ADORACION
ADORACION
ADORACION
Ahora bien, Silo fue, hasta los días de Saúl, un lugar para el Tabernáculo de
Moisés.
Silo fue, entonces, un lugar representativo, todo lo que significó el Tabernáculo del
Desierto, fue expresado con fuerza bajo la expresión del nombre Silo. Por lo tanto,
Silo nos deja una gran lección:
1— Fue un lugar de ceremonias.
2— Allí estaban sacerdotes sin visión, sin discernimiento y sin unción fresca (1
Samuel 3:1-3).
3— En Silo se tenía ritual, pero no poder ni vida.
4— Allí escaseaba la Palabra de Jehová. Lo profético y la revelación divina
faltaban.
5— Allí participaban unos pocos sacerdotes del ceremonial, el pueblo era más
espectador que otra cosa.
6— No había ya, guía del Espíritu Santo.
7— No ministraban ante el Señor con instrumentos de música, y solo lo hacían los
descendientes de Aarón, los levitas.
8— No tenían danzas ante la Presencia de Dios.
9— Los gentiles no tenían acceso al Arca.
10-Los cánticos espirituales estaban ausentes.
11-El Mover Profético y los Profetas eran casi inexistentes hasta el levantamiento
de Samuel.
12-No tenían salmistas ni directores de alabanza ante el Señor.
13-En Silo existía un sacerdocio caduco, pecador y ladrón de ofrendas por la
ausencia del temor de Dios.
14-En Silo había muerte y un ceremonial de muerte y tristeza.
15— No había adoración continua.
16— En Silo sacrificaban a Dios en horas específicas del día, no todo el día.
17— En Silo perdieron la gloria de Dios y Su Presencia manifiesta.
18— En Silo tuvieron que experimentar la pérdida del Arca del Pacto del Señor.
“Ahora, pues, dirás a mi siervo David: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Yo te
tomé del redil, de detrás de las ovejas, para que fueses príncipe sobre mi pueblo
Israel; y he estado contigo en todo cuanto has andado, y delante de ti he destruído
a todos tus enemigos, y te he dado grande nombre, como el nombre de los
grandes que hay en la tierra.”
2 Samuel 7: 8-9
Dios amó a David; él era un hombre conforme a su corazón. Pensaba como Él y
la Visión de Dios fue su anhelo siempre. David se preocupó por levantarle a Dios
adoración continua mientras fue rey en Israel por cuarenta años.
Por eso Dios le dio la victoria sobre todos sus enemigos.
Jesús, afirma el libro del Apocalipsis, es la raíz de David, Él es el linaje del Dulce
Cantor de Israel.
La raíz es la que trae la fuerza al árbol, la vida y el fruto. Jesús es la raíz de David;
Él es el causante de la vida profética y de adoración del salmista. Es Jesús quien
produjo en David la pasión y la fuerza de su alabanza al Dios Vivo.
Todo el fruto que tuvo David, lo produjo por Jesús; todo su fruto profético vino de
Él.
Jesús genealógicamente, para cumplir la Escritura, vino de Abraham, de Judá y de
David; pero siendo Él, el Verbo hecho carne, y siendo Eterno, es el verdadero
linaje de David. Él fue Quien determinó en David su fe y su posición para adorar al
Padre Dios, Jehová de los ejércitos.
La misma raíz, Cristo, produce en nosotros el mismo fruto que produjo en David,
adoración celestial.
Somos parte de Su linaje, descendientes de Él y vamos a producir el mismo fruto
de adoración de alto nivel. Le daremos al Señor fruto de labios, música con diseño
del Cielo, no música cultural, sino del Reino de los Cielos. Amén.
“Más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido
por Dios…”
1 Pedro 2:9
Somos del mismo linaje de Jesús por el bendito proceso legal divino de la
Adopción del Padre:
"Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, estos son hijos de
Dios. Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en
temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos:
¡Abba, Padre! El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos
hijos de Dios. Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con
Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él
seamos glorificados”.
Romanos 8:14-17
Una elección eterna del Dios Padre y Creador Todopoderoso, en Cristo Jesús,
Señor nuestro.
