Lingüistica General
Lingüistica General
Lingüistica General
Introducción
Para que haya comunicación tiene que haber un mensaje, al igual que es necesario la relación
entre individuos.
Las onomatopeyas son una excepción, estas son más naturales, pues se asemejan a los sonidos
reales. Varían dependiendo de la lengua, aunque todos se asemejan al sonido original. La cruz
puede ser un índice o un icono dependiendo de la perspectiva. Cada lengua tiene un sistema
de codificación, el lugar por el que circula la comunicación es el canal. En la comunicación oral
utilizamos el canal vocal-auditivo, aunque hay otra serie de canales como el teléfono, la radio,
la televisión, internet o la escritura.
Los canales cambian acorde a nuestro desarrollo personal. El contexto es muy importante
también. Si falla alguno de los factores influyentes, falla toda la comunicación. Las
interferencias o los ruidos que se producen en el acto de comunicación influyen, el fallo estaría
en el canal, pues es perjudicado en el caso de que suceda. Si mentimos, estamos perjudicando
el mensaje.
La semiótica
Es la ciencia que se encarga de estudiar la comunicación, se ocupa del lenguaje verbal, no
verbal y del paralenguaje. Lenguajes no verbales: El estudio sobre el lenguaje no verbal
comienza con la obra de Darwin.
El lenguaje no verbal forma parte del cerebro límbico y el reptiliano de las emociones.
Tema 1. La comunicación.
1. Hacia una primera aproximación conceptual de la comunicación.
Según Sebastián Serrano, la comunicación es el proceso por el cual unos seres, unas personas,
emisor y receptor o receptores asignan significados a unos hechos producidos y, entre ellos,
muy especialmente al comportamiento de los otros seres o personas.
Este concepto presupone otros dos conceptos: el de relación entre seres y el de transmisión de
información, de significado.
La diferencia entre un icono y un símbolo radica precisamente en que en este último no hay la
más mínima semejanza entre el referente y el referido. El vínculo que une el signo con lo
señalado es convencional, establecido por un pacto. Por lo tanto, las lenguas son símbolos por
excelencia con el máximo carácter arbitrario, no natural. De tal manera, no hay ninguna
conexión entre la palabra “sorpresa” y su significado.
Por otro lado, Serrano sostiene en La semiótica que en realidad los iconos, índices o símbolos
puros no existen siempre y sistemáticamente. Por ello valdría la pena en muchos casos
considerar más bien los caracteres icónico, indicativo y simbólico y señalar que estando
presentes en un signo los tres caracteres en cada caso se actualizan más uno u otro. Un
ejemplo de ello sería el de la cruz como signo. La cruz fue una señal de una ejecución en
tiempos de la Antigua Roma. Es un icono en forma de medalla y, en general, un símbolo del
cristianismo.
3. Acto de comunicación.
En 1958, Roman Jakobson propuso el siguiente esquema sobre los elementos que intervienen
en la comunicación:
4. Funciones comunicativas.
Cada uno de los elementos de la comunicación desempeña una función para establecer la
comunicación:
1. Función expresiva: Se produce cuando en los mensajes se pone de relieve la actitud del
emisor.
2. Función conativa: Es todo lo contrario de la anterior. Cuando el peso del acto
comunicativo recae sobre el receptor y todo contribuye en el mensaje a desencadenar
un comportamiento.
3. Función referencial: Remite al contexto. Es aquella mediante la que la información nos
transmite las coordenadas contextuales entre las que se desenvuelve la interacción
entre las personas que desarrollan la comunicación.
4. Función Fática: Remite al canal y se encarga tanto de señalar que el canal está
ocupado como de suplir las posibles deficiencias ocurridas en el mismo.
5. Función metalingüística: Remite al código y se pone de relieve para cubrir los huecos
que el receptor tiene en todo aquello relativo a ese código comunicativo (aclarar
diferencias entre distintas lenguas, entre dialectos o para hablar acerca del propio
lenguaje).
6. Función poética: Remite al mensaje y nos permite utilizar el lenguaje para elaborar
textos artísticos. Eso quiere decir que el objetivo del uso lingüístico no es solo
comunicar sino, además, también transmitir belleza.
5. La semiótica.
La semiótica es la ciencia encargada de estudiar la comunicación. Se ocupa fundamentalmente
de tres grandes tipos de lenguajes:
Por otro lado, según Pease, el animal humano rara vez es consciente de que sus posturas,
movimientos y gestos nos cuentan una historia mientras su voz nos cuenta otra. En otras
palabras, el lenguaje no verbal contradice lo que estamos diciendo verbalmente. Sin ser
conscientes, nuestro cuerpo emite mensajes de forma continua, lo cual es una forma de:
Además, existen dos grandes ramas de estudio del lenguaje no verbal: cinesia y proxémica.
CINESIA.
Estudia el sistema de las expresiones corporales (físico, movimientos, tacto, mirada) y se
centra en tres clases de movimientos: faciales, gestuales y de postura.
Por otro lado, existe la teoría del cerebro triple, que explica que el cerebro tiene tres partes:
Según Paul Ekman en su Sistema de Codificación Facial (FACS) nuestro rostro es capaz de
manifestar hasta 10.000 expresiones. Por otro lado, una emoción falsa se detecta por
asimetría facial, por la falta de suavidad en la manera en que la expresión aparece y
desaparece del rostro y por las microexpresiones.
La sonrisa es la “careta” más utilizada porque forma parte de los saludos convencionales, está
“bien vista” y suele emplearse en la mayoría de los intercambios sociales. Una sonrisa es falsa
cuando no está acompañada de los músculos orbiculares de los párpados, no se alzan las
mejillas, no descienden las cejas y no aparecen “patas de gallo”.
Las mentiras que llevan consigo una emoción son las más fáciles de detectar porque es,
precisamente, la lucha interna entre lo que se siente realmente y la emoción falsa, lo que
traiciona al mentiroso.
En la actualidad, se ha determinado que las siete emociones básicas (Alegría, rabia, tristeza
sorpresa, desprecio, miedo y asco) no pueden ser “falsificadas”, pues los músculos de la cara
se mueven, en la mayoría de los casos, de manera automática, y no hay forma que podamos
reproducir esos movimientos perfectamente de manera consciente, aún con mucha práctica.
Así pues, Paul Ekman llevó a cabo una investigación llamada “El proyecto Wizards”,
posteriormente llamada Proyecto Diógenes. Consistía en determinar qué porcentaje de la
población era capaz de manera natural de determinar a simple vista si una persona está
mintiendo o no. Los llamados “Magos” que determinaban el estudio, eran aquellas personas
que podían ubicar mentiras con una efectividad mayor al 80% (presumiblemente por su
facilidad para detectar micro expresiones de manera natural), mientras que una persona
común y corriente no es mucho mejor que un aleatorio 50%. El estudio reveló que apenas el
0.0025% de la población tiene esta facultad, pues de 20.000 personas estudiadas, tan solo 50
cumplieron con el criterio. El estudio de las micro expresiones faciales ha probado su valía con
creces en campos tan dispares como la criminología, el Derecho, la Psicología, la Medicina,
reclutamiento de personal e incluso la animación de personajes 3D.
→ Los gestos abarcan todos los movimientos que hacemos con las manos, los brazos, los
hombros, la cabeza, las piernas, las caderas, la conducta táctil, los olores, etc.
1) Emblemas. Gestos que tienen una definición de diccionario por lo que no necesitan el
apoyo del lenguaje verbal. Cambian según las culturas.“Silencio”, “sí”, “no” “ok”,
“sucidio”
2) Ilustradores. Sirven para ilustrar lo que se dice verbalmente. Se producen con más
frecuencia en personas entusiasmadas y en situaciones difíciles de comunicación en las
que no se encuentran las palabras adecuadas.
3) Expresión facial. Se refiere a lo que decimos con la cara y en ella se centra el máximo
potencial expresivo de nuestro cuerpo.
4) Reguladores. Mantienen y regulan la naturaleza del hablar y escuchar entre dos o más
personas. A través de ellos podemos conceder el turno de palabra o indicar al hablante
que continúe, repita, etc. Los más usados son los movimientos de cabeza, la
orientación del cuerpo y el comportamiento visual. Son difíciles de inhibir y en
ocasiones están al límite de nuestra conciencia. Pero, en cambio, somos muy
conscientes cuando los utilizan otros.
5) Adaptadores. “Muletillas” del lenguaje no verbal. Deben evitarse porque distorsionan
la comunicación, pero, al ser inconscientes, precisan de un proceso de toma de
conciencia y posterior entrenamiento.
▪ Autoadaptadores. Referidos a la manipulación de nuestro propio cuerpo.
▪ Heteroadaptadores dirigidos a objetos.
▪ Heteroadaptadores dirigidos a sujetos.
En adición, los micro-picores son señales de lo que no decimos, así podemos descubrir cuándo
una persona nos está mintiendo o tiene algo que ocultar por los picores que tiene. El cerebro
se adelanta a nuestros deseos y manda más sangre a ciertas zonas de tu cuerpo que se dilatan
y provoca el picor. Los principales son los siguientes:
→ El factor cultural.
→ Evitar la subjetividad.
→ Interpretar los gestos no de manera aislada sino integralmente.
→ Las posturas son gestos derivados de la posición de los diferentes segmentos
corporales.
Las posturas más importantes son: de pie, sentado o tumbado. Cada uno de nosotros tiene un
repertorio peculiar de posturas que permiten que nos reconozcan determinadas personas a
distancia. Suele ser un dato clave que denota la personalidad y el carácter. Tienen también un
gran valor connotativo hasta tal punto que están reguladas en aquellos contextos fuertemente
ritualizados por la sociedad.
