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Ficha STC15134-2019

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TUTELA

REPORTE DE CONSULTA

RELEVANTE

SALA DE CASACIÓN CIVIL Y AGRARIA


ID : 682090
M. PONENTE : ARIEL SALAZAR RAMÍREZ
NÚMERO DE PROCESO : T 1100102300002019-00753-00
NÚMERO DE PROVIDENCIA : STC15134-2019
CLASE DE ACTUACIÓN : ACCIÓN DE TUTELA - PRIMERA
INSTANCