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ENSAYO

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UNIVERSIDAD NACIONAL PEDRO RUIZ GALLO

FACULTAD DE INGENERIA
AGRICOLA

ASIGNATURA: Ciudadanía y Democracia


DOCENTE: Ana Cecilia López Jaramillo
INTEGRANTES: Sánchez Marcelo Johann Israel
Balcázar Hernández Luis Anderson
López Guzmán Elmer Junior
Suarez Ynfante Kiomara Lorena
Yanaco Silva Neyson Salvador
Sandoval Olivos Héctor Iván

GRUPO: N. 01 CICLO: 2023-II

LAMBAYEQUE,
ENERO 2024.
CIUDADANIA MUNDAL

AUTOR O AUTORES:
Sánchez Marcelo Johann Israel
Balcázar Hernández Luis Anderson
López Guzmán Elmer Junior
Suarez Ynfante Kiomara Lorena
Yanaco Silva Neyson Salvador
Sandoval Olivos Héctor Iván

RESUMEN

Contrariamente a lo que se piensa, la noción de una ciudadanía mundial no es


totalmente –ni igualmente– aceptada por todo el mundo. Aunque en la teoría
parece es ampliamente aceptada, su desarrollo práctico está sujeto a distintas
interpretaciones, e incluso puede llevar a todo lo contrario de lo que normalmente
se entiende por ciudadanía mundial. Por tanto, es necesario resaltar que nos
encontramos todavía en una fase inicial de comprensión teórica del concepto y sus
implicaciones, y de algunas aplicaciones prácticas provisionales. En este artículo,
empezaré identificando lo que significa esa conocida pretensión de ciudadanía
mundial. Después describiré las distintas formas en que la ciudadanía mundial
puede ser interpretada por los comunitarios y por los republicanos, para finalmente
concluir señalando los principales problemas que deben ser resueltos antes de
poner en marcha el camino hacia la ciudadanía mundial.
La ciudadanía mundial implica una perspectiva que va más allá de la identidad
nacional y reconoce la interconexión de los problemas y desafíos a nivel mundial.
Los ciudadanos globales buscan comprender y abordar cuestiones como la
pobreza, los derechos humanos, el cambio climático, la justicia social y otros
problemas que afectan a la humanidad en su conjunto. Ser ciudadano o ciudadana
global significa sentir empatía cultural, apasionarse por relacionarse con personas
de distintos orígenes, ser adaptable a experiencias y entornos diferentes, y apreciar
y respetar la diversidad.
La importancia de la ciudadanía global radica en la conciencia global, la
responsabilidad compartida, la defensa de los derechos humanos, la sostenibilidad
ambiental y la participación activa. Sus características incluyen conciencia
interconectada, tolerancia cultural, compromiso social, pensamiento crítico y
responsabilidad ética.
La "Bitácora del Ciudadano Global" es un registro que recoge las reflexiones,
aprendizajes y retos planteados para ser ciudadano global, fomentando la
metacognición y el desarrollo de habilidades para la vida.

