Pregon Criollo 105 Octubre 2020
Pregon Criollo 105 Octubre 2020
Pregon Criollo 105 Octubre 2020
En este número, el 105, de Octubre de 2020, de el Pregón Criollo, encontrará un contenido, que
como siempre incluye los diferentes aspectos del Folklore, en todas sus acepciones y encuadres:
1. Índice Pag. 2
2. Editorial Pag. 3
3. Novedades Pag. 4
4. En La Nación: Folklopedia Pag. 13
5. Arreos: la sabiduría del puestero en Malargue, con Francisco Parada Pag. 16
6. Una fuente desconocida de textos fileteados en vehículos: Norberto P. Cirio.-Parte 1 Pag. 19
7. De cantar y contar- Folklore infantil por Olga Fernández Latour de Botas 2ª parte Pag. 27
8. El cine y sus miradas sobre la cultura tradicional- 5a nota- Santitos, por Maricel Pelegrin Pag. 33
9. Estructura de Improvisación en payada rioplantese- 2 parte, por Matias Isolabella Pag. 35
10. Pachamama Ceremonias y Ofrendas, 2ª parte, por Maria Cristina Bianchetti Pag. 42
11. León Benarós, por Jorge David Cuadrado Pag. 50
12. Noticias de los Amigos/ Regionales Pag. 52
13. El Tahiel- 5a parte, por Pedro Patzer Pag. 63
14. 50 años sin Marechal, por Diego di Vincenzo Pag. 67
15. Historias del Folklore: Las peñas de Rosario-II, por José Luis Torres Pag. 73
16. Anacrusa, no era un grupo, era una causa Pag. 74
17. Nota de tapa: José Hernández. Pag. 76
18. Gastronomía y Folklore – Venezuela, por Rosmery Chavez Pag. 79
19. Vestimenta Argentina por María Delia Millán de Palavecino Pag. 83
20. El arte de este número: Raquel Forner Pag. 89
21. Quino, su partida Pag. 92
. Las imágenes que completan las páginas. son del Raquel Forner, protagonista del artículo 19
Cuando aparecen subrayados en ciertos textos nombres propios, corresponden en general a las fotografías
que ilustran dichos textos.
https://www.youtube.com/watch?v=Je2unqXGPY0&list=PLGjwfu0EFm5Skg98RJD_bX_oLZM
GlJZoN&index=46
https://www.youtube.com/watch?v=r8eV-Xxc-
vk&list=PLGjwfu0EFm5Skg98RJD_bX_oLZMGlJZoN&index=47
Pero aquí no concluye: hay trabajos sobre León Benarós, Leopoldo Marechal, y la mirada
antropológica mensual de Maricel Pelegrín sobre el cine, en este caso con “Santitos”. Y mucho más,
como recetas venezolanas, la mirada de Pedro Patzer, en Tahiel, o la de las peñas de Rosario
por José Luis Torres.
Hay más? Siempre, como decimos siempre, encuéntrelo. Y lo habrá más aún en los próximos
números. La riqueza de nuestro campo disciplinar nos apabulla. Intentamos ir, sucesivamente
abarcando todas sus facetas.
Carlos Molinero
PROGRAMA, preliminar
. Academia Nacional del Folklore Página 4
MARTES 10 DE NOVIEMBRE- DIA DE LA TRADICIÓN
17:00 a 17:30
Inauguración y saludos
Luisa Calcumil
Bienvenida de los pueblos originarios patagónicos
Antonio Rodríguez Villar
Presidente de la Academia Nacional del Folklore
Mariano Gaido
Intendente de Neuquén
Autoridades
17:30 a 18:15
Mesa 1
Tema: “Proceso histórico y social del Folklore Patagónico”
Presenta: Ricardo Zanón
Exponen Brígida Baeza
Raúl Aranda
Héctor Raúl Osés
18:15-18:30
HOMENAJE A José María Castiñeira de Dios
Expone Eduardo Valdez
18:30 a 19:15
EXPOSICION: FOLKLORE EN LAS ESCUELAS
video con el chamamé “Esas soledades” de y por Teresa Parodi
y Aldy Balestra con Carlos Escobar.
Tema: “Contenidos de Folklore en el diseño curricular. Una propuesta de metodología para
su formulación”.
Expone: Dra. Ana María Dupey
19:15 a 20:15
Mesa 2
Tema: “Perspectivas y experiencias en la enseñanza del
Folklore en el Siglo XXI”
Presenta: Dra. Ana María Dupey
Exponen Lic. Karina Rodríguez
Lic. Claudia Garbi
Prof. Roberto Lindon Colombo
20:15
Presentación artística REGIÓN PATAGONICA
MIÉRCOLES 11 DE NOVIEMBRE
10:00 a 11:15
HOMENAJE: A Carlos Procopiuk y Lorenzo Kelly
Exponen: Jorge Fernández Garro y Abraham Thomé
11:15 a 11:45
EXPOSICIÓN: “La ruta de los dinosaurios”
Presenta: Carlos Cide
Exponen: Rodolfo Coria
Jorge Calvo
Leonardo Salgado
11:45 A 12:00
RECONOCIMIENTO Al grupo español “Los Granjeños”.
Presenta Antonio Rodríguez Villar
16:15 a 16:30
HOMENAJE A Rodolfo Casamiquela
16:30 a 17:15
Video: “La Misión Jesuítica de Nahuel Huapi. Patagoniab Argentina” Presenta su
Director: Sergio Raczko
17:15 a 17:40
HOMENAJE A Don Andrés Chazarreta
al cumplirse el próximo 16 de marzo el centenario de la histórica presentación de su
“Compañía de Arte Nativo” en el “Teatro Politeama” de Buenos Aires.
Presenta: Peteco Carabajal
Expone: Andrés Chazarreta (nieto)
17:40 a 18:30
Mesa 3
Presenta: Claudia García
Tema: “Renacer de las danzas tradicionales”
Exponen Koki y Pajarín Saavedra Huayra Muyoj, Arunguita y Pala pala.
NOA Luis Marinoni “Danza de escena
y reconstrucción escénica” NEA
Roberto Lindon Colombo “Danzas sureras de circulación viva”
18:30 a 19:15
EXPOSICION
Tema: “La pintura argentina hoy”
Presenta: Julián Althabe
Expone Carlos Gómez Centurión
19:15 a 19:30
HOMENAJE A Waldo de los Ríos
al cumplirse 50 años de su muerte. Expone: José Luis
Castiñeira de Dios.
19:30 a 20:15
Mesa 4
Tema: “Diversidad musical Patagónica”
Presenta: Hilda López
Exponen: Hilda Alvarado
Celedonio “Chele” Díaz
Angel Hechenleitner
20:15
Presentación artística
JUEVES 12 DE NOVIEMBRE
10:00 a 10:15
HOMENAJE A Héctor Lombera
Expone: Silvia Narváez
10:15 a 11:00
Tema: “El canto y la música sefaradí”. Presenta:
Marcelo Benveniste
Expone: Liliana Benveniste
La disertante ilustrará su exposición con cantos y músicas sefardíes.
11:00 a 11:15
Tema: “500 años de Patagonia”.
Expone: César Fernández
11:15 a 13:00
CONVERSATORIO
Tema: “Folklore y los estudiantes”
VIERNES 13 DE NOVIEMBRE
10:00 a 10:15
HOMENAJE Homenaje a Jorge Prelorán
Expone: Ercilia Moreno Chá
10:15 a 11:00
CONVERSATORIO
Tema: “Mitos y Leyendas Patagónicas”
Documental “Historia del Maruchito” realizado por el Departamento de Folklore del
Instituto Universitario Patagónico de las Artes-IUPA.
Presenta: Gustavo Namuncurá
Participan: María Angélica Gualmes
Isidro Belver
SÁBADO 14 DE NOVIEMBRE
10:00 a 10:15
HOMENAJE A Linares Cardozo
Expone: Roberto Romaní
10.15 a 11:00
11:00 a 11:45
Mesa 9
Tema: “Comidas con identidad patagónica”
Presenta: Pancho Casado
Exponen: Isidro Belver "La Historia del Ñaco"
Liliania Verveke "Comidas populares de Río Negro"
Alejandro Mogni "Comidas del Norte Neuquino"
11:45 a 12:15
EXPOSICION
Tema: “Archivo Hours. Rescate de ritmos y cantos anónimos sureros”
Presenta y Expone: Francisco Lanusse
16:00-16:45
CONVERSATORIO
Tema: “La Colonia Galesa: entre lo argentino y lo galés”
Presenta: Claudia Forgione
Exponen: Geraldine Lublin
Sara Borda Green
Ana Chiabrando Rees,
16:45 a 17:00
HOMENAJE A Ramona Galarza y al Paí Julián Zini
Se abre con el Trío “DOS + UNO” (Hugo y Marcelo Dellamea y Ariel Sánchez) tocan y cantan
“Niña del Ñangapirí”
Presenta: Eduardo Sívori Expone: Pedro Zubieta, Presidente de la
“FundaciónMemoria del Chamamé”
17:00 a 17:45
Mesa 10
Tema: “Artesanías Siglo XXI. Innovaciones en manos de artesanos tradicionales de
comunidades originarias”
Presenta: Roxana Amarilla
Exponen: Silvia Tropan (Tejedora y teñidora mapuche de Junín de los Andes,
Neuquén.)
Flora Párraga (Ollera, koala de San Salvador de Jujuy, Jujuy).
Ramón Gutiérrez (esquilador y tejedor de vicuña de Laguna Blanca,
Catamarca)
17:45 a 18:30
EXPOSICION
Tema: “Ciencia e Investigación en el Folklore”
Presenta José Luis Castiñeira de Dios
Expone: Dra. Olga Fernández Latour de Botas
18:30 a 19:15
Mesa 11
Tema “Turismo y Folklore”
Presenta: Sergio Chacón
Video de la casa de Atahualpa Yupanqui en Cerro Colorado, Córdoba
15:45 a 16:00
HOMENAJE A Bertha Köessler-Ilg Expone:
César Fernández
16:15 a 17:00
CONVERSATORIO
Tema: “Recopiladores y cultores”
Presenta: Raúl Aranda
Exponen Pablo Otasú
Diego Bosquet
Luis Ferreira
17:15 a 17:30
HOMENAJE A Carlos Martínez Sarasola
Expone: Ana María Llamazares
17:30 a 18:50
Mesa 12
Saludo de Enrique Avogadro, Ministro de Cultura de CABA
Tema: “Tango, Folklore urbano”
Presenta: Raúl Lavié
Exponen Gabriel Soria
Miguel Angel Barcos “El Tango en la Patagonia” Irene Amuchástegui “Tangos y zambas:
algo en común”
18:50 a 19:45
CONVERSATORIO
19:45 a 20:00
Cierre del Congreso
(Saludos y agradecimientos)
Presidente de la ANF
Intendente de Neuquén
20:00
GRAN GALA FINAL
El Dr. Rodríguez Villar afirmó que “este Acuerdo pone en marcha dos proyectos de
trascendental importancia para la cultura argentina como son la Diplomatura en Folklore y
FOLKLOPEDIA, la enciclopedia virtual del Folklore. Y lo haremos utilizando los medios virtuales de
la tecnología moderna. Conocer y estudiar nuestro Folklore es conocer y estudiar nuestras esencias
“Para la Academia es también muy importante que este diálogo entre las ciencias duras y las
humanidades se produzca desde Tucumán, lugar sumamente trascendente para nuestra historia
como Nación y para la cultura tradicional argentina. La Diplomatura y la FOLKLOPEDIA permitirán
la puesta en valor de los conocimientos que nos pertenecen por legado cultural y son la esencia de
nuestra identidad como comunidad”, destacó el Mtro. Castiñeira de Dios.
Por su parte “Coqui” Sosa expresó su emoción de poder participar en los proyectos: “Estoy muy
contento porque esto empezó con la convocatoria del decano para sumarme al trabajo de la facultad
regional. Cuando se quiere se puede, cuando hay una idea en común con la cultura, todo confluye.
Estamos en un momento justo porque la cultura es importante para los tiempos que vienen en la
nueva normalidad”.
3.- Folklopedia
Ya se han presentado a las instituciones interesadas, el proyecto de Folklopedia. Se ha avanzado
en los detalles de la primer etapa, que consiste en el desarrollo inicial de la pagina y la programación
de las etapas sucesivas. Pero además, nuestra idea está avanzando en la sociedad. Un artículo de
La Nación, que reproducimos con orgullo en el próximo artículo de este Pregón Criollo, lo muestra.
¡Una buena noticia!
"Folklopedia"
En marzo de 2021 se cumplirán un siglo del artículo que Ricardo Rojas publicó en LA NACION, a
propósito del espectáculo del Conjunto de Arte Nativo que Andrés Chazarreta llevó al teatro
Politeama de Buenos Aires.
Esto es lo que dicen algunos de sus párrafos: "En la escena del Politeama apareció anoche un coro
santiagueño, traído expresamente por su director, D. Andrés A. Chazarreta, para ofrecer a la ciudad
cosmopolita la sensación auténtica del arte popular argentino. Cuando se descorrió el telón apareció
en el fondo un paisaje de la tierra nativa. El tablado fingía un antepatio de los ranchos donde suelen
realizarse las fiestas del pueblo, y a su vera se alzaba la choza de quincha en donde habita el
gaucho del bosque. Rodeaban esa cancha los personajes del coro: los músicos a un lado, con sus
típicos instrumentos; del otro los bailarines, con sus policromas vestiduras; y en un rincón, la vieja
hacendosa junto al mortero de quebracho, que es como un símbolo del hogar en aquella selva
dulcísima. (...) El selecto auditorio - reunido para una audición privada -sintióse de pronto
sorprendido. Pasó por la memoria de tal cual espectador la visión de las telas de Gutiérrez Gramajo,
el pintor santiagueño, intérprete fidelísimo de aquella misma realidad. Hace más de quince años, en
mi libro "El país de la selva",
yo había pintado también
esos paisajes, esos tipos,
esas costumbres populares
de la tierra donde viví mi
infancia. Al contemplar la
escena del Politeama,
comprendí que estábamos en
aquella penumbra deleitable
de la emoción colectiva que
es el folklore, cuando el
espíritu humano va a salir de
la realidad para transfigurarse
en las esferas del arte".
