Flotación
Flotación
Flotación
Todas las personas tienen el mismo grado de flotabilidad y que hay una serie de factores
internos y externos al individuo que hacen que la flotación varíe.
La densidad del agua dulce es de 1.000kg/m3 y la densidad media del cuerpo humano es de
950kg7/m3. Por lo tanto, un individuo puede flotar con facilidad sobre el agua.
La diferencia de densidad del agua del mar con respecto al agua de un río. El agua del mar
contiene, entre otros compuestos, sal disuelta (cloruro de sodio), lo que hace que sea más densa
(1.027Kg/m3 en la superficie) y por lo tanto mucho más fácil flotar en ella que en un río o en una
piscina.
Otro factor que afecta a la densidad del agua es la temperatura, que se hace más densa a
medida que desciende, es decir, cuanto más fría esté el agua, más densa es y como resultado de
ello se flota mejor.
Mar Muerto
2. Densidad del cuerpo
El Principio de Arquímedes establece que “cuando un cuerpo está total o parcialmente
sumergido en un líquido en reposos experimenta un empuje hacia arriba igual al peso del volumen
del líquido desplazado”. Por lo tanto, si un cuerpo tiene una densidad relativa menor que 1, el
cuerpo flotará; ya que el peso del objeto es menor que el agua desplazada.
El cuerpo humano puede alterar su densidad en función de la cantidad de aire que alberga en
sus pulmones, permitiendo que el peso del volumen de agua desalojada aumente o disminuya en
relación al peso del cuerpo en su conjunto. En inspiración, el peso específico del cuerpo humano
suele ser menor que uno, por lo tanto, el cuerpo flotará, mientras que en espiración el peso
específico suele ser mayor que uno, entonces el cuerpo no flotará.
3. Equilibrio en flotación
Según el Principio de Arquímedes “Sobre un cuerpo sumergido en el agua actúan dos fuerzas: la
fuerza de la gravedad o peso y la fuerza de flotación o empuje
Imagen 1
Para que un cuerpo quede en equilibrio estático, dichas fuerzas deberán contrarrestarse, de lo
contrario el cuerpo se hundirá o rotará hasta encontrar un equilibrio (figuras A de las imágenes 1 y
2).
El punto de aplicación de éstas dos fuerzas sobre el cuerpo humano es distinto, debido al
reparto no homogéneo de masas. En posición horizontal, generalmente, el punto de aplicación del
centro de gravedad (CG) se sitúa más bajo que el punto de aplicación del centro de flotación (CF),
(imagen 1).
Partiendo esta base podemos decir que se han de cumplir dos condiciones para que el cuerpo
quede en equilibrio:
Imagen 2
Que la resultante de las fuerzas aplicadas sea igual a cero, es decir, que el empuje sea igual
al peso (figura B de las imágenes). En este punto influye la densidad del agua y la densidad
del cuerpo.
Que la resultante de los momentos de las fuerzas aplicadas sea también cero, es decir, que
el empuje y el peso tengan la misma línea de aplicación (figura B de las imágenes 1 y 2), de
lo contrario será nula, produciéndose un movimiento rotatorio (figuras A de las imágenes
1 y 2) hundiéndose la parte más pesada, generalmente las piernas, hasta que el centro de
gravedad y el centro de flotación de hallen en vertical.
El centro de gravedad o centro de masa del cuerpo humano no es un punto fijo, sino que puede
variar su posición de una persona a otra dependiendo de la constitución física, la edad y el sexo.
Pero también varía en una persona cuando la disposición de los segmentos cambia, como al
caminar, al correr, al sentarse, o simplemente levantar los brazos en posición horizontal respecto
al suelo (imagen 3). Si la proyección del centro de gravedad cae dentro de la base de sustentación,
se puede decir que el cuerpo está en equilibrio, por el contrario, cuando el centro de gravedad cae
fuera de ésta, el cuerpo pierde el equilibrio
Imagen 3
Base de sustentación
Centro de gravedad
Lo mismo sucede en el medio acuático, pero con la salvedad de que la base de sustentación
(superficie de apoyo) no es el suelo sino el agua.
4. El Sexo
La composición media corporal de las mujeres contiene un porcentaje de agua y de tejido
adiposo, acumulado de manera natural, en pechos y cadera con respecto a los varones. Por esta
razón, y siempre generalizando, las mujeres flotan con mayor facilidad que los varones. Por lo
tanto, en el cuerpo humano los únicos materiales que no flotan en el agua de forma aislada son los
dientes, los huesos y los músculos. Esto se debe, como ya hemos explicado, a que su peso
específico es superior a 1. El peso medio de músculos y huesos de un varón es superior al de las
mujeres por lo que la tendencia de los hombres es flotar menos que las mujeres.
5. La Edad
La mayoría de los niños y los jóvenes tienen dificultad a la hora de flotar en posición horizontal.
Esto es debido a la escasez relativa de tejido adiposo y el mayor peso de las piernas ocasionadas
por la musculatura.
6. Características de Origen
Por medio de estudios científicos avalados por antropólogos y sociólogos se pueden distinguir
a las personas de acuerdo a su comunidad de origen como los asiáticos, caucásicos, africanos,
latinos etc. Además, se los identifica por etnias, diversidad cultural, rasgos distintivos como el
color de piel, cabello y facial.
Se puede decir que, en igualdad de edad y sexo, las personas de origen afro tienen más masa
ósea y mayor volumen muscular que las de origen asiático, motivo por el cual estas personas
encuentran, de forma generalizada, una dificultad añadida para flotar sobre el agua.
7. El Somatotipo
Cada individuo tiene una constitución física singular que le hace diferente a los demás, la cual
está determinada por la genética como por el medio ambiente. Sin embargo, existen unas
características físicas generales para clasificar estas diferencias. Dependiendo de estas
características una persona puede flotar mejor que otra.
Por lo tanto, se puede decir que una persona endomórfica, al poseer un mayor volumen de
tejido adiposo flotará mejor que una persona mesomórfica o ectomórfica. Así mismo, una persona
ectomórficatendrá mayor dificultad para flotar ya que carece de grasa corporal y posee mayor
volumen óseo.