Tuberculosis I
Tuberculosis I
Tuberculosis I
Tuberculosis infantil
Agradecimientos:
Dr. Bernardo Salvadores,
Jefe Programa Provincial Tuberculosis, Santa Fe.
Médicos y pacientes Sala 5 Pediatría Hospital J.B. Iturraspe, Santa Fe,
Hospital de Niños Orlando Alassia, Santa Fe,
Instituto Especialidades Pediátricas, Santa Fe.
Abreviaturas y acrónimos
ADA Adenosindeaminasa
BK Baciloscopía
E Etambutol
H Isoniacida
Mt Mycobacteriun tuberculosis
PT Prueba tuberculínica
QP Quimioprofilaxis
R Rifampicina
Rx Radiografía
S Estreptomicina
SR Sintomático respiratorio
TB Tuberculosis
Z Pirazinamida
Esquema de contenidos
TBC
Situación en Argentina
Patogenia Clínica
TBC pulmonar
Diagnóstico TBC extrapulmonar
TBC del recién nacido
Diagnóstico bacteriológico
Formas clínicas
Criterios diagnósticos
Infectado
Enfermo de tuberculosis moderada o grave
PREVENCIÓN: Tratamiento
Diagnóstico y cura del enfermo
Vacuna BCG
Fases / Controles
Contactos: estudio y tratamiento
Situaciones especiales / Reacciones
adversas e interacciones medicamentos
Un niño sano que convive en forma íntima y sostenida con un contagiante, inhala baci-
los que llegan al pulmón y producen una reacción inflamatoria celular y humoral (linfoci-
tos, macrófagos, histiocitos, interferón gamma, factor de necrosis tumoral, citoquinas)
configurando el foco primario: nódulo de Küss y Ghon. Generalmente es único, cercano
a la periferia en la región subpleural y suele encontrarse en campo medio o inferior del
pulmón derecho. No tiene manifestación clínica ni radiológica.
Desde el foco primario, vehiculizados por los vasos linfáticos, los bacilos llegan a los
ganglios traqueobronquiales regionales, constituyendo el Complejo pulmonar prima-
rio (lesión parenquimatosa, linfangitis y adenopatía regional).
La lesión evoluciona en forma directamente proporcional al número de bacilos y a su
virulencia e inversamente proporcional a la inmunidad del huésped.
En la mayor parte de los casos, la infección se controla por la inmunidad celular del
huésped: infección tuberculosa.
En otros casos, sobre todo en niños menores de 5 años e inmunosuprimidos, la infec-
ción progresa y se establece la Enfermedad tuberculosa primaria, generalmente
pulmonar o se disemina produciendo enfermedad extrapulmonar.
Pero el mayor número de casos de enfermedad se observa años después de la primoin-
fección por reactivación endógena: Tuberculosis extraprimaria o tipo adulto, que
puede verse en niños de segunda infancia y adolescentes y ser contagiosa, especial-
mente si presentan formas pulmonares cavitadas. Ver figura 2.
Clasificación de Tuberculosis
Según la patogenia Primaria o extraprimaria
Clínica
Para adecuar la terapéutica al cuadro clínico, el paciente pediátrico en contacto con un
enfermo contagiante debe clasificarse como: expuesto, infectado o enfermo.
Para esto hay que tener presente el cuadro clínico, el resultado de la PPD y/o IGRAs y la
Rx de tórax.
1) Expuesto: conviviente con enfermo contagiante con: PT y/o IGRAs negativas, sin
clínica y con Rx normal. Se descarta infección y enfermedad. Debe recibir quimiopro-
filaxis (QP) primaria.
Tuberculosis pulmonar
La mayoría de los niños pequeños son asintomáticos o tienen pocos síntomas: síndro-
me febril, falta de apetito, pérdida o falta de progreso de peso, cansancio, tos.
Pueden debutar con clínica similar a una neumonía bacteriana o una infección respirato-
ria viral que no mejora luego de tratamientos convencionales, persistiendo las anorma-
lidades en la Rx de tórax, con adenomegalias mediastinales o infiltrados o, infrecuente-
mente cavidades.
Tuberculosis extrapulmonar
La tuberculosis extrapulmonar representa 15% al 20% de todas las formas de tuberculo-
sis; este porcentaje es mayor en pacientes con VIH/SIDA e inmunodeprimidos en general.
Las localizaciones más frecuentes son: pleural, ganglionar, meníngea, miliar, abdominal
y osteoarticular, aunque puede afectar cualquier órgano o sistema.
Los pacientes con TB extrapulmonar pueden presentar síntomas generales o sólo los
signos y síntomas correspondientes al compromiso del órgano afectado; se debe reali-
zar una Rx de tórax, aún en ausencia de síntomas respiratorios y buscar el bacilo tanto
en líquidos como en secreciones y tejidos.
Ganglionar: es la forma de TB extrapulmonar más frecuente en pediatría y los ganglios
periféricos más frecuentemente afectados son los del cuello (90%). En general estos
pacientes presentan pocos síntomas sistémicos. La evolución suele ser crónica (meses
o años). Estos ganglios tienen tendencia a la fistulización.
El diagnóstico se realiza por punción y aspiración con aguja o por biopsia quirúrgica.
Deben tomarse muestras en dos frascos, uno estéril con suero o agua destilada para
cultivo y otro con formol para estudio anatomopatológico. Si la lesión fistuliza se debe
buscar el bacilo en el pus caseoso.
Pleural: estos pacientes suelen presentar un cuadro sistémico con fiebre, dolor pleural
y disnea. En el examen se encuentra matidez a la percusión y se ausculta abolición del
murmullo vesicular con soplo pleurítico. La radiología muestra opacidad por el derrame
pleural. Ver Rx6.
Características del líquido pleural:
••Color amarillo pajizo, serofibrinoso o serohemático.
••Proteínas >3g/dl (o relación proteínas líquido/plasma >0,50).
••LDH > 250U o (relación LDH líquido/plasma >0,60).
Tuberculosis congénita:
••Por vía transplacentaria, hematógena, por el hígado del feto a
través de la vena umbilical.
••Por aspiración o ingestión de líquido amniótico o secreciones
cervicovaginales infectadas.
Tiene una alta mortalidad. Se debe analizar la placenta con estudio bacteriológico (BK)
y anatomopatológico.
La PT suele ser negativa por la inmadurez inmunológica, pero al tercer mes frecuente-
mente se positiviza. La Rx de tórax normal no descarta la enfermedad, pero el 50% de
los RN tiene patrón miliar.
Diagnóstico
La tuberculosis es de difícil diagnóstico en pediatría, ya que es una gran simuladora de
numerosas patologías pulmonares y extrapulmonares; por este motivo debe sospechar-
se en las siguientes situaciones:
••En todo niño en contacto con enfermo contagiante.
••En pacientes con síndrome de impregnación: fiebre prolongada,
disminución del apetito, sudoración nocturna, astenia, hemoptisis.
••En pacientes con cuadro respiratorio persistente sin respuesta a
tratamientos, con radiología sugestiva de tuberculosis.
••En pacientes con eritema nodoso o conjuntivitis flictenular.
••En pacientes inmunosuprimidos (inmunodeficiencias, VIH, diabetes)
con síntomas sutiles.
••En cualquier niño o adolescente con PPD positiva.
Diagnóstico bacteriológico
El diagnóstico de certeza es la identificación del bacilo; es difícil en pediatría, pero siem-
pre hay que intentarlo; considerando la edad del niño y la localización se debe solicitar:
Baciloscopía (BAAR) y cultivo de:
••Esputo.
••Lavado gástrico.
••Líquido pleural, aspirado bronquial, lavado broncoalveolar, LCR,
líquido ascítico, orina, punciones o biopsias tisulares.
Informe de baciloscopía
No se encuentran BAAR en 100 campos observados (-)
Menos de 1 BAAR por campo, en promedio, en 100 campos observados (+)
• Entre 1 y 10 BAAR por campo, en promedio, en 50 campos (++)
• Más de 10 BAAR por campo, en 20 campos observados (+++)
BAAR: bacilos ácidos-alcohol resistentes
Criterios diagnósticos
Como expone la Dra. Norma González, por el bajo rédito de la baciloscopía y el cultivo,
en la mayoría de los casos pediátricos el diagnóstico se realiza cuando el caso reúne
más de 2 de los siguientes ítems:
1) Criterio epidemiológico: contacto con enfermo contagiante.
2) Criterio clínico: sospecha basada en la semiología.
3) Criterio radiológico: imágenes que sugieren enfermedad TB.
4) Pruebas de respuesta inmune: PPD (+) IGRAs (+).
5) Anatomía patológica con granulomas caseificantes.
