ALUMNO: JOSE PACHECHO. V-29.828.

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CATEDRA: DERECHO MERCANTIL II

Los medios alternativos de solución de conflictos son herramientas que permiten resolver
disputas de manera pacífica y eficiente, sin necesidad de recurrir a la vía judicial tradicional.
Estos medios, como la mediación, el arbitraje o la conciliación, buscan fomentar el diálogo y la
cooperación entre las partes involucradas, con el objetivo de alcanzar un acuerdo mutuamente
satisfactorio.
En la actualidad, los medios alternativos de solución de conflictos han cobrado mayor relevancia
debido a su eficiencia y rapidez en la resolución de disputas. A diferencia de los tribunales, donde
los procesos pueden ser largos y costosos, estos medios ofrecen una vía más accesible y flexible
para solucionar conflictos.
Uno de los principales antecedentes de los medios alternativos de solución de conflictos se
remonta a los sistemas tradicionales de justicia, donde las comunidades resolvían sus conflictos a
través del diálogo y la negociación. Con el paso del tiempo, estos métodos se han modernizado y
adaptado a las necesidades de la sociedad contemporánea. Los antecedentes de los medios
alternativos de solución de conflictos se remontan a tiempos ancestrales, donde las comunidades
encontraban formas propias de resolver sus disputas sin recurrir a la violencia o a la imposición
de terceros. Esas prácticas evolucionaron a lo largo de la historia y dieron lugar a los métodos
actuales utilizados en todo el mundo.
Uno de los antecedentes más remotos se encuentra en las sociedades primitivas, donde las tribus
y comunidades resolvían sus conflictos a través del diálogo, la mediación y las prácticas de
justicia restaurativa. Estos métodos se centraban en el restablecimiento del equilibrio y la
armonía social, promoviendo la reconciliación y la restitución.
En la antigua Grecia, se utilizaba el arbitraje como forma de resolver disputas, donde las partes se
sometían a la decisión de árbitros imparciales. Estos árbitros eran reconocidos por su sabiduría y
equidad, y tenían la autoridad para dictar una resolución vinculante para ambas partes.
En la época medieval, los gremios y mercaderes emplearon el arbitraje para resolver sus
conflictos comerciales. Estos gremios tenían reglamentaciones internas que incluían la figura de
árbitros expertos en el campo mercantil, quienes emitían decisiones que eran respetadas por todas
las partes involucradas.
En el ámbito internacional, los primeros antecedentes del arbitraje se encuentran en tratados y
convenciones entre países. El más destacado de estos antecedentes es la Convención de La Haya
sobre Arbitraje Comercial Internacional de 1899, que estableció una serie de reglas y principios
para regular los arbitrajes comerciales entre naciones.
Con el paso del tiempo, los medios alternativos de solución de conflictos fueron ganando
reconocimiento y aceptación en el ámbito legal. Se promovió su uso a nivel nacional e
internacional, tanto en sectores comerciales como en diversas áreas del derecho, como el laboral,
el familiar y el medioambiental.
En la actualidad, los medios alternativos de solución de conflictos se han convertido en una parte
integral de los sistemas legales de muchos países. Han surgido instituciones especializadas, como
los centros de mediación y arbitraje, que se encargan de ofrecer servicios de resolución de
conflictos de manera imparcial y eficiente.
Los medios alternativos de solución de conflictos tienen un fundamento constitucional,
garantizando a los ciudadanos el derecho a una justicia pronta y expedita. Esto implica que las
partes tienen la opción de resolver sus disputas de manera más rápida y eficiente, sin tener que
esperar años para obtener una resolución judicial. El fundamento constitucional de los medios
alternativos de solución de conflictos se encuentra en diferentes disposiciones de la Constitución
de cada país, aunque los principios y valores fundamentales que respaldan estos métodos
generalmente se pueden inferir de los principios constitucionales y derechos fundamentales
establecidos.