PROXÉMICA
Estudia el uso y percepción del espacio personal y los espacios interpersonales, así como la
influencia del espacio construido y su organización, distribución y ambientación. Hall
diferenció tres niveles:
a) Condiciones espaciales inmutables del entorno.
b) Disposición de los objetos móviles.
c) Distancia interpersonal de los comunicantes: íntima (hasta 50 cm), familiar-personal (de
0’50 cm a 1 m), social-comunicativa (de 1’5 m a 3’5 m) y pública (desde 3’5 m). En ello
influye la cultura (latinos/anglosajones), personalidad (introvertido/ extrovertido), la clase
social y situaciones determinadas.
PARALENGUAJE
Calidad de la voz. Fijadas por su edad, sexo y constitución (altura tonal, intensidad sonora,
volumen y timbre); así como las posibles variaciones que puede sufrir la voz de manera
transitoria. Manera de hablar. Depende de la continuidad del habla, acento, tempo, ritmo del
habla y continuidad.
Los niños a los 3 meses ya comienzan a intentar pronunciar palabras, pero cuando comienzan
a salir los dientes es cuando las pronuncian de forma más clara, lo cual ocurre al año,
coincidiendo con la época en la que empiezan a andar.
Lenneberg
1921-1975
Fue el primero que propuso que la capacidad humana del lenguaje sólo puede explicarse con
base en las propiedades biológicas del cerebro humano y del tracto vocal. Exploró la evidencia
de que la capacidad lingüística del ser humano es una forma especializada de una capacidad
cognitiva más general, y no un desarrollo de una vocalización animal o una comunicación no
vocal. Para Lenneberg si el lenguaje no se adquiere antes de llegar a la pubertad, difícilmente
se llegará a un comportamiento lingüístico normal. Si no se aprende el lenguaje antes de llegar
a la pubertad, no se sabe con seguridad si se podrá desarrollar.
Bickerton
→ Primera fase. “Protolenguaje” que emplea los símbolos como palabras pero sin
estructura, colocados de cualquier manera, sin reglas. Los primates, los delfines o los
loros son capaces de funcionar con este lenguaje. No es una imitación sin sentido, es
posible enseñarles un lenguaje simbólico, pero simple. Cualquier especie que tenga
una capacidad mental, que tenga un cerebro proporcionalmente grande puede
aprender este lenguaje. Pero, los humanos somos los únicos que lo hemos
desarrollado solos, sin instrucción alguna. Eso es lo que nos diferencia en esta primera
fase del resto de animales.
→ Segunda fase: Aquí se añade la estructura, la sintaxis, para que se convierta en una
lengua como la que tenemos. Y eso ocurrió porque empezó a operar encima del
'protolenguaje' un patrón de la frase que contenía un verbo que indica una acción o
estado o acontecimiento. Y los participantes de estas acciones, se necesitaban
expresar de algún modo. Si yo duermo, sólo estoy yo. Para romper algo, utilizo dos
elementos: el que rompe y lo que se rompe. Hay otra clase de verbo, el de acción, que
necesita tres participantes por lo menos: uno que da, el que recibe y la cosa dada. Así
que todos los verbos del mundo, en cualquier lengua, siguen alguna de estas pautas de
diferentes acciones en función del tipo de elementos a unir. De ese modo el lenguaje
tiene que seguir estructuras; el ‘protolenguaje’ no seguía ningún patrón. Igualmente,
podemos meter una frase dentro de otra: "Da este vaso al hombre que viste el otro
día". Y así, podemos hacer una gran frase, con otras pequeñas dentro. El
‘protolenguaje’ solo puede contar cosas cortas (3 o 4 palabras) puesto que no tiene
estructura. Cuando se impuso ese patrón encima del 'protolenguaje' apareció el
lenguaje que es casi como el que utilizamos ahora. Casi...(hace referencia a la tercera
fase).
→ Tercera fase: En cada lengua moderna hay muchas palabras sin sentido, las palabras
funcionales: artículos definidos, indefinidos, proposiciones, etc. Estos indican los tipos
de estructura de una frase y marcan las fronteras de la misma, dónde termina y dónde
comienza. Es como en una ruta de carretera que te encuentras señales: "A Oviedo, 25
km". Ésta es la tercera fase del lenguaje y no se pudieron descubrir formas
gramaticales hasta que apareció la estructura que estas palabras tenían que marcar.
Conectivo: elementos para unir oraciones.
Chomsky
Desarrolla la ‘teoría de la gramática universal’: la adquisición del lenguaje durante la infancia
puede ocurrir gracias a la capacidad que tenemos los seres humanos de reconocer y asimilar la
estructura básica del lenguaje, estructura que constituye la raíz esencial de cualquier idioma.
Por tanto, se decanta más por la idea de que el lenguaje es genético, innato, debido a nuestra
naturaleza, no porque nos lo enseñan.Chomsky afirma que los niños poseen la habilidad innata
para la comprensión de la gramática del lenguaje, habilidad que van desarrollando a través de
sus experiencias y aprendizajes. independientemente de su contexto familiar o cultural.
Tema 2. El lenguaje y las lenguas.
1. Delimitación conceptual.
El lenguaje es la capacidad que tenemos para hablar. La teoría dice que solo hay una lengua
materna, debido a que hay una que predomina más que otra. Aunque la realidad puede ser
diferente si se alcanza un nivel de bilingüismo total. El lenguaje verbal humano es una
capacidad común a todos los Seres Humanos que se concreta en cada una de las lenguas
particulares de las que se dotan las diferentes comunidades que pueblan el mundo.
Por tanto, la actividad lingüística nos aproxima a dos realidades suficientemente diferenciadas
entre sí, aunque también íntima y necesariamente interrelacionadas.
I. El lenguaje: Constituye una capacidad general y común que faculta el desarrollo de las
lenguas particulares. No difiere de un Ser Humano a otro y es, por lo tanto,
independiente del lugar, cultura o cualquier otro condicionamiento del Ser Humano en
el momento de su nacimiento.
II. Las lenguas: El lenguaje, justo desde el momento del nacimiento empieza a tomar
forma en y dentro de una lengua concreta, la materna, que es una concreción de la
misma. El niño desarrolla y ahorma el lenguaje a través de una lengua particular.
Ambas, lenguaje y lenguas nos obligan a diferenciar otros campos de estudio entre los que
existe una relación muy similar a la que se daba anteriormente:
X. Carácter discreto: los sonidos utilizados en una lengua son significativamente distintos,
estando establecida cada unidad y oponiéndose a las demás, es decir, las unidades se
oponen unas a otras. Es una propiedad exclusiva del lenguaje humano, pues en los
animales es difícil apreciar variación en los sonidos. Por otro lado, los códigos pueden
ser analógicos o discretos dependiendo del modo en el que codifiquen y transmitan la
información. En la información analógica, el significante expresa de modo continuo el
significado. Esta muy relacionada con la iconicidad. En la información discreta, el
significante expresa de modo no continuo el significado. Esta muy relacionada con la
arbitrariedad. Podemos poner como ejemplo la pronunciación de la palabra “pera”, en
la que se intensifica el sonido /r/ y se convierte en /r/, así que el resultado, “perra”, no
significa “pera de gran tamaño”, sino “perra”. Además, las lenguas verbales codifican
la información de ambos modos, aunque son esencialmente discretas.
XI. Doble articulación o dualidad: el lenguaje es una combinatoria sobre otra
combinatoria dado que funciona con dos estructuras simultáneas, una fonética y otra
gramatical. Es de nuevo otra propiedad exclusiva del lenguaje humano. La doble
articulación está muy ligada a la arbitrariedad, ya que la iconicidad restringe en gran
medida las posibilidades de articulación y combinación. En la oración “el perro ladra”
encontramos esencialmente códigos articulados. Las lenguas verbales están
doblemente articuladas, muestran dos niveles estructurales distintos: a) unidades
fónicas, sin significado; b) unidades de rango superior, con significado. Con un número
reducido de fonemas, las lenguas crean un número limitado d significantes, donde
pertenecen los fonemas, que son la segunda articulación. A cada uno de esos
significantes las lenguas le asignan un significado, aquí pertenecen los monemas, que
son la primera articulación.
XII. Creatividad o productividad: expresa la posibilidad de que el numero potencial de
emisiones en cualquier lenguaje humano es infinito. Las lenguas verbales son
esencialmente sistemas productivos, permiten al usuario producir e interpretar
mensajes nuevos ilimitadamente diferentes, siempre que estos respondan a las reglas
de una lengua. Existen tres tipos de productividad:
→ Productividad fonológica: en la que podemos crear una gran variedad de palabras con
el mismo sonido, como es el caso de los fonemas /m/, /t/, /m/, / a/, /e/, y /o/, a través
de los cuales creamos palabras como mama, mema, tema, toma, meto, meta, moto,
mesa, …
→ Productividad léxica, pues podemos crear diferentes palabras derivadas de otra, como:
desde la palabra militar encontramos militarismo, militarizar, antimilitarismo, pro-
militarismo, antimilitarista, pro-militarista, militarización, desmilitarización, …
→ Productividad sintáctica, ya que podemos crear diferentes estructuras gramaticales,
como: el perro ladra mucho, mi perro ladra mucho, el gato no duerme, la gata blanca
no come, el libro que vi es caro, compró la casa barata, Luis te vendió la casa, le gusto
lo que vio, ...
XIII. Cohesión: es la capacidad que tienen algunas lenguas naturales para interrelacionar ls
distintos elementos que las componen. Esto se ve claro en lenguas como el latín, el
griego o el árabe; son lenguas muy encasilladas. Todas las lenguas necesitan tener
cohesión. Es una propiedad característica del lenguaje humano.
XIV. Semanticidad: es la capacidad que tienen los signos para emitir significados. No es una
propiedad exclusiva, pues los animales emiten signos que tienen un significado para la
comunidad.
XV. Reflexividad: solo mediante el lenguaje humano podemos hablar sobre aspectos del
propio lenguaje. Es exclusiva, debido a que los animales no pueden hablar sobre el
propio lenguaje.
