La Dimension de La Vida Soñada
La Dimension de La Vida Soñada
La Dimension de La Vida Soñada
J DE LA VIDA SOÑADA
AUTOR: Jennyfer Román Arias
Mi nombre es Valentina tengo 16 años, siempre me han tratado como un bicho raro sintiendo
esas miradas de rechazo y odio; sin embargo me acostumbre, así que no le tome mucha atención
ya que tenía una amiga…si, como lo oyes tenía pues hace como 7 meses que falleció por una
enfermedad del corazón, ella era mi única y mejor amiga que tenía. Recuerdo que siempre me
protegía, era alegre e imperativa se metía en problemas con tal de defenderme sin importar el
castigo ya que yo no hacía algo al respecto por ser callada. A ella no le gustaba verme seria así que
hacia un montón de tonterías con tal de verme reír: me miraba, me tocaba la cabeza y me decía:
“siempre sonríe sin importar que y muéstrale a la vida de lo que eres capaz” gracias a esas
palabras he podido seguir adelante aunque sigue siendo un gran dolor el haberla perdido.
Después de su muerte me volví más fría y no solo eso ahora me temían, ya que la última vez que
unas chicas festejaban de que hubiera muerto mi amiga tome coraje y las arrincone a la pared con
unas tijeras amenazándolas acerca de lo que les haría si volvían a hablar mal acerca de ella. A
partir de ahí ya nadie se me acercaba; no me acusaron porque tenían miedo de que les hiciera
algo, así que simplemente inventaron chismes de mi por todos lados haciendo que nadie se
acercara. Ya se imaginaran como me las he ingeniado para los trabajos en equipo, mis
calificaciones son buenas así que los maestros me dejan trabajar individual.
Vivo sola con mamá ya que me pasó lo que a muchos; mi padre nos dejó pero mi mamá y yo
hemos salido adelante juntas sin depender de nadie, con mi mamá soy muy dulce y le muestro lo
mejor de mí, a pesar de que trabaja siempre me presta atención así que siempre trato de dar lo
mejor para ella sin mostrarle mis debilidades; es algo difícil pero la vida es así.
Hace unos días estaba buscando algún libro interesante para una tarea en una de las últimas
bibliotecas que quedan y descubrí un libro con un título algo llamativo “viajando a través de mi
mundo”, no entendí exactamente de que trataba el libro y ya se me hacía tarde así que me lo lleve
a casa. El libro contaba una leyenda acerca de una piedra muy especial con forma de llama de
fuego y que era capaz de llevarte a la dimensión de una posible vida soñada pero para ello tenías
que pasar por otras dimensiones y así tu decidir en cual quedarte, sólo que al permanecer en una
dimensión por más de 48 horas, jamás volverías a tu dimensión ni a ninguna otra ya que te
quedarías ahí para siempre o hasta tu muerte.
Me quedé pensando en que me encantaría tener esa roca para encontrar alguna dimensión en la
cual mi amiga no muriera, pero es obvio que eso era una tontería, no existe; sin embargo al
pensarlo bien, si mi amiga supiera de esto y yo estaría muerta ella iría sin duda en busca de esa
roca. No perdía nada en tratar de buscar esa famosa piedra así que busqué más pistas en el libro
de donde encontrarla pero no decía nada, me desesperé tanto que avente el libro y vi que la pasta
se había separado de la contraportada, me espanté porque si no regresaba el libro a salvo me lo
cobrarían y siendo sincera no podría siquiera pagarlo. Cuando iba a pegarlo con cinta, vi que
dentro de la separación de la hoja se encontraba un mapa muy raro que señalaba una estatua en
forma de paloma y más adelante se encontraba un árbol muy pequeño en el río.
Recordé que mi tía Karina (hermana de mi mamá) vivía en un pueblo donde no muy lejos de su
casa se encontraba un bosque, y en medio se encontraba la estatua, sin embargo mi tía no me
dejaba pasar de esta ya que me decía que la corriente del río era muy fuerte y peligrosa por lo cual
jamás me dejo ir.
Ya lo tenía decidido, buscaría la forma de ir con mi tía, sin embargo no la habíamos visitado desde
hace 2 años y no sabía si mi mamá quisiera acompañarme. Fui a preguntarle y se negó, dijo que
ella tenía mucho trabajo que no tenía oportunidad y que la visitaríamos solo cuando fuera
urgente; yo solo asentí la cabeza y me retiré a mi cuarto, tenía que pensar en alguna estrategia
para poder ir y fue cuando se me ocurrió la idea de parecer deprimida y estar la mayor parte del
tiempo en mi cuarto pues se acercaban las vacaciones de verano así que lo más seguro es que mi
madre me mandaría a salir por lo menos con mi tía.
