El documento describe un conflicto de competencia jurisdiccional entre el Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi y un juez ordinario sobre un caso de violencia familiar. El conflicto surgió luego que una denuncia presentada ante autoridades indígenas también fue presentada ante la justicia ordinaria.
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El documento describe un conflicto de competencia jurisdiccional entre el Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi y un juez ordinario sobre un caso de violencia familiar. El conflicto surgió luego que una denuncia presentada ante autoridades indígenas también fue presentada ante la justicia ordinaria.
El documento describe un conflicto de competencia jurisdiccional entre el Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi y un juez ordinario sobre un caso de violencia familiar. El conflicto surgió luego que una denuncia presentada ante autoridades indígenas también fue presentada ante la justicia ordinaria.
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SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0067/2017
Sucre, 19 de octubre de 2017
SALA PLENA Magistrado Relator: Tata Efren Choque Capuma Conflicto de competencias jurisdiccionales Expediente: 18856-2017-38-CCJ Departamento: Oruro El conflicto de competencias jurisdiccionales suscitado entre el Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la pronvincia Eduardo Avaroa y el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, ambos del departamento de Oruro. I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA I.1. Contenido del memorial que inició el conflicto de Competencia Mediante memorial presentado ante el Tribunal Constitucional Plurinacional, el 10 de abril de 2017, cursante de fs. 136 a 141 vta., el Tata. Rafael Rodríguez Mamani, Jiliri Mallku del Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Eduardo Avaro a del departamento de Oruro, promovió conflicto de competencias jurisdiccionales, de acuerdo a lo siguiente: I.2. Hechos que motivan el conflicto de competencias jurisdiccionales A consecuencia de las supuestas agresiones que se suscitaron en la comunidad de Machohoca el 8 de marzo de 2014, entre Sonia Titi Villca, Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri Huanca de Villca, de inicio el caso fue de conocimiento de las autoridades indígena originaria campesina (IOC), por medio del corregidor Auxiliar Martiniano Lázaro Hurtado, quien en ejercicio de nuestro sistema jurídico al cual se encuentran sometidos los integrantes de la referida comunidad, trató de solucionar la controversia; empero, la denunciante faltando a las normas internas, también acudió ante la justicia ordinaria acusando en la vía penal ante la Fiscalía, la presunta comisión de los delitos de “Violencia Familiar o Domestica” y “Amenazas”, sin tomar en cuenta que estos asuntos referidos a agresiones entre miembros de las naciones y pueblos indígena originario campesinos, no se encuentran dentro de las exclusiones establecidas por la Ley de Deslinde Jurisdiccional, en razón a que, tradicionalmente corresponden ser resueltos por su propia jurisdicción que en este caso, es la estructura de la nación Jatun Killaka Asanajaqi, donde se produjeron los hechos; por lo que, las autoridades ordinarias de acuerdo a la Constitución Política del Estado no tienen competencia para conocer estos conflictos familiares que por cierto están vinculados a la ocupación del territorio. I.3. Actuados en la Fiscalía y el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata del departamento de Oruro El 26 de marzo de 2014, Sonia Titi Villca, presentó denuncia ante la Fiscalía de Challapata contra Justino Villca Titi por la presunta comisión de los delitos de “Amenazas”, “Violencia Familiar o Domestica” y “Tentativa de Asesinato”, posteriormente el 25 de julio del mismo año, fue ampliada contra Olimpia Lipiri Huanca de Villca. Sobre la base de estos antecedentes, Erick Bruno Herrera Herrera, Fiscal de Materia, el 28 de noviembre de 2016, presentó ante el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, la imputación en el caso 41/15, cursante de fs. 101 a 103, contra los nombrados denunciados, por la presunta comisión de los delitos de “Violencia Familiar o Domestica” y “Amenazas”. En mérito de los antecedentes expuestos, el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, resolviendo el reclamo de sobre jurisdicción, planteado por Rafael Rodríguez Mamani, Jiliri Mallku del Consejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi, mediante Auto 40/2017 de 20 de febrero, rechazó la solicitud de declinatoria de jurisdicción formulada por la autoridad IOC del referido Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Eduardo Avaroa del departamento de Oruro; en base a los siguientes argumentos: a) La competencia territorial y material de las jurisdicciones IOC y ordinaria, no pueden ser modificadas por la voluntad de las partes, y en caso de esta última, el art. 49 del Código de Procedimiento Penal (CPP) delimita claramente las reglas de la