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C.A.

de Concepción
rtp
Concepción, veintinueve de abril de dos mil veintiuno.
VISTOS:
En estos antecedentes rol 18649-2020 del libro Protección,
comparecen Álvaro Saavedra Pinto, abogado, domiciliado en
Parcela N° 13, camino La Fortuna, comuna de Lebu, por si y en
representación de Filomena Ester Monsálvez Aillón,
pensionada, domiciliada en Parcela N°8, Sector Las Parcelas,
Fundo La Esperanza, comuna de Lebu; Tatiana Inés Sanhueza
Monsálvez, labores de casa, domiciliada en Parcela N°8, Sector
Las Parcelas, Fundo La Esperanza, comuna de Lebu; Nelson
Iván Alfonso Iglesias Saavedra, comerciante, domiciliado en
calle Carrera N°635, comuna de Lebu; Gladys Angélica Pinto
Candia, pensionada, domiciliada en calle Pérez N° 299, comuna
de Lebu; Silvana Beatriz Saavedra Pinto, funcionaria pública,
domiciliada en calle Luis Cruz Martínez N°13, comuna de Lebu;
Paulina Victoria Saavedra Vergara, estudiante universitaria,
domiciliada en calle Alcázar N° 267, comuna de Lebu; y Fabián
Ignacio Saavedra Vergara, estudiante universitario, domiciliado
en calle Alcázar N° 267, comuna de Lebu, interpone recurso de
protección en contra del "Comité de Allegados Rayen",
representada legalmente por Ingrid Teresa Yévenes Moya,
domiciliada en calle Weelwrigth 421, Población Isabel Riquelme, y
para estos efectos en Camino La Fortuna sin número, sector Las
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Parcelas, ambas direcciones de la comuna de Lebu.


Funda su recurso señalando que los recurrentes son
titulares de dominio de distintos terrenos, dentro del fundo La
Esperanza, comuna de Lebu. Agregan que tomaron conocimiento
en la primera quincena del mes de diciembre del año 2020 de que
las obras que se ejecutaban en cerro vecino a sus domicilios,
estaban siendo causa directa de graves vulneraciones de sus
derechos, dado que se percataron que no tenían las garantías
mínimas de seguridad y mitigación de riesgos geológicos, por lo
que esta acción constitucional de protección se presenta dentro
del plazo señalado en el Auto Acordado.
Indican que los actos ilegales y arbitrarios consisten en la
actual ejecución por parte de la recurrida y/o personal de su
dependencia, de las obras de movimientos de tierras, tala de
árboles del cerro en una toma ilegal del "Comité de Allegados
Rayén", sin haber adoptado las medidas necesarias a fin de
mitigar los efectos y riesgos que dicho proceso ha causado,
obrando sin autorizaciones de las entidades fiscalizadoras,
exponiendo la integridad física, psíquica y la vida de sus
representados, mientras habitan sus inmuebles.
Refieren, que se encontraron ante una actuación material de
parte de la recurrida, de carácter permanente, que afecta
gravemente a varias familias del sector Las Parcelas, Fundo La
Esperanza, de la comuna de Lebu, que están expuestas, a diario,
a las consecuencias que se están produciendo a partir de la
forma en que la recurrida y sus maquinarias están ejecutando las
obras de movimientos de tierras, tala indiscriminada de árboles,
que se ejecutan contiguo a sus domicilios, además en el área de
estudio, anteriormente existieron muchas labores mineras, esto
es, explotación de pirquenes y minas de carbón, en toda su
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superficie.
En el inmueble, los recurridos mantienen un proceso de
toma de terrenos y de construcción de viviendas a futuro, y hoy
están con permanentes movimientos de tierra y tala
indiscriminada de árboles, sin estudios geológicos, ni medidas de
seguridad.
Refieren, que no se ha hecho el drenaje de aguas lluvias, ni
de la vertiente que pasaba entre medio del cerro y que las
maquinarias taparon con tierra, pero las aguas siguen filtrándose.
Denuncia como afectadas la garantía del derecho a la vida
e integridad física y psíquica de las personas, consagrada en
el artículo 19 N° 1 de la Constitución Política de la República,
por el hecho de no contar con un permiso de construcción,
aplicando un proceso o técnica constructiva, que deja de
lado toda consideración o respeto por la situación que afecta
a los vecinos. Los daños involucran las viviendas de los
recurrentes y sus familias, afectan la tranquilidad emocional
y espiritual que cualquier persona desea mantener en la
privacidad de su hogar.
Además, lesiona el derecho de propiedad en sus diversas
especies sobre toda clase de bienes corporales o
incorporales consagrado en el artículo 19 N° 24 de la
Constitución Política de la República, atendido que los
recurrentes son propietarios de los inmuebles ubicados en el
sector, también los son de los enseres y bienes muebles que
se encuentran al interior de esos inmuebles.
Finaliza indicando que debió presentarse este recurso de
protección por la conducta ilegal y arbitraria en que han
incurrido, por ello, corresponde que sean condenadas,
solidariamente, a pagar las costas procesales y personales
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de la causa.
Solicita se acoja el recurso, declarando que debe
restablecerse el imperio del derecho sobre la base de cesar, en
forma inmediata, en la ejecución de cualquier acto material que
implique o pueda implicar afectación, perturbación o amenaza de
las garantías constitucionales invocadas en esta presentación, sin
perjuicio, además, de establecer su obligación en orden a
proceder, también en forma inmediata, a reparar los daños
causados, a su propio costo y a entera satisfacción de los
afectados, con expresa condenación en costas.
Informó Orlando Henríquez Morales, Mayor de
Carabineros, señalando que no se registran denuncias que
tengan relación directa con los hechos materia del recurso.
Indica que se constituyeron en el lugar el 5 de enero,
pudiendo constatar que el terreno se encuentra ocupado por
personas vinculadas a reclamaciones y reivindicaciones
territoriales étnicas, además que han instalado cercos y
establecimiento de nuevos deslindes, además de colocar
banderas y letreros alusivos, observables a simple vista.
Al ingresar, se constata que el terreno se encuentra con
movimiento de tierra y con deslinde de terreno, se aprecian
viviendas tipo mediagua construidas por personas del Comité.
También se observa que se realizó tala de árboles de bosque de
pino.
Se encuentra también una máquina tipo excavadora que
realiza trabajos de movimiento de tierra. El operador manifiesta
que está realizando trabajos para el comité de Allegados Rayén,
y se le comunica que debe paralizar la obra, por la concesión de
orden de no innovar.
Informó Claudio Parraguez Rojas, Director de Obras
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Municipales de la Municipalidad de Lebu, quien indica que en el