INTRODUCCION

la ciudadanía mundial es “un sentimiento de pertenencia a una comunidad más


amplia y a una humanidad común”. concede especial importancia a la
interdependencia e interconexión que se produce entre las esferas política,
económica, social y cultural y las diversas partes interesadas a escala local,
nacional y mundial. La ciudadanía mundial es un concepto que se refiere a la
idea de que todos los seres humanos son ciudadanos del mundo, y que tienen
derechos y responsabilidades globales. Se basa en la creencia de que todos los
seres humanos son iguales y que merecen ser tratados con dignidad y respeto,
independientemente de su raza, religión, género, orientación sexual o
nacionalidad. También se refiere a la idea de que todos los seres humanos tienen
la responsabilidad de contribuir al bien común del mundo. Esto incluye proteger
el medio ambiente, promover la paz y la justicia, y ayudar a los necesitados.
El concepto de ciudadanía mundial ha sido defendido por muchos filósofos,
activistas y líderes mundiales. En 1948, la Asamblea General de las Naciones
Unidas adoptó la Declaración Universal de Derechos Humanos, que establece
que todos los seres humanos tienen derecho a la vida, la libertad y la seguridad
de la persona, sin distinción de raza, sexo, idioma o religión. En los últimos
años, el concepto de ciudadanía mundial ha ganado popularidad a medida que
el mundo se ha vuelto más interconectado. Las personas ahora pueden
comunicarse y colaborar con personas de todo el mundo con facilidad, y esto
ha creado una mayor conciencia de los problemas globales.
En un mundo interconectado, la ciudadanía mundial destaca la importancia de
valores compartidos y la comprensión de diversas culturas para construir un futuro
sostenible y equitativo. Al reconocer que todos somos ciudadanos del mundo,
podemos trabajar juntos para resolver los problemas que enfrentamos y construir
un futuro mejor para todos.
Lo que podemos añadir en estos tiempos es que la referencia a una ciudadanía
mundial implica no solo el problema de los derechos, que forman esa ciudadanía,
sino también un problema de los deberes u obligaciones. Creo que esto es una
cuestión de máxima importancia; no puede haber derechos a menos que haya
obligaciones y juntos, derechos y obligaciones, implican que alguien puede ser
considerado y debe hacerse responsable. Para ser más preciso, si hay un derecho
debe haber alguien que sea responsable de morar por ese derecho, de proteger y
promoverlo, e incluso sancionar a los que pretendan suprimirlo. Y si hay una
obligación es necesario identificar a los que deben realizarla y a los que son
responsables de cualquier posible negligencia. Sin embargo, antes de enfrentarnos
a estos problemas importantes, es necesario remontarse a los fundamentos.
En este ensayo, se profundizará en la importancia de la ciudadanía global y se
explicará por qué es fundamental para garantizar un mundo más justo y equitativo.

