Mitos y Leyendas Del Paraguay - Tomás L. Micó
Mitos y Leyendas Del Paraguay - Tomás L. Micó
Mitos y Leyendas Del Paraguay - Tomás L. Micó
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PALABRAS LIMINARES
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Narciso R. Colmán, el poeta mitológico, toma los “seres mentados” por
Bertoni, Cadogan, Maynthuzen y elabora con ellos un mundo orgánico
que es el que nos trasmite el libro Ñande ypykuéra que se diera a
publicidad en 1929 y que es considerado con justos títulos una obra
clásica en la literatura nacional.
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ROSICRAN EN LA MITOLOGIA
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OBJETOS REALES
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MITOLOGIA Y LENGUAJE
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MITOAMBITO
1 Ovevé
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CIENCIA DE EXTRAÑAS POTESTADES
Los seres parlantes, los fabularios como el Karáu del cuento son
posguaraní y hacen parte de una tercera forma y onomástica próxima ya
a la narrativa folklórica de actualizado cuño para su reubicación en las
consejas populares. Esto es de otra esfera, otro status. En el afán de no
mezclarlos nos ocupamos en este connato de presentación de cuando
comprende los límites que Rosicrán impuso a su propio obra, al
dedicarse en forma exclusiva a la segunda concepción de seres míticos
de la que emergen siete monstruofilios de los antiguos primeros: Taú y
Kerana, dejando respetable lugar a Tupâ, el verdadero primigenio, autor
de los días de estos deambulantes de siestas y plenilunios de nuestras
campiñas y de aquellos otros que duermen en las profundidades de la
tierra en cubiles, guaridas o escondederos con que los obsequió nuestra
dadivosa natura.
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por el gran ybytymiense –Rosicrán– cuya memoria se honra en esta
edición.
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GRAN POESIA
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Por citar tan solo tres destacadas personalidades especializadas en estos temas, dado que hacen más de una
treintena de calificados estudiosos de tan nobles motivos. Sus nombres aparecen en citas coincidentes que avalan
este ensayo en los tres volúmenes que lo resumen.
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MITOFISONOMIA
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EL MUNDO DE LAS LEYENDAS
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Pero debemos decir brevemente que Tupã es considerado en prístino
sentido de la teogonía un ser superior, paternal, amable, que no halla
agradable asumir el doble papel de justiciero, por el detrimento que
significa ese oficio para su imagen de Dios bueno. Entonces, crea y llama
a sí a Añá –propongo que respiremos pausadamente– para que éste
observe, sentencie y administre justicia a su nombre. Aclaremos, según
los textos más esclarecidos de la recóndita y doxa versión que Tupã es el
padre amable y en tal imagen quiere permanecer, trayendo a Añá –en
Mitología se admite– para que éste se mostrase recio y servero. No es
pues esta Añá vernáculo y ancestral, el ser satánico, el diablo poblador
de los infiernos; tampoco es un pobre diablo –que también los hay– Añá
es una figura clara y eficiente en la civilización Guaraní. Si embargo, un
factor agregado por la corriente presurosa de la desopinión –aún en
tradición y folklore– ha extendido extemporáneamente el nombre y
función de Añá ubicándolo en la pilastra del diablo malo, cuando
debiera estar considerado sujeto de honor en la palestra, donde su
oficio es la justicia. Coincide, con esta tesitura Moisés Bertoni. Pero no
podemos hacer más que aclarar conceptos, sin hacer regresivo en
intensidad el propósito de informar, sin deformar, lo que ha adquirido
carácter popular. Dejemos las cosas como están. De otro modo habría
que crear toda una escala de posiciones análogas –y añálogas– para
identificar aproximadamente al justiciero de ayer y al satánico de hoy,
que son nombres similares, de imágenes distintas. Pero salgamos de
este bravo remanso agregando que este concepto de añaversión actual
proviene de una irreverencia posguaranítica, donde el etnodescendiente
se vio comprimido –y compelido– a adoptar un amasijo de versiones
antiguas (pristinoétnicas) y nuevas (folklóricas) destinado a su probable
uso en cualquiera de las prematuras ante las cuales –también a él–
ubícalo la vida. Sus asimilados descendientes a su vez dejaron rodar la
versión hasta crear la confusión de hoy.