camino rural La Fortuna, queda dentro de terrenos particulares,
se efectuaron movimientos de tierra, explotación forestal, trabajos
de taludes. El frente de las faenas ejecutadas a la vía es de 189
metros, en un área aproximada de 1,1 hectáreas.
Agrega que se fiscalizó la obra, verificando un camino
existente forestal del que se están generando explanadas de
terreno con acceso a la vía particular, y una sola edificación en
proceso de construcción, que no tiene permiso ingresado a la
Dirección de Obras Municipales. No es posible determinar el o los
propietarios del terreno intervenido, pues no se expone ningún
tipo de título de dominio de las personas que se encuentran en el
lugar.
Indica, que el terreno al ser rural no se rige por plan
regulador comunal. Pero indica que no es posible subdividir para
formar poblaciones ni levantar construcciones, salvo que fueren
necesarias para la explotación agrícola o para vivienda del
propietario. Ello debe ser cautelado por Seremi de Vivienda y
Urbanismo. Además, la construcción de conjuntos habitacionales
debe contar con autorización de Seremi de Agricultura, previo
informe favorable de Seremi de Vivienda y Urbanismo.
Además, expone, que se prohíbe en áreas rurales, a los
dueños de predios colindantes con caminos públicos, ocupar las
franjas de 35 metros que se ejecuten en variantes o caminos
nuevos nacionales con construcciones que en el futuro
perjudiquen su ensanche, ello lo fiscaliza la Dirección de
Vialidad.
Finaliza indicando que la explotación forestal visualizada se
deberá acoger al reglamento 193 de 1998 del Ministerio de
Agricultura y reglamento general N° 701 de 1974, sobre fomento
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forestal, que señala los permisos y procedimiento para dicha


actividad, no siendo de su competencia la fiscalización.
Informó Jorge Chaparro Urrutia, Ingeniero Civil del
Departamento Provincial SERVIU Arauco, señalando que se
realiza reconocimiento visual el 14 de enero de 2021, en la zona
de los hechos, por el camino público, sin acceder a la propiedad.
Se observa una serie de demarcaciones y lienzos artesanales,
que dan cuenta de la ocupación de un área de la propiedad
forestal en sector Las Parcelas en el costado poniente del camino
La Fortuna.
Indica, que se observa que el área intervenida corresponde
a una ladera de cerro con pendiente fuerte (superior a 45%), en
zona de plantaciones forestales con monocultivos de pino insigne
en estado adulto. Se aprecia movimientos masivos de tierra,
correspondientes a cortes de terreno, generación de terraplenes y
derrames de tierra, las que por su envergadura, debieron ser
realizadas por maquinaria pesada, para formar terrazas para la
instalación y levantamiento de estructuras o viviendas. Se ve falta
de lógica y estructuración adecuada de los movimientos de tierra,
que se generan de forma espontánea, disgregada y con diversas
técnicas de conformación de terrazas.
Agrega, que de los derrames de terreno existentes al límite
del camino público, se observa la falta de compactación y control
del terreno removido, deslizamiento de rocas, falta de sistemas
de contención y falta de protección superficial en taludes.
Además se aprecia retiro, extracción y corte de árboles.
Algunos, cortados parcialmente como medio de retención del
terreno o sistema de contención de tierras. Refiere que el retiro
de árboles es perjudicial para la protección superficial del terreno,
considerando la pendiente y el tipo de suelo, fino de mezclas de
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limos y arcillas, además, no retirar las raíces, también es


