Índice Pág

Introducción………………………………………………………………………… 03

Desarrollo…………………………………………………………………………… 04

Técnicas de análisis de reemplazo……………………………………… 04

Modelos de reemplazo de equipos.……………………………………… 05

Factores de deterioro y obsolescencia.……………………………….… 07

Determinación del costo mínimo de vida útil. ……………………….…. 08

Determinación de la vida útil del activo.…………………………….…… 10

Conclusión………………………………………………………………………….. 12

Reflexión personal………………………………………………………..…..…… 13

Referencias………………………………………………………………………… 14
 Introducción

En el mundo empresarial, la gestión de activos es un componente esencial para la

eficiencia y el éxito a largo plazo. Este trabajo de investigación se miraran diversas
fases de la gestión de activos, desde las técnicas analíticas de reemplazo hasta la
determinación de la vida útil de un activo. Veremos la complejidad de decidir cuándo
es el momento adecuado para cambiar equipos, cómo abordar factores como el
deterioro y la obsolescencia, y cómo determinar el costo mínimo de vida útil.

Desde las técnicas analíticas de reemplazo que nos guían en la toma de decisiones
fundamentadas hasta la evaluación de factores que influyen en la duración de un
activo. En un mundo donde la tecnología siempre cambia y los negocios se mueven
rápidamente, queremos descubrir cómo estas cosas afectan la manera en que
manejamos nuestras cosas y cómo la habilidad de adaptarse y tomar buenas
decisiones se vuelve clave para tener éxito.

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 Desarrollo
Técnicas de análisis de reemplazo.

El reemplazo es un amplio concepto que abarca la selección de activos similares

pero nuevos para sustituir los existentes y la evaluación de formas completamente
diferentes para realizar la función de un activo. El análisis de reemplazo sirve para
averiguar si un equipo está operando de manera económica o si los costos de
operación pueden disminuirse, adquiriendo un nuevo equipo. Además, mediante
este análisis se puede averiguar si el equipo actual debe ser reemplazado de
inmediato o es mejor esperar unos años, antes de cambiarlo. Si un reemplazo de
activo se realiza demasiado pronto, puede originar una disminución en el capital
de una empresa y por tanto, una disminución en la disponibilidad de efectivo o
dinero, y esto a su vez, afectaría otros proyectos de inversión rentables. Por
otro lado, si el activo es reemplazado en forma retardada, podría originarle a
la empresa gastos de operación y mantenimiento excesivos.

Por estas razones, toda empresa debe establecer una política de reemplazo para
cada uno de los activos de que disponga; el no hacerlo, representaría una gran
desventaja en comparación con la “competencia” que tenga bien definidas sus
políticas de reemplazo. Los estudios de ingeniería económica de situaciones de
reemplazo se llevan a cabo empleando los mismos métodos básicos de otros
estudios económicos con dos o más alternativas. La situación específica de
decisión, sin embargo, presenta formas diferentes. Algunas veces puede ser que se
retire un activo sin reemplazo (abandono) o que se retenga como respaldo en lugar
de continuar con en el uso que originalmente se le daba. También, la decisión puede
ser que los requerimientos de cambio puedan satisfacerse al aumentar la
habilidad o capacidad de los activos existentes. A menudo, sin embargo, la
decisión consiste en si se reemplaza un activo existente (viejo) con un activo
nuevo. El o los activos de reemplazo (nuevos) se llaman sustitutos.

Las técnicas de análisis de reemplazo son métodos utilizados en la toma de

decisiones de inversión para evaluar si se debe reemplazar o mantener un activo.
Estos métodos ayudan a determinar si la adquisición de un nuevo activo es más
rentable que mantener el activo existente. Algunas de las técnicas comunes de
análisis de reemplazo incluyen:

● Valor Actual Neto (VAN o VPN): El VAN es una técnica que compara el valor
presente de los flujos de efectivo netos de un activo existente y un activo
propuesto. Si el VAN es positivo, la inversión en el nuevo activo es
generalmente considerada como favorable.

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 ● Tasa Interna de Retorno (TIR): La TIR es la tasa de descuento que hace que
el valor presente neto de los flujos de efectivo de un proyecto sea igual a
cero. Al comparar la TIR del nuevo activo con la tasa de rendimiento mínima
requerida, se puede determinar la viabilidad del reemplazo.

● Periodo de Recuperación del Capital (PRC): Esta técnica calcula el tiempo

necesario para recuperar la inversión inicial. Si el periodo de recuperación es
menor que un umbral predefinido, puede considerarse el reemplazo.