competencia territorial y las excepciones deben ser opuestas de manera fundamentada y con respaldo debidamente documentado, lo que en el caso no existe para reclamar la jurisdicción por concurrencia de los tres ámbitos de vigencia de la jurisdicción IOC; b) Los imputados Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri Huanca de Villca, dicen ser de la comunidad Churacani de la provincia Eduardo Avaroa; sin embargo la víctima, de acuerdo a lo manifestado por la propia autoridad IOC, no tiene esta condición y solo es “Yerna” del comunario Miguel Condori Quispe, y tampoco se acreditó documentado que Sonia Titi Villca, ocupa un espacio en la comunidad; c) Si bien, los delitos de “Violencia Familiar o Domestica” y “Amenazas”, no se encuentran excluidos por el art. 10.II de la LDJ, del conocimiento de la jurisdicción IOC; sin embargo, no demostraron que estos hayan sido siempre resueltos por aquellas autoridades de acuerdo a sus normas y procedimientos; y, d) El único elemento que concurre a favor de la jurisdicción IOC, es el referido al ámbito territorial, por cuanto el hecho que motivó el conflicto, se habría producido en la entrada de Carnaval en la referida comunidad Churacani. I.4. Petitorio La autoridad IOC demandante, solicitó al Tribunal Constitucional Plurinacional, declarar probada la competencia a favor de las autoridades IOC del Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Eduardo Avaroa del departamento de Oruro, y ordenar al Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, se aparte del conocimiento del proceso penal seguido por el Ministerio Público a denuncia de Sonia Titi Villca; citando al efecto los arts. 179 y 191.II de la Constitución Política del Estado (CPE). I.5. Admisión La Comisión de Admisión de este Tribunal por AC 0094/2017-CA de 25 de abril, cursante de fs. 143 a 147, de acuerdo a la atribución conferida por el art. 103.I del Código Procesal Constitucional (CPCo), admitió el conflicto de competencia jurisdiccional entre el Consejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Eduardo Avaroa y el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, ambos del departamento de Oruro. I.6 Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional Por AC 0094/2017-CA de 25 de abril, cursantede fs. 142 a 147; la Comisión de Admisión del Tribunal Constitucional, admitío el conflicto de competencias suscitado entre el Concejo del Gobierno Ariginario del Suyo Jatun killaka Asamajaqi de la provincia Eduardo Avaroa y el Juez Público de la Niñez y adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, ambos de departamento de Oruro; por lo que, la presente Sentencia constitucional Plurinacional es emitida dentro del plazo previsto por ley. II. CONCLUSIONES De la revisión de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente: II.1. El 26 de marzo de 2014, Sonia Titi Villca, presentó denuncia ante la Fiscalía de Challapata contra Justino Villca Titi por la presunta comisión de los delitos de “Amenazas”, “Violencia Familiar o Domestica” y “Tentativa de Asesinato”, dicha denuncia fue ampliada el 25 de julio del mismo año, contra Olimpia Lipiri Huanca de Villca, por los mismos ilícitos (fs. 9 a 10; y, 19 y vta.). II.2. Cursa declaración informativa de Sonia Titi Villca realizado el 8 de julio de 2014, señalando que el problema fue de conocimiento de Martiriano Lázaro Hurtado, Corregidor de Churacani, quien ante la negativa del presunto agresor para reconocer los gastos de curación recomendó concurrir al Hospital. En el mismo sentido, el informe preliminar caso 41/2014 de 5 de agosto, la investigadora asignada al Caso, Sargento 2do Elba Mamani Castañeta, en los detalles del hecho, refiere que el caso fue de conocimiento del indicado Corregidor de Churacani (fs. 22 a 24; y, 27 y vta.). II.3. El 26 de julio de 2016, el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata por medio del Fiscal Departamental de Oruro, conminó a presentar en el plazo de cinco días, Resolución conclusiva de la etapa preliminar, por cuanto habrían transcurrido más de dos años desde la apertura de la investigación penal (fs. 100). II.4. Erick Bruno Herrera Herrera, Fiscal de Materia de Challapata, el 28 de noviembre de 2016, presentó ante el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, imputación formal en el caso 41/15, contra Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri Huanca de Villca por la presunta comisión de los delitos de “Violencia Familiar o Domestica” y “Amenazas” (fs. 101 a 103). II.5. Cursa informe emitido el 22 de noviembre de 2016, por el Corregidor Territorial de la Comunidad Machohoca-Churacani y la Autoridad Originaria Ayllu Sullkayan Segundo “Norte Condo de la provincia Eduardo Avaroa; mediante el cual certifican que: 1) El litigio entre Sonia Titi Villca y por otro lado Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri de Villca, fue atendido excepcionalmente por las autoridades originarias de Churacani, mediante el Corregidor, Gasparín Pérez, el Tata Casique Candido Barcaya y su esposa Victoria Colquechambi; 2) El propósito de la atención fue lograr una reconciliación entre los litigantes para cancelar la demanda que se encontraba en la Fiscalía de Challapata; 3) No se logró un acuerdo por el monto de pago de $us4000.