La Tabla Periódica
La Tabla Periódica
La Tabla Periódica
La historia de la tabla periódica está muy relacionada con varios aspectos del
desarrollo de la química y física: El descubrimiento de los elementos de la tabla
periódica, El estudio de las propiedades comunes y la clasificación de los elementos, La
noción de masa atómica (inicialmente denominada «peso atómico») y,
posteriormente, ya en el siglo xx d. C., número másico, Las relaciones entre la masa
atómica (y, más adelante, el número atómico) y las propiedades periódicas de los
elementos y la aparición de nuevos elementos. Básicamente lo resumo en que fue un
conjunto de factores y necesidades que inspiro a Dmitri Mendeléyev a presentar El 6
de marzo de 1869 una primera versión de su tabla periódica de elementos ante la
Sociedad Química de Rusia. Por esta fecha ya eran conocidos 63 elementos de los 92
que existen de forma natural entre el Hidrógeno y el Uranio. Ambos químicos
colocaron los elementos por orden creciente de sus masas atómicas, los agruparon en
filas o periodos de distinta longitud y situaron en el mismo grupo elementos que
tenían propiedades químicas similares, como la valencia. Construyeron sus tablas
haciendo una lista de los elementos en filas o columnas en función de su peso atómico
y comenzando una nueva fila o columna cuando las características de los elementos
comenzaron a repetirse.
Las filas de la tabla se denominan períodos y las columnas grupos.4 Algunos grupos
tienen nombres, así por ejemplo el grupo 17 es el de los halógenos y el grupo 18 el de
los gases nobles. La tabla también se divide en cuatro bloques con
algunas propiedades químicas similares. Debido a que las posiciones están ordenadas,
se puede utilizar la tabla para obtener relaciones entre las propiedades de los
elementos, o pronosticar propiedades de elementos nuevos todavía no descubiertos o
sintetizados. La tabla periódica proporciona un marco útil para analizar
el comportamiento químico y es ampliamente utilizada en química y otras ciencias
Historia
La historia de la tabla periódica está muy relacionada con varios aspectos del desarrollo de
la química y física:
Aunque algunos elementos como el oro (Au), plata (Ag), cobre (Cu), plomo (Pb)
y mercurio (Hg) ya eran conocidos desde la antigüedad, el primer descubrimiento científico
de un elemento ocurrió en el siglo XVII d. C., cuando el alquimista Hennig Brand descubrió
el fósforo (P).13 En el siglo XVIII d. C. se conocieron numerosos nuevos elementos, los más
importantes de los cuales fueron los gases, con el desarrollo de la química
neumática: oxígeno (O), hidrógeno (H) y nitrógeno (N). También se consolidó en esos
años la nueva concepción de elemento, que condujo a Antoine Lavoisier a escribir su
famosa lista de sustancias simples, donde aparecían 33 elementos. A principios del
siglo XIX d. C., la aplicación de la pila eléctrica al estudio de fenómenos químicos condujo
al descubrimiento de nuevos elementos, como los metales alcalinos y alcalino-térreos,
sobre todo gracias a los trabajos de Humphry Davy. En 1830 ya se conocían 55
elementos. Posteriormente, a mediados del siglo XIX d. C., con la invención
del espectroscopio, se descubrieron nuevos elementos, muchos de ellos nombrados por el
color de sus líneas espectrales características: cesio (Cs, del latín caesĭus, azul), talio (Tl,
de tallo, por su color verde), rubidio (Rb, rojo), etc. Durante el siglo XX d. C., la
investigación en los procesos radioactivos llevó al descubrimiento en cascada de una serie
de elementos pesados (casi siempre sustancias artificiales sintetizadas en laboratorio, con
periodos de vida estable muy cortos), hasta alcanzar la cifra de 118 elementos con
denominación oficialmente aceptados por la IUPAC en noviembre de 2016.1
Tabla
de Mendeléyev publicada en 1872. En ella deja casillas libres para los elementos por
descubrir.
En 1869, el profesor de química ruso Dmitri Ivánovich Mendeléyev publicó su primera
Tabla Periódica en Alemania. Un año después Julius Lothar Meyer33 publicó una versión
ampliada de la tabla que había creado en 1864, basadas en la periodicidad de los
volúmenes atómicos en función de la masa atómica de los elementos.3435
Por esta fecha ya eran conocidos 63 elementos de los 92 que existen de forma natural
entre el Hidrógeno y el Uranio. Ambos químicos colocaron los elementos por orden
creciente de sus masas atómicas, los agruparon en filas o periodos de distinta longitud y
situaron en el mismo grupo elementos que tenían propiedades químicas similares, como
la valencia. Construyeron sus tablas haciendo una lista de los elementos en filas o
columnas en función de su peso atómico y comenzando una nueva fila o columna cuando
las características de los elementos comenzaron a repetirse.36
El reconocimiento y la aceptación otorgada a la tabla de Mendeléyev vino a partir de dos
decisiones que tomó. La primera fue dejar huecos cuando parecía que el elemento
correspondiente todavía no había sido descubierto.37 No fue el primero en hacerlo, pero sí
en ser reconocido en el uso de las tendencias en su tabla periódica para predecir las
propiedades de esos elementos faltantes.38 Incluso pronosticó las propiedades de algunos
de ellos: el galio (Ga), al que llamó eka-aluminio por estar situado debajo del aluminio;
el germanio (Ge), al que llamó eka-silicio; el escandio (Sc); y el tecnecio (Tc), que, aislado
químicamente a partir de restos de un sincrotrón en 1937, se convirtió en el primer
elemento producido de forma predominantemente artificial.