● Costo Anual Equivalente (CAE): El CAE es el costo anual uniforme que iguala
los costos totales de dos activos. Al comparar los CAE de los activos
existentes y propuestos, se puede tomar una decisión informada.

● Índice de Rentabilidad (IR): El IR compara el valor presente neto de un

proyecto con la inversión inicial. Un índice de rentabilidad mayor que uno
indica que el reemplazo es favorable.

● Análisis de Incremento de Costos y Beneficios: Este enfoque implica

comparar los costos y beneficios incrementales entre el activo existente y el
propuesto. Si los beneficios adicionales superan los costos adicionales, se
podría considerar el reemplazo.

Modelos de reemplazo de equipos.

Un plan de reemplazo de activos físicos es de vital importancia en todo proceso

económico, porque un reemplazo apresurado causa una disminución de liquidez y
un reemplazo tardío causa pérdida; esto ocurre por los aumentos de costo de
operación y mantenimiento, por lo tanto debe establecerse el momento oportuno de
reemplazo, a fin de obtener las mayores ventajas económicas.

Los modelos de reemplazo de equipos son herramientas analíticas que ayudan a las
organizaciones a tomar decisiones sobre cuándo y cómo reemplazar activos, como
maquinaria, vehículos o tecnología. Estos modelos utilizan métodos cuantitativos
para evaluar la viabilidad económica y técnica de sustituir un activo existente por
uno nuevo. Aquí hay algunos modelos comunes de reemplazo de equipos:

Modelo de Costo Mínimo Total (CMT): Este modelo busca minimizar el costo total de
posesión, que incluye costos de adquisición, operativos y de mantenimiento durante
el ciclo de vida del activo. Se elige el momento de reemplazo que minimiza los
costos totales acumulados.

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Modelo de Mantenimiento Óptimo: Este modelo compara los costos de
mantenimiento y operación de un activo existente con los costos de mantenimiento y
operación de un activo nuevo. El reemplazo se realiza cuando los costos de
mantener y operar el activo existente superan ciertos umbrales.

Modelo de Valor Presente Neto (VPN) y Tasa Interna de Retorno (TIR): Estos
modelos son herramientas estándar en la toma de decisiones de inversión. Se
comparan los flujos de efectivo netos de mantener y reemplazar el activo a lo largo
del tiempo, considerando el valor del dinero en el tiempo.

Modelo de Equilibrio de Reemplazo: Examina el equilibrio entre los costos de

reemplazar un activo y los beneficios derivados de la mejora en eficiencia,
capacidad, o cualquier otro factor que aporte valor adicional al nuevo activo.

Modelo de Desgaste: Considera el desgaste físico y funcional de un activo a lo largo

del tiempo. Se reemplaza el activo cuando su desgaste alcanza un nivel que afecta
negativamente su rendimiento o confiabilidad.

Modelo de Rendimiento Técnico: Evalúa la obsolescencia tecnológica y el

rendimiento técnico del activo. Se reemplaza el equipo cuando hay avances
tecnológicos que ofrecen un rendimiento significativamente mejor.

Modelo de Vida Económica Mínima: Determina el punto en el tiempo en el que el

costo total acumulado de poseer un activo excede su valor residual. El activo se
reemplaza cuando alcanza su vida económica mínima.

Modelo de Programación Lineal: Utiliza técnicas de programación lineal para

optimizar la programación de reemplazo, considerando restricciones como
presupuesto disponible y capacidad de producción.

Estos modelos son herramientas valiosas para empresas y organizaciones que

desean tomar decisiones informadas sobre cuándo reemplazar equipos para
maximizar la eficiencia y minimizar los costos a lo largo del tiempo. La elección del
modelo específico puede depender de la naturaleza del activo, los datos disponibles
y los objetivos de la organización.

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Factores de deterioro y obsolescencia.

Los factores de deterioro y obsolescencia son elementos que contribuyen al declive

o pérdida de valor de un producto, activo o tecnología con el tiempo. A continuación,
se describen ambos conceptos:

Deterioro: El deterioro se refiere al proceso gradual de desgaste, daño o

degradación de un producto o activo con el tiempo. El deterioro puede definirse
como la disminución de la eficiencia de ingeniería de un equipo en comparación
con la que se tenía cuando el equipo era nuevo

Causas comunes:
● Uso continuo y repetido.
● Exposición a condiciones ambientales adversas (humedad, temperatura,
etc.).
● Desgaste mecánico.
● Reacciones químicas.
● Falta de mantenimiento adecuado.

Obsolescencia: La obsolescencia implica la pérdida de utilidad o relevancia de un

producto o tecnología debido a avances en el conocimiento, la tecnología o cambios
en la demanda del mercado. La obsolescencia puede definirse como la disminución
de la eficiencia de ingeniería del equipo cuando todavía está nuevo, en comparación
con la mejor eficiencia de ingeniería disponible en ese momento.