1. La Arqueología paraguaya ha hallado mastodónticos en la zona norte del río Paraguay, en el área de Capricornio, la falta de
medios de conservación no ha permitido aún exhumar en su totalidad el reservorio yacente. Reciba esta dote la Paleontología
2. Apresurada e irresponsable
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MITOCREACIÓN
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relevante, mostrando que no se conformó con ser indiferente; no fue ni
mudo testigo ni ciego usufructuario de la sensación de vivir. A esas
hilaciones reales e ideales unió los resultados de su intento esclarecedor
y dio de lleno con respuestas a sus inquietudes que se han vuelto a su
tiempo, inquietudes muy nuestras y actualizadas. Por eso estamos
hurgando en el mundo de sus realidades y experiencias.
1. En preparación
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LAS COSAS Y SUS NOMBRES
Branka Susnik
Debió vivir frente a ese vasto mar, esa gran laguna del
desconocimiento e ir convirtiéndola en tierra firme, transitable, con
experiencias de la vida. Aquí hay camino abierto para un avanzado
estudio de la psicología primitiva y para la medición de los progresos en
ese campo lindante y paralelo de los instintos primordiales y las
experiencias primeras, orientadoras del andar en la senda que partiendo
del desconocimiento, extendía su horizonte hacia una forma de
estructura cultural, hasta que pudiera tener fuerza intuitiva para hablar
el Guaraní, de su logrado conocimiento. Era el salir de la oscuridad e ir
adentrándose lentamente hacia las luces o a la luminosidad de sus
propios enfoques, aprehensiones y conclusiones finales o semifinales. El
curso que nos hacemos propuesto es el de elementos de juicio y sus
propias aplicaciones. Aún sin hacer una etnografía sistemática, que será
siempre la gran necesidad, vemos cuán vasto era el mundo Guaraní. Y
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hallamos similitudes con la ideación de los griegos, la enumeración de
Homero y las concluyentes opciones de una vida reglada por leyes
inviolables al hombre ante la naturaleza misma, receptáculo de la vida.
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MITO Y RELIGION GUARANI
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nosotros y los caminos que han elegido son los normales, antiguos
caminos del mundo; no otro que el camino del hombre y las cosas, de
las luces y de las sombras, de la alegría y de las penas. Es en fin el
camino de la vida para comprender nada más que dos cosas, el hombre
y el medio, encerrados en las formas que comprime la naturaleza,
donde el calor, el frío, la luz, el rayo, la nube, la lluvia, aún el dolor y la
alegría son todo efluvios míticos; fuerza, virtud, poder; es decir:
incógnito, como lo será siempre.
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UN MUSEO ROSICRANIANO
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NO TODOS SON MONSTRUOS
1. Eté: Verdadero.
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LA IDEA Y LA FORMA
Nos asaltará seguramente una pregunta ¿Por qué dar forma a las
leyendas? Pero no seamos ahora iconoclastas en cuanto a literatura oral
y ancestral compete. Las figuras ayudan a formar ideas. Son
materialización gráfica y liberación de sueños en maduración. Esta
onirigénesis es pues liberadora. Otros pueblos, otras culturas han
plasmado la fisionomía de sus genios del bien y del mal y de la
verdadera versión oral los han llevado a lograda literatura y aún a la
admirable versión musical y pluscuansimbólica como la del genial
Wagner, ejemplo que nos falta acometer en intento de encauzar las
energías nativas hacia una vida útil a través de una cultura –además de
técnica– humanística.
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ROSICRAN Y LA AUTENTICIDAD DE LOS MITOS
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Tejú Jaguá
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Jasy Jateré
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Kurupí
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Aó-Aó
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Luisô
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Pombero
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Mala Visión
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Plata Yvyguy
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TUPÄ
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LA GENERACIÓN MITOLÓGICA DE TAU Y KERANA
1) Tejú jaguá
2) Mbói Tu’i
3) Moñái
4) Jacy jateré
5) Kurupí
6) Aó–Aó
7) Luisô
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TEJU JAGUA
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MBOI TUÏ
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Mbói– Tuï, en la diéresis tiene pronunciación nasa. Tuï, no indica
que todas las especies de loro se denominen así, precisamente. En el
diseño, grabado, dibujo de la edición de Resicrán de 1929, se observa
una sierpe, que ostenta pequeñas alas. Alguna libertad de
interpretación y concreción formal, siempre queda a favor de los artistas
que intervienen en esta mitotemática.
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MOÑAI
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Moñái murió al fin quemado por manos de Porasy, doncella
Guaraní que de esta suerte salvó a su raza de las acechanzas del
monstruo, incinerándolo en su propia cueva usando de algún
encantamiento. Se cree que su espíritu deambula y acecha en la
vastedad de los campos y territorios en los cuales se mantiene viva la
cultura Guaraní.