¡Amén y Amén!
"Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con
toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, según nos escogió en
él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha
delante de él, en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos
por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, para alabanza de la
gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado, en quien tenemos
redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia,
que hizo sobreabundar para con nosotros en toda sabiduría e inteligencia,
dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se
había propuesto en sí mismo, de reunir todas las cosas en Cristo, en la
dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos,
como las que están en la tierra.
En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al
propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad, a fin de
que seamos para alabanza de su gloria, nosotros los que primeramente
esperábamos en Cristo. En él también vosotros, habiendo oído la palabra de
verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis
sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de nuestra herencia
hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria”.
Efesios 1:3-14
Estudio 7
Arpas y Copas
“Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro
ancianos se postraron delante del Cordero; todos tenían arpas, y copas de oro
llenas de incienso, que son las oraciones de los santos; y cantaban un nuevo
cántico,...”
Apocalipsis 5:8,9 a
En el capítulo 4 y 5 del Apocalipsis, el Apóstol Juan tiene una revelación de lo que
sucede en el Tercer cielo; en el mundo espiritual del Reino de Dios.
Allí contempló la adoración eterna al Padre a través de los seres vivientes y los
ancianos, quienes representan a los creyentes redimidos por Cristo en todas las
épocas.
En este glorioso episodio ante el trono, Dios nos muestra un secreto del ministerio
eterno: Adoración e Intercesión.
La Adoración está expresada a través de las Arpas en las manos de los cristianos
y la Intercesión a través de las Copas llenas de incienso, las cuales el mismo texto
afirma que son símbolo de las oraciones de los santos.
Arpas y Copas es la mixtura perfecta del Tabernáculo de David.
Todo Profético
El Tabernáculo de David fue la estructura que expresó lo profético del Espíritu. Allí
se dieron Adoración e Intercesión proféticas.
“Asimismo, David y los jefes del ejército apartaron para el ministerio a los hijos de
Asaf, de Hemán y de Jedutún, para que profetizasen con arpas, salterios y
címbalos; y el número de ellos, hombres idóneos para la obra de su ministerio,
fue: De los hijos de Asaf: Zacur, José, Netanías y Asarela, hijos de Asaf, bajo la
dirección de Asaf, el cual profetizaba bajo las órdenes del rey. De los hijos de
Jedutún: Gedalías, Zeri, Jesaías, Hasabías, Matatías y Simei; seis, bajo la
dirección de su padre Jedutún, el cual profetizaba con arpa, para aclamar y alabar
a Jehová”.
1 Crónicas 25:1-3
Allí, en el Tabernáculo de David, vino el consejo por la voz profética. Esto nos
introduce en lo que será la Iglesia de los últimos días con un ministerio de Arpas y
Copas: Tendrá adoración, intercesión y consejo profético por dones del Espíritu
Santo.
Los Diáconos, Ancianos y Líderes de las congregaciones del presente, fluirán
profetizando. La Iglesia tendrá una unción profética sorprendente; tendrá
Salmistas, Pastores y Músicos entrenados en profetizar igual que el pueblo.
¡Amén!
El Sueño de David
David es un tipo de Cristo, nuestro Rey de Reyes. David mostró en su sueño, el
sueño de Cristo Jesús; ver a todo Su pueblo, adorar en unidad al Señor.
Amén.
Por eso David cantó diciendo:
“Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos. Nuestros pies
estuvieron dentro de tus puertas, oh Jerusalén. Jerusalén, que se ha edificado
como una ciudad que está bien unida entre sí. Y allá subieron las tribus, las tribus
de JAH, conforme al testimonio dado a Israel, para alabar el nombre de Jehová.
Porque allá están las sillas del juicio, los tronos de la casa de David”
Salmos 122:1-5
David fue un hombre de autoridad. Quizás como ningún otro, él fue un vencedor
extraordinario en todas sus batallas. Desde los comienzos de su ministerio, él
sabía que el poder y la autoridad vienen de Jehová. Y David supo siempre cómo
usar esa llave de poder; “la llave de David”, la adoración al Padre-Dios.
A través de su adoración fue revestido con autoridad del Cielo; así mató al oso, al
león y al gigante Goliat. Ya en su edad madura practicó la adoración junto a su
pueblo. Él sabía que es desde el Trono de Dios, desde donde vienen los tronos y
las sillas de poder para gobernar en la tierra.
¡Oh Dios, restaura hoy, la pasión de David…!
¡Amén y Amén!
Estudio 11
Idolatría: el gran enemigo
“Y cuando Salomón era ya viejo, sus mujeres inclinaron su corazón tras dioses
ajenos, y su corazón no era perfecto con Jehová, como el corazón de su padre
David.”
1 Reyes 11:4
La diferencia entre David y su hijo Salomón fue que, David solo permitió en Israel
un altar y un templo, para Jehová de los ejércitos. Salomón en su ancianidad
permitió un altar pagano para cada mujer que tuvo y muchas casas para dioses
falsos en los lugares altos. Idolatría fue la diferencia entre David y Salomón, y esto
fue lo que determinó la caída de Israel.
“Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la
imposición de mis manos... que te fue dado mediante profecía con la imposición
de manos del presbiterio.”
2 Timoteo 1:6; 1 Timoteo 4:14b
Por varios años, ya, tenemos constantemente reuniones de “Presbiterio Profético”.
Esto son servicios donde Profetas, Apóstoles y otros ministros (pastores, maestros
y evangelistas) que fluyen en lo profético y son apostólicos (creen en la operación
de Efesios 4: 11) se juntan para profetizarle a la Iglesia en grupos, en familia o a
individuos solos.
Es en reuniones de Presbiterio Profético donde Dios llama al ministerio (Hechos
13); es allí donde el Señor imparte dones como a Timoteo y traspasa la unción
apostólica de los Apóstoles y Profetas a sus hijos ministeriales o discípulos (1
Timoteo 1:6).
Son reuniones gloriosas en las cuales, Dios le revela a los creyentes muchas
cosas importantes acerca de su llamado y de su posición en el Cuerpo de Cristo,
la Iglesia.
La base para el mover profético del Presbiterio es la Adoración. En estas
reuniones se adora mucho más que cualquier otra cosa.
La música espiritual fluye y prepara el terreno para la ministración de la profecía a
través de los Profetas.
La adoración es la llave que abre los cielos, y estos invaden la tierra.
¡Hermano, adoración nos trae el Cielo a la Tierra!
" Más la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al
Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre, tales adoradores, busca
que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu, y en verdad es
necesario que adoren”
Juan 4:23-24
Estudio 13
Profetas en medio de los
"filisteos"
“Después de esto llegarás al collado de Dios, donde está la guarnición de los
filisteos; y cuando entres allá en la ciudad, encontrarás una compañía de Profetas
que descienden del lugar alto, y delante de ellos salterio, pandero, flauta y arpa, y
ellos profetizando.”
1 Samuel 10: 5
La música siempre ha estado ligada a Dios y a Su Espíritu, Él la creó, y también a
Sus Profetas.
La música espiritual ha sido siempre la plataforma del fluir profético, Dios la ha
usado por siglos.
¡La Adoración es profética!
“Más ahora traedme un tañedor. Y mientras el tañedor tocaba, la mano de Jehová
vino sobre Eliseo.”
2 Reyes 3: 15
La compañía de Profetas que descendió del lugar alto en medio de los filisteos,
alababa a Jehová con instrumentos y profetizaban. El temor al enemigo se pierde
en medio de la adoración y la profecía es el arma de guerra más poderosa para
derribar el poderío de los dioses que exaltan nuestros adversarios.
La adoración profética será usada por Dios para derribar el dominio de satanás y
para activar a los reyes y generales de Dios con valor y denuedo.
“Entonces el Espíritu de Jehová vendrá sobre ti con poder, y profetizarás con ellos,
serás mudado en otro hombre. Y cuando te hayan sucedido estas señales, haz lo
que te viniere a la mano, porque Dios está contigo.”