Causas comunes:
● Avances tecnológicos que hacen que un producto sea anticuado.
● Cambios en las preferencias del consumidor.
● La introducción de nuevos estándares de la industria.
● La falta de soporte o piezas de repuesto.
● Limitaciones de rendimiento en comparación con productos más nuevos.

Ambos factores pueden afectar a una amplia gama de productos, desde bienes de
consumo hasta equipos industriales y tecnologías. La gestión efectiva de los
factores de deterioro y obsolescencia implica estrategias de mantenimiento,
actualización tecnológica, planificación de inventario y la capacidad de adaptarse a
cambios en el mercado y la tecnología.

Las empresas y los individuos a menudo deben considerar estos factores al tomar
decisiones sobre inversiones, desarrollo de productos o mantenimiento de activos
para garantizar una gestión eficiente y sostenible de recursos y tecnologías a lo
largo del tiempo.

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Determinación del costo mínimo de vida útil.

A menudo un analista desea conocer cuánto tiempo debe permanecer un activo o

proyecto o servicio para minimizar su costo total, considerando el valor del dinero en
el tiempo y los requerimientos de entorno. Ese tiempo en años es un valor n y se
denomina de varias maneras incluyendo costo mínimo de vida útil, vida útil
económica, tiempo de retiro o tiempo de reemplazo. Sobre ese punto, la vida útil del
activo tiene que ser suministrada sin considerar cómo fue determinada. El valor n es
el número de años que rinde a un mínimo costo anual. Este enfoque de estimar n
como el costo mínimo de vida útil, utiliza los cálculos convencionales.

La determinación del costo mínimo de vida útil es un concepto que implica calcular
los costos asociados con la posesión y el mantenimiento de un activo o producto
durante un período específico de tiempo para optimizar los gastos a lo largo de su
vida útil. El objetivo es encontrar un equilibrio entre los costos iniciales y los costos
de operación y mantenimiento, de manera que el costo total sea el más bajo posible.

Pasos generales que podrían considerarse en la determinación del costo mínimo de

vida útil son:

● Costos Iniciales: Incluyen la adquisición del activo, instalación y cualquier

costo asociado con la puesta en marcha.

● Costos de Operación y Mantenimiento: Incluyen los gastos recurrentes

durante la vida útil del activo, como el mantenimiento regular, reparaciones,
consumibles y cualquier costo operativo necesario.

● Vida Útil Esperada: Estima el período durante el cual se espera que el activo
sea funcional y eficiente.

● Costo Total a lo Largo de la Vida Útil: Calcula la suma de los costos iniciales y
los costos operativos y de mantenimiento durante la vida útil del activo.

● Análisis de Alternativas: Evalúa diferentes opciones, considerando posibles

mejoras tecnológicas, cambios en los costos de operación y mantenimiento, y
cambios en los requisitos operativos.

● Flujo de Efectivo Descontado: Aplica el concepto de valor presente para

ajustar los flujos de efectivo futuros, considerando el valor del dinero en el
tiempo. Esto ayuda a comparar costos a lo largo de la vida útil.

7
 ● Análisis de Sensibilidad: Examina cómo variaciones en diferentes factores
afectan los resultados.

● Toma de Decisiones: Con base en el análisis, se toma una decisión

informada sobre la opción que minimiza el costo total a lo largo de la vida útil.

Es importante tener en cuenta que factores como cambios en la tecnología,

regulaciones, condiciones económicas y requisitos operativos pueden influir en la
determinación del costo mínimo de vida útil, por lo que es necesario realizar ajustes
y revisiones periódicas según sea necesario.

Calcular el costo mínimo de vida útil implica evaluar y sumar los costos iniciales y
los costos operativos y de mantenimiento a lo largo del tiempo:

Identificar los Costos:

➢ Costos Iniciales (CI): Incluyen la adquisición del activo, instalación y otros
costos asociados con la puesta en marcha.
➢ Costos Operativos y de Mantenimiento Anuales: Incluyen costos recurrentes
como mantenimiento, reparaciones, consumibles y otros gastos operativos.

Determinar la Vida Útil Esperada (VU):

➢ Estimar el tiempo durante el cual se espera que el activo sea funcional y
eficiente.

Calcular el Costo Total a lo Largo de la Vida Útil (CT):

➢ Utilizar la siguiente fórmula simplificada:

Donde:
CT es el costo total a lo largo de la vida útil.
CI son los costos iniciales.
COMA son los costos operativos y de mantenimiento anuales.
VU es la vida útil esperada en años.