En términos generales, la utilización de medios alternativos de solución de conflictos está
respaldada por los siguientes fundamentos constitucionales:
1. Derecho a la justicia: Los medios alternativos, como la mediación, arbitraje y conciliación,
buscan brindar a las personas una opción alternativa para resolver sus disputas de manera justa,
rápida y eficiente, como parte del derecho fundamental a acceder a la justicia consagrado en
muchas constituciones.
2. Derecho a la autonomía de la voluntad: Los medios alternativos de solución de conflictos se
basan en el principio de que las partes involucradas en un conflicto tienen el derecho a decidir y
controlar el proceso de resolución, siempre que se respeten los límites legales y las garantías
procesales.
3. Derecho a la igualdad y no discriminación: Los medios alternativos promueven la igualdad de
acceso a la justicia y ofrecen una opción equitativa para todas las personas, independientemente
de su origen étnico, género, religión u otras características protegidas.
4. Derecho a la eficiencia y celeridad procesal: Los medios alternativos de solución de conflictos
buscan superar las limitaciones de los procedimientos judiciales tradicionales, fomentando la
resolución ágil, eficiente y económica de las controversias, en línea con el principio de justicia
pronta y expedita establecido en muchas constituciones.
Es importante destacar que el fundamento constitucional de los medios alternativos puede variar
según el país y su marco legal específico. Por tanto, es necesario revisar las disposiciones
constitucionales y legislativas aplicables en cada jurisdicción para obtener una comprensión más
precisa de su fundamento jurídico.
En términos legales, los medios alternativos de solución de conflictos están regulados por leyes
específicas en cada país. Estas leyes establecen los procedimientos a seguir, los requisitos y las
características de cada método. Además, se promueve la utilización de estos medios a través de
campañas de difusión y capacitación para concientizar a la sociedad sobre los beneficios de estos
métodos.
El procedimiento de los medios alternativos de solución de conflictos varía según el método
elegido. Por ejemplo, en la mediación, un tercero neutral, denominado mediador, facilita la
comunicación entre las partes para que puedan llegar a un acuerdo. En el arbitraje, un árbitro o un
tribunal arbitral decide sobre la disputa y emite un laudo, que tiene la misma fuerza que una
sentencia judicial.
El procedimiento de los medios alternativos de solución de conflictos varía dependiendo del
medio utilizado, pero en general sigue ciertos pasos comunes:
1. Acuerdo de las partes: Las partes involucradas en el conflicto deben estar de acuerdo en
utilizar un medio alternativo de solución de conflictos en lugar de ir a juicio. Pueden ser los
mismos involucrados en el conflicto o sus representantes legales quienes lleguen a este acuerdo.
2. Elección del mediador o árbitro: Dependiendo del medio utilizado, se elige a un mediador
imparcial o un árbitro neutral para facilitar el proceso de resolución del conflicto. El mediador o
árbitro debe ser una persona capacitada y formada en técnicas de resolución de conflictos.
3. Presentación de argumentos: Cada una de las partes involucradas en el conflicto tiene la
oportunidad de presentar sus argumentos y evidencias al mediador o árbitro. Esto se hace de
manera organizada y respetuosa, permitiendo que todas las partes tengan la oportunidad de
expresarse.
4. Negociación y búsqueda de soluciones: En el caso de la conciliación y mediación, las partes
involucradas en el conflicto discuten y negocian para buscar una solución mutuamente aceptable.
El mediador o conciliador puede ayudar a facilitar la comunicación entre las partes y proponer
posibles soluciones.
5. Toma de decisiones: En el arbitraje, el árbitro escucha los argumentos y evidencias
presentados por las partes y posteriormente toma una decisión vinculante que resuelve el
conflicto. En la conciliación y la mediación, las partes llegan a un acuerdo mutuamente aceptable.