XVI. Argumentabilidad: el lenguaje verbal ha hecho posible el desarrollo del conocimiento
científico. Hacemos argumentos con el fin de que nuestro conocimiento sea
sustentado. Es una propiedad exclusiva.
XVII. Narratividad: las lenguas pueden recuperar enunciados ya dichos con anterioridad. Es
exclusiva, ya que los animales meten enunciados en el momento. Dentro de esta
propiedad encontramos el estilo directo e indirecto.
XVIII. Disimulación o prevaricación: mediante el lenguaje podemos generar secuencias falsas
o, en todo caso, no verificables. Es exclusiva, los animales no pueden mentir a través
del lenguaje.
XIX. Contextualidad: los mensajes lingüísticos son emitidos y recibidos en función del
entorno en el que se desarrolla la comunicación que condiciona de manera
determinante, o puede condicionar sus contenidos. Encontramos distintos registros
como el formal, coloquial, vulgar, etc. Es una propiedad exclusiva.
XX. Tradición: explica que la competencia lingüística es fruto de un proceso de aprendizaje
que ha tenido lugar dentro de una determinada comunidad. Por o tanto, tiene que
haber una comunidad para que se produzca aprendizaje.
XXI. Variabilidad: es una constante de todas las lenguas. Estas varían en:
→ El espacio
→ En la situación de comunicación
→ En la propia historia personal de un mismo sujeto
→ En el tiempo
Es una propiedad exclusiva. El elemento que cambia más rápido es el léxico, después la
fonética y después la gramática.
B. COMPARACIÓN TIPOLÓGICA
Estudia a qué tipo corresponden las características de una lengua:
Observaciones:
➢ No existen tipos puros. Las lenguas suelen mostrar características de distintos tipos.
No existen compartimentos estancos, por tanto, se dice que una lengua se ajusta más
o menos a un determinado tipo. (El español está en una zona intermedia entre flexiva
y fusionante)
➢ Las lenguas pasan, históricamente, de un tipo a otro. (El inglés era una lengua flexiva
que ha pasado a ser aislante).
3. DIVERSIDAD LINGÜÍSTICA
No existe acuerdo entre los especialistas sobre el número de lenguas que se hablan en el
mundo. Los atlas sobre lenguas del mundo ofrecen estimaciones que fluctúan entre las 5000 y
las 7000 lenguas. (2.895 lenguas en peligro de extinción 7.111 lenguas vivas)
DEFINICIONES DLE
Lengua
Dialecto
2. m. Ling. Sistema lingüístico considerado con relación al grupo de los varios derivados de un
tronco común. El español es uno de los dialectos nacidos del latín.
Habla
6. f. Ling. Sistema lingüístico de una comarca, localidad o colectividad, con rasgos propios
dentro de otro sistema más extenso.
Idiolecto
Con este panorama, la delimitación de las lenguas del mundo no parece, precisamente, nada
fácil.
5. CONTACTO LINGÜÍSTICO
5.1. BILINGÜISMO
Es el dominio de más de una lengua entendiendo que siempre habrá un dominio básico que es
el de la lengua materna. Se puede considerar que un hablante es bilingüe cuando se tiene la
más mínima pericia en una lengua no materna o cuando se tiene competencia lingüística
completa en las dos lenguas y en los dominios activo y pasivo tanto en la oralidad como en la
escritura.
I. Psicológica.
→ Compuesto. Si el hablante dispone de dos significantes, uno en cada lengua, para un
mismo significado.
→ Coordinado. Si, por el contrario, cada significante se asocia a un significado distinto.
II. Utilización de las lenguas.
→ Pasivo. Con hablantes capaces de comprender la segunda lengua, pero no de
actualizarla en el discurso.
→ Activo. Cuando disponen de ambas posibilidades.
III. Situación de las lenguas en la comunidad.
→ Horizontal. Con dos lenguas oficiales que comparten estatus cultural y funcional (el
francés y el inglés en Canadá).
→ Vertical. Conviven una lengua oficial y un dialecto relacionado con ella (el alemán y el
suizo-alemán en Suiza)
IV. Según el proceso de adquisición de las dos lenguas.
→ Natural. Propio de hablantes que se encuentran en contacto con dos lenguas antes del
inicio de su vida consciente.
→ Ambiental. Caso de las lenguas minoritarias en convivencia con las mayoritarias dentro
de un estado, con independencia de que la actitud del estado hacia la lengua
minoritaria sea favorable u hostil.
V. Desde la perspectiva de la sociedad bilingüe.
5.2. DIGLOSIA
Son lenguas reservadas para determinados usos sociales.
Se produce cuando conviven dos lenguas en un mismo territorio y una de ellas tiene estatus
como lengua de prestigio (lengua de cultura) mientras que la otra queda relegada para las
situaciones socialmente inferiores (familia, oralidad...).
Comunicación formal
• Español
• Árabe clásico
• Alemán estándar
Comunicación informal
• Guaraní (Paraguay)
• Árabe moderno (Países árabes)
• Alemán suizo (Suiza)
Ferguson (1959) fue quien acuño formalmente el término diglosia y nos ofrece el siguiente
esquema de rasgos diferenciadores:
Criollo haitiano (francés + lenguas africanas) Criollo mauriciano (francés + inglés + portugués)
Tema 3. La lingüística.
1. Introducción
El objetivo general de las ciencias es dar cuenta del objeto del que se ocupan, para ello deben
realizar diversas tareas:
A) Describir todos los fenómenos que son manifestaciones del objeto del que se ocupan.
B) Preparar los instrumentos y los procedimientos que les permiten afinar esas
descripciones.
C) Construir modelos explicativos de ese objeto.
D) Hacer historia de lo que ha sido su propia evolución disciplinar.
3. Intentar trasladar los resultados de su conocimiento para la resolución de problemas
concretos que les plantea la vida diaria.
Por otro lado, haciendo referencia a la discriminación de campos de trabajo, encontramos tres
apartados:
Una ciencia se ocupa de tres partes. A la vista de lo anterior, parece evidente que deberían
apuntar hacia esos tres apartados: teórico, descriptivo y aplicado.
Años 20/60
A partir de los años 60 la lingüística externa empieza a estudiarse como una lingüística de
pleno derecho con dos opciones principales:
Elabora modelos acerca de qué son el lenguaje y las lenguas, cómo funcionan y cómo se
conectan uno y otras.
Lenguas:
Lenguaje: Universales
Sin embargo, son una de las recientes incorporaciones de la lingüística dado que hasta la
segunda mitad del S. XIX no nacen los pilares de la actual investigación lingüística en Gran
Bretaña y Rusia. En Gran Bretaña Daniel Jones y Sweet a finales del S. XIX desarrollan e
implantan un alfabeto para transcribir los sonidos de una lengua, de manera independiente a
como sean escritos ortográficamente.
En Rusia la contribución fue más teórica que la anterior y la debemos a Badouin de Courtenay
y a su discípulo Karcewski que crean la Escuela de Kazan. A ellos debemos dos ideas:
Fonología
Fonética
La fonética se encarga del estudio de aquellos otros sonidos de la lengua que no provocan
diferencias en el significado de las palabras de tal manera que permanecen invariables cuando
hacemos una sustitución de pares mínimos.
Estos sonidos se llaman alófonos. El inventario de alófonos en una lengua es abierto, infinito
Su estudio se puede llevar a cabo desde dos perspectivas:
a. Fonética articulatoria: Se basa en la producción del sonido y desde ella repasamos qué
órganos intervienen en la producción de los sonidos.
b. Fonética acústica: Se centra en la percepción del sonido desde la que se estudia la
gravedad y difusión de los sonidos.
3. Posibles aplicaciones de los estudios de fonética y fonología.
a) Perturbaciones del lenguaje. No cabe la menor duda de que el logopeda debe poseer
un buen conocimiento de la fonética si pretende reeducar a los pacientes y conducirles
hacia una pronunciación inteligible y lo más próxima posible al estándar de su entorno
social. Asimismo, es importante en el campo de la medicina para el conocimiento de
muchas enfermedades donde está implicada el habla: síndrome depresivo, parkinson,
tumores cerebrales, accidentes, etc.
b) Enseñanza de segundas lenguas. El profesor que conoce bien la fonética logra
establecer comparaciones y ejercicios adecuados que ayudarán al alumno a reproducir
con mayor precisión el sonido de esas otras lenguas que no está en la suya propia.
c) Nuevas tecnologías. Está en estrecha conexión con el avance de la informática.
Pretendemos que los ordenadores hablen y entiendan (reconocimiento automático
del habla).
d) Campo forense. Se refiere a los peritajes lingüísticos para el reconocimiento de voces.
1. La evidencia empírica.
Es simplemente una evidencia empírica común para todo hablante el que la mayoría de las
palabras que utilizamos en la comunicación está sujeta a una cuota de variabilidad. Por
ejemplo, “casa” puede aparecer con la forma “casa”, “casas”, “casita”, “casucha”, “casona”,
“caserón” o, entre otras “caseta”. Cada una de esas formas añade un matiz particular de
significado y obedece a otras tantas intenciones comunicativas:
Esa variabilidad nos permite también, aunque de manera más excepcional, combinar dos
palabras para realizar una significación más compleja. Hablamos de “blanquiverde”,
“tractocamión”, “pelirrojo”, “decimotercero”, etc. para indicar otras tantas palabras en las que
como se ve han convergido dos palabras distintas.
Por tanto, las lenguas disponen de múltiples recursos para hacer variar sus palabras. Bien es
verdad, que parte del léxico de una lengua queda al margen de ello: en español, las
preposiciones y las conjunciones no varían como tampoco lo hacen algunas palabras
concretas. Tal es el caso de “crisis” permanente o invariable en singular y plural.
A pesar de ello no se trata más que de excepciones a un mecanismo general y constante en las
lenguas del que se ocupa una parte tan tradicional en lingüística como es la morfología.