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JACY JATERE
Pero, por las dudas, las madres se cuidan de fomentar sus visitas.
Se dice que solamente deambula retozón en el tiempo en que maduran
las sandías, en lo más ardiente del verano, que es cuando los niños al
escuchar su silbo invitador escapan de sus casas, para aventurarse en las
chacras a hartarse de frutos almibarados. Algunos no vuelven… para
desencanto de los suyos.
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AO –AO
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LUISÕ
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VERSIONES FOLKLORIZADAS.
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rica la inventiva de antaño y hogaño la tava guaraní llamada Paraguay.
Deben ser los duendes que llevan al desliz la mano para agregar el
adjetivo de: Capital de la leyenda.
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llevada investigación; ni creemos que pueda hallarse fin. Los
intervinientes siempre le han dedicado toda la vida como prueba de
trabajo serio y voluminoso. Esto se comprende al transitar las
interminables sendas de la etnoinvestigación y llevar el peso de los
impedimentos que conducen a las esquivas letras de molde, meta de
tantos afanes.
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MBOI JAGUA
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LEYENDA DE KAA-PORA
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alimentan a los arroyos donde sacian su sed por igual animales y
plantas; gracias a ello es eterna la vida de la selva y los ríos pueden
renovar sin tregua el caudal burbujeante de sus aguas.
Muchas veces, los mensú de los obrajes se han topado con él,
aprendiendo de esta suerte a respetar la vida vegetal que proporciona
maderas útiles al hombre y refugio de los animales. Este duende
protector de la floresta, es cíclope, su único ojo en la frente irradia luz
en la noche. Su aspecto es de planta carnívora, los escasos diente de su
boca bastan para indicar la agresividad de su espíritu justiciero para
lograr el equilibrio de la naturaleza en que se desarrolla la vida.
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POMBERO
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KAA IARY
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Ella cuida de los almácigos de Yerba-Mate, con su aliento acelera
la germinación, apaga el fuero en la inmediación de los yerbales para
que estas plantas no resulten destruidas.
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El sabio Bertoni, en un estudio meduloso acerca de la
denominación de Kaá-iary, señala la incongruencia de llamarlo con
apelativo de abuela, o Jarýi, proponiendo la iary, por ser más propia y
adecuada.
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MALA VISION
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contra nadie, simplemente quiere causar compasión por su suerte y
obtener oraciones. Es –se supone– ser femenino –ninfa– por la blanca
vestidura ceñida con que se muestra. Pero no causa daño, es más el
susto que el escozor… En la orilla de los ríos precede en la mañana a la
formación de la neblina. Los pescadores la respetan y tratan de lograr su
amistad. En tierra, protege los campos y el ganado y asusta a los ebrios
ocasionales que se aventuran por los caminos solitarios. Más de uno se
ha curado con tan oportuna aparición; otros disparan sus armas de
fuego a la magra figura que burlonamente sisea mientras se aleja
levantando los brazos que parecen agitadas ramas de arbusto.
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DE LAS NUEVAS LEYENDAS
PLATA YVYGUY
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El afloramiento legendario demarca todo el área del habla
guaraní, hasta donde ha llegado con el chisporroteo de la natural codicia
humana. Pero lo interesante es notar y destacar que los Guaraníes
desconocen estos asertos dentro de la narrativa autóctona. Es una
superposición de reciente data. Un siglo a lo más. Pero no por ello deja
de ser interesante. Más de uno ha contado buenas piezas… a pesar de
los ruidos que se dice acompaña al hallazgo y el perro sin cabeza que
custodia sus caudales fabulosos que enriquecen al Paraguay legendario.
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PAJE
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Pajé es otro aspecto de cosas, dentro del decir propiamente
étnico el médico tribal que goza de gran predicamento, por su parte
Pajé-mirí es el aprendiz de médico. Viene luego el avambohá, que se
ocupa de encantamientos y sortilegios, lo cual conserva notable
distancia con la medicina chamánica. Pajé era también el más antiguo
nombre que se daba al jefe o cacique. Si hoy la voz pajé indica maleficio
no es más que vulgarmente, puesto que el decir correcto en la lengua
vernácula indica dentro de la estructura cultural Guaraní una condición
respetable.
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MBOKAJÁ
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CONCLUSIÓN
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BIBLIOGRAFÍA
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