6. Implementación del acuerdo: Una vez alcanzado un acuerdo entre las partes, este debe ser
implementado y cumplido por ambas partes. En algunos casos, el acuerdo alcanzado puede ser
sometido a un tribunal para obtener su aprobación y hacerlo vinculante legalmente.
Es importante tener en cuenta que el procedimiento de los medios alternativos de solución de
conflictos puede variar dependiendo del país y de las reglas específicas establecidas por las
instituciones u organismos encargados de administrar estos procesos.
Una de las ventajas de los medios alternativos de solución de conflictos es la posibilidad de
preservar la relación entre las partes, ya que se busca involucrarlas activamente en la resolución
del conflicto. Además, estos métodos son menos formales y ofrecen mayor flexibilidad en
términos de plazos y reglas procesales.
Sin embargo, también existen desventajas. Por ejemplo, en algunos casos, las partes pueden tener
dificultades para llegar a un acuerdo o pueden existir desequilibrios de poder entre ellas. Además,
la falta de precedentes y la limitada posibilidad de apelación en ciertos métodos pueden generar
inseguridad jurídica.
En el ámbito de la jurisdicción mercantil, los medios alternativos de solución de conflictos
también han ganado terreno. En casos de disputas entre empresas o comerciantes, se ha
incentivado el uso de la conciliación y el arbitraje, principalmente, para resolver conflictos de
manera más ágil y especializada. En la jurisdicción mercantil, los medios alternativos de solución
de conflictos son ampliamente utilizados para resolver disputas comerciales de manera más ágil y
especializada. Algunos ejemplos del uso de estos medios incluyen:
1. Arbitraje Comercial: Muchas empresas y comerciantes optan por someter sus disputas a
arbitraje en lugar de acudir a los tribunales. Los contratos laborales, de distribución, de
compraventa y de franquicia son solo algunos ejemplos de situaciones en las que el arbitraje
comercial puede ser utilizado. Las partes eligen árbitros expertos en el campo mercantil, quienes
dictarán una resolución vinculante para ambas partes.
2. Conciliación: La conciliación es utilizada para resolver conflictos comerciales a través de la
intervención de un tercero neutral, denominado conciliador. Este facilita la comunicación entre
las partes y las ayuda a llegar a un acuerdo mutuamente beneficioso. La conciliación es
especialmente útil en situaciones donde las partes buscan mantener una relación comercial a largo
plazo.
3. Mediación: La mediación es otra herramienta utilizada en la jurisdicción mercantil. Un
mediador imparcial y neutro facilita el diálogo entre las partes y los ayuda a encontrar soluciones
creativas y consensuadas. La mediación es particularmente efectiva en disputas relacionadas con
contratos, incumplimientos de acuerdos comerciales o conflictos entre socios de empresas.
4. Negociación asistida: En la jurisdicción mercantil, las partes también pueden recurrir a la
negociación asistida para resolver sus disputas comerciales. En este proceso, un tercero neutral
guía y facilita la negociación entre las partes, fomentando un diálogo constructivo y ayudando a
encontrar soluciones aceptables para ambas partes. La negociación asistida es especialmente
efectiva cuando hay intereses en juego que pueden ser preservados a través de la negociación.
Estos son solo algunos ejemplos del uso de los medios alternativos de solución de conflictos en la
jurisdicción mercantil. Su utilización tiene numerosos beneficios, como la rapidez, la
confidencialidad, la especialización de los mediadores y árbitros, y la posibilidad de encontrar
soluciones más flexibles y creativas que las impuestas por un tribunal.
En conclusión, los medios alternativos de solución de conflictos son una alternativa eficiente y
justa a la vía judicial tradicional. Su fundamento constitucional y legal brinda un marco sólido
para su implementación. Si bien tienen ventajas y desventajas, estos métodos permiten resolver
disputas de manera más rápida y pacífica, preservando la relación entre las partes involucradas.
Es importante fomentar su uso y promover su conocimiento para garantizar una sociedad más
justa y en armonía.