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OLLANTAYTAMBO

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PARQUE

ARQUEOLOGICO DE
OLLANTAYTAMBO

PARTICIPANTES:

 STEYSHY QUIROBA YUCRA

 ANALI HUAMAN CUSIHUAMAN

 JANITSA SULLI VILLALVA

INTRODUCCION
La arquitectura inca representa uno de los mayores logros de este imperio, caracterizada por la
íntima integración de la forma construida y su entorno natural. Su estudio nos muestra, hasta el día
de hoy, que sus sitios representan una obra maestra insuperable de arquitectura y planificación
urbana, que rivaliza con los mayores logros de los egipcios, griegos, romanos o de cualquier otra
civilización.

El origen del nombre tiene varios enfoques. De acuerdo a la lengua aymara, Ollantaytambo deriva
del vocablo ulla-nta-wi, que quiere decir "lugar para ver hacia abajo"; el término tambo, es añadido
posteriormente. Para la lengua quechua, el nombre proviene de la palabra Ollanta (que es el
nombre de un capitán Inca, cuya historia se guardó como una tradición oral, y escrita como un
drama de Antonio Valdez, sacerdote de Urubamba, a mediados del siglo XVIII) y del término, tambo,
una derivación española del vocablo quechua tampu; que quiere decir, "ciudad que ofrece
alojamiento, comida y consuelo a los viajeros".
El presente trabajo tiene como objetivo mostrar el aporte de Ollantaytambo en el desarrollo de la
arquitectura incaica, tanto en el aspecto territorial como en el de asentamiento y arquitectura. El
estudio nos explicará la influencia del valle del Urubamba en la planificación del sitio, las distintas
funciones que albergaba el asentamiento y el análisis arquitectónico de Ollantaytambo.
DATOS GENERALES
El complejo arqueológico de Ollantaytambo se
encuentra ubicado en la sierra sur del Perú, cerca de 70
kilómetros al noroeste del Cuzco, un espacio donde el
diseño del complejo arqueológico se confunde con el
actual pueblo. A este distrito de la provincia de
Urubamba se llega por la carretera asfaltada Chinchero -
Urubamba, y también por vía férrea (68 Kms.). Se
encuentra a 2,800 metros de altura, y tal como lo hemos
señalado, tanto su diseño como las bases de la mayoría
de sus edificaciones corresponden a la época del Incario.
Ocupa varios pisos ecológicos, desde el bosque seco
montañoso bajo hasta las formaciones nivales. La población urbana se encuentra a orillas del rio
Vilcanota (Willkamayo) que forma el valle del Urubamba. El clima se aproxima a lo ideal para la vida
humana y para la actividad agrícola tradicional. Recibe anualmente 500 a 800 mm. De precipitación
pluvial.
El ambiente es seco pero puede variar hasta ligeramente húmedo, cambio ocasionado por las bajas
temperaturas en el invierno y las relaciones de evaporación; los cambios bruscos de la presión
atmosférica ocasionan fuertes corrientes de vientos a partir del medio dia (Rosi, 1960, pag. 101) El
complejo arqueológico de Ollantaytambo fue un estratégico centro militar, religioso y agrícola. El
escenario arquitectónico es de excepcional interés por el tamaño, estilo y originalidad de sus
edificios.
DRAMA INCA Y LA ETNOHISTORIA DE OLLANTAYTAMBO