perjudicial, ya que al ser materia orgánica, su descomposición
generará a futuro reacomodo del terreno, generando
posiblemente asentamientos y/o deslizamientos de terreno.
Algunos árboles no retirados en forma momentánea están
deteniendo la caída de rocas y derrames de tierra, desde las
zonas altas hacia los puntos más bajos del sector.
Afirma que hay un curso de agua, que baja por una especie
de cuenca, continuo y de bajo caudal en esta época, pero debe
aumentar considerablemente su flujo en época de lluvias.
Explica que al parecer en zona alta, los movimientos de
tierra no respetaron la conformación natural de las cuencas. La
situación genera un alto grado de inseguridad y riesgo, por la
potencial situación de arrastre y socavaciones del terreno por
acción del agua especialmente una vez llegada la época de
lluvias. No se observan fosos, contrafosos o sistemas de
captación de aguas lluvia o aguas de cauces superficiales, para
proteger los taludes de la acción de arrastre o infiltración de agua,
adicionalmente la zona intervenida no fue cuantificada, pero se
aprecia bastante extensa, longitud de a lo menos 23 metros y
hacia el interior un ancho de 70 metros.
En cuanto a la zona, indica que es rural, pero casi
colindante con zona urbana, con características topográficas que
comparte con zona ZR2, restricción por riesgo de remoción, en la
que se prohíbe uso residencial, viviendas en edificación colectiva,
aislada y vivienda social.
Sostiene que se debe considerar la existencia de pirquenes
subterráneos o eventuales fallas geológicas, por lo que antes de
cualquier proyecto, debe considerarse un informe geológico
especializado.
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Finaliza señalando que el Comité no cuenta con proyecto


ingresado al banco de proyectos habitacionales del SERVIU.
Informó Javier Grandón Baeza de la Unidad de
Fiscalización de la DGA Región del Biobío señalando que se
constata, en visita a terreno de 18 de enero de 2021, que existen
vestigios de un cauce natural que fluye a través de una quebrada,
interrumpido por obras de habilitación de caminos y accesos a
lotes al interior del predio. Se trata de un terreno forestal,
intervenido por el Comité Rayen, con el fin de habilitar sitios para
la construcción de futuras viviendas y caminos de acceso dentro
del predio, a través de tala de árboles, movimientos de tierra e
intervención del flujo de cauce de la quebrada sin nombre.
Indica, que existía en la zona una quebrada que permitía el
escurrimiento de las aguas superficiales en la cuenca, que por las
intervenciones ha quedado obstruida en el normal escurrimiento
de las aguas, pues está dividida en dos tramos. Las obras no
mantienen condiciones de conservación y protección del cauce, y
más aún, se han realizado rellenos parciales como eliminación de
tramos de escurrimiento, generando variaciones en la escorrentía
superficial de las aguas pluviales.
Finaliza indicando que es oportuno instruir a la Unidad de
Fiscalización, Conservación y Protección de Recursos
Hídricos que permita establecer responsabilidades en las
intervenciones efectuadas en el cauce natural de la quebrada.
Informó Claudio Deney Torrealba, Director de Vialidad,
indicando que el artículo 39 del DFL 850 de 1997, prohíbe a los
dueños de predios colindantes con caminos públicos nacionales,
ocupar las fajas de 35 metros medidos a cada lado de los cierros
actuales o los que se ejecuten en variantes o caminos nuevos
nacionales con construcciones de tipo definitivo que en el futuro
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perjudiquen su ensanche.
Explica, que el camino colindante al predio es la
continuación del camino público enrolado como P480, pero por
encontrarse ese tramo en sector urbano y no teniendo la especial
declaración de camino público en zona urbana a que alude el
artículo 25 letra a) del DFL 850, es técnicamente una calle y no
un camino, así la vía que accede al predio en cuestión, no solo no
es un camino nacional, sino que además no es camino público,
por encontrarse en sector urbano, de conformidad a la legislación.
Informó Ingrid Yevenes Moya, presidenta del Comité de
Allegados Rayén, quien en primer lugar alega la
extemporaneidad en la interposición del recurso, toda vez que
éste se refiere a movimientos de tierra a inicios de diciembre y el
recurso se dedujo el 31 de diciembre de 2020. Pero en
realidad, las obras iniciaron en enero de 2020, según constancia
que la recurrida deja en Carabineros el 21 de enero. En
septiembre, celebran contrato con MAVEPAL LTDA para los
movimientos de tierra y antes se hizo tala de árboles, por lo que
queda de manifiesto que la presentación es extemporánea.
Respecto del fondo, señala que se trata de un grupo de 33
familias de Lebu, que lleva años luchando para obtener ayuda
para conseguir un subsidio que les permita obtener una vivienda
digna. Agrega, que se tomaron un terreno, en el que han
ejecutado obras con sus ahorros, y tratando de gestionar la
compra del terreno a la encargada del mismo.
Invocan artículo 25.1 de la Declaración Universal de los
Derechos Humanos, respecto al derecho a la vivienda. Lo mismo,
respecto del artículo 11 del Pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales.
Explica que la mayoría de construcciones en Lebu están
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emplazadas en lugares altos de la ciudad, por lo mismo como


