza al estado civil o político se funda en la ley natural y se produce, no por
simple renuncia, sino por un contrato celebrado por cada uno con todos los demás, que contiene la promesa o
pacto por el cual recíprocamente abandonan sus derechos naturales.
● El estado en el pensamiento Hobbesiano: En la segunda parte del Leviatán, cuyo plan hemos visto
al transcribir la introducción, está destinada al Estado. En el pensamiento de Hobbes el fin del Estado es,
particularmente, la seguridad. Los hombres, deseosos de abandonar ese estado natural de guerra de todos
contra todos, movidos por el egoísmo, renuncian a sus derechos y erigen un poder visible que los tenga a raya y
los sujete, por temor al castigo, a la observancia de las leyes naturales.
Expresa Hobbes que el único camino de erigir semejante poder común, capaz de defenderlos contra la invasión
de los extranjeros y contra las injurias ajenas, etc. Es conferir todo su poder y fortaleza a un hombre o a una
asamblea de hombres, todos los cuales, por pluralidad de votos, puedan reducir sus voluntades a una voluntad.
Esto equivale a decir: Elegir un hombre o a una asamblea que presente su personalidad; y que cada uno
considere como propio y se reconozca a sí mismo como autor de cualquier cosa que haga o promueva quien
representa a su persona.
● Las diferentes formas de gobierno para Hobbes son tres: Monarquía, aristocracia o democracia, según
que el poder soberano esté en manos de un hombre, de una parte, de una asamblea o de toda una asamblea.
No puede existir otro género de gobierno, porque necesariamente uno, pocos o todos deben tener el poder
soberano.
Hobbes, como Bodin, se muestra partidario de la monarquía. Sentado el principio de que entre las distintas
formas de gobierno no existe diferencia de poder sino de conveniencia o aptitud para realizar sus fines, analiza
tales aptitudes concluyendo que la monarquía es la más conveniente de las formas de gobierno.
● Hobbes es él teórico por excelencia de la soberanía absoluta, ilimitada, omnipotente. Los hombres le
han cedido todos sus derechos políticos y, en consecuencia, el estado todo lo domina, para garantizar la paz y la
seguridad.
Así que no se puede negar que ha sido uno de los pensadores políticos más influyentes de la edad moderna.
En él encontró su más vigorosa expresión el concepto de Estado, y terminó de realizar la transición del
pluralismo al centralismo.

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