Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Tema 9. El Teatro Desde Los Años 70 Hasta La Actualidad

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 3

Departamento de Lengua Castellana y Literatura.

IES SAN BLAS CURSO 2019-2020

EL TEATRO DESDE 1939 HASTA NUESTROS DÍAS; TENDENCIAS


AUTORES Y OBRAS REPRESENTATIVOS.

La evolución del teatro español, como la de los géneros narrativo y lírico, estuvo determinada
por la Guerra Civil y sus consecuencias. Durante la contienda se desarrollaron distintas orientaciones
dramáticas en la zona nacional y en la republicana. Las duras condiciones de la posguerra afectaron
a la creación literaria y, como es de esperar, la producción teatral no se va a ver libre de dificultades.
Dadas las especiales características del espectáculo dramático, se puede afirmar que el teatro vivió
durante la posguerra una intensa crisis: los autores escasean y padecen una férrea censura; por otra
parte, el público y los empresarios no están dispuestos a la innovación, lo que hace que el teatro
quede reducido a un mero espectáculo para la diversión, con un competidor feroz: el cine. Y, además,
a partir de 1939, el panorama escénico quedó marcado por el exilio de autores como Max Aub, Rafael
Alberti o Pedro Salinas y por la desaparición de dramaturgos que murieron durante esos años (García
Lorca, Valle-Inclán, Miguel Hernández…).

TENDENCIAS

a) AÑOS 40: TEATRO DE HUMOR.


En los años de posguerra, la escena española estuvo dominada por un teatro “nacional”, al
servicio de la dictadura. Las dos líneas dramáticas que triunfaban en los escenarios-la comedia
burguesa y el teatro del humor- tenían como rasgo común la evasión de la realidad de la época. La
transmisión de la ideología se realizó por distintas vías:
- Negación de las aportaciones más relevantes de la preguerra, como el teatro de
Valle y Lorca.
- Estreno de obras que exaltaban los valores de los vencedores: Por la Virgen
Capitana, de José María Pemán.
- Programación de autores clásicos, como referentes de épocas gloriosas: Don Juan
Tenorio,de Zorrilla o El castigo sin venganza, de Lope de Vega.
En la posguerra, el Estado y la Iglesia establecieron un férreo control sobre las obras nuevas
y los repertorios. Este fenómeno desarrolló la consiguiente autocensura en los dramaturgos. A pesar
de ello, la actividad teatral de posguerra fue muy abundante, aunque mediocre, tanto por los dramas
representados, como por la puesta en escena. Las dos líneas dramáticas que triunfaban en los
escenarios eran:
- La comedia burguesa, caracterizada por la perfecta construcción de las obras y
por su intrascendencia, con dosis de humor, ternura y amabilidad. Sobresale el tema
del amor para exaltar la familia, el matrimonio, el hogar…Ideológicamente hace
gala de neutralidad, con finales moralizadores. Algunos de sus representantes
fueron Jacinto Benavente ( El marido de bronce) y José Mª Pemán (El testamento
de la mariposa).
- El teatro del humor, alejado de la realidad inmediata y con dos importantes
autores: Jardiel Poncela, cuya producción teatral se caracteriza por la
incorporación de lo inverosímil, con ingredientes de locura y misterio ( Eloísa está
debajo de un almendro, Un marido de ida y vuelta, Los habitantes de la casa
deshabitada), y Miguel Mihura, cuya produción dramática no pretende reflejar,
sino idealizar la vida por medio de la humanización de sus personajes y el triunfo
de la bondad y la ternura. La evolución literaria de Miguel Mihura está marcada
por la imposibilidad de representar Tres sombreros de copa. La obra, escrita en
1932, contiene tal poder crítico y corrosivo que se impidió su representación hasta
1952, cuando el Teatro Español Universitario la representó con ernorme éxito. El
resto de la producción es posterior a estas fechas; destacamos Maribel y la extraña
familia y Ninette y un señor de Murcia.

Segundo de Bachillerato EL TEATRO ESPAÑOL DESDE 1940 A NUESTROS DÍAS Página 1


Departamento de Lengua Castellana y Literatura. IES SAN BLAS CURSO 2019-2020

b) AÑOS 50.-TEATRO REALISTA.


En los años 50 surge, al igual que en la lírica o en la novela, un teatro realista, social,
comprometido con los problemas del ser humano. Este teatro plantea una ruptura con la línea
anterior y generó polémica entre los autores.
El estreno en 1949 de Historia de una escalera, de Antonio Buero Vallejo, marcó un
cambio en el teatro español. Con esta obra nació el drama realista.
Este tipo de drama se consolidó con Escuadra hacia la muerte, (1952) de Alfonso
Sastre.
Se habla de posibilismo e imposibilismo. El posibilismo (Buero Vallejo) plantea un
teatro moderadamente crítico que pueda estrenarse y que llegue al público; un teatro
arriesgado pero no temerario. Para Alfonso Sastre no hay un teatro imposible, sino
momentáneamente imposibilitado. El autor debe escribir lo que piensa y siente, sin censuras,
aunque ello implique que sus obras, en un primer momento, sean censuradas.

ANTONIO BUERO VALLEJO.