- (cuatro mil dólares estadounidenses) que pide la afectada, de los cuales solo Bs8000.- (ochocientos bolivianos) se acreditó en recibos; y, 4) Después del cuarto intermedio, ante la falta de acuerdo, se suspendió la audiencia sin fecha (fs. 120 a 121). II.6. Cursan copias del acta de reunión general de la comunidad Machohoca-Churacani del Ayllu Sullkayana Segundo de la provincia Eduardo Avaroa, realizada el 10 de diciembre de 2016; en la cual, respecto al conflicto entre Justino Villca y Miguel Condori, indicaron que debe ser resuelto en la comunidad, sin embargo la denunciante Sonia Titi, no tiene voluntad de resolver; por lo que, manifestaron que esta última familia se debe ir de la comunidad (fs. 127 a 128 vta.). II.7. También cursan en el expediente, credencial y acta de consagración de Rafael Rodríguez Mamani, como Jiliri MallKu, del Ayllu Malcoca, Marca Aroma del Suyo Jatun Killaka Asanajaqi (fs. 130 a 132). II.8. Finalmente cursa el Auto 40/2017 de 20 de febrero, por el que el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, rechazó la solicitud de declinatoria de jurisdicción formulada por la autoridad IOC del Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Eduardo Avaroa del departamento de Oruro (fs. 133 a 135). III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO El Jiliri Mallku del Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Eduardo Avaroa del departamento de Oruro, después de agotar el procedimiento previo de reclamo sobre ejercicio jurisdiccional; mediante memorial presentado ante el Tribunal Constitucional Plurinacional, el 10 de abril de 2017, planteó el conflicto de competencia contra el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, solicitando que dicha autoridad se aparte del conocimiento del proceso penal seguido por el Ministerio Público a denuncia de Sonia Titi Villca, contra Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri de Villca, por la presunta comisión de los delitos de “Violencia Familiar o Doméstica” y “Amenazas”, y se remita los antecedentes del mismo a su jurisdicción IOC. En dicho contexto, corresponde dilucidar el conflicto de competencias suscitados entre la jurisdicción IOC y la ordinaria en materia penal y establecer cuál de las autoridades es competente para resolver la controversia de los hechos ocurridos el 8 de marzo de 2014 en la comunidad de Machohoca- Churacani. III.1. El ejercicio de las funciones jurisdiccionales en el Estado Constitucional de Derecho Plurinacional Comunitario El constitucionalismo boliviano emergente de los movimientos sociales protagonizados por las naciones y/o pueblos indígena originario campesino junto a otros actores del pueblo boliviano, en busca de la transformación del Estado monocultural hacia el Plurinacional, tiene como principales características: i) La constitucionalización de la libre determinación de las naciones y pueblos indígena originario campesinos (NPIOC), en el marco de la unidad del Estado, que entre otros implica el derecho a su autonomía, el autogobierno, el derecho a su identidad cultural individual y colectiva, el respeto y ejercicio de sus instituciones económicas, políticas, sociales, jurídicas, y la consolidación de sus entidades territoriales, conforme a la Constitución Política del Estado y los instrumentos internacionales en materia de Derechos Humanos (DD.HH.); ii) El reconocimiento de la pluralidad de valores y principios, entre ellos los provenientes de los saberes ancestrales de las NPIOC, que habitaron y habitan el territorio boliviano; iii) La organización funcional y territorial del Estado con autonomías y descentralización, con la finalidad asumir el deber de: “…Constituir una sociedad justa y armoniosa e equilibrada, respetando el principio de la diversidad cultural, cimentada en la descolonización, sin discriminación ni explotación, con plena justicia social, para consolidar las identidades plurinacionales”, para la búsqueda del vivir bien; y, iv) El establecimiento del pluralismo jurídico igualitario, complementario, colaborativo y no invasivo, que se constituye en la garantía para la vigencia y respeto de los diferentes sistemas jurídicos vigentes en Bolivia, sean de carácter escrito u oral, cuya producción normativa obedece a fuentes propias. El Estado Constitucional de Derecho Plurinacional Comunitario, conlleva también, la aplicación extensiva y progresiva de los derechos económicos, sociales y culturales, con el propósito de constituir y consolidar una sociedad con diversidad cultural, justa y armoniosa, descolonizada y sin ninguna discriminación ni explotación. III.2. El reconocimiento constitucional del principio del pluralismo jurídico igualitario La Norma Suprema determina que la función judicial es única, pero se ejerce a través de las diferentes jurisdicciones. El art. 179.I de la CPE, determina que entre ellas figuran: “…La jurisdicción