comité tomaron la decisión de realizar la toma y que ninguna de
las familias recurrentes tiene su residencia en el sector, salvo el
abogado compareciente, por lo que no hay riesgo a su vida.
Finaliza señalando que ninguna de las garantías que se
denuncian han sido vulneradas.
Informó Francisco Lagos Arriagada, SEREMI de
Agricultura de la Región del Biobío, quien señala que revisados
los registros desde el año 2014 a la fecha no hay información, ni
antecedente alguno acerca de los hechos en que se funda el
recurso de protección., en especial, no existen antecedentes
acerca de la solicitud formulada por el Comité de Allegados
Rayen para construir fines ajenos a la agricultura en el área rural
de la comuna de Lebu.
Informó Jorge Becar Pereira y Ximena Gebauer Parra,
en representación del tercero Forestal Arauco S.A., señalando
que la empresa es dueña de parte del predio denominado fundo
La Esperanza, salvo dos retazos, que se reservaron los
anteriores dueños.
Indica que durante el año 2020, han sido víctimas de delitos
que vulneran su derecho de propiedad, pues personas ajenas a la
empresa han ingresado al predio en forma irregular, cometiendo
delitos de daños y tala ilegal de árboles.
Agregan, que el 7 de julio de 2020, se constata tala ilegal de
madera que motivó se formulara denuncia ante Carabineros, lo
mismo, el 4 y 22 de agosto de 2020. El 24 de agosto se constató
que sujetos desconocidos, presumiblemente vinculados al Comité
de Allegados Rayén, causaban daños en el portón de acceso al
predio y realizaban una tala ilegal y posterior hurto de madera,
hechos que dieron lugar a la denuncia ante Carabineros de Chile.
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Hechos que motivaron la presentación de una querella criminal


contra quienes resulten responsables, por los delitos de hurto
simple y daños simples, la cual ingresó bajo el RIT 2037-2020 del
Juzgado de Letras y Garantía de Lebu.
Finaliza señalando que con fecha 24 de octubre de 2020 a
raíz de hechos similares, Forestal Arauco S.A efectuó denuncia
ante Carabineros de Chile.
Informó Gilda Espinoza Ahumada, Jefe de la División
Jurídica del Ministerio de Vivienda y Urbanismo señala que los
hechos que motivan el recurso se producen en el contexto de una
toma ilegal y están referidos a movimientos de tierra y a talas de
árboles, por tanto no dicen relación con un proceso legal de
“subdivisión predial” y tampoco de “proyectos de urbanización”,
de proyectos inmobiliarios o de construcción habitacional,
respecto de los cuales la SEREMI de Vivienda y Urbanismo le
hubiere correspondido concurrir con su aprobación o certificación
de acuerdo a las normas legales correspondientes.
Indica, que ha quedado claro a través del informe evacuado
por el SERVIU que no existe ningún proyecto de construcción de
viviendas en el terreno en referencia, que hubiere ingresado a
dicho servicio para su Comité de Allegados recurrido no es
beneficiario de ningún subsidio estatal otorgado para la
construcción de viviendas en los terrenos donde están realizando
el movimiento de tierra y en ninguna parte.
Agrega que la Secretaría Regional Ministerial de Vivienda y
Urbanismo de la región del Biobío no tiene conocimiento previo
de que se esté desarrollando alguna subdivisión, y por los hechos
descritos en el recurso, estos escapan a las competencias legales
y/o reglamentarias de ese Ministerio.
Precisa que la SEREMI MINVU de la región del Biobío solo
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toma conocimiento de este tipo de hechos en las áreas rurales