2. Método de estudio
Para aproximarse a su estudio, desde principios de los años 20 del siglo XIX, la lingüística
norteamericana había establecido los llamados métodos de constituyentes inmediatos.
Hoy en día el método de estudio no ha variado demasiado. Utilizamos 3 criterios para delimitar
los morfemas que componen una palabra:
▪ “Niño”, “niña”, “niños”, “niñas”, “niñito”, etc. son variantes del lexema NIÑO.
Eso quiere decir que hay un concepto propio del lexema que podríamos definir
aproximadamente como “persona no adulta” y a partir de esa significación general
procedemos a especificar otras significaciones particulares: “niño” cuando es masculino,
“niña” cuando es femenino, “niños” y “niñas” cuando agregamos la idea de pluralidad en los
dos anteriores, etc.
3.2. Raíz.
Dentro de cada palabra, a su vez, existe una cierta organización jerárquica entre sus
componentes. Todas las palabras incluidas dentro de un mismo lexema tienen una forma
común que es lo que llamamos raíz. En el ejemplo anterior, niñ- sería la raíz del lexema NIÑO
Las raíces, por lo general, son invariables aunque puede ocurrir que tengan más de una forma.
El lexema español CANTAR engloba palabras como “canto”, “canté, “cantante” o “canción”. La
raíz de ese lexema no es solo cant- sino que también hay que incluir canc-, al menos en
algunos casos. Cuando esto sucede decimos que estamos ante dos alomorfos, es decir, ante
dos formas de una misma raíz.
3.3. Afijos.
Los elementos unidos a la raíz se conocen con el nombre de afijos. Hay varios tipos:
A través de ella, las lenguas también aseguran buena parte de los mecanismos de cohesión y,
por último, posibilita gran cuota de productividad ya que mediante mecanismo de
combinación de unidades más pequeñas se desarrolla la flexibilidad o productividad léxica.
Para Raffaele Simone las categorías gramaticales comportan una serie de opciones
complementarias (la selección de una de ellas excluye la posible aparición de las demás) y
homogéneas (todos los elementos que forman una categoría hacen referencia a la misma
noción).
2. Categoría persona.
La persona es una categoría presente en todas las lenguas.
3. Categoría número.
Mediante la categoría número las lenguas diferencian el concepto de UNO frente a MÁS DE
UNO (singular y plural).
Puntualizaciones:
I. Cada lengua organiza de manera particular sus nombres cuantificables.
II. La recategorización secundaria nos permite modificar la categorización número bajo
determinadas circunstancias comunicativas.
Crisis pertenecería a la categoría aislada, ya que mantiene la misma forma tanto en singular
como en plural.
4. Categoría género.
A partir del género los nombres se disponen en las clases indicadas normalmente con los
términos masculino, femenino y, en las lenguas que lo permiten, neutro. El género puede ser
explícito, cuando se proyecta sobre el conjunto morfémico de los elementos que forman
sintagma (español) o implícito cuando no se proyecta (inglés). Niño/a pertenecerían a la
categoría explícita, mientras que boy y girl no.
El género afecta también a la relación entre género y verbo. En árabe las segundas personas
verbales tienen una forma masculina y otra femenina (“anta akalta”, maculino/”anti akalti”,
femenino).
La distinción gramatical se basa, a grandes rasgos, en una distinción natural, aunque, es cierto,
que no siempre las palabras masculinas designan objetos “varón” y los femeninos objetos
“hembra”: la base natural no está necesariamente establecida por el sexo, sino que puede
estar ofrecida por otros parámetros y variar considerablemente de una lengua a otra.
5. Categoría caso.
5.1. Finalidad de la categoría caso.
a) Marcar algunas de las funciones gramaticales.
b) Señalar las relaciones de concordancia entre distintos componentes de una misma
frase.
c) Lenguas en las que la categoría caso tiene funciones más específicas:
− Griego clásico. El caso absolutivo aparece como sujeto del verbo intransitivo; cuando
el verbo es transitivo, su objeto está en absolutivo, mientras su sujeto está en ergativo,
lo que nos lleva a dos tipos de estructuras posibles:
Aunque para otros autores, en especial para el lingüista norteamericano Fillmore, el caso en
realidad sería la función sintáctica. Eso quiere decir que no hay caso porque tengamos marcas
morfológicas para señalarlo, sino porque existen determinadas funciones sintácticas en las
lenguas. En consecuencia, en todas las lenguas habrá un caso acusativo, ablativo, nominativo,
etc. Unas los marcarán mediante flexión morfológica (latín) mientras que otras lo harán por
otros procedimientos (español).
La acción verbal es una ubicación en el eje temporal que se aprecia en el tiempo; es un tipo de
proceso desarrollado, visible en el aspecto; muestra la posición del hablante respecto a la
acción verbal en sí a través del modo; y muestra la actitud hacia la manera de ver la acción
verbal mediante la diátesis.
6. Categoría tiempo.
El tiempo es una propiedad del verbo puesto que permite ubicar en una gama de puntos del
tiempo los acontecimientos.
a) el punto de la enunciación
b) el punto del acontecimiento
− Sistema “ideal” de tiempo:
a. Presente: punto de la enunciación = punto del acontecimiento.
b. Pasado: acontecimiento anterior al punto de la enunciación.
c. Futuro: acontecimiento posterior al punto de la enunciación.
• Ampliación de ese sistema “ideal”:
Dije que no volvería al cine hasta que pusiesen una buena película (futuro en el pasado) Sofía
irá a visitar a su abuela porque estuvo enferma (pasado en el futuro)
7. Categoría aspecto.
La categoría aspecto indica el tipo de proceso desarrollado, es decir, las diferentes
perspectivas (inicio, continuidad, reiteración, conclusión) desde las que se puede enfocar el
desarrollo de una acción, con independencia de lo que exprese la categoría tiempo.
En español, entre estos dos enunciados: “Juan duerme” y “Juan se duerme”existe una
diferencia de aspecto. El primero, “duerme” indica un proceso ya instaurado y dotado de una
determinada duración y, en el segundo, “se duerme” indica, sin embargo, el comienzo de ese
proceso.
Resultó como si nos estuviera criticando (durativo) todo el rato // resultó como si nos criticara
(imperfectivo)(todo el rato)
Todas las mañanas desayuno cafe y tostadas (aspecto frecuentativo) Esta mañana he vuelto a
desayunar tostadas y cafe (aspecto reiterativo)
El aspecto progresivo son las perífrasis verbales formadas por “estar” o “ir” + un verbo en
gerundio: se me está durmiendo la pierna, los niños van creciendo.
8. Categoría modo.
El modo expresa la posición del hablante respecto de la acción verbal en sí. Es una manera de
implicarse el hablante y de manifestar su posición acerca de lo que está diciendo a través del
verbo.
• Tipos de modo:
A. Indicativo: presenta el acontecimiento como verdadero (o falso), sin decir nada acerca
de la actitud del hablante frente a él.
B. Subjuntivo: introduce una marca acerca de la posición del hablante sobre la acción
verbal.
C. Interrogativo: se produce en enunciados donde el hablante quiere obtener un valor de
verdad.
D. Imperativo: se utiliza para expresar órdenes.
E. Condicional: sirve, como su nombre dice, para indicar una condición, es decir, el que
para que se lleve a cabo una acción se deba producir otra.
• Recursos formales para expresar modo:
Cada lengua tiene su propio mecanismo: en español utilizamos marcas morfológicas que nos
permiten alternar la flexión del verbo. En francés, sin embargo, se utilizan estructuras
sintácticas para cada modo verbal. Alemán e inglés ocupan un lugar aparte, al ser
prácticamente lenguas con un solo modo (el indicativo).
9. Categoría diátesis.
La diátesis indica la actitud hacia la manera de ver la acción verbal. Se usa desde la antigüedad
para indicar que el verbo puede presentarse en forma activa o pasiva. En español se obtiene
combinando el verbo principal con algunas formas del verbo “ser”:
Yo he cogido el libro
Entre activa y pasiva existe una relación sintáctica concreta, que consiste en que el sujeto del
predicado pasivo es correfere
Hay que añadir el significado del verbo, como por ejemplo la diferencia entre buscar y
encontrar// he quedado con Max, he quedado con Max a las cinco (el complemento marca
más la acción).
En “Jorge escribe una carta a su tía”, “Jorge” es el sujeto, “escribe” es el predicado y el resto
son complementos de diferente naturaleza que pueden ser omitidos sin que el enunciado
sufra como consecuencia de ello. Por tanto, un enunciado está completo cuando tiene sujeto y
predicado, elementos obligatorios en todo enunciado.
Así pues, Los lugares de sujeto y predicado pueden ser omitidos, o pueden estar ocupados por
elementos no nominales como, por ejemplo, pronombres. En el ejemplo anterior podemos
variar el sujeto “Jorge” de las siguientes maneras:
En el caso del predicado ocurre lo mismo, se puede omitir en un enunciado como el siguiente:
“Jorge escribe una carta a su tía y Carlos a su madre” (predicado de la segunda cláusula
sobreentendido).
Por ello, el sujeto y el predicado pueden desaparecer en la estructura superficial, pero son
imprescincibles en la estructura profunda porque están sobreentendidos.
Las funciones gramaticales se pueden cambiar de orden dentro del enunciado sin que pierdan
su función y siempre que la lengua lo permita: “La tía ha venido a verme” o “Ha venido a
verme la tía”
Los papeles desempeñados por las funciones gramaticales según la gramática tradicional son
los siguientes:
I. En “Luis ha sido atropellado por un coche”, “Luis” que definiríamos como sujeto, en
realidad no designa a quien cumple la acción sino, en todo caso, a la víctima de una
acción cumplida por otros. Pero podríamos argumentar que “Luis” efectivamente es el
sujeto porque es esa palabra con la que concuerda el verbo del enunciado.