ordinaria ejercida por el Tribunal Supremo de Justicia, los tribunales departamentales de justicia, los tribunales de sentencia y jueces; la jurisdicción agroambiental por el Tribuna y jueces agroambientales; y, la jurisdicción indígena originaria campesina que se ejerce por sus propias autoridades…”. Al mismo tiempo el parágrafo II de la disposición constitucional citada, establece que:”…La jurisdicción ordinaria y la jurisdicción indígena originario campesina gozan de igual jerarquía″. De esto se desprende que los sistemas jurídicos propios de las NPIOC, deben ser respetados y aplicados en igual jerarquía que el sistema ordinario basado leyes emanadas del órgano legislativo. Así; el Estado, a través de su Órgano Judicial y Tribunal Constitucional Plurinacional e instituciones involucradas, en el cumplimiento de las funciones de impartir justicia, y en el diseño e implementación de políticas públicas, asume el deber constitucional de promover y fortalecer la justicia indígena originaria campesina (JIOC), en el marco de la Constitución Política del Estado y los instrumentos internacionales en materia de derechos humanos. Lo referido anteriormente, implica que, los conflictos jurisdiccionales suscitados entre las autoridades (IOC) con los impartidores de la justicia ordinaria y agroambiental o viceversa, deben ser resueltos en base al pluralismo jurídico igualitario imperante y el principio de interculturalidad, entendido este último como el fundamento que promueve el respeto de las diversidades de valores supremos y principios que rigen la vida en sociedad y la resolución de sus conflictos. III.3. Naturaleza jurídica del conflicto de competencias jurisdiccionales El conflicto interjurisdiccional, cuyo conocimiento y resolución se encuentra establecido en el art. 202 de la CPE, que entre las atribuciones del Tribunal Constitucional Plurinacional, establece, conocer y resolver: “11. Los conflictos de competencia entre la jurisdicción indígena originaria campesina y la jurisdicción ordinaria y agroambiental”; es una figura jurídica constitucional autónoma que tiene por objeto garantizar la supremacía constitucional, referidos a la vigencia del pluralismo jurídico igualitario, colaborativo, no invasivo y el respeto a los principios y valores supremos de la sociedad plural; de manera que, su análisis y resolución, no está sujeto estrictamente a las normas procesales. Si bien esta última, al referirse a la manera de promover o iniciar el mismo, refiere que la autoridad jurisdiccional, que se estima competente para conocer y resolver una determinada causa, debe cuestionar la competencia de la que viene conociendo el caso, pidiendo se aparte del conocimiento del proceso y se remitan los antecedentes a la autoridad reclamante; empero, no es menos evidente que, ninguna autoridad jurisdiccional de oficio o por voluntad expresa o tácita de las partes puede modificar los ámbitos sobre delimitación jurisdiccional constitucionalmente establecidos; de ello resulta que, los conflictos interjurisdiccionales pueden ser promovidos también por declinatoria de una autoridad que se considera incompetente para resolver un determinado asunto. Asimismo, la activación del reclamo de jurisdicción, no corresponde ser manejado de acuerdo a las reglas de excepción de incompetencia previstas en el procedimiento de la jurisdicción ordinaria. Como se tiene manifestado, los ámbitos de vigencia y ejercicio de las diferentes jurisdicciones constitucionalmente establecidas, están delimitados por la misma Norma Suprema, en cuyo contexto, el art. 190.I, determina que: “Las naciones y pueblos indígenas originario campesinos ejercerán sus funciones jurisdiccionales y de competencia a través de sus autoridades, y aplicarán sus principios, valores culturales, normas y procedimientos propios”, entendido como un sistema jurídico propio, para conocer y resolver controversias que afecten la vida de los IOC, respecto a los actos o hechos que se realizan en su territorio o cuando aquellos que se producen fuera de aquel, surten efectos al interior de estos. En relación a las autoridades ordinarias y agroambientales, su jurisdicción y competencias, surgen de los arts. 181 y 186 de la CPE, y una de sus particularidades es la división en diferentes materias, así como el civil comercial, penal, familiar, etc., lo que no sucede en el caso de las autoridades IOC, sus competencias son de carácter integra; es decir, conocen y resuelven conflictos, tomando en cuenta la afectación a sus principios, valores y bienes jurídicos relacionados con la pacífica y armoniosa convivencia en comunidad. III.4. La jurisdicción y su ejercicio en el Estado Plurinacional La jurisdicción y competencia como institutos procesales derivan del contenido del art. 178.I de la CPE, cuyo texto establece que: “La potestad de impartir justicia emana del pueblo boliviano y se sustenta en los principios de independencia, imparcialidad, seguridad jurídica, publicidad, probidad, celeridad, gratuidad, pluralismo jurídico, interculturalidad, equidad, servicio a la