situadas fuera de los límites del Plan Regulador Metropolitano de
Concepción.
Informó Sebastián Maldonado Soto, en representación
de don Patricio Kuhn Artigues, Intendente Región del Biobío,
señala que revisados los registros ningún antecedente obra en
poder de ese servicio respecto de los hechos denunciados por los
recurrentes, así como tampoco respecto del “Comité de allegados
Rayen”. Agrega, que ese intendente carece de facultades para
intervenir en el presente conflicto derivado entre los recurrentes y
el Comité de allegados Rayén”.
Informó Ana Paola Hormazabal Navarrete, Directora
Regional CONADI Región del Biobío, señalando que de los
antecedentes del recurso no se desprende algún asunto
relacionado con las materias que sean competencia de esa
Corporación establecidos en la ley 19.253. Agrega que los
recurrentes a través de su representante y también actor no han
indicado verbigracia, su condición indígena o las de los inmuebles
involucrados. Respecto de los recurridos que forjaron un comité
regido por las normas comunes sobre la materia, no siendo una
entidad indígena regulado por la ley indígena, y el terreno que
ocupan, sería uno afecto a las normas civiles, por lo que carecen
de idoneidad para pronunciarse sobre el asunto.
Informando Raúl González Cáceres, Director Regional (S)
Zona Sur del Servicio Nacional de Geología y Minería, quien
señala que se registran faenas mineras en el sector donde
ocurren los hechos materia del recurso, entre los años 2012 y
2014.
Se trajeron los autos en relación.
CON LO RELACIONADO Y CONSIDERANDO:
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I.- En cuanto a la alegación de la extemporaneidad:


1°.- Que doña Ingrid Yevenes Moya, presidenta del Comité
de Allegados Rayén, alega primeramente la extemporaneidad del
recurso, manifestando que los movimientos de tierra se iniciaron
en enero de 2020, y el recurso se dedujo el 31 de diciembre de
2020, por lo que, a su juicio, queda de manifiesto que la acción de
protección en estudio, fue deducida fuera del plazo de treinta días
corridos que establece el respectivo Auto Acordado dictado por la
Excma. Corte Suprema, al efecto, de manera que la presentación
cautelar es extemporánea.
Que los recurrentes manifiestan que en la primera quincena
de enero de 2021 tomaron conocimiento de los actos en que se
funda el presente arbitrio procesal.
2°.- Que conforme al numeral 1 del Auto Acordado sobre
Tramitación y fallo del Recurso de Protección sobre garantías
constitucionales, el recurso o acción de protección se interpondrá
ante la Corte de Apelaciones en cuya jurisdicción se hubiere
cometido el acto o incurrido en la omisión arbitraria o ilegal que
ocasionen privación, perturbación o amenaza en el legítimo
ejercicio de las garantías constitucionales respectivas, o donde
éstos hubieren producido sus efectos, a elección del recurrente.
3°.- Que no existen antecedentes que permitan dar por
acreditado –como sostiene la recurrida-, que los recurrentes
tuvieron conocimiento de los hechos en que funda su acción, en
una fecha distinta a la que indican -en la primera quincena de
2021-, por lo que deberá estarse a sus dichos en este extremo,
situación que lleva a concluir, que el recurso fue interpuesto
dentro del plazo de treinta días que establece el Auto Acordado
de la Excma. Corte Suprema sobre la materia, y en
consecuencia, la alegación de extemporaneidad será rechazada.
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En cuanto al fondo.
4°.- Que el recurso de protección de garantías
constitucionales establecido en el artículo 20 de la Constitución
Política de la República, constituye una acción de urgencia, de
naturaleza autónoma, destinada a amparar el legítimo ejercicio de
ciertos derechos fundamentales preexistentes que en esa misma
disposición se enumeran, mediante la adopción de medidas de
tutela ante un acto u omisión arbitrarios o ilegales que cauce
privación, perturbación o amenaza en su legítimo ejercicio.
Por consiguiente, resulta requisito indispensable de la
acción constitucional que se examina la existencia de un acto u
omisión que sea ilegal, esto es, contrario a la ley, o que sea
arbitrario, es decir, sin razón o fundamento y producto del mero
capricho de quien incurre en esa conducta, que debe producir
como consecuencia alguna de las situaciones o efectos que se
han indicado respecto de las garantías protegidas.
5°.- Que los recurrentes manifiestan que son dueños de
distintos terrenos, cuyas copias autorizadas de inscripciones de
dominio acompañan, del sector Las Parcelas, Fundo La
Esperanza, comuna de Lebu, donde tienen emplazadas sus
viviendas, y que en la primera quincena del mes de diciembre del
año 2020 tomaron conocimiento que en el cerro vecino, contiguo
a sus propiedades, se estaban ejecutando obras de movimientos
de tierras, tala de árboles, en el lugar en que históricamente ha
sido un centro de "subsidencia minera", sin efectuar drenaje de
aguas lluvias, ni de la vertiente que pasaba entre medio del cerro,
y que las maquinarias taparon con tierra, pero las aguas siguen
filtrándose. Especifica, que estos trabajos fueron dispuestos por
el "Comité de Allegados Rayén", los que previamente efectuaron
una toma ilegal del terreno que pertenece a Forestal Arauco y se
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instalaron en lugar, con el fin de construir sus viviendas, sin