Lejos de pensar que el crecimiento exponencial de la comunicación, gracias a internet y las redes
sociales, podría barrer con los regionalismos, desde la Academia se piensa que se acentúan: "Los
medios facilitan esto -apunta su titular, Antonio Rodríguez Villar-. Confiamos en los medios porque la
razón de la academia es la difusión.
Por otra parte, hay otros hechos más que interesantes. Yo tengo 85 años. Cuando salíamos a tocar
la guitarra había entre nosotros personas que terminaron siendo padres fundadores de parte de
nuestra música y que sin embargo, no sabían leer música. Lo interesante es que hoy hay muchos
jóvenes que tiene sólida formación académica musical y van en busca de la esencia. Nos consultan
permanentemente, aunque no se puede pretender que toquen como sonaba la música que traía
Andrés Chazarreta".
Entre los avances de los proyectos para lo que resta del año y del que viene, la Academia está
preparando una nueva edición de su Congreso bienal, que se iba a realizar a mediados de este año
en Neuquén, pero por la pandemia Covid-19 se postergó para noviembre y será de manera virtual,
coordinado desde esa provincia. Comienza el 10 del mes que viene.
En agenda, la Academia tiene, además del congreso virtual, de cinco días, varias actividades. En
marzo, desde Jujuy y de manera virtual, el IV Simposio Nacional de la Danza Foklórica. En abril o
mayo, el Encuentro Nacional de Enseñanza del Folklore en las Escuelas. Y algunos actos por el
centenario de la presentación que en 1921 hizo Andrés Chazarreta en el Teatro Politeama del
Conjunto de Arte Nativo.
Aquel texto escrito por Ricardo Rojas hace casi cien años también dice: "El espectáculo que hoy se
ofrece al público de Buenos Aires no defraudará ni la curiosidad, ni la emoción de quienes vayan a
verlo con simpatía. El arte, como la vida, ofrece a los hombres algo de lo que cada uno lleva en su
propio corazón.
Si alguno resultara defraudado, es porque fue con el corazón vacío. El conjunto folklórico organizado
por Chazarreta con arduos afanes y sin apoyo oficial, es un trozo de la vida del interior transplantado
a la ciudad cosmopolita.
A fuerza de ser una cosa vernácula, resultará para muchos exótica; los que saben sentir, hallarán en
ella la ingenua emoción del arte popular, que es como el canto del boyero o el aroma de las flores
del aire; los que saben comprender, verán que aquella síntesis de música, baile y poesía, es la
misma de que se generó la tragedia helénica, la misma que Wagner admiró como la más pura fuente
de su doctrina y de la cual decía Lichtemberge, glosando la obra wagneriana: No es la creación
artificial y subjetiva de un individuo de genio, sino el producto de la colaboración del artista con el
pueblo. Y puesto que aspiramos a tener un arte glorioso, como signo eminente de nuestra
nacionalidad, no olvidemos esa experiencia de todos los grandes pueblos, según la cual
necesitamos conservar y elaborar el arte nativo para cuando haya de venir el genio creador que
habrá de fecundarlo en la obra definitiva".
Fuente: La Nación, 19/10/2020
El director de Arreo, Tato Moreno, movilizado por mostrar el campo tal cual es en los valles
malargüinos, decidió acercar a los espectadores a una actividad ancestral y en extinción por el
progreso del hombre de ciudad y la realidad económica actual.
El realizador mendocino estaba buscando una familia para contar la historia de la desaparición de la
cultura del puestero trashumante y el conflicto entre irse o quedarse en el campo. Francisco Parada,
hermano de Eliseo, quien trabaja en una radio de la zona, “El Rial”, fue quien lo presentó con la
familia de su hermano, en la que Moreno sintió una gran conexión. “Yo soñé que algún día alguien
vendría a contar esta historia, para que lo sepan los de la ciudad”, expresó Eliseo durante el film.
Arreo se encuentra
( según http://www.unidiversidad.com.ar/arreo-el-documental-que-refleja-la-realidad-de-los-
puesteros-de-malarge el 6 de Octubre 2016)
.
Primera parte (capitulo 46)
https://www.youtube.com/watch?v=Je2unqXGPY0&list=PLGjwfu0EFm5Skg98RJD_bX_oLZMGlJZoN
&index=47&t=2161s
https://www.youtube.com/watch?v=r8eV-Xxc-
vk&list=PLGjwfu0EFm5Skg98RJD_bX_oLZMGlJZoN&index=48
¿Qué es lo esencial, para ud, y más allá de la película, de la vida del puestero?
Ante todo es un personaje de la cultura tradicional. Que a pesar de su vida
sufrida, no deja de ser feliz. Eliseo canta, dice coplas, chistes. Tiene mil
dramas, pero no es angustiado. No es el “depresivo” de la cultura
posmoderna. Él vive dentro del paisaje y convive con el paisaje. La tierra le da
todos sus frutos y él sabe leer la tierra ( no es propietario pero si “dueño” de
ella). Perduran en ellos a través de la tradición oral. Es una subsistencia hoy
de nuestro antiguo gaucho tradicional. Canta sus penas, como Martín Fierro.
Hace una pialada campo afuera, sabe castrar un potro, jinetearlo, todo lo que
pueda definir al gaucho como cultura. Eso, en un mundo absolutamente
globalizado subsiste en un rincón de la Provincia de Mendoza.
Carlos Molinero
Primera Parte
Para cuando me buscó Genovese el filete transitaba una creciente renovación espacial,
trascender su soporte tradicional, el vehículo a sangre y, sobre todo, automotor, a la cartelería
comercial. Él le dio impulso a ello e innovó al comenzar a dar talleres en entes públicos y privados
y editar el libro citado que, al titularlo “tratado”, favorecía su utilidad para los interesados en
aprender este arte pictórico que parecía languidecer por falta de renovación de artistas y de ideas.
En esa línea impulsó el fileteado de objetos y ropa, así como es el creador del body paint, o sea el
fileteado en el cuerpo humano, de modo no permanente. Más allá de las críticas de la fue foco por
fileteadores posicionados tradicionalistas e, incluso, las críticas que recibí indirectamente por
publicarme un texto cuya lectura demandaba otro tipo de comprensión no habitual en ellos 1, el
filete se redimensionó al punto de que en 2015 la UNESCO, en su décima sesión en Windhoek
(Namibia), lo incluyó en su Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la
humanidad por el proyecto “Filete porteño in Buenos Aires, a traditional painting technique” 2. En
su fundamentación dos de sus seis asientos bibliográficos son de Genovese (20031, 2008), por
ende, con mi breve paso por el tema contribuí a tal reconocimiento que potenció, aún más, su
vitalidad3. La página web de Genovese es de vanguardia, pues en sus solapas hay una, “Plagios”,
1
Parte de ese debate puede leerse en la solapa Discusión de la entrada Fileteado en Wikipedia en español
https://es.wikipedia.org/wiki/Discusi%C3%B3n:Fileteado (consulta 28-ago-2020).
2
Nominación Nº 01069, presentada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. https://ich.unesco.org/en/RL/filete-porteno-in-
buenos-aires-a-traditional-painting-technique-01069 (consulta 28-ago-2020).
3
Tan alejado estaba del mismo que me enteré de ello cuando me entrevistó una periodista alemana para una nota, hacia 2017, y que
. Academia Nacional del Folklore Página 19
donde denuncia la apropiación de fileteados suyos por comerciantes para alegrar sus locales,
abusando del prejuicio de que en este arte la autoría no tiene derechos4.
En su humanismo no descuidó la sabiduría popular pintada como lemas, refranes, chistes, títulos
de tangos, nombres o palabras sueltas por dueños de vehículos automotor y de tracción a sangre
terrestres y acuáticos. El manuscrito es breve, 7 carillas, lo tituló “Nombres de camiones” y está a
pluma con tinta negra en hojas para máquina de escribir. Por el color y caligrafía lo debió hacer de
corrido, transcribiendo, sin orden evidente, apuntes que debió tomar en la vía pública. El manuscrito
no tiene indicación sobre su interés en el tema y, hasta donde sé, tampoco publicó sobre el tema,
por lo que me fue difícil datarlo. Ninguno de los “nombres” da pistas pero, como de muchos dio la
patente del vehículo, por su combinación alfanumérica fue antes de 1964, o sea cuando su emisión
estaba descentralizada y cada provincia tenía la potestad de idear su lógica y otorgarlas. Así, fijé en
1963 el tope y estimé a 1945 su inicio, pues
entonces estaba haciendo la etnografía para su
cancionero, por lo que infiero que su interés en lo
popular actuó como vaso comunicante entre ambas
tradiciones. Dado su valor incluyo su transcripción.
A fin de optimizar su lectura y análisis lo dividí en
tres columnas (Texto, Soporte y Observaciones),
precedidas por una para numerar los ítems, que
son 161. Excepto esta columna y las observaciones
con asterisco, el texto es suyo, adaptado con
ligeras modificaciones para su comprensión.
Fragmento del manuscrito de Zapata Gollán. Entre otras cuestiones se aprecia un dibujo
que reproduce el que acompañaba al texto “Hinchada morena”. Históricamente moreno/a
era el mejor eufemismo que para referirse a los afroargentinos tanto la sociedad envolvente
como por éstos (González Arrili 1983).
1 Stella Maris - -
2 El andariego - -
6 Plus Ultra - -
7 El guapito - -
9 El ñandú - -
12 El seguidor - -
14 La libertad - -
16 Dos amigos - -
17 El caburé - -
18 Tarzán - -
19 El hormiga - -
21 Yarará - -
25 El chingolo - -
27 De puro guapo - -
31 El brasileriño Carro -
33 El forastero - -
36 La hormiguita - -
37 Así es la vida - -
41 El poderoso - -
44 Llegaré - -
45 La maravilla - -
48 Ahí… va… él - -
68 El pibe V. J. 086 -
70 El gauchito Camión -
77 El tano - -
81 Flor de ceibo - -
94 Avivate ? -
95 Tú y yo ? -
98 Pibalpe R. A. R. 032 -
Continuará
Segunda Parte
Y ahora quisiera que fuéramos al tema que me preocupa, del cual quiero hacerlos cómplices y
pretendo que no se olviden de que les estoy pidiendo eso porque ustedes son expertos en cuentos,
en leyendas, para niños y jóvenes, en contar y posiblemente en cantar también.
Una instancia inesperadamente fructífera de mis incursiones por el folklore literario argentino me
llevó hace poco tiempo a sorprendentes revelaciones. Les digo cuál fue. Yo escribo, entre otras
formas poéticas, letras de canciones y bailes, por lo general en función docente. Me empeñé en
crear un Chamamé sobre un tema legendario del área guaranítica y para eso quise buscar qué
había como antecedente, qué Chamamé o qué “compuesto” podía haber sobre el Yacy Yateré,
sobre el Curupí, sobre el Pombero, sobre la Solapa entrerriana, sobre algunos de esas entidades
paranaturales que tan frecuentemente se encuentran en la narrativa tradicional en prosa. Pues bien,
no hallé nada. No hay nada en el cancionero popular anónimo, entre los “compuestos”
característicos del área, que haga referencia a estos temas. Pronto extendí mi mirada hacia el
folklore de otras áreas culturales del país y el resultado fue ¡el mismo!
6
En el texto transcripto se hace referencia a un power point no disponible
"Respecto a lo que me dices de cuentos/relatos en verso nunca lo había pensado pero creo
que tienes razón. Yo no me considero ni mediano especialista en cuentos. Son pocos los que
he recopilado en relación con otros géneros de literatura popular y nunca me he puesto a su
estudio pero me ha dejado pensativo tu sugerencia y creo que tienes razón. He revisado mis
recopilaciones canarias y se confirma tu hipótesis. Así que ¡adelante! y enhorabuena.”
Estoy en relación con estudiosos alemanes, rumanos y españoles trabajando este tema. Además
de todo mi grupo de colegas, amigos, discípulos y por eso también los estoy sumando a ustedes.
- ¡Vamos al grano!
Bueno, “Había una vez”... y así empieza casi todo lo que es “contar un cuento” ¿no es cierto? Así
empezó para nosotros, cuando éramos chicos, cuando había una madre, una abuela, una tía, una
maestra que nos contaban cuentos, no nos los leían, como este señor le está leyendo al niño
(referencia a la ilustración), pero yo he plagiado de Internet esta imagen, porque no hallé ninguna
que me mostrara a un narrador de la propia oralidad. Aquellas narradoras o narradores, pues los ha
habido también, nos contaban, nos decían los cuentos y además, en ocasiones, para adaptarlos a
alguna circunstancia particular, los iban cambiando con toda naturalidad. Es anécdota repetida la del
chico que le dice a quien le está contando un cuento: "No, me lo has dicho distinto de como me lo
contaste la vez pasada", y eso es muy interesante.
Con “Este era un…”, por ejemplo, puede también introducirse al mundo intemporal y no
localizado de los cuentos, mientras que no es apto para el relato de las leyendas, casos, sucedidos o
tradiciones históricas, que suelen estar precedidos por fórmulas como “Diz que…” (Dicen que…)
tras lo cual se relata aquello que debe llegar al receptor con cierta veracidad presupuesta. Todos
ellos son, en fin, narraciones en prosa.
