Personalidad Carcter Temperamento
Personalidad Carcter Temperamento
Personalidad Carcter Temperamento
pensaba que la
personalidad era el
resultado de la
resolución de los
consientes y de los
inconscientes de las
personas, además de
las crisis del desarrollo.
Patrón de sentimientos y pensamientos
ligados al comportamiento que persiste a
lo largo del tiempo y de las situaciones.
Advierte dos cosas importantes:
1° La personalidad se refiere a aquellos
aspectos que distinguen a un individuo de
cualquier otro, y en este sentido la
personalidad es característica de una
persona.
2° La personalidad persiste a través del
tiempo y de las situaciones.
La personalidad está
formada por una serie
de características que
utilizamos para
describirnos y que se
encuentran
integradas mediante
lo que llamamos el
«yo» o "sí mismo"
formando una unidad
coherente.
La personalidad es la
forma en que
pensamos, sentimos,
nos comportamos e
interpretamos la
realidad.
Algunos teóricos
ponen énfasis en las
experiencias de la
primera infancia, otros
en la herencia, y otros
atribuyen el papel
fundamental al medio
ambiente.
Pero debemos tener
claro que la
personalidad es algo
único de cada
individuo, y es lo que
nos caracteriza como
entes independientes
y diferentes.
La personalidad no
es mas que el patrón
de pensamientos,
sentimientos y
conducta que
presenta una
persona y que
persiste a lo largo de
toda su vida, a
través de diferentes
situaciones.
No son más que las
disposiciones
persistentes e
internas que hacen
que el individuo
piense, sienta y
actué, de manera
característica.
Los rasgos pueden
calificarse en
cardinales, centrales
y secundarios.
Son relativamente
poco frecuentes, son
tan generales que
influyen en todos los
actos de una
persona.
Un ejemplo de ello
podría ser una
persona tan egoísta
que prácticamente
todos sus gestos lo
revelan.
Son más comunes, y
aunque no siempre,
a menudo son
observables en el
comportamiento.
Ejemplo, una
persona agresiva tal
vez no manifieste
este rasgo en todas
las situaciones.
Son atributos que no
constituyen una
parte vital de la
persona pero que
intervienen en
ciertas situaciones.
Un ejemplo de ello
puede ser, una
persona sumisa que
se moleste y pierda
los estribos.
Todo ser humano al nacer
posee una personalidad
"potencial", en cuanto a
que tiene los elementos
básicos de la misma. Esta
potencialidad comenzará
a ser realidad cuando se
inicie el desarrollo de
ciertas características y
capacidades, como
trabajo
intelectual, creatividad, co
nducta intencional y
valores éticos, entre
otras, que indican que los
diversos elementos de la
personalidad están
funcionando con cierto
nivel de organización.
EL REFORMADOR
Idealista, de principios
éticos, concienzudos, bien/
mal.
Profesores y cruzados ;
también quieren hacer el
bien pero temen cometer
errores.
Organizados, ordenados y
fastidiosos, derivan en
críticos y perfeccionistas.
Problemas con la ira
reprimida e impaciencia.
En su mejor estado:
sabios, realistas, nobles y
moralmente heróicos.
EL AYUDADOR
Preocupado, interpersonal.
Empáticos, sinceros, cálidos.
Amistosos, generosos y
sacrificados; también pueden
ser
sentimentales, halagadores y
complacientes.
Les gusta estar cerca de otros
y hacer cosas por otros para
ser necesitados.
Problemas con hacerse cargo
de ellos mismos y reconocer
sus propias necesidades. En su
mejor estado: generosos y
altruistas y tienen amor
incondicional por ellos mismos
y otros.
EL TRIUNFADOR
Adaptable y orientado al
éxito.
Seguros de sí mismos,
atractivos y encantadores.
Ambiciosos, competentes y
energéticos; conscientes del
status y buscan avance
personal.
Preocupados de la imagen y
lo que los demás piensen de
ellos.
Problemas con
competitividad y trabajólicos.
En su mejor estado:
Auténticos, se aceptan y son
todo lo que parecen ser.
Modelos que inspiran a otros.
EL INDIVIDUALISTA
Romántico, introspectivo.
Conscientes de sí mismos,
sensibles, reservados y
callados.
Se muestran emocionalmente
honestos, y personales;
también pueden ser
temperamentales y
egocéntricos.
No se acercan a otros por
sentirse vulnerables y
defectuosos, pueden ser mirar
en menos estilos de vidas
comunes.
Problemas con
autoindulgentes y pena de sí
mismos.
En su mejor estado: inspirados
y altamente creativos,
capaces de renovarse a sí
mismos y transformar sus
experiencias.
EL INVESTIGADOR
Intenso, cerebral.
Alertas, profundos y curiosos.
Capacidad de
concentración y foco en el
desarrollo de ideas y destrezas
complejas.
Independientes e
innovadores; pueden volverse
preocupados con sus
pensamientos y
construcciones imaginarias. Se
vuelven desconectados, pero
intensos.
Problemas con aislamiento,
excentricidad y nihilismo.
En su mejor estado: Pioneros
visionarios, adelantados a su
tiempo y capaces de ver el
mundo de una forma
completamente distinta.
EL LEAL
Comprometido, orientado
a la seguridad.