adoptar las medidas necesarias para mitigar los efectos y riesgos
que dicho proceso de movimiento de tierras ha causado, como
tampoco han realizado las gestiones ante los organismos
competentes, para obtener las autorizaciones respectivas.
Estiman afectadas sus garantías fundamentales del derecho
a la vida e integridad física y psíquica de la persona y el derecho
de propiedad en sus diversas especies sobre toda clase de
bienes corporales o incorporales, consagrados en el artículo 19
N° 1 y 24 de la Constitución Política de la República.
Solicita se acoja el recurso, declarando que debe
restablecerse el imperio del derecho sobre la base de cesar, en
forma inmediata, en la ejecución de cualquier acto material que
implique o pueda implicar afectación, perturbación o amenaza de
las garantías constitucionales invocadas en este presentación sin
perjuicio, además, de establecer su obligación reparar, a su
costo, los daños causados, con expresa condenación en costas.
6°.- Que la recurrida señala que el “Comité de Allegados
Rayén” está integrado por 33 familias de Lebu, que llevan años
luchando para conseguir un subsidio que les permita obtener una
vivienda digna, derechos que les reconocen los tratados
internacionales, en los artículos 25.1 de la Declaración Universal
de los Derechos Humanos y 11 del Pacto Internacional de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales, para los cual se
tomaron un terreno, en el que han ejecutado obras, pagadas con
sus ahorros, y tratando de gestionar la compra del terreno a su
dueño.
Agrega, que ninguna de las familias recurrentes tiene su
residencia en el sector, salvo el abogado compareciente, por lo
que no hay riesgo a la vida de las otras personas que reclaman.
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7°.- Que también informaron el Mayor de Carabineros


Orlando Henríquez Morales, señalando que no se registran
denuncias que tengan relación directa con los hechos materia del
recurso; que se constituyeron en el lugar el 5 de enero de 2021,
pudiendo constatar que el terreno se encuentra ocupado por
personas vinculadas a reclamaciones y reivindicaciones
territoriales étnicas, además, que han instalado cercos y
establecimiento de nuevos deslindes, además de colocar
banderas y letreros alusivos, observables a simple vista. En el
terreno se constata que se han realizado movimientos de tierra y
con deslinde de terreno, se aprecian viviendas tipo mediagua
construidas por personas del Comité. También se observa que se
realizó tala de árboles y se encuentra una máquina, tipo
excavadora, que realiza trabajos de movimiento de tierra. El
operador manifiesta que está realizando trabajos para el comité
de Allegados Rayén, a quien le comunica que debe paralizar la
obra, por la concesión de la orden de no innovar decretada en
esta causa.
8°- Informan también el Director de Obras Municipales de la
Municipalidad de Lebu, don Jorge Chaparro Urrutia; el Ingeniero
Civil del Departamento Provincial SERVIU Arauco; don Javier
Grandón Baeza de la Unidad de Fiscalización de la DGA Región
del Biobío; don Claudio Deney Torrealba, Director de Vialidad;
don Francisco Lagos Arriagada, SEREMI de Agricultura de la
Región del Biobío; doña Gilda Espinoza Ahumada, Jefe de la
División Jurídica del Ministerio de Vivienda y Urbanismo; don
Sebastián Maldonado Soto, en representación de don Patricio
Kuhn Artigues, Intendente Región del Biobío; y doña Ana Paola
Hormazábal Navarrete, la mayoría de los cuales, en síntesis,
señalaron, que funcionarios de su dependencia se constituyeron
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en el lugar, verificando que un grupo de personas tiene ocupado


el lugar y que han realizado movimiento de tierras, con la
intención de instalar viviendas, obrando sin permiso alguno para
tales fines.
9°.- Que también informó Jorge Becar Pereira y Ximena
Gebauer Parra, en representación de Forestal Arauco S.A.,
señalando que la empresa es dueña de parte del predio
denominado fundo La Esperanza, salvo dos retazos, que se
reservaron los anteriores dueños. Que durante el año 2020, han
sido víctimas de delitos que vulneran su derecho de propiedad,
pues personas ajenas a la empresa han ingresado al predio en
forma irregular, cometiendo delitos de daños y tala ilegal de
árboles. Agrega, que el 7 de julio de 2020 se constata tala ilegal
de madera, formulando denuncia ante Carabineros, lo mismo, el 4
y 22 de agosto de 2020. El 24 de agosto de 2020 se constató que
sujetos desconocidos, presumiblemente vinculados al Comité de
Allegados Rayén, causaban daños en el portón de acceso al
predio y realizaban una tala ilegal y posterior hurto de madera,
hechos que dieron lugar a la denuncia ante Carabineros de Chile,
y también presentaron una querella criminal contra quienes
resulten responsables, por los delitos de hurto simple y daños
simples, la cual ingresó bajo el RIT 2037-2020 del Juzgado de
Letras y Garantía de Lebu.
10°.- Que finalmente informó la Directora Regional CONADI
Región del Biobío, señalando que de los antecedentes del
recurso no se desprende algún asunto relacionado con las
materias que sean competencia de esa Corporación establecidos
en la Ley 19.253. Agrega que los recurrentes a través de su
representante no han indicado alguna condición indígena o las de
los inmuebles involucrados. Respecto de los recurridos que
EVLKJGNPWH

