El Libro Del Bulling
El Libro Del Bulling
El Libro Del Bulling
Oiario #1
Este año he sobrevivido a la unión de las es- #asta donde me alcania la memoria, lo úni-
cuelas del distrito; he aventajado a chavales que co que he deseado siempre es ser normal y no
superaban diez veces mi tamaño y he conquis- meterme en problemas. Y lo he hecho bastante
tado con rotundidad sexto curso. Tengo un bien durante los últimos once años. Pero hoy,
montón de amigos, todo el mundo hace lo que mi primer día de 6. 0 curso, las cosas han sido
yo digo y los profesores no se meten conmigo. un tanto raras.
Ha sido el mejor año de mi vida y lo he hecho Cuando he entrado en la clase, Jason Cra-
yo solo. tinsky ya tenía a Melody Miller sujeta por los
¿ Que cómo lo he hecho? Eso es lo que G>s voy hombros y le estaba diciendo que se levantase.
a contar. Me pongo furioso solo con pensarlo. Odio la
forma en que la agarraba.
faltaban pocos minutos para que empeiase
la primera clase y todos se amontonaron alre-
dedor de Jason y Melody. Él levantó su pie
iiquierdo en el aire y la miró fijamente. Ella
tembló.
Aquello era una auténtica <<demostración de
kárate>> y Jason ya les había hecho algo así a
otros niños antes. Yo me mantengo en la máxi-
ma discreción, por lo que nunca me eligen como
blanco, pero no me gustó que se metiera con
Melody. Ella y yo hemos ido juntos desde pre-
escolar. Cuando jugábamos a las casitas ella
siempre hacía de mamá, de modo que ahora que
ya somos mayores me siento algo protector con
ella. Me dispuse a cargar contra Jason, contra-
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Sí, claro, como defenderte de una niña mi- mental. íodo el mundo se siente ya demasiado
núscula a la que has arrinconado contra la mayor para estar aquí y creo que, por esta
pared. Por esta ratón yo le llamo Jason <<Lo- ratón, la gente empieta a actuar de forma ex-
kinsky>>. traña. Ahora somos <<los mayores>> del colegio,
-Gracias por salvarme, Eric -Melody vino de modo que sospecho que de lo único que te-
hacia mí y me empujó con la palma de la ma- nemos que preocuparnos es de nosotros mismos.
no-. ¡ffas estado ahí plantado todo el rato? El señor Whitner entró en el aula e intentó
-¡Lo siento! -repuse-. ¡Qué podía hacer? captar nuestra atención, pero todo el mundo
No quiero líos con Lokinsky. estaba ocupado saludando a sus amigos y con-
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-Guardo este asiento para Donovan -dije. tes de caballo sobresalían de su boca porque
Mi mejor amigo, Donovan White. Desde que su labio superior era demasiado corto ... para
fuimos compañeros en un proyecto de ciencias taparlos. Y también había perdido algo más,
sociales en '1-. 0 curso y recreamos toda la Guerra unos diet kilos de pechuga, trasero y barriga.
Civil. Estuve despierto toda la noche, leyendo la -¡Oonovan! -grité-. re he guardado sitio,
Wikipedia y escribiendo el guión mientras Dono- tío. ¿Qué te ha pasado?
van recopilaba una lista de heavy metal que Sabía que él había estado fuera en un campa-
encajara con la acción. Representamos los ban- mento todo el verano, pero aquello era ridículo.
dos nosotros mismos. A mí se me daban· mejor Pasó por mi lado sin mirarme.
los generales y él actuó como un cadáver muy -¡Gran D! -gritó Adrian Noble, el gigante
convincente. de la clase-. ¡Aquí, tío!
-¿Dónde está Oonovan? -le pregunté a Me- Adrian lleva gafas deportivas por prescrip-
lody. ción en lugar de gafas normales. Solo por si
Una sonrisa se abrió paso por su rostro: tiene que hacerte un placaje mientras vas a la
-Ocupado con la salchicha número cuatro. fuente.
Oonovan está gordo, y Melody a veces pue- -iOonovan, eh! -grité de nuevo-. re he
de ser muy plasta con eso. Pero me gusta que guardado sitio.
sean así. - ¡Pringado! -Jason <<lokinsky>> se puso de
la puerta de la clase se abrió y alguien pie: su cara permanentemente furiosa me mi-
entró, pero no era Oonovan. No al menos el raba-. Cierra tu estúpida boca.
Oonovan que yo conocía. l a clase aún era ruidosa, de modo que el
El largo pelo lacio había desaparecido, aquel señor Whitner no se dio cuenta.
pelo que la gente siempre le decía que sería - ¿Qué ha dicho? - pregunté a Melody.
bonito si fuese una chica. llevaba el pelo ra- - No le escuchaba -dijo ella, lo suficiente-
pado como un t ipo del ejército. La ortodoncia mente fuerte para que Jason la oyese-. Es un
también había desaparecido. Sus grandes dien- descerebrado.
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Diario #2
sición, tu popularidad y la manera en que te trata ffoy tuvimos clase de mus1ca. que hasta 5.0
la gente? grado significaba cantar <<En la granja.. , de Pe-
Dibuja una gráfica. La llamaremos gráfica de pito>> al unísono: pero este año vamos a tener
popularidad de clase. Arriba, escribe el nom- instrumentos reales.
bre del chico más popular de la clase y después - ¡,Qué vas a escoger? -me preguntó Melody
el de todos los demás hasta que llegues a la mientras íbamos pasillo abajo.
persona menos popular. - rrompeta -repuse-. Soplé entre mis ma-
Pero aquí está el truco: no tienes que escribir- nos e hice el ruido de una trompeta.
lo tal como es en realidad en tu clase. Escríbelo - Sí -dijo ella-. Espero que la trompeta
tal como quisieras que sea. real no suene igual.
Tómate algún tiempo para hacerlo. - Depende de por qué extremo la toque
Si dispones las cosas de la forma correcta, el -dije.
orden social de tu clase finalmente tendrá el aspec- Melody se echó a reír y me empujó contra
to de tu gráfica. Eso es de lo que trata este libro. la pared.
Las dos posiciones más importantes son los - A ver si por ahí seguimos avanzando -nos
nombres de arriba y de abajo. El nombre de arri- avisó el señor Whitner.
ba debería ser el tuyo. Siempre parece estresado por algo.
Si tu nombre no está arriba, pues ya puedes En clase de música quería sentarme junto a
tirar inmediatamente este manual, puesto que no Melody. pero la profesora ya había dispuesto
tendrás las agallas de hacer lo que viene después. una gráfica con las sillas y la había pegado a la
¿Aún estás conmigo? pizarra. Cuando fui a mi asiento asignado encon-
Bien, porque ahora te darás cuenta de que el tré a Adrian Noble, Jason <<Lokinsky>> y Oonovan
segundo nombre más importante es el que está White rodeándome por todas partes. No estaban
al final. El del Pringado. Después te cuento cómo sentados donde se suponía que debían estar. pero
elegirle, porque es muy concreto. sospecho que la profesora de música no se había
El Pringado es la clave de todo el plan. dado cuenta.
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Cu<1ndo llegó el momento de escoger nues- que se <1puñalab<1 en el ojo con la flaut<1. Me
tros instrumentos. miré a Melody. que estab<1 hubiese gustado h<1berme s<1ltado l<1s "normas
<1l otro lado de l<1 h<1bitación. ffiz:o un sonido como J<1son y los demás y haberme sent<1do con
como un<1 pedorret<1 con las m<1nos. Yo sonreí Melody.
y me giré h<1ci<1 Oonov<1n. La profesora de música nos dijo que inten-
- ¡Qué instrumento vas <1 elegir? -susurré. tásemos h<1cer un sonido. fui <1 por mi f1<1ut<1
Él ni siquier<1 volvió la cabez:a. Se lo pre- pero ya no est<1b<1 en el atril. Miré por si se h<1-
gunté otr<1 vez: y sus ojos se abrieron un poco bía caído al suelo. Metí l<1 c<1bez:a deb<1jo de
más. la sill<1.
L<1 profesor<1 de música s<1có un<1 caj<1 del Y un horrible sonido hiz:o que me incorpor<1-
t<1maño de un c<1jón de escritorio. se. rreinta terribles músicos soplando saliv<1 y
-Muy bien. atención todos. ¡Repartíos esto! mal aliento en treinta instrumentos horrorosos.
Y levantó un tubo de plástico blanco con Puse l<1s manos en mi regaz:o.
<1gujeros en el aire. -Disculpa. jovencito -dijo la profesora de
-¡Una fl<1ut<1 dulce! -dijo ell<1-. ¡Es como música por encim<1 del ruido que h<1cí<1n to-
un cl<1rinete. pero de plástico. de modo que es dos-. ¡dónde está tu flaut<1?
lo suficientemente b<1rata -ffumm ... -miré otra vez: <1 mi alrededor.
par<1 que todos tengáis J<1son <<Lokinsky>> est<1ba sent<1do a mi de-
un<1! recha .
Puse la mía en un -No lo sé.
atril. Melody me ll<1- -L<1 acabas de recibir hace un minuto. ¡Có-
mó la atención des- mo te l1<1mas?
de el otro lado de -Eric ffaskins.
la h<1bit<1ción. La cl<1se dejó de hacer ruido y dirigió su
Sacudió l<1 c<1- atención h<1cia mí. El silencio era peor que
bez:a e hiz:o ver cuando toc<1ban.
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-Bien, señor ffaskins -dijo la profesora de Me di la vuelta hacia Donovan, que había
música en voz: más alta de lo necesario-. Esa estado sentado a mi izquierda. Estaba mirando
flauta es propiedad de la escuela. Será mejor fijamente a su regazo. Con cara de culpabilidad.
que la encuentres. - ííos, me la habéis quitado vosotros - dije
-sí. señora -dije y me levanté de la silla. poni éndome de pie.
Los que estaban a mi alrededor empezaron a - ¿Qué has dicho? - Jason <<lokinsky>> me
soltar risitas. íodos miraban. agarró de la manga.
-Podemos esperar -dijo la profesora de - Que vosotros me habéis quitado la flauta
música. -me separé de él de un tirón-. Uno de voso-
Alcé mi mochila y la vacié. Me puse en cu- tros tres.
clillas y me arrastré por el suelo debajo de la - Chicos -dijo la profesora de música-. ¿le
silla. Le dije <<disculpa>> a Jason <<Lokinsky>> y hab éis quitado el instrumento al señor ffaskins?
miré bajo su silla. Se puso la mano sobre la - ffan sido ellos -dije, y los tres intercam-
entrepierna y dijo: biaron una mirada-. Ni siquiera están senta-
-No me mires las pelotas, tío. dos donde les toca.
Algunos chicos rieron. J ason apenas podía contener su regodeo.
-Yo no estaba ... - Estas flipado, ffaskins -dijo con una riso-
Había empezando a sudar por encima de las tada-. íu flauta está justo ahí.
cejas. Aquello ya estaba durando demasiado. Señaló a mi atril. y allí había una flauta
A cuatro patas, me arrastré hasta donde se de plástico, balanceándose suavemente como si
sentaba Adrian Noble. la acabasen de dejar ahí.
-ug. ¡aléjate de mí, estúpido marica! - ¡Oh! -y la profesora de música se puso a
Me tiró al suelo de un empujón y algunos reír-. Demasiado rápido en echar las culpas
tipos tras de mí se echaron a reír. Me parece a alguien, señor ffaskins. ¡Ahora volvamos a
que la profesora de música no lo vio. nuestros instrumentos!
-Aún estamos esperando -dijo ella. l as flautas chirriaron de nuevo. Yo me sen-
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Diario #3
de que fuese alguien que supiese ocuparse es- Dijo que servirían para que el colegio fun-
pecialmente de las situaciones. Pero incluso con cionase mejor, pero lo que realmente si_gnifica
su feo pelo de cortinilla y su fina camisa blan- es que ahora hay un montón de nuevas formas
ca, parecía casi heroicamente al mando. de meterse en problemas.
Me sequé los pantalones hasta que casi ya El despacho del director está al final de la
no se podía ver la mancha húmeda pero aún nueva ala de la escuela. De modo que tuve que
me sentía sucio. atravesar todo el pasillo de la vieja ala con
-Siento que haya tenido que ver esto -sus- unos pantalones oliendo a pis.
piré. Cuando entré en su oficina, Clark estaba
-No te preocupes -dijo Whitner. rellenando algunos papeles. Alzó la vista para
-No. de veras -le expliqué-. Normalmente mirarnos, bajó la vista de nuevo y luego barrió
no soy así. con su brazo toda la mesa tirando todos sus
-A todo el mundo te pueden pasar cosas papeles al suelo.
malas, Eric -dijo él-. Confía en mí. -¡Voy a tirarlo todo... literalmente! -au-
íiramos el papel sucio y Whitner me pre- lló-. ¿Qué sucede?
guntó si quería irme a casa el resto del día. El despacho del director Clark es como un
<<No lo sabe usted bien>>, pensé. altar de sí mismo. Es una cápsula del tiempo
Me dijo que él no tenía autoridad para ex- de su vida en la tierra. Si sucediese un Apo-
cusar a nadie. Solo el director Clark podía ca lipsis y lo único que quedase fuese aquel
hacerlo. despacho, al menos los aliens sabrían que el
-Es una de las nuevas reglas -dijo él. director íony Clark fue una vez el MVP de 11.0
Clark ha sido ascendido de su cargo de ayu- curso del equipo de baloncesto.
dante del director este año y está intentando El señor Whitner simuló una risa y miró el
cambiar todo en la escueta. Celebró una gran lío que Clark acababa de echar por la alfom-
asamblea donde expuso todas aquellas <<Nuevas bra. Sospecho que su secretaria sería quien se
Reglas>>. ocuparía de limpiarlo.
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-ffola, señor Clark ... -murmuró Whitner-. - dijo Clark-. Aunque es difíc il ponerla en
¿Conoce a Eric ffaskins? vigor ...
-Yo nunca olvido una cara. Igual que un Miré a Whitner buscando ayuda.
elefante -Clark estrechó mi mano y me guiñó -Algunas veces lo mejor es sencillamente
un ojo-. Excepto que la única trompa que ten- intentarlo de nuevo otro día -dijo él-. ¿Por
go está en el aula de música. qué no dejamos que Eric telefonee a su madre?
Secretamente me alegré de no haberme la- r engo que volver a la clase.
vado la mano. Por qué este chimpancé ha llegado a direc-
El señor Whitner explicó a Clark que había tor mientras un t ipo válido como Whitner con-
tenido un accidente en el baño. t inúa batallando con chicos de 6. 0 curso me
-Bueno, es mejor haberlo intentado y falla- resulta un misterio. Si tuviese que decir algo,
do que no haberlo intentado nunca -interrum- diría que es porque Clark tiene mejor pelo.
pió Clark. Par ece más de direct or. No vivimos en un mun-
Whitner forz:ó una sonrisa y sentí que me ar- do justo.
día la cara. No soy un idiota que no sabe usar Clark se quedó en silencio un minuto: creí
el baño. Aunque dudo que un tipo como Clark que era porque la lógica de Whitner le había
pudiese comprender mi aprieto. hecho callar. Pero en realidad era porque Clark
Solo se puso serio cuando Whitner dijo que estaba pensando. Algo que he aprendido que es
debería dejarme ir a casa el resto del día. muy peligroso.
Se puso los dedos en los labios y me miró - Eric -Clark sonrió-, ¿qué me dices de tu
frunciendo el ceño. Pensé que iba a decirme clase de educación física?
que yo tenía cáncer. <<1·oh , no.>>,
1 pense.
'
-iNo t ienes ropa de recambio? -Es una de mis Nuevas Reglas favoritas:
-Lo siento, señor -dije. todos los alumnos de 6. 0 curso guardarán ropa
-Esta debería ser una de las Nuevas Re- de educación fís ica en la escuela. Es posible
glas: <<Estar preparados para cualquier cosa>> que la primera vez: que lo oíste te pareciera
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* * *
Si sigues el plan de este libro atentamente, todo
No tuve que adivinar lo que Jason <<Lokins- el mundo será tu amigo, pero debes empezar
ky>> les había contado a la gente de la clase. por alguna parte.
rampoco necesitaba averiguar lo que estaban Tienes que elegir lugartenientes, amigos lea-
diciendo de mí. les que puedan ayudarte a cumplir mis instruccio-
Cuando regresé vistiendo unos pantalones nes. Por lo menos deberías tener dos. Tu mano
cortos de atletismo amarillo chillón, ya lo es- derecha y tu mano izquierda.
cuché todo. Pasarás mucho tiempo con estos chicos, de
modo que elígelos con cuidado.
Verás, la gente no piensa mucho en ello, pero
los amigos que elijas pueden hacer de ti un mi-
serable.
Los amigos normalmente hacen lo mismo,
así que acabarás compitiendo con ellos. Cuanto
más amigos seáis, más dolerá cuando peleéis.
Si ellos quieren, tus amigos pueden realmente
arruinarte la vida.
De modo que encuentra gente que pueda
ayudarte, pero que no sean una amenaza. Evi-
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Diario #ll
ta a los chicos que puedan sentir celos de ti y Era como un animal her.ido. Agazapado. Es-
quieran estar ellos arriba. condiéndome en las altas hierbas de la sabana.
Elige chicos que sean más tontos que tú para El <<Desastre del Baño>> no ha quedado ol-
que te escuchen. vidado. Quiero respuestas. Ponovan estaba sen-
Elige chicos que sean más fuertes que tú pa- tado en la parte trasera del bus aquella tarde,
ra que te protejan. completamente solo. Yo no sabía dónde estaban
Elige chicos que sean seguidores para que tú Jason y Adrian.
puedas dirigirlos hacia la grandeza. Yo estaba sentado delante, alejándome de él
Cuéntales los secretos que hayas aprendi- tanto como podía. Me salté mi parada. No te-
do en este libro, pero solo los que «deban» saber. nía planeado llegar a ca.sa puntual. Viajamos
Tú eres su guardián. en el autobús durante otras dos millas, hasta
que se detuvo con un chirrido en el largo ca-
mino de tierra que conducía a la casa de Po-
novan. Me camuflé en mi asiento cuando pasó
por el pasillo del bus. No me vio.
Le seguí durante un buen cuarto de milla.
Su manera de andar era ruidosa, desmañada.
Llegamos a la parte arbolada del vecinda-
rio. La casa de Ponovan está guardada por dos
árboles enormes y allí es donde le llamé.
-Eres un verdadero traidor, ¿sabes? -di-
je, con la voz temblorosa.
Ponovan se quedó paralizado a medio paso.
Sus hombros se tensaron y finalmente volvió su
rostro hacia mí.
-¿Por qué me has seguido? -preguntó .
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-¡Porque tú me has estado siguiendo! -le Oonovan se apoyó en uno de los enormes
repuse a su vez gritando-. Con tus nuevos árboles. Su piel estaba enrojecida y con man-
amigos, torturándome. chas. Enterró el rostro entre sus manos·· y gri-
-Oye -dijo él-, yo no quería esto ... tó en sus palmas:
-Éramos amigos, Oonovan -dije-. Y ahora -¡Vete de aquí! -sus palabras rebotaron
ni siquiera me diriges la palabra. por los árboles-. Ya no puedes hablarme. Lo
-Ahora te estoy hablando. vas a arruinar todo. ¡Vete!
-Sí, claro, aquí fuera sí, cuando nadie mi- íodo su cuerpo temblaba mientras gritaba.
ra. ¿Por qué me estás haciendo esto? ffasta se le marcaban las tetillas.
-No soy yo, Eric -dijo él-. íe lo juro. Es Sabiendo cuándo no me quieren cerca, em-
el Libro. prendí el largo camino de regreso a casa.
-Eres tú, Oonovan. íú eres quien lo está
haciendo.
-¡Es el Libro! -su cara enrojeció-. El Li-
bro es el que te eligió, no yo. ¡No tenemos
elección acerca de quién es el Pringado!
-No comprendo lo que estás diciendo.
-íú eres el único que encaja en la descrip-
ción. Les dije que no te eligiesen, pero eres el
único que encaja para ser el Pringado. ¡Está
en el Libro!
-¡Espera! -dije-. Calla un momento.
Oonovan me miraba salvajemente. Se agarró
a las tiras de su mochila.
-¿Qué libro? -le pregunté- . ;,Y por qué los
tres no dejáis de llamarme Pringado?
•
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Diario #5
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Colin me condujo por un sinuoso pasillo has- Colin agarró un reloj blanco de detrás de la
ta su habitación. Sorteé las manchas que había televisión.
"'
en la alfombra y experimenté aquella sensa- -rengo que poner en marcha el cronómetro
ción paranoica que tengo en verano cuando me de la tele -explicó él-. Solo me dejan estar
rodean los mosquitos. Era como si me tocase una hora al día delante de la pantalla, por lo
algo o al menos así era como me sentía. Esta- que tengo que usar este cronómetro para con-
ba nervioso. trolarme.