Ollantaytambo quedó grabado en la memoria del mundo gracias a un drama escrito en el siglo XVI,
y representado en el teatro en el año 1780. La historia narra el conflictivo amor entre el general
Ollanta y Cusi Coyllor, la hija de Pachacútec. Ollantay (general del ejército inca), se ha enamorado
de Cusi Coyllur (Lucero Alegre o Estrella), hija del Inca Pachacútec (El restaurador del mundo).
En la tradición inca nadie, salvo otro Inca, puede casarse con la hija del inca, pero el general se
expone y, pese a los augurios en contra, decide pedir la mano de la princesa Cusi Coyllur.
La Coya, madre de la princesa, oculta sus amores y su boda secreta. El sumo sacerdote Willka Uma
descubre a Ollantay y los peligros de la ira del Inca.
Cusi Coyllur es encerrada en la casa de mujeres (Acllahuasi) y Ollantay huye a la ciudad que lleva su
nombre, Ollantaytambo, donde se atrinchera.
El Inca Pachacútec cuenta con sus ayudantes, generales como Rumi Ñawi (Ojo de Piedra); Ollantay
con los suyos, como Urqu Waranqa (Mil Montañas).
La primera batalla trae como consecuencia la derrota de Rumi Ñawi. Tiempo después el Inca
Pachacútec muere sin haber conseguido sus propósitos: derrotar a Ollantay; le sucede Túpac
Yupanqui (El estimado por la realeza) el cual, mediante una trampa, consigue apresar a Ollantay.
Además, la princesa tiene a su favor a una de las vírgenes del Sol, la cortesana del Acllahuasi Pitu
Salla, pero como fiera oponente a la dura Mama Qaqa (Madre Roca). Eso hace posible que, tras diez
años de férrea prisión, aun conserve alguna esperanza de salir de ella.
El desenlace llega cuando Ima Sumaq (Bella Niña), de diez años, conoce a su madre y, desde su niñez
valiente, osa caer de hinojos ante la presencia del nuevo Inca, que tiene preso a Ollantay y sus
generales. Ollantay es perdonado por la intervención del Sumo Sacerdote quien siempre hace de
pacificador.
El Inca Túpac Yupanqui se interesa más tarde por el caso de su hermana encadenada (Cusi Coyllur),
y escucha de sus labios su penosa historia, acto siguiente el Inca perdona a todos, y decidió liberarlo
y aceptarlo como compañero de su hermana

CONTEXTO HISTORICO DE OLLANTAYTAMBO


Viraqocha, el padre de Pachakuti, fue quien llevó a cabo las primeras incursiones en la parte alta del
valle del Urubamba, mas la integración de Ollantaytambo y la parte baja del valle al reino inca se
atribuye a Pachakuti. En su búsqueda de poder y territorios, Pachakuti declaró la guerra a los
pobladores de Ollantaytambo; los mató y luego quemó el poblado, antes de regresar al Cuzco y
proseguir sus conquistas. Pachakuti anexó Ollantaytambo a sus propiedades reales y ordenó la
construcción de suntuosos edificios en Tambo . Sarmiento de Gamboa dice al respecto: Fueron
contra ellos con mucha gente y diéronles batalla; en que fue herido Inca Roca malamente, mas en
fin fueron vencidos los Ollantaytambos; y los mató a todos y quemó el pueblo y lo asoló, que no
dejó cosa de memoria; y tornóse al Cuzco. Fuera de esto, prácticamente no existe mención de
Ollaytantambo en las crónicas hasta cuando acontece la rebelión de Manqo ’Inka, el nieto de
Pachakuti. ' Atahuallpa había vencido a su hermano Huascar luego de una sangrienta guerra civil y
había tomado el control» pero luego el mismo fue capturado por Francisco Pizarro en Cajamarca.
Aquellos que apoyaban a Huascar, bajo el liderazgo de Thupa W'allpa, vieron la oportunidad de
retomar el poder mediante una secreta y desleal alianza con los conquistadores españoles.
Subsecuentemente, Thupa W'allpa fue coronado con el auxilio de Pizarro, mientras que 'Atahuallpa
fue sentenciado a muerte. El reinado de Thupa Wallpa fue, sin embargo, breve, ya que murió pocos
meses después de su coronación. En su lugar, Manqo Inka —quien era reconocido por los seguidores
de Huascar como el legítimo sucesor, además de ser considerado un oportuno aliado por Pizarro
toma el poder. Los españoles sin embargo, maltratan y abusan mucho de él. Al darse cuenta de que
los españoles no teman intención de ayudarle a retomar el control del imperio, uno que querían las
tierras para ellos, Manqo Inka conspira con otros dignatarios incas y conforma una milicia
formidable, la que enfiló hacia el Cuzco en mayo de 1536. En un principio, Manqo ’Inka dirige su
campaña desde Calca, pero luego escoge Ollantaytambo como su puesto de comando. Sus esfuerzos
fracasan al tratar de vencer a los españoles en Cuzco, pero tiene éxito en mantenerlos fuera de La
rebelión de Manco Inca significó una verdadera amenaza para los invasores españoles, puesto que
Ollantaytambo representó una defensa eficaz contra su artillería. Ollantaytambo, donde les infringe
una de las más importantes derrotas sufridas por los españoles en su conquista del imperio inca. A
pesar de su victoria, Manqo Inka no se siente seguro en este complejo y decide retirarse a los densos
bosques de Vilcabamba, con lo que se sella el final de la dominación inca en dicho lugar.