forjaron un comité regido por las normas comunes sobre la


materia, no siendo una entidad indígena regulado por la ley
indígena, y el terreno que ocupan, estaría afecto a las normas
civiles, por lo que carecen de idoneidad para pronunciarse sobre
el asunto.
11°.- Que, así las cosas, se encuentra acreditado en estos
antecedentes, por lo informado por Carabineros de Chile y los
demás organismos públicos antes señalados -y que por lo demás
reconoce la propia recurrida-, que el Comité de Allegados Rayen,
compuesto por 33 familias, se apropiaron de una porción de 1,1
hectárea aproximadamente, del predio forestal denominado “La
Esperanza”, de propiedad de Forestal Arauco S.A, ubicado en la
comuna de Lebu, cercano o aledaño a la ciudad, con el fin de
construir allí sus casas para vivir, iniciando los trabajos de tala del
bosque y movimiento de tierra con maquinaria pesada, para
aplanar las terrazas, haciendo taludes y rellenos de quebrada con
curso de río y vertientes, sin presentar los estudios de suelo ni
planos correspondientes a las organismos técnicos, para obtener
los permisos correspondientes, causando amenaza de derrumbes
en los tiempos de lluvia, a las viviendas aledañas de los
recurrentes.
12°.- Que la Declaración Universal de los Derechos
Humanos, de 10 de diciembre de 1948, en su artículo 25.1
dispone que: “Toda persona tiene derecho a un nivel de vida
adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el
bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la
asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene
asimismo derecho a los seguros en caso de desempleo,
enfermedad, invalidez, viudez, vejez u otros casos de pérdida de
sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de
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su voluntad”; y el Pacto Internacional de Derechos Económicos,


Sociales y Culturales, de 19 de diciembre 1966, suscrito por Chile
el 16 de septiembre de 1969 y publicado en el Diario Oficial de 29
de mayo de2003, en su artículo 11, señala que: “1. Los Estados
Partes en el presente Pacto reconocen el derecho de toda
persona a un nivel de vida adecuado para sí y su familia, incluso
alimentación, vestido y vivienda adecuados, y a una mejora
continua de las condiciones de existencia. Los Estados Partes
tomarán medidas apropiadas para asegurar la efectividad de este
derecho, reconociendo a este efecto la importancia esencial de la
cooperación internacional fundada en el libre consentimiento”.
Ahora, para el acceso a la vivienda, las personas deben
seguir los procedimientos que los órganos del Estado
Democrático de Derecho determine, y que su ejercicio no lesione
los derechos fundamentales de otras personas.
13°.- Que, de lo expuesto, se encuentra acreditado que el
“Comité de Allegados Rayén” ha cometido actos ilegales, que
amenazan la ocurrencia de hechos como los denunciados por los
actores, esto es, riesgo de deslizamiento de terreno en que
efectúan los movimientos de tierra, escurrimiento de aguas
naturales y de lluvia por los taludes y relleno de las quebradas,
con peligro de avalanchas, hacia las viviendas de los
recurrentes, que perturban y amenazan la vida e integridad física
de las personas que viven en sus inmediaciones y que pueda
dañar, además, sus bienes, afectando así las garantías
constitucionales establecidas en los N° 1 y 24 del artículo 19 de la
Constitución Política de la República, lo que lleva a acoger la
presente acción cautelar, razón por la que el presente recurso
deberá ser acogido.
14°.- Que en cuanto a las providencias inmediatas que esta
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Corte debe adoptar para el restablecimiento del imperio del


derecho y asegurar la debida protección a los afectados, entre los
cuales se incluye, naturalmente, a las familias de los recurridos,
aparte de disponer el cese del movimiento de tierras, en la forma
que lo han hecho hasta ahora, los órganos del Estado que han
tenido conocimiento y algunos han visitado el lugar, como el
Director de Obras Municipales de la Municipalidad de Lebu, el
Departamento Provincial del SERVIU Arauco; la Unidad de
Fiscalización de la DGA Región del Biobío; el Director de
Vialidad; el SEREMI de Agricultura de la Región del Biobío; el
Jefe de la División Jurídica del Ministerio de Vivienda y
Urbanismo; y el Director Regional (S) Zona Sur del Servicio
Nacional de Geología y Minería, constatando la forma precaria y
sin adopción de las medidas de prevención y permisos legales
para realizar los trabajos referidos, deberán llevar a cabo las
acciones requeridas, dentro de sus facultades y competencia,
para concretar, a la brevedad, las providencias urgentes e
indispensables tendientes a impedir que la recurrida, prosiga en
su actuar ilegal.
15°.- Que para disponer lo anterior, se tiene en cuenta que
el artículo 3° y el inciso 2° del artículo 5 del Decreto con Fuerza
de Ley N° 1 de 2000, que contiene el texto refundido de la Ley N°
18.575, prescribe que: “La Administración del Estado está al
servicio de la persona humana; su finalidad es promover el bien
común atendiendo las necesidades públicas en forma continua y
permanente y fomentando el desarrollo del país a través del
ejercicio de las atribuciones que le confiere la Constitución y la
ley, y de la aprobación, ejecución y control de políticas, planes,
programas y acciones de alcance nacional, regional y comunal.
La Administración del Estado deberá observar los principios de
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responsabilidad, eficiencia, eficacia, coordinación, impulsión de