sociedad, participación ciudadana, armonía social y respeto a los derechos”. En esta línea, el art. 11 de la Ley del Órgano Judicial (LOJ) establece que la jurisdicción: “Es la potestad que tiene el Estado Plurinacional de administrar justicia; emana del pueblo boliviano y se ejerce por medio de las autoridades jurisdiccionales del Órgano Judicial”. El art. 12 de dicha disposición legal, sobre la competencia, señala, que: “Es la facultad que tiene una magistrada o magistrado, una o un vocal, una jueza o un juez, o una autoridad indígena originaria campesina para ejercer la jurisdicción en un determinado asunto”. En este sentido, dichos actos “sirven para proteger, asegurar o hacer valer la titularidad o el ejercicio de un derecho” y son “condiciones que deben cumplirse para asegurar la adecuada defensa de aquéllos cuyos derechos u obligaciones están bajo consideración jurisdiccional. III.5. La jurisdicción y competencias de las autoridades indígena originaria campesina (Jurisprudencia reiterada) De acuerdo al art. 30.II.14 de la CPE, las NPIOC gozan del derecho al ejercicio de sus sistemas jurídicos. En todo conglomerado social existe una racionalidad o coherencia y la institucionalidad propias, generadas como consecuencia de la vida social y el avance histórico. El núcleo esencial de esta realidad es la regulación social orientada a permitir, prohibir realizar uno o más actos humanos. Para la aplicación práctica de ese derecho fundamental, el art. 190.I de la Norma Suprema, establece que: “Las naciones y pueblos indígena originario campesinos ejercerán sus funciones jurisdiccionales y de competencia a través de sus autoridades, y aplicarán sus principios, valores culturales, normas y procedimientos propios”. De este enunciado se infiere que las autoridades IOC, constitucionalmente, están legitimadas para conocer y resolver controversias, sustentados en su legitimidad propia que equivale a la jurisdicción. Respecto a la competencia propia relacionada con la resolución de problemas, dimanan de sus instancias de decisión, que pueden ser: reunión, consejo, ampliado y tantachawi. Al aplicar la normatividad jurídica, deberán respetar el derecho a la vida, a la defensa y otros derechos y garantías establecidas en la Constitución Política del Estado, de todas las personas sin ninguna discriminación, constituyéndose de esta manera, el contenido de tales derechos, en el límite, al ejercicio de las funciones o atribuciones de todas las autoridades del sistema judicial. Del art. 191.I de la CPE, se deriva dos dimensiones que explican la jurisdicción propia: 1) El concreto o restringido, que fundamenta el vínculo particular de las personas que son miembros de la respectiva NPIOC; es decir, tienen domicilio permanente en él, sin que ello signifique, que tal miembro no pueda trasladarse a otros lugares del país, por motivos que atingen a sus intereses legítimos y de su familia; ya sea por un corto tiempo o prolongado. En esta comprensión, la posición de la concurrencia simultánea de los ámbitos de vigencia personal, material y territorial establecido por el art. 8 de la LOJ, corresponde al criterio señalado; y, 2) El extensivo, se desprende del art. 191.II de la Norma Suprema en relación con los arts. 13.I y II y 30.II.14 de dicha Ley Fundamental. El primer artículo nombrado señala que: “La jurisdicción indígena originaria campesina se ejerce en los siguientes ámbitos de vigencia personal, material y territorial”. Sobre este punto, resulta necesario remarcar que, el constituyente prefirió utilizar el término vigencia, en vez de la palabra competencia, con el propósito de evitar, la asimilación del sistema jurídico propio al derecho escrito de aplicación predominante en los Estados-nación, de carácter monocultural y de tendencia liberal, en contradicción de la concepción filosófica del Estado Plurinacional. Del art. 191.II de la CPE, antes mencionado, desde la perspectiva extensiva, se comprende que: 1) Sobre el ámbito de vigencia personal, están sujetos a esa jurisdicción, los miembros de la NIOPC, involucrados en un problema que afecte, principalmente, la vida comunitaria cuyas raíces se encuentran en la institucionalidad del territorio histórico del Qullasuyu y Abya Yala. Desde la posición de la interpretación extensiva de la norma jurídica, ese enunciado referido, alcanza a las personas que no necesariamente viven o residen con permanencia en una comunidad IOC; pero que, están vinculadas por ciertos intereses legítimos, por ejemplo la tenencia de tierras de cultivo, descendencia familiar o que se expresen someterse voluntariamente a la JIOC; sustentados en los principios de pluralismo e interculturalidad jurídica. En esta dirección, la SCP 0026/2013, ha determinado que: “…considerando que el derecho colectivo a administrar su justicia está relacionado con la construcción de su identidad social, es lógico aceptar que es posible el juzgamiento de personas que no necesariamente pertenezcan a la nación o pueblo indígena originario campesino pero que voluntariamente de manera expresa o tácitamente se someten