EMPLAZAMIENTO
El establecimiento inca de Ollantaytambo está sujeto a una composición radial, teniendo como
centro el promontorio sobre el cual se asienta el sector ceremonial del sitio. Ello nos permite
reconocer la importancia de los hitos ceremoniales en la concepción espacial de los incas, muchos
de ellos relacionados con elementos naturales del mismo territorio, como es el caso del cerro
Pinkuylluna y el río Patakancha. Ollantaytambo cuenta con distintos establecimientos, cada uno con
una función específica, entre los que se encuentran el centro poblado, la fortaleza, el callejón, Q’ellu
Raqay, los depósitos y las canteras de Kachiqhata. Como se ha señalado, Ollantaytambo era una
propiedad real del referido inca y las tierras con su producción pertenecían al soberano y no al
Estado. Se puede suponer que existía en el lugar una residencia real para el inca y su corte, con
espacios suficientes para la nobleza y los funcionarios que lo acompañaban. Protzen piensa que,
dada la magnitud e importancia de Ollantaytambo, pudo ser mucho más que sólo un lugar de retiro
campestre con sus necesarios anexos. Sin negar que la propiedad se usó para el disfrute personal
del inca, el entretenimiento de su corte y el beneficio de su panaca, piensa que era también un sitio
de producción agrícola y de manufacturas, Estaba habitado de manera permanente por cerca de un
millar de personas que se encargaban de la propiedad real y que estaban al servicio personal de la
nobleza y los administradores, determinando que el asentamiento adquiriese una escala urbana con
calles, espacios abiertos, edificios públicos y sectores residenciales de mayor densidad.
EL PUEBLO DE OLLANTAYTAMBO

Antiguamente, se accedía a Ollantaytambo a


través de una puerta denominada Intipunku y
se recorrían angostos pasajes y callejones. Uno
de los recorridos se podía efectuar a lo largo de
un sendero que tiene a uno de sus lados el
llamado Muro de las Cien Nichos, que conducía
hasta la gran explanada convertida en la
actualidad en la Plaza de armas. Aún en el
presente se divisa desde ese espacio abierto la
imponente fortaleza, situada al otro lado del río
Patacancha. El acceso descrito se resume en un trayecto de este a oeste a lo largo del Muro de las
Cien Nichos, hasta llegar a la explanada convertida en plaza, que tiene al centro poblado de época
inca hacia el norte, ubicándose al río y más allá la fortaleza en dirección sur. Tal como lo explican
Gibaja y Samanez, el centro poblado: “constituye uno de los más interesantes ejemplos de
continuidad urbana que existen en América. Fue edificado por los incas y continuó siendo utilizado
durante los períodos colonial y republicano; sus habitantes actuales viven en lo que fue la ciudad
incaica, en casas adaptadas sobre las construcciones de época prehispánica, conformando un
conjunto histórico sin parangón.

LOS SISTEMAS DE ANDENERÍAS O BANCALES DE OLLANTAYTAMBO


Los andenes en Ollantaytambo adquirieron
proporciones mucho más allá de lo requerido
para la mera supervivencia, razón por la que aún
el día de hoy se mantienen las teorías sobre su
condición como territorio real del inca. Además
de ser el símbolo del poderío humano sobre la
naturaleza, sus funciones agrícolas y defensivas –
como la descrita previamente– nos permiten
asumir su gran importancia en la planificación
territorial del sitio, en una muestra de
preocupación de los incas por la topografía, geomorfología e hidrología. A ello habría que agregar,
como complemento del aprovechamiento máximo del agua, la regulación y prolongación de los
efectos del riego, la fertilización y defensa de la erosión a la par que el condicionamiento del clima.
Es el resultado de la suma y compendio de más de ocho mil años de experimentación, domesticación
y cultivo de plantas en diversos pisos ecológicos. Los incas convirtieron los abanicos aluviales en
extensos dameros de cultivo. Levantaron sólidos muros de retén, siguiendo las ondulaciones de las
laderas, venciendo así la abrupta topografía y rellenado el nuevo espacio con tierras feraces
transportadas desde lejanos parajes, gracias a un extraordinario despliegue de en
ergía humana. Las andenerías agrícolas, en el curso de su empleo, alcanzaron otros fines
complementarios, para la defensa, el culto y la conservación de los mismos productos cosechados.
En el sitio de Compone llamado antiguamente Huatabamba, los andenes fueron destinados a
cultivos especiales y los muros recibieron un tratamiento esmerado con el enlucido de sus aparejos
que los distinguían de las rústicas pircas. Los andenes que rematan en el Templo- Fortaleza, se
ejecutaron en el peculiar estilo que es ejemplo de la mayor destreza técnica y simbolismo religioso.
Los andenes de Sima Pukyu, al otro lado de la actual estación de tren, son un buen ejemplo de ello.
Se encuentran construidos en la parte inferior de un profundo barranco, seco la mayor parte del
año. Es, sin embargo, una cuenca de recolección, con un nivel substancial de aguas subterráneas
que se filtra a la superficie a través del material suelto del derrubio en el fondo de la cuenca.

