LA CASA DE BERNARDA ALBA ● Las raíces de la frustración se pueden situar en un plano social con un

fuerte componente moral, lo cual conduce a señalar una serie de temas que
1. Introducción se unen con el central:
○ la moral tradicional y la presión social sobre los individuos (el
● Lorca escribió La casa de Bernarda Alba poco antes de su muerte, en 1936 y está
qué dirán y las apariencias),
considerada su obra maestra. No se estrenaría hasta 1945, y en Buenos Aires.
○ las diferencias sociales,
● Subgénero: ¿drama o tragedia?
○ la condición de la mujer en la sociedad española de la época
La obra se subtitula Drama de mujeres en los pueblos de España. Lorca rechaza el
(y las diferencias sociales entre hombres y mujeres),
concepto de tragedia porque para él la tragedia comportaba elementos míticos que
aquí no están presentes, como sí lo estaban por ejemplo en Yerma o en Bodas de ○ el honor,
Sangre. El realismo del lenguaje y ciertas expresiones cómicas serían rasgos propios
del drama, aunque la impresión de necesidad de catástrofe y la frustración nos ○ la pasión condenada a la soledad o la muerte...
recuerdan a una tragedia. Tiene facetas del drama rural pero Lorca trasciende ese
género y se alza a un nivel superior. Además, hay ciertos elementos que sirven de 4. La estructura
augurio, típicos de la tragedia, como ese anillo de compromiso de perlas que Pepe
el Romano regala a Angustias, y que como se señala en la propia obra, representa ● Estructura externa: la obra se estructura en 3 actos.
las lágrimas, adelanto del triste final.
● Interna: tres partes distintas en la obra.
Por otro lado, la génesis de la obra tuvo su punto de partida en figuras reales: no
1) Aparece la exposición de la situación, una localización espacio-temporal
estamos por tanto ante una obra puramente poética, sino de denuncia social, lo
y una presentación de los personajes. Se dice que ha muerto el señor Alba
cual entroncaría más con el drama que con la tragedia.
y que Bernarda va a imponer el luto en la familia.
2. El planteamiento 2) El desarrollo anuncia la boda de Angustias con Pepe el Romano y a
partir de este momento la tensión va en aumento. Se muestran las
Tras la muerte de su segundo marido Bernarda Alba impone a sus cinco hijas
envidias, y amores, de las demás hermanas, el misterio de las ventanas y de
como luto una reclusión. Se trata de la exageración de una costumbre real, de una
los encuentros nocturnos. El momento cumbre es cuando se desvela que
tradición llevada a extremos increíbles. Esa exageración sitúa la obra en el plano
Adela y Pepe han mantenido una relación.
de lo simbólico. En esa situación límite los conflictos, las fuerzas, las pasiones se
agrandarán hasta la exasperación. Catalizador de las fuerzas encerradas será la 3) La última parte, el desenlace, es trágico: el suicidio de Adela al creer esta
figura de Pepe el Romano, pretendiente de Angustias (la hija mayor y heredera) que su madre ha matado a Pepe.
pero atraído por la juventud y belleza de Adela (la menor) y amado a su vez, en
secreto, por Martirio, otra de las hermanas. 5. El espacio
3. Los temas La acción se desarrolla en la casa de Bernarda: un espacio cerrado. Es el mundo
del luto, del silencio de la ocultación. Este lugar es comparado con un convento,
● El tema central de la obra es el enfrentamiento entre autoridad y con un presidio similar al infierno que transmite una atmósfera sofocante. Existe
libertad o el conflicto entre la realidad y el deseo. Frente al una relación entre el interior de la casa y la represión a la que las hijas son
autoritarismo y la represión de Bernarda, las hijas encarnan desde la pasiva sometidas por el mundo exterior. De él llegan ecos de pasiones elementales o de
sumisión frustrante de las mujeres de la época en general, hasta la rebeldía un erotismo desatado (la anécdota de los segadores con la prostituta), pero
imposible de Adela.