Una antigua sinécdoque instalada en los estudios de la narrativa folklórica ha hecho que la mayor
parte de los investigadores que desean dedicarse a esta rama del saber enfoquen sus trabajos
exclusivamente hacia las manifestaciones en prosa del relato popular. Se toma así, de ahí la
sinécdoque, una parte por el todo. Y se deja de lado el rico venero de narraciones en verso que
mediante el ejercicio del canto han hecho las delicias de muchas generaciones de portadores del
legado de la cultura oral tradicional. ¿Se canta el cuento de Caperucita Roja? Los franceses y los
belgas y los suizos me dicen que no. ¿Se canta la leyenda del Yaguareté Abá? Los correntinos,
chaqueños, formoseños y paraguayos me dicen que no.
¿Qué pasa en nuestro contar y cantar con los relatos animalísticos? Fíjense en esto porque aquí
la respuesta se torna más difícil. ¿Se cantan algunos de los “casos” de Juancho, el zorro, y su
compadre el Quirquincho o de su tío el Tigre? No y no me explico yo por qué, siendo este ciclo
narrativo el más importante y difundido de la narrativa animalística folklórica argentina ¿Por qué en
cambio se cantan las historias del Jilguero y la Calandria, del Toro y el Buey y del Caraú? Dejo la
pregunta.
En el mapa folklórico argentino (tomo algunas expresiones de los
informantes, que son muy lindas) ¿quién “se ha dejado decir”…
(¿dicen así, no es cierto?) ¿quién “se ha dejado decir· que en su
pago se canta la historia del Ucumar, del Coquena o de la
Pachamama, “tan siquiera”? ¿Quién ha oído cantar, en el NOA,
versos del Sachayoj, del Llajtay, de la Salamanca, de la Mulánima,
de la Rubia del Río; en la región pampeana, quién oyó cantar
versos sobre la Luz Mala, el Farol, la Viuda, el Chancho con
cadenas, o en la Patagonia cantos sobre el Invunche, el Perimontu
o el Anchimallén, o en el área del NEA versos sobre del Yasï-
Yateré, el Pombero, o el Curupí? Nadie. En cambio se canta
todavía, en los alrededores de Buenos Aires, en cuartetas
romanceadas, la historia del milagro de la Virgen ante el malón de
indios en Luján, el más antiguo cantar narrativo que se conserva,
referido a un hecho de fines del siglo XVIII.
Las “hechaurías” (fechorías) de Domiciano Castro en Salta, aquel criollo que se había pasado
a las fuerzas de Goyeneche “por causa del amor” y que tuvo mal final (circa 1812), fueron
recordadas en un cantar recogido por Juan Alfonso Carrizo en su Cancionero popular de Salta
(1933) que también está en la colección de Folklore de 1921. Del asesinato de Juan Facundo
Quiroga en Barranca Yaco (1835) - el más conocido de todos los cantares narrativos nuestros, el
que prosifica Sarmiento, exiliado en Chile, para describir el asesinato de Quiroga en su Facundo
(1845)- fueron recogidas versiones hasta mediados del siglo XX. Narraciones en décimas, como la
del fusilamiento de Juan Crisóstomo Álvarez (1852), se encuentran también en el cancionero
tradicional.
Muestro acá, en páginas del Atlas de la Cultura Tradicional Argentina para la escuela (en
diseños del profesor Luis Paniagua, lamentablemente ya desaparecido), ejemplos de signos
representativos de los dueños de la naturaleza que registran sus relatos legendarios. En este caso
/se muestra la imagen/ corresponden a dueños de la flora en la cordillera del sur argentino.
R. Dueño, se emplea en el sentido de patrón, es decir, el amo, el padre, “el abuelo”, el protector de
algo, también, por cierto en sus formas femeninas como, por ejemplos, la abuela de la yerba, el ama
de los peces, la madre de la tierra, la madre del agua.
Estos versos son de Juan Carlos Dávalos, pero está allí el espíritu de la leyenda de creencia. No lo
tenemos en el cancionero folklórico pero sí en la literatura regional por obra del poeta que, sin
utilizar ese vocablo, describe, para Coquena, el sentido de la palabra “dueño”.
Ningún mito se encuentra más vigente y poderoso, en la creencia popular andina de nuestro país,
que el de la Pachamama o Madre de la Tierra aunque, bajo ese nombre, como la partícula “mama”
lo está mostrando, no sea, originariamente un mito precolombino. Permítaseme una digresión sobre
este punto. La partícula “mama” como palabra que signifique “madre” procede del proto-indo-
europeo. No hay ninguna lengua aborigen americana en que “madre” se diga “mama” ni nada
parecido. “Pacha”, como lo explica muy bien Rodolfo Kusch, significa “el estado de las cosas” y uno
de los estados de las cosas es el de “tierra”. Pacha, como estado de las cosas, tiene otro principio
opuesto-complementario que lo acompaña en el pensamiento andino: es el concepto de “cuti”, el
vuelco de las cosas. Entonces el estado de las cosas más el vuelco de las cosas configuran, en la
cosmovisión tradicional andina, una especie de yin y yang : lo que marca la consecución de la vida.
Con esto nos estamos yendo a otros lados, pero está muy bien, como respuesta extendida a la
pregunta sobre los dueños. La máxima representación andina que tenemos en territorio argentino
como “dueña” de la tierra, no ha inspirado cantares narrativos.
Volvamos al Atlas donde, lo mismo que las referidas a “dueños” de la fauna y de la Tierra y otros
elementos, hemos mapeado, las creencias en los dueños de la flora, y observamos que tampoco se
han recogido cantares narrativos sobre estos temas, como no los hay sobre la Salamanca, el
Huancar y otros lugares potentes. La conclusión a este respecto es general: si bien las leyendas de
creencia sobre “dueños” de la naturaleza y sobre entidades paranaturales, benignas o malignas,
relacionadas con seres o lugares, fijos o movibles, de las distintas áreas de cultura folk de nuestro
país (NOA, NEA, Cuyo, Pampa y Patagonia), han servido de inspiración a no pocos poetas y
músicos de extracción urbana, ninguna de ellas ha sido objeto de la canción popular tradicional, de
la canción folklórica.
Por fin, lo que propongo es que algunos trabajos, encarados de ser posible con ajuste al método
integral, adopten una visión extendida de la narrativa folklórica
Constituye una novedad en nuestros medios - y al parecer no sólo aquí por lo que me dicen mis
colegas del exterior-, el considerar al patrimonio en narrativa folklórica desde una perspectiva
amplia que comprenda tanto las narraciones en prosa (cuentos, leyendas, casos, sucedidos) como
las narraciones en verso, lo cual equivale a decir, los cantares narrativos.
Lo que se cuenta ¿no se canta? Aparentemente este fenómeno que hemos creído poder
establecer para la Argentina tiene carácter universal. ¿Es posible que nadie lo haya advertido? Es
posible, por ejemplo, que en la obra de la ilustre filóloga María Rosa Lida, no aparezca nada de
esto. Y tampoco en la de nuestra querida y admirada maestra doña Berta Elena Vidal de Battini, ni
en la de mis distinguidas colegas narratólogas Susana Chertudi, Martha Blache, María Inés Palleiro,
Patricia Cotto, Margarita Fleming de Cornejo, Ana María Dupey, ni en ningún otro estudioso de
cuentos y leyendas. ¿No nos atrae acaso más que el claro hallazgo de presencias que se explican
al investigador, la comprobación de ciertas ausencias inexplicables hasta para los portadores?
Lo que se canta ¿no se cuenta? La circunstancia de que, en ocasiones, los versos de cantares
narrativos puedan ser prosificados por informantes que no los recuerdan bien o que no poseen el
don del canto, no cambia el hecho de que, en nuestras comprobaciones, la prosificación de un
romance o de una balada, no parece modificar lo observado. Un romance – “Gerineldo” nos es
propuesto desde distintas instancias- no cambia su condición originaria de cantar por sufrir dichos
avatares. Lo mismo sucede en el universo de las baladas. Por lo demás, los motivos narrativos
identificados en los Índices de cuentos (vg. Aarne-Thompson) pueden aparecer intercalados o
aludidos en los versos de cantares y viceversa, puesto que “el folklore vive en variantes” como lo
señaló don Ramón Menéndez Pidal. Pero el pueblo no confunde contar con cantar, pese a que,
hasta ahora, no nos haya podido (o querido) revelar por qué.
Nuestro objetivo acotado territorialmente es, pues, señalar una constante al parecer no
observada antes de ahora: la ausencia de ciertos elementos característicos de la narrativa folklórica
argentina en prosa ( lo que se cuenta) entre los propios de la narrativa folklórica argentina en verso (
lo que se canta).
Persiste la pregunta: ¿existe una norma que rige tal conducta colectiva y tradicional entre
nosotros? ¿Es que acaso se canta solamente aquello que el pueblo entiende que pertenece a la
historia, grande o pequeña y se cuenta solamente lo que surge de la ficción? Y ¿ qué pasa con los
cantares animalísticos? ¿Es que se los interpreta como fábulas y sus protagonistas, bajo la
apariencia animal, son reconocidos como humanos?
Queda aquí nuestra pregunta inicial. ¿Lo que se cuenta no se canta? ¡Será bienvenido el aporte
esclarecedor de todos ustedes!
Y colorín colorado este cuento ha terminado y me meto en un zapato roto para que ustedes
me cuenten otro.
Maricel Pelegrín
Hoy
Santitos
Dirección: Alejandro Springall del Villar
Libro original y guión: María Amparo Escandón
Origen: México en coproducción con: EE.UU., Canadá y Francia.
Duración: 105 minutos.
Año: 1997
Producción: Alejandro Springall y Claudia Florescano
Producción ejecutiva: John Sayles
Fotografía: Xavier Pérez Grobet
Música: Carlos Nicolau, Rosino Serrano
Intérpretes: Dolores Heredia, Fernando Torres Lapham, Ana Bertha Espin, Demián Bichir, Darío
T.Pie, Roberto Cobo, Regina Orozco, Luis Felipe Tovar, Alberto Estrella
Montaje: Carol Dysinger
Vestuario: Verónica Neumaier
Filmografía del director: Cortometrajes y producciones documentales para la televisión: 1989:
“Fantasmagoria”, 1990: “Before Reggae Hit The Town”. Largometrajes: 2006: “Morirse está en
hebreo”. 2010: “No eres tú, soy yo”. 2019: “Sonora”.
Santitos constituye la ópera prima del director mexicano Alejandro Springall. Es así su primer
largometraje, luego de un período de cortometrajes para la televisón mexicana y un viaje de
formación y trabajo en la London Film School, en la BBC y en el Channel For Television.
En Santitos el realismo mágico, propio de la literatura latinoamericana impregna las imágenes,
las palabras y las acciones de los protagonistas. Como lo hemos comentado, esta forma de
expresión surge como estilo literario en la segunda mitad del siglo XX. El complejo mundo de
creencias y la diversidad cultural de nuestros pueblos americanos, ofrecen un riquísimo material que
unido a la creatividad de los escritores, emiten en sus obras un perfil que los identifica.
https://www.youtube.com/watch?v=PPqQMUUTeOY
7
Parche: piel curtida y tensada que cubre ciertos instrumentos musicales: caja, bombo, pin pin.
A media noche, emprende toda la familia un peregrinar hacia la cumbre de una elevación
cercana donde depositan las primeras ofrendas iniciando así la challada y corpachada de la aguada,
prosiguiendo luego en la vega de altura donde pastan sus animales, preferentemente cerca del
puesto9. En otros lugares el traslado es hacia la vega u ojo de agua de mayor importancia local, y en
relación directa con el área de pastura de llamas o ganado menor. Si son pastores, allí será el centro
cultico de esta ceremonia ritual, y también harán ofrenda en el corral si es que en la tarde del
primero realizan la marcada del ganado menor.
Para los agricultores, el centro ceremonial estará próximo a los rastrojos o parcelas de cultivo o
entre éstos y la vivienda. En dichos sitios se realizan ofrendas y challacos destinados a los
manantiales o a su espíritu rector y se enciende una fogata en la que se incineran las ofrendas. Se
inicia el descenso, y se reserva el sitio próximo para realizar la corpachada principal.
No se realiza ofrenda si previamente no se pide la venia a la deidad mayor protectora de los
pobladores y los bienes con que se sustentan. Con los primeros rayos de sol, el oficiante ata en
cada uno de ellos un trozo de hilo de lloq’e o caito preventivo para que el mal que pudiera surgir de
la tierra o de las aguadas, no los afecte.
El hilo es colocado en una mano, y el pie opuesto, o en el cuello y la cintura para evitar
soplaciones.
En la ladera, junto al pújio u ojo de agua, desde donde se pueden divisar los rastrojos, corrales
y viviendas, se inicia el primer ofrecimiento para continuar cuesta abajo por arroyos y vegas hasta
llegar a la vivienda en donde se apronta el agasajo central; por ello se debe tener en cuenta lo que
nos manifiestan los propios actores.
Finalizadas las ofrendas en cerros y aguadas prosiguen en los espacios cercanos a la vivienda.
Allí se realiza la corpachada central, ceremonia durante la cual se brinda alimentos a Pachamama,
8
Suyo oSullo: Suyo, feto seco de llama, vicuña u oveja. Consideran que el de vicuña posee mayor valor y poder.
9
Puesto: vivienda de reducido tamaño donde pasan la noche cuando cuidan el ganado a más de un día de camino de la vivienda.
. Academia Nacional del Folklore Página 44
solicitándole que en su carácter de protectora proporcione buenas cosechas y conserve el
multiplico10 nacido a destiempo, y los futuros nacimientos que esperan sean abundantes.
Estas ceremonias se realizan tanto en
mojones como en “pachas”, pozos de disímil
profundidad que cubren con una piedra plana, o
en huecos practicados en las champas o
bofedales que se destinan exclusivamente para
este culto. El sitio destinado a la ceremonia se
rodea con cercos de lanas de colores11 rogando
protección para el corral y los sembrados. El triple
cerco de lana representa el corral en el que se
encerrarán las nuevas crías, simbolizado en este
caso por el “cunti”, color rojo obispo, el preferido
de la divinidad; el círculo verde es el pasto y el
amarrillo el agua, en el deseo que ninguno de los
tres elementos fundamentales falten. En algunos
casos se incorpora un cerco morado, que implica
protección (Bianchetti 1982, Martínez, 1980, Sey).
Si el ritual se realiza en potreros, rastrojos o sementeras, en una de las esquinas o ángulo,
donde se levanta un mojón o apacheta a modo de cairns ceremonial, se erige una rama enflorada
con lanas de colores rojas, solicitando protección del ganado.
Se practican hoyos en las habitaciones, en los patios, junto al corral, en la orilla de un arroyo o
en la quebrada y junto a un pequeño mojón, con el fin de rendir culto a Pachamama, estimada como
deidad máxima.
Considerada junto con Coquena como “dios de la tierra”... “que se relacionan y él tiene, ella, el
dominio de todas las fuerzas naturales de la tierra, incluso las riquezas” (Ramos II, 1980, Iruya). Es
por ello que es necesario propiciarla para evitar contrariedades o castigos.
Con pequeñas variantes, se realizan tanto challadas y corpachadas destinadas a la Madre
Tierra a lo largo de toda la Puna, y en área cercanas a la misma, como quebradas y valles bajos,
intermontanos de transición hacia la selva.
Armando Tolaba agrega “las comidas regionales que se preparan para ese día son picante de
panza con mote, guiso de papa verde, piri, tijtinchas, distintas clases de bebidas y otras: chicha,
vino, te o mate con alcohol, cigarrillos, agua bendita.
Cuando tenemos todo preparado, debemos recurrir al lugar que siempre dan de comer. Pero el
agujero se le hace temprano”.
“Principalmente se echa el agua bendita haciendo una cruz en el fondo. Se prende una vela y
ponen los cigarrillos cada uno de las personas para que fume la tierra y también va la coca. Después
cada uno que le da de comer o beber tiene que decir ´que sea buena, que nos dé más productos y
que no nos falte’. Cuando terminamos de dar la comida y toda clase de bebidas, tomar haciéndole
salud a la tierra.
Para tapar el agujero tienen que rezar el padrenuestro y recién taparlo, en este se le pone una
piedra laja para poder encontrar el lugar al año siguiente. A este proceso se lo puede realizar
cualquier día del mes de Agosto, pero ya no es lo mismo que el día primero” 12(Colanzulí, 2005).
En general la ceremonia del 1º de agosto y toda su parafernalia particular que encierra el culto
a la Madre Tierra y entidades asociadas, presenta una gran similitud en toda el área andina y
conserva como características:
10
Multiplico: cría o teke nacido a destiempo. Toda cría nacida durante el año. En el caso de las llamas corresponde a teke de dos
años, período en el que se espacian las señaladas.
11
En los Departamentos de Santa Victoria e Iruya se realiza el cercado de la Pacha con lanas de colores roja, verde y amarilla para
protección de la producción de los sembrados y multiplicación del ganado. Para protección se utilizan lanas de colores “cunti”, obispo
o moradas y blancas para solicitar el incremento de bienes o dinero.
12
Se respeta la grafía, pues el infornte vuelca los datos por escrito.
. Academia Nacional del Folklore Página 45
Ofrendas con alcohol y otras bebidas ceremoniales en huecos practicados en la tierra junto con
la aspersión13 de estos líquidos en corrales, quebradas, arroyos, campos y viviendas, a la par de a
este acto que denominan Challa14 o challada, se realiza la coada, sahumerio compuesto de coa
(Koa), romero, suyo15 y grasa de llama, incienso, además de otras hierbas olorosas.
Este ritual debe cumplirse antes del amanecer para evitar que se escape el mal de la tierra.
Al promediar la mañana se realiza la Corpachada, ceremonia en la cual se da de comer a la
Tierra hambrienta, utilizando para ello los hoyos practicados en los que se deposita el “pago”.
Éste consiste en colocar en su interior alimentos ceremoniales, hojas de coca, grasa o unto de
llama, fetos secos de llama, vicuña u oveja, cigarrillos, derramando además bebidas rituales, cuando
no, colocadas en diminutos recipientes.
Almuerzo festivo con alimentos preparados ex profeso para la ceremonia por su carácter ritual.
Generalmente se utiliza Tijtincha 16, Calapurca 17o Machorra18, los que se preparan sólo en
oportunidades excepcionales signadas por la tradición, en base a maíz, papa, chuño y carne, cada
una de ellas preparada de diferente manera.
Por la tarde se realiza la ceremonia en las sementeras y corrales en donde se procede al igual
que en los manantiales a coar y challar, con el fin de que no falte agua ni pasto, fructifiquen los
cultivos, y tenga cría el ganado. Posteriormente se inicia la danza y los cantos, que continúan hasta
el arribo a la vivienda, en donde se prosigue al son de la caja y el pincullo o en su defecto la quena.
13
Aspersión: arrojar o esparcir con agua bendita o chicha por encima del corral en cuatro direcciones.
14
Challa: derramar, en un hoyo o tierra, bebida, compartiendo con Pachamama.
15
Suyo: feto seco de animales, que representan sacrificios a la tierra.
16
Tijtincha: comida a base de patas de cordero o llamas; “patas y cogote, mazorcas de maíz, mote de habas y llajhua (ají con agua o
con cebolla).
17
Calapurca: comida en base de maíz molido y carne, molidos en piedra, se agrega cebolla verde.
18
Machorra: maíz molido y carne en fibras, se sirve acompañado con piedras planas calentadas en las brasas
. Academia Nacional del Folklore Página 46
Apachetas
El término apachita, de origen quechua, refiere a un montículo o altar de piedra que se erige en
un lugar de paso entre dos cerros o sobre la parte de mayor altura que conecta un sitio o sistema
con otro. Ese término fue reemplazado por el de apacheta, tal como hoy lo conocemos en todo el
noroeste argentino.
Posee vigencia el verter o convidar a
la Tierra antes de beber alcohol, cerveza,
vino, singani, ginebra o aguardiente, y
preferentemente chicha. El verter algunas
gotas de la bebida sobre la tierra, o sobre
las rocas junto a la apacheta, arrojando
sobre ella su acuyico o en su defecto
colocar hojas de coca frescas junto con
una parte de los alimentos o “ávio” que
transportan para un viaje implica convidar
o compartir con la Madre Tierra. El
término de esta ofrenda es “hospedar” o
agasajar.
El puneño, identificado con su tierra,
necesita tributarle un culto especial, por
ello construye altares para ofrendas en
las aguadas, en las cumbres de los
cerros, en las encrucijadas de caminos, o en los pasos y abras 19. Otro tanto realiza el hombre de los
valles.
En la actualidad el pastor o el campesino no habita una vivienda sin construir una apacheta a la
derecha del camino que parte desde el frente de la vivienda, o en el centro de la habitación principal
o en el corral. Cada una de ellas es un altar o lugar de culto donde exterioriza sus necesidades, hace
sus pedidos o agradece a la tierra lo brindado.
A ella recurre el pastor, el arriero, el comerciante, el poblador y el caminante, cada uno con su
plegaria, pidiendo prosperidad unos, reproducción otros, buen viaje y suerte los demás, y alguno,
sólo protección en todos sus actos, cuidado y guía en el camino que debe emprender. La apacheta
constituye en la Puna una agrupación piramidal de cuarzo blanco, de regular altura, que rememora
tal vez la antigua morada de su diosa protectora.
La más pequeña, de escasos centímetros se levanta en habitaciones y corrales, para efectuar
en ella la ceremonia de la challada de la vivienda y la corpachada de la tierra con el fin de evitar
enfermedades y daños a los moradores, además de que las chacras y corrales prosperen
brindándoles bienestar.
Otra de las particularidades que se observa en los valles andinos, es rodear el hueco o Pacha
donde depositan los despuntes de las orejas y los rabos del ganado señalado o marcado, con un
círculo de lana de color verde, rojo y amarillo; “... esos son Pachamamas... eso es el corral, significa
el corral donde está la hacienda... para que se multiplique, para que no se retire, no se vaya lejos, no
se pierdan”. Este pedido tiene por función pedir agua y pastos para que el ganado no deba alejarse
mucho; ello se debe a varias razones, que el animal se cansa en grandes desplazamientos;
adelgaza si falta pasto o tiene que viajar mucho para encontrarlo o también obliga a los pastores a
constantes traslados acompañando a los animales, lo que no resulta muy del agrado de éstos (Juan
Velásquez, Rodeo Colorado, Iruya, mayo de 1982).
Las apachetas que encontramos en las abras a un costado del camino, señalan los lugares
estratégicos de tránsito o de transición entre dos zonas o ambientes diferentes, antiguamente del
dominio de una achachila diferente20. Allí se debe depositar, tanto la ofrenda como el acuyico 21, para
19
Abras: paso o lugar de tránsito, de menor altura, sobre la cumbre de un cerro o en la unión de dos de ellos.
20
Achachila: divinidad menor, dueño de la comarca o valles a los que se ingresa; achachi es considerado como anciano o antecesor o
dueño de ciertas montañas.
21
Acuyico: bolo de coca mascada que se arroja en la apacheta o sobre los lugares bravos para neutralizar malas influencia.
. Academia Nacional del Folklore Página 47
compartir no sólo el alimento sino también el cansancio, renovando fuerzas con el nuevo armado del
bolo de coca. El caminante considera que deja allí su fatiga o solicita que no le alcance el cansancio,
el “mal aire”22 o “la pilladura”23 y se dispone en su proximidad a realizar una frugal comida, para
poder convidarla y evitar así posible accidente o enfermedad durante su marcha. La apacheta se
encuentra en un lugar crucial en mitad de una jornada, término medio de un esfuerzo, allí se
reparten las cargas o se las acomoda y se evita el “daño” 24, el “mal viento”25, la “sopladura”26 y el
rapto del espíritu, al compartir todo, incluso el agotamiento con la “Madre Tierra”.
Apachitas o apachijtas
Con el nombre de apachita27 o apachijta, se conoce en los valles más cálidos u orientales, un
tipo de apacheta que se erige al iniciar las tareas agrícolas. Está conformada por un pequeño
amontonamiento de rocas, en lo posible de cuarzo blanco, sobre las que se coloca una rama seca
que se adorna con lanas en forma de lazos o con hilos torzados a la izquierda o en su defecto
chimpus28 de colores rojos, amarillos y verdes simulando hojas, flores y frutos. Se rodea la rama con
lazos de lana multicolor o serpentina y se realiza a manera de riego simbólico una challada, rociando
con coca, alcohol, bebidas blancas, chicha o cerveza, el amojonamiento de piedras. Es evidente su
significado propiciatorio para una exitosa cosecha y conjurar la falta de agua o las lluvias tardías que
influyen negativamente sobre los sembrados.
En Nazareno y Poscaya29 denominan “Pachacho” a la ceremonia que precede a la siembra,
refiere nuestra informante que “se cava un hoyo y echan maíz, coca, chicha y alcohol mientras se
pide a la Pacha abundancia”. El hueco se realiza junto a una apachita o en sitio predeterminado de
la sementera.
Una vez iniciado este ritual, continúa con la roturación ceremonial de los campos aledaños a la
apachijta. Sobre los surcos, las mujeres se ubican formando grupos o rondas, rodeadas de niños de
corta edad y en especial jóvenes grávidas, con el anhelo de transferir su fertilidad a la tierra. Se
sientan sobre mantas, que luego han de sahumar para evitar “levantar” algún daño de la tierra.
En el área andina, a los amontonamientos de piedra agregan un haz de paja o ramas y los
envuelven en lanas rojas y blancas, para protección del ganado. Cada una de las piedras que se
agregan en apacheta, apachitas o mojones tiene un significado propiciatorio en espera que, en
retribución, el medio al que se le asigna retribuya con aumento de bienes.
Mojón
Montículo de piedras de mayor altura que la apacheta; se construye en forma cónica cerca de
viviendas o corrales, preferentemente con rocas de cuarzo blanco, particularmente consideradas
como de preferencia de la Pachamama. Se erige en la proximidad del corral o a un costado de la
vivienda, aproximadamente a unos cincuenta metros del punto de origen. Su construcción está en
relación directa con el número de animales que se tiene y el aumento de tamaño será proporcional al
número que se desea. Una roca chica es una cría, teke o maltona, una roca grande, un animal
adulto reproductor o tatacho, o una “criadora” y es un deseo para sí y para todos sus familiares y
vecinos. Posee el deseo implícito de multiplicación de ganado o bienes que el “kintu” u ofrenda que
realizan los participantes de una señalada cuando desea al dueño de casa una cifra representada en
hojas de coca, cuyo tamaño varía de igual manera que las rocas.
22
Mal Aire: Aire malsano producido por la tierra o el cerro, también puede trasmitir el mal deseo de un ser humano.
23
Pilladura:Rapto intencional del alma que produce una afección física o mental
24
Daño: mal proyectado por tercera persona que desea causar un mal.
25
Mal Viento: Aire que transporta malos deseos o daños. Corriente de aire malsana que produce afecciones pulmonares graves.
26
Sopladura: Insuflación de un gas o mal aire que produce serias enfermedades en niños y adultos.
27
Apachitas: Amontonamiento de roca que se enflora para la roturación de los campos.
28
Chimpus: lana natural teñida, desde donde se extraen vellones o manojos que se atan a las ramas secas simulando hojas, flores y
frutos.
29
Nazareno y Poscaya: pertenece al Departamento de Santa Victoria Oeste.