LA FORTALEZA O CASA REAL DEL SOL EN OLLANTAYTAMBO

Encima de la colina existen


edificaciones construidas con
piedras aparejadas con
incomparable calidad. Una de
aquellas es el denominado Recinto
de los Diez Nichos Son nichos
trapezoidales con fines
decorativos, construidos para
guardar las momias (malkis) de la
panaca Inca de Pachaqutec, se
encuentran sobre los andenes y se
accede por las escalinatas. Este recinto se encuentra vinculado al templo al sol, a través de un
ingreso privado.
La Casa Real del Sol, y Ollantaytambo en su totalidad, aún conserva el trazado de la planificación
urbana del incanato. Sus habitaciones aún recuerdan la presencia de Manco Inca, quien se enfrentó
a Hernando Pizarro, en 1537, durante la resistencia indígena que continuó por muchos años más.
La fortaleza o adoratorio está conformado por diecisiete terrazas superpuestas, construidas sobre
grandes piedras de granito rosa (porphyry rojo) labradas, que llegan a medir más de cuatro metros
de alto por dos de ancho, y dos de espesor. Las paredes o muros de la Casa Real del Sol tienen una
inclinación interna, y la principal de ellas, una composición de seis bloques de enormes piedras, con
junturas de piedras pequeñas, que son parte del Altar Principal. Se cree que la principal cantera para
la construcción del lugar fue Cachicata, ubicada a 6 kms. de distancia en el lado izquierdo del río
Vilcanota. Las rocas se tallaron parcialmente en las canteras, y luego fueron bajadas hacia el valle.
Pero hubo algunas, conocidas como "piedras cansadas", que no llegaron a su destino. Siempre ha
impresionado la forma en que transportaban las enormes piedras desde largas distancias; en este
caso, requirieron de un cauce artificial paralelo al río para trasladar las inmensas moles, y subirlas
por una empinada pendiente. Utilizaron instrumentos como rodillos de leño, piedras rodantes,
sogas de cuero de camélidos, palancas, poleas y la fuerza de miles de hombres. Se piensa que este
tipo de construcción tiene como antecedente la arquitectura de Tiawanako -que pudieron traer los
collas, desde la región del Lago Titicaca-, ya que en la superficie externa del cuarto, al extremo sur,
hay tres símbolos tallados que pertenecen a la cultura pre-cerámica: el Hanan Pacha (El Cielo), el
Kay Pacha (La Superficie de la Tierra) y el Ukhu Pacha (El Subsuelo o Interior).

EL CALLEJÓN Y Q’ELLO RAQAY


En el abanico aluvial del río Patakancha, entre el centro poblado y el río Urubamba, existe un
conjunto de terrazas agrícolas. En un corto tramo de 700 metros se tiene un desnivel de 50 metros
que ha sido tratado con plataformas escalonadas, encajonando la quebrada, que al estar protegida
de los vientos, tiene un clima más benigno. Al borde del río, esos andenes albergan el conjunto de
Q’ello Raqay, que pudo ser un palacio situado en medio de jardines sobre las elaboradas
plataformas, se lo conoce como el Palacio de Ollantay, y fue dibujado y descrito por el viajero
norteamericano George Squier en 1877 con las siguientes palabras: “El lugar del palacio de Ollantay
no sólo es destacado, ya que se halla en una serie de terrazas que dominan el risueño valle, sino que
sus ruinas son todavía nítidas y algunas partes de ellas están casi intactas”.
EL TEMPLO DEL AGUA
Estaba dedicado principalmente al culto de "Unu" o "Yaku" (deidades del agua). Por ello, existieron
una serie de fuentes que sirvieron para este fin, como el Baño de la Ñusta, que es una de las fuentes
labradas en una sola pieza de granito, de 1.30 metros de alto por 2.50 metros de ancho. Es una de
las más conocidas y todavía fluye agua de su interior. Este lugar está constituido por una corta
planicie que lleva a un enorme cerro en cuyos lados se ubican diversos monumentos arqueológicos.
El principal de ellos se ubica en la cima y es conocido como La Fortaleza o Casa Real del Sol.

