Unidad II
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Unidad II
INTRODUCCIÓN
El organismo de los seres vivos del reino animal se constituye por cuatro partes
principales, la cabeza, el tronco y las extremidades; estas últimas a su vez se dividen
en anteriores o superiores y posteriores o inferiores, según se trate de los animales o
los humanos en los que el hecho de lograr evolucionar a la bipedestación ha llevado a
un nivel más avanzado de evolución de estructuras como las manos y los pies.
Las extremidades son elementos que permiten llevar a cabo importantes acciones
como lo son el mantenimiento de la postura, los cambios de posición así como caminar,
saltar o correr. Los huesos están unidos los unos con los otros por medio de junturas
o articulaciones, algunas de las cuales tienen la finalidad de mantenerlos firmemente
unidos y otras, en cambio, permiten que se muevan libremente entre sí. La posición es
relativa, ya que depende del punto de vista subjetivo de cada uno.
HUESOS QUE CONFORMAN LOS MIEMBROS ANTERIORES Y MIEMBROS
INFERIORES.
• Húmero: Es un hueso largo que forma la parte superior del miembro delantero. Se
articula proximalmente con la escápula, en la articulación del hombro y, distalmente,
con el radio y la ulna, en la articulación del codo. El húmero en su parte proximal, o
cabeza del húmero, presenta dos prominencias el tubérculo mayor y tubérculo menor.
En la parte distal se encuentran los epicóndilos medial y lateral, en medio del cóndilo.
Distalmente, también, se encuentra la fosa del olécrano, donde se articula la ulna.
• Carpos: Están compuestos por siete huesos cortos, llamados huesos cárpales,
dispuestos en dos filas. La fila proximal consta de tres huesos, de los cuales, el más
medial, se llama carpal radial y se articula con el radio. Después, está el hueso ulnar
carpal, que se articula con la ulna. Finalmente, el hueso carpal, accesorio que yace en
el margen lateral, se proyecta caudalmente. La primera fila de huesos cárpales se
articula con la segunda fila de cuatro huesos cárpales.
• Falanges: Son huesos largos. Cada dedo tiene tres falanges, excepto el primer dedo
(espolón) que solo tiene dos. La falange proximal se articula con el hueso metacarpal.
La falange del medio se articula tanto con la falange de arriba como con la de abajo. La
falange distal termina en un proceso ungual, que forma parte de la garra.
• Fémur: Es un hueso largo que forma el muslo. La parte proximal del fémur, llamada
cabeza, se articula en el acetábulo de la cadera. Lateral a la cabeza del fémur, se
encuentra el trocánter mayor y medialmente el trocánter menor, lugares que sirven de
punto de inserción de los músculos. En la parte distal del fémur se encuentran los
cóndilos lateral y medial los cuales se unen con la tibia en la articulación de la rodilla.
• Tibia y fíbula: estos huesos largos forman la parte inferior del miembro. Al igual que
con el radio y la ulna, la tibia y fíbula se ubican contiguamente, de manera paralela. La
tibia se ubica medialmente y es más grande que la fíbula. La parte proximal de la tibia,
se articula con el fémur y la parte distal se articula con los carpos. La fíbula es un
hueso largo y delgado lateral a la tibia.
• Tarso: está formado por siete huesos cortos, dispuestos en tres filas. Los dos huesos
que forman la fila proximal, se llaman talo o astrágalo y calcáneo, estos se articulan con
la parte distal de la tibia y de la fíbula en la articulación del corvejón. El talo o hueso
tarsal tibial se ubica medialmente, mientras que el calcáneo o hueso tarsal fibular
lateralmente. El metatarso, dependiendo de la especie, tienen cuatro huesos o de
cinco huesos metatarsales y las falanges que dispuestas de manera similar al miembro
anterior.
ARTICULACIONES
O "coyunturas" mencionadas en la descripción de los miembros están
formadas por huesos contiguos, yuxtapuestos por sus extremidades, donde
presentan superficies lisas, convexas o cóncavas, dispuestas para que puedan
adaptarse entre sí y deslizarse la una sobre la otra. La distancia que separa
esas superficies es mínima y se mantiene fija por fuertes medios de unión, de
tejido resistente y elástico, los ligamentos y cápsulas articulares, dispuestos de modo
que afirmen las superficies en contacto pero que no impiden los movimientos.
Los músculos que recubren los huesos de los miembros son por lo general
largos, no solo por sus formas sino por la extensión que recorren sus tendones
(llamados vulgarmente e impropiamente "nervios"), elementos en forma de cinta,
de tejido fibroelástico, que se adhieren o insertan en el hueso en que se
encuentra el músculo o en otros huesos, próximos o alejados (músculos
intrínsecos y extrínsecos, respectivamente), y sobre los cuales se ejerce la
fuerza de que están dotados, haciéndolos mover con puntos de apoyo en las
articulaciones que concurren a formar.
Según la disposición de cada músculo y los lugares en que se encuentran y
en que se insertan sus tendones, pueden imprimir a los segmentos con que se
relacionan o a todo el miembro, los siguientes diferentes movimientos: flexión,
extensión, abducción, aducción, circunducción y rotación.
La flexión ocurre cuando un segmento es llevado sobre otro cerrando el
ángulo que forman, como cuando el antebrazo, llevado hacia arriba, y en el
sentido en que está orientado, cierra el ángulo que forma con el brazo. La
extensión es el movimiento inverso, que ocurre cuando un segmento vuelve a la
posición normal después de haber sido flexionado.
La abducción y la aducción son movimientos que, por lo general, comprenden
todo un miembro y consisten en que es llevado hacia afuera o hacia adentro,
alejándolo o acercándolo al plano de simetría corporal, y en ellos intervienen
más de un músculo, como tensores en el sentido del movimiento.
La circunducción es un movimiento complejo, ya que en ella intervienen no
sólo los músculos de un segmento o de todo un miembro, sino también
músculos extrínsecos y ocurre cuando un segmento o todo el miembro va de la
flexión a la abducción, de esta a la extensión para ir terminando en aducción.
La rotación, también un movimiento complejo, se produce cuando un
segmento o todo un miembro gira sobre su punto de apoyo, interviniendo como
en la circunducción, músculos intrínsecos y extrínsecos. La circunducción y la
rotación no son movimientos corrientes en el bovino, especialmente en el
miembro anterior, salvo en aquellos más o menos forzados al girar el cuerpo en
la propulsión o retropropulsión.