Había siluetas negras pintadas, enmarcadas la mandíbula se me cayó al suelo.
y colgadas de las paredes. Dos sombras de pa- -Eso no es normal. z.Cómo pueden hacerte
pel con forma de niños. íerminé delante de una eso? -quise saber.
puerta y me di cuenta de que me había dete- -Mis padres dicen que la tele perjudica la
nido. Otra sombra estaba escondida allí en un vista -dijo Colin.
rincón y no era como los retratos de la pared. Se ajustó sus gruesas gafas que aumenta-
Era una forma oscura, con el pelo revuelto y ban sus globos oculares. Mi visión es de 20/20
un cuerpo enorme. Mis ojos se ajustaron a la y veo la tele constantemente.
oscuridad y pude ver que me estaba miran- -He visto dibujos animados mientras desayu-
do. Aquello sonrió. Corrí pasillo abajo hacia naba ... -los brillantes labios de Colin se frun-
Colin. cían y alargaban mientras hablaba-. Eso ya me
En su habitación había una televisión anti- ha ocupado la mitad de m.i hora de hoy, y he
cuada, peor de la que yo tenía en mi sótano. estado delante del ordenador dieciséis minutos,
Colin tenía una vieja Wii, del mismo sistema que también cuenta. Entonces esto significa ...
que el mío. -Que tenemos catorce minutos para jugar a
-Podemos jugar a Wallyball de la Wii -me la Wii -repuse yo.
propuso Colin-, solo tengo que poner en mar- la tarde estaba resultando más ajetreada
cha el cronómetro. de lo que esperaba.
-iQué cronómetro? -pregunté. Después de nuestra sesión extrema de juego,
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/
Se sentó en la cama de Colin. Su trasero -No tan gran perdedor como tú -afirmé.
hundió el colchón y Colin explotó de rabia. Lo dije en todos los sentidos posibJes. Ri-
-¡Si te parece una bobada, Richard, enton- chard era enorme.
ces, por-qué-no-sales-de-mi-habitación! - ¡Eh, a mí no me llames eso! -dijo Richard
-Sal tú de la habitación -dijo Richard. desdeñosamente- . Eso es lo que te espera a ti,
-¡Es mía! -chilló Colin. Colin -se echó a reír-. Y ni siquiera lo sabes.
Rodó sobre su espalda y empujó con sus ta- Es lo que te espera -la mueca de burla se
lones desnudos 4 su hermano. Richard tosió y torció en una sonrisa- . Vas a ser el Pringado.
se apqyó aún más sobre la cama. Todo su peso Di un respingo.
cayó sobre el frágil cuerpo de Colin, aplastán- - ;,Qué dices? -pregunté.
dole. Los dedos de Colin atraparon el pelo de Richard se mordió los labios.
Richard y tiró de él mientras su hermano es- - ;,Qué acabas de decir? - insistí, y miré
trujaba con la mano la nariz de Colin. fija mente a Richard a los ojos.
-¡Eh! -grité-. ¡Parad ya, idiotas! - ;,Acabas de decir que Colin va a ser el
Los dos quedaron paralizados. Colin soltó el Pringado?
pelo y Richard lentamente rodó para quitarse -Nnnooo ... -tartamudeó Richard.
de encima de él. -Es lo que acabas de decir.
-;,Y tú. quién te crees que eres? -dijo Ri- - ;,Por qué quieres saberlo? -me miro con
chard. sospecha- . ;,Eres uno de ellos? Imposible. No
-Bueno, creo que me llamo Eric -repuse- . querrías que te viesen rondando por ahí con
Eric ffaskins. Colin.
Richard me miró de arriba abajo. - ¡,Uno de quiénes? -pregunté.
-Eric ffaskins. Estás en el curso de Colin, -Sí, ;,quién no querría que le pillasen con-
¡,no? -su rostro enrojecido latía mientras ha- migo?
blaba-. Deja que te pregunte ... ;,qué grandí- - Cierra el pico, Colin -dijimos a la vez
simo perdedor es mi hermano? Richard y yo.
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Richard me miró de arriba abajo. Se puso criticándome cuando pensaban que no estaba
de pie, tiró de las persianas de las ventanas por allí. <<El Pringado hit.o esto, el P,ringado
y cerró la puerta, de modo que nos quedamos hit.o aquello, tenemos que hacerle esto al Prin-
los tres sentados en la oscuridad, en silencio. gado>> ... íenían planes para mí.
-Está bien -susurró-. Pero tenéis que pro- El corat.ón me latía muy rápido en el pecho.
meterme que no se lo contaréis a nadie. Se reunían en secreto en una de las aulas
· Asentí seriamente y dije que lo prometía. después de clase. Un día, me escondí entre la
Miró a Colín. basura para enterarme de lo que estaban ha-
-;,Y tú? blando.
-Lo prometo -Colín estaba temblando den- - ;,En el cubo de la basura? -se extrañó
tro de su camiseta. Colín.
- ;,Alguno de los dos ha oído hablar alguna - ¡Me estaban arruinando la vida! -su cara
vet. del Libro? -preguntó Richard. enrojeció-. íenía que saberlo.
- ;,El Libro? -dije yo. - ;,Y de qué estaban hablando? -pregunté.
-Sí -Richard asintió-. Cuando estaba en - De mí. De cómo me estaba comportando.
6.0 como vosotros, todo me iba mal. Veréis, De cómo lo estaban haciendo ellos, todo según
antes era un tipo normal. íodo iba bien. Pero el Libro.
las cosas cambiaron cuando algunos tíos se - ;,El Libro? -pregunté.
apoderaron del Libro. -El Libro del Bullying, el Libro del Abusón,
El Libro. ;,Como el que había mencionado así es como yo lo llamo -explicó Richard-. íe
Oonovan? enseña a ser popular. íe dice que elijas a un
-Se burlaban de mí, se reían de mí, hacían chico. fara hacer que su vida sea miserable.
que otros chicos también lo hiciesen. íoda la - íe explica cómo elegirle -dije yo, sin
clase se volvió contra mí, como si su objetivo pensar.
en la vida fuese hacer de mí un miserable. Los -Sí -dijo Richard: me lant.ó una mirada
chicos empei.aron a llamarme Pringado. Les oía sospechosa-. ;,Y tú cómo lo sabes?
•
48 49
No le conté lo de Oonovan, lo que me dijo Colin tembló. Rompió el contacto visual con
acerca de que él no quería que yo fuese el su hermano.
Pringado, pero que yo encajaba en la descrip- - Pero si no hemos hecho el ...
ción. Que ellos no tenían elección. -Olvida el trabajo - dije-. Olvídalo todo,
-Lo he adivinado -dije. Colin. Este año vas a estar bien. Es solo que ...
-Bueno -dijo Richard-, pues ojalá pudieses -me pasé las manos por el pelo, intentando
adivinar cómo te eligen. Yo no me lo imagino. organiz:ar mis pensamientos-. Ya lo haré solo
Yo era normal. Yo era diferente antes de que en casa. Me voy.
ocurriera todo eso. Era solo un chico normal y - Alguien tiene que llevarte.
corriente. - Iré andando, Colín -dije-. íengo que
Richard aplastó su gran puño confra su ojo. pensar.
Se frotó la cara con el antebraz:o. Me costó No miré más ni a Colin ni a Richard y dejé
medio minuto darme cuenta de que se estaba aquella apestosa casa.
apartando las lágrimas.
-fuera lo que fuera lo que decía el Libro
-prosiguió- sobre cómo elegir al Pringado,
ellos me eligieron. Y Colín es una versión más
estúpida de mí ... y en pequeño.
-¡Calla!
Colin lanz:ó un huesudo puñetaz:o a su her-
mano. Este lo agarró con su carnosa mano y
tiró de ella para acercarle.
-oe modo que este año, Colin, el Pringado ...
eres tú.
Me puse de pie. Sin respirar.
-Tengo que irme a casa -dije.
•
51
Diar io #6
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52 53
•
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-Pero ...
-Siguiente -dijo ella-. Siguiente alumno.
Haz polvo al objetivo
Melody se sentó. Se volvió hacia mí. Vi cómo
sus labios se curvaban en un mohín. Sus ojos
de largas pestañas estaban tristes.
Me produjo un sentimiento extraño.
-No les hagas caso, Eric -dijo ella-. Ac- Todo el mundo tiene al menos algún amigo, in-
túa como si no existiesen. cluso los grandes perdedores. Es algo que tendrás
Me tocó la mano y mi corazón latió con más que solucionar cuando estés creando al Pringado.
rapidez:. Por un segundo, olvidé que ellos exis- Una clase normal está formada por minigru-
tían. Melody me apretó la muñeca y niiró hacia pos de amigos. Esto está mal. Debería ser un
la clase. No aparté los ojos de ella. único grupo de amigos con un líder: TÚ.
la siguiente persona continuó y no hizo una Una persona solo puede ser el jefe de un gru-
frase con Eric ffaskins. Melody soltó mi brazo po. Por lo tanto debería haber «un» grupo.
pero tardé un minuto en volver a respirar nor- El Pringado es el único excluido.
malmente. Si el Pringado tiene amigos, no formarán par-
la Sustituta Humana dijo mi nombre y di un te de tu grupo. Entonces habrá dos grupos, y
respingo. Era uno de los últimos en hacer uso esto conducirá a tres, cuatro, cinco y el grupo
de una palabra y me tocó <<arriesgado: lleno de sencillamente se separará.
riesgo, peligroso>>. Así que tienes que detener esto enseguida.
Esperaba devolverles la pelota con mi pala- Tienes que arruinar las amistades del Pringado.
bra, diciendo algo realmente inteligente, pero No es fácil de hacer, y tampoco está bien,
me colapsé. p~ro es una parte importante de la estrategia.
-Muchas cosas en este mundo son arriesga- Tienes que iniciar peleas entre el Pringado y sus
das -dije. amigos. Difunde rumores que causen problemas
Y lo dije en serio. entre ellos.
•
56 57
Diario #7
Cuando los amigos del Pringado le dejen, Ayer, en la hora de la comida, Melody me
tienes que recompensarles. Invítales a sentarse preguntó si quería quedar esta semana con ella
contigo a la mesa, muéstrales que la vida es mu- y ver una película juntos después de las cla-
cho más guay sin el Pringado. Haz que sus vidas ses. Le dije que <<SÍ>> por una mez:cla de ham-
sean tan buenas, que no quieran volver nunca bre social y por estar enamorado de ella.
con él. Esta mañana me incliné hacia ella en cla-
Ellos estarán contentos, tú estarás contento se y le pregunté que cómo íbamos a ir a su
y el Pringado estará solo. Es una relación en la casa.
que todos ganan. Ruth McNealy, que va a la Girl Scoufs con
Melody, se rio detrás de nosotros. Me di la
vuelta y vi a Ruth y al perrito de su camiseta
sonriéndome.
-Melody - pregunté de nuevo-, ¿que cómo
vamos a tu casa?
- Eric ... -Melody apartó la mirada de mí y
se cubrió el rostro con la mano- . No puedo
hablar de eso justo ahora.
Hablaba entre dientes. <<Quiz:ás, tenga dolor
de cabez:a>>, pensé.
En el almuerz:o, Ruth me atropelló, literal-
mente, arrastrando a Melody tras ella. Puso
una mano en una cadera y dobló su camiseta
haciendo que su cachorro pareciese que me
estaba gruñendo. La mirada en su rostro decía:
<<A todo el mundo le encantan los cachorros,
pero odia a los perdedores» .
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-A Melody no le gusta que actúes así, Eric, ella había borr<1do lo que fuese. No sé dur<1n-
y no quiere sentarse a tu lado en clase nunca te cuánto tiempo <1quello estuvo colgado o
más. Ya hemos hablado con el señor Whitner cuánt<1 gente lo vio.
sobre ello y ha cambi<1do los asientos. ¿Qué puedo hacer? ¿Ir y dec irle que me
Seguramente puse c<1ra de sorpresa, porque habían hackeado?
Ruth me dijo: Obviamente Melody odia la idea de que <1
-No te hagas el sorprendido, Eric. Eres paté- mí me pueda gustar ella. Mientras podía man-
tico y eres gay. A Melody no le gustarás nunca. tenerlo en secreto, todo estaba bien. Ahora
Bajé la vista hacia el cachorro. El perrito no seguramente y<1 lo debe de saber toda la es-
añadió n<1d<1, pero p<1recía est<1r de acuerdo con cuela. Acaso tendría que ir al encuentro de
todo lo que se h<1bía dicho. · todo el mundo diciendo: <<¿Sabéis?, ino me gus-
Cu<1ndo llegué a cas<1, l<1s cos<1s se <1cl<1r<1ron. ta Melodyf>>. Es de locos.
Comprobé el f<1cebook y vi esto en mis no- Ha dejado clara su opinión. Le repugno.
tific<1c iones: l os íres Malvados han hecho un buen tr<1-
bajo.
Solicitud de estatus «En una rela- Hace un par de veranos, Oonovan me ayudó
ción con Mele-dy Miller » denegada. a crear mi perfil en f<1cebook cuando yo ni si-
quiera sabía lo que era. Nunca cambié mi con-
Oh. traseña.
Alguien había hackeado mi cuenta. Había No había ningún otro daño excepto esto: En
dejado mi estatus como <<en un<1 relación con Actividades e Intereses, justo después de leer
Melody Miller>> y cuando ella vio la solicitud e ir en bici, alguien había puesto <<ser un Prin-
debió de pens<1r que yo estaba diciendo que me gado>>.
gust<1ba o que le estaba pidiendo salir. Aquello lo demostraba. Oficialmente van <1
í<1mbién parecfo que <1lguien había escrito por mí. Jason, Oonovan y Adri<1n han formado
<1lgo en su muro como si fuera yo, pero que una conspiración. Y yo soy su Pringado.
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Dio.río #8
Llamé a la puerta de la casa de Colin. No dosas. Llevaba una gran tirita sobre su ojo
respondió nadie. Llamé de nuevo. Nada. Llamé izquierdo.
tres veces más antes de oír cómo descorrían el - rengo que hablar contigo -dije-, sobre el
cerrojo. Libro del Bullying.
La madre de Colin abrió la puerta. El olor Richard se encogió. Cruzó su brazo sobre el
a pollo cocido me golpeó en el rostro. pecho y se puso la otra mano en la tirita.
-Hola -tosí, poniéndome la muñeca en la - Richard -dije-, tengo que quitarme esto
nariz. de encima. Me están arruinando la vida, Ri-
-Oh, hola ... -dijo la madre de Colin-, chard. Es tal como dijiste que sucedería.
¡ ... Aaron? - No sé de lo que estás hablando -dijo él.
-Soy Eric. Eric Haskins -dije. -¡Me han hecho a mí el Pringado ... , no a
-Bueno, pues lo siento Eric. Colin ahora no Colin! -intenté entrar empujándole, pero me
está en casa. Ha ido a la biblioteca con su bloqueó el paso.
padre. Richard me miró ... con los ojos muy abiertos.
- ¡Ha agotado su tiempo de tele? - No puedes estar aquí. No puedo hablar
-¡Qué? contigo.
-No, nada -dije-. En realidad he venido a Presionó sus brazos contra mi pecho y miró
ver a Richard. ¡Está en casa? por encima de mi hombro. Intentó cerrar la
-Oh. Sí, Aaron. Voy a buscarle. puerta pero yo la mantuve abierta con la pal-
Entró en la casa. ma de la mano. Con la otra mano agarré un
-Aún soy Eric -dije-, no ha cambiado puñado de brazo gordo y le mantuve en el si-
nada. tio; él era mi única guía en todo aquel asunto.
Un minuto después, Richard apareció en el - Richard, ¡pero qué te pasa? - dije.
umbral. Su madre le había empujado desde f enía la barbilla enterrada en su pecho y
la entrada obligándole a salir para verme, hablaba entre dientes.
con los calcetines resbalando sobre las bal- - No puedes hablar de esto nunca más -mur-
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Diario #9
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Diario #10
es que no sepa por qué, de modo que no pueda Me pasé toda la semana viendo la televisión.
hacer nada al respecto. f reinta y dos horas en total . Ya lo ve~. Gree-
Todo el año estuve preocupado porque temía ne, tú que eres casi amish, he hecho en dos
que mi Pringado averiguase por qué le había ele- días lo que tú no puedes hacer en un mes. íe
gido. Si lo hacía, tal vez cambiaría. Lo arruinaría he puesto en ridículo.
todo. Este chico se me resiste. ¡Colin Green no me
El sistema es casi perfecto. Pero este es el quiere contar nada!
único fallo que tiene. fui a su encuentro en la escuela el viernes.
No dejes que el Pringado lo averigüe. -Colin -dije-. Colin ... , ¿qué has hecho,
idiota de mierda?
f al vez. ese fue un error. No calculé bien mi
enfoque, pero estaba extremadamente moles-
to en aquel momento. Estoy extremadamente mo-
lesto en todos los sentidos. Veréis, soy víctima
de una conspiración cuyo objetivo debería ser
Colin.
Jason, Oonovan y Adrian me han hecho su
Pringado y no tengo ni idea de por qué.
Oonovan dice que yo fui elegido Pringado
por una raz.ón. Si puedo descubrir la raz.ón,
puedo cambiar. Entonces el Pringado pasareí a
ser otro. Espero que funcione así. íiene que ser
así como funciona.
Pero Colin abrió su bocaz.a y explicó por ahí
lo que Richard estaba contando sobre el Libro
del Bullying, y alguien le ha cerrado la boca .
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Ahora no tenso nada y necesito que Colin con- estaría? ¿Pero a quién habría recurrido? No
fiese. hay una persona viva de la que Colin n() tensa
-Oile a Eric qué has hecho mal. ¿Con quién miedo.
has hablado, Colin? No de la que tensa una buena razón para
-Eh ... -Colin me miró inexpresivamente-. estar asustado. El Prinsado soy yo.
No sé a qué te refieres. - Escucha, Colin -dije intentando calmar-
-¡No disas estupideces, Colin! -srité-. ¿A me-, yo no estoy enfadado contiso. Nadie está
quién le contaste lo del Libro del Bullying? enfadado contiso. Solo quiero saber con quién
-No lo sé. A nadie. Aunque, bueno, eh ... has hablado. Quienquiera que fuese le han
Los perdisones de saliva volaban a mi de- echado la culpa a Richard.
recha e izquierda. Los esquivaba interponiendo - ¿Richard lo sabe? -dijo Colin.
las mansas para bloquearlos. Pero nada iba a -Sí, Richard lo sabe. Quienquiera que esté
detenerme de sacarle una respuesta a Colin. al mando de todo este asunto ha ido a por él.
Saltaba a la vista que estaba mintiendo. Re- Por eso necesito saber con quién has hablado.
bosaba culpabilidad. Creo que forma parte de esto.
-Oe veras, yo, eh ... -buscaba una vía de -No, no, no es cierto -dijo Colin, mirando
escape pero yo le tenía arrinconado-. iYo no ... , por encima de mi hombro.
yo no ... , yo no he presuntado a nadie nada -Es cierto, Colin. Ahora dime con quién has
sobre ello, te lo juro! hablado.
- ¿Presuntado sobre ello? -dije-. ¿A quién Me incliné sobre él y susurré:
se lo has presuntado? - ¿Con quién?
-iA nadie! -¡Con nadie! -chilló y un burbujeante mon-
Una imasen se formó en mi mente. Colin se tón de saliva salió en forma de arco de su
asustó. íoda aquella charla de cómo él estaba boca y fue a parar a mi mejilla.
literalmente destinado a ser el próximo Prin- Entonces pasaron un par de cosas muy rá-
sado. Estaba preocupado por ello. ¿quién no lo pidamente. No estoy sesuro de en qué orden:
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grito de asco; Colin me empuja para librarse Colin, con la nariz: sangrienta goteándole
de mí; pierdo el equilibrio; intento limpiarme sobre su sucia camiseta, y yo, con su . , sangre
la mejilla con la manga y mi puño contacta en mis nudillos. Atrapado con las manos teñi-
con la nariz: de Colin. das de rojo.
Así es cómo aprendí otra de las <<Nuevas
* * * Reglas>> de Clark: No armar camorra. Se pena-
liz:a con tres horas de castigo y una nota a tus
Es increíble que algo del color de la sangre padres.
ponga tan frenética a la gente, y hace que sea Así que, gracias, Colin. ffas arruinado mi
imposible hablar con ellos. única conexión con la información sobre el Li-
Aunque tú y otro chico estéis en medio del bro del Bullying. Me has metido en más pro-
pasillo disculpándoos mutuamente, el hecho de blemas de los que he tenido en toda mi vida.
que uno de vosotros esté cubierto de sangre Y aún no me has dicho a quién le escupiste tus
hace que todo parez:ca una locura. penas.
De modo que cuando la señorita Julie, la moni- Eres un compañero de estudio fantástico .
tora de pasillo que siempre lleva un par de auri-
culares amarillos, nos vio en el pasillo, la sangre
y cualquiera que fuese el audiolibro de Stephen
King que estaba escuchando hicieron que gritase
tan alto que todo el colegio la oyó.
Los profesores y los alumnos salieron de las
clases, los bedeles dejaron sus bayetas, e inclu-
so los hámsteres del aula de ciencias, imagino,
dejaron de rodar en sus ruedas durante un mi-
nuto. íodos los ojos estaban clavados en Colin
y en mí.
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Diario #11
-Veamos, sé que dices que ha sido un ac- lengua, todo el mundo excepto Melody usa sus
cidente -me sermoneaba Clark desde detrás de palabras de vocabulario para burlars~, de mí.
su mesa-, pero es que nos ponemos en situa- No se trata solo de un par de imbéciles. sino
ciones que permiten que pasen accidentes. de toda la clase. Es demasiado para expresar-
-Me ha escupido mocos encima -repuse-, lo en palabras, y pensar en ello hizo que se
no es una situación que pueda controlar. me cerrase la garganta.
· -Algunas veces, si estamos en un estado -Y tu nota de castigo no está firmada, de
mental agitado, hacemos cosas que no queremos. modo que tendré que llamar a tu madre.
Como . tú, al hacer sangrar la nariz de Colín. -Pero he venido al castigo -dije-. Acabo
-ffa sido solo un accidente. de salir de él. Oa lo mismo si lo sabe o no,
-Lo sé -dijo Clark-, pero es la segunda ¿verdad'?
vez que vienes a mi despacho por <<un acciden- -Lo siento. colega -dijo Clark-. Es una de
te>> este año. las <<Nuevas Reglas>>. Es por vuestro bien.