INCA HUATANA O INTIHUATANA

Situada en la parte superior del


Templo del Sol, en una pendiente
casi vertical, el Inca Huatana o
Intihuatana consta de una pared
con nichos altos, en cuyos lados
hay orificios de seguridad de
hasta 80 cms. de profundidad.
Frente a éstos hay una estructura
que se encuentra suspendida
sobre un precipicio, razón por la
que se cree fue utilizada para la
tortura y ejecución de prisioneros
de guerra o malhechores, aunque
la función de observatorio astronómico es la más aceptada.
EL CENTRO PINCUYLLUNA

Pinkuylluna, que significa "donde se tañe el pincuyllo"


- instrumento de viento de origen inca- se ubica al
oeste del río Patacancha, frente al Templo del Sol. Es
un complejo arquitectónico que se compone de
edificios de tres bloques idénticos y superpuestos. La
base de los bloques es rectangular, poseen seis
ventanas en la fachada y seis en la pared que da al
cerro, proporcionando una adecuada ventilación e iluminación. El cerro Pinkuylluna, que podrían
haber servido para anunciar la llegada del inca y su corte en tiempos de paz. Cabe destacar, que
este tipo de fortalezas eran inusuales en asentamientos incas, puesto que las defensas en la mayoría
de sitios se efectuaba con la evacuación hacia puestos de evacuación en las partes altas de los
cerros, por lo que se puede suponer que las estructuras fueron construidas durante el periodo de la
rebelión de Manqo 'Inka. En el lugar se encuentran las colcas (depósitos agrícolas) sistemas de
almacenamiento.Las qolqas representan la economía del estado inca y su capacidad para almacenar
productos clave. A la izquierda de éstas se puede observar un gigantesco bloque de piedra que, para
los lugareños, representa el rostro de un inca.

SECTOR ARAQHAMA

En la margen oeste del río Patacancha, al pie de la colina-santuario designada usualmente como
Fortaleza, se ubica el sector denominado Araqhama. En ese sector está la plaza de Manyaraqui,
rodeada de edificaciones de piedra y adobe, teniendo al lado sur el impresionante conjunto de
andenes de Pumatallis y la fortaleza. Escalinatas hacia la segunda planta de un edificio de dos pisos
en un patio esquinero. El trazado de Manyaraki y ‘Araqhama fue tan riguroso como el del poblado:
el lado norte y sur de la plaza y la calle que corre de Este a Oeste a través del recinto al sur son
paralelos y tienen exactamente la misma orientación que las calles transversales. No existen
evidencias de una estructura tipo kancha: todos los edificios se encuentran colocados en hileras
sucesivas, una disposición que sugiere que debieron existir dos o más calles con orientación Este-
Oeste que daban acceso a las diversas estructuras. Los edificios de Araqhama pueden clasificarse en
dos grupos arquitectónicos. El primer grupo consiste de edificios altos y grandes que rodean la Plaza
de Manyaraki. Los edificios en este grupo son de adobe o tapia, con una altura de 1,2 y 1,5 metros,
construidos sobre cimientos de piedras semicortadas unidas con mortero arcilloso. Las piedras son
particularmente grandes y algunas muestran signos de haber sido reutilizadas. El segundo grupo
comprende la hilera de edificios en el lado sur de la calle que discurre de Este a Oeste. Estas
estructuras son más pequeñas que el grupo anterior y están construidas con mampostería de
piedras sin cantear y mortero
CONCLUSIONES
Ollantaytambo representa uno de los sitios imprescindibles en el estudio de la
arquitectura inca, puesto que contiene un modelo único tanto en asentamiento
territorial como en el desarrollo de planificación urbana, basados en el
perfeccionamiento de la técnica constructiva y el conocimiento de topografía, hidrología
y climatología. Su actual estado de conservación nos permite conocer a fondo la
concepción inca del espacio arquitectónico, puesto que es nuestra responsabilidad
promover su protección e incentivar la investigación del sitio. Contemplando la
arquitectura de Ollantaytambo nos damos cuenta que la arquitectura inca es más
elaborada de lo que generalmente se cree, permitiéndonos dar cuenta de la constante
reinvención de las normas establecidas (llámese modelo urbanístico) que los incas
proponían en cada edificio, brindando soluciones únicas en cada lugar. Es así como
vemos el tratamiento de nuevos materiales como la riolita rosada (utilizada en el Muro
de los Seis Monolitos) y el uso de estructuras urbanas reticulares en el centro poblado,
lo que lleva a la constante replanteamiento de los conocimientos que tenemos hoy
gracias a las investigaciones arqueológicas.

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