II. Todo lo contrario, ocurre en frases como “llueve” (“It’s raining”, “es regnet”, “il pleut”)
dotadas de un sujeto pronominal (“it”, “es”, “il”) pero cuyo sujeto no indica quien hace
la acción, sino que son solo marcas formales, necesarias para que el verbo pueda
funcionar. Por eso, este tipo de enunciados se denominan normalmente impersonales.
III. Para solucionar este problema se presentó una teoría formalista. Para ella el análisis
del enunciado no se basa en quien realiza la acción sino en las propiedades formales
de las partes del discurso y de los sintagmas. Por ejemplo, se considera sujeto el
elemento lingüístico capaz de activar en el verbo morfemas de persona y de número.
IV. Pero esto cuenta con algunas dificultades porque hay lenguas (chino, japonés,
vietnamita) donde el sujeto no concuerda con el verbo. Por tanto, aunque ambas
perspectivas son presentadas por los lingüistas como opuestas, parece más adecuado
aprovechar las dos de manera combinada.
En definitiva: el lenguaje humano no es solo una forma o una función o un contenido sino que
es un engranaje complejo donde todos esos niveles se articulan y combinan.
2. Sujeto.
Tipos de enunciados:
“Al- talámid katabú al-dars” (“katabú”: 3a pers. Pl.) “Los estudiantes escriben la lección”
“Kataba al-talámid al-dars” (“kataba”: 3a pers. Sing.) “Escribe los estudiantes la lección”
g. Lenguas en las que se producen fenómenos de concordancia incongruente: “Kaì ho
állos stratòs apebáinon”: “Y todo el resto del ejército se fue”, se traduce literalmente
como “Y todo el otro ejército se fueron”
Como conclusión podemos decir que la noción de sujeto es débil, ya que no se puede
constatar unívocamente en todas las lenguas, sino solamente en algunas. Incluso es difícil
identificarlo en las lenguas indoeuropeas para las cuales la gramática clásica desarrolló esta
noción. El problema fundamental radica en que la tradición lingüística ha intentado identificar
sujeto lógico con sujeto gramatical, significado con la forma gramatical que adquiere una frase.
Sin embargo, las lenguas son mecanismos muy complejos para transmitir significado y, por
tanto, sería más lógico analizar la correspondencia (o no) entre realidad lógica y forma
lingüística e intentar explicarla.
3. Predicado.
La noción de predicado es relacional ya que el predicado no existe a no ser en relación con su
sujeto. El predicado siempre dice algo a propósito del sujeto.
La función de predicado es normalmente asumida por un verbo, pero también puede ser
asumida por un sintagma compuesto por cópula + nombre o cópula + adjetivo: “Ramón está
preparado”, “Luis es médico”. Decimos que son verbos copulativos porque suman el
significado de sujeto y predicado.
Hay algunos casos en los que el verbo del predicado puede estar sobreentendido “Bonita, esta
casa” porque el contexto da a sobreentender el contenido del verbo.
4. Complemento directo.
El complemento u objeto directo se define como la persona o la cosa sobre la que recae la
acción que indica el verbo. Por tanto, está asociado a la de verbo transitivo ya que los verbos
transitivos se definen precisamente por la posibilidad de tener un complemento. En las
lenguas flexivas el C.D. va marcado por un caso concreto, el acusativo. En las lenguas no
flexivas el C.D. va marcado por preposiciones características (“a” en español).
Hay casos en los que el C.D. puede ser neutralizado mediante el uso de pronombres que
marcan en género y en número la carga semántica del verbo: “Quiero comerme una manzana”
> “Quiero comérmela”
El C.D. también es un claro ejemplo de que los mecanismos formales de las reglas gramaticales
son independientes de los niveles semánticos. Ello se ve claramente en la voz pasiva mediante
la que asistimos a la conversión de una estructura gramatical con C.D. modificando
formalmente los elementos adscritos a la función de sujeto e incorporando el llamado sujeto
agente. De ese modo: “Max compra un coche rojo” se convierte en “Un coche rojo es
comprado por Max”
Formalmente hemos asistido a la modificación de las funciones gramaticales, sin embargo, el
contenido semántico de la frase es exactamente el mismo.
5. Otros complementos.
Es evidente que en algunos enunciados se establece una relación directa entre el sujeto, el
verbo y el receptor de la acción, lo que conocemos como Complemento Indirecto: “Max
compra flores para María”. El C.I. puntualiza y selecciona el destinatario concreto de la acción.
Lo mismo puede decirse del resto de complementos que constituyen otras tantas precisiones
de la carga semántica de una frase.
En “La casa está situada en una buena zona” lo que discrimina el sentido último de la misma
es, precisamente, su Complemento Circunstancial.
Por tanto, lo que interesa destacar es que la transmisión de significado es un proceso complejo
y, como tal, precisa de un número variable de elementos para realizarlos de la manera más
óptima. El que sujeto y predicado sean constantes en todo enunciado no equivale a que
siempre sean suficientes. En ese sentido, los complementos son en apariencia prescindibles,
pero en el fondo necesarios para expresar hasta sus últimas consecuencias los contenidos de
lo que realmente queremos transmitir.
Tema 8. El léxico.
1. Introducción.
El léxico es el conjunto de significantes verbales que, a su vez, sirven para componer otras
proposiciones y textos.
Durante mucho tiempo el estudio del significado aportado por las palabras fue identificado
casi en exclusiva con la semántica, pero hoy sabemos que el estudio del significado no se ciñe
exclusivamente al estudio de la palabra puesto que hay unidades menores y mayores que
también aportan significado:
Por ejemplo, la sustancia fónica está cargada de marcar diferentes situaciones de pluralidad, la
selección de morfemas en las lenguas flexivas, la entonación, los gestos, la situación
pragmática en la que se intercambia un enunciado, los preestablecidos entre los
interlocutores, la ironía, etc., son elementos tan decisivos que pueden modificar radicalmente
el mensaje.
El siguiente ejemplo está tomado de Coseriu para el campo semántico del “asiento” en
francés. Dados los semas siguientes:
Obtendríamos los siguientes conjuntos de sememas para las cinco palabras incluidas por
Coseriu en este campo:
Los campos semánticos han tenido una aplicabilidad reducidísima y han sido más los intentos
fracasados que los coronados con un éxito tan discutible como el que se desprende del cuadro
que estamos comentando.
Por ello, en la actualidad, el método del campo semántico no goza de demasiado prestigio
entre los especialistas a pesar de reconocer que, en su tiempo, aportó un avance considerable
a la lexicología.
El problema principal radica en que cuestionar los campos semánticos equivale poco menos
que a hacerlo sobre la lexicología en su conjunto.
3. Lexicografía.
Bastante más definido está el dominio destinado a la lexicografía que se encarga de la
elaboración de diccionarios. Es decir, de introducir las palabras en un diccionario y establecer
los criterios más adecuados para definirlas.
4. Léxico-estadística.
RECURSOS PARA MEDIR EL LÉXICO:
I. Arcaísmos, palabras anticuadas, las que se usaron en alguna época pero que ya han
caído en el olvido: empulgar ‘armar la ballesta’ enaciyar ‘tratar las lanas con aceite,
acije o aceite de vitriolo’
II. Regionalismos, palabras que solo se conocen en alguna zona o país del mundo
hispánico: empuntar enancarse enamorada ‘encarrilar, encaminar, dirigir’ en
Colombia, Ecuador y El Salvador. ‘meterse uno donde no lo llaman’ en algunas zonas
americanas. ‘ramera, mujer de mala vida’ en algunas zonas españolas.
III. Tecnicismos, palabras científicas manejadas solo o principalmente por especialistas:
emunción ‘evacuación de los humores y materias supérfluas y nocivas’ enálage ‘figura
que consiste en mudar las partes de la oración o sus accidentes; como cuando se pone
un tiempo del verbo por otro, etc.’
IV. Cultismos, palabras empleadas muy ocasionalmente por hablantes de gran cultura y
de amplio dominio léxico: enajenar ‘pasar o transmitir a otro el dominio de una cosa o
algún derecho sobre ella’ enalbar ‘caldear y encender el hierro de la fragua tanto que
parezca blanco de puro resplandeciente’
Listas de frecuencia:
Muestran los vocablos que se utilizan en una determinada comunidad de habla en función de
su número de apariciones.
A. Léxico Básico:
• Literatura dramática.
• Narrativa.
• Ensayística.
• Literatura técnica y científica.
• Periodismo.
B. Léxico Disponible:
Surgió de la revisión crítica de los métodos anteriores
− El cuerpo humano
• La ropa
• Partes de la casa
• Los muebles de la casa
• Comidas y bebidas
• Objetos colocados en la mesa para la comida
• La cocina y sus utensilios
• La escuela (muebles y materiales)
• Calefacción, iluminación y medios de airear un recinto
• La ciudad
• El campo
• Medios de transporte
• Trabajos del campo y del jardín
• Los animales
• Juegos y distracciones
• Profesiones y oficios
• Los colores
• La mar
El índice de disponibilidad léxica se obtiene ponderando la frecuencia con el lugar que ocupa
cada palabra en los listados obtenidos.
En resumen, los modernos métodos de la lingüística tienen hoy dos maneras de examinar
estadísticamente el vocabulario existente en una comunidad de habla. Por un lado el estudio
del léxico básico y por otro, el del léxico disponible. Las palabras usadas normalmente en
cualquier contexto comunicativo se recogen en el léxico básico; aquellas que solo se usan si
hablamos de un tema determinado (cuerpo humano, correo, etc.) aparecen en el léxico
disponible. La suma de ambos es lo que se llama el léxico fundamental de una lengua y,
ambos, nos dan el verdadero perfil léxico de la comunidad lingüística.
Tema 9. El texto.
1. Introducción.
La ciencia del texto, desde sus páginas fundacionales elaboradas por Van Dijk se propone
aportar un modelo explicativo de la vida social desde el conocimiento del funcionamiento de la
realidad lingüística. Ello presupone varias cosas:
A. Concebir que la comunicación es el eje vertebrador de la vida social y su mejor puerta
explicativa.