. Academia Nacional del Folklore Página 48
En él se realizan ceremonias complementarias durante el carnaval, las señaladas y marcadas,
o también durante la flechada de una casa y particularmente durante las ofrendas del primero de
Agosto. El mojón es fundamental cuando se parte o regresa de un viaje.
30
Llista: representación de animales confeccionados con una masa de ceniza de amaranto y papa que suelen utilizar para pijchar,
coqueo ceremonial, en los centros urbanos se la conoce como llicta.
. Academia Nacional del Folklore Página 49
León Benarós
el autor de un cantar de gesta con aires criollos
"...He pensado en un payador anónimo, tratando de no taparle la boca, para que mi voz se
pierda en la del símbolo."
Esto explica León Benarós al referirse a su Romancero Criollo que es la recopilación de todos
sus Romances que empezó a publicar en grandes editoriales desde épocas lejanas. Según
decía él, vivió el folklore antes de escribirlo.
Nació el 6 de febrero de 1915 en Villa Mercedes, San Luis. La casa de sus primeros años en la calle
Buenos Aires 206 de esa ciudad, se conserva por dentro y por fuera tal cual el poeta la describe. Su
familia tenía campos, entre ellos, "El Quirquincho" y El Peludo" cercanos a Villa Mercedes y esos
nombres nos indican el humor de sus ancestros. Sus vivencias y observaciones, especialmente en el
departamento San Martín, en Mendoza, donde vivió algún tiempo, y el trato con familiares bastante
criollos y bohemios, le despertaron el amor por el folklore.
Ejerció la abogacía y en lejanos tiempos fue vocal de la Corte de Justicia
de Catamarca. Siempre abogaba por lo criollo, por eso no fue casual que
el Martín Fierro ocupara un lugar importante en su vida.
Su mejor libro acaso sea Romancero Criollo. La edición de 1977 es un objeto y extracto de
argentinidad.
En el Romancero Criollo encontramos romances de rigor histórico impecables por el afán que el
poeta tenía de escribir verdaderos cantares de gesta. Él había notado que los países europeos
tenían esos cantares. Con su obra quiso lograr que un payador nos contara hechos trascendentales
de nuestra historia. Leda Valladares dijo sobre una de sus creaciones: "Esta composición es tan
auténtica que parecería popular anónima, es decir folklórica en su origen". La doctora Olga
Fernández Latour de Botas, autoridad sobre estos temas desde hace más de 60 años, que aplaude
su obra, lo considera un poeta glosador con sus cuartetas temáticas.
León Benarós falleció, casi centenario, en la ciudad de Buenos Aires, el 25 de agosto del año 2012.
No defraudó a ningún compositor, ni intérprete con sus letras y escribió, con magistral humildad:
"Seria feliz si estos romances alcanzaran la amistad de las guitarras anónimas."
https://www.youtube.com/watch?v=boCuo72jtwE
https://www.youtube.com/watch?v=Wnl65q_D_Pc
https://www.youtube.com/watch?v=AcJpLi11w6Q
1. Libros
Durante una emotiva y sencilla ceremonia, el 22 de octubre se presentó el libro “Mercedes Sosa. Una canción
en el viento”, del periodista Roberto Espinosa, editado por el sello “Ciudad Histórica”, de la Municipalidad de
San Miguel de Tucumán. El evento se realizó en el hall central de la sede municipal de 9 de Julio y Lavalle,
donde el intendente Germán Alfaro y la diputada nacional Beatriz Ávila dialogaron con el autor de la
obra.
La presentación se realizó en el hall central de la sede municipal de 9 de Julio y Lavalle, donde el intendente Germán
Alfaro y la diputada nacional Beatriz Ávila dialogaron con el autor de la obra.
Roberto Espinosa explicó que su obra es un libro periodístico que se compone con entrevistas que le hizo a la artista a lo
largo de tres décadas, de las que guardó registro sonoro. “Ella habla en extensos reportajes, que la muestran
humanamente, su perfil ideológico y su concepto de la música.
Habla de cosas personales, del dolor, del exilio. La muestran como ella era. Y a eso se suman testimonios de gente,
artistas, amigos, respecto de los momentos que han compartido con ella. También tiene colaboraciones de destacados
artistas plásticos que le dan un toque de color al libro”, detalló el escritor. “Mercedes era una mujer muy solidaria y
generosa. Nos llevó por el mundo con el canto”, agregó. Espinosa agradeció el apoyo que recibió del municipio
capitalino. “Es una edición hermosa que hizo la Municipalidad. Estoy muy agradecido con el intendente y su equipo que
se han interesado rápidamente cuando propuse editar este libro”, manifestó. Por su parte, Coqui Sosa dijo que “la
Municipalidad de San Miguel de Tucumán, al promover un libro, está diciendo que la pandemia no frena la cultura”. Y
acotó: “Celebro la decisión del intendente y de todo su equipo de poder avanzar sobre la cultura, que no es fácil”. La
diputada Ávila, en tanto, aseguró que “es un orgullo poder haber presentado el libro de Mercedes Sosa, escrito por un
periodista escritor, como Roberto Espinosa”.
La parlamentaria resaltó que la obra “tiene casi 400 páginas, donde los lectores se van a encontrar con una Mercedes
Sosa, no solamente la gran artista y talentosa embajadora tucumana que ha sido en el mundo, sino una Mercedes Sosa
como era en su casa, con su familia, artistas y con los tucumanos”. Para finalizar, la diputada nacional recalcó que la
cultura está dentro de la agenda política del intendente Germán Alfaro “a pesar del contexto en el que vivimos”.
El libro “Mercedes Sosa. Una canción en el viento”, es producto de una larga labor periodística de Roberto Espinosa,
quien recopiló las entrevistas completas de las que conserva registro sonoro y que le realizó a la cantora a lo largo de 37
años, además de otros artículos que fue publicando en el diario
2. Partidas
2.1 Horacio Alberto Agnese
+ HASTA SIEMPRE QUERIDO HORACIO AGNESE. Ayer en la siesta capitalina, en su hogar, apago sus días el
querido Horacio Alberto Agnese, me sorprendió la noticia y me llena el alma de tristeza, para quienes tuvimos la
fortuna de trabajar con él, sabemos de sus condiciones profesionales, un ser carismático, humilde, siempre
dispuesto abrir las puertas de su querido programa “Folklore en 870” o “Folklore en 670”. Una larga trayectoria,
proyectando la música nativa en todas las expresiones. Conduje con él la recordada “Estampa Cuyana” (Que se
iniciara con Guillermo Olmos en 1966). Periodista, locutor, conductor radial. El programa “Folklore en 870” fue un
clásico radial que comenzó un 25 de octubre de 1961 por Radio Nacional Buenos Aires, y que llegaba a los más
alejados lugares del país a través de la red “Azul y Blanca”, estuvo en el aire hasta 1998, luego retomo en Radio
Antártida, República, entre otros espacios de difusión. Más de 50 años al servicio de la difusión folklórica. Fue
propietario de la inolvidable peña “El hormiguero”. Obtuvo el premio “Martín Fierro” en 1972. Desde aquel primer
programa impuso "El país no termina en la Gral Paz" desde ese entonces pasaron las figuras más importes e ignotas
de la cultura popular, encontrando en esta audición el espacio necesario donde expresarse. Los Cuyanos de manera
especial seremos eternos agradecido a quien siempre nos difundió, proyecto a todos los artistas, expandió la cultura
popular, se ganó el afecto de los oyentes desde un comienzo. Las grabaciones de los programas, las presentaciones
en teatros donde se grababan audiciones, discos del programa, las peñas, festivales… son parte del recuerdo de
quienes compartimos ese hermoso tiempo de “Folklore en 870”. Gracias por todo lo que me enseñaste, Hasta
+ Que año por Dios. No para de dar malas noticias. Horacio Alberto Agnese: Un tipo bueno como pocos... siempre
dispuesto a dar una mano, desinteresado, culto, humilde. Todo lo bueno que puede tener una persona, lo tenía Él.
QEPD amigo querido. Tu partida es una muy triste noticia Carlos Bergesio
En 2015 se publicó Memoria del tiempo que reunía su producción de la década del 60: El tiempo
insuficiente, La soledad en pedazos, El caudillo y La corrupción. Esa producción ponía en evidencia un
estilo basado en la forma de combinar discursos que vienen del lirismo y la épica, del periodismo y la
referencia cultural, del tango y la historieta. Fue autor de ensayos como La poesía de Buenos Aires;
Generación poética del 60; Borges, una biografía; El Centenario; Homero Manzi y su tiempo; El
tango y Lecturas de la memoria. Salas (Buenos Aires, 1938) se desempeñó como funcionario público en la
dirección del Fondo Nacional de las Artes entre 1992-2004, en la dirección de la Biblioteca Nacional desde
2003 a 2004 y asumió como secretario de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires. Era Académico de Historia,
Académico del Lunfardo y Académico del Tango y en 2017 la Sociedad Argentina de Escritores le había
otorgado el Gran Premio de Honor.
3. Recuerdos
+ María Azucena Colatarci ha compartido este recuerdo del 12 de octubre de 2016
Hace 4 años la Academia Nacional de Folklore organizó con la provincia de Formosa el Encuentro Nacional de
Educación y Folklore que fue muy exitoso e interesante, comparto el recuerdo que me trajo facebook de aquel
acontecimiento y aprovecho para traer al presente la memoria de un destacado profesor formoseño que fue la última
ocasión en que pudimos compartir con él los temas del FOLKLORE, nuestro querido RAFEL RUMICH.
A 104 años de su fallecimiento Gabino Ezeiza vive y late en cada guitarra payadoril !! Mientras que canten los payadores
...negro Gabino ...no morirá !!
Este es el menú, sírvase usted la definición que más le guste evitando la mención Raza porque hoy el eufemismo
“Diversidad Cultural” sustituye al sustantivo que en nuestro manual constaba como conmemoración cada 12 de Octubre
recordando a “Rodrigo de Triana” y su famoso ¡Tierraaaaa! que gritó al divisar un montículo. Entre paréntesis, su nombre
real era “Rodrigo Pérez de Acevedo Juan Rodríguez Bermejo”. “Don Cristóbal” iba mirando desde la “Santa María”,
oteando lo que desde eso momento comenzará a llamarse “Nuevo Mundo”. Antes de considerar algún detalle histórico,
. Academia Nacional del Folklore Página 56
no sé porque razón recordé las tres cascaras de media nuez, con un palillo como mástil y, por vela, un trocito de papel
blanco con la “cruz templaria” que hacíamos navegar en un fuentón o en la bañera con poca agua, todo elaborado por
nuestras manos.
No existe, creo, ningún acontecimiento de envergadura o significación para la humanidad que no cuente con algún tilde
de los historiadores puestos a encontrar siempre una aguja en el pajar. Por caso los barcos de Colón. Algunas versiones
dicen que “La Niña” y “La Pinta” eran más pequeñas que la insignia “Santa María”. Otros que no eran “Carabelas” sino
“Carracas” navíos de carga que los portugueses adecuaron para los viajes desde su aparición, en el siglo XII,
agregándoles a las velas chicas una cuadrada importante en el mástil y dejando una original triangular. Fue “Enrique el
Navegante” miembro de la Orden religiosa de Cristo (religiosa-militar) quien diseñó las célebres cruces en los paños
porque era el emblema de su cofradía. No consta en ninguna parte el término “Carabelas”, pues “Bartolomé de las
Casas” que confeccionaba el diario de a bordo, habla de “navío” o “nave almirante” y, a veces, “nao” que así llamaban
los portugueses a las “Carracas”. Los famosísimos
“Hermanos Pinzón”, socios de “Colón” y
consagrados localmente por una canción popular
creada en nuestra época, comandaban “La Pinta”,
Martín Alfonso y, “La Niña” Vicente Yáñez Pinzón.
Se suman, como dato singular algunas otras
imprecisiones propuestas por “Fernando Colón”, el
hijo de “Cristóbal” y “Beatriz Enríquez”, nacido en
1488 y que viajó con el papá en la tercera incursión
(con 10 años-1498) cuando, ya disfrutando la
fortuna heredada de su padre, redactó en una
biografía, nombres y datos que según parece al
traducirse perdieron veracidad. Por ejemplo, varios
apuntes (escuchados) que tomó entre el primer y
segundo viaje son muy poco claros.
Sobre lo que no hay duda es que el 12 de Octubre, habiendo salido de Palos de la Frontera- hoy provincia de Huelva, el
3 de Agosto, llegaron a varias islas del Caribe: Guanahaní (a la que bautizaron San Salvador) Cuba (Juana) y Santo
Domingo (La Española). En esta es que su mejor barco, “Santa María”, tuvo un accidente y se arruinó. Con la madera
construyeron el fortín llamado “La Navidad”.
P.D: para sumar lío hay quienes sostienen que no fue 12 la fecha de arribo, sino el 20 y que los viajes fueron cuatro.
Inclusive leí un testimonio asegurando que el mismísimo “Cristóforo Colombo” divisó unas fogatas, por la noche, antes
que “Rodrigo”. ¿Será cierto?
4. Información
+ Cesar Isella
+ COVID
+Salta sin Fiesta del Milagro por primera vez en 300 años
Por el coronavirus, la tradicional procesión que suele convocar a unas 850 mil personas no se pudo realizar.
Peregrinación a Luján 2020: Mario Poli informó que no se realizará por la pandemia La Fiesta en honor al Señor y la
Virgen del Milagro, que cada año cierra el 15 de septiembre con la tradicional y convocante procesión, considerada una
de las manifestaciones religiosas más importante del país que el año pasado tuvo a alrededor de 850 mil personas,
concluyó, con una celebración sin fieles y transmitida por internet, con el objetivo de evitar aglomeraciones y el aumento
de contagios de coronavirus en Salta.
Es la primera vez en 300 años que no se realiza la tradicional procesión. El arzobispo de Salta, monseñor Mario
Cargnello, celebró la Exaltación de la Santa Cruz en el marco del Triduo de Pontificales, que se realiza durante las tres
últimas jornadas de la Fiesta del Milagro, y en su homilía recordó la Encíclica sobre el “Llamado a la Santidad”, que el
Explicó quezlos médicos decidieron internarlo tras realizarle una tomografía, en la que descubrieron una leve
infiltración en el pulmón. En la clínica recibió oxígeno, transfusión de plasma convaleciente y el tratamiento de
ibuprofenato de sodio inhalado.
"Me di cuenta de que estaba en una pelea de vida o muerte", dijo El Chaqueño, quien además remarcó este
último tratamiento como el que lo ayudó a mejorar su estado. "También tiene mucho que ver la parte de uno,
pero el ibuprofeno ha sido para mí una de las ayudas grandes. Más allá de todo lo que hacen con cualquier
paciente, creo que ayudó muchísimo para que cuando yo venía en caída se frenara", subrayó
Agradeció al personal de salud que lo atendió y a la mutual de los músicos. “Vi gente joven irse y gente
grande quedarse", señaló, por lo que pidió a sus seguidores y a la sociedad “a cuidarse”.
"Estoy en otra vida. Soy otro", aseguró el cantor tras superar la enfermedad. Y por último agradeció a sus fans
que lo apoyaron y enviaron mensajes de aliento.
Quiero comunicarle a todos mis amigos que ya hace 4 dias tengo los sintomas característicos del Covid 19 y mi
compañera Marta Suint se encuentra en las mismas condiciones. Por ahora la vamos llevando relativamente
bien por supuesto aislados,y esta comunicacion es para pedir disculpas por algunos compromisos virtuales que
por supuesto hemos cancelado.
+Otros en vigilancia
Nuestros amigos Naldo Labrín, de Neuquén, y Roberto Lindon Colombo, de La Plata, también nos contaron
que han sido afectados. Suerte y fuerza para ambos
5. Creaciones
El Instituto de Danzas Tarpuy, a cargo de los profesores Fernando Orteu, Silvina Hernández y
Carolina Ramírez, incluye entre sus bailarines niños hipoacúsicos, con movilidad disminuida y
Síndrome de Down.
Pedro Patzer
Por gentil autorizacion del autor, publicaremos la ultima creacion/reflexión de
Pedro, amigo y pensador de profesión… Para que lo conozca, lo seguimos reproduciendo
Quinta parte
Tengo en el celular la foto de una carta manuscrita de 1969 a la que tuve acceso por estos días, que
es una respuesta
de Leopoldo Marechal, un
año antes de su muerte, a
una jovencita de 19 años
que le escribe al
departamento de la avenida
Rivadavia donde el autor
pasó todo su ostracismo
creativo. La adolescente le
expresa allí su fascinación
por el Adán. Y el autor, que
morirá un año después, le
responde.
Pero más acá en el tiempo
(cincuenta y un años
después), tengo en el mismo
celular un chat, que es una declaración de amor. Me explico: comento con amigos que releo a
Marechal, que veo alguna poesía que nunca había leído. Una, Anita, me dice por el wasap:
“El Adán es hermoso. Me acuerdo de que, cuando yo lo leí, tenía una edición de bolsillo, muy
chiquita, pero gorda. Lo tenía siempre en la mano. Nunca me pasó con tanta frecuencia que me
parara la gente en la calle para decirme que amaba ese libro. ¡Lo que me reía leyendo! La
descripción de las peleas de las viejas, de las vecinas, tipo la Odisea, el pendejo de los pies
rápidos”.
Le dice Arlt, compañero en el diario El mundo, en el que también escribe Gálvez, sobre su poema El
centauro (1939): “Poéticamente son lo más grande que tenemos en habla castellana. Desde los
tiempos de Rubén Darío no se escribe nada semejante en dolida severidad”. Le
responde Cortázar cuando advierte que al Maestro le ha gustado Rayuela: “Me alegra de verdad
que Rayuela signifique algo para usted… Pienso que usted lo comprenderá muy bien porque nos
marcó un gran rumbo con su Adán”.
Más acá y más allá también, Villa Crespo y Saavedra. Borges y Scalabrini, Xul Solar, Jacobo
Fijman. Las vanguardias de los años veinte. La revista Martín Fierro. Los jóvenes de El Escarabajo
de Oro, Liliana Heker, que declara con contundencia: “Consiguió trasgredir y fundir
espléndidamente los modos del lenguaje nacional, cruzar géneros y estilos y hacer una novela
extraordinaria”. Sabato le recomienda a Abelardo Castillo seguir leyendo a Marechal confinado, en
pleno ostracismo, razón por la que Castillo responde con una pregunta que expresa con sospecha o
sorpresa, y que sella toda una época en la vida de Marechal y en el país: “¿Marechal vive?”.
¿Cuál es el viaje de este maestro normal nacional egresado, como Cortázar, como Oscar Masotta,
como Juan José Sebreli, del legendario Mariano Acosta, que dará clase durante casi 25 años en la
escuela Juan Bautista Peña de la calle Trelles al 900, en Flores? ¿El de Florida a Boedo? ¿O el de
otro colectivo, cuyo conductor es un Caronte gallego? ¿El viaje a las tardes en Maipú, donde reside
su tío irlandés, como Joyce, que es un perspicaz jinete y pialador? ¿La llanura de Fierro, los ojos
extraviados? ¿Los tres viajes a Francia, la patria del abuelo, que participó en la Comuna de París,
razón por la cual debió emigrar al Uruguay, y del que Marechal diría: “Me dejó como herencia el
gusto por la lectura, el fervor revolucionario, y el paso corto y rápido de la infantería francesa”?
. Academia Nacional del Folklore Página 67
Martín Fierro, la vanguardia
En el principio, una revista. Marechal formó parte de la segunda etapa (1924) de Martín Fierro, la
revista de la vanguardia argentina, fundada por el alvearista Evar Méndez. El cierre de la revista no
se explica solo porque Borges presidió el Comité Yrigoyenista de Intelectuales Jóvenes, que
funcionó en su casa de la calle Quintana 222, junto con Marechal, Enrique González Tuñón,
Roberto Arlt, Macedonio Fernández, Scalabrini y Homero Manzi, sino porque, hacia los años
treinta, se produce una cierta vuelta al orden sobre el caos vanguardista, y no solo Marechal entra
en una poesía de otro tipo, sino el mismo Borges (en lo sucesivo, por ejemplo, escribe una poesía en
la que reconoce explícitamente la influencia de Lugones, contra el que había despotricado toda la
revista).
Recordemos que el primer libro de Marechal (Los aguiluchos, 1922) todavía tiene visos
modernistas e, incluso, simbolistas al estilo baudeleriano (por ejemplo, se habla del mal, de Lúcifer).
Luego, en el 26 (el mismo año de El juguete rabioso y de Don Segundo Sombra), publica Días
como flechas, su libro ultraísta, más fuertemente ligado a los tonos de las vanguardias, un libro que
es manifiesto de toda la generación de Martín Fierro. Y no hablamos solo de orden policial, sino de
una calma ante la proliferación vanguardista, o incluso, a un arte que reclama exactitud y que tiene
entre sus exponentes a Picasso y a Cocteau, pero también a Norah Borges y al mismo Lepoldo
Marechal. Las causas de estos virajes son múltiples: primero, porque hacia los años treinta la
política es ya una política de masas y de ciudades (por esos años gravita decisivamente, en ese
sentido, el pensamiento de Ortega y Gasset en nuestro país), después, porque se suscitan los
primeros cuestionamientos a la lectura liberal del siglo XIX, antesala de lo que será el revisionismo
histórico. Además, estos cambios toman uno de sus cauces en la revista Sur, que empieza a
publicarse en 1931: los vínculos de Roger Callois con Victoria Ocampo suponen otra cosa, pero
además por estos años Marechal está en Sur y la editorial traduce a Maritain y a Henri-Pierre
Simon.
En Sur, Marechal, como Lugones,
celebra la aparición del Don
Segundo Sombra de Güiraldes,
defendiéndolo de la despiadada
crítica que le propina la izquierda
por ser la novela de un patrón y, a
diferencia del filólogo
español Amado Alonso, que
estudia el libro en términos de sus
relaciones con la norma culta del
castellano y declara que la lengua
de la novela no se “agacha” como
lengua general ante el habla
gaucha, sino que compone una
lengua artificial que da dignidad
artística a una lengua que de por
sí no la tiene, Marechal anticipa
la gran fiesta de la diversidad
de tonos, modulaciones y
acentos lingüísticos que constituyen su Adán Buenosayres, una estirpe, una máquina incesante
de proliferación dialectológica: que tiene un capítulo especial en Scalabrini (El hombre que está
solo y espera y en el primer Cortázar (Torito, un boxeador como el Negro Ortega, de Castillo),
pero llega a Haroldo Conti (Como un león). O a las reproducciones de la oralidad en los juegos con
el discurso indirecto libre de Cortázar (La señorita Cora) o las modulaciones orales
de Humberto Constantini (Háblenme de Funes). Pero el fin de la revista Martín Fierro, que se
produce, en apariencia, por la adhesión de estos jóvenes al yrigoyenismo y por esa “vuelta al orden”,
también se produce por fuertes diferencias internas en el mismo grupo.
Recordemos que el primer año de la revista se lanza una encuesta en la que se interroga acerca de
una “mentalidad” o “sensibilidad” típicamente argentina, y la responde un elenco variopinto de
escritores entre los que se encuentran Lugones, Güiraldes, Rojas, Girondo, Glusberg. En las
respuestas, como en el grupo de los martinfierristas, hay líneas ideológicas diversas y a veces
contradictorias.
Entre liberales, nacionalistas y católicos, y la combinación de todos ellos, también es posible asociar
modernidad y catolicismo, y ese es el sendero por el que andará Marechal en su etapa
posvanguardista, a diferencia del escritor Ernesto Palacio, por poner otro ejemplo, que pasa del
nacionalismo maurrasiano al catolicismo, lo que lo aleja de la revista, pero que unos años después
lee a los anarquistas y participa de la Reforma universitaria de 1918, o de Pedro García, que publica
un cuento en el que milita el ascenso de Miguel de Andrea, obispo impulsor del partido Demócrata
Cristiano.
En realidad, es Francisco Luis Bernárdez, miembro de la revista, quien introduce los efectos del
nuevo catolicismo europeo con las cartas que envía desde París y que, implican, en cierto punto,
una ruptura con el futurismo de Marinetti. Bernárdez escribe con los bríos por el humanismo integral
del filósofo católico francés Jacques Maritain, que proponía una nueva praxis del cristianismo, pero
de carácter profano y con particular desarrollo en la filosofía y la literatura clásica, es decir, de los
grandes autores de la cristiandad europea: Homero, Shakespeare, Cervantes, Milton.
De esta reconsideración integral participa también la filósofa francesa de origen judío Simon Weil,
que lee la Iliada en clave de advertencia contra el poder, en particular, del derecho positivo, del
utilitarismo y el intervencionismo estatal, y propone una alianza entre modernidad y cristianismo a
través de la lectura de los clásicos griegos. Otros autores que participan de esta reconsideración en
clave religiosa son el norirlandés C.S. Lewis, el inglés W. H. Auden y el anglo-americano T. S. Eliot.
Aquí están las fuentes del viraje marechaliano.
Entre 1938 y el golpe militar de 1955, Marechal tendrá una profusa labor como funcionario, siempre
en áreas vinculadas con educación: se lo habilita para enseñar en la escuela media Castellano y
Literatura, publica dos antologías de folclore (1938), una para niños y otra, para adultos; en 1948, el
año de la publicación del Adán, es designado Director General de Enseñanza Superior y Estética;
en 1954, publica un libro de lectura en coautoría con Elbia Rosbaco, su segunda mujer,
denominado Antología Didáctica de la Prosa Argentina.
El mítico 17 de octubre del ´45, la muchedumbre que oye desde su casa de la avenida Rivadavia,
luego de administrar una inyección de morfina a su primera mujer, al son de “Yo te daré, te daré
patria hermosa/ te daré una cosa/ una cosa que empieza con P... Perón”, le revelan en clave
profética su adhesión al nuevo movimiento. Se dice que Hegel también vio pasar por su ventana al
triunfante Napoleón y que, maravillado ante esa alma del mundo que pasea en caballo y lo domina,
reconoce en el vencedor de Jena una realización del espíritu absoluto. En efecto, esas
muchedumbres que marchan en decidido peregrinar hacia la Plaza de Mayo habrían de signar la
historia argentina para siempre, y la de Marechal, en particular. En 1948 crea y organiza la Escuela
Nacional de Danzas Folclóricas; escribe en 1950, al cumplirse el centenario de su muerte, El Canto
de San Martín, que se estrena en el Cerro de la Gloria, ciudad de Mendoza, y escribe una versión
de la Antígona de Sófocles, que titula Antígona Vélez, en 1951, que se estrena con dirección
de Enrique S. Discepolo.
Las relaciones del campo intelectual con el peronismo clásico durante la década que va de 1945 a
1955 merecen revisarse, fundamentalmente, porque se han construido una serie de mitos sobre
antinomias que algunas iniciativas del gobierno relativizan. Por ejemplo, la intención de incluir a los
trabajadores del campo académico y cultural dentro del programa de reformas sociales. Con este
objetivo, se toman una serie de medidas que concitan la adhesión de una parte importante de ese
campo: la creación de la Secretaría de Cultura y de la Junta Nacional de Intelectuales en 1948, el
ingreso irrestricto a las universidades y la gratuidad. La Junta intentaba nuclear en un solo espacio la
. Academia Nacional del Folklore Página 70
representación colegiada del campo literario. Por una parte, existía la Sociedad Argentina de
Escritores (de clara tendencia antiperonista) y por la otra, la Asociación de Escritores Argentinos
(ADEA), de la cual participaba el propio Marechal, además de Arturo Cancela, el historiador y
novelista Manuel Gálvez y su esposa Delfina Bunge, el escritor Raúl Scalabrini Ortiz y otros
representantes de FO
En cuanto a Marechal, sus años de trabajo estatal durante los gobiernos peronistas los pagaría
caros en el período posterior al golpe. El Poeta depuesto, como se llamó a sí mismo, vivió una
verdadera muerte cívica. Desde el campo intelectual mismo, la SADE imita el gesto caricaturizante
de la revista de los veinte y publica una serie de epitafios burlescos y “coplas por la muerte de un
rebaño de traidores”, cuyos destinatarios concretos son Marechal, Castellani, Olivari, César
Tiempo, Angel Battistessa, Fermín Chávez, Cancela. Pero la caza de brujas se vuelve furiosa y
se organizan comisiones de trabajo para investigar el accionar de la “segunda tiranía” en las políticas
culturales y educativas. Hay una mujer que se destaca en la militancia gremial de la cultura, durante
los años del primer Peronismo, aunque no desde el comienzo, y que sufre particular escarnio
posteriormente. Hablamos de la multipremiada poeta y narradora de la Generación del 40, María
Granata.
Inicialmente vinculada a Leónidas Barletta y a Rega Molina, participó en la Peña Eva Perón, una
reunión de lecturas que tenía lugar en el Hogar de la Empleada, en Avenida de Mayo al 800, que
solía presidir la misma Evita. Granata provenía del nacionalismo cultural y participa de la creación
del Sindicato de Escritores en 1952, que da su apoyo a la continuidad de Perón, también escribe
en La Prensa controlada por la CGT y publica profusamente trabajos no solo literarios, sino de muy
diverso tipo, desde la Secretaría de Prensa.
Es un capítulo aparte el de la relación entre mujeres, literatura y peronismo. En ese lugar tienen
también presencia destacada Alicia Eguren, Aurora Venturini, Julia Prilutzky Farny, entre otras.
La revista Mundo peronista, en los casi cien números de existencia que tuvo, dedicó
sistemáticamente una página de la publicación a difundir poesía. No debería resultar extraño ya que
Evita fue actriz y un ejercicio formativo de su generación era la declamación, para cuyo estudio
circulaban gordas y variadas antologías.
La pluma de Marechal en la Proclama del levantamiento que encabezó el general Valle en junio de
1956 y la carta que este general escribió a su verdugo, el general Aramburu, poco antes de ser
asesinado, son dos piezas inigualables también de las textualidades del Peronismo. Si hacemos
alusión a ellos no es solo para revelar su potencia discursiva, sino además para construir cierta prole
textual de la que participa otra gran pieza oratoria del peronismo militante, que es la Carta de un
escritor a la Junta Militar (1977), de Rodolfo Walsh, en la que no solo pueden reconocerse ecos (lo
que ya ha sido dicho) de la Carta de Valle, sino también de la Proclama de Marechal, y me refiero a
ecos que funcionan en dos sentidos: primero, ambos textos tienen claros sentidos escatológicos, y
por el otro, Walsh, como Marechal, también se inició en el nacionalismo y fue educado por curas
irlandeses, lo que explica las alusiones de su Carta a palabras de clara filiación profética y
performativa: “Sin esperanza de ser escuchado, con la certeza de ser perseguido, pero fiel al
compromiso que asumí hace mucho tiempo de dar testimonio en momentos difíciles”.
Con las mismas claves habría que leer la Carta a Vicky (su hija militante caída en un enfrentamiento
con el Ejército): “Anoche tuve una pesadilla torrencial, en la que había una columna de fuego,
poderosa pero contenida en sus límites, que brotaba de alguna profundidad” y la Carta a mis
amigos, en la que comunica la muerte de su hija Vicky haciendo algunas aclaraciones. Pero,
además, la organización del texto de la Proclama de Marechal y la Carta a la Junta de Walsh,
respecto de la situación en la que se encuentra el país, nueve y doce meses después del golpe,
respectivamente, es muy similar en la descripción por aspecto (político, económico…).
En este mismo sentido es importante aclarar que Rodofo J. Walsh fue el sobrino del hermano
marista Septimio Walsh, fundador del profesorado del Consudec que lleva su nombre, e intenso
animador de la organización del golpe de 1955, concretamente, en la distribución clandestina de
informaciones en los llamados comandos civiles, una práctica que Walsh retomaría, en clave
Esta genealogía tiene otros hitos, por ejemplo, su última novela, Megafón o la guerra, cuya
distribución no llega a ver porque se muere antes, en el cine de Octavio Getino o Pino Solanas,
pero también en Leonardo Favio.
En El familiar (1972) de Octavio Getino, se narra el pacto que hizo Zupay (el Diablo) con un
terrateniente a cambio de venderle las almas de los peones. En Megafón también se habla de los
zafreros tucumanos, de los algodoneros del Chaco, de los petroleros de Comodoro. La reunión del
bandoneonista gordo y el bandoneonista sanguíneo (Troilo y Piazzolla) que discuten sobre tango, la
presencia nuevamente de Fijman y Borges en clave ficcional son presencias de Megafón,
procedimientos que están también en el cine de Solanas (Sur, de 1988; La nube, de 1998), y la
concepción narrativa tan poco lineal, más bien en el tiempo de un verosímil poco realista, de tipo
alegórico o mitológico, propio de Marechal, es una seña de identidad de Solanas, pero también
de Leonardo Favio.
Sobre la adaptación cinematográfica del Adán, se sabe que Manuel Antín lo intentó en dos
ocasiones: en 1974, durante el último gobierno peronista, le negaron los fondos para hacerlo (así lo
declaran el director y María de los Ángeles, la hija de Marechal, en la película de Juan Villegas de
2016) y durante la Dictadura arremetió nuevamente con la idea de filmar, tampoco recibió apoyo,
aunque esta vez los motivos fueron otros: “un autor peronista”.
Sobre su vigencia, es particularmente destacable la edición crítica que realizó Corregidor en 2013,
con una introducción y notas de Javier de Navascués. Llama poderosamente la atención que, en
los contenidos curriculares del área de Lengua y Literatura de la Ciudad, que he consultado, no haya
una sola mención a Marechal, en particular, tratándose de una
literatura de profunda relación con lo porteño, de mitologización de sus
barrios (Saavedra, Villa Crespo, Flores). Tampoco se lo sugiere en las
lecturas de los diseños de la provincia de Buenos Aires. No existe, por
ejemplo, una edición escolar del Adán Buenosayres.
En las escuelas, circula con frecuencia la Antígona Vélez (que fue
escolarizada con notas de Hebe Monges en 1982, en un arrojo
pionero de la editorial Colihue, para la colección Leer y Crear que
fundó y dirigió Herminia Petruzzi), pero todavía esperamos una
edición para uso de los escolares, como se ha hecho con El
Quijote en tantas ediciones, incluso en la última de Pérez Reverte, o
en la edición online tan profusa y bellamente anotada y comentada
de Francisco Rico para el Instituto Cervantes. Y digo escolar como
quien dice: un camino de lectura que lo vuelva “trabajable” en la
escuela, no porque los estudiantes no puedan leer un libro de más de
500 páginas, sino porque una sola novela no puede ocupar gran parte
del año escolar, quitándoles lugar a otras lecturas.
José Luis Castiñeira de Dios tenía poco más de veinte años, aún era un músico aficionado y
estaba en Madrid estudiando antropología, cuando algo se interpuso en ese camino académico que
le anticipaba más lecturas y trabajos de campo: un amigo le presentó a Waldo de los Ríos, a quien él
había admirado desde pequeño.
Waldo lo invitó a tocar, a grabar y, como era previsible, la antropología quedó atrás. Castiñeira de
Dios recuerda hoy que, desesperado, tratando de "recuperar el tiempo perdido", volvió entonces a la
Argentina para estudiar música. A poco tiempo de aquel regreso, en los tempranos 70 formaría
Anacrusa, el legendario grupo folclórico que encarnó innovación, vanguardia y refinamiento. El grupo
—que con renovadas propuestas y ambiciones aparece y desaparece a lo largo de décadas—llega
este sábado a Rosario para presentar, a las 21 en el Teatro del Parque de España y en el marco del
ciclo provincial Música con Todos, "Anacrusa en Francia", una edición discográfica reciente que
recopila dos viejos LPs de la formación. El Anacrusa "siglo XXI" que llega a Rosario es una
formación con la que su director Castiñeira de Dios viene trabajando hace varias temporadas:
Alejandro Santos en flauta, Marcelo Torres en bajo, Guillermo Arrom en guitarra eléctrica, Luis
Cerávolo en batería, Abel Rogantini en piano y el extraordinario Mariano Rey en clarinete y saxos.
Una especie de seleccionado. Castiñeira de Dios dialogó con Escenario sobre el horizonte de
sentido que le encuentra al trabajo con este grupo (por el que han pasado de los mejores músicos
argentinos), de lo que significó emprender la quimera en aquellos años iniciales, y de la necesidad
urgente del apoyo del Estado para potenciar el talento de las nuevas generaciones. "Anacru sa no es
un grupo, es una causa", sentenció.
Los primeros discos de Anacrusa de los años 70 parecen irradiar más luz ahora que entonces
¿Qué te pasa a vos al escucharlos?
—Aquellos primeros discos significaron un despliegue de las posibilidades que abría un nuevo
enfoque, básicamente, la expresión poética de Susana Lago y mi propuesta musical, que nos
proyectaba a la palestra, terciando entre varias antinomias culturales y artísticas de la época: música
popular versus música académica, poesía militante versus coplero anónimo, música argentina
versus música latinoamericana, jazz y rock versus folclore. Anacrusa pretendía llegar a una síntesis
de esa problemática cultural de ese tiempo, reveladora de la extraordinaria riqueza del debate de
ideas que atravesó una década. Cuando, muy modestamente, nos dimos a conocer a través de un
pequeño sello discográfico, Redondel, que editaba sobre todo jazz, teníamos la convicción de que
había que romper esas barreras, insertar al folclore argentino en la música de América, hacer
convivir instrumentos de la música académica europea como el oboe, con el bajo eléctrico, el
charango o el vibrafón, que había que ir develando una poética que se reconociera más en la
tradición lírica de la copla que en las resonancias nerudianas, y que expresara un lenguaje
contemporáneo que se enraizara en la tradición ¡Qué programa! ¡Parecía el proyecto del Bauhaus!
Hoy es fácil encontrar los resultados de esta evolución. En su momento fue una épica. Al escuchar
esos discos devenidos Cds, encuentro la hipótesis de ese programa, a lo mejor no tan perfecto en
sus aspectos técnicos, pero lleno de convicción y de verdad.
—El proyecto Anacrusa venía también de una ideología sólida: creíamos que era el tiempo de
América, necesitábamos transmitir la riqueza de la dimensión de su poesía popular, pensábamos
seriamente en una realidad política y cultural que trascendiera lo artístico. Anacrusa no era un grupo,
era una causa. Y sigo creyendo en ello. Por supuesto, nos tiraron de todos lados: los académicos
porque mezclábamos instrumentos y lenguajes, los criollistas nos acusaban de foráneos y elitistas,
los militantes porque no hacíamos corear al público. De los tangueros, ni qué hablar. Pero no nos
importaba. Nunca modifiqué nada por calmar
a las fieras, siempre escribí la música que
quise con el modelo de quienes lo habían
intentado antes: Ginastera, Aguirre, Adolfo
Abalos, Carlos Guastavino, el Cuchi, el Negro
Lagos, Manolo Juárez, el gran Waldo, Quique
Strega, Eduardo Rovira, el Mono Villegas,
Astor Piazzolla. Ellos eran nuestros ídolos
locales, que en mi caso se insertaban en un
Parnaso formado por los grandes de la bossa
nova: Tom Jobim, Chico Buarque, Joao
Gilberto, Elis Regina, Baden Powell. Y
también por Ravel, Debussy, Falla y Juan Sebastián Bach.
—-Recién hablabas de las críticas que recibían y en esos comentarios mencionaste como una
referencia al santafesino Carlos Guastavino, también fustigado en su época, ¿qué opinión te
merece su obra?
—El maestro Carlos Guastavino fue también uno de los modelos de mis años jóvenes. Con su
sensibilidad exquisita, su virtuosismo en el lenguaje coral y pianístico y su refinada vena melódica
fue casi el último de los mohicanos de una generación que, en aras de una supuesta modernidad,
quemó en la hoguera de la Escuela de Viena todas las buenas intenciones y la creatividad de
muchos creadores del nacionalismo musical.
El camino difícil para Guastavino, para vos, para otros tantos, también lo tienen las nuevas
generaciones que quieren innovar desde el folclore?
José Hernández
Dos artículos nos muestran la multifacética y política trayectoria del “maestro” de lectura real
de los gauchos bonaerenses, que se fue un 21 de octubre en 1886, y por ello es nota de tapa.
Podría haberlo sido el mes próximo, por su nacimiento el 10 de Noviembre, de 1834. Traerlo
ahora nos consiente recordar el mes próximo a Armando Tejada Gómez. Así también diversos
accesos a su vida es coherente.
Autor:
José Hernández y su obra se han convertido en parte esencial de nuestra argentinidad, que
se hace cuerpo en la historia de un gaucho desertor, vago y malentretenido, perseguido por
una ley que tiene en su esencia la inequidad. Gran parte de la historia y la vida de Hernández
estuvo ligada a la de su hermano Rafael, con quien compartió afectos y desventuras que se reflejan
en el inmortal: “Los hermanos sean unidos".