a dicha jurisdicción…“. La SCP 1810/2014 de 19 de septiembre, sigue esta línea jurisprudencial; 2) Respecto al ámbito de vigencia material, las autoridades IOC conocen todos los asuntos sucedidos dentro de la jurisdicción de sus pueblos; sin embargo, no pueden conocer y resolver, lo establecido por el art. 10 de la LDJ, cuyo contenido está relacionado con los diferentes códigos y leyes. Para la aplicación de este artículo, se debe tomar en cuenta el carácter de la sociedad plural boliviana sustentada en el principio de la diversidad cultural. En este marco, según el art. 9.1 y 4 de la CPE, a través de sus órganos e instituciones públicas tiene el deber de promover y contribuir desde sus funciones a: “Constituir una sociedad justa y armoniosa, cimentada en la descolonización sin discriminación ni explotación, con plena justicia social, para consolidar las identidades plurinacionales. (…) Garantizar el cumplimiento de los principios, valores, derechos y deberes reconocidos y consagrados en esta Constitución”. En casos de conflicto de competencias jurisdiccionales, para resolver se debe tomar en cuenta la realidad social boliviana. En esta dirección, las NPIOC, presentan tres principales características: La sociabilidad, la coherencia y la organización. i) En relación con la primera, como en cualquier otro conglomerado humano, es la persona natural que se constituye en el centro de la vida cotidiana, en la producción y reproducción de las relaciones e interrelaciones sociales entre sí, y de éstas con la madre naturaleza. ii) La segunda, implica que las pautas o regulaciones culturales emergen como efecto de la necesidad de mantener la vida en armonía; y, iii) Respecto a la tercera, en toda sociedad, donde hay relaciones sociales, hay una forma de vida coherente, y por tanto hay organización, en tanto se determine ciertas funciones que serán delegadas a personas o grupos profesionales. De este sentido, la comunidad, de acuerdo a su forma de vida cultural, califica ciertos hechos como prohibidos o permitidos. En una sociedad culturalmente diversa, como el caso de Bolivia, no es admisible que los jueces letrados sigan contribuyendo el debilitamiento de la vigencia y aplicación de los sistemas jurídicos IOC, que a pesar de la imposición de políticas coloniales agresivas e injustas, pervive hasta el presente. En tal virtud, la peleas o riñas en las NPIOC aymaras son comprendidas como nuwasiña, que significa peleas o agresiones físicas mutuas entre dos personas o familiares, hechos que generan el uchhuchjaña que se entiende como o dolor o daño al cuerpo, a la familia y la toda la colectividad respectiva que, a su vez, provoca el desequilibrio y desarmonía. En cambio desde el Derecho Penal de tradición colonial, ese mismo hecho puede ser calificado como supuesto delito de lesiones graves y leves o intento de homicidio, pero sin tomar en cuenta el criterio de la comprensión cultural de los involucrados, situación que atentaría, principalmente, el Estado Constitucional de Derecho y la dignidad de las personas, así como de los pueblos; y, 3) Finalmente, referido el ámbito de vigencia territorial, constitucionalmente, por una parte, la jurisdicción en análisis, se aplica a las relaciones que se realizan dentro de la jurisdicción de una NPIOC. Este enunciado que se deriva del art. 191.II.3 de la CPE queda claro. Por otra parte, en este artículo mencionado, el texto que a continuación se cita, requiere ser desentrañado, estableciéndose de la siguiente forma: “… o cuyos efectos se producen dentro de la jurisdicción de un pueblo indígena originario campesino.” Los efectos, también se pueden producir desde fuera del pueblo correspondiente, por parte de personas, que ya no tienen domicilio permanente en él; pero que de alguna u otra forma mantienen relaciones con los miembros de la comunidad correspondiente, por diferentes motivos legítimos. Esta regla, en primer lugar, entre otros criterios, se fundamenta, principalmente, en los principios del pluralismo jurídico, interculturalidad, complementariedad y la igualdad. En segundo lugar, se basa en el deber del Estado, a través de sus órganos públicos, y en materia de justicia, mediante las autoridades jurisdiccionales, de respetar y garantizar la plena aplicación de los derechos fundamentales de las NPIOC establecidos en la Constitución Política del Estado y los instrumentos internacionales de derechos humanos, con el horizonte de consolidar las identidades plurinacionales, en el marco del principio de respeto de la autonomía territorial indígena originaria campesina, sin que se entienda, necesariamente, aquellas formalizadas o consolidadas, a través de la Ley Marco de Autonomías y Descentralización Administrativa “Andrés Ibáñez”, pero cuidando, en todo caso, que los derechos del resto de la población del país también tienen que ser garantizados efectivamente. En este sentido, la jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia, en el Expediente T-124907 de 15 de octubre de 1997, en revisión de una Tutela, sobre la jurisdicción indígena estableció