-Aquello no tuvo nada que ver con esto -¡Espere! ¿Podría por favor llamar a mi
-dije, apartándole la mirada. padre'? Él también es mi tutor -supliqué.
Una foto del joven fony de vacaciones con Mamá no lo comprendería. Sabía que se
su familia pasó por mi vista. pondría histérica. ffabía intentado enviar por
-Tal vez sí -dijo él-. En 6. 0 curso todo correo electrónico el impreso al despacho de
cambia. Puede ser duro adaptarse. papá, pero no me respondió.
Por un minuto, pensé en contarle la verdad: -Lo siento, Eric. fu madre está apuntada
los Tres Malvados, el Libro del Bullying, todo. como primera tutora -Clark intentó lanzarme
Pero no sabía cómo decírselo. una mirada significativa-. Sé que tus padres
La razón de que me hiciese pis encima fue se han divorciado hace poco. Debe de haber
que aquellos tipos me asustaron. Golpeé acci- sido difícil para ti que tu padre abandonara el
dentalmente a Colin porque había hablado a país. Si alguna vez quieres hablar de ello ...•
alguien sobre el Libro del Bullying. En clase de estoy aquí para eso.
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Creo que el director Clo.rk ha visto alguno. ojos saltando de sus órbitas y su rostro cado.
película de televisión titulo.do. El director más vez: más rojo. .,
maravilloso del mundo y baso. su vida en torno Clo.rk terminó y colgó el teléfono, aún son-
o. ello., porque me do. lo. impresión de que todo riendo.
lo que dice y hace es como uno. gigantesco. -No ha sido paro. tanto. r u madre es uno.
actuación. mujer muy sereno..
Los hechos que expone ni siquiera son los ¿Oiría lo mismo si le castigo.se o. él sin ver
correctos. Mis padres se divorcio.ron ha.ce tres lo. t ele?
años y mi padre no <<abandonó>> el país. Se Clo.rk se levantó paro. irse.
trasladó o. Virginia porque perdió su trabo.jo - Ahora quédate aquí y disfruto. del ambien-
aquí y es el único lugar donde pudo ·encontrar te. Lo. señora Bellemont te dirá cuándo puedes
trabo.jo. No es como si se hubiese mudo.do o. marcharte. ffo. sido uno. bueno. cho.ria lo. de hoy.
fro.nc io.. Clo.rk so.lió de lo. oficina y me dejó miran-
Clo.rk se llevó el teléfono al oído y ambos nos do uno. fotografío. enmarco.do. de gente sal-
quedamos allí sentados escuchando el timbre de tando de un avión con lo. palabro. CONflANZA
lo. líneo.. Cuando mamá descolgó, uno. gran son- escrito. debo.jo. Si alguien en quien CONfÍAS te
riso. se esparció por todo el rostro de Clo.rk. convence paro. que saltes de un avión, te sugie-
-Señora ffo.skins, soy el director Clo.rk. Muy ro que te replantees tu relación con eso. per-
bien. Lo. llamo por las galletas que hiz:o usted sono..
paro. vender en el mercadillo del colegio. ¡Me Estoy empez:o.ndo o. odiar o. este tipo.
gusto.río. pedirle dos docenas más! -Clo.rk se
echó o. reír-. En realidad, lo. llamo por Eric.
Se ha metido en problemas en lo. escuelo. ...
Pude sentir lo. tempero.tura elevándose en lo.
frente de mi madre o. través del teléfono. Ero.
como el silbido de un ventilador. Imaginé sus
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Diario #12
Whitner ha faltado otra vez. Otro lunes de Oe modo que empecé a llorar un poco. Por
vocabulario en la miseria. Intenté aislarme, fortuna, mamá malinterpretó las lágrimas, como
de modo que lo único que recuerdo es que Adrian hace con todo. No sabe que lloro porque estoy
Noble desea que yo <<deje>> de existir. atrapado en un laberinto de tortura. Cree que
Mi madre está furiosa por lo de Colin Green. lloro porque estoy arrepentido. Así que, para
Se ha vuelto loca. demostrarlo, me hit.o llamar a Colin e invitar-
No comprende lo que sucede. No es que no le a cenar el viernes. Eso es, cenar con Colin
pueda hablar de cualquier cosa a ella, pero Greene. Si termina sentado frente a mí, voy a
¡qué_podría contarle honestamente sobre este tener que ponerme un delantal.
tema? Cuando llueve, diluvia.
Cuando llego de la escuela y me siento a
salvo, lo último que quiero es revivirlo. Espe-
cialmente con mi madre loca.
No hacía más que decir: <<¿Cómo has podido
hacer algo así? ¡Cómo has podido pegar a al-
guien?>>.
Y yo intenté contarle que era complicado,
que tenía buenas razones, que había sido un
accidente ...
- ¡Cuándo hay una buena razón para herir a
alguien, Eric'? Eso no es lo que yo te he enseña-
do. ¡Este no es el hijo que yo he educado!
No se trata del hijo que ella ha educado. Se
trata del hijo que tiene problemas. Oel hijo que
ahora es un objetivo, un Pringado. El hijo al
que ella no tiene el poder de ayudar.
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Diario #13
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MAMÁ: No pasa nada, Colin . Y bien, iqué ha- íe pillé, Colin. Matt Galvin es el boy scouf
béis hecho en tutoría'? iDe qué trata esta clase'? de 8. 0 curso que dirige el programa de tuto-
Yo: De asistir. ría <<Colegas de Mates>>. Aunque lo más seguro
MAMÁ: Está bien. iY cuál ha sido la clase es que vaya a por la insignia <<Enseña mates a
DESPUÉS de t utoría'? los bebés>>, parece un buen tío. Una cara amiga
CouN: Pues, mafes, señora ... Huy ... , señorita a la que Colin no tendría miedo de acercarse.
#askins. Era martes cuando fui a casa de Colin y
MAMÁ: ¿Mates'? ¡Qué bien! iA t i te encantan Richard nos habló sobre el Libro del Bullying.
las mafes, Eric ! Él predijo que Colin sería el Pringado de este
Yo: Inglés. año y que sería torturado e humillado. Aterra-
MAMÁ: ¿Qué'? do, Colin fue al chico más grande y guay que
YO: A mí me gusta el inglés, mamá. conoce, Matt Galvin, con qu ien se reúne los
CouN: A mí me gustan las mafes. miércoles.
Y entonces es cuando se me ocurrió. A Colin Cuando mi madre se disculpó para ir al
le gustan las mafes. baño, agarré a Colin por el brazo.
Desde que se apuntó al programa <<Cole- - ¿Qué te ha contado Matt Galvin sobre el
gas de Mates>>, las notas de Colin en matemá- Libro del Bullying? -le pregunté.
ticas han ido mejorando. Y si le preguntas a -Na-da •.• - tartamudeó Colin-. Nunca se lo
Colin por qué sus conocimientos han mejorado he mencionado a nadie.
tanto (tal como hito mi madre en la cena), él í omé uno de los cubiertos y lo sujeté por
lo explica en dos palabras . debajo de la mesa. Dejé que rozara la pierna de
CouN: Matt Galvin . Colin, apretándole con el cubierto.
MAMÁ: iAsí que te reúnes con un chico de - Este tenedor dice que se lo mencionaste.
8. curso'?
0 - iAhh! -Colin gritó-. jVale, vale! ¡íe lo
CouN: Sí, me reúno con él una vez a la se- contaré, pero no me apuñales!
mana ... , los miércoles. - Ningún problema -dije, devolviendo el cu-
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bierto a la mesa-. Es solo una cuchara. Aho- oído hab lar de un Libro del Bullying. Y aunque
ra confiesa. Pringado es un insulto que puedes decir: a al-
-Está bien. Cuando Richard nos lo explicó. guien que no te gusta, no existe nada ·que se
yo me asusté. No quería que se burlasen de mí. paretca al Pringado del que estás hablando.
Odio que se burlen de mí. Probablemente todo sea sencillamente fruto de
Le entendía. la imaginación de Richard. Es tan solo una loca
-De modo que al día siguiente. en la escuela, teoría de la conspiración>>.
yo estaba realmente nervioso. Vigilando, viendo Colin se recostó en su silla . r enía una mi-
abusones por todas partes. No podía creer que rada de satisfacción en su rostro.
alguien tuviese un libro tan malvado. Me preo- Todo aquello era basura. Claramente, las
cupé tanto que después de la escuéla vomité. palabras de Matt Galvin habían reconfortado
Si no hay fluidos corporales, no es una his- a Colin, y ojalá pudieran reconfortarme a mí.
toria de Colin Greene. Pero aquello no encajaba con los hechos.
-Me senté en el baño durante un rato sin- Incluso si no hubiese algo parecido a un
tiéndome fatal. Y entonces recordé que llega- libro para abusones y todo lo que escuché de
ría tarde a los Colegas de Mates. Cuando Matt Richard y Donovan no fuese cierto, y todo por
me preguntó dónde había estado. sencillamente lo que estaba pasando fuese una cuestión de
le expliqué todo el asunto. casualidades, aun así, ello no explicaría quién
- ¡Así que le contaste a Matt Galvin lo del golpeó a Richard y por qué.
Libro del Bullying? ¿Lo del Pringado? ¿Y él qué Esto es lo que yo sé:
dijo?
-Bueno, escuchó toda la historia. Luego me 1) Jason, Donovan y Adrian se han compin-
miró y dijo: <<ffe sido boy scouf durante mucho chado para hacerme la vida imposible.
tiempo, así que sé mucho sobre códigos se- 2) Donovan dijo que yo soy el Pringado por-
cretos y viejos libros. y todo tipo de clubes que encajo en la descripción que hay en
distintos y juramentos y todo eso. Y nunca he un libro que t ienen .
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3) Richard nos contó a mí y a Colin que él Estas son las dos únicas formas en que los
había sido el Pringado de 6. 0 curso cuan- abusones de Secundaria seguidores del libro
do un grupo de chicos se unieron en su pueden haberse enterado del chivataz:o de Ri-
contra. chard.
O bien Matt Galvin es un tipo muy peligro-
t.¡.) Colin explicó a Matt Galvin lo que nos so, o bien él mismo estcí en peligro. sea lo
había contado Richard sobre el Libro del
que sea, tengo que saber mcís cosas sobre él.
• Bullying y entonces Richard fue golpeado.
él estcí cerca del libro. o al menos, de ami-
gos de alguien que sí lo estcí. él podría poner-
Observando esta prueba, la mejor teoría que me de nuevo en la pista para descubrir el Libro
tengo de lo que estcí pasando es: qu·e existe un del Bullying y de la raz:ón de por qué yo soy
Libro del Bullying que pasa de curso en curso. el Pringado.
Ahora estoy completamente seguro. También Terminamos de cenar y finalmente Colin se
parece que hay un grupo de chicos de Secun- marchó a su casa.
daria que forman parte de la conspiración y Debo planear muchas cosas. Pero primero
son los que pegaron a Richard. Sospecho que mamcí dice que debo lavar las manchas de sa-
todos ellos son ex seguidores del Libro del Bu- liva de su mantel.
llying.
Colin explicó a Matt Galvin que Richard es-
taba hablando sobre el Libro del Bullying y
entonces Richard fue golpeado. O bien Matt
Galvin es un abusón seguidor del libro, o bien
explicó a algún amigo suyo esta loca historia
que el hermano menor de Richard Greene com-
partió con él, y este amigo es un seguidor del
libro.
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Diario· # 1~
Estoy asustado. En el autobús.
Intento calmarme.
El bus se tambalea. Me cuesta escribir.
Creo que el conductor del autobús me está
mirando.
Me he escapado durante el recreo. Me he
metido en el bus de preescolar, que lleva a
casa a los pequeños al mediodía.
Este bus para cerca del centro de Secundaria.
íengo que encontrar a Matt Galvin.
Me dirigí a un niño que estaba esperando el
bus de preescolar. le dije que me llamaba Co-
lin Greene, que estaba encargado de colaborar
en la seguridad escolar y que le ayudaría a
subir al autobús. Aquel niño ignoraba que los
extraños pueden ser peligrosos.
El conductor me preguntó qué estaba ha-
ciendo yo en el bus de preescolar.
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Diario #15
El patio de los mayores es realmente una nido de avispas, todos cargaron su rabia z:um-
locura. Por alguna razón, el sol parecía calen- bando contra los que estaban jugando al béis-
tar más allí. Los estudiantes gritaban, corrían, bol. Se intercambiaron insultos y gestos ~soeces.
chutaban pelotas, balanceaban bates y salta- Miré sus rostros buscando a Matt Galvin . De
ban cuerdas que giraban alrededor de sus pronto, cuando parecía que los del rugby y los
cuerpos como látigos. Si caminabas demasiado del béisbol iban a llegar a las manos, sonó un
cerca de alguien, resultabas noqueado. íodos silbato y un furioso monitor de patio corrió ha-
pasaban como un rayo por mi lado, en todas di- cia ellos, amenaz:ándoles con castigos. Matt Gal-
recciones. Me sentí como si estuviese encallado vin no estaba allí, de modo que continué.
en medio de una autopista intentando que no Pasé junto a las chicas que practicaban
me atropellasen. para animadoras y se perseguían unas a otras
íenía que encontrar a Matt Galvin. Mi reloj me jugando a pilla-pilla, y junto a los típicos
indicaba que solo me quedaban veint e minutos chicos enfadados que se aíslan en los colum-
antes de que el autobús del mediodía regresara pios, no para columpiarse, sino solo dando
de nuevo a la Escuela Elemental de Arborland. vueltas y t raz:ando líneas en el suelo con sus
Intent é buscarle por el enorme patio. Era como z:apatos. Me crucé con unos que dibujaban en
una ciudad de chicos. el suelo con tiz:a, con otros que practicaban
Los jugadores de béisbol formaban la figu- kárate, con los torturadores de ardillas ... ío-
ra de un diamante de gorras y chaquetas, con dos pasaron como en un borrón por delante de
sus bates y bolas profesionales, no de espuma mis ojos.
como las que tenemos nosotros. Un bateador Justo cuando me est aba felicitando por ha-
golpeó con fuerza una bola y salió volando berme mez:clado hábilmente entre ellos, cho-
disparada hac ia un montón de furiosos chicos qué de pleno con un objeto huesudo. Pensé que
que estaban jugando al rugby. La pelota gol- había chocado contra un arbolillo, pero cuan-
peó a uno de ellos, en la pierna o en el braz:o, do alcé la vista vi a un chico más o menos de
no sabría decir, e inmediatamente, como un mi altura levantándose del suelo.
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-Lo siento -le dije-. No te había visto. pero le rozó de lleno en los dedos y gritó de
-Tal vez eso tenga que ver con la dirección dolor. La pelota rebotó por el asfaltq y fue
adonde apuntaban tus ojos -repuso-. Normal- hacia las puertas dobles.
mente es mejor mirar hacia delante. -¡Eh, idiotas! -gritó Matt Galvin-. Que
Me habló a través de una inmensa bufanda alguien la recoja.
de cuello, pero sin mantener conmigo ningún Oos chavales corrieron a recoger la pelota
contacto visual. de Matt Galvin. Yo le había visto antes, ha-
-Lo siento -dije otra vez.. blando sobre el programa <<Colegas de Mates>>,
-Sí, vale, suele pasar -dijo para sí, mien- pero en aquel preciso momento no parecía un
tras se iba-. Suele pasar. Pasa todo el rato. amable experto en mates. Llevaba el pelo rubio
fue entonces cuando le vi. Una pelota rojo cortado a cepillo, como una sierra circular. Su
sangre rebotó en el edificio de ladrillos del ortodoncia le daba un aspecto metálico y pe-
colegio y formó un arco en el aire. Cayó y fue ligroso. Era un depredador, listo para matar.
golpeada con fuerza por los puños de un chico -¡Aplasta a ese tío, Matt! ¡Noquéale! -le
rubio gigante: Matt Galvin. gritaban sus amigos.
Estaba jugando al wallyball junto a las Él lanzó la pelota. Su delgado oponente
grandes puertas dobles, en la parte trasera del tembló cuando Matt y sus amigos le rodearon,
centro. Una larga hilera de chicos esperaba su gritándole: <<iVamos! ¡Haz algo, pelele! ¡Gol-
turno tras él y su oponente. Matt hizo rebotar péala!>>. Por la forma en que se le acercaban
la pelota en la pared, haciendo que se aplasta- a la cara y le gritaban, me recordaron a Jason
ra violentamente contra la cara del otro chico. <<Lokinsky>>.
-¡Eliminado! -gritó Matt Galvin, riéndose. Aquellos no eran boy scouts. Eran bárbaros.
El siguiente en la cola le sustituyó y el Y Matt Galvin era un abusón del Libro. Es-
juego prosiguió. Me dirigí a la parte asfaltada taba seguro.
y me quedé detrás del grupo. El nuevo opo- -¡Eh, tú, te toca! -gritó alguien.
nente de Matt intentó devolver una pelota, Miré a mi alrededor. ¿A quién le tocaba?
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-íe lo digo a ti, tío. ¿Juegas o no? quedó a oscuras, y pude escuchar cómo la pe-
íerror. Matt Galvin estaba allí plantado, a lota se alejaba botando.
cinco pies de distancia. Atravesándome con su - Jopé -dijo alguien-. ¿Adónde ha ~ido?
mirada. íenía la pelota de wallyball en sus Un barullo de voces, sonidos. No veía nada.
manos. 1odo eran sombras borrosas. Me tambaleé por
Yo era el siguiente de la fila. Creo que había el asfalto.
estado en la fila de jugar todo el tiempo y -¡Allí está! -gritó alguien, y se echaron a
avanzando por ella sin darme cuenta. Matt Gal- reír-. Está junto al Pringado.
vin me miró con su boca abierta y sus correc- Me quedé helado. Me habían descubierto. Matt
tores cegándome. Galvin me había reconocido, o alguien lo había
- ¿Preparado? -dijo. hecho. Quién sabe lo organizados que estarán.
Yo quería decirle: <<No, gracias>>. Quería rral vez: exista una lista o un panfleto, una
decirle: <<Me he metido en la fila por error, es web, yo qué sé! Estaba en territorio peligroso.
mejor que juegue el siguiente, me duele la - ¡Eh, Pringado! -escuché que alguien gri-
pierna, me he torcido la muñeca, me voy a ha- taba, y reconocí la voz: de Matt Galvin-. ¡pá-
cer los deberes, tengo cita con el médico>> ... sanos la pelota!
Las excusas se amontonaron en mi mente. El -¡Vale, vale! -murmuré entre jadeos.
tiempo se ralentizó. íenía que actuar, y mi ce- Estaba recuperando la visión y busqué la
rebro gritaba: <<iDi algo!>>. pelota entre mis pies, a mi alrededor. No pude
- Sí. encontrarla cerca, por el suelo, así que me
iPLAM! La pelota salió disparada desde la dejé caer y me arrastré por la hierba. íanteé
pared y un destello de luz: rojo y redondo se con las manos, pero nada.
dirigió hacia mi rostro. - ¡Eh, Pringado! Está justo ahí, recógela y
Creo que respondí lo que no debía. lánz:anosla.
La pelota se aplastó contra mi frente y mis <<Está bien>>, pensé. <<Estos tipos van a ma-
ojos explotaron en fuegos artificiales. íodo tarme. íengo que encontrar esta pelota y salir
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de aquí>>. Pero ent onces mis ojos se despeja- mi reloj . Era tarde. El bus de los de preesco-
ron. Distinguí el círculo rojo sangre, que no lar de regreso a la Escuela Elemental . de Ar-
estaba en absoluto cerca de mí, sino a unos borland seguramente estaba a punto de llegar,
cincuenta pies, cerca de las grandes puertas si no lo había hecho ya, y la parada estaba
del colegio. a un campo de fút bol de distancia. fenía que
Miré a Matt Galvin y a sus amigos. Ninguno correr.
de ellos parecía estar fijcíndose en mí. fodos Eché una rcípida mirada atrcís y memoricé
ellos miraban hacia las puertas, donde un chi- aquella cara de Pringado antes de correr hacia
co furioso y con grandes dientes salidos estaba la parada.
recogiendo la pelota de wallyba/1. La sostenía Llegué de regreso a mi escuela dispuesto a
con ambas manos, como sostendrías una pelo- continuar un día perfect amente miserable.
ta de baloncesto, e hizo uno de los peores lan-
zamientos que he visto en mi vida.
La pelota no se sostuvo en el aire mcís de
diez pies antes de caer al suelo. Matt y sus
amigos se echaron a reír y uno de ellos corrió
a recogerla. El chico flacucho se alejó, mur-
murando.
El Pringado de 8. 0 curso. Le habían gritado
a él. Matt Galvin era el abusón, el poseedor
del Libro de 8.0 curso, y aquel tipo raro era
el Pringado de 8.0 • Habían perdido a Richard,
pero le habían encontrado a él.
Justo cuando me estaba acercando a él
para contarle que éramos iguales, Pringados
de diferentes generac iones, la alarma sonó en
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Diario #16
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He estado pensado en conocer mejor a ese Arborland. Ahora ya tengo el nombre de Da-
chico, Daniel friedman. f al vei: podría hacer niel fri edman, su número de t eléfono Y,, su di-
a lgún tipo de comparac ión, como una lista para rección.
compararnos, él, Richard y yo, y ver lo que t e- Creo que ya es hora de hacerle una visita.
nemos en común. Así podría aislar las carac-
terísticas del Pringado, librarme de ellas y
luego pasar el cargo a algún otro. Por lo me-
nos es como espero que funcione. No sé qué
mcís puedo hacer en este momento.
Donovan me dijo que no era nada personal.