Puse en práctica mi plan y funcionó a la perfección, mi madre tenía mucho trabajo así que confió
en mí y me mando con mi tía sola en autobús después de todo ya sabía llegar. Al llegar mi tía me
recibió alegremente sin ningún reproche. Me mostró mi habitación la cual era de una prima que
era ya mayor de edad y la cual ya se había casado y no vivía en la casa con mi tía y mi tío Pablo.
Después de que me vio mi tía tan desanimada en el cuarto, me dijo que podía ir a explorar un rato
el pueblo y tomar aire fresco; acepte su invitación, tomé el mapa, una cuerda que tenía y algo de
comida para el camino. Caminé lo más rápido posible para que no volviera tarde y me regañaran;
tome un camino corto que llevaba directamente al bosque, al llegar pensé si era lo correcto y
aunque no lo fuera sé que mi amiga lo haría. Entonces de la estatua caminé unos metros más
hasta llegar al río que me decían era peligroso, y parece que estaban en lo cierto porque aventé un
pequeño tronco y lo arrastró con facilidad, en medio de aquel río estaba el árbol pequeño que
buscaba pero ¿cómo lo alcanzaría? Observé que no era muy ancho y tal vez podría alcanzar la
rama más larga, note que mi cuerda media lo necesario así que la até al árbol y a su vez a mi
cadera. Me acerqué y pude colocar una roca grande que podía pisar para tomar la rama, cuando
estaba cerca del arbolito note que en el centro de este estaba la piedra, entonces me estiré y logré
tomarla, pero para cuando quería volver a pisar la roca grande para salir resbale y caí al agua, no
pude sostenerme bien y se rompió mi cuerda, no sabía nadar así que solo pataleaba pidiendo
auxilio pero era obvio que nadie iría por mi ayuda, no sé dónde me llevaría la corriente, sin
embargo pensaba en que por fin tenía la piedra y que podría volver a ver a mi amiga, en eso quedé
inconsciente al golpearme con una rama grande y pensé que sería mi fin.
¿Dónde estoy? Fue mi primer pregunta al recobrar la conciencia y sólo escuchaba unas voces que
me decían que despertara; cuando volví a quedarme dormida, recordé la roca así que me levante
de golpe, al abrir los ojos note que estaba en una cama de hospital y en el sillón junto la cama
estaba mi mamá, yo solo mire mi mano y vi que tenía la piedra y eso me tranquilizo un poco. Al ver
mi madre que estaba despierta me abrazó y me preguntó si estaba bien-qué ocurrió mamá- le
pregunte - y me dijo por recoger una piedra que se me había caído a la piscina de nuestro jardín
me golpeé con la esquina de la piscina y solo logré tomar la roca y perdí la conciencia. Al
escucharla me sorprendí pues eso no es lo que ocurrió en verdad o por lo menos no era lo que
recordaba, decía en mi mente; además no tenemos una piscina en casa y ni pensar en mínima
posibilidad, en eso mi madre me dijo: -nos preocupaste a tu papá y a mí; ¿papá? Pensaba, tus
amigos también se preocuparon y están esperándote en casa. Al escucharla decir eso dije ahora sí
que me he vuelto loca, ¿yo tener una casa grande, papá y amigos? Eso sería imposible, yo solo me
quedé callada pensando mientras mi madre me decía que iría por el doctor y por algo de agua
para mí.
En ese momento reaccioné, miré la roca y busqué mi mochila donde traía el libro, la encontré
debajo de mi cama; al parecer la mochila había protegido el libro así que solo estaba algo
húmedo, recordé acerca de lo que hacia esa roca y supuse que estaba en otra dimensión y decidí
no decir nada al respecto y solo continuar, aunque sí tendría que buscar la manera de salir de esta
en menos de 48hrs o no podría volver a mi hogar o alguna otra dimensión, por cierto ¿cuánto
tiempo llevare aquí en el hospital?, me preguntaba eso cuando llego el doctor con mi madre,
decidí preguntarle y me dijo que llevaba apenas 12 horas, me sentí aliviada en cierta manera, mi
madre me dijo que arreglara mis cosas porque ya me habían dado de alta del hospital así que
volveríamos a casa, yo solo asenté con la cabeza.