que: “…al ponderarse los intereses que puedan enfrentarse en un caso concreto, atienda a la regla de ‘la maximización de la autonomía de las comunidades indígenas y; por lo tanto, la de la minimización de las restricciones indispensables para salvaguardar intereses de superior jerarquía‴. III.6. Análisis del caso concreto De acuerdo a los antecedentes del presente proceso; los hechos que dieron lugar a las actuaciones judiciales que suscitaron el conflicto interjurisdiccional, se produjeron en la comunidad IOC denominada “Machohoca-Churacani”, el 8 de marzo de 2014, entre Sonia Titi Villca, Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri Huanca de Villca; a cuya consecuencia, en un primer momento, los involucrados concurrieron ante la autoridad IOC “Corregidor”, que asumió conocimiento y gestionó la búsqueda de una solución concertada de la controversia; empero, ante el fallido de aquel mecanismo y la suspensión indefinida de las actuaciones de esta jurisdicción, la supuesta afectada, acudió ante el Ministerio Público, denunciando a Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri Huanca de Villca, la presunta comisión de los delitos de “Amenazas”, “Violencia Familiar o Domestica” y “Tentativa de Asesinato”; empero, el Fiscal de Materia de Challapata, el 28 de noviembre de 2016, después de más de dos año, lo imputó formalmente ante el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, por la presunta comisión de los delitos de “Violencia Familiar o Domestica” y “Amenazas”. A partir de lo señalado, las autoridades IOC del Concejo del Gobierno Originario del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Avaroa del departamento de Oruro, por medio del Jiliri Mallku Rafael Rodríguez Mamani, generaron el presente conflicto jurisdiccional, con el Juez que conoció la imputación formal en materia penal, en cuyo mérito solicitaron que, los antecedentes de dicho proceso sean remitidos a ellos. Según los demandantes, la jurisdicción ordinaria, no es competente para conocer dicha causa, puesto que antes de que ello suceda, las autoridades IOC del mencionado Concejo, ya estaban conociendo aquellos hechos, que de acuerdo a su sistema jurídico, deben ser resueltos al interior. Ahora bien, los involucrados en la agresión son parte de la familias integrantes de la comunidad “Machohoca-Churacani”; dicha conclusión resulta de sus vínculos que fueron puestos en evidencia por la propia denunciante quien sostuvo que, frente a las agresiones, en un primer momento concurrieron a la autoridad IOC de la comunidad, estos extremos fueron corroborados por las declaraciones informativas prestadas en el curso de las investigaciones desarrolladas por el Ministerio Público; de manera que, conforme al Fundamento Jurídico III.5 de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional, y contrariamente a lo señalado en el Auto interlocutorio 40/2016, se puede colegir la concurrencia del elemento personal, que fundamenta el ejercicio de la jurisdicción indígena originaria campesina, para resolver el caso en cuestión. Asimismo, no se puede poner en duda bajo ningún argumento que la indicada comunidad, forma parte del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Eduardo Avaroa del departamento de Oruro. También se tiene evidenciado que los hechos suscitados en el carnaval del 2014 entre familiares de la comunidad Machohoca-Chucani, además del daño personal causado, profundizaron las rupturas de las relaciones de su entorno en dicho conglomerado social. En este entendido, el ejercicio del ámbito de vigencia o competencia territorial, para la restauración de su armonía corresponde a las autoridades IOC del referido Suyu; por lo que, desde este punto de vista, no le corresponde al Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, conocer y resolver la controversia familiar; lo contrario, implicaría, vulnerar el principio de la libre determinación y autonomía de las NPIOC, pero a su vez, dichos actuados se enmarcarían en la previsión del art. 122 de la Norma Suprema, según la cual, son nulos los actos que emanan de personas que usurpen funciones o ejercen jurisdicción que no les compete. Por otro lado, las agresiones físicas entre IOC, como se tiene señalado no solo generan dolor y daño personal, sino también desequilibrio y ruptura de la cohesión familiar y de la vida en comunidad. El asunto mencionado, tradicionalmente fue resuelto por las propias comunidades afectadas, por cuanto, este tipo de hechos, no emergen del surgimiento de la organización del Estado nación, sino por el contrario, son resultantes de la vida en comunidad; por lo que, corresponde a la jurisdicción IOC respectiva conocer de estos asuntos o conflictos que histórica y tradicionalmente fueron resueltos de acuerdo a sus normas y procedimientos propios, empelando sus principios y valores que les permitan de la manera más adecuada restituir el orden interno. Respecto a este ámbito de vigencia o competencia material, el art. 191.II.2 de la Norma Suprema, señala que: “Esta jurisdicción conoce los asuntos indígenas