Dijo que él no quería elegirme, pero que exis-
te una fórmula. Es algo que tengo. Dijo que
no eran ellos quiénes decidían. Lo sé porque lo
escribí justo después de que le escuchara de-
cirlo.
Me a legro de haberlo hecho, porque de otra
forma no habría recordado algo tan impor-
tante. Llevo mi bloc de notas conmigo a todas
partes últimamente. Lo estoy usando como un
diario del caso, para escribir acontecimientos
y conversaciones, cualquier cosa que pueda
usar como pista.
Saqué el Directorio del distrito de la biblio-
teca y lo llevé al mostrador de enfrente. fie-
ne los números de teléfono y las direcciones
de todos los estudiantes del distrito escolar de
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Diario #17
la casa de Daniel no está lejos de mi es- Me abrí paso tras él, con mis z:apatillas
cuela y los chicos de Secundaria salen más golpeando la acera: ...
tarde que nosotros, de modo que tengo tiempo -¡Espera!
de organiz:arme. Daniel se escabulló en la z:ona arbolada que
Veamos, no quiero enfrentarme a esto a la había tras las casas y le vi bajando veloz: por la
ligera. Después de lo que le sucedió a Richard, colina boscosa hasta el barranco. Ahora estába-
solo voy a mencionar este tema del Libro del mos en un bosque espeso, había ramas por todas
Bullyin9 con la persona adecuada. Estaba al partes, dispuestas a sacarte un ojo. Vi un destello
99 % seguro de que Daniel era el Pringado, pero verde lima entre las hojas y lo seguí rápidamen-
tenía que asegurarme al too%. Esperé escon- te. Corrí entre los troncos de los árboles, roz:án-
dido entre los arbustos junto a su casa has- dolos, con riesgo de caerme si no aminoraba la
ta que oí que alguien bajaba por la calle ha- velocidad. De pronto noté que algo golpeaba mi
blando solo. le vi vestido con una camiseta dedo gordo del pie y caí rodando colina abajo:
verde lima, justo a unos pocos pasos de dis- mi cara probó una nudosa raíz: y mi pelo quedó
tancia. Inspiré todo el aire que pude hasta que empapado de barro. El suelo daba vueltas a mi
mi columna se curvó hacia atrás y me lancé al alrededor, golpeándome desde todos los ángulos.
ataque. Aterricé sobre algo húmedo. Estaba en el
-¡Eff, PRINGADO! fondo de la colina y tenía dificultades para
Para un estudiante al año, esta palabra es levantarme.
como el silbato de un perro. Daniel superó mi -Daniel -grité débilmente-. ¡Daniel!
prueba. Se quedó paraliz:ado, con los hombros Esperé a que la cabez:a dejase de darme
tensos, y su cuello se alz:ó como un periscopio vueltas.
taladrando con la mirada los alrededores en Un destello de verde.
busca de abusones. Era claramente un Pringa- iAllí! Bajo una rama, en la distancia.
do, pero salió huyendo antes de que yo pudie- Sujetaba algo con ambas manos. Se escuchó
se explicarme. un disparo. Era un arma.
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La bala golpeó mi pecho por debajo de mis He averiguado tu nombre por el anuario,
costillas. Me palpé el lugar con la mano y y tu dirección, por et directorio del distrito.
sentí humedad. renía el pecho y la mano em- f enía que haber sido más directo. ·
papados de rojo. Estoy en 6. 0 y estoy una situación pare-
La segunda bala golpeó mi espalda, justo en cida a la que viviste tú en ese curso.
la columna. Pensé que me quedaría paralítico. Creo que me entiendes. rengo que hablar
Me llevé la mano hacia la herida y mi mano contigo del Libro.
Por favor contacta conmigo.
regresó de color ... azul.
Bolas de pintura.
Giré sobre mí mismo, pero Daniel se había Añadí mi dirección y mi número de teléfono,
ido. El pelotazo había sido mortal. doblé mi mensaje y lo coloqué en su buzón de
Imaginaba que a Daniel no le haría gracia correos. Espero que lo recoja antes de que lo
que yo le llamase <<Pringado>>, pero sospecho que haga su madre.
le subestimé. Me costó toda mi energía salir del Por fortuna yo sí llegué a casa antes de que
bosque y regresar al barrio de casas. lo hiciese mi madre y tuve tiempo de quitar-
De modo que el tiro me había salido por la me la pintura (gracias a Dios, lavable) de mis
culata. Aun así creo que aprendí algo sobre el ropas.
Pringado. Ahora la pelota está en el campo de Daniel.
Le escribí un mensaje. Me voy a la cama.
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Diario #18
Hoy, al otro lado de las ventanas de la cla- Colin se puso nervioso y empezó a remover-
se, la nieve empezó a caer por primera vez, pero se en su asiento. Sostuvo mi nota en e.l aire
nadie se levantó de sus asientos para mirar. como un minero que acabase de encontrar oro.
En toda la clase resonaba un murmullo. In- Probablemente nunca antes le habían pasado
cluso la Sustituta Humana salió de su atur- una nota.
dimiento para decirnos que nos calláramos. Se dio la vuelta rápidamente mirando de
Nadie me dijo qué sucedía, claro, pero escuché un lado a otro mientras sus cejas bailaban en
que Ruth McNealy le decía << ... y ahora van a frente. Asentí para indicarle: <<Yo te he envia-
salir juntos>> a Ashley Oickenson cuando entra- do la nota>>.
ron en el aula. - ¡Lo sé, Eric, lo sé! -susurró Colin un poco
Me sorprendió bastante cuando lo oí. Apar- demasiado alto-. ¡Lo he oído hoy en el autobús!
te de haber servido para avergonzarme a mí Hice un gesto a Colin para que bajase la
en el facebook, no sabía que los chicos y chi- voz, pero estaba tan emocionado por tener un
cas de mi clase ya empezaban a salir juntos cotilleo que no podía evitar gritar.
en plan cita. Yo no tengo ningún amigo, ¿cómo - ¡Nunca te lo imaginarías!
voy a esperar tener novia? - A ver si os calláis -dijo la Sustituta Hu-
Imaginé que tenía que ser alguien de nuestra mana-. Es la hora de los ejercicios de Voca-
clase porque todo el mundo se estaba pasando bulario.
notitas. Era como si de un día para el otro to-
dos hubiesen crecido y supieran qué hacer. Este año Whitner faltaba casi todos los lu-
Quería que alguien me dijese qué estaba nes. Y la Sustituta Humana siempre nos ponía
pasando, así que escribí una nota al único tipo Vocabulario y siempre sucedía lo mismo.
que pensé que me respondería: Colin Greene. Adrian Noble dijo que deberíamos <<des-
terrar>> nuestra incredulidad ante el hecho de
¿Qué está pasando hoy? ¿Quién está sa- que yo era gay. Oonovan dijo que mi cabeza
liendo con quién? era tan grande como un <<monumento>>. A Nick
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Diario #19
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Diario #20
A ver si aprendes a no tenderme emboscadas.
Estaba haciendo los deberes de mates, que
No te conviene meterte conmigo. Tengo paintballs
se me dan bien, excepto cuando estoy cerebral-
mente muerto. V actualmente estoy cerebralmen- que no se quitan con agua.
te muerto.
Pero me escribiste algo sobre el Ubro ...
Oe repente escuché un crujido en mi ven-
tana. Me di la vuelta mirando a mi alrededor. Eso me h.a intrigado, aunque también me h.ace
Oí otro chasquido y vi una piedrecita chocando desconfiar.
contra el cristal. Luego una más grande repi-
quete6 en mi ventana. Ven este viernes a media noche a mi casa, solo.
«¿Qué está pasando?».
Mira en mi buzón. Encontrarás más instrucciones alll.
Abrí de par en par la ventana y asomé la
cabeta. Una oscura silueta corría hacia la no- Hasta entonces.
che. Daniel Friedman
-¡Eh! -grité.
En el césped de la parte delantera de casa
encontré una piedra envuelta en un papel. Lo
desenvolví y vi dentro una nota escrita.
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T
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Diario #21
Ahora me aseguro de estar preparado para - ire han perseguido alguna vez: hasta tu
cualquier cosa. casa? -pregunté. .,
Daniel me pidió que le contase lo que sa- No sabía hasta qué ext remo eran capaces
bía del Libro. Y que le explicase cómo me de llegar. Esperaba que me dijera que no.
había dado cuenta de que él era el Pringa- - Solo una vez -suspiró Daniel. y miró por
do. Le conté la historia de Richard Greene. y la ventana toscamente t allada.
de Adrian Noble. Jason <<Lokinsky>> y Donovan. - ¿Qué sucedió? -pregunté.
Le conté que Colin se había ido de la lengua y Daniel me miró gravemente.
por qué yo estaba interesado en Matt Galvin. - ¿Estás buscando el Libro? -preguntó él a su
Cuando oyó ese nombre frunció el ceño. vet. sin contestarme-. ¿Qué har ías si lo tuvieras?
-Matt Galvin -escupió en el súelo de su -Leerlo -afirmé-. Averiguar por qué me
casa-fortalez:a del árbol-. Le odio. eligieron como Pringado y cambiar. Cambiaría
Ya era pasada la media noche y en el ex- mi fo r ma de ser para no encajar en la descrip-
terior hacía mucho frío. La luna brillaba con ción. Y así ya no sería el Pringado.
un extraño resplandor amarillo a través de los -Eso es lo que yo debería haber hecho -di-
pinos. jo Daniel-. cuando lo tuve.
-¿Le tienes miedo? -pregunté. Di un respingo en el suelo.
Daniel me miró amargamente. Qué pregunta - iQué? - grité.
tan estúpida. Vi cómo actuaba cuando Matt se Y Daniel me contó su historia.
burló de él en su colegio y cómo le entró pá-
nico cuando yo le llamé Pringado. * * *
-Si crees que huí de ti porque tenía miedo,
estás muy equivocado -dijo Daniel. sin embar- Su 6. 0 curso había sido bastante pareci-
go-. Solo intentaba atraerte al bosque. aquí. do al mío. Una existencia normal y bastante
donde puedo defenderme. Ya no me tienden em- aburrida destruida por tres chicos que cono-
boscadas. cía desde el jardín de infancia. El líder de la
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banda era Matt Galvin. Pronto toda la clase bosque y se escondió allí durante horas, espe-
estaba siguiendo sus pasos, convirtiendo la vi- rando a que Matt se fuese y leyendo ~aquella
da de Daniel en un infierno. Como yo, había extraña hoja de papel que accidentalmente ha-
recogido pistas de que era posible que hubiese bía arrancado del Libro.
algo más tras ese acoso. Sus abusones siem- Regresó a su casa de noche.
pre estaban reuniéndose en secreto durante el Al explicar la siguiente parte de la historia,
almuerz:o y sentía como si hubiese una conspi- Daniel se mostró avergonz:ado.
ración en su contra. Al parecer, de pronto un extraño muchacho
Una vez:, para aterroriz:ar a Daniel, Matt apareció entre la oscuridad y le puso las ma-
Galvin le metió en el baño de los minusválidos nos en los hombros.
y, con una llave robada al conserje, le encerró -¿Eres el Pringado? -le susurró.
allí. ffabía hecho algo así antes, pero esta vez: Daniel nunca había visto a aquel chico an-
cometió un error: Matt se dejó su mochila en tes. Aparentaba tener unos trece años, era alto,
el baño junto con Daniel. con el pelo oscuro cubriéndole los ojos.
Era un viernes y Daniel temía quedarse -íienes algo que no te pertenece -le dijo
atrapado allí dentro todo el fin de semana. De el chico-. Algo muy peligroso. Si te lo guar-
modo que abrió la mochila de Matt esperando das, te prometo que ... vas a acabar malherido.
encontrar un móvil que pudiese usar para pe- El chico hablaba tranquilo y serio, y pare-
dir ayuda. Sin embargo, cuando la abrió, en- cía fuerte.
contró una carpeta encuadernada con piel con -Dámelo a mí, y te aseguro que no acaba-
el título El Libro grabado en su portada. Jus- rás herido. Rechaz:a mi oferta y no me hago
to cuando Daniel la abrió, Matt entró de golpe responsable de lo que suceda.
por la puerta y le arrancó El Libro de las Demasiado aterrado para discutir, Daniel le
manos. Daniel se escabulló del aseo, corrió entregó enseguida la arrugada página del Libro
pasillo abajo y escapó de la escuela. Matt Gal- a aquel chico misterioso. Entonces el otro le
vin le persiguió, pero Daniel se adentró por el agarró por el cuello de la camiseta .
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-Y ahora vas a olvidar todo esto -le dijo-. No me extrañaba que Daniel hubiera perdido
Si es que sabes lo que te conviene, tú nunca los papeles cuando salté encima de él, pensé.
has visto el Libro, y nunca me has visto a mí. -No lo sé. Ni nunca he querido sab;·r lo.
Y después de aquello, se fue. Los abusones -íiene que ser uno de los propietarios del
de Daniel nunca más mencionaron el incidente libro. Por lo que sabemos, quizá el chico que
con el Libro ni la página robada. lo escribió -dije-. íú arrancaste una página
Pero, por supuesto, después de aquello, hi- de su libro y ese tipo un par de años mayor
cieron que la vida de Daniel fuese mucho peor. que tú aparece. íal vez sea el jefe de toda la
organización.
* * * - íal vez -admitió Daniel.
- ¿No te preocupa? ¡Si él es el autor, tene-
-¡No puedo creer que tuvieses en tus manos mos una llave para resolver todo este asunto!
una página del Libro del Bullyin9! -grité. -Eh, yo solo he venido porque tú mencio-
-Yo no sabía lo que era -se lamentó Daniel. naste el Libro ...
- ¿Qué decía? -Sí, pero esto es más importante. í enemos
Daniel se curvó hacia el suelo. Su voz que- que averiguar su nombre.
dó reducida a un susurro: -Mira -dijo Daniel, frotándose los ojos- ,
-No me acuerdo bien ... no tengo intención de jugar a detectives. Ya
Sin duda la experiencia había sido demasia- tengo demasiados problemas yendo a la escue-
do aterradora. la de Secundaria con esos tipos. Me conformo
-La página solo decía algo sobre un ma- con estar a la defensiva.
nual de cómo ser guay ... íe prometo que es -A lo mejor a ti te funciona eso -dije-,
todo lo que sé. Debía de ser la primera página pero a mí aún me queda la mitad de 6. 0 curso
del libro. y no quiero que sea miserable.
-¿Y el chico que te asaltó? ¿No tienes idea -No creas que se acaba en 6.0 curso.
de quién era? -pregunté. - Entonces ayúdame -dije-. Si te traigo
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Hacía ya casi una semana que había reco- La casa de Clarence tiene un aspecto frío y
pilado las fotocopias de cinco años de anuarios muerto. O peor, a causa del duro invierno, la
(todos los que había en la biblioteca de mi nieve sucia se apilaba por los bordes. "
colegio) y las había metido en el buzón de Da- Es una casa grande, más que la mía, y muy
nie l friedman. moderna, con enormes paredes de aluminio gris.
ffoy he recibido una Como vivir en una gran lata de sardinas. La
/
página de esas foto- única cosa que no brilla son las ventanas del
copias envolviendo sótano. Están a la altura del suelo y alguien las
una roca. ha cubierto con papeles de periódico. Alguien
Esa página mos- que no quiere que sepas lo que pasa allí abajo.
traba las caras son- Saqué la dirección de Clarence del directorio
rientes de casi treinta de la escuela y me costó media hora reunir el
alumnos de 6. 0 curso, que ahora están en 10. 0 • va lor para acercarme a su casa. Parecía que
Probablemente todos habrán olvidando la tor- no había nadie en la casa, pero había luz en
tura que hicieron pasar a uno de sus compa- el sótano, se veía brillar a través del periódico.
ñeros, el Pringado de entonces. Ninguno de Dudo porque no estoy seguro de si Clarence
ellos recordará lo que hizo, excepto tal vez: sabe que yo existo o no... Oigamos que es el
uno. El chico con el pelo negro sobre sus ojos. autor del Libro, o aunque solo sea alguien im-
El único con un círculo rojo alrededor de su portante en la organización, ¡sabrá algo de
foto. El que tendió la emboscada a Daniel mí? ¿Y si los seguidores del Libro del Bullying
friedman. El propietario del libro de más edad de la Escuela Superior están al corriente de
que conozco. í al vez:, el propio autor. quién es el Pringado de cada 6. 0 curso?
Clarence Corbinder.
No creo que me haya visto en persona an-
t es, pero yo tampoco le había visto a él antes
y allí estaba, en la puerta de su casa. Podría
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usar un anuario o un listín de teléfonos tan Intenté pensar en algo que no fuese: «Estoy
fácilmente como he hecho yo. Me pareció ver comprobando su casa buscando puntos ., débiles
una sombra moviéndose a través del papel de por donde entrar y robar un libro que su mal-
periódico. ffabía alguien allí abajo. vado hijo tiene>>.
-¡Disculpa! Por suerte la señora Corbinder habló en mi
Me di la vuelta en redondo y me tapé la ca- lugar:
ra con la mano. A través de los dedos, vi a una -¡Seguro que te estás ofreciendo para qui-
mujer de unos cuarenta años, pelo voluminoso tar la nieve del camino! Bueno, pues sí que me
y una expresión feliz. haces falta. El hombre del tiempo dice que
- ¿Puedo ayudarte? -preguntó la mujer. van a caer diez: centímetros más de nieve la
Me quedé helado, sin saber qué hacer. ¿Era próxima semana y mi Clarence es más gandul
la madre de Clarence? Incluso el autor del Li- que un saco de patatas. ¡se pasa todo el tiem-
bro del Bullying tiene madre. po en el sótano haciendo sus deberes o Dios
-uh ... ¿Señora Corbinder? -dije. sabe qué! -y se echó a reír, con una risa casi
-Sí, soy yo -sonrió-. ¿Qué estás haciendo maníaca.
en mi casa, jovencito? Y así es cómo conseguí un trabajillo quitan-
-ffumm ..., ¿yo? -intenté recuperar el aliento. do la nieve del camino y de las aceras en la
-Sí, tú. ¿Cómo te llamas, hijo? guarida del diablo. Regresaré cuando la gran
-Me llamo ... , pues ... t ormenta haya caído. Mientras estoy quitando
No podía darle mi nombre real, porque ¿y paletadas de nieve, en realidad estoy compro-
si se lo mencionaba a Clarence? No podía dejar bando la casa para encontrar la manera de
que él supiese que había ido allí. entrar. Y cuando la encuentre, entraré y roba-
-Colin Green, señora. Me llamo Colin Green. r é ese horrible libro.
La señora Corbinder me sonrió de nuevo.
-Y bien, Colin, ¿qué estás haciendo rondan-
do por mi patio trasero?
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Diario #2"1
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Diario #25
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-Oh, debe de estar donde está siempre. Aba- ma de entrar cuando no haya nadie por los
jo, en el sótano -se echó a reír. alrededores.
-¿Qué hace allí todo el tiempo? -pregunté. Mientras la señora Corbinder y yo hcÍblába-
-Deberes. Y escribe -dijo ella. mos, me fijé en el sistema de seguridad. Había
-iEscribe? alarmas y sensores por todas partes. No ha-
-Oh, sí. Siempre está escribiendo en sus bía manera de entrar durante el día cuando la
cuadernos ahí abajo. fiene montones de pape- casa estuviese vacía y menos en mitad de
les por todas partes. Aunque nunca me enseña la noche.
nada -y se río de nuevo de aquella forma tan Ya estaba mentalmente preparado para aque-
extraña-. ¿Conoces a Clarence? Puedo llamar- llo. Si no te puedes colar dentro cuando no
le si quieres, aunque no creo que venga. Nunca hay nadie en casa, tienes que hacerlo cuando
deja el sótano hasta la hora de cenar. estén distraídos. Y encontré la excusa perfec-
-No, no, está bien -dije. ta cuando estaba buscando entre la informa-
Lo cierto es que no tenía demasiada prisa ción personal de Clarence.
en conocer a Clarence, ni siquiera bajo un -Me pareció oír que se acercaba el cum-
nombre falso. ¿Y si me descubría? pleaños de Clarence, dieciséis años, ¿no? -dije.
Aun así, sabía que necesitaba entrar en el La señora Corbinder me pasó el cacao.
sótano. Él era el autor del Libro del Bull,¡in9. -Sí, celebraremos una fiesta en su honor,
Su madre prácticamente me lo había confir- aquí en casa.
mado: está escribiendo en cuadernos todo el Bingo.
tiempo, tiene montones de papeles por todas -Es fantástico -dije-. Me encantan las
partes... Probablemente anda trabajando en fiestas de cumpleaños.
más libros de abusones, tal vez. prepara una -Bueno, entonces, hummm ...
edición para la Escuela Superior. Debe de tener La señora Corbinder estaba atrapada; nin -
una copia del Libro escondida en alguna par- guna madre decepcionaría a un niño de 11 años
te, ahí abajo. Solo necesito encontrar la for- autoinvitándose a una fiesta .
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Diario #26
- ... Pues entonces deberías venir -dijo ella ffoy en clase de inglés, Whitner nos ha en-
con una sonrisa forz:ada. señado cómo hablar en público. Puso (.\,n mon-
-¿De veras? -dije-. ¡Oh, qué bien: sería tón de temas en un sombrero y luego nos hiz:o
fantástico! salir delante de la clase, sacar un tema y
-Por supuesto, Colín. Nos encantará que hablar de él durante 60 segundos.
vengas. Cuantos más seamos, mejor. r eníamos que improvisar el discurso allí
· Y de esta forma conseguí mi invitación. mismo.