también advertencias, como lo que le sucede a la hija de la Librada, que tiene un 7. El lenguaje
hijo siendo soltera. Estas dos anécdotas reflejan un mundo exterior también
regido por unas convenciones sociales (el qué dirán) que oprimen sobre todo a las La obra destaca por la maestría del diálogo: su fluidez, nervio e intensidad:
mujeres. Por otro lado, el pueblo es considerado un mal pueblo por tener pozos predominan las réplicas cortas y rápidas. El lenguaje lorquiano tiene además un
en vez de ríos, que simbolizarían la fuerza vital, el erotismo, y los pozos la pasión sabor popular. Está hondamente enraizado con el habla popular, especialmente en
reprimida, encerrada, y la muerte. la andaluza, que se puede observar en giros y palabras, en las hipérboles y en la
creatividad. Pero ese supuesto costumbrismo no es tal, porque la unión de realidad
6. Los personajes y poesía se da en cada momento. Hay giros que aparentemente son costumbristas
(“hay unas estrellas como puños”, “el me lleva a los juncos de la orilla”), y que
● Bernarda es una encarnación hipérbolica de las fuerzas represivas. pueden sonar típicamente andaluces, coloquiales, pero que en realidad es un
Representa las convenciones morales y sociales más añejas y la mentalidad lenguaje completamente reinventado con apariencia de popular. Además, en esta
tradicional vigente, la buena fachada aun cuando no se corresponde con la dimensión poética, destaca el continuo simbolismo:
realidad. Se opone a los impulsos eróticos. Tiene orgullo de casta: a todas
las hijas les recuerda las obligaciones que conlleva el ser “de su clase”. Su 8. La simbología
autoridad está simbolizada por el bastón y por ese lenguaje impositivo.
● El uso expresionista de los colores (o de la ausencia de colores). El blanco
● Las hijas viven en la reclusión impuesta y el deseo de mundo exterior. y negro: las paredes que contrastan con los vestidos de luto de las mujeres.
Obsesionadas por lo erótico, estos anhelos, a veces unidos al matrimonio, Blanco pureza, negro muerte. Sólo destaca en un momento dado el verde del
son su única manera de salir del encierro. El abanico de actitudes va desde vestido de Adela, que es la rebeldía, la libertad.
la sumisión o resignación hasta la rebeldía.
● El bastón: símbolo del poder tiránico, que por su forma representa los valores
○ Angustias: 39 años, hija del primer matrimonio y heredera de una patriarcales.
envidiable fortuna que atrae a Pepe. Ha perdido y la ilusión y la
pasión. ● Los caballos, la masculinidad, el desenfreno y el deseo sexual.
○ Magdalena: 30 años, sumisa, pero sorprende con protestas. Ella
prefería ser hombre ya que ya ha abandonado la idea de casarse. ● El calor, presente en todo momento y mencionado por los personajes
○ Amelia: 27 años, tímida y asustadiza, pudo haberse casado si su constantemente (la pasión reprimida).
madre no se hubiera opuesto. Enferma, depresiva y pesimista.
● El agua estancada, que es la muerte (en el pueblo no hay ríos, solo pozos).
○ Martirio: 24 años. Envidiosa, resentida, ama en secreto a Pepe el
Romano. Es quizá el personaje más complejo. Será la que al final ● La luna: por antonomasia representa la muerte pero también el erotismo.
grite “se acabó Pepe el Romano” (mintiendo, sólo por desdén
hacia Adela) y desencadene el suicidio de su hermana. ● El anillo de perlas, augurio del triste final.
○ Adela: 20 años, encarnación de la abierta rebeldía. Se trata de la
joven más hermosa y apasionada. Destaca por su vitalismo Y muchos más. Por eso, aunque el propio Lorca quiso con esta obra hacer un
(simbolizado en el vestido verde), su pasión y su fuerza. Entra en retrato social, una especie de fotografía realista, y aunque evitara el verso y la
desafío con la moral establecida. inclusión de cancioncillas como en sus otras obras, no se puede decir que
○ Otros personajes: María Josefa, la abuela que vence al poder a Bernarda no sea una obra poética. La poesía está imbricada todo el tiempo, de
través de la locura; la Poncia, vieja criada que interviene en las una manera mucho más sutil, pero ahí está. Ese es el verdadero hallazgo de
conversaciones y los conflictos, advierte y da consejos; Pepe el Lorca: combinar realismo y denuncia social con la poesía más estilizada, sin
Romano, que sin aparecer es omnipresente, es la encarnación del que nos demos cuenta.
hombre, del oscuro objeto del deseo.