Emociones
Emociones
Emociones
Descripción de la obra: esta obra se desarrolla en el parque, un día cualquiera en el que el sol brilla, los
niños juegan y los pájaros cantan. Son seis los amigos que van a trabajar con las seis emociones básicas
en situaciones cotidianas. ¿Será alegría por saber que la carrera va a comenzar? ¿O asco al saber que lo
que hay de merienda no gusta a todo el mundo? ¡Vamos a verlo!
Personajes: Alba, Sara, Raquel, Nicolás, Alberto y Pablo en el papel de niños protagonistas. Un adulto,
maestra, que será el encargado de trabajar con las emociones al final del día.
Lugar de acción en el que se desarrolla la obra de teatro para trabajar las emociones: el parque.
Material necesario para la puesta en escena: una pelota, juguetes normales que se tengan en casa o en
la escuela para usar como atrezzo, una mariquita pequeña también de juguete y muchas ganas de
pasarlo bien.
Para representar todos actos de esta obra de teatro corta para trabajar las emociones se necesitan los
juguetes y la pelota que hemos preparado antes.
Alba: ¡Qué buen día hace hoy! Estoy muy contenta de que haya salido el sol y hayamos podido venir
todos juntos a jugar al parque en un día tan bonito como el de hoy.
Nicolás: Tienes razón, además, tenemos un montón de cosas para jugar. (Coge la pelota con las manos)
¿Queréis que vayamos a jugar un partido de fútbol?
Alba: Pues a mí no me apetece nada, yo prefiero que hagamos una carrera a ver quien llega antes a la
meta, ¿os parece?
Todos a una: ¡Vale! Hagamos una carrera a ver quien llega antes a la meta.
(Corren todos los niños a la vez y, cuando Raquel está a punto de llegar, Alba la adelanta)
Alba: ¡Qué bien! He ganado la carrera, soy la más rápida de todos. (Dice con cara sonriente)
Raquel: (habla con cara enfadada) De eso nada, has hecho trampa, iba a llegar yo primero pero te has
puesto justo delante de mi y no me has dejado avanzar.
Alba: (con rostro un poco serio) Yo creo que eso no es así, he llegado yo la primera a la meta y no he
hecho ninguna trampa.
Alberto: (se pone al lado de sus amigas) No pasa nada chicas, no hace falta que se enojen podemos
hacer la carrera otra vez. Aunque bien pesado, yo ya tengo hambre (se lleva la mano a la tripa). ¿Sabés
lo que hay de comer?
Raquel: Tienes razón, no merece la pena enfadarse. Pues hay de comer bocadillos de atún y zumos de
frutas.
Nicolás: ¡Qué asco! (Pone cara de no querer comer nada). A mí no me gusta nada el atún y menos aún
los zumos de frutas. Yo hoy no pienso merendar nada.
Alberto: Pero entonces luego vas a tener mucha hambre y muy poca energía para seguir jugando.
Todos los amigos se van hacia la mesa para merendar. Salen de escena. Se cierra el telón.
Pablo: (pone cara de sorpresa) ¡Mirad chicos! He visto una mariquita. Mi madre me dijo el otro día que
si la pones sobre la palma de tu mano, corre por todos lados y luego sale volando.
Sara: (quien está al lado de Pablo y ve también a la mariquita) Deja que se vaya, a mí todos los insectos
me dan mucho miedo.
Sara: Pero ¿y si me pica? Yo mejor me voy. (Tras decir esto se aleja y se pone a jugar de nuevo con la
pelota).
Justo en este momento interviene la maestra , el adulto que hace las veces de maestro o padre.
maestra: Chicos, es hora de recoger nuestras cosa y de ir a casa, se está haciendo tarde y aún tenemos
un largo camino por andar.
Todos: ¡Sí! Otro día venimos otra vez.Se ponen a recoger las cosas menos Alberto que se queda
pensativo y con cara triste.
Alberto: (Sigue con cara triste) Es que no me quiero ir aún del parque. Ni siquiera me ha dado tiempo a
jugar a mi juego favorito. (Se va corriendo porque está triste y no quiere hablar con nadie).
Se cierra el telón.
Siguen todos el parque. Se abre el telón y se ve a los amigos y a la maestra que se dirigen hacia donde
está Alberto.
Sergio: Alberto, es normal que estés triste por tener que irte del parque cuando aún quieres estar más
rato. Esa una emoción normal, no te tiene por qué dar vergüenza compartirla con los demás.
maestra: Las emociones son sentimientos normales que experimentamos todos a lo largo del día, como
te acaba de ocurrir a ti ahora mismo. Tú has notado tristeza por el hecho de no poder jugar más en el
parque. Es bueno que lo compartas con los demás y que lo intentes ver desde un punto de vista positivo.
Alberto: (quien aún está un poco triste). ¿Y como se hace eso de verlo desde un punto de vista positivo?
maestra: Muy sencillo, piensa que otro día vamos a volver al parque todos juntos y que vas a poder
jugar a tu juego favorito. Y piensa también que es hora de volver a casa, descansar y tomar una rica
cena.
Raquel: ¡Qué tontería! Eso de las emociones no vale para nada. Alberto se ha enfadado porque es un
niño pequeño.
maestra: No hables así Raquel. Las emociones son cosas que sentimos todos, niños y mayores, a diario.
Tú misma has notado una emoción básica hace un rato.
maestra: Pues la ira al pensar que Alba había ganado la carrera haciendo trampa y que tú habías perdido
por ese mismo motivo.
Raquel: (pone cara de asombro) Es verdad, no me había dado cuenta. (Se dirige a Alberto). Lo siento,
Alberto, no he debido hablarte así.
maestra: (sigue con su explicación de las emociones) Si lo pensáis bien, en la tarde de hoy ha habido
muchas emociones. Alba ha estado muy contenta de venir al parque, Pablo se ha sorprendido mucho al
ver a la mariquita y Sara ha notado miedo cuando la ha visto también y Nicolás ha experimentado asco
al saber la merienda que había preparada para hoy.
maestra: ¿Lo entendéis ahora mejor? Las emociones forman parte de nuestro día a día y son mucho más
fáciles de comprender si las respetamos y las compartimos con los demás.