Dentro de exactamente 23 días, estaré en la Ruth McNealy fue la primera y habría ju-
fiesta de cumpleaños de Clarence Corbinder, rado que casi estaba a punto de llorar. Su
el autor del Libro del Bullying. Y aprovechando tema era: <<¿Cómo sería el mundo si los coches
la distracción de la fiesta, me colaré en su volasen?>>.
sótano y z:anjaré este asunto, de una vez: por No sé en qué debía de estar pensando Whit-
todas. ner.
Durante 60 segundos tosió, se atragantó,
tartamudeó e intentó pensar en algo que decir
que no fuese que llegaría a la escuela mucho
más rápido. Lo mismo sucedió con Ashley Dic-
kinson cuando tuvo que hablar sobre <<¿Qué
sucedería si las patatas fritas fuesen saluda-
bles?>> y con Nick Drumme cuando le dijeron
que describiese un mundo donde la gravedad
estuviese invertida.
-Venga chicos -dijo Whitner-, esto tiene
que ser divertido. Simplemente dejaos ir y ha-
blad.
Era fácil para él decirlo. Cuando eres el
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profesor, nadie se ríe de ti si dices alguna es- - Aquí en Estados Unidos ya no mediríamos
tupidez:. Por lo menos, no en tu cara. nada con pulgadas. los humanos y los .. monos
-Eric ffaskins -dijo mi nombre Whitner-. ya no tendrían nada sobre lo que fanfarro-
r ú eres el siguiente, colega. near. No podríamos jugar a los videojuegos y
-Venga, colega -me susurró Jason <<lokins- los bebés se chuparían los otros dedos, lo cual
ky>>, y Adrian Noble se echó a reír. no sería tan satisfactorio.
fenía que pasar por aquello. Soltaría mi No creí que mis ocurrencias fuesen tan di-
estúpido discurso, todos se reirían de mí y po- vertidas, pero toda la clase estaba riéndose
dría continuar con mi vida. a carcajadas, liderada por Melody, que era la
Whitner sostuvo el sombrero y le maldije en que hacía más ruido de todos. Whitner paró el
silencio por obligarme a hacer aquello. leí mi cronómetro. ffiz:o que la clase me aplaudiese
tema: <<¿Qué pasaría si la gente no tuviese como a los demás, pero me apartó a un lado
pulgares?>>. a ntes de que me sentase.
Whitner puso en marcha su cronómetro. Me -Ha sido realmente excelente, Eric -su-
quedé mirando a la clase: se burlarían de mí surró-. fienes mucho talento como orador.
dijese lo que dijese, así que ¿para qué preocu- Sí, pensé, creo que sí. Por un minuto con-
parme por ello? Así que les dije cómo sería el vertí una clase de salvajes sedientos de sangre
mundo, directamente. en mis amigos. les gustaron mis ocurrencias.
-En primer lugar, los críticos de cine ten- Miré a Melody, quien me estaba sonriendo. Pa-
drían que ponerse a trabajar en otra cosa recía orgullosa.
-dije-, porque no podrían cargarse las pe- Cuando volvía a mi asiento, escuché que
lículas marcándolas con los pulgares hacia Adrian Noble le decía a Ruth:
abajo. Y cuando jugásemos al baloncesto, todo -Eric ffaskins puede ser divertido cuando
el mundo diría: <<iEh tío, choca esos cuatro!>>. quiere -sonrió.
Melody estaba sentada en la primera fila y -Sí -repuso ella.
estalló en una sonora carcajada. -¡Gracias! -dije a la espalda de Ruth.
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Oiario #27
Se quedó helada y sus hombros se tensaron Papá vino a visitarme el fin de semana. Es-
como si una araña le hubiese tocado el cuello. tuve deseando con ganas que llegase ese momen-
Ruth se volvió hacia mí lentamente con cara to, pero no acabó de ser lo que yo esperaba.
de asco. fuimos a Battle Creek a dar una vuelta por
-Eh, quítate de ahí, Pringado -dijo Adrian . la fábrica de cereales, solos los dos. A papá
Ruth simuló que le entraba un escalofrío y le gusta ir a lugares como este y yo me quedo
se echó a reír. viendo cómo él se lo pasa bien.
Volví a mi asiento. Pero no hablamos como solíamos hacer an-
<<Yo siempre podría ser así, pero no me de- tes, o al menos yo no lo hice. Me hito un mon-
jáis>>, pensé. Podría se divertido y agradable y tón de preguntas y tampoco yo atiné con las
tener amigos, pero ellos quieren tenerme atra- respuestas correctas.
pado por alguna ratón. Me preguntó cómo me iban las cosas en la
-Eso ha estado bastante bien -dijo Jason escuela. Si sucedía algo interesante.
<<Lokinsky>> inclinado sobre su pupitre, pero me - ¿A qué te refieres con interesante? -pre-
alegro de tener aún pulgares -me pellitcó el gunté.
brato-, y Pringados. - No sé -repuso él-, ¿has aprendido al-
go realmente extraordinario o ha sucedido algo
realmente extraordinario en clase?
-No creo -dije-. Estamos trabajando duro
en mates. Y... no creo que hay nadie en mi
clase realmente divertido.
- ¿Odias a algún maestro?
-No -dije-. Solo al señor Whitner, mi pro-
fesor de lengua. Y no le odio, solo es que no
me gusta que se ausente cada lunes. No me
gusta la sustituta que nos traen .
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Esperaba que mi padre me preguntase por Me quedé sentado en silencio los siguientes
qué y pensé en lo que diría si me lo pregun- 60 segundos, preguntándome si papá S€guiría
tase. No sabía si le diría la verdad. interrogándome. Y si me preguntaba. directo.-
- ¿Pero aparte de eso es buen profesor? mente: <<¿Se portan mal contigo los chicos?
-Sí, está bien. ¿Se burlan de ti? ¿Cuentan mentiras sobre ti?
Pensé en cuando me ayudó con el inciden- ¿íe han hecho daño?>> ... No sé qué le respon-
te del lavabo. Si mi padre me preguntase qué dería..
me gustaba de él, ¿era aquello lo que le iba Decidí contarle la verdad.
a decir? ¿Le explicaría lo que me estaba pa- Si me lo preguntase, no le mentiría..
sando aquel año? Al principio no le contaría. toda historia,
- ¿Y qué me dices de las peleas en la escue- sería muy difícil de comprender. Pero si me
la? ¿Ya han metido a alguien en las taquillas? preguntase si eran malos conmigo, diría que sí.
Mi padre se echó o. reír. Aquello conduciría. o. más y más preguntas, y
- ¿Qué? -dije. más, hasta que todo aquel horrible o.ño que-
Yo. so.bes, los chicos forman pandillas y se do.se o.l descubierto y se aireo.se.
meten con alguien y lo encierran en uno. to.- Esperé, conteniendo el o.liento, preparo.do
quilla. .•. para contárselo todo si me lo preguntaba..
-No -dije-. Esas cosas no po.so.n. - ¿íienes que ir o.l baño? -dijo él.
Me sentía incómodo. Mi padre no comprende Me volví lentamente paro. mirarle y negué
cómo funciona el colegio, creo. No te encierran con la ca.bezo..
en lo.s to.quillas y te roban el dinero del al- -01<, porque no pararemos ho.sto. dentro de
muerzo, no paso. como en lo. tele. Es mucho media hora. Ahora quiero escuchar las noticias.
peor, y muchísimo más difícil de explicar o. Puso la radio y me quedé allí sentado escu-
alguien que obviamente nunca lo ho. experi- chando mientras el hombre de lo.s noticias me
mento.do. <<Porque si lo hubieras hecho, no po- explicaba. o. mí y o. mi padre cosas más impor-
drías reírte de este tipo de cosas, papá>>. tantes que nosotros mismos .
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Diario #28
Hoy es el cumpleaños de Clarence. Le dije a -Oh, pues voy a buscarle -y añadió, su-
mi madre que iba a la biblioteca y fui en bici jetando mis hombros con ambas manos ~ : Qué-
a su casa. Esta aún tenía aquel aspecto inani- date aquí.
mado, incluso con quince coches aparcados Desapareció entre el montón de invitados,
enfrente y el sonido de la música proveniente así que tuve que actuar deprisa. Me ceñí al
del interior. Los papeles de periódico aún cu- plan: entrar y salir.
brían las ventanas del sótano, con la diferen- Lancé mi regalo sobre la mesa con el resto
c ia de que una de ellas tenía una pegatina de y empecé a buscar la entrada del sótano. La
<<felii Cumpleaños>> en ella. gente que había a mi alrededor me bloqueaba
Una anciana contestó a la puerta. la vista con sus gruesos jerséis y las bebidas
-La fiesta es dentro -dijo, y yo la seguí. en sus manos. La primera planta estaba llena
-¡Colin! -llamó una voi de mujer detrás de de adultos; los chicos debían de estar arriba.
mí-. ¡Colin Green! Me pregunté cuántos abusones habría por allí.
Me di la vuelta y recordé que estaba usan- ¡ Estarían los íres Malvados?
do un nombre falso. La señora Corbinder vino Entonces varios codos huesudos y unas uñas
hacia mí con una bandeja de galletas de ex- pintadas me despejaron el panorama y vislum-
trañas formas. br é una puerta gris al otro extremo de la ca-
-¡Gracias por venir, toma una galleta! sa . Agarré el llavero linterna de la cadena de
Iba vestida con algo que yo solo describiría la bici que guardaba en el bolsillo.
como una sábana negra gigante envuelta alre- El sótano.
dedor de su cuerpo. Cuando bajé, los escalones crujieron y agra-
-¡Ya has visto a Clarence? decí el ruido de la fiesta. La lui del llavero
Esa mujer tenía una mueca de demente. apenas iluminaba la oscuridad.
-No, aún no he tenido ocasión -dije. No podía ver más que un palmo delante
A decir verdad, esperaba evitar al mu- de mi cara. Lo único que distinguía era una
chacho. moqueta marrón y sucia, una vieja silla y
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Mi linterna parpadeó y de golpe se apagó -¡Colin! ¡Aquí estás, Colin Greene! ¡íengo a
completamente. Me quedé totalmente a oscu- Clarence justo aquí!
ras. Sí, allí estaba yo, en la boca del lobo. Me quedé helado. Mis hombros llegaro~ prác-
Me dirigí arrastrando los pies hacia las ticamente a mis orejas. Sentí que la página
escaleras. Me enganché el pie en algo, rodé robada del Libro del Bullying quemaba un agu-
encima de la desvencijada silla y al caer sobre jero en mi bolsillo, desprendiendo un brillo que
el escritorio oí que se quebraba la pata. Me t odo el mundo podía ver.
arrastré para ponerla recta de nuevo en la oscu- -Clarence, este es Colin Greene. ffa estado
ridad. La pata colgaba de una astilla de ma- quitando la nieve de la entrada de casa.
dera. Al ponerla recta, noté un cajón en la Me volví lentamente, como una serpiente en-
mesa que no había visto antes. Un ·cajón se- cantada por la voi: de la señora Corbinder. y
creto. Dentro había una hoja de papel lisa y a hí estaba él: alto, con el pelo oscuro cubrién-
plastificada. La agarré deprisa y subí corrien- dole los ojos, ojos oscuros, como si llevase un
do las escaleras del sótano. En el escalón poco de maquillaje como un gótico. Extraño.
final, se colaba algo de lut: de la fiesta . Leí -¿Eres el hermano pequeño de Richard
la página: <<Cómo crear problemas sin meterte Greene? -dijo simplemente, con una entonación
en problemas, mandar en la escuela y ser el mei:cla de sospecha y aburrimiento-. No te
jefe>>. pareces a él.
¡El Libro del Bullying! ¡Aquella era la pri- -Bueno ... , me alegro de ello -dije, inten-
mera página que Clarence le quitó a la fueri:a tando parecer natural.
a Daniel! Clarence me dedicó una breve risa:
La doblé y la metí en el bolsillo de mi pan- -Sí, es algo de lo que alegrarse -su cara
talón, subí el último escalón y me dirigí de se puso seria de nuevo-. ¿Pero por qué estás
nuevo a la fiesta. La puerta principal estaba a quí? Yo no te conoi:co.
solo a treinta y cinco pies de distancia. Ace- La señora Corbinder le dio un ligero codai:o
leré el paso y ... en el brai:o:
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Diario #29
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Me dirigí hacia ellos y oí que Donovan le como si llamaras a alguien <<dentista>>. ¡No tie-
decía: ne ningún puñetero sentido! ..
-Eres asqueroso, Colín. Una bola de babas. Me sentía bien metiéndole bronca a Dono-
Apestas como si te hubieses meado encima. van. Él lo ha estado haciendo todo el año. No
iAún le das besitos a tu mamá, Colín? ¿Es que es un genio de la maldad, simplemente es Do-
eres gay? novan White: el chico que se comía los rotu-
· -¡Eh! -dije sin pensar-. ¿Por qué no te ladores en clase de plástica.
callas, Donovan? Pero obviamente Donovan no veía las cosas
Una extraña sensación se apoderó de mí. No como yo ni había pensado en nada. Él es más
sé por qué intervine, sabiendo que me metería bien de acción. Así que en unos segundos yo ya
en problemas. Sin embargo, no me arrepentía ni estaba en el suelo.
estaba asustado. Lo único que vi fue una borrosa mancha me-
Donovan se estiró la camiseta por encima de locotón dirigiéndose a mi cara. Pero no era un
su estómago. Su gorda barriga estaba volviendo. melocotón, puedo asegurarlo. La cabeza de Dono-
- ¿Qué has dicho? van golpeó directamente en mi nariz y me derri-
Yo también estaba sorprendido de mí mismo. bó al suelo.
Me puse delante de Colín, que parecía aterra- Clavó los codos en mis hombros. Y enseguida
do, y me di cuenta de lo absurdo que era todo. oía a la caballería, Jason y Adrian, dirigiéndo-
Allí solo estábamos Colín, Donovan y yo. Unos se hacia nosotros. Justo antes de que llegasen,
pocos años antes sencillamente estaríamos di- Donovan se inclinó hacia mí muy cerca y me
virtiéndonos juntos por el patio. Pero aquel susurró ásperamente en el oído:
ridículo libro nos afectaba a todos ahora. -Eric, antes éramos amigos, pero ahora tú
Odio el Libro del Bullying y odio al Pringado. eres el Pringado. Yo soy guay y tú no. No pue-
-Deja de meterte con Colín. Te has vuelto des hablarme y no puedes tocarme.
idiota. Y deja de llamar a la gente gay. no sé Entonces aparecieron Jason y Adrian. Jason,
siquiera por qué lo consideras un insulto. Es por supuesto, empezó a gritarme palabrotas,
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Diario #'30
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luto. Pero cuando me estaba alejando, ella dijo Lo que quiere la gente
en un extraño tono de voz: .,
-Eric, ite pasa algo conmigo?
* * *
· No lo sabes tú bien. Si crees que la gente tímida no quiere desta-
car, estás equivocado. Lo único que sucede es
que quieren ser vistos a su manera.
Todo el mundo quiere ser visto a su ma-
nera. Por eso eligen la ropa que visten, hablan
como lo hacen y mienten como lo hacen. Todo
el mundo actúa de la forma en que quieren
que tú los veas.
Los tíos que muestran señales de pertene-
cer a una banda quieren que pienses que son
tipos duros. Las chicas que llevan toneladas
de maquillaje quieren que pienses que están
seguras de sí mismas. Pero, por supuesto, los
chicos realmente duros no necesitan alardear
de ello y las chicas seguras de sí mismas no ne-
cesitan disfrazarse.
Los tímidos no son estúpidos. Saben lo fácil
que es ver a través de las apariencias. No quie-
ren que veas a través de ellos, de modo que
desaparecen.
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Oiario #31
Imagina cómo quieren ser vistos los chicos Al no llegar demasiado lejos en la inter-
de tu clase. Y luego trátalos de esta forma. pretación de la página del Libro del 8{,tllying,
Incluso aunque tú sepas que es todo fachada . pensé que tendría que actuar de distinto modo.
Se sentirán agradecidos. Regresé a la biblioteca y saqué los anuarios
del sexto curso de todos los Pringados que co-
nocía: Richard, Daniel y yo mismo.
Escribí todas las cosas que sabía de ellos,
intentando descubrir qué era lo que tenían en
común. íerminé con una gran lista embarulla-
da que no me llevó a ninguna parte.
Lo último que recuerdo es que estaba escri-
biendo todo lo que sabía acerca de los hábitos
de comida de los Pringados y luego debí de
quedarme dormido.
Lo siguiente que vi es que las ventanas de
la biblioteca se habían oscurecido.
z .L
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Estaba grogui y la esquina de la mesa estaba Mi bici tenía una cadena envuelta a su alre-
impresa en mi antebrazo. Comprobé mi reloj dedor. No era mi candado en u. Era una _,gruesa
digital: 7:3'1 p.m. , cadena negra. Y un pesado candado la mantenía
No. atada fuertemente.
Mamá no estaría precisamente contenta de <<Alguien va a por mí>>, pensé. Me habían
que llegase tarde. atado la bici de tal manera que no podía escapar
Coloqué a toda prisa de nuevo los anuarios y ahora estaban detrás de mí, preparándose
en la estantería y dejé la biblioteca. La escue- para atacar. Palpé a mi alrededor buscando la
la estaba oscura y desierta. Pero afortunada- llave sin atreverme a bajar la vista. Mis orejas
mente las puertas no estaban cerradas por estaban alerta escuchando en la noche.
dentro. La nieve crujió bajo una bota.
El aparcamiento estaba iluminado por las fa- Olvidé la llave y eché a correr. No tenía
rolas de la calle. formaban dos grandes haces ningún destino en mente, solo alejarme de la
de luz amarillenta sobre la nieve y el pavimen- t rampa. Escuché una voz detrás de mí. Corrí
to. Los aparcamientos de bicis estaban bajo la más rápido.
farola de la Vieja Ala de la escuela. A igual Es con lo que Jason me había amenazado. No
distancia de la entrada de la Nueva Ala, vi que t enía que haberme enfrentado a Oonovan. Mamá
mi bici era la única que quedaba en el apar- siempre decía: <<Aunque no estés de acuerdo con
camiento. las leyes, aunque creas que son una locura, sí-
Hacía tanto frío que dolía. íenía las manos guelas o te meterás en problemas>>. Ella tenía
como si fueran aletas de pez y apenas podía razón. Yo podía opinar que el Libro del Bullying
pescar la llave de la bici de mis vaqueros. era todo lo estúpido que quisieras, pero ahora
Me la puse entre los dientes e intenté ajus- estaba viviendo en su mundo. Ellos hacían las
tarme los guantes. Entonces vi algo que me reglas.
dejó con la boca abierta y la llave se me cayó Me dirigí corriendo hacia Evergreen Road
en la nieve. sabiendo que no podría mantener aquel ritmo.
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En todos los recreos, mientras yo vagaba por Mi mochila había quedado debajo de mi es-
ahí con las manos en los bolsillos, esos abu- palda y los libros de texto me apuñalaban
sones juegan al rugby. como espadas. La nieve crujió bajo una bota.
Oía sus voces detrás de mí. Corrí hacia el Intenté darme la vuelta sobre mi estómago pe-
bosque. ro tenía los brazos débiles. Una rama se rom-
Pensé que si alcanzaba el fondo del barran- pió. Tiré de mi pie para liberarlo, pero no podía
co, podría perderlos. Ya había recorrido ese ponerme en el ángulo correcto y me costaba de-
terreno, detrás de Daniel. Si cuidaba de dónde masiado levantar la cabeza. La luna estaba
ponía el pie, tal vez lo lograría. sobre mi rostro. A salvo y lejos, en el firma-
Tras de mí, escuché un golpe y un grito. mento. Una sombra oscura la atravesó.
<<Quizás se han caído>>, pensé. Eso esperaba, - Tienes algo que es mío -dijo una voz.
porque estaba oscuro como la boca del lobo Parpadeé, ni siquiera podía levantar los
y nos habíamos alejado por lo menos un cuar- brazos para protegerme. Me preparé para re-
to de milla de cualquier rastro de civilización. cibir el puñetazo.
ffacía frío y no se oía nada, nadie podría oír- -Tienes algo que es mío y quiero que me
me cuando yo chillase. lo devuelvas -dijo de nuevo la voz.
Y chillé. La nieve en el barranco no estaba <<¿Que tenía qué?>>, pensé. Yo no les había
tan crujiente como en el aparcamiento. Debajo quitado nada. La figura se inclinó sobre mí y
de la prístina blancura había una capa de hie- la luz de la luna reflejada en la nieve iluminó
lo mortal. Un instante después, estaba bajando su rostro. Unos ojos oscuros parpadearon sin
a toda velocidad por una colina y, al siguien- expresión.
te, estaba en el suelo de espaldas mirando las -iClarence! - jadeé y tosí incontrolablemente.
estrellas. La caída me había dejado sin aliento. Es-
Tenía las piernas entumecidas y doloridas. t aba bajo la ira de un psicópata. Tosí y tosí.
Creo que tenía el pie atrapado en una raíz, Me agarró por las tiras de la mochila, dio
porque no me podía mover. un puntapié a la raíz que inmovilizaba mi pier-
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na y tiró de mí para ponerme en pie. Era sor- -Sí, creo que sí -dije yo, no muy seguro
prendentemente fuerte. Bajó la vista y me miró de mí mismo. ..
con sus ojos negros. La noche se reflejaba en ¡,En cuántos líos me había metido con este
ellos como estrellas furiosas. t ío? ¡,Qué iba a hacerme?
- ¡, íienes aquí lo que me quitaste? -me -Siento haber puesto un candado en tu bici.
preguntó lentamente, y podría asegurar que í enía que retenerte de alguna manera.
lo· preguntaba por última vez:. -Bueno, ha funcionado -dije nerviosamente.