Debe buscarse el caso índice entre las personas que conviven con el niño, familiares o
no, pero que hayan compartido el mismo lugar repetidas veces y varias horas.
Si existe caso índice, preguntar tiempo de exposición con el enfermo, tratamiento que
recibe y cumplimiento de éste. Solicitar Rx del adulto acompañante, si es SR.
Con respecto al niño hay que conocer: factores de riesgo de inmunosupresión: inmuno-
deficiencia, diabetes, varicela, coqueluche, corticoides por más de 15 días.
Investigar:
••Si se realizaron pruebas tuberculínicas, profilaxis, tratamiento (y si
hubo abandono de tratamiento).
••Cuadros febriles inespecíficos, cuadros respiratorios.
••Vacunación BCG, fecha, evolución del nódulo, cicatriz. Si no hay ci-
catriz ver constancia en Libreta del Calendario Nacional de Vacunas.
2) Criterio clínico
Síntomas y signos generales y específicos de las localizaciones (ya expuestos en el
ítem de Clínica).
3) Criterio radiológico
Es normal en el Infectado.
En el enfermo de TB pulmonar se observan adenopatías intratorácicas, hiliares, para-
traqueales, mediastinales, apenas detectables o muy evidentes, que pueden progresar
y producir obstrucción de la vía aérea, total o parcial (atelectasias, hiperinsuflación). La
Rx de Tórax de perfil es muy útil para esta evaluación.
Al progresar el compromiso parenquimatoso, se ven imágenes de consolidación (neu-
monía), derrame pleural, diseminación bronquial bilateral con imágenes tipo bronconeu-
monía, cavernas, o diseminación hematógena: miliar.
La Rx de Tórax de la TB tipo adulto, del niño mayor y adolescente, se caracteriza
por presentar lesiones en lóbulo superiores, con tendencia a formar cavernas. También
Falsos Positivos
• Aplicación incorrecta. Error de lectura.
• Vacuna BCG. Con respecto a la falsa positividad por vacuna BCG, el inmunizado puede tener reacción
a la tuberculina, pero nunca mayor de 10 mm. Reacciones a la tuberculina mayores a 10 mm no deben
atribuirse al BCG.
• Reacción cruzada con micobacterias ambientales. Aún con las mejoras técnicas, sigue siendo difícil
diferenciarlas de las M. tuberculosas. Las micobacterias ambientales generalmente, determinan
reacciones más débiles, con diámetros menores a 10 mm.
Por ello, la PT se debe aplicar a niños con sospecha clínica de TB: contactos de bacilí-
feros, infectados VIH, pacientes inmunodeprimidos: trasplantados, los que reciben tera-
pias biológicas (fármacos anti TMF), que pueden necesitar una intervención terapéutica.
Falsos Negativos
• Almacenamiento y aplicación incorrectos. Error de lectura.
• Enfermedad tuberculosa grave: miliar, meníngea (anergia tuberculínica).
• Coexistencia de enfermedades virales (sarampión, varicela, VIH, Epstein-Barr) o bacterianas
(Bordetella pertusis).
• Enfermedades o tratamientos inmunosupresores: corticoides prolongados (más de 15 días),
quimioterapia, radioterapia, trasplantes, enfermedad autoinmune, inmunodeficiencias primarias y
secundarias. Diabetes. Enfermedad renal crónica. Cáncer.
• Desnutrición grave. Deshidratación.
• Recién Nacidos.
• Vacunación reciente (6 semanas) con vacunas a virus vivos.
5) Anatomía patológica
Muestra granulomas caseificantes y necrotizantes con células gigantes en ganglios,
pleura, sinovial, etc.
Fase Fase de
Presentación clínica
intensiva continuación
Tuberculosis moderada:
• Pulmonar con baciloscopía negativa y complejo 4HR
primario no complicado. 2HRZ o
• Extrapulmonar no grave: pleuresía unilateral, cutánea y 4H3R3*
ganglionar periférica única.
4HR
o
Tuberculosis grave:
4H3R3*
• Pulmonar con baciloscopías positivas. En pacientes con
• Pulmonar con basiloscopías negativas y lesiones lesiones pulmonares
pulmonares extensas (miliar, opacidad de un segmento extensas y de mala
o de un lóbulo, bronconeumonía) y/o cavernas. 2HRZE evolución, miliar, me-
• Extrapulmonar grave (pericárdica, pleuresía bilateral, níngea u osteoarticular
empiema pleural, genitourinaria, osteorarticular, y enfermos con
abdominal, meníngea). VIH/sida u otra in-
• Asociada al VIH/sida u otras alteraciones munodeficiencia, se
inmunológicas. recomienda una fase de
continuación de 7 a 10
meses con HR diaria.