Era, por parte de madre, pariente de Juan Martín de Pueyrredón. Fue bautizado como José Rafael,
aunque pronto dejó de usar el segundo nombre para evitar confusiones con su hermano.
Los dos hermanos ingresaron al partido federal, y en 1857, pasaron a Entre Ríos, después
que José se batiría a duelo con un oficial.
Asentado en Paraná, José se puso al servicio del almacén de ramos generales de Ramón Puig,
suegro de López Jordán, quien lo inició en la carrera de procurador.
Los Hernández sirvieron en el batallón del Primero de Línea en Cepeda, Pavón y Cañada de
Gómez, donde conocieron a Leandro Gómez. Rafael siguió al jefe oriental a Paysandú, donde se
conviertió en uno de los seiscientos hombres que resistieron a las tropas brasileras y de Venancio
Flores.
José, que había seguido su carrera de
periodista, taquígrafo del Senado de la
Confederación y secretario privado del
vicepresidente Pedernera, dejó la comodidad de
su escritorio para rescatar a Rafael, quien había
caído herido en la jaqueada Paysandú.
Eran años de conflictos, de intereses
contrapuestos. Los Hernández rechazaban la
política de Mitre, a quien José atacó con poemas
en donde prefigura su obra magna. Desde el
periódico “El Argentino” condenó la muerte del
Chacho Peñaloza. Esos artículos fueron
recopilados en el primer libro que publica,
“Rasgos biográficos del general Ángel
Peñaloza”.
José actuó como secretario del gobernador Evaristo López, en Corrientes, sin dejar el
periodismo militante en contra de las políticas porteñas.
Desde “El Eco de Corrientes”, atacó la candidatura de Sarmiento. Derrotado López, viaja a Buenos
Aires y junto a Rafael, fundan un periódico llamado “El Río de la Plata”, donde abogaron por los
derechos del gaucho, y la abolición del servicio en la frontera, tema que inspiraró las páginas del
Martín Fierro.
La paz con Sarmiento poco duró. En 1873 el sanjuanino libró una orden de captura contra
Hernández, ofreciendo 1000 pesos a quien lo entregase.
Mientras José se dirigía a Entre Ríos, Rafael recriminó al presidente Sarmiento en duros términos la
condena de su hermano. Finalizada la guerra jordanista, José se refugió en Montevideo, desde
donde ataca al gobierno del sanjuanino y publica un manifiesto de López Jordán. Firmaba sus
columnas bajo el pseudónimo de “El Patagón” Fue entonces que conoció al general Lanza Seca Saa
(un ancestro de los Rodríguez Saa), quien le cuenta la historia de las cautivas y sus experiencias
mientras vivió con los ranqueles.
En 1874 José puede volver a Buenos Aires, donde publica la primera parte de su obra que
alcanzó una difusión extraordinaria.
En este período, los Hernández adhieron al Partido Autonomista, apoyando la candidatura del Adolfo
Alsina, a quien José asistió con su briosa oratoria.
Alentado por el éxito de su poema y aliviada su situación económica, se refugió en una quinta de
Belgrano, cerca de su hermano Rafael (quien llegó a ser intendente de esa ciudad entre 1881 y
1882), y se dedicó a escribir los versos de “La vuelta”.
Las ediciones se sucedieron y excedieron los 60.000 ejemplares, número extraordinario, si
consideramos que la población ascendía a 1.700.000 habitantes, de los cuales solo el 30 % sabía
leer.
Mientras Rafael trazaba el ejido urbano del Tres Arroyos, Pringles, Pehuajó y Coronel Suárez,
José se incorporaba a la Legislatura bonaerense y a la logia masónica “Obediencia a la Ley”,
junto a Hipólito Yrigoyen.
En esos años apoyó la candidatura de Dardo Rocha a gobernador de Buenos Aires. Fue por una
sugerencia de José Hernández que la nueva capital de la provincia se llamó La Plata.
Finalmente, la enfermedad que había segado la vida de su primo, Prilidiano Pueyrredón, lo alcanzó
en su quinta de San José en Belgrano. Falleció el 21 de octubre de 1886 en los brazos de
Rafael. “Hermano, esto está concluido”, fueron sus últimas palabras.
Rafael Hernández lo sobrevivió veinte años, asistiendo en las correcciones sucesivas de sus
poemas y textos.
Los discursos de José durante su etapa como legislador se recolectaron en una cuidada edición.
Rafael prohijó la creación de la Universidad de La Plata, promovió la explotación de cemento
Portland y escribió un largo texto sobre la hidrografía de la provincia de Buenos Aires, que tantas
veces había recorrido. Finalmente, murió en 1903 de la misma afección que se había llevado a su
hermano. A lo largo de esos años honró la ley primera, el culto a la fraternidad a la que aluden
los versos de nuestro poema patrio.
miento y recreación. Cuando el turista prepara su viaje piensa en cuales son las especialidades
culinarias del sitio elegido como destino turístico e indaga sobre su cultura, costumbres, artesanías,
música, etc, o como ocurre generalmente que eligió el destino porque ya sabía de su gastronomía y
folklore. La gastronomía tiene un gran valor en el desarrollo del turismo. Tal vez el mayor
descubrimiento que íntimamente mas desea el turista es el de conocer el sabor de la cocina
del país visitado.
Al regresar el turista a su país de origen siente como especial orgullo o interés por referir a sus
amistades los platos típicos que saboreo y disfruto; pareciera que cada quien fuera el primer humano
de su comarca que los conoce.Es común oír a un turista narrar la sabrosura de unos "Spagueti al
Alfredo" de Roma, las delicias de los vinos franceses, lo agradable del bacalao en Portugal, lo
alimenticio del "Consomé de Chipichipi" en el oriente venezolano; lo regenerador de una "Pisca
Andina" ; la suavidad del "Queso Guayanés" y así sucesivamente. Es que a través de los platos de
cada región, nos vamos internando en la vida y costumbres de sus habitantes y es que en el fondo
esto es lo que desea el turista. Turismo es descubrir, conocer y disfrutar indiscutiblemente que la
gastronomía y el folklore forma parte esencial del turismo.En un articulo de mi distinguido amigo el
Es interesante asistir a las famosos espectáculos de bailes de los Diablos de Yare, al carnaval de
Carúpano, a los Toros coleados de la región llanera, a las fiestas de San Benito, o
la presentación en vivo de la "Pasión y Muerte de Cristo" la "Paradura de Niño" y las "Ferias del
Sol" en Mérida. También son espectaculares las regatas marinas en Puerto La Cruz, las excursiones
con indígenas en los ríos de La Gran Sabana, la visita a los pesebres o nacimientos, las
celebraciones religiosas de Semana Santa en la Iglesia de Santa Teresa en Caracas, la procesión
de La Divina Pastora en Barquisimeto, la visita al Santuario de la Virgen de Coromoto en Guanare.
La tradición de música es variadísima y músicos venezolanos los hay por montones, muchos de
ellos con proyección internacional. La pintura indígena y la producida
Y esas golpeantes invocaciones como foetazos contra las injusticias y necesidades, en medio del
grito embriagante del golpe de tambor, de la sirena, de la fulía. "Occidente.... Difícil reunir con esas
sola palabra las facetas diversas que van, desde tierras cálidas con bailes elegantes como el
tamunangue del Estado Lara, hasta cumbres andinas donde una vida totalmente distinta genera un
folklore religioso centrado en derredor del tiempo de la Navidad. Porque es esta fiesta de Dios Niño
la que mueve al hombre de los Andes a crear música, bailes, pantomimas y juegos diversos sobre el
fin y el comienzo de cada año con su homenaje al Dios cristiano. Con la navidad surgen cantos
familiares de aguinaldos de posadas y paraduras que cubren largo tiempo, entre el 16 de diciembre
y el 2 de febrero siguiente, día de la Candelaria. Es tiempo de regocijo familiar, de recordación en los
dulces y comidas típicas, en aquella sabrosa chicha andina que se hace con maíz perpetuando con
ella los viejos sabores y dulzores del indígena". Los habitantes de nuestros pueblos muestran
orgullosos su tradición folklórica; debemos mantenerla, apoyarla y defenderla. Tenemos música,
artesanía, pintura y muchas otras manifestaciones folklóricas muy agradables al turista. El folklore
nos descubre y nos identifica en nuestro origen cultural. Nuestro folklore es interesante, debemos
mostrarlo al visitante. Debemos propiciar y estimular la creación de verdaderos grupos folklóricos
que muestren, en toda su esencia, al visitante extranjero nuestras danzas populares. El arte y
dedicación de nuestra gran bailarina Yolanda Moreno debe ser ejemplo que se repita muchas veces
en esta tierra.
Fuente: https://www.academia.edu/38722733/Gastronom%C3%ADa_y_Folklore
Raquel Forner
Raquel Forner, (Buenos Aires, 1902 - ibíd. 1988), como dice el diccionario de la
red fue pintora, escultora y profesora de dibujo . Perteneciente al Grupo de París, ganó muchos
premios como la medalla de oro en la Exposición Internacional de París en 1987.
Evolucionó desde un naturalismo original, a un expresionismo muy personal. Raquel Forner fue
considerada una destacada emergente de un grupo de artistas y escritores conocido como el Grupo
Florida, denominado así porque se reunían en la Confitería Richmond, de esa calle porteña, y que
incluyó escritores como Victoria Ocampo, Leopoldo Marechal y Oliverio Girondo, entre otros muy
destacados escritores argentinos y artistas. Este grupo estaba en contraposición dialéctico-literaria
con el recordado Grupo Boedo, que publicaba en la Editorial Claridad y se reunía en el Café El
Japonés, de raigambre mucho más humilde, con integrantes como Roberto Arlt, entre otros.
Cursó sus estudios en la Academia Nacional de Bellas Artes en Buenos Aires y en 1922 obtiene el
título de profesora de dibujo en esta Academia. Después de recibir el tercer premio en el XIV Salón
Nacional de Bellas Artes en Buenos Aires, con la obra Mis vecinas (1924), expone sus obras en
importantes galerías de Argentina (1928). Desde 1929 hasta 1931 asiste a las clases
del parisino Othon Friesz en la Academia Escandinava de París, Friesz sería una gran influencia en
su vida artística. Ya en 1932, junto con los pintores Alfredo Guttero, Pedro Domínguez Neira y
el escultor Alfredo Bigatti funda los Cursos Libres de Arte Plástico y en 1934 gana el segundo premio
en el XXIV Salón Nacional de Bellas Artes.
En 1936 contrae nupcias con el escultor Alfredo Bigatti con quien había fundado los Cursos Libres
de Arte Plástico. Un año más tarde gana la medalla de Oro en la Exposición Internacional de París.
Impresionada por la Guerra Civil española empieza a realizar una serie de obras basadas en ella: La
victoria (1939), El drama (1939-1946) y el Éxodo (1940), que en algunos momentos se acercan
al surrealismo. Desde ese tiempo expresa en sus obras los males desencadenados en el mundo,
además de dibujar seres mutantes y alienígenas.
. Academia Nacional del Folklore Página 89
Forner llegaría a exponer sus cuadros en importantes galerías y museos, entre otros. museos
de Argentina, Alemania, París, Colombia, México, Estados
Unidos, Canadá, Brasil, Suiza, Portugal, etc. Recibió numerosos premios: gana en la Exposición
Internacional de París (1937); el Primer Premio Nacional de Pintura en el XXXII Salón Nacional de
Bellas Artes (1942); el premio Augusto Palanza, otorgado por la Academia Nacional de Bellas Artes
(1947); Gran Premio de Honor en el XLV Salón Nacional de Bellas Artes (1956).
Obras
Su producción esta caracterizada por su desarrollo en Series. Todas estas series fueron inspiradas
por las tragedias que asolaron a la humanidad: revolución, guerra, dictadura. La Guerra Civil
Española y la Segunda Guerra Mundial la inspiran para la creación de Serie de España, (1937-1939)
y El Drama17 (1939-1947).
Desde 1957 hasta sus últimos días trabajó en las Series del Espacio, inspiradas en las angustias del
hombre de su tiempo, que lo impulsaron a descubrir otros mundos y otras posibilidades, cuyo
alcance en todos los órdenes de la vida era imprevisible y gravitaría también, sin duda, en las
expresiones plásticas. Las Series del Espacio incluyen : Las Lunas; Astroseres; Astrofauna; Los que
vieron la Luna; Los Astronautas; Los Laberintos; Los Terráqueos; Mutaciones Espaciales23;
Apocalipsis en Planeta Tierra; Los Mutantes; del Espacio, etc.
Pregón Criollo
Nº 105 – Octubre de 2020 ISSN EN TRAMITE
Nota: La Academia Nacional del Folklore, y este Pregon Criollo, utilizan la grafia original del
término folklore (con K) aunque ahora se acepta (por ej. el Diccionario de la Real Academia), su uso
con C. Cada autor elige el modo de expresarse y asi lo respetamos, aunque reservamos su ajuste
cuando eventualmente se refieran a la Institución o sus productos, en cuyo caso mantenemos la
grafia propia.
Cuando aparecen subrayados en ciertos textos nombres propios, corresponden en general a las
fotografías que ilustran dichos textos.
Noticia importante:
Nos han consultado varios amigos sobre la posibilidad de incorporar escritos o notas para “El
Pregón Criollo”, que sale todos los meses. Desde luego aceptamos (esperamos) tanto sugerencias
como correos (con críticas o elogios), así como notas y noticias para publicación. Pueden ser
enviadas a estos correos:
de la Academia: info@academianacionaldelfolklore.org
del editor: carlos@molinero.com.ar
Sugerimos, eso sí, que las eventuales notas sean breves, como es el estilo de este periódico digital
que ustedes pueden apreciar. Y las noticias, que sean de la fecha del próximo “Pregón Criollo”,
para no mantener demasiado archivos “a futuro”. Los esperamos.