-Pues ... -mi mente luchaba por ponerse en -La combinación del candado es sencilla-
marcha. íodo se estaba desmoronando. íenía mente 1, 2, 3; 'l. Quédatelo si quieres o tíralo.
la página, pero no sabía qué hacer con ella. No me importa.
Ahora iba a perderla y Dios sabe qué más- Sí Clarence se alejó de mí y empez:ó a subir
-dije- . La tengo aquí. a ndando por la ladera de la colina. No podía
Clarence me apartó a un lado y me arrancó creerlo. ¡,Aquello era todo lo que pensaba ha-
la mochila como un animal. La abrió violen- cerme? ¡,Ni golpearme ni nada?
tamente, histérico. Contuve el aliento mientras -Eric -dijo él dándose la vuelta-, tú y yo
la vaciaba, cada libro, cada papel. íodo salió t enemos mucho en común. Más de lo que crees.
despedido hacia la nieve hasta que consiguió Ven a mi casa este sábado. Imagino que ya
lo que quería. La hoja plastificada. El Libro del sabes ... cómo entrar.
Bullying. La alz:ó hacia la luz: de la luna y bajo
su reflejo vi un gesto de alivio en su rostro.
En un santiamén, la hoja plastificada de
papel ya había desaparecido dentro de la mo-
chila de Clarence. Volvió a meter mis cosas en
mi mochila y me la entregó.
-¡,íe ves capaz: de llegar a casa? -pregun-
tó, sin ningún rastro de emoción.
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De pie sobre mis propios el país donde estás viviendo. Ellos lo hicieron.
Puedes estar aquí sentado porque ellos ~se pa-
hombros saron toda la vida haciendo un país que du-
rará diez mil años. Será mejor que aprendas sus
nombres.
Todo el mundo se quedó completamente ca-
llado después de eso.
Tienes que mostrar respeto hacia la gente
Nadie me ayudó a mí con nada de esto. Quie- que ha existido antes que tú y ha establecido
ro que lo recuerdes. Mi vida no ha sido fácil. las cosas. Los Padres Fundadores trabajaron
A mí nadie me dio un manual sobre lo que duro para hacer los Estados Unidos. Lucha-
debía hacer. Tuve que ingeniármelas por mí ron toda su vida para que pudiésemos vivir
mismo. Algo que tú nunca experimentarás. aquí y disfrutarlo.
Este año estudiamos historia americana en Siempre sucede lo mismo con la gente que
clase de sociales. Nos enseñaron todo lo rela- hace grandes cosas. En realidad los beneficios
tivo a Benjamin Franklin y John Adams y los obtienen todos los que vienen después.
Thomas Jefferson, los hombres que escribie-
ron la Declaración de Independencia y la Cons-
titución y empezaron la Guerra Civil. Un chico
de mi clase, un auténtico idiota, interrumpió
a la profesora. Le preguntó: «¿Por qué tene-
mos que estudiar a estos viejos tipos que ya
están muertos?». Toda la clase se rio. Yo me
puse furioso.
-Porque ... -le dije a aquel idiota, levan-
tándome y gritándole-, porque ellos inventaron
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Oiario #32
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DISTRITO ESCOLAR
DE ARBORLAND - Es un informe de hace diez años - dijo
Arborland, MI 48104 Clarence sonriendo-. Desde que tengo la nota
he estado intentando contactar con l<evin Bush-
wald pero todo lo que sé es que se mudó de
Alumno: Kevin Bushwald
estado.
Edad: 11 - ¡De hace diez años? -dije-. f anto él
como sus abusones ya deben de estar en la
Kevin ha sido expulsado por atacar a dos chicos. Los
universidad. ffasta cuándo se remonta esto.
chicos aseguran que Kevin se les acercó mientras juga-
-Nadie lo sabe. No puedo creer que pensa-
ses que lo había empezado yo.
ban al baloncesto. Kevin les quitó la pelota y, cuando los
- Hiciste que Daniel se volviera un paranoico.
chicos le pidieron que se la devolvieran, arremetió con-
-Lo sé -dijo Clarence seriamente-. Pero
tra ellos a puñetazos repetidamente en el pecho. Varios
fue por su propio bien.
niños que vieron lo sucedido corroboraron la versión de
Clarence había descubierto que los abusones
los chicos.
de Daniel usaban una casa del árbol en concre-
Kevin, sin embargo, insiste en que los chicos le ata-
to para celebrar sus reuniones. De forma bri-
caron y que toda la clase está conchabada. Además dice
llante. una noche se coló allí dentro y ocultó un
que los chicos poseen un libro que les aconseja cómo escucha-bebés en el rincón para espiarles. Como
atormentar a Kevin y controlar a la clase. Recomiendo que yo. quería saber por qué había sido elegido para
Kevin asista a terapia psicológica. ser el Pringado y qué podía hacer al respecto.
El día que Daniel arrancó la página del Libro
Supervisor, David Britman del Bullying. Matt Galvin convocó una reu-
nión de emergencia de su propio trío de Malva-
dos. Clarence escuchó el plan de los abusones
para tender una emboscada a Daniel al día si-
guiente y recuperar la página .
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Preocupado por un colega pringado, pero tam- -Quisiera que te unieras a mí, Eric -me
bién babeando ante la posibilidad de tener una dijo cuando terminó de contarme su larija his-
página del Libro del Bullying, sorprendió a Daniel toria-. ffas llevado esto muy lejos. Creo que
cuando se dirigía a casa aquella noche y le in- podríamos ayudarnos mutuamente.
timidó para que le diese la página. - ¡,A qué te refieres? -pregunté.
Pensando en el futuro. Clarence fotocopió y -Estoy diciendo que deberíamos combinar
plastificó la página para quedársela. Luego fuerzas, compartir información. íe lo prometo,
llevó el original a casa de Matt Galvin y la el Libro del Bullying mantiene sus garras sobre
deslizó a través del hueco de la ventana de su ti mucho después de 6.0 curso. Yo aún tengo
dormitorio. La colocó allí en un sobre con una interés en esto. íú puedes ayudarme y yo a ti
nota: <<ffe recogido ·esta página suelta. Nadie -hizo un gesto hacia su enorme archivador-.
debe saberlo. firmado: un guardián del libro de- Quiero que leas los archivos. Yo ya los he re-
cepcionado>>. pasado unas cien veces. Necesito que alguien
El mensaje de Clarence probablemente sal- los mire con ojos nuevos. íal vez tú encuen-
vó a Daniel de llevarse la paliza de su vida. tres algo que yo haya pasado por alto. íal vez
Los abusones debieron de sospechar que esta- juntos finalmente resolvamos esto.
ban siendo espiados por abusones mayores que -Resolverlo... ¡, í e refieres a encontrar el
ellos, porque el escucha-bebés ya no volvió a Libro del Bullying?
emitir señal y trasladaron sus reuniones a otro - ¡,Qué más importante, si no? -dijo él, y
lugar que Clarence no pudo descubrir. Aún te- me ofreció la mano-. i,írato hecho?
nía la página, aunque, igual que yo, Clarence -írato hecho.
no podía encontrarle ningún sentido. Nada que Abrí un cajón, saqué un montón de papeles
explicase por qué él había sido elegido para y me puse a trabajar.
ser el Pringado. íodo lo que hizo fue confirmar
lo que sabía y r ecordarle su destino.
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Diario #33
la variedad de material que puedes encon- Ya hace un par de semanas que vengo aquí
trar en el archivo de Clarence es extraordina- cada día, de modo que se ha convertidq en un
ria. ffe estado investigando varias categorías ritual. Clarence se pasa las primeras horas
de papeles a la vez:, solo para que la cosa de la tarde en la Escuela Elemental pescando
fuese más interesante. en los cubos de basura. llega a casa alrede-
Encontré una carta de un antiguo director dor de las cuatro de la tarde: baja a leer lo
defallando todas las mejoras que habían sido que ha encontrado y lo guarda en los archivos.
hechas en la escuela desde los años sesenta. Se calienta una comida congelada y me di-
Resulta que no tuvimos secadores de manos en ce: <<¿Hay algo, Eric?>>.
los lavabos hasta el 200'1. Si encuentro algo que quiero enseñarle, se
íambién hay documentos personales. Monto- lo doy, aunque es raro que tenga algo realmen-
nes y montones de cartas de amor, notas de te bueno. Oe modo que digo: <<Nada, Clarence>>.
planes para después de la escuela, pagarés y Nada.
chuletas. Estas eran mis preferidas para leer Pero hoy he descubierto algo ... extraño.
y Clarence dice que son las que tienen más po-
sibilidades de contener pistas. Sabemos que los
abusones del libro se escriben notas unos a otros
debatiendo sus reuniones porque tenemos una.
O por lo menos Clarence tiene una. A veces
me parece que también es mi colección.
Últimamente trabajo solo. Clarence dice que
ya se lo ha leído todo y tiene muy buena me-
moria. Oice que yo tengo una mirada fresca y
que por eso encontraré algo que él ha pasado
por alto. Oe vez: en cuando baja y revisa lo
que hago. A veces trae algo para comer.
•
'Mefody 'M 4. ¿Qyíén es tu m1or amí3a?
¡Qyé_pasa cfííca! ¡:Esto es tan aburrído! ¿Por qué ¡Uf! ¡Tú!
tenemos que ayrender estas cosas que fían _pasado
5. ¿Qyíén es tu yeor enemí30?
hace un mí((ón dé años? ¡~fifí!
~quí tíenes una encuesta que fíe creado Yo no tengo un peor enemigo, pero hay alguien
que me pone de los nervios. Tú ya sabes de quién estoy
~
e~ecía(mente_para tí.
'()
~((éna(a y devuélveme(a (o más_pronto yosíb(e hablando.
'()
·,o o me moríré dé ¡¡¡aburrímíento!!! 6. ¿Qyíen te 3usta? (juro 3uardar e(secreto)
\)
~ i Siempre me lo preguntas! No sé si <<me gusta
\'O 1. ¿Qyé quíeres ser dé mayor?
() alguien>>. Pero Eric Haskins es agradable.
<> Veterinaria, porque podré pasar todo el tiempo
Es superdivertido y siempre hablamos juntos en
o
-O con perros y hacer que se sientan major cuando estén
"') el recreo, y nuestras madres son amigas.
✓
enfermos. (.,
o o
--o 7. ¿Cómo se sipone que voy a sobrevívír a esta O--
o 2. ¿Cómo será tu marído? o
cfase? o
o
¡Oh, cielos, no tengo ni idea! Ni siquiera sé
? si me voy a casar. Hay que estudiar mucho para llegar
Escribiéndome otra encuesta :-)
('
? (..-
.....J a ser veterinaria.
o o
o o
o 3. ¿Cómo es (a casa dé tus sueños? o
j La casa de mis sueños es un lugar en el Lago
Michigan donde pueda tener un velero y una canoa.
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200 201
Me sudaban las manos. Clarence sacó del parecer natural, e hice un gesto hacia la par-
microondas un plato de lasaña. Me lo puso de- te del cajón de donde había sacado la nota de
lante. Melody M. .,
- ¡Has encontrado algo, Eric? -Hum, esas... -Clarence se puso un dedo
Alcé la vista y le miré. ¡Acaso había visto sobre el labio-. El año pasado. Sí, toda esta
el temblor en mi labio? ¡Ha oído cómo me la- sección es del año pasado. ¡Por qué?
tíá el coraz:ón en el pecho? -No, por nada -dije.
-Nada, Clarence. Clarence volvió a su lectura y yo volví a la
Suspiró y se sentó en su escritorio. Empez:ó mía.
a leer el botín del día. Mis ojos regresaron a <<Eric es agradable>>. Agradable. Como una
la nota. buena película. Como una tarde de palomitas.
¡Es Melody M quien creo que es? íiene que <<Es superdivertido>>. Divertido. Alguien con
ser ella. Mi nombre estaba deletreado en negro quien te lo pasas bien y quieres tener cerca.
sobre blanco. Melody Miller es la única Melody <<Siempre hablamos juntos en el recreo>>.
que conoz:co. Siempre. No puede haberse hartado de mí.
No es como si viniese directamente y dijese <<Nuestras madres son amigas>>. Madres.
que le gusto. Pero bajo la pregunta: <<¿Quién Ambos tenemos madres y se conocen.
te gusta?>>, ella escribió mi nombre. Al leer Oh, Dios mío. Le gusto a Melody. Y le gusto
esto podrías interpretarlo como que, si tuviese lo suficiente para que ella se lo cuente a su
que decir si le gusta alguien, ese sería Eric mejor amiga, aunque no estoy seguro de a cuál
Haskins. de ellas se refiere. Melody tuvo unas cinco
íal vez: eso es ir demasiado lejos. Pero tal mejores amigas el año pasado.
vez: no. Aquí está mi nombre. En una letra re- Pero yo le gusto.
dondeada de niña. íal vez: ella no tuviese inconveniente en men-
-Clarence, ¡cuándo encontraste estas no- cionárselo a una amiga en una nota privada,
tas? Las de esta sección -dije, intentando pero cuando sucedió todo aquello del facebook
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202 203
t>iario #'3'1
fue demasiado público para ella. Quedar para Le pedí a Melody que fuese mi compañera
salir puede asustar y no deberías hacer la pro- de mates. Solo era una pequeña hoja d~ ejer-
posición donde todo el mundo pueda verlo. De- cicios, no era mucho, pero aun así, pasi justo
bería haber hablado con ella sobre aquello por delante de Jason Lokinsky, como si por es-
después. Debería haberle dicho que todo había tar a su lado no sucediera nada y dije:
sido una broma y que ella era mi amiga. En - Melody, ¡quieres ser mi compañera?
lugar de ello, la evité y al hacerlo pareció que Jason estaba allí mismo plantado, pero Me-
aquella pregunta para salir juntos fuese real lody no le prestó ninguna atención. Sonrió con
y que me sintiese avergonz:ado de ello. una amplia sonrisa mostrándome sus dientes:
Odio tener que decirlo, pero creo que Jason -¡Me parece genial!
lo hiz:o bien. Él habló con ella para pedirle pa- írabajamos juntos los enunciados de los
ra salir en privado, durante un fin de semana. problemas y, al principio, intenté no bromear
Primero lo pensaron juntos antes de hacerlo y actuar como si todo fuera muy serio. Pero
público. en el planteamiento de los problemas salían
Aunque yo aún tengo problemas para creer unos chicos -Joe, David y l<aren-, que inter-
que sea real. Siempre me había parecido que minablemente intentaban dividir entre ellos sus
ella odiaba a Jason y obviamente sabe lo malo gominolas y luego trataban de segar el cés-
que es. Creo que ella solamente sale con él ped desde diferentes ángulos y por último de
porque es popular. medir las alturas de unos mástiles. De pronto
Ella no escribió el nombre de Jason <<Lokins- Melody se giró hacia mí y dijo: <<Si a Eric
ky>>, ¡verdad que no? No. Ella escribió Eric Has- y Melody les quedan 15 enunciados de proble-
kins. Ella escribió mi nombre. mas y tardan en resolverlos 2 minutos y me-
íengo que pensar en todo esto. dio, pero Melody solo puede soportar otra media
hora de esto antes de volverse loca, ¡cuántos
problemas resolverán Eric y Melody antes de
que su cerebro explote?» .
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Me eché a reír y ella también y estuvimos así -¡Oh, vaya, una raz:ón fantástica! -dije.
durante el resto del día, bromeando, sin hablar -fambién intenté hacer que las cosas .., te
de nada serio. Después de clase, nos quedamos fueran un poco mejor a ti.
esperando a que su madre pasara a recogernos. -¡Bueno, pues no ha funcionado!
Y entonces fue cuando ella sacó el tema. Por un minuto pensé en contárselo todo. fo-
-Eric, estamos bien ahora, ¿verdad? -dijo do lo que había descubierto aquel año sobre el
ella. Libro del Bullying. Quería que ella supiese que
- ¿A qué te refieres? todo lo que Jason le había contado eran men-
-Pues a que... -ella dudó-, taún estás tiras, que yo era el único que realmente sa-
enfadado conmigo? bía lo que estaba sucediendo en aquella clase.
Aparté la mirada. Iba a confiar en ella y eso era muy arriesga-
- ¿enfadado por qué? do. Si ella le contaba a Jason que yo sabía lo
-No lo sé. Por lo que sea que haya hecho del Libro, mi investigación habría terminado,
mal este año -me tocó el braz:o-. Me has los acosadores me bloquearían el paso por to-
estado evitando. dos los medios y harían que mi vida incluso
-¡fú me has estado evitando a mí! fuese más terrible. Pero decidí confiar en ella,
-Intenté hablar contigo -dijo ella-. Has porque habíamos sido muy buenos amigos e iba
pasado de mí. a contárselo todo ... cuando él apareció.
-Bueno -inspiré-, es muy difícil para no- - ¿Por qué no te alejas de mi novia, desce-
sotros ser amigos cuando estás saliendo con él. rebrado?
Melody se cruz:ó de braz:os. Jason <<Lokinsky>> es tan elocuente ...
-Sé que a ti no te gusta Jason -dijo ella-, Se puso detrás de mí, con Adrian y Oonovan
pero se está portando mejor. a ambos lados, dándome empujones.
-Es una mala persona. -Jason, para -dijo Melody en voz: baja, tan
-Estoy intentando que mejore, es una de las baja que Jason fingió que no la había oído.
raz:ones por las que acepté salir con él. -fú no le gustas, Pringado .
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Los chicos que estaban en la parada se die- ante vuestros amos! ¡Os han engañado a to-
ron la vuelta para mirarnos. dos!>>. Pero las palabras no querían salir de mi
-iQué te has creído, ffaskins? -intervino garganta. Mi cerebro estaba colapsado"' por la
Adrian-. ¿Crees que eres guay? odiosa cara de Jason, cantándome. Adrian, Oo-
-Eres gay -dijo Oonovan sin emoción. novan, todos los niños.
El Libro le había cambiado completamente. fodos excepto Melody. Ella se quedó tras el
-¡Eres el Pringado! ¡Eres gay! ¡y vamos a grupo. Y creo que también estaba gritando.
hacer que lo pagues! -se puso a cantar Jason <<¡Parad ya!, ¡callad!>>, leí en sus labios.
<<Lokinsky>> interponiéndose entre Melody y yo-. Sin embargo, el grupo era demasiado rui-
¡Eres el Pringado! ¡Eres gay! ¡y vamos a hacer doso y demasiado compacto. No podían oírla ni
que lo pagues! podía pasar a través de ellos. Estaba desbor-
Se inclinaba sobre mí, con el rostro ardien- dada y, cuando sus ojos encontraron los míos,
do de ira. Adrian y Oonovan se unieron al vi que estaban llenos de lágrimas. Pero no
canto. Me habían rodeado. Yo estaba retroce- intervino para defenderme. Se fue corriendo
diendo. Otros niños en la parada del autobús y no puedo culparla. No hay nada que ella
también empezaron a cantar. pueda hacer y arrastrarla a ella a todo esto
-¡Eres el Pringado! ¡Eres gay! ¡y vamos a lo único que haría es que la vida fuese peor
hacer que lo pagues! para todos.
Compañeros de nuestro curso, pero tam- De modo que yo también eché a correr.
bién otros niños más pequeños que n1 siquiera En la dirección opuesta.
me conocen. ¿Por qué me odian si no me co-
nocen?
1odo es un engaño. Estos abusones están ju-
gando con todo el mundo, manipulándolos para
que hagan lo que ellos quieran.
Me hubiera gustado decir: <<iSÍ, inclinaros
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Diario #35
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Diario #36
ces tienes que actuar rápidamente y tal vez la Cada día, durante las últimas dos semanas,
violencia física sea la única opción. Si has he- siempre que intentaba levantarme par~ ir al
cho bien tu trabajo dándole mala reputación baño, Jason y Adrian se me quedaban mirando.
al Pringado entre los profesores, no se chivará. ffe estado intentando aguantarme hasta que
No le dejes marcas. También hablan. terminan las clases.
Pero el experimento de ciencias que había
estado llevando a cabo con mi vejiga hoy ha
salido mal, porque mi madre me ha metido otra
vez dos zumos extra gigantes para el almuerzo.
íenía que ir al baño.
Escuché sillas rascando el suelo al apartar-
se de la mesa del comedor. Los íres Malvados
iban a por mí otra vez.
Sin embargo, yo tenía un plan.
El plan era correr. Pero no a la desespe-
rada. Me dirigí al ala de la escuela donde na-
die va a los lavabos, ni siquiera los conserjes.
Corrí hacia el Ala Antigua.
Eché a correr por el largo vestíbulo. Los
ladrillos ro jo intenso de la Nueva Ala pasaron
rápidamente hasta que llegué a la placa que
marcaba el Ala Antigua. Desde allí hacia fuera,
la escuela estaba construida con bloques de ce-
mento blanco.
A nadie le gustan esos aseos. Los lavabos
están rotos y rocían una niebla permanente en
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el aire. Era como caminar en una jungla. El marca el final del Ala Antigua y el principio
espejo está roto y. al tirar de la cadena, los de la Nueva.
...
urinarios inundan el suelo con agua y pis.
Apestan. Pensé que los íres Malvados_nunca me
encontrarían ahí.
Justo cuando me estaba relajando, el urina-
rio me echó un chorro en la cara.
<<Dios>>, pensé, limpiándome el agua con la
mano, <<el Ala Antigua es tan vieja>>.
Y entonces es cuando se me ocurrió: todo lo
bonito está en la Nueva Ala, mientras que to-
das las cosas cutres están en el Ala Antigua.