Fármacos orales de primera línea: isoniacida (H), rifampicina (R), etambutol (E),
Grupo 1
pirazinamida (Z).
Inyectables: estreptomicina (S), kanamicina (Km), capreomicina (Cm), amikacina
Grupo 2
(Am).
Grupo 3 Fluoroquinolonas: levofloxacina (Lfx), moxifloxacina (Mfx), ofloxacina (Ofx).
Fármacos orales de segunda línea: etionamida (Eto), protionamida (Pto),
Grupo 4
cicloserina (Cs), ácido paraaminosalicílico (PAS).
Medicamentos cuya efectividad es dudosa: amoxicilina/clavulánico, clofazimina,
Grupo 5
linezolid, tioacetazona, meropenem, claritromicina, altas concentraciones de H.
Resistencia a fármacos
La resistencia a medicamentos suele ser secundaria a tratamiento inadecuado: por
monoterapia (que haya recibido una sola droga por error u omisión), por cumplimiento
irregular o por falta de adherencia. Requiere planteo individual del paciente y sus con-
tactos.
Prevención:
Curar al enfermo. BCG.
Contactos: estudio y tratamiento
1) Diagnóstico y tratamiento precoz de los enfermos TB contagiantes y estudio
de los contactos.
2) Vacunación BCG: reemplaza la infección natural por otra con una cepa atenuada (M
bovis atenuado); despierta memoria inmunológica para que frente a una infección TB
se inicie prontamente la respuesta defensiva.
Situaciones especiales
Embarazo y lactancia
••Las drogas antituberculosas son medicamentos seguros y no con-
traindican la lactancia.
••Madre bacilífera: a los niños se les debe descartar enfermedad e
indicar quimioprofilaxis. La madre debe usar barbijo.
••La madre que recibe isoniacida y está embarazada o en etapa de
lactancia, debe recibir piridoxina 25 mg/día. No debe recibir estrep-
tomicina en el embarazo.
Hepatopatía
Si un paciente tiene enfermedad hepática avanzada o insuficiencia hepática, debe
evaluarse cuidadosamente. Si el nivel de transaminasas es mayor a tres veces el valor
normal, debe recibir drogas menos hepatotóxicas:
Fase inicial: 6 meses de S, E, levofloxacina (Lfx) y cicloserina (Cs).
Fase de continuación: 18 meses de E, Lfx Y Cs.
Si la situación clínica y funcional lo permite, se incorporan al esquema R y/o H lo que
permite acortar el tratamiento. Se recomienda consultar con expertos en tuberculosis.
Efectos adversos
Droga
Poco frecuente Excepcional
Convulsiones
Anemia hemolítica
Síntomas mentales
Hepatitis
Anemia aplástica
Isoniacida Hipersensibilidad cutánea
Anemia sideroblástica. Agranulocitosis
Neuropatía periférica
Reacción lupoide
Artralgia
Ginecomastia
Hepatitis
Taquipnea
Reacciones cutáneas.
Shock
Rifampicina Reacciones gastrointestinales.
Anemia hemolítica
Púrpura trombocitopénica.
Falla renal aguda
Fiebre Síndrome gripal
Hepatotoxicidad
Náuseas
Vómitos
Gota
Pirazinamida Exantema
Fotosensibilidad
Anorexia. Artralgias
Hiperuricemia
Hipersensibilidad cutánea
Neuritis retrobulbar
Hipersensibilidad cutánea
Etambutol Artralgia
Neuropatía periférica
Hepatitis
Nefrotoxicidad
Ototoxicidad
Estreptomicina Vómitos
Dolor en el sitio de inyección
Hipersensibilidad cutánea
Droga Interacción
Aumenta los niveles de fenitoína, carbamazepina y diazepán (en individuos
Isoniacida
acetiladores lentos).
Aumenta la toxicidad hemopoyética del AZT. Su efectividad es disminuida por
HAART*. Incrementa el metabolismo de anticonceptivos, analgésicos opioides,
Rifampicina
corticoides, anticoagulantes warfarínicos, hipoglucemiantes orales, quinidina, digital,
ketoconazol, ciclosporina, anticonvulsionantes, tacrolimus.