La segunda decisión fue ignorar el orden sugerido por los pesos atómicos y cambiar los
elementos adyacentes, tales como telurio y yodo, para clasificarlos mejor en familias
químicas. En 1913, Henry Moseley determinó los valores experimentales de la carga
nuclear o número atómico de cada elemento, y demostró que el orden de Mendeléyev
corresponde efectivamente al que se obtiene de aumentar el número atómico. 39
El significado de estos números en la organización de la tabla periódica no fue apreciado
hasta que se entendió la existencia y las propiedades de los protones y los neutrones. Las
tablas periódicas de Mendeléyev utilizan el peso atómico en lugar del número atómico para
organizar los elementos, información determinable con precisión en ese tiempo. El peso
atómico funcionó bastante bien para la mayoría de los casos permitiendo predecir las
propiedades de los elementos que faltan con mayor precisión que cualquier otro método
conocido entonces. Moseley predijo que los únicos elementos que faltaban
entre aluminio (Z = 13) y oro (Z = 79) eran Z = 43, 61, 72 y 75, que fueron descubiertos
más tarde. La secuencia de números atómicos todavía se utiliza hoy en día incluso,
aunque se han descubierto y sintetizado nuevos elementos.40
Tabla periódica
de Mendeléyev de 1871 con 8 grupos de elementos. Los guiones representan elementos
desconocidos en esa fecha.
En 1871, Mendeléyev publicó su tabla periódica en una nueva forma, con grupos de
elementos similares dispuestos en columnas en lugar de filas, numeradas I a VIII en
correlación con el estado de oxidación del elemento. También hizo predicciones detalladas
de las propiedades de los elementos que ya había señalado que faltaban, pero deberían
existir.41 Estas lagunas se llenaron posteriormente cuando los químicos descubrieron
elementos naturales adicionales.42
En su nueva tabla consigna el criterio de ordenación de las columnas se basan en
los hidruros y óxidos que puede formar esos elementos y por tanto, implícitamente,
las valencias de esos elementos. Aún seguía dando resultados contradictorios (Plata y Oro
aparecen duplicados, y no hay separación entre berilio y magnesio con boro y aluminio),
pero significó un gran avance. Esta tabla fue completada con un grupo más, constituido
por los gases nobles descubiertos en vida de Mendeléyev, pero que, por sus
características, no tenían cabida en la tabla, por lo que hubo de esperar casi treinta años,
hasta 1904, con el grupo o valencia cero, quedando la tabla más completa.
A menudo se afirma que el último elemento natural en ser descubierto fue el francio —
designado por Mendeléyev como eka-cesio— en 1939.43 Sin embargo, el plutonio,
producido sintéticamente en 1940, fue identificado en cantidades ínfimas como un
elemento primordial de origen natural en 1971.44
La disposición de la tabla periódica estándar45 es atribuible a Horace Groves Deming, un
químico americano que en 1923 publicó una tabla periódica de 18 columnas.46 En 1928
Merck and Company preparó un folleto con esta tabla, que fue ampliamente difundida en
las escuelas estadounidenses. Por la década de 1930 estaba apareciendo en manuales y
enciclopedias de química. También se distribuyó durante muchos años por la empresa
Sargent-Welch Scientific Company.474849
Grupos
Ejemplo de tabla periódica (en lengua vietnamita), en la que figuran los tres sistemas de
numeración de los grupos.