Confiables, trabajadores y
responsables; pueden
ponerse a la
defensiva, evasivos y
altamente
ansiosos, estresándose y
quejándose.
Usualmente precavidos e
indecisos, pueden ser
reactivos, desafiantes y
rebeldes.
Problemas con duda y
sospecha.
En su mejor estado:
estables
internamente, confiados
en sí mismos, apoyadores
de los débiles y sin poder.
EL ENTUSIASTA
Ocupado, productivo.
Versátiles, optimistas y
espontáneos.
Juguetones, espíritu en alto
y prácticos; pueden
abarcar mucho, dispersos
y poco disciplinados.
Buscan experiencias
nuevas y excitantes, pero
se distraen y cansan en el
camino.
Problemas con
superficialidad e
impulsividad.
En su mejor estado: Usan
sus talentos en metas que
valen la pena, disfrutan,
satisfechos, llenos de
gratitud.
EL DESAFIADOR
Poderoso, dominante.
Confiados en sí
mismos, fuertes y asertivos.
Protectores, llenos de recursos
y decididos; pueden ser
orgullosos y dominantes.
Sienten que deben controlar
el entorno, tornándose
confrontacionales e
intimidantes.
Problemas con permitirse estar
cerca de otros.
En su mejor estado: usan su
fuerza para mejorar las vidas
de otros, son
heroicos, magnánimos y a
veces históricamente
grandes.
EL PACIFICADOR
Aceptador, inconsciente de
sí.
Aceptadores, confiados y
estables.
De buena naturaleza, buenos,
fáciles y apoyadores; pueden
estar demasiado dispuestos a
seguir la corriente a otros para
mantener la paz.
Quieren que nada implique
conflicto pero tienden a ser
complacientes y minimizar
todo aquello que lo altere.
Problemas con pasividad y
porfiadez.
En su mejor estado:
intensamente vivos y
conectados con ellos mismos
y otros.
La constitución física
El temperamento
La inteligencia
El carácter moral
Conjunto de
peculiaridades psíquicas
estables del hombre;
depende de la actividad
del individuo y de sus
condiciones de vida, y se
manifiesta en la manera
de obrar. Conociendo el
carácter de un hombre, es
posible prever de qué
modo éste se va a
comportar en
determinadas
circunstancias y, por
ende, orientar la conducta
formando, en el individuo
cualidades valiosas para la
sociedad.
Tiene origen en el griego
y significa marca
grabada, señal que se
esculpe o dibuja en
algún objeto.
Es adquirido.
En su aceptación
psicológica pasó a
denominar el estilo de
vida o el sello personal
que se pone de
manifiesto en el
comportamiento del
individuo
El carácter se va
desarrollando a través
de la vida del ser
humano, cuando ha
conformado un
conjunto de situaciones
neuropsíquicas de las
actividades y actitudes
que resultan de una
progresiva adaptación o
regulación del
temperamento a las
condiciones del
ambiente social.
Depende de la relación
social que mantiene el
individuo con su
comunidad
Es de naturaleza
psicológico-social, es decir
depende de la
concepción que la
persona tiene del
mundo, del saber y de la
experiencia
acumulados, de los
principios morales
aprehendidos, de la
dirección que otros
individuos ejerzan y de la
activa interinfluencia que
con ellos la persona dada
establezca.
No es innato, se forma en
el ambiente que crea la
actividad del hombre, y
depende de la educación.
El carácter no se
manifiesta de forma
total y definitiva en
la infancia, sino que
pasa por distintas
fases hasta alcanzar
su completa
expresión al final de
la adolescencia.
El carácter del niño es
modelado por el carácter
de todos sus familiares en
un primer momento, ya
que posteriormente son
determinados por la
estructura social y cultural.
La familia es la agencia
psíquica de la sociedad. Al
adaptarse el niño a su
familia adquiere el
carácter que después lo
adoptará en las tareas que
debe ejecutar en la vida
social, es el que le hace
desear hacer lo que debe
hacer, y cuyo núcleo
comparte con la mayoría
de los miembros de la
misma cultura.
La cualidad que diferencia al carácter de
la personalidad es su connotación ética.
Cuando hablamos del «buen o el mal
carácter» de una persona, estamos
haciendo, de entrada, un juicio positivo o
negativo de las cualidades generales de
esa persona y de su personalidad, en la
medida en que ésta se oriente en uno u
otro sentido.
Allport: «El carácter es, simplemente, la
personalidad evaluada desde el punto de
vista ético.»
Del latín
temperamentum, ‘m
edida’.
Peculiaridad e
intensidad individual
de los afectos
psíquicos y de la
estructura
dominante de
humor y motivación.
“Por temperamento se
entiende el conjunto de
disposiciones afectivas
predominantes que
determina las
reacciones emotivas de
un individuo.
El temperamento se
basa en la herencia
biológica. Por ello es
difícilmente modificable.
Representa la base
constitucional de la
persona.
Actualmente se acepta
que ciertas características
del temperamento se
deben a procesos
fisiológicos del sistema
linfático, así como a la
acción endocrina de
ciertas hormonas.
Los efectos intensos y
permanentes del entorno
pueden llegar a influir de
forma importante en la
formación del
temperamento de cada
individuo.
Esta constituido por
aquellos aspectos
motivacionales y
emotivos del
individuo, en gran
parte determinados
por factores
biológicos o
constitucionales.