Aplicar el Flujo de Efectivo Descontado (FED):

➢ Para considerar el valor del dinero en el tiempo, puedes aplicar el FED
ajustando los flujos de efectivo futuros a su valor presente. La fórmula es:

r es la tasa de descuento por periodo.

t es el periodo.

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Análisis de Sensibilidad:
➢ Realiza análisis de sensibilidad para evaluar cómo variaciones en tasas de
interés, costos operativos, vida útil, etc., afectan los resultados.

Toma de Decisiones:
➢ Con base en el análisis, toma decisiones informadas sobre la opción que
minimiza el costo total a lo largo de la vida útil.

Determinación de la vida útil del activo.

La vida útil estimada de un activo fijo está medida por dos factores : una es el
periodo de tiempo, durante el cual la empresa espera utilizar el activo; y la otra es el
número de unidades de producción o similares que se espera obtener.

La determinación de la vida útil de un activo es un proceso importante que implica

estimar el tiempo durante el cual se espera que el activo sea funcional y proporcione
beneficios económicos. La vida útil puede variar según el tipo de activo y se ve
afectada por factores como el desgaste, la obsolescencia, el mantenimiento y los
avances tecnológicos. Aquí hay algunos pasos que puedes seguir para determinar
la vida útil de un activo:

Evaluar la Obsolescencia Tecnológica: Analiza la rapidez con la que la tecnología

está cambiando en la industria relevante. Si el activo podría volverse obsoleto
rápidamente debido a avances tecnológicos, su vida útil puede ser más corta.

Examinar el Desgaste y la Degradación: Considera el desgaste físico y la

degradación del activo con el tiempo. Factores como la frecuencia de uso, las
condiciones ambientales y la calidad del mantenimiento pueden afectar la vida útil.

Revisar Especificaciones del Fabricante: Consulta las especificaciones y

recomendaciones del fabricante para obtener información sobre la vida útil prevista
del activo. Los fabricantes a menudo proporcionan pautas sobre el tiempo durante el
cual el equipo debe funcionar de manera eficiente.

Experiencia Histórica: Si el activo es similar a otros utilizados en la misma industria,

la experiencia histórica con activos similares puede proporcionar una guía útil para
determinar la vida útil.

Considerar Factores Legales y Regulatorios: Algunos activos pueden tener una vida
útil limitada por leyes o regulaciones. Por ejemplo, las regulaciones ambientales
pueden afectar la vida útil de equipos industriales.

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Revisar la Vida Útil Económica: La vida útil económica es el período durante el cual
se espera que el activo genere beneficios económicos. Este período puede estar
determinado por consideraciones financieras y fiscales.

Realizar Análisis de Costo-Beneficio: Realiza un análisis de costo-beneficio para

determinar si la inversión en mantenimiento o actualización puede extender la vida
útil del activo de manera rentable.

Monitoreo Continuo: A medida que el activo está en uso, monitorea su desempeño y

condiciones para ajustar las estimaciones de vida útil según sea necesario.

La determinación de la vida útil es una tarea que puede involucrar una combinación
de factores técnicos, económicos y legales. Es crucial realizar una evaluación
integral para tomar decisiones informadas sobre la gestión y el mantenimiento de los
activos a lo largo del tiempo.

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 Conclusión

Cuando pensamos en la gestión de activos y toma de decisiones sobre reemplazo,

es esencial encontrar el equilibrio adecuado. Las técnicas de análisis de reemplazo
y modelos de reemplazo de equipos nos ayudan a tomar decisiones informadas,
considerando costos, beneficios y el momento óptimo para cambiar. Factores como
el deterioro y la obsolescencia nos recuerdan la importancia de anticipar cambios en
nuestros activos.

Determinar el costo mínimo de vida útil implica evaluar cuidadosamente los costos a
lo largo del tiempo, buscando la forma más rentable de mantener y utilizar activos.
Complementariamente, determinar la vida útil de un activo significa entender cuánto
tiempo podemos esperar que algo sea útil, considerando factores como el desgaste
y los cambios tecnológicos.

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 Reflexion Personal

Pienso que estos temas son muy relevantes debido a que nos ayudan a tener y
tomar mejores decisiones en base a diversos factores como los de obsolescencia y
deterioro, que con estos temas nos dicen que es necesario ser abiertos, inteligentes
y ser flexibles para aprender de lo que sucede en el mundo que nos rodea, la
tecnología y los mercados están siempre cambiando, y esto nos dice que, tanto en
los negocios como en la vida, es esencial adaptarse y tomar decisiones inteligentes
para tener éxito en el futuro.

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