Y existe una razón para ello: el Ala Antigua es
el colegio tal y como era originariamente. La
Nueva Ala se construyó después.
Me temblaban las manos. ffice lo que pude
para lavármelas entre la bruma pero terminé
empapándome la camiseta. No importaba.
Salí corriendo de los aseos. íenía las zapa-
tillas húmedas por el suelo del baño, pero en
lugar de resbalar, se deslizaban por el pasillo
más rápidamente de lo que nunca había corri-
do. Los bloques de cemento pasaron disparados.
Sus motivos pintados de blanco me guiaban íenía que salir de la escuela.
hacia mi objetivo. Eché el freno y me detuve Ya.
con un chirrido, justo delante de la placa que íenía que llamar a Clarence .
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estado siguiendo la pista inútilmente durante íenía un aspecto de incomodidad que no com-
tanto tiempo que se sentía cómodo con su prendí. íras cuatro años dediccíndole su vida a
rutina. Cada día encontrar papeles, archivar- ciquello, pensé que estaría saltando de alegría.
los, irse a la cama ... Ahora había un trabajo -ire apetece comer cilgo'? -dije-. Pcira
detectivesco que hacer para conseguir resulta- celebrarlo o algo así.
dos reales. Clarence parecía confundido.
· -Le conté que estaba trabajando en un pro- -En realidcid, tengo mucho trabajo que ha-
yecto sobre la historia del distrito escolar de cer hoy. Deberes, ya sabes. Así que de veras
Arborland. Dijo que la escuela no tiene ningún no puedo ...
anuario o lista de alumnos de antes de 1998. -Vale -dije, captando la indirecta-. ¡De
Es el año en que enviaron todo a la ciudad pa- modo que te veré el sábado'?
ra ser digitalizado. Hay un archivo en el Ayun- -Sí -dijo-. Por supuesto.
tcimiento que gucirdci todas esas cosas viejas, No me acompañó a lcis escaleras ni nada.
pero no se pueden permitir un bibliotecario Cl Solo me dijo adiós con la mano y observó cómo
tiempo completo, de modo que solo estcí abier- yo me iba.
to durante un horcirio un poco extraño. fui en bici a casa. Sospecho que tendré que
-¡Cuándo está abierto'? -me preguntó Cla- pensar mcís en esto.
rence.
-De las 13:00 a las 15:00 los días laborci-
bles y de lcis 12:00 ci las l«l:00 los sábados.
-De modo que esta semana no podemos ir
-dijo Clcirence-. Vo estoy en el cole.
Justo. Pensaba que Clarence sugerirÍCl que
hiciésemos campana.
-Muy bien, pues el sábado entonces -dijo
Clarence frotcíndose lcis manos.
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Diario #'38
Estuve esperando delante de la casa de Cla- Creo que había imaginado guardas de seguri-
rence durante casi una hora. dad musculosos con wall<ie-tall<ies vigilando el
Llegué allí a las 11 :'10. Imaginaba que po- centro de poder de la ciudad. Por el contrario,
dríamos ir en bici al Ayuntamiento tan pron- es un pequeño edificio lleno de oficinistas de
to abriesen. Pero nadie contestó al t imbre. La aspecto aburrido. Nadie me preguntó qué estaba
puerta trasera que Clarence mantenía abier- haciendo allí, no fuera que les hiciera traba-
ta para mí, sin echar el cerrojo, no se abrió. jar de verdad. Vi que había muchos ordenadores
Y no hubo respuesta cuando llamé a golpes en con solitarios.
las ventanas del sótano. Seguí los carteles sorprendentemente claros
rodas las luces estaban apagadas. Ningún (Sala Municipal de Archivos ➔) por toda la par-
coche subía por la carretera ni había ningu- t e trasera del edificio. Una puerta marrón ape-
na llamada a mi móvil. Clarence no tiene telé- nas era visible en la pared de ladrillos también
fono móvil de modo que llamé al fijo de su marrones. Pero había un cartel que decía: <<Sa-
casa. la Municipal de Archivos>>. Empujé la puerta.
<<Esta es la residencia de los Corbinder. Una mujer de pelo plateado y descalz.a, con
Ahora no estamos en casa, así que, por favo r, su pie desnudo sobre un escritorio, pegó un
deja tu mensaje>>. Era la voz. de la señora grito y casi se cae de la silla.
Corb inder en el cont estador. Salté hacia atrás y cerré la puerta. fue co-
No dejé ningún mensaje. Eran cerca de las mo si hubiese entrado en el baño de señoras o
13:00 en punto y no sabía cuánto tiempo ne- algo así. Comprobé el cartel de la puerta otra
cesitaría. vez.: <<Sala Municipal de Archivos>>.
El paseo en bici estuvo bien, pero no tuve -¡Jovencito! ¡Jovencito! -escuché un grito
a nadie con quién hablar. Aquello me puso ner- ahogado a través de la puerta.
vioso. Seguí imaginándome escenarios en mi Abrí una rendija. La mujer del pelo plateado
cabez.a. Cómo sería el lugar, qué iba a decir. se había incorporado y respiraba agitadamente.
Dentro del Ayuntamiento, nadie me miró raro. Me hiz.o un gesto para que me acercase.
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-Lo siento, jovencito. No quería asustarte. Arborland del 1987 impresas en rojo. Lo. encua-
Oi unos pasos en el interior y miré alrededor dernación estaba agrietada y algunas páginas
de la habitación forrada de libros. se habían soltado, por lo que todo el ""á lbum
-Es que me has asustado -dijo ella-. Aquí estaba sujeto con gomas.
no suele venir nunca nadie. Pero está abierto. -Ahora ten cuidado con eso, si haces el
Intentaba ponerse un par de calcetines grises favor -hizo un gesto hacia un pequeño escri-
miéntras me hablaba. Por la longitud desigual torio que estaba junto a la vento.na- . Puedes
de las uñas de los pies, sospecho que se las leerlo allí, pero me temo que no puedes llevár-
estaba cortando cuando llamé a la puerta. El cor- telo fuera de la habitación.
taúño.s sobre el mostrador era otra pista. En mis manos tenía el libro que podía des-
-No pasa nada. Estaba buscando un anua- velarlo todo y apenas tenía treinta páginas.
rio ... Escuela Elemental de Arborland de 1987 Con cuidado quité las gomas. Página tras pá-
-dije. gina, miré las fotos pobremente impresas de
-Muy bien -dijo ella, tirando esquirlas de la construcción de la Nueva Ala y la inaugu-
uñas a la papelera-. Veamos qué encontramos ración. fotos oscuras y granuladas de chicos
para ti. en sus clases de lengua, matemáticas, manua-
f odos los libros se alzaban sobre las estan- lidades, música: las mismas cosas que nosotros
terías protegidos por hojas de cristal cerradas. hacemos todos los días, excepto que las perso-
Hizo tintinear unas viejas llaves de hierro y nas de aquellas fotos o.hora ya eran adultos.
puso la apropiada en la cerradura. La puerta Pero uno de ellos dejó algo atrás. Busqué la
de cristal se abrió y, con una exactitud increí- página de los alumnos de sexto curso conscien-
ble para alguien que no había saco.do un libro te de que alguno de aquellos cincuenta mucha-
de aquellas estanterías en un montón de tiem- chos era el autor del Libro del Bultying.
po, tiró del anuario de 1987 y me lo entregó. Las fotos ocupaban la mayoría de la página,
La cubierta era una foto descolorida de la directamente de arriba abajo. Busqué pistas en
escuela con las letras Escueta Elemental de sus nombres y rostros.
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Diario #39
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Todo en su justo lugar tienes a los tipos raros, que no son demasiado
populares, pero pululan de grupo en _grupo,
manteniendo los pocos amigos que hicieron en
párvulos. Este orden social es inestable, pero
si lo duplicas, con toda esta horda de nuevos,
todos intentarán demostrar que son los más in-
Mí ·madre siempre dice: «Lo primero es poner teresantes.
orden en tu casa». Creo que es de un libro de Era una pesadilla.
autoayuda, pero nunca supe qué significaba has- Yo desarrollé mi sistema al margen de esta
ta este año. locura para poner orden en mi casa, tal como
Cuando las escuelas del distrito se fusiona- diría mi madre. Me tomó bastante tiempo de
ron, vinieron un montón de chicos nuevos a observación y de razonamiento, de prueba y
nuestra clase de sexto curso. error, pero, finalmente, moldeé mi clase para
Y trajeron problemas. convertirla en un lugar agradable, donde yo esta-
Todos estábamos incómodos por ello. Chi- ba arriba y todo el mundo lo sabía.
cos que habían sido amigos durante años se Realmente ha sido un año fantástico y no
peleaban por dejar entrar a nuevos chicos en habría podido hacerlo sin mi Pringado.
su camarilla. La gente sentía celos y estaban Buena suerte, Guardianes del Libro.
furiosos entre ellos. A veces dos grupos, uno
de cada escuela, eran tan parecidos que tenían
que unirse o luchar.
Nuestro orden social estaba patas arriba.
Los chicos guapos y atléticos están en la parte
superior. Luego están los chicos que se reúnen
en grupos porque les gusta el skate o las revis-
tas de moda o el balonmano o el baile ... Luego
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Diario #1.10
Whitner entró en lo. clase masticando un pello.do.mente lo. puerto.. <<Mierda, se ha vuel-
sándwich de atún. lo sé porque podía olerlo. to loco>>, pensé. Salí arrastrándome pe,.90.do o.
Es bastante informal paro. comer y no tiene lo. pared y asomé la cabezo. por el marco de lo.
habilidad paro. caminar y masticar o.l mismo puerto.. Iba por el pasillo resoplando directo
tiempo. Estaba concentro.do en limpiarse lo. hacia lo. Nuevo. Ala.
barbilla con uno. servilleta y chuperretear el ffo.cio. el despacho de Clo.rk.
o.tú'n que tenía pego.do en los dedos. Se diri- fenío. que salir de allí. A mi mente regresa-
gió o. su meso. sin mirar lo. pizarra. ban sin querer fragmentos de lo. charlo. sobre
Yo estaba hecho un ovillo. lo. pizarra tam- violencia de Clo.rk. Según las Nuevas Reglas,
poco ero. tan grande. ¿Y si Whitner se do.bo. lo. o.coso.ro. un profesor y hacer pinto.das en uno.
vuelto. y me veía allí detrás? No debería. ha- clase son motivos paro. uno. expulsión de sesen-
berme coloco.do tan cerco. de lo. escena del ta días.
crimen. Tan solo quedaban unas pocas semanas pa-
Alzó lo. visto. hacia lo. pizarra y dejó de co- ro. terminar el curso. No tendría derecho ni
mer su sándwich. Escuché claro.mente el chas- siquiera o. asistir o. lo. escuelo. de vero.no. Ten-
quido de su lengua y cómo se le desenco.jo.bo. dría. que repetir sexto. Sería el Pringo.do de un
lo. mandíbula dejando el atún allí colgado de nuevo grupo de chicos.
sus labios. Pasó un largo y tenso minuto antes Debía averiguar qué pretendía hacer Whit-
de que consiguiese tragar. ner. Me quité los zapo.tos y le seguí, en silen-
El sándwich fue o. po.ro.r o. lo. papelero.. Apre- cio, pasillo o.bajo.
tó los puños y dio un punto.pié tan fuerte o. lo. Giró y se metió en las oficinas o.dministro.-
papelero., que esto. rebotó contra lo. pared y tivo.s. Vi que o.brío. de golpe lo. puerto. de Clo.rk.
dejó el sándwich a medio comer pego.do en los lo. cerró tras él con un chasquido y luego oí
ladrillos. lo. peste o. o.tún llenó lo. habitación. gritos.
Se dio lo. vuelto. demasiado deprisa paro. A Whitner gritando.
que yo pudiese ver su expresión y abrió atro- lo oía amortiguo.do, pero reconocí el tono .
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Estaba más rabioso de lo que nunca le había Me toqué la camiseta y estaba toda suda-
oído. da. Adrian me vio el primero. Oio un gqlpecito
r ambién veía a ambos a través de la ven- a Jason en el hombro y ambos echaron a andar
tana de cristales esmerilados. El señor Whit- hacia mí. Miré a mi alrededor buscando algún
ner de pie ante Clark, apuntándole a la cara lugar adonde ir, mi cerebro no registraba los
con su dedo. Clark sentado a la mesa, estupe- colores y las formas correctamente. íodo pa-
facto. Pegué la oreja. recía fuera de lugar y extraño.
-Eres infantil, ridículo ... -gritaba el señor Sonó el timbre. Jason y Adrian desapare-
Whitner: Clark replicó algo pero en voz dema- cieron.
siado baja para oírlo-. fodos estos años ... Sin embargo, yo no regresé a clase. ¿Cómo
-chilló Whitner- y sigues siendo el mismo fony asistir mientras todo aquello estaba ardiendo
Clark. ¡Mi padre se está muriendo y me sigues en mi mente? focaba clase de música. Algunas
insultando! ¡Como si aún estuviésemos en la veces la profesora de música no se acordaba
Escuela Elemental! de pasar lista.
Oi media vuelta para salir pitando y ... Olvida las consecuencias, me dije. Sencilla-
¿Como si aún estuviésemos en la Escuela mente seguí pensando en aquello ...
Elemental? Él no estaba en el anuario. Él no estaba.
fenía que irme de allí. En cualquier momen- Ya sobre la bici, miré el reloj: habrían
to, Whitner podía abrir aquella puerta y encon- transcurrido diez minutos de clase y ya esta-
traría al vándalo encorvado sobre sus zapatos. ba a medio camino del Ayuntamiento. Eran las
Corrí de vuelta a la cafetería. 12:50 pm . Abrirían dentro de diez minutos.
fodo el mundo estaba comiendo como si fue- Justo a tiempo.
se un día normal y corriente. Para ellos el Oespués de subir los escalones, atravesar
mundo seguía igual. Continuaban comiendo, las pesadas puertas dobles, rodear las sillas
igual que si un meteorito se dirigiese hacia la del vestíbulo y las plantas, corrí hacia la mi-
fierra y ellos no lo supieran. núscula sala de archivos del fondo. Mis pasos
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resonaban contra las baldosas del suelo con Alcé la esquina del papel con el dedo índice
tal energía que incluso el más gandul de los de la mano derecha. Pasé la página COJ:flO al-
campeones de solitarios asomó por detrás de guien daría la vuelta a una roca que ocultase
sus ordenadores para ver quién era aquel jo- una guarida de odiosas cucarachas.
vencito con tanta prisa. Allí, en la esquina superior izquierda de la
Abrí de golpe la puerta del Archivo con la página siguiente había el resto de la sección
fuerza de un huracán y la señora descalza de de fotos de 6. 0 curso. Diez caras sonrientes que
pelo plateado soltó otro de sus gritos y arras- no había visto antes.
tró todas las cosas del escritorio al suelo con Especialmente la foto de un chico rubio de
ella. ojos azules, con el pelo perfectamente peinado,
-Lo siento -dije mirando al montón-, pero luciendo una sonrisa que podría conquistar el
necesito ver otra vez el anuario de la Escuela mundo.
Elemental de Arborland de 1987>>. íony Clark.
La mujer estaba encajada en su silla caí- Autor del Libro del Bullying.
da, de modo que alzó la mano con la llave de
hierro negro en su palma abierta.
La tomé y abrí el armario correcto de me-
moria. En unos pocos segundos el libro estaba
en mi regazo y pasando las hojas cuidadosa-
mente llegué a la página de fotos de 6. 0 curso.
íal como había memorizado, no había ni uno
de los cincuenta retratos que se pareciera al
director Clark.
Aunque, suspiré, los retratos ocupaban toda
la página sin dejar ningún espacio debajo. Las
fotos no finalizaban en aquella página.
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Diario #'11
Clarence sigue sin contestar al teléfono. Ya Como las clases van a terminar pronto, Whit-
hace más de diez: días. íambién es su caso. ner ya no va a ponernos más ejercicios. íene-
Pero es como si de nuevo estuviese solo y me mos una tarea final: entrevistar a la p"ersona
siento raro. que más admiramos.
Quiero que me diga qué debo hacer. No veo Imaginad la mirada de pena en sus ojos cuan-
claro qué camino seguir sobre esto. do le dije quién sería mi entrevistado. Imaginad
íengo que hablar con el director Clark, es ob- la rabia que debió de sentir cuando le dije que
vio. Pero me supera, no sé cómo acercarme a él. admiraba al demonio de su infancia.
íengo que encontrar la forma de verme con Pero no es lo que usted cree, señor Whitner.
él a solas. íengo que hacer que me hable del No lo voy a hacer para que este monstruo
Libro del Bullying. íiene que contarme cómo sonriente se sienta especial. Lo voy a hacer por
eligen al Pringado. las personas como usted y como yo. Lo estoy
ffa sido el primer Pringado quien me ha ser- haciendo por nuestra reden~ión.
vido la oportunidad en bandeja. El director Clark nos ha robado algo a
El señor Whitner lleva muy callado toda la ambos.
semana, hundido. Algunos dirían que es porque Y voy a hacer que nos lo devuelva.
su padre está enfermo. Nos contó que su pa-
dre tenía cáncer y que por esta raz:ón no asis-
tía a la escuela los lunes. Pero esta situación
ha durado todo el año. Si me lo preguntáis a
mí, lo que sucede es que Whitner ha regre-
sado al pasado. Pensó que había escapado de
ser el Pringado, pero no puedes librarte. Vive
en ti. Lo único que hiz:o falta fue una palabra
escrita en una pizarra para recordarle que él
no es nadie.
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Diario #'12
-¿Cómo era usted cuando tenía mi edad, -En realidad no frecuentábamos los mismos
señor Clark? círculos. ...
Estuvimos hablando un rato en su despacho. - ¿Quiere decir que ustedes eran ... enemigos?
Oijo que le había sorprendido que le eligiera -No, Eric, no -Clark se arrellanó mejor en
a él para entrevistarle. Le dije que producía su asiento-. Y, sinceramente. no sé siquiera
un enorme efecto entre los alumnos. más de lo cómo puedes pensar algo así.
qué él pensaba. Creo que los abusones del Libro no consi-
-Bien -dijo Clark, tensándose un poco- . creo deran que los Pringados sean sus enemigos, no
que era un chico bastante normal y corriente. en el sentido en que lo consideramos nosotros.
Seguramente me gustaba leer más que a la ma- - ¿Así que usted nunca se burló de él, ni le
yoría. Una infancia feliz:. torturó, ni le humilló en clase?
-iíambién era escritor? -dije. tomando a l- - ¡Eric ! -Clark torció el rostro en un gesto
gunas notas. de incomodidad-. No sé de dónde has... ¿El
- ¿Escritor? Bueno ... - Clar k se acarició la señor Whitner ha estado ... ? -me miró, preocu-
nuca, como si estuviese accediendo a décadas pado.
de viejos recuerdos-. íal vez: un poco. ffe oído - él no me ha dicho nada, director Clark
que tú eres un poco escritor, Eric. El señor -tomé más notas-. Solo estoy haciendo pre-
Whitner me lo ha comentado. guntas en general. Intentando comprender có-
-Sí, hablemos de usted y de l señor Whitner mo era la escuela cuando usted era pequeño,
-dije-. Creo que los dos fueron a la escuela porque, verá, hoy en día en la escuela, este
juntos. tipo de cosas son bastante comunes.
-Eso es cierto. ¿Cómo lo sabes, Eric? Clark tomó una pluma de oro y la hiz:o ro-
- ¿Eran ustedes amigos? dar con fuerz:a entre el pulgar y el índice.
Clark miró a través de la ventana esmerilada -¿íienes problemas en la escuela, Eric? Por-
de su oficina hacia el pasillo, a lo mejor recor- que ya sabes que tenemos mecanismos para
dando el rec iente estallido del señor Whitner. tratar este tipo de situaciones .
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Por el rabillo del ojo, vi cómo Clark se cu- me ha recordado un absurdo grafiti que al-
bría la boca. guien escribió en su piz:arra. ..
-El libro -proseguí yo- instruye a su Como un luchador olímpico en una maniobra
guardián acerca de cómo elegir a un chico, con de contraataque perfecta, Clark había escapa-
una descripción específica, para que sea lo más do de mi llave al cuello y me había derribado
bajo de lo más bajo. Le llaman el Pringado contra la colchoneta.
-me senté frente a él al otro lado de su es- -Ya conoces las <<Nuevas Reglas>>. Toleran-
critorio-. ¡Cuando usted venía a esta escuela, cia Cero. Cualquier estudiante que haga pintadas
señor Clark, existía tal leyenda? ¡++a oído ha- en la propiedad de la escuela será castigado con
blar del Libro? ¡++a oído hablar del Pringado? sesenta días de expulsión. Más otros sesenta
Clark apoyó los braz:os sobre la mesa y se días por acosar a un profesor.
quedó mirando una verruga en su mano. Lue- Su tono de voz: era completamente diferente.
go, mirándome de reojo, frunció los labios de El autor del Libro del Bullying estaba mostran-
una forma que yo no le había visto antes. Creo do su verdadero rostro.
que acababa de descubrir una parte secreta de -Ni siquiera podrías recuperar el tiempo en
él, algo que nunca había mostrado al mundo la escuela de verano -me dijo.
exterior, donde ocultaba sus secretos más os- -pero el Libro ...
curos. Y yo estaba llamando a la puerta. -¡Qué pasa con él?
- ¡Sabes que el señor Whitner tuvo un inci- Me miró sin ningún tipo de expresión.
dente en su clase recientemente? -Clark clavó -Usted lo ha encubierto, ¡verdad? -me
los ojos en mí-. ¡++as oído algo de eso? sentí hundido-. ¡Cómo iba a ser posible que
Sentí cómo el miedo subía por mi garganta no lo supiera? ¿Cómo iba a haberlo olvidado?
y me recosté en mi silla. Clark se recostó en su silla. Me observó
-No -dije. evaluándome, en silencio.