B. Optar por una concepción dinámica del lenguaje de manera que texto y contexto se
presupongan mutuamente. No solo nada de la comunicación humana es explicable
fuera del contexto, sino que este tiene en el lenguaje una de sus grandes claves
explicativas.
C. La necesidad de reinterpretar la tradición lingüística, amoldándola a la nueva
perspectiva abierta.
El discurso, al igual que la actuación, resulta ser la transcripción externa del texto. Ese es un
camino, el que vincula texto y discurso, que los individuos realizamos en una u otra dirección,
según ejerzamos como hablantes o como oyente. En el primer caso vamos del texto al
discurso, de nuestra actividad psíquica (texto) al resultado de ella (discurso). Como oyentes, la
dirección es la inversa.
2. Lingüística textual.
Lily, the caretaker’s daughter, was literally run off her feet. Hardly had she brought one
gentleman into the little pantry behind the office on the ground floor and helped him off with
his overcoat, that the weezy hall-door bell clanged again and she had to scamper along the
bare hallway to let in another guest. It was well for her she had not to attend to the ladies also.
–her----------Lily
–she----------Lily
–her----------Lily –she----------Lily
Lily, la hija del encargado, tenía los pies literalmente muertos. [0] No había todavía acabado de
hacer pasar a un invitado al cuarto de desahogo, detrás de la oficina de la planta baja, para
ayudarlo a quitarse el abrigo, cuando de nuevo sonaba la quejumbrosa campana de la puerta y
[0] tenía que echar a correr por el zaguán vacío para dejar entrar a otro. Era un alivio [0] no
tener que atender también a las invitadas.
• La lingüística textual parte de la hipótesis de que el texto está compuesto por frases,
pero no se puede reducir a frases, es decir, que tiene una estructura propia peculiar.
De hecho la palabra “texto” proviene del latín textus, “entrelazado”.
• Desde esta perspectiva existen textos de diferentes tipos: un libro científico, una
novela, un cuento, una conversación entre personas, etc.
• La lingüística, prácticamente a lo largo de su historia ha aplicado sus métodos de
análisis exclusivamente a frases y, únicamente en los años setenta se ha alcanzado una
clara conciencia de la necesidad de integrar el estudio de las frases en el de
enunciados de nivel superior.
2.1. Cohesión.
Asegura la conexión entre las diferentes partes del texto. Cualquier elemento que sirva para
asegurar esta cohesión se denomina cohesivo
2.1.1. Cadenas.
• Son una serie sucesiva de elementos que cohesionan un texto. Sabemos que las
lenguas están constituidas de manera lineal. Eso quiere decir que podemos establecer
una sucesión de elementos desde el primero que aparece hasta el último. Hay unos
elementos que en el texto se presentan antes y otros que van después. Todos los
elementos formarían una especie de línea imaginaria. Basándonos en esa línea,
establecemos dos grandes tipos de elementos cohesivos:
I. Anafóricos. Serían aquellos cohesivos que tienen un referente que los precede
II. Catafóricos. Tendrían un cohesivo que va más adelante que ellos en la linealidad de la
actividad lingüística.
[0] Estaba esperando un tren que nunca llegaba. El reloj de la estación parecía más lento que
de costumbre.[0] Pensó en cuántas veces [0] había escuchado el paso de los minutos que
señalaba aquella máquina en aquel mismo lugar. Era una manera de ocupar su mente que a él
le resultaba necesaria en aquellos momentos. Sonó a lo lejos el ruido de la locomotora y a
Max, de repente, se le encendieron todas las luces de la noche para ir camino de casa.
Una secuencia de cohesivos que tenga el mismo referente se denomina cadena. Si la cadena
está constituida por cohesivos anafóricos se trata de cadena anafórica. En el caso contrario,
será una cadena catafórica.
Arturo Hernández tenía ya diez años y [0] seguía tan lento que [0] no era capaz de coger ni una
pelota. Siempre le tocaba sujetar para los demás la cuerda, que desde la rama más baja del
árbol se prolongaba hasta su mano levantada. [0]. La sujetaba tan bien como el propio árbol,
sin bajar el brazo lo más mínimo hasta que terminaba el juego. No había en Almería ni en toda
España otro chico más capacitado a la hora de sujetar la cuerda. Desde la ventana del
ayuntamiento, el escribiente observaba: su gesto era de aprobación.
No [= no he visto a nadie]
CONECTIVOS:
A Amy le había caído inmediatamente simpático Munro y este sentimiento era correspondido.
En vez de acariciarle la cabeza y de tratarla como a una niña, como hacían casi todos, Munro la
trataba instintivamente como a una mujer. También hay que decir que había visto suficientes
gorilas como para conocer su manera de comportarse. Aunque no sabía el lenguaje de los
signos, cuando Amy levantaba los brazos entendía que tenía ganas de que le hiciera cosquillas,
y la contentaba, con ella revolcándose entre gruñidos de alegría.
Te he visto llegar y entonces he pensado que teníamos una cita, he puesto gasolina y después
he salido.
“ya....ya”
“sí.....sí”
“claro”
“me escuchas”
“me entiendes”
“Hemos visitado uno de los monumentos más interesantes de España, [o sea] El Escorial”
I. Por REPETICIONES:
▪ COPIA, constituyentes con la misma forma.
Elliot conocía a Amy desde la infancia. Estaba muy orgulloso de su capacidad de prever sus
reacciones, pero la había conocido solamente en el ambiente de un laboratorio; por eso, ahora
que Elliot tenía que afrontar situaciones nuevas, su comportamiento le sorprendió.
RELACIONES ENTRE CLÁUSULAS. Los enunciados pueden estar constituidos por una o más
cláusulas relacionadas entre sí. Si las cláusulas son más de una, entre ellas se establecen
relaciones. Es la distinción entre cláusulas coordinadas y subordinadas.
¿Por qué las lenguas tienen cohesión? La razón parece residir no en la naturaleza de las
mismas sino en la del usuario lingüístico en cuanto elaborador de información: los usuarios
estamos dotados de limitada capacidad de contener en la memoria el material textual con el
fin de elaborarlo. Una sucesión de enunciados que no tuviera “lazos” cohesivos internos sería
fácilmente fraccionada en partes separadas y éstas podrían ser ubicadas en direcciones de
memoria diferente.
Para no correr estos riesgos, el texto necesita disponer de un sistema de señalización que haga
patente su continuidad, que garantice, por lo tanto, al emisor y al receptor que el enunciado
que están elaborando es siempre el mismo y que habla siempre de lo mismo. Cuando la red de
cohesivos se interrumpe, podemos suponer que se está cambiando de tema.
Pero, sin embargo, los sistemas de cohesión son también redundantes porque su aplicación
conduce a una continua repetición de la misma información. Desde un punto de vista
puramente teórico, las lenguas podrían utilizar una cantidad incluso mucho menor de tipos de
cohesión.
Así nos vendrían la siguientes preguntas a la cabeza: ¿por qué se eliminan unos elementos y
otros sobreviven?, ¿cuáles son los límites de la comprensión de la información?, ¿hasta dónde
se pueden eliminar partes de enunciado sin destruir información?, etc.
“Le he llevado el libro a tu hermano y le he pedido que lo devuelva pronto”: “llevado libro tu
hermano y pedido lo devuelva pronto”.
2.4. Coherencia.
Con el término coherencia se indica lo que, de manera genérica, pretendemos decir cuando
afirmamos que “habla de las mismas cosas” (o “de lo mismo”), es decir, el hecho de que tenga
una determinada estabilidad o continuidad de significado.
Un texto es coherente cuando, al recibirlo, somos capaces de activar (es decir, de apelar a la
memoria e introducir conocimientos) un conjunto compacto de conocimientos ya
almacenados y compartidos, o sea, una parte de nuestra enciclopedia que consideramos
pertinente en la ocasión particular.
I. El viento y las consiguientes marejadas dieron ayer un poco de respiro a algunas de las.
playas de Huelva asediadas por las algas. El problema sigue siendo, sin embargo,
grave: las visitas de los turistas disminuyen. Los que no se preocupan son los turistas
escandinavos: menos de cien las reservas anuladas.
II. El 16 de julio de 1969 el cohete Apolo 11 despegó de Cabo Kennedy para su primera
expedición a la Luna. El show de Pink Floyd atrajo de todas partes a doscientos mil
jóvenes. Un árabe de sesenta años fue apuñalado mortalmente por un grupo de
palestinos enmascarados que habían penetrado en su casa. (No es coherente, son 3
textos diferentes.
Frame.
Marvin Minsky habló de frame para dar cuenta de los fenómenos de coherencia.
Propone que cada uno de nosotros tenemos en nuestra mente un frame relativo a
bloques temáticos concretos a los que van asociados determinados recuerdos de
distintos problemas e intereses que conciernen a la situación.
Los frames nos permiten decir cosas con pocas palabras puesto que el receptor
dispone de frames parecidos a los del emisor.
Por tanto, frente al conocimiento cultural compartido (enciclopédico, colectivo) se
encuentra el frame (individual) que se trata de un conocimiento de la experiencia
particular acumulada.
María fue invitada al cumpleaños de Pedro. Se preguntó si le habría gustado una cometa...
Ej:
Elipsis de sujeto: se omite varias veces en el texto el sujeto, que es Max. “La sacó”, “la
preparó”, “se subió”, “no consiguió”, “trató”, “devolvió”, “se sentó” y “abrió”.
De hecho, contamos siempre con la posibilidad de que haya una cierta separación entre lo que
se dice (entre los significados literales de las palabras que se pronuncian) y lo que se quiere
decir (la intención comunicativa subyacente).
Por eso hablamos con absoluta naturalidad de leer entre líneas, de la diferencia entre el
espíritu y la letra de un texto; o decimos cosas como cuando dije aquello, lo que quería decir
en realidad era...