1 Samuel 10: 6,7
La Compañía de Profetas
“Y cuando llegaron allá al collado, he aquí la compañía de Profetas que venían de
encontrarse con él; y el Espíritu de Dios vino sobre él con poder, y profetizó entre
ellos.”
1 Samuel 10:10
La adoración de alto nivel, ineludiblemente activará lo profético. Compañías de
Profetas emergerán del nuevo mover apostólico en la Iglesia, Su manto y
cobertura hará que muchos reciban la Impartición de la unción y espíritu profético
y también profetizarán entre Profetas y serán movidos a realizar actos proféticos
relevantes para la liberación de pueblos. Amén.
De la montaña al Templo
David se trajo el mover profético de la montaña a la Casa de Dios. El uso del arpa,
las flautas, el salterio y los panderos, utilizado por los Profetas; el rey lo trajo a su
Tabernáculo. Gloria a Dios.
“Y cuando los albañiles del Templo de Jehová echaban los cimientos, pusieron a
los sacerdotes vestidos de sus ropas y con trompetas, y a los levitas hijos de Asaf
con címbalos, para que alabasen a Jehová, según la ordenanza de David, rey de
Israel. Y cantaban, alabando y dando gracias a Jehová, y diciendo: Porque él es
bueno, porque para siempre es su misericordia sobre Israel. Y todo el pueblo
aclamaba con gran júbilo, alabando a Jehová porque se echaban los cimientos de
la casa de Jehová.”
Esdras 3:10-11
Después de Salomón, Israel entró en decadencia y sus hijos fueron llevados
cautivos a Babilonia. Setenta años después se inició un retorno de la Cautividad.
Dios envió y ungió a Esdras, Zorobabel y Josué para la reconstrucción del Templo.
Ellos hallaron favor en los reyes medo-persas, quienes les dieron permiso, cartas
de autoridad y riquezas para iniciar la reedificación.
Aleluya.
La gloria postrera
“Y muchos de los sacerdotes, de los levitas y de los jefes de casas paternas,
ancianos que habían visto la casa primera, viendo echar los cimientos de esta
casa, lloraban en alta voz, mientras muchos otros daban grandes gritos de
alegría.”
Esdras 3:12
En los días de Salomón, Israel experimentó “gloria primera”.
Entiéndase gloria por la manifestación evidente y palpable de los atributos,
perfecciones y excelencias de Dios. Gloria es su Presencia manifiesta con señales
y demostración indubitable de que Él está allí.
Aleluya.
"Cuando Salomón acabó de orar, descendió fuego de los cielos, y consumió el
holocausto y las víctimas; y la gloria de Jehová llenó la casa. Y no podían entrar
los sacerdotes en la casa de Jehová, porque la gloria de Jehová había llenado la
casa de Jehová. Cuando vieron todos los hijos de Israel descender el fuego y la
gloria de Jehová sobre la casa, se postraron sobre sus rostros en el pavimento y
adoraron, y alabaron a Jehová, diciendo: Porque él es bueno, y su misericordia es
para siempre".
2 Crónicas 7:1-3
Muchos sacerdotes y ancianos vivieron los tiempos de esplendor y manifestación
personal de Jehová.
Ahora no solo se alegraban; gemían, lloraban y gritaban en gratitud por lo que
vendría y con dolor por lo que se había perdido.
“Y no podía distinguir el pueblo el clamor de los gritos de alegría, de la voz de
lloro; porque clamaba el pueblo con gran júbilo, y se oía el ruido hasta de lejos.”
Esdras 3:13
La Iglesia Primitiva recibió como Templo Espiritual del Señor la gloria Shekinah.
Ellos recibieron la gloria primera con poder y esplendor. Pero ese brillo se perdió y
el Templo del Espíritu, la Iglesia, ha estado en ruinas.
Para nuestros días el Señor ha comenzado la tarea de reconstrucción de Su Casa.
La gloria postrera vendrá y llenará la Iglesia.
Lloremos por lo que perdimos; pero demos gritos de júbilo por lo glorioso que
vendrá al final de los tiempos con la Restauración de la Adoración apasionada
para Jehová en medio del Pueblo del Señor, esto es," la Llave de David"
Amén.