En su obra se pueden distinguir tres etapas:
- Etapa existencial (reflexión sobre la condición humana): En Historia de una escalera, 1949, los
protagonistas son cuatro jóvenes, vecinos en el último piso de una vieja casa: Urbano, obrero de una
fábrica; Fernando, dependiente de una papelería; Carmina y Elvira. La obra refleja un mundo gris
donde las frustraciones se repiten, no sólo por el peso del medio social sino también por la debilidad
personal.
-Teatro social (denuncias de injusticias que atañen a la sociedad): El tragaluz, 1967, centrada en
unos personajes marcados inexorablemente por la Guerra Civil.
- Etapa de innovaciones: Quizá la novedad técnica más llamativa es lo que se han denominado
“efectos de inmersión”,visión de la escena por parte del espectador a través de los personajes. Obras:
El sueño de la razón, Llegada de los dioses, La fundación (1974), en la que nos encontramos en un
lujoso lugar que resulta ser la celda de una prisión con cinco condenados a muerte.
Sus últimas obras son: Jueces en la noche, 1979; Lázaro en el laberinto, 1986; Música cercana, 1989;
y Las trampas del azar, 1994.

ALFONSO SASTRE concibe el teatro como un medio de concienciación y de agitación.


Temáticamente elabora un teatro de protesta y que invita a reflexionar sobre la necesidad de un
cambio social. El escritor debe actuar como si hubiera libertad. Junto con Escuadra hacia la muerte,
La sangre y la ceniza es una de sus piezas principales.

c) AÑOS 60 Y 70.- RENOVACIÓN FORMAL. EL TEATRO VANGUARDISTA Y


SIMBOLISTA.

A finales de los 50 empezaron a surgir orientaciones dramáticas innovadoras tanto en


lo formal como en el contenido de las obras: en los años cincuenta, el teatro de vanguardia,
representado por Fernando Arrabal (Los hombres del triciclo) y Francisco Nieva, y en los
sesenta, el teatro simbolista. Los dramaturgos de una y otra línea tuvieron graves dificultades
para la puesta en escena de sus obras en la España franquista.
En los años sesenta, el teatro que verdaderamente triunfaba en los escenarios era un
teatro evasivo, heredero de la comedia burguesa, totalmente alejado de estos experimentos
vanguardistas. A finales de esta misma década, surgieron los primeros grupos de teatro
independiente, muchos de los cuales entraron progresivamente en los circuitos del teatro
comercial. Bajo este rótulo se engloban grupos como “Els joglars”, “Els Comediants” y “Fura
dels Baus” en Barcelona; “Aquelarre”, en Bilbao; “La Cuadra”, en Sevilla.
Las últimas dramaturgias, surgidas desde 1975, se inclinan por un teatro de temas
contemporáneos, de estética básicamente realista y de una moderada renovación formal. La
instauración de la democracia trajo consigo también la recuperación para la escena española

Segundo de Bachillerato EL TEATRO ESPAÑOL DESDE 1940 A NUESTROS DÍAS Página 2


Departamento de Lengua Castellana y Literatura. IES SAN BLAS CURSO 2019-2020

de autores de la calidad de Valle y Lorca, que, además, habían influido en algunos


dramaturgos.
El teatro está condicionado por dos factores: el apoyo institucional y la pérdida de
importancia del dramaturgo y del texto dramático. Este ultimo tiene dos consecuencias: la
importancia del director de escena y la aparición de esos grupos de teatro independiente con
tendencia a la creación colectiva y al teatro no verbal.

- El teatro de los años ochenta


Conviven, al menos, dos generaciones sucesivas, unos nacidos en los años cuarenta, entre los
que destacan José Luis Alonso de Santos (1942) y José Sanchís Sinisterra (1940); y autores nacidos
ya a finales de los años cincuenta Ernesto Caballero (1958).
El teatro de los ochenta presenta una gran diversidad en lo que respecta tanto a la temática
como a las estrategias formales utilizadas.
a) Temas recurrentes en la escena española de esta época son: la sociedad contemporánea,
centrados en la droga, Bajarse al moro (1985) de José Luis Alonso de Santos; el terrorismo, la
corrupción política, la inmigración o la violencia de género, en La noche que ilumina de Paloma
Pedrero; la Guerra Civil, Las bicicletas son para el verano de Fernando Fernán Gómez (1977) o Ay
Carmela (1986), de José Sanchís Sinisterra; y los conflictos psicológicos, relaciones de amistad,
amorosas o familiares, como por ejemplo, La llamada de Lauren (1984) de Paloma Pedrero, sobre la
identidad y la orientación sexual.
b) Técnicas teatrales: este teatro pretende recuperar la conexión con el público, por lo que,
evitan el experimentalismo extremo. Son obras de raíz realista con temas comprensibles.

- El teatro reciente
En los años noventa irrumpe un grupo de dramaturgos nacidos en los años sesenta, cuyas obras
de madurez se escriben ya en el siglo XXI. La crítica ha acuñado para ellos la denominación de
Generación de Bradomín: Juan Mayorga (1965), Angélica Liddell (1966) y Rodrigo García (1964),
entre otros.
Pueden distinguirse dos vertientes:
a) Un teatro basado en la preponderancia del texto dramático, cuyo principal representante es
Juan Mayorga, cuyas obras reflexionan sobre las distintas formas de opresión o dominación: Cartas
de amor a Stalin, Hamelin.
b) Teatro de experimentación radical, en el que la representación se convierte en una acción
artística o “performance” que, por medio de la violencia y la provocación, pretende suscitar un
rechazo de la condición humana, la sociedad burguesa o el mundo contemporáneo, con autores como
Angélica Liddell y Rodrigo García.

Segundo de Bachillerato EL TEATRO ESPAÑOL DESDE 1940 A NUESTROS DÍAS Página 3

También podría gustarte