Clark asintió, con suficiencia. Es posible que logre que le despidan, pero
-Porque esa <<leyenda>> de la que tú hablas si él demuestra que yo hice una pintada en la
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Diario #413
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-fe vas. ¿Qué te importa ya? fendrás una Estoy resolviendo un caso que empezó hace
nueva vida. muchos años. He llegado muy lejos y a ~.él no
-Bueno ... le importa. Se muda al norte, a Petoskey.
-Has acabado con esto mudándote. Pero yo Es un lugar muy bonito. Solíamos ir los ve-
no puedo irme -empecé a gritar-: ¡Yo estoy ranos cuando era pequeño.
aquí atrapado! Este es mi mundo, Clarence. Yo estoy en un callejón sin salida. Aún no
¡Así que vete a la porra! sé nada sobre el Libro del Bullying y nada so-
Y estampé el teléfono contra el suelo. bre el Pringado, excepto lo que se siente sién-
Clarence siguió hablando. dolo. El año que viene aprenderé a ser un
-Eric, cálmate -decía con la voz apaga- Pringado de Secundaria.
da-. fienes que escucharme. Mamá dice que no podemos mudarnos. Debe
Recogí el teléfono móvil del suelo. mcís dinero de la hipoteca de lo que vale la
- ¿Qué quieres? casa actualmente, de modo que nunca podrá
-Escucha -dijo él-. ¿Qué quieres que haga venderla. Eso es lo que ella siempre dice.
con los archivos? Ahora ya no los necesito. Si Estoy cansado.
tú quieres yo puedo ...
-No quiero los archivos, Clarence. Lo que
quiero es librarme de esta pesadilla. Por mí,
si quieres, quémalos. Me da igual.
Y colgué.
Clarence me había estado mintiendo. Durante
todo este tiempo. Él lo sabía. Sabía que iba a
escapar. Noté que algo iba mal cuando le expli-
qué lo de la placa. Mientras yo me había estado
dejando las cejas en esto durante estas últimas
semanas, Clarence estaba planeando su huida.
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Diario #'l'I
ffoy nos han dado nuestros anuarios. ffa n -Desde luego.
montado una fiesta y han repartido helados. -Sí, tú ya lo sabías. No sé qué estaba
íodos iban de un lado a otro firmándose los pensando para haber salido con él.
anuarios. A eso preferí no contestar.
Yo no le pedí a nadie que me lo firmase por - ¿Qué vas 4 hacer este verano? -se me
miedo a lo que pudiese escribir. Colin insistió. quedó mirando: sus ojos eran de un marrón un
Escribió: <<Me alegro de haberte conocido poco más claro bajo la luz del sol.
este año. Espero que sigamos siendo amigos en No sé cuándo ha empezado a hacer tanto
Secundaria>>. Pensé que debería haber sido calor ...
más agradable con él. -¿Eric? -dijo ella-. Que qué vas a hacer
Mi foto está ahí con los demás alumnos de este verano ... Podríamos quedar ...
6. curso, sobre un fondo púrpura. Llevo el
0 Intenté escribir e1lgo en su anuario, pero no
pelo repeinado y visto el jersey que mamá me pude poner en palabras mis sentimientos. Elle1
hizo poner. No parezco demasiado feliz. continuaba escribiendo enérgicamente en el mío.
Me pregunto si algún niño mirará esta foto Le devolví su anue1rio. Ella me devolvió el
algún día. Algún futuro Pringado buscando res- mío.
puestas. Me gustaría hablar con ese niño. Qui- Lo cerré sin leer el mense1je. Vio que yo no
siere1 decirle: <<Olvídalo>>. habíe1 escrito nada. Solo mis inicie1les: e. ff.
Melody también me pidió firmar mi anuario. frunció el ceño un poco y bajó la vista mi-
-Jason y yo hemos roto -me dijo mientras rando la punta de su nariz.
firmaba-. Dice que quiere estar libre de cara -¿Crees que soy mala? -me preguntó.
a Secundaria. Sus pecas se han resaltado. Y su piel pare-
Intenté pensar en algo que decir a eso. ce distinta. Parece mayor.
-Ah ... El altavoz soltó un chasquido y todo el
-Por mí, mejor -dijo Melody-. De todos mundo se sobresaltó. Colin se manchó de he-
modos es un idiota. lado la camiseta.
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tuve algunos problemas. en casa, en la escue- -iY estcí vacía, eric! -gritó-. jVacía! Mis
la. estaba confundido -puso los ojos en blanco, calcetines se perdieron hace años. No ha,y na-
buscando las palabras-. e hice algo extra- da cierto en esta leyenda, eric. ¡Allí no hay
ño. Hice aquel ... -me miró significativamente-. nada!
Me hice con unos calcetines de gimnasia. Me fallaron las rodillas y mis hombros es-
- ¿Qué? -dije. caparon de la sujeción de Clark. Aterricé en
-Sí, yo tenía un par de calcetines de gim- la silla.
nasia -dijo con énfasis-. eran horribles. Pero -¡Nada, eric!
se me ocurrió la idea de pasarlos de unos a Clark se echó a reír. estaba eufórico. Como
otros. A los chicos del curso inferior al mío, un hombre liberado del corredor de la muerte.
y que ellos también los pasasen a su vez, y que Por lo menos, libre del anzuelo de su propia
eso durase para siempre ... mente. Pero yo estaba furioso.
-Durante veinticinco años -dije. el libro estaba jugando conmigo. ¡Dejando
-De modo que puse mis calcetines de gim- que me acercase y luego alejándose! Mis pies
nasia en mi taquilla. Con unas instrucciones hicieron que me levantase de golpe.
para quien los encontrara, para que los pasa- - ¿Qué es el Pringado? -le grité-. ¿Cómo-
ra y para que los guardasen allí. en la taqui- eliges-al-PRINGADO?
lla 337, mi número preferido. Clark se quedó pegado a la silla, sorprendido.
-íaquilla 337 -repetí. -escúcheme, director Clark. ¡Yo no quiero
-Pero -gritó Clark- fui allí esta mañana. esta vida para siempre! -se me quebró la
los había olvidado hace tantos años, que no voz-. ¡Dígame cómo no ser el Pringado!
podía creer que estuviesen aún allí. fui a la -eric, no sé lo que me estcís pidiendo.
taquilla, y como tengo una lista con todas las -¡Sí que lo sabe! -le chillé-. ¿Por qué no
combinaciones, la abrí, eric. esta mañana. quiere decírmelo?
los ojos de Clark se abrieron mcís y me la señora Bellemont, la secretaria de Clark,
agarró por los hombros. entró de golpe y me agarró por los brazos.
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Oiario #'IS
Me C1rrC1stró por l<l oficinCl, con mis tC1lones Ahor<l estoy escondido en los urinClrios.
clC1vC1dos en l<l C1lfombrC1. Oespués de lCl confrontC1ción con ClC1rk, me
-¡los Clbusones del libro olvidCln, señor sentía fC1tC1l. fui a la SCllCl de l<ls tC1quillC1s· pC1rC1
Cl<lrk! ¡Ustedes se hC1cen Cldultos! -grité-. comprobarlo por mí mismo.
¡Nosotros vivimos est<l vidCl pC1rC1 siempre! NecesitC1ba ver la tC1quillC1. la número 337.
Cl<lrk no dijo l\i unCl pC1lC1brC1 más. Se me ClClrk la hC1bÍC1 dejC1do abierta. VC1cía. No hC1bÍC1
quedó mirando, como un niño C1SustC1do. la ningún Libro del Bullying. Quizá en otro tiempo
puertCl de su oficinCl se cerró. lo hubo, C1horC1 no.
lCl señora Bellmont dijo que l<l únicCl ra- Me sentía triste. ffabíCl llegC1do muy lejos
zón por lCl que no me expedientC1bC1 erC1 porque parCl resolver el misterio. Estoy tC1n C1trC1pado
ese erCl el último día y no le apetecíCl hC1cer en mi propia vidCl. Recuerdo cuC1ndo DonovCln
todo el pC1peleo. mencionó por primera vez el libro, hace Y<l
tC1nto tiempo. lCl Cldvertencia de RichC1rd. En-
contrar a Matt GCllvin, conocer a OClniel fried-
mCln. lCl primerCl páginCl robadCl. Estar tan
cercCl y tan lejos Cll mismo tiempo. la placCl.
Whitner y Clark. los archivos. lCl cC1rtC1 sobre
los proyectos de construcción.
ffe estC1do llevando mi diario Cl todC1s pC1rtes
como un registro. llevo todCls las entradas con-
migo todo el tiempo. Incluso la de la cons-
trucción de 1987. iodo lo que se hizo en l<l
escuela desde los C1ños sesentCl del siglo pC1SC1do
centrándome en unCl fechCl: l<l de la C1mpliC1ción
de l<l Nueva AlCl. Miré de nuevo l<l cC1rtC1 pero,
estCl vez, mis ojos bajaron levemente. Vi esto:
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'
1989: Se han añadido 28 nuevas taqu illas para de mi abuelo. Distinguí unas pocas hojas su-
acoger y expandir el programa de atletismo. De jetas de cualquier manera en una carpeta de
nuevo, los fondos son proporcionados por Ronald piel gruesa. ían normal. ían cerca. ""
y Harriet Stullman. Empecé a hiperventilar y me refugié en el
baño para recuperar el aliento.
Me di cuenta entonces de que el número 337 -No puede ser ...
en la taquilla estaba pintado. No impreso como
los demás números. Saqué una moneda y em-
pecé a rascar el número con saña. La vieja
pintura de hacía veinte años se desmenuzó fá-
cilmente bajo mis dedos y reveló un número
más antiguo debajo de él: 309.
Las taquillas fueron añadidas después de
que íony Clark se graduase y algunos de los
números habían sido reasignados. iEl director
Clark había ido a mirar en la taquilla equivo-
cada aquella mañana!
Si la 309 se convirtió en la 337, entonces
la 337 debía de haberse convertido en la 365.
fui a la 365, rasqué el número pintado y que-
dó reducido a polvo. El verdadero número me
sacudió.
Bajo la tenue luz de la sala de taquillas
vislumbré algo entre las rejillas de la taqui-
lla 337. Noté un ligero olorcillo de almizcle,
el olor a papeles antiguos del húmedo sótano
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Diario #'16
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zumbido grave y unas risas. Unos agudos chi- los guardianes del Libro eligiesen a Jason. Si
llidos de gozo y el sonido de un pequeño mo- no, este año habría sido un asco. ~-
tor acelerando. Y luego, ;crash! Reaparecieron -iY yo me alegro de que Jason nos eligiese
montados en un carrito de golf reventando como sus lugartenientes en lugar de como Prin-
los arbustos del patio de Adrian, pisando las gados! -se echó a reír Donovan.
flores. -Sí, ffaskins lo ha hecho bastante bien,
Seguí el zumbido del carrito y las risas de ¿verdad?
los íres Malvados por todo el camino que subía -El Libro tenía razón -estuvo de acuerdo
hacia el lago, por el sendero. a través de las Donovan- . Él ha sido perfecto.
colinas. Pedaleando como un loco sobre la bici. -¡No te sientas estúpido! -sonó como si
Siempre procurando no ser visto pero con un Adrian agarrase a Donovan por la cabeza y le
oído puesto en el carrito. hiciese una llave de lucha.
De nuevo, silencio. Se detuvieron, y allí es- -¡Suéltame! -gritó Donovan.
taba: una choza abandonada cerca del lago, en -¡Dilo! -se burló Adrian-. Di: <<Estaba
el bosque. Oculté la bici entre unos arbustos equivocado>>. Di: <<Soy idiota>>.
y me deslicé bajo el porche de madera de la -¡Estaba equivocado! ¡Soy idiota! -resopló
cabaña. Me quedé allí tendido durante casi Donovan.
cinco horas. Adrian rio.
Escuché cómo bromeaban, reían y oían mú- -ffa sido un año estupendo, tío.
sica. Adrian y Donovan salieron al porche, por Donovan tosió y oí cómo chocaban las palmas.
encima de mí. -Sí -dijo él.
- ¿Recuerdas cuando hicimos esto el año pa- -¡Eh, tíos, entrad! -gritó Lokinsky desde el
sado? -dijo Adrian. interior de la cabaña-. ffay trabajo que hacer.
-Yo tenía miedo -repuso Donovan. Adrian y Donovan entraron ruidosamente.
-Yo también, pero todo ha funcionado real- <<¿De qué estaban hablando?>>, pensé. <<¿Yo
mente bien -dijo Adrian-. Me alegro de que lo he hecho bastante bien?>>. No hice nada
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para ayudarles. lo único que hicieron fue ata- Cuando escuché el ruido del carrito de golf
carme. ffe estado luchando contra ellos todo a suficiente distancia, salí arrastrándom. e. de la
el año. z:anja que había bajo el porche y me s<1cudí el
íenía ganas de saltar desde debajo del por- polvo. Entré en la cabaña. Había mesas cu-
che y abalanz:arme sobre ellos, sacudirles y biertas con telas roj<1s y banderolas colgando
gritar: <<¿Qué es lo que he hecho bien?, ¿Qué de las paredes, pintadas con coronas doradas.
es ló que he hecho bien según vosotros?>>. Pero En la mesa del centro, había unas velas encen-
sabía que sería estúpido hacerlo. Me supera- didas alrededor de una gran caja negra ata-
ban en número y allí, en el bosque, no tenía da con un cordel blanco. Quité el cordel de la
escapatoria. El mejor plan era sencillamente caja sin deshacer el nudo y, tal como sospe-
permanecer tranquilo, echado en el suelo junto chaba, descubrí una carpeta de piel roja en el
al porche y esperar a que se fueran. los es- interior.
piaría y luego improvisaría. En su tapa estaba grabado en dorado, tal
Al cabo de unas horas, el sol se pondría y como Daniel friedman me había descrito, simple-
oscurecería. los oí jugar a darse empujones mente <<El libro>> en letras gruesas: y también
y a derribarse unos a otros. Por fin salieron. una corona encima. Estaba enfrente de mí.
Espié por una rendija entre dos tablones de lo leí tan rápido como alguien puede leer
madera y observé cómo los tres subían al carri- algo que ha arruinado su vida, es decir que
to de golf. Jason iba en el asiento del conductor sospecho que no lo leí muy deprisa precisamen-
con Adrian a su lado y Donovan de pie en el te. Con cada página sentía un pinchaz:o. Esta-
estribo de la parte trasera. Adrian y Jason bro- ba describiendo el último año de mi vida. Como
meaban y pusieron en marcha el motor mien- si toda mi vida hubiese estado planificada
tras Donovan permanecía quieto e inexpresivo punto por punto. Y sí, por supuesto. Descubrí
bajo la luz: de la luna. No nos separaban más por qué uno es el Pringado.
que unos diez: pies de distancia, pero jamás me Cuando lo leí una vez:, no pude creer lo sim-
he sentido tan lejos de alguien. ple que era. Cuando lo leí de nuevo, me enfu-
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Tengo la sensación que volverán pronto, mente normal. Y me sentía orgulloso de ello,
pero no sé qué hacer con este libro. No puedo no tenía nada raro en ningún sentido. Me sido
dejarlo aquí, eso seguro. Tampoco puedo per- un lienzo en blanco para que los abusones del
mitir que le hagan esto a otro chico el año libro pintasen a su Pringado.
que viene, pero si lo robo o lo destruyo, los Es inimaginable que esto le hubiera sucedido
Tres Malvados lo sabrán. ¿Y si tienen una co- a alguien como a Jason <<lokinsky>>, ni siquie-
pia ·de repuesto? Lo único que harán es reem- ra a Colín Greene. Ellos hubieran luchado con-
plazarlo. tra ello o pasado del tema y hubieran seguido
Así que et Pringado es la persona de una con su vida.
clase que se define mejor por lo que no es ... Yo me obsesioné con el porqué. ¿Qué me
<<El Pringado es alguien que no sabe quién es>>. hacía a mí ser el Pringado? Pero acepté com-
Cuantas más veces lo leía, más cierto me pletamente que lo era.
parecía. Puede que no seas un buen director No dije ni una vez: <<Ese no soy yo>>. Porque,
Tony Clark, pero no eres tonto. quizá, yo no sabía quién era, de modo que sen-
Recuerdo a Richard, a Daniel, a Clarence. cillamente dejé que otra persona me lo dijese.
¿Quiénes son esos chicos? Nunca hablé sobre ello a papá ni a mamá
Son Pringados y ya está. ffan absorbido esa ni a Whitner, porque me sentía avergonzado.
identidad y sus vidas se mueven alrededor de Avergonzado de la persona que ellos me di-
ella. Richard se ha convertido en un maníaco jeron que yo era.
furioso; Daniel, en un tipo raro solitario; y Cla- El Libro del Bullying no funciona si el Prin-
rence, en un obsesivo compulsivo. ¿Qué eran gado tiene amigos. lo dice aquí mismo, aislar
ellos antes de 6.0 curso? ¿Qué conservan de sus al Pringado, lo que han hecho con Melody y
vidas antes de ser pringados? conmigo. ffan sido muy listos.
los Tres Malvados estarán fuera por un ra- Aún tengo conmigo mi anuario. lo abrí por
to. Y yo estoy solo con mis pensamientos. la página que Melody me firmó y leí lo que me
Yo siempre me he considerado extremada- había escrito.
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271
. . .. A\ principio
Querido EflC. d' do este ano- . ,
ue ha suce , nos e\/1ta-
Siento \o q ., incómodos Y ,
bos estu\/1esemos , ue tú aun Ahora sé lo que hice mal.
parecía que am , u erado, pero pense q de Jugué según las reglas del Libro.
Yo intente s p , \\o con Jason y, El Libro les dijo que me aislaran y yo les
semos. aso aque
, s hab\ar. Luego p aún pensaba en ayudé a hacerlo. No intenté resistirme y expli-
nuer1a . ero yo
no ., tro historia, p o se me carle las cosas a Melody. No respondí cuando
a fue o ~or com
repente, Y te fuesen m ella intentó hablar conmigo. Pensé que ya no
, ue \as cosas
ti e intente q podría volver a ser jamás su amigo, porque ella
, oebería ha- estaba metclada con tos abusones y el Libro.
ocurrió. , \ como \o p\anee.
f nciono ta . ta de que... Así era tal como el Libro quería que me
sé que no u , ndo me d1 cuen sintiese.
a\ir con e\ cua
ber d~ado de s ba pensando. Debería de haberme portado mejor con Co-
r dad \o que esta siento fata\, lín. Podríamos haber pasado este año juntos,
No sé en rea ' . ue \o siento y que me . ue
ería decir q . 0 res amigos q pero yo le vi como una herramienta, alguien
so\o qu de \os m~ que yo necesitaba usar para solucionar el mis-
ú toda"ía eres uno
nero t terio. Le traté como a alguien que te encuen-
r 'd \etamente
. ó.s he ten, o. \a pato comP tras en tu camino, y sin embargo podría haber
.)Om snero no meter \gún día. sido un amigo.
oe "eras e r mo éramos, a
r a ser co . t ane- El Libro del Bullying ordenaba y yo obede-
damos "º\"e . uó.mame s1 e r
y que po rano, EflC. cía. Seguí todas las reglas.
n buen "e
Que pases u El Libro me cambió.
. dar una we\ta. 1',Ae\odY Y ahora yo voy a cambiar el Libro. Conser-
tece lf a
vaba todas mis anotaciones de todo et año.
como un registro. Son un reflejo de mi trans-
formación en el Pringado. Todo mi dolor y mis
luchas están en estas páginas y ahora estarán
también en el Libro del Bullying •
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Estoy añadiendo mi diario al Libro, empe- Voy a recuperar a mis amigos. Haré las
zando desde el principio. Lo intercalaré con las paces con Melody y atraeré a Colín a 1;1uestro
páginas del Libro del Bullying, para que no círculo.
puedan desvincularse. Esta es la otra mitad de Recuperaré mi vida. Ya nadie me va a dic-
la historia. El Pringado habla. tar nada.
A los fres Malvados no se les ocurrirá re- ffe descubierto la clave de esta locura.
leer· el libro antes de pasarlo. Las primeras Si tienes este libro entre las manos, tengo
personas que lean esta mezcla serán los abu- un mensaje para ti: el Pringado conoce tus
sones del próximo año. No sé cómo reacciona- secretos. No podréis detenerte. Él tiene todas
rán ante él y no sé qué harán con él. las de ganar... y vosotros, solo las de perder.
futuros abusones seguidores del Libro: os
estoy hablando.
No sé si mi historia os dirá algo.
Si os queda corazón, os detendréis. Si tenéis EL LIBRO DEL BULL YING
algo de cerebro, sabéis que yo os OEfENORÉ. Por f ony Clark y Eric ffaskins
Si habéis leído este nuevo Libro del Bullying
mezclado, sabéis de lo que yo soy capaz. ffe
resuelto el misterio. Conozco vuestros planes.
Y haré todo lo que esté en mi mano para ase-
gurarme de que nunca jamás va a haber otro
Pringado.
•
No estoy seguro de lo que crees que es-
tás a punto de leer. Pero sea lo que sea
lo que estés pensando, te equivocas. Esto
es una crónica del Libro del Bullying y de
lo que me hizo. Cómo lo combatí y la for-
ma en que él se defendió. En una ocasión
llegué a pensar que el Libro del Bullying
era un mito. Luego, tal vez un misterio
que yo podría resolver. Ahora sé que es
un monstruo y estoy intentando destruir-
lo. ¿Estás conmigo ... o con el Libro?
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