Tratando de darle forma científica podemos definir la pragmática como “el estudio de los
principios que regulan el uso del lenguaje en la comunicación”; es decir, las condiciones que
determinan el empleo de enunciados concretos emitidos por hablantes concretos en
situaciones comunicativas concretas, y su interpretación por parte de los destinatarios.
Es una forma cortés para aludir a que no será seleccionado. ¿En función de qué? Del
conocimiento del mundo de dicho receptor (entonación, información no verbal transmitida
por el emisor, etc.)
Las fórmulas de saludo y despedida también son de interés en la pragmática. Pueden ser
formales e informales
Existen lenguas con orden de palabras en la frase relativamente libre, mientras que otras
lenguas lo tienen más bien fijo.
Así se establece la siguiente correlación: cuanto mejor caracterizadas estén desde el punto de
vista morfológico las relaciones sintácticas, menos necesidad habrá de marcarlas con el orden
de palabras.
Así, por ejemplo, se dice que el latín era una lengua con orden de palabras libre porque las
desinencias de caso y de concordancia marcaban suficientemente las relaciones gramaticales,
así como el polaco o el húngaro. El inglés suele citarse en el caso contrario, como prototipo de
lengua con un orden de palabras relativamente fijo.
En el español, hay oraciones que son correctas de forma gramática en cuanto al orden, pero no
de forma pragmática.
Sin embargo, solo podemos hablar de orden de palabras libre si se adopta una perspectiva
formal. Efectivamente, en español no hay ninguna regla sintáctica que impida variar el orden
en las oraciones pero el empleo de cada una de las variantes está estrictamente condicionado.
Por tanto, no se puede decir que en lenguas cuyo orden de palabras no viene fijado de manera
estricta por la sintaxis todas las variantes posibles son absolutamente equivalente en todos los
contextos y situaciones.
En resumen, si contemplamos los hechos desde un punto de vista general, resulta evidente
que incluso algunos aspectos típicamente gramaticales, como el orden de palabras, están
determinados por factores de tipo contextual o situacional.
Ejs.: “Si no cierras la puerta, Kiko se escapará” “Te espero mañana donde siempre”
Resulta evidente que solo desde una perspectiva pragmática se podrá tener acceso al tipo de
información necesaria para lograr este objetivo.
I. Ostensión.
II. Inferencia.
Ostensión.
Los hablantes entendemos la información como ostensiva. No es lo mismo emitir un
enunciado queriendo que sin querer.
“En Madrid un joven se sube a un vagón de tren con rumbo a San Sebastián, una chica muy
guapa se sienta en frente de él, el chico le guiña un ojo a la chica, pero justo cuando lo está
haciendo se da cuenta de que la chica está acompañada de su novio. El chico tuvo que ir
guiñando un ojo hasta San Sebastián”
Inferencia
Obtención de información nueva a partir de una información disponible. Ej: “Esta habitación es
un horno”. Hay conocimiento previo de que en la habitación hace mucho calor.
Podría ser definido como una “transmisión completa de información entre un emisor y un
receptor que están interactuando lingüísticamente”.
Cualquier faceta de nuestra vida como hablantes y, más aún, como sujetos sociales, está
soportada en el desarrollo de un determinado acto de habla (pedir un desayuno en la barra de
una cafetería, sacar un billete de tren, comentar los resultados del fútbol con los amigos, dar
una clase, etc.)
• Un acto locutivo (el acto físico de emitir el enunciado, como decir, pronunciar, etc.). Este
acto es, en sí mismo, una actividad compleja, que comprende, a su vez, tres tipos de actos
diferentes:
o Acto fónico: el acto de emitir ciertos sonidos (fonética).
o Acto fático: el acto de emitir palabras en una secuencia gramatical estructurada
(sintaxis)
o Acto rético: el acto de emitir las secuencias gramaticales con un sentido determinado
(semántica).
• Un acto ilocutivo o intención (la realización de una función comunicativa, como afirmar,
prometer, etc.)
• Un acto perlocutivo o efecto (la (re)acción que provoca dicha emisión en el interlocutor,
como convencer, interesar, calmar, etc.)
De este modo, al emitir un enunciado como [te prometo que lo haré] estamos, por un lado,
diciendo algo (acto locutivo); prometiendo una acción (acto ilocutivo) y provocando un efecto
(convencer de la promesa al interlocutor).
Según esta teoría, los enunciados sirven no sólo para expresar proposiciones con las que
describir, constatar, en suma, decir algo, sino también para realizar acciones lingüísticas muy
diversas en contexto, por ejemplo, dar una orden o hacer una promesa.
La realización de tales actos está sujeta a un conjunto de reglas convencionales, cuya
infracción afectará directamente a los efectos comunicativos del acto, por tanto, debe ser
respetada por todos los participantes de la comunicación.
Searle propuso una tipología de dichas condiciones; éstas se refieren a las circunstancias y al
papel de los participantes del acto de habla, a sus intenciones así como a los efectos que
pretenden provocar. Son las llamadas condiciones de felicidad:
Ej.: Para prometer algo a alguien, hay que ser sincero, dirigirse a un destinatario interesado en
la realización de esta promesa, no prometer algo imposible de cumplir o cuyo cumplimiento,
por el contrario, resulta evidente, etc.
I. Los actos de habla asertivos dicen algo acerca de la realidad: [el teatro estaba lleno].
II. Los directivos pretenden influir en la conducta del interlocutor: [no te olvides de cerrar con
llave].
III. Los compromisivos condicionan la ulterior conducta del hablante: [si tengo tiempo pasaré
a saludarte].
IV. Los expresivos, en los que el hablante manifiesta sus sentimientos o sus actitudes: [lo
siento mucho, no quería molestarle].
V. Los declarativos modifican la realidad [queda rescindido este contrato].
Pero las lenguas son códigos compartidos por una comunidad y, al mismo tiempo, sujeto a
determinadas convenciones de obligado cumplimiento para todo hablante. En ese sentido,
decimos que a través de un individuo habla la tradición y el resto de la comunidad y que, por
tanto, en cierta medida, puede plantearse una relativa multivocidad.
Este tardío estudio se debe a las “serias dificultades” que se derivan de su estudio:
I. En general, muchos aspectos de las lenguas son difíciles de observar y hay que
acostumbrarse a ver “lo inobservable”. Esta máxima que es válida para toda la
lingüística, lo es aún más para la semántica: ¿Cómo podemos remontarnos al
significado partiendo del significante?, ¿quién de nosotros puede decir que ha visto el
significado de un enunciado?
II. El trabajo de descripción se hace interminable a causa de la inmensa masa de material
que habría que examinar ya que prácticamente todo en las lenguas es portador de
significado.
A. SIGNIFICADO LÉXICO: Dedicado al estudio del significado de los morfemas léxicos, es decir,
los matices de significado que aportan los afijos y el significado que aportan los radicales
de las palabras.
Existen dos tipos de categorías (Escandell, 2014): Categorías léxicas (sustantivos, verbos o
adjetivos). Categorías gramaticales (determinantes, cuantificadores o conjunciones).
I. Las categorías léxicas forman clases abiertas (es posible incorporar miembros nuevos
con cierta facilidad) mientras que las categorías gramaticales forman clases cerradas
(los cambios son muy infrecuentes y fruto de largos procesos históricos).
II. Las categorías léxicas poseen contenido descriptivo (que conecta con nuestro
conocimiento enciclopédico general sobre el mundo), mientras que las categorías
gramaticales carecen de él (ofrecen solo información lingüística, de naturaleza
gramatical).
B. SIGNIFICADO ESTRUCTURAL: Encargado de observar el significado del conjunto de una
frase. En lugar de pensar en las palabras como contenedores de significado, podemos
mirar los “papeles” que cumplen dentro de una oración. Por tanto, el significado
estructural analiza las estructuras que están preparadas para ser rellenadas por un
conjunto de morfemas léxicos.
La relación entre las cosas y la imagen mental es natural mientras que la relación cosas imagen
mental con las palabras fónicas es arbitraria.
Esta orientación teórica se denomina referencialista puesto que se basa en la idea de que el
mundo está reflejado casi fotográficamente en el léxico de una lengua y que todas las lenguas,
pese a las diferencias fónicas existentes entre unas y otras expresan los mismos significados.
Observaciones:
Además, para Saussure, los significados están dentro de una concepción global del mundo y
pueden variar también en el tiempo.
3.2. Sentido/significado.
El sentido es el conjunto de asociaciones personales e irrepetibles que se unen intensamente a
los enunciados y que tienen su razón de ser en la experiencia individual del emisor y del
receptor.
Pero todo enunciado tiene, además, un significado puesto que dice cosas que son iguales para
todos los que comparten el código que se está usando.
3.3. Denotación/connotación.
La denotación es el significado primario de las palabras. La connotación es ese mismo
significado trasladado a otra palabra.
Así, palabras que a primera vista parecen sinónimas porque tienen la misma denotación,
pueden ser muy diferentes por su connotación. Este fenómeno complica la traducción de una
lengua a otra, e incluso puede haber palabras intraducibles.
4. Análisis componencial.
¿Cómo nos ayuda un enfoque semántico a entender la naturaleza del lenguaje? Para explicarlo
empezaremos por analizar las siguientes oraciones:
De acuerdo con las reglas sintácticas básicas para formar oraciones en español, están bien
estructuradas:
La hamburguesa comió un hombre SN SV SN. Desde el punto de vista sintáctico, esta oración
es perfecta, pero semánticamente es rara. Si tenemos en cuenta que la oración:
La respuesta está relacionada con los componentes del significado conceptual del nombre
“hamburguesa” que difieren de forma significativa de los del nombre “hombre”,
especialmente cuando estos nombres se utilizan como sujetos del verbo “comer”. Los tipos de
nombres que pueden ser sujetos de este verbo denotan entidades que sean capaces de
“comer”.
Podemos hacer esta observación más general intentando determinar el componente crucial
del significado que un nombre ha de tener para que pueda ser utilizado como sujeto del verbo
“comer”.