Pensé que tomaríamos el autobús y resulto que en esta dimensión teníamos un auto no solo eso
¿una limusina?, mi madre me dijo que le diera mis cosas al chofer y yo me subiera. Tenía que
seguir con esto así que obedecí a mi mamá.
Al llegar vi que vivía en una casa muy grande con todo y seguridad, aún sigo sin creerlo pero a
pesar de todo esto no me importa nada más que volver a ver a mi amiga una vez más. En la puerta
me recibieron con muchos regalos y eso sin ser mi cumpleaños.
Al ver a mi padre sentí un nudo en la garganta ya que solo lo conocía por fotos y mi madre siempre
trato de enseñarme a no sentirle rencor, pero en el fondo al verlo sentí un sentimiento de odio y
tristeza, trate de ignorarlo así que solo lo salude secamente, al lado de él estaban los que eran mis
amigos, entre ellos estaban dos chicos que eran los que me molestaban o provocaban las burlas,
parecía que aquí eran mis mejores amigos, quien lo pensaría, y detrás de ellos vi lo que más
deseaba ver, a mi mejor amiga, al verla solté en llanto y corrí a abrazarla gritando su nombre -
¡Daniela!- ella me abrazo algo sorprendida por mi actitud, me dijo que no pasaba nada que ella
estaba ahí para mí, su actitud era algo diferente ya que se comportaba como alguien tímida pero
eso no me importo solo con verla estaba feliz. Después de un rato de saludos pasamos a una sala
gigante donde había una mesa con un banquete con la comida que más me gustaba, aunque no
sabía cómo reaccionar y no quería reflejar un comportamiento extraño ni sospechosa, así que solo
me comporte como siempre lo había hecho, mi padre se me acercó y me pregunto si estaba bien
ya que no parecía no ser yo misma, me puse muy nerviosa que no sabía que responder así que le
dije que no sabía a qué se refería y él me dijo que siempre era muy ruidosa, muy imperativa, eso
fue de mucha ayuda para saber cómo era la yo de esta dimensión, así que le dije que estaba así
porque aún estaba algo cansada pero que volvería a ser la misma en poco tiempo con una sonrisa
falsa en la cara, al acabar de comer mis amigos decían que se tenían que ir pero que volverían al
día siguiente para jugar conmigo, yo los despedí con una sonrisa y le pregunte a Daniela si podía
quedarse otro poco y me dijo que tenía que ir con sus padres a un viaje rápido de trabajo pero que
mañana vendría lo más pronto posible, la abrace y se fue. Quería hablar con mi padre acerca de
muchas cosas pero cuando le dije que si podíamos hablar me dijo que estaba algo ocupado por su
trabajo pero que antes de dormir subiría a mi cuarto a verme. También quería hablar con mi
madre de esta dimensión y me contestó que estaba ocupada y que no podía hacerme caso ahora,
para mí fue extraño ya que en la otra dimensión hacíamos todo juntas y siempre que le pedía
hablar me escuchaba.
Me dirigí a buscar mi cuarto entre tantas habitaciones que habían, sabría que mi cuarto tendría
algo que me gustara, también suponía que sería algo grande así que no tenia de que
sorprenderme, pero al llegar tenía todo lo que siempre quise claro que me sorprendí, mi cama era
como la de una princesa me recosté y me puse a explorar todas las cosas que habían en la
habitación hasta que llegó la noche y en lugar de que llegaran mis padres sólo fueron los
sirvientes a decirme que mis padres estaban muy ocupados que no podían darme las buenas
noches, yo me desanimé un poco pero a pesar de eso me puse a pensar que esta era la vida que
soñaba y era feliz así que me quedé dormida.
Al día siguiente me levanté para arreglarme e ir ayudar con el desayuno y la limpieza, los sirvientes
me miraron extrañados ya que la yo de esta dimensión era algo malcriada por lo que siempre
dejaba que le hicieran las cosas, pero me dio igual y decidí ayudar, la ama de llaves se parecía
mucho a mi tía y el mayordomo a mi tío, así que les pregunte si sabían algo acerca de mis tíos por
parte de mi madre y me dijeron que mi madre era hija única, resulta que aquí mis tíos no eran mis
tíos sino que eran mi nana y el mayordomo.
Cuando estaba todo listo y estaba esperando a que llegaran mis padres para iniciar a desayunar
llegó un mensajero privado y se acercó a mi tía mas bien mi nana, no sabía que decían pero
empezó a llorar, sentí un escalofrió que me recorría, cuando se tranquilizó se acercó a mí, no sabía
lo que pasaba así que estaba algo nerviosa y me dijo que yo no estaba sola que yo era muy fuerte,
me empecé a asustar así que le pedí que fuera al punto y me dijo que mis padres habían ido con
los padres de Daniela en el viaje de trabajo y que me iban a llevar pero me vieron dormida y
pensaron que tal vez no querría ir, el caso es que lamentablemente anoche había una tormenta y
mientras iban en el avión hubo una turbulencia y cayó el avión sin dejar algún sobreviviente. Yo no
sabía cómo reaccionar quedé en shock y de momento lágrimas bajaban por mis mejillas, cuando
me abrazo mi nana solté un gran llanto, estaba desesperada y salí corriendo a mi cuarto y me eche
en la cama, pensé que cuando por fin lo tenía todo en un momento el tiempo me lo volvió a quitar
y no solo a mi mejor amiga de nuevo si no que ahora a mis padres también, no me importaba el
saber que ahora sería dueña de todo ese dinero multimillonario, jamás me intereso lo material,
quería irme de esa dimensión, además no podía quedarme más tiempo ya que ya llevaba 7 horas,
si me quedaba más jamás saldría pero no sabía cómo volver, recordé que mi piedra la tenía
guardada en mi bolsillo, así que la agarré y solo decía algunas palabras al azar para ver cuál
funcionaba y poder irme pero no funcionó. Estaba más que desesperada, tome mi mochila con la
piedra en mano y salí corriendo hacia un bosque que estaba un poco antes de la casa, aunque aún
estaba lloviendo fuerte; mi nana me quería detener pero no le hice caso. Al llegar a una bajadita
escuche que había un río cerca, intenté bajar pero caí rodando porque resbalé con lodo y no pude
agarrarme de nada, no solté la piedra y termine en el río, me estaba ahogando y perdí
nuevamente la conciencia pidiendo volver a mi verdadera casa.
¿Dónde estoy? Espera esto ya me lo había preguntado antes, recordé lo que había pasado en la
dimensión en la que había estado y me levanté de golpe cuando vi que estaba en una cama en una
casa muy pequeña y vi a una señora algo grande, le pregunte quién era y dónde estaba, me dijo
que el río me arrastró llevándome hacia la orilla, ella iba de regreso a su casa cuando me vio y me
rescato. No sabía en qué dimensión estaba y tenía miedo, antes de decir algo la señora me dijo: así
que tomaste el riesgo, con una voz algo burlona, yo me quedé algo confundida y le pregunté a que
se refería, me dijo que la piedra que te llevaba a la vida soñada , no a cualquier persona lograba
encontrarla, me preguntó acerca de mis razones de ir en busca de esa piedra, le conteste que solo
quería ver una vez más a mi mejor amiga que había muerto, la señora me dijo que solo las
personas que tenían intenciones buenas podían usar esa roca ya que podría ser muy peligroso que
alguien con ambiciones la tuviera y la usara para el mal, no le pregunte como sabia simplemente
sentí mucha confianza hacia la señora y le di el libro y la roca y le pedí que me llevara nuevamente
a mi dimensión, ella me dijo que guardara silencio; yo no sabía porque cuando de repente escuche
que me llamaban muchas personas a lo lejos por mi nombre, la señora me dijo que había vuelto a
tiempo a mi verdadera dimensión y que ya tenía que irme. Agarré mi mochila y le dejé la comida
que había echado en mochila en agradecimiento, cuando le iba a dar la piedra me dijo que yo sería
la persona correcta para cuidarla, así que lo hizo un collar y me lo puso, me despedí y me fui hacia
donde se encontraba la estatua de la paloma, ahí me encontré con mi tía, mi tío, mi mamá y varias
personas del pueblo que me buscaban. Me desmayé en ese momento por el cansancio.
Cuando desperté vi que estaban mis tíos y mi mamá a mi lado, los abrace y por protección de la
piedra inventé una historia acerca de lo ocurrido. Después de estar de vacaciones con mis tíos
tuvimos que volver mi mamá y yo a nuestra casa, estaba feliz de poder volver a tener mi vida
normal, excepto resulta que la señora no me dijo pero me mando a mi dimensión soñada, era mi
como mi imaginaba, lo único que cambiaba era que mi mejor amiga no murió en esta dimensión,
estaba en mi dimensión soñada.