originario campesinos de conformidad a lo establecido en una Ley de Deslinde Jurisdiccional.” En el presente caso, las agresiones físicas que se habrían suscitado en la comunidad Machohoca- Churacani, el 8 de marzo de 2014, entre Sonia Titi Villca, Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri Huanca de Villca, que ya fue de conocimiento de las autoridades propias del lugar, debió ser resuelto por aquellas autoridades de manera oportuna, tomando en cuenta que, el objeto del ejercicio jurisdiccional es la protección oportuna de los derechos y el restablecimiento de la convivencia armoniosa; empero, la falta de tutela oportuna por parte de sus autoridades, de ninguna manera puede ser entendida como renuncia al ejercicio de su propio sistema jurídico que le asiste como derecho colectivo, sino que ante estas situaciones, el afectado con la inacción o la demora, puede activar los mecanismos de tutela constitucional. Finalmente, pese a la concurrencia de los elementos que hacen al ámbito, personal, territorial y material, como delimitantes para el ejercicio jurisdiccional; en el caso concreto, se deben considerar los siguientes aspectos: a) El ejercicio jurisdiccional tiene por objeto, la tutela y protección oportuna de los derechos, tal cual establece el art. 115.I de la CPE; en cuyo contexto, el reclamo de jurisdicción, debe tener también por objeto la resolución pronta y efectiva de la controversia para el restablecimiento de los derechos y de la armonía social en la comunidad; por lo que, no se puede sustentar en el propósito de impedir la aplicación de las mecanismos correctivos y mucho menos socapar la lesión de los derechos, sino por el contrario, las autoridades reclamantes, deben actuar en procura de restituir el equilibrio que fue alterado por los hechos dañinos; y, b) Los operadores de la jurisdicción ordinaria, en el marco de la Declaración de las Naciones Unidades sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, referido a la consulta y cooperación interjurisdiccional a las autoridades de las NPIOC, antes de tramitar la causa, con el propósito de facilitar la restitución de la armonía social, deben adoptar todos los mecanismos que les permitan conocer si el problema surgió en una IOC, y si el mismo, ya fue de conocimiento por parte de sus autoridades, a efectos de promover y coadyuvar en su caso la atención oportuna. Consiguientemente, los hechos sobre agresiones ocurrido el 8 de marzo de 2014 en la comunidad “Machohoca-Churacani”, entre Sonia Titi Villca, Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri Huanca de Villca, del cual hubiese resultado directamente afectada la primera de ellos; recaen en el ámbito de la jurisdicción de las autoridades indígena originaria campesinas del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Avaroa del departamento de Oruro; en tanto que, el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata, no tiene jurisdicción y competencia para seguir conociendo la imputación formal contra los dos últimos, por la presunta comisión de los delitos de “Violencia Familiar o Domestica” y “Amenazas”. POR TANTO La Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional; en virtud de la jurisdicción y competencia que le confiere los arts. 202.11 de la Constitución Política del Estado; 12.II y 28.I.10 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional; resuelve, declarar: 1° COMPETENTE a las autoridades de la jurisdicción indígena originaria campesina del Suyu Jatun Killaka Asanajaqi de la provincia Eduardo Avaroa del departamento de Oruro, para conocer y resolver las agresiones sucedidas en la comunidad de “Machohoca- Churacani” el 8 de marzo de 2014; quienes deberán actuar de manera pronta y de manera efectiva en resguardo de los derechos y procurando la restitución efectiva de la armonía a la vida en comunidad. 2° Disponer que el Juez Público de la Niñez y Adolescencia e Instrucción Penal Primero de Challapata del departamento de Oruro, remita en el plazo de tres días, ante la autoridad indígena originaria campesina que promovió el conflicto, todos los antecedentes del proceso penal seguido por el Ministerio Público a denuncia de Sonia Titi Villca, contra Justino Villca Titi y Olimpia Lipiri Huanca de Villca por la presunta comisión de los delitos de “Violencia Familiar o Doméstica” y “Amenazas”. 3° Exhortar a las autoridades indígena originarias campesinas que promovieron el conflicto y reclamaron para sí la competencia y jurisdicción, asuman el conocimiento y solucionen el caso de manera pronta y efectiva, en resguardo de los derechos y el restablecimiento de la armonía comunal. Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional. No intervienen los Magistrados Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez, Dr. Ruddy José Flores Monterrey y Dr. Juan Oswaldo Valencia Alvarado por ser de Voto Disidente. Fdo. Dr. Macario Lahor Cortez Chavez. PRESIDENTE Fdo. Tata Efren Choque Capuma MAGISTRADO Fdo. Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales MAGISTRADO Fdo. Dra. Mirtha Camacho Quiroga MAGISTRADA