CUERPO

La ciudadanía global es una idea que se basa en la premisa de que los seres
humanos somos parte de una comunidad global, y que nuestras acciones tienen un
impacto en el resto del mundo. En este sentido, la ciudadanía global implica una
serie de valores y principios que deben guiar nuestras acciones, como la
solidaridad, la justicia social, la igualdad, la tolerancia, el respeto a los derechos
humanos y la sostenibilidad.
La idea de ciudadanía global tiene raíces históricas muy antiguas, pero en su
construcción actual ha tenido un rol muy importante el proceso que va desde la
creación de Naciones Unidas en 1945 y la Declaración Universal de Derechos
Humanos de 1948, con la adopción de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y el
Acuerdo de Paris sobre Cambio Climático en 2015. Es precisamente un periodo de
aprendizajes, de tragedias y progresos, donde ha ido madurando la idea y las
instituciones que apelan a una dignidad intrínseca, universal, de la persona humana. Se
trata de una ciudadanía que se despliega en diversos niveles, ámbitos y momentos, sin
tener un único marco institucional de referencia. En el nuevo orden mundial ella busca
ampliar sus alcances y ejercer un rol democratizador las decisiones públicas que
puedan afectar severamente los aspectos básicos de nuestras sociedades, especialmente
de la vida concreta de las personas, especialmente de las minorías y grupos
postergados. Las luchas de los ciudadanos globales se despliegan sin límites ni
distinciones geográficas, y van más allá de las esferas tradicionales de poder. Su
objetivo es defender la dignidad humana y promover la responsabilidad social o la
solidaridad internacional, en la cual la tolerancia, inclusión y reconocimiento de la
diversidad no sólo ocupa un lugar central de su discurso, sino también de su práctica,
lo que se refleja en la multiplicidad de actores involucrados en las acciones de
ciudadanía global. para apreciar globalmente el tema de la ciudadanía mundial
existen dos tipos de problemas básicos que deben ser planteados y resueltos. El
primero es si la ciudadanía mundial es deseable y por qué, y si la respuesta es
afirmativa, entonces debemos ver si es viable y cómo. El segundo problema tiene
que plantearse, como se debe hacer, en los términos del debate actual entre los neo-
liberales o, como yo prefiero llamarlos, los republicanos y los comunitarios. Por
supuesto, solo podemos entrar en este espinoso debate si hemos contestado
afirmativamente a la pregunta sobre la deseabilidad de la ciudadanía mundial.
También debemos tomar muy en serio el hecho de que de ningún modo todos los
comunitarios van a aceptar la idea y la perspectiva de la ciudadanía mundial.
Muchos de ellos, en principio, se mostrarán disponibles solamente para presentar
sus objeciones. Y otros apenas hablarán del tema mostrando así un rechazo
absoluto a su formulación teórica. En definitiva, y al margen de las concepciones de
los que detentan el poder, sería un error presuponer que todos los especialistas
comparten la visión de que la ciudadanía mundial es deseable. Y veremos que, en la
práctica, como la ciudadanía mundial será muy exigente, será indispensable una
teoría sólida si queremos situar su viabilidad sobre una base firme. Puesto que los
comunitarios tienen metas muy diferentes, esta teoría sólo puede ser proporcionada
por los republicanos.
Los desafíos y tensiones que enfrenta actualmente la ciudadanía se ven
complejizados por las redes de relaciones e interacciones que se generan entre la
globalización, la crisis del sistema democrático y la incertidumbre vinculada a la
sociedad del conocimiento, las que producen cuestionamientos a la forma en que
tradicionalmente se concibió la sociedad, la relación con el poder y la naturaleza de
la participación ciudadana, y hacen necesario replantearse cuál debiese ser el
camino más apropiado para formar a los ciudadanos que la sociedad actual necesita.
Conflictos internacionales Situaciones en la que se recurre al uso de la fuerza
armada entre dos o más Estados, cualesquiera que sean los motivos o la intensidad
del enfrentamiento. De ese mismo modo la ciudadanía global está en un momento
en el que nacionalismos proteccionistas, los populismos, la pandemia, la invasión y
las guerras, como pugnas comerciales entre Estados Unidos y China, presentas
retos enormes.
La pobreza no es el resultado del fatalismo sino el resultado de unas políticas
injustas que se pueden cambiar. Y esto hace que una mayor conciencia ciudadana
sobre las causas de la pobreza y exclusión sea el eje sobre el que se puede articular
un proyecto educativo comprometido con la democracia, la justicia social y la
igualdad.
La migración en la actualidad, la gran mayoría de los países aceptan la doble
ciudadanía, ya para los inmigrantes o emigrantes. Especialmente en Europa y
América del sur, es frecuente que los residentes extranjeros tengan derecho a votar
en las elecciones tanto supranacionales como subnacionales del país de residencia.
No obstante, solo cinco países del mundo otorgan el derecho a votar.

Resultados:

La promoción de la ciudadanía mundial en el desarrollo sostenible permitirá a los


individuos acoger su responsabilidad social para actuar en beneficio de todas las
sociedades, no sólo la propia.
Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades
de aprendizaje durante toda la vida para todos, el cual incluye a la ciudadanía mundial
como una de sus metas. Para el 2030, la comunidad internacional ha acordado asegurar
que todos los estudiantes adquieran el conocimiento y las habilidades necesarias para
promover el desarrollo sostenible, incluyendo a la ciudadanía mundial. Las
universidades tienen la responsabilidad de promover la ciudadanía mundial al enseñar
a sus estudiantes que son miembros de una vasta comunidad global y que pueden usar
sus habilidades y educación para contribuir con esa comunidad.
Uno de los principales beneficios de la ciudadanía global es la posibilidad de
trabajar juntos para resolver los problemas globales, como la pobreza, el cambio
climático, las guerras y los conflictos internacionales. Para hacer frente a estos
problemas, es necesario que todos los ciudadanos del mundo se sientan parte de una
comunidad global y asuman su responsabilidad en la construcción de un mundo
más justo y equitativo.
Además, la ciudadanía global también implica una mayor conciencia de la
diversidad cultural y el respeto por las diferentes tradiciones y formas de vida que
existen en el mundo. Esto significa que todos los ciudadanos del mundo deben
aceptar y valorar las diferencias culturales, y trabajar juntos para construir una
sociedad más inclusiva y justa.
Por otro lado, la ciudadanía global también implica una mayor conciencia
ambiental y la necesidad de proteger el medio ambiente para garantizar un futuro
sostenible para las generaciones futuras. En este sentido, todos los ciudadanos del
mundo deben trabajar juntos para reducir la huella ecológica y promover prácticas
sostenibles en todos los ámbitos de la vida.