oficio del procedimiento, impugnabilidad de los actos
administrativos, control, probidad, transparencia y publicidad
administrativas y participación ciudadana en la gestión pública, y
garantizará la debida autonomía de los grupos intermedios de la
sociedad para cumplir sus propios fines específicos, respetando
el derecho de las personas para realizar cualquier actividad
económica en conformidad con la Constitución Política y las
leyes”. A su vez, la segunda disposición mencionada estatuye
que: “Los órganos de la Administración del Estado deberán
cumplir sus cometidos coordinadamente y propender a la unidad
de acción, evitando la duplicación o interferencia de funciones”.
Por esas consideraciones y de conformidad, además, lo
prevenido en el artículo 20 de la Constitución Política de la
República y Auto Acordado de la Excelentísima Corte Suprema de
Justicia sobre Tramitación del Recurso de Protección de
Garantías Constitucionales, se resuelve:
Que SE ACOGE, sin costas, el recurso de protección
deducido por el abogado don Álvaro Saavedra Pinto, por sí y en
representación de Filomena Ester Monsálvez Aillón; Tatiana Inés
Sanhueza Monsálvez; Nelson Iván Alfonso Iglesias Saavedra;
Gladys Angélica Pinto Candia; Silvana Beatriz Saavedra Pinto;
Paulina Victoria Saavedra Vergara y Fabián Ignacio Saavedra
Vergara, en contra del "Comité de Allegados Rayen",
representada legalmente por Ingrid Teresa Yévenes Moya, solo
en cuanto la recurrida deberá cesar, en forma inmediata, en la
ejecución de cualquier acto material que implique o pueda implicar
afectación, perturbación o amenaza de las garantías
constitucionales invocadas en esta presentación, hasta que
obtengan los permisos de las autoridades competentes.
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Además, se dispone que, una vez ejecutoriada esta


sentencia, el Director de Obras Municipales de la Municipalidad
de Lebu, el Departamento Provincial del SERVIU Arauco; la
Unidad de Fiscalización de la DGA Región del Biobío; el Director
de Vialidad; el SEREMI de Agricultura de la Región del Biobío; el
Jefe de la División Jurídica del Ministerio de Vivienda y
Urbanismo; y el Director Regional (S) Zona Sur del Servicio
Nacional de Geología y Minería, de acuerdo a sus competencias y
conforme a sus atribuciones legales, se constituyan en lugar y
verifiquen que se han cumplido los procedimientos y obtenido los
permisos para realizar los trabajos que se han acreditado en estos
antecedentes, y en caso incumplimiento, instruir los
procedimientos que correspondan, debiendo informar a esta
Corte, dentro de treinta días, de su cumplimiento.
Regístrese, notifíquese y, en su oportunidad, archívese.
Redacción del Ministro Titular Carlos Aldana Fuentes.
Rol N° 18.649-2020 Protección.

Carlos del Carmen Aldana Fuentes Cesar Gerardo Panes Ramirez


MINISTRO MINISTRO
Fecha: 29/04/2021 14:52:03 Fecha: 29/04/2021 13:49:56

Waldemar Augusto Manuel Koch Salazar


MINISTRO(S)
Fecha: 29/04/2021 16:09:11
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Pronunciado por la Quinta Sala de la C.A. de Concepción integrada por los Ministros (as) Carlos Del Carmen Aldana
F., Cesar Gerardo Panes R. y Ministro Suplente Waldemar Augusto Koch S. Concepcion, veintinueve de abril de dos
mil veintiuno.

En Concepcion, a veintinueve de abril de dos mil veintiuno, notifiqué en Secretaría por el Estado Diario la resolución
precedente.

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Este documento tiene firma electrónica y su original


puede ser validado en http://verificadoc.pjud.cl o en la
tramitación de la causa.
A contar del 04 de abril de 2021, la hora visualizada
corresponde al horario de invierno establecido en Chile
Continental. Para la Región de Magallanes y la Antártica
Chilena sumar una hora, mientras que para Chile Insular
Occidental, Isla de Pascua e Isla Salas y Gómez restar
dos horas. Para más información consulte
http://www.horaoficial.cl

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