Este componente puede ser tan general como “ser animado”. Podemos tomar este
componente y utilizarlo para describir parte del significado de las palabras como un rasgo
positivo (+) o negativo (-). Así, el rasgo resulta ser +animado (=denota un ser animado) o
inanimado (=no denota un ser animado).
A partir de un análisis componencial como éste, podemos decir que, por lo menos, una parte
del significado básico de la palabra “niño” en español consta de los componentes (+humano,
+macho, -adulto)
También podemos caracterizar el rasgo que un nombre ha de tener forzosamente para ser el
sujeto de un verbo añadiendo rasgos semánticos al análisis sintáctico:
Por tanto, este enfoque nos da la posibilidad de predecir qué nombres harían esta oración
semánticamente inaceptable. Algunos ejemplos serían “mesa”, “árbol”, o “perro”, ya que
todos ellos tienen el rasgo (-humano).
Otros ejemplos:
10.‘*The pelican read the newspaper’ es anómalo pues el verbo exige un sujeto humano.
Desventajas:
Este planteamiento también tiene algunos problemas. Para muchas palabras de una lengua
puede que no sea tan fácil extraer nítidamente los componentes de su significado. Si
intentásemos pensar en qué componentes o rasgos utilizaríamos para distinguir los nombres
“consejo”, “amenaza” y “advertencia”, por ejemplos, comprobaremos el alcance de la
dificultad. Son conceptos abstractos.
2. Lenguaje infantil.
2.1. Teorías acerca del proceso de aprendizaje del lenguaje en el niño.
I. Vigotsky: de la socialización a la individualización. El Niño toma el lenguaje del exterior
y lo imita, tanto el lenguaje verbal como el no verbal.
II. Piaget: de la individualización a la socialización. El lenguaje es propio del niño y más
tarde lo socializa. El lenguaje infantil es egoísta, no tiene en cuenta al receptor. Es
opuesto al lenguaje adulto.
III. Lacan: primero se interiorizan y se desarrollan los significantes y posteriormente los
significados.
El feto experimenta una gran cantidad de sensaciones e el útero, a partir de las 25 semanas
escucha el sonido del latido del corazón de la madre, su voz o los sonidos del exterior. Llega un
punto en el que también reconoce la voz de su padre.
Los bebes están acostumbrados al lenguaje. Distinguen los sonidos del habla. Los estudios
muestran que los bebes empiezan a aprender las propiedades del lenguaje en el útero, y que
prefieren el tono de sus padres. Incluso a cierta edad saben que las expresiones se muestran
con la voz y la cara. Los ojos son muy importantes en la comunicación humana.
A los 6 meses los bebes son oyentes universales, por ejemplo, son capaces de distinguir entre
dos sonidos imperceptibles para personas que no hablen ese idioma. Nutre los 9 y 10 meses si
se exponen a un segundo lenguaje pueden distinguir los sonidos del idioma que han estado
escuchando. Señalar es un gran paso menta para el bebe, es un signo de comunicación. Para
aprender nuevas palabras el bebe tiene que fijarse en el dedo señalando. La clave para
aprender un idioma es la repetición y la imitación.
• Holofrases
• Aislamiento de palabras concretas
• Generalización (el niño puede llamar “perro” a cualquier animal con cuatro patas).
Segunda secuencia:
Usos metafóricos.
2.4.2. Halliday:
El niño necesita elementos lingüísticos cada vez más complejos para hacer frente a las
necesidades sociales.
3. Bilingüismo.
3.1. Bilingüismo compuesto:
Un concepto común para las dos Lenguas con dos formas lingüísticas (una para cada lengua).
4. Patologías lingüísticas.
Alteraciones de la capacidad para desarrollar los procesos de producción, comprensión y
almacenamiento de la actividad lingüística. Como por ejemplo la dislexia, el tartamudeo, el
balbuceo, etc.
I. Espacial: Las lenguas cambian según las zonas geográficas en que se hablen.
II. Cronológica: Se reflejan los cambios acaecidos en el seno de una lengua a través del
tiempo.
III. Social: Exponente de las diferencias de uso lingüístico en función de los diversos grupos
sociales que integran una sociedad.
IV. Estilística o sociofuncional: Recoge las variaciones lingüísticas ocasionadas por la necesidad
de los hablantes de acomodarse a diferentes situaciones de comunicación.
Además, ninguna persona habla una lengua, ya que solo hablamos una variedad dialectal. Los
criterios para establecer las distinciones entre lengua y dialecto no son de naturaleza
lingüística, sino social-política.
Es importante no confundir dialecto con acento. Acento se refiere a las diferencias geográficas
en el plano fónico. Dialecto es una denominación más amplia que incluye también las
peculiaridades léxicas y gramaticales. Los conceptos de lengua y dialecto nos llevan al
frecuente uso del dialecto de manera negativa, como algo inferior a la lengua. Es absurdo, una
lengua es una sucesión de dialectos. Aun así, no obstante, ocurre que ciertas variedades
dialectales tienden a ser minusvaloradas frente a otras.Tales valoraciones parten de la
comparación de las variedades dialectales con la variedad estándar.
La variedad estándar es la variedad que se considera culta, propia de clases sociales más altas,
que, por razones extralingüísticas, se toma como modelo de prestigio y medio de
comunicación formal. Es la variedad utilizada en la Administración, actos oficiales, etc., y se
transmite a través de los medios de comunicación y la enseñanza. El estándar cumple la
importante función de mantener la cohesión de la lengua, pero es una abstracción, un modelo
ideal que carece de hablantes reales: el idiolecto de cada hablante, en función de la situación
de comunicación en la que se encuentre dicho individuo. Además, el estándar también es algo
vivo, que va transformándose con el tiempo, a la par que evoluciona la lengua.
Junto con el concepto de estándar resulta importante el de norma o norma culta, que alude a
la variedad de mayor valoración social en cada área geográfica de una lengua. Si pensamos en
el español, hablaríamos de la existencia de un estándar para el conjunto del idioma, que luego
se diversifica en distintas normas cultas, como la norma peninsular, la argentina, la peruana,
etc. Podríamos ir más allá y distinguir, por ejemplo, dentro del español peninsular, una norma
culta meridional (como variante de prestigio en dicha zona); y, dentro de ella, también una
norma culta de Andalucía oriental, etc. Resumiendo: la norma es algo así como la variante de
referencia de un territorio dado.
Dentro de una misma lengua, los hablantes de sus diferentes dialectos se entienden entre sí
gracias a que existe un núcleo común entre ambos dialectos, o incluso entre dos lenguas.
Cuanto mayor sea ese núcleo común y más escasas sean las zonas de diferencia, más fácil será
la comunicación. En función de ello distinguimos dos grandes tipos de lenguas: simplex y
complex.
• Lenguas simplex: Aquellas en las que se permite la comunicación con otra serie de
variedades (español).
• Lenguas complex: No existe intercomunicación entre los distintos dialectos de una
lengua, o por lo menos no existe una comunicación fluida (alemán, chino).
Los sociolingüistas defienden que las lenguas son vehículos de comunicación que permiten que
las sociedades funcionen y, a su vez, las sociedades necesitan de las lenguas para funcionar.
Esto hace del elemento social un dato imprescindible y central para explicar qué son las
lenguas y qué es el lenguaje
Ejemplos:
Dugum dani (oeste de Guinea): solo distingue dos nombres de color (‘blanco’ y ‘negro’ como
equivalentes de ‘claro’ y ‘oscuro’). Vietnamita, kurdo o kazajo: no distinguen entre el azul y el
verde. Galés: posee un nombre de color que cubre lo que para nosotros sería parte del gris, el
azul y parte del verde.
IV. Lenguas en contacto. Se incluye el examen de la situación que viven aquellas lenguas
que comparten una misma comunidad de habla:
• Pueden influirse mutuamente (transferencia o interferencia lingüística). - Pueden estar
reservadas para determinados usos sociales (diglosia).
• Pueden mezclarse creando una nueva lengua (pidgins (primera fase de creación) y
criollos (cuando la lengua está ya asentada)).
En consecuencia, todo ello no significa que las distintas partes de la lingüística estén
desconectadas entre sí, sino que podemos establecer un itinerario científico del tipo siguiente:
En resumen:
2. Campos de investigación.
2.1. Política y planificación lingüísticas.
Agrupa todas las actuaciones encaminadas a regular la vida de las lenguas.Los intereses de la
planificación lingüística consisten en plantear y llevar a cabo procesos de reforma,
modernización e intervención general en el discurrir de las lenguas y en su estatus. Es decir,
solventar problemas y desequilibrios sociológicos, educativos e institucionales. Se centra,
sobre todo, en sociedades en las que conviven más de una lengua. Es necesario planificar qué
lenguas se emplearán en la administración, de qué manera, cuáles serán sus competencias en
la educación, en distintos ámbitos de la vida social, y un largo etcétera. La planificación suele
descansar en decisiones políticas al respecto de la vida lingüística.
El 40% restante depende del éxito que el aparato escolar tenga para ser capaz de activarlo de
manera correcta y suficiente.
Es, por tanto, una gran responsabilidad hacerlo porque la lengua es el medio indispensable
para desarrollar cualquier otro tipo de actividad intelectual.
Por ello, la enseñanza de la lengua materna desarrolla una serie de procedimientos para
analizar primero, y programar después, el itinerario del desarrollo de la competencia
lingüística de los hablantes, en todos los niveles lingüísticos: fónico, ortográfico, gramatical,
léxico y textual.
2.3. Traductología.
Todo trasvase de información entre lenguas requiere de un conocimiento profundo de los
recursos lingüísticos y extralingüísticos pertinentes en cada una de las lenguas implicadas (la
que es traducida y sobre la que se traduce) y, al mismo tiempo, precisa del desarrollo de
criterios en virtud de los que efectuar ese trasvase.