Conclusiones:

En conclusión, la ciudadanía mundial es un término que abarca las acciones sociales,


políticas, ambientales, y económicas de parte de individuos y comunidades con
pensamiento global, a escala mundial. El término puede referirse también a la creencia de
que los individuos son miembros de redes múltiples, diversas, locales y no locales, en vez
de actores en solitario impactando a sociedades aisladas. La promoción de la ciudadanía
mundial en el desarrollo sostenible permitirá a los individuos acoger su responsabilidad
social para actuar en beneficio de todas las sociedades, no sólo la propia.
Representa un compromiso profundo con la comprensión y resolución de los desafíos
globales, y va más allá de las identidades nacionales. Ser ciudadano global implica
valores fundamentales como la empatía, la adaptabilidad y el respeto por la
diversidad. La importancia de esta ciudadanía se manifiesta en la conciencia global, la
responsabilidad compartida y la defensa de derechos fundamentales, estas cualidades,
junto con la conciencia interconectada, la tolerancia cultural, el compromiso social, el
pensamiento crítico y la responsabilidad ética, configuran la identidad de un
ciudadano comprometido con la construcción de un mundo más equitativo y
sostenible. Así como en la búsqueda activa de la sostenibilidad y la participación en
cuestiones globales. La Bitácora del Ciudadano Global actúa como un registro
reflexivo, capturando experiencias y desafíos, fomentando la metacognición y el
desarrollo de habilidades esenciales para la vida comprometida con un mundo más
justo y sostenible.
la ciudadanía global aparece como un recurso retórico importante entre las
instituciones globales e incluso entre la ciudadanía, que compra la idea de ser un
ciudadano del mundo. De hecho, se ha desarrollado un cosmopolitismo cotidiano
fruto del influjo de las culturas globalizadas trasmitidas por la industria mediática. Sin
embargo, la ciudadanía nacional no ha desaparecido. Al contrario, sigue siendo –junto
a las identidades locales y regionales– la fuente de identidad primaria para la mayor
parte de la población del planeta. Algunos colectivos globalizados muestran estas
ambigüedades, al aunar una retórica cosmopolita con la defensa de la identidad
ciudadana nacional o una vaga identidad transcultural (como mochilero o expatriado
corporativo). En ese sentido es imprescindible seguir avanzando por estas líneas de
investigación para validar si estos colectivos globales son una avanzadilla de una
nueva identidad ciudadana global o, por el contrario, las identidades nacionales
continúan siendo básicas incluso dentro de estos colectivos, como parecen apuntar los
estudios previos.

Referentes:

-Manuela Mesa. Directora de CEIPAZ-Fundación Cultura de Paz:


https://www.redongdmad.org/ciudadania-global-lucha-la-desigualdad-los-nuevos-
ejes-la-educacion-desarrollo/
-Silvia Levín fhttps://www.google.com/url?
sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=&ved=2ahUKEwjDgs2999qDAxWzqJ
UCHQiKAG0QFnoECB4QAQ&url=https%3A%2F%2Fdialnet.unirioja.es
%2Fdescarga%2Farticulo%2F5730569.pdf&usg=AOvVaw3oZsA2GGDABs-
MDCZq3YPF&opi=89978449
- Portal de datos sobre migración
https://www.migrationdataportal.org/es/themes/staatsbuergerschaft-und-migration
-CIUDADANÍA GLOBAL. UN ESTUDIO SOBRE LAS IDENTIDAD
SOCIOPOLÍTICAS EN UN MUNDO INTERCONECTADO:
https://arbor.revistas.csic.es/index.php/arbor/article/view/2233/3103
-Ciudadanía mundial Naciones Unidas:
https://www.un.org/es/impacto-acad%C3%A9mico/ciudadan%C3%ADa-mundial

-Impulsando la educación para la ciudadanía mundial en América Latina y el


Caribe:

https://blogs.iadb.org/educacion/es/ciudadania-mundial/

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