A las columnas verticales de la tabla se las conoce como grupos o familias. Hay 18 grupos
en la tabla periódica estándar. En virtud de un convenio internacional de denominación, los
grupos están numerados de 1 a 18 desde la columna más a la izquierda —los metales
alcalinos— hasta la columna más a la derecha —los gases nobles—.60
Anteriormente se utilizaban números romanos según la última cifra del convenio de
denominación de hoy en día —por ejemplo, los elementos del grupo 4 estaban en el IVB y
los del grupo 14 en el IVA—. En Estados Unidos, los números romanos fueron seguidos
por una letra «A» si el grupo estaba en el bloque s o p, o una «B» si pertenecía al d. En
Europa, se utilizaban letras en forma similar, excepto que «A» se usaba si era un grupo
precedente al 10, y «B» para el 10 o posteriores. Además, solía tratarse a los grupos 8, 9 y
10 como un único grupo triple, conocido colectivamente en ambas notaciones como grupo
VIII. En 1988 se puso en uso el nuevo sistema de nomenclatura IUPAC y se desecharon
los nombres de grupo previos.61
Algunos de estos grupos tienen nombres triviales —no sistemáticos—, como se ve en la
tabla de abajo, aunque no siempre se utilizan. Los grupos del 3 al 10 no tienen nombres
comunes y se denominan simplemente mediante sus números de grupo o por el nombre
de su primer miembro —por ejemplo, «el grupo de escandio» para el 3—, ya que
presentan un menor número de similitudes y/o tendencias verticales.60
La explicación moderna del ordenamiento en la tabla periódica es que los elementos de un
grupo poseen configuraciones electrónicas similares y la misma valencia, entendida como
el número de electrones en la última capa. Dado que las propiedades químicas dependen
profundamente de las interacciones de los electrones que están ubicados en los niveles
más externos, los elementos de un mismo grupo tienen propiedades químicas similares y
muestran una tendencia clara en sus propiedades al aumentar el número atómico. 62
Grupo 1 (I A): metales alcalinos Grupo 7 (VII B): Grupo 13 (III A): térreos
Grupo 2 (II A): metales familia del manganeso Grupo 14 (IV
alcalinotérreos Grupo 8 (VIII B): A): carbonoideos
Grupo 3 (III B): familia familia del hierro Grupo 15 (V
del escandio (tierras Grupo 9 (VIII B): A): nitrogenoideos
raras y actínidos) familia del cobalto Grupo 16 (VI A):
Grupo 4 (IV B): familia del titanio Grupo 10 (VIII B): calcógenos o anfígenos
Grupo 5 (V B): familia del vanadio familia del níquel Grupo 17 (VII
Grupo 6 (VI B): familia del cromo Grupo 11 (I B): familia A): halógenos
del cobre Grupo 18 (VIII A): gases
Grupo 12 (II B): nobles
familia del zinc
Por ejemplo, los elementos en el grupo 1 tienen una configuración electrónica ns1 y una
valencia de 1 —un electrón externo— y todos tienden a perder ese electrón al enlazarse
como iones positivos de +1. Los elementos en el último grupo de la derecha son los gases
nobles, los cuales tienen lleno su último nivel de energía —regla del octeto— y, por ello,
son excepcionalmente no reactivos y son también llamados «gases inertes».
Los elementos de un mismo grupo tienden a mostrar patrones en el radio atómico, energía
de ionización y electronegatividad. De arriba abajo en un grupo, aumentan los radios
atómicos de los elementos. Puesto que hay niveles de energía más llenos, los electrones
de valencia se encuentran más alejados del núcleo. Desde la parte superior, cada
elemento sucesivo tiene una energía de ionización más baja, ya que es más fácil quitar un
electrón en los átomos que están menos fuertemente unidos. Del mismo modo, un grupo
tiene una disminución de electronegatividad desde la parte superior a la inferior debido a
una distancia cada vez mayor entre los electrones de valencia y el núcleo.63
Hay excepciones a estas tendencias, como por ejemplo lo que ocurre en el grupo 11,
donde la electronegatividad aumenta más abajo en el grupo.64 Además, en algunas partes
de la tabla periódica como los bloques d y f, las similitudes horizontales pueden ser tan o
más pronunciadas que las verticales.656667
Períodos
Las filas horizontales de la tabla periódica son llamadas períodos.68 El número de niveles
energéticos de un átomo determina el periodo al que pertenece. Cada nivel está dividido
en distintos subniveles, que conforme aumenta su número atómico se van llenando en
este orden:
1s
2s 2p
3s 3p
4s 3d 4p
5s 4d 5p
6s 4f 5d 6p
7s 5f 6d 7p
Período 1
Período 2
Período 3
Período 4
Período 5
Período 6
Período 7
Bloques
Forma óptima
Las muchas formas diferentes de la tabla periódica han llevado a preguntarse si existe una
forma óptima o definitiva. Se cree que la respuesta a esta pregunta depende de si la
periodicidad química tiene una verdad subyacente, o es en cambio el producto de la
interpretación humana subjetiva, dependiente de la circunstancias, las creencias y las
predilecciones de los observadores humanos. Se podría establecer una base objetiva para
la periodicidad química determinando la ubicación del hidrógeno y el helio, y la
composición del grupo 3. En ausencia de una verdad objetiva, las diferentes formas de la
tabla periódica pueden ser consideradas variaciones de la periodicidad química, cada una
de las cuales explora y hace hincapié en diferentes aspectos, propiedades, perspectivas y
relaciones de y entre los elementos. Se cree que la ubicuidad de la tabla periódica
estándar es una consecuencia de su diseño, que tiene un equilibrio de características en
términos de facilidad de construcción y tamaño, y su descripción de orden atómico y
tendencias periódica