Estreptomicina Potencia el bloqueo neuromuscular (curare). Contraindicada en miastenia gravis.
Cuando resuelva los síntomas y normalice las transaminasas, se reintroducen las dro-
gas, de a una por vez, comenzando por E, luego de una semana de tolerancia reintro-
ducir la R, después la H, y finalmente la Z. (E, R, H, Z)
Si los síntomas recurren o aumentan las transaminasas, se suspende el último fármaco.
Al reintroducir los fármacos, se comienza con dosis bajas, con progresivo aumento para
llegar a la dosis plena al final de la semana.
Se solicitan pruebas de función hepática cada 3 días.
Si la TB es avanzada y no se puede suspender el tratamiento, o los síntomas y signos
de hepatitis no mejoran con la suspensión de la medicación, se comienza un régimen
alternativo con E, S, Lfx. Se sugiere consulta con expertos.
PPD 14 mm. Esputo directo (++) y cultivo (+). Se diagnostica TB Grave. Se inicia terapia con cuatro drogas.
Tiene una hermana de 9 meses eutrófica, que no presenta signos ni síntomas de enfermedad. Se le hacen
PPD (-) y Rx normal.
96 Ejercicio de Autoevaluación N º 3
3 Autoevaluación
2. Juan, de 10 años, padece LLA, está en remisión desde hace 1 año, cumpliendo tratamiento quimioterápico
de mantenimiento. Presenta tos desde hace 2 semanas. Se realiza hemograma sin neutropenia, PPD (-) y
radiografía de tórax 1. No refiere contacto con TB. Inicia tratamiento con amoxicilina-clavulánico.
Rx tórax 1
A los 11 días, presenta fiebre, desmejora levemente, astenia y anorexia, se toman 3 esputos y se informan
BAAR (+).
Se realiza la radiografía de tórax 2.
Rx tórax 2
Ejercicio de Autoevaluación N º 3 97
Autoevaluación 3
3. Laura, de 14 años, presenta una brusca hemoptisis en el colegio. No tiene antecedentes relevantes.
Está inapetente y presenta tos en forma recurrente. Rx: lesión redondeada, hiperclara, con refuerzo
periférico, compatible con caverna en lóbulo superior derecho (LSD).
Se realiza PPD: 10 mm, Baciloscopía con BAAR (+) y Cultivo de esputo (+) para Mt.
Antecedente de TB: padre con TB pulmonar BAAR (+) curado hace diez años.
Laura no recibió quimioprofilaxis en ese momento.
Inicia tratamiento por TB Grave, con muy buena evolución.
98 Ejercicio de Autoevaluación N º 3
3 Autoevaluación
Luego de la fase inicial negativizó el esputo. Alta luego de 7 meses de la fase de continuación. 2 HRZE y
7 HR.
Estudios de contactos frecuentes: se realizó estudio de contacto a todos los compañeros del curso. Se
rescataron 4 compañeros PPD (+), el resto con PPD (-). Todos asintomáticos y con Rx de tórax normal.
Eutróficos. Todos tienen más de 15 años.
A. ¿Cómo clasifica a los que tienen PPD negativa? ¿Qué les indica?
a) Expuestos no infectados. Control clínico mensual.
b) Infectados. Ninguna medida farmacológica.
c) Infectados: H R durante 6 meses.
4. María, de 15 años. Antecedentes personales: Vacunación completa. Mejor alumna de 2do año secun-
dario. Sin enfermedad hasta 7 meses antes (noviembre) en que comienza con fiebre y tos catarral.
Rx 1: diagnostican neumonía y recibe Azitromicina 5 días.
Ejercicio de Autoevaluación N º 3 99
Autoevaluación 3
Un mes después (diciembre) recae con tos, sin fiebre, pero con esputo hemoptoico, en buen estado gene-
ral, pero inapetente.
Luego en enero mejora el peso, pero sigue tos, con expectoración “clara de huevo”.
En mayo presenta diarrea y vómitos. Dolor en FID. Descartan apendicitis. Diagnóstico: gastroenteritis
aguda y anemia. Realiza tres consultas a diferentes profesionales por persistencia de tos. Finalmente
consulta en el Centro de Atención Periférica. Solicitan Rx de tórax (Rx 3) y derivan al hospital.
Está inapetente, con disminución de 1.500 kg desde noviembre: peso: 42 Kg, talla: 159 cm. afebril, tos
catarral escasa, Saturación: 97%, FR: 20 por minuto.
Rx 3:
C. ¿Cómo organiza el estudio de los contactos? ¿Hay que hacer algo con la escuela?: ¿cerrarla, desinfec-
tarla? ¿Cómo clasifica a los compañeros del curso y cómo los trata?
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Frente a una persona contagiante, el pediatra debe comenzar con el estudio de los
contactos para clasificarlos como: Expuestos, Infectados o Enfermos TB, indicar la
terapéutica adecuada y ayudar a la familia a superar las dificultades para completar el
tratamiento y lograr el alta del paciente.
Generalmente la TB es una neumonía sin mucha fiebre, prolongada, con tos que no
molesta tanto al comienzo y que se sospecha al final, luego de múltiples interconsultas
y habiendo desperdiciado tiempo para tratar al paciente y cortar la cadena
epidemiológica.
Es importante:
Informar a la comunidad y al personal de salud sobre la importancia de sospechar y
diagnosticar precozmente la TB.
Facilitar la adherencia al tratamiento y realizar controles hasta el alta médica y los
2 años posteriores a la misma.
Lecturas recomendadas
• Comité de Neumonología e Infectología de SAP: Criterios de diagnóstico y tratamiento de la tuberculo-
sis infantil. Arch Argent Pediatr 2016;114(2):1-30.
• Farga V, Caminero J.A. Tuberculosis 3ra Edición. Santiago de Chile: Mediterráneo Ltda; 2012.
• Gonzalez N E. Tuberculosis Mortalidad Cero. SAP: TIPs Temas de Infectología Pediátrica 2016;9:73-96.
• Perez-Velez C, Marais B. Tuberculosis in Children. N Engl J Med 2012;367:348-61.
• OMS. Global tuberculosis report 2017. [Consulta: 2 de febrero de 2018]. Disponible en:
www.who.int/tb/publications/global_report/es/
2. Juan, de 10 años.
A. b) Niño mayor con inmunidad alterada por enfermedad oncológica, tos que no resuelve, BAAR (+) y
Rx patológica con múltiples opacidades heterogéneas bilaterales y adenopatías hiliares bilaterales. La
PPD puede ser negativa por anergia. No siempre se encuentra el contacto.
B. c) En los niños con lesiones pulmonares extensas (factor de riesgo enfermedad oncohematológica), la
fase inicial es con 4 drogas y la de continuación con isoniazida y rifampicina debe prolongarse 7 a 10
meses. Así completaría 9 a 12 meses totales de tratamiento.
3. Laura, de 14 años.
A. a) Contactos frecuentes con menos de 6 h diarias, no es contacto íntimo, clínica, Rx y PPD (-). Conti-
núa control clínico mensual durante 3 meses.
B. b) Asintomáticos, con examen clínico y radiografía normal, con PPD positiva, son pacientes Infectados:
Primo Infección Tuberculosa, y deben recibir 6 meses de isoniacida (10 mg/kg/día), dosis máxima 300
mg. Deben controlarse mensualmente hasta terminar tratamiento y dos años después.
4. María, de 15 años.
A. b) Tuberculosis pulmonar grave del adolescente tipo adulto. TB Extraprimaria.
B. Tratamiento ambulatorio luego de su internación para diagnóstico de: tuberculosis pulmonar grave,
BAAR ++, Rx con imágenes cavitadas en LSD y múltiples opacidades heterogéneas bilaterales, que
confluyen en campo medio y superior. Anemia. Adelgazamiento. Múltiples consultas previas. Trata-
miento con: 2HRZE y 4HR. Atender recuperación nutricional. Baciloscopía al final de la primera etapa.
C. Familia: contacto íntimo, en este caso se incluyó una tía, que resultó caso fuente, BAAR (++).
La escuela no se cierra ni desinfecta. A los compañeros del curso y profesores, por contacto frecuen-
te, se les debe informar sobre la enfermedad, forma de contagio, síntomas, SR, diagnóstico y cura-
ción, destacando que la enfermedad puede aparecer durante los dos años posteriores. Realizar
PPD y Rx.
Si hubiera algún enfermo (clínica o Rx patológica) se trata. A los infectados PPD (+) Rx (-) Clínica (-).
Isoniazida a 10 mg/kg durante 6 meses con control clínico mensual y dos años posteriores.
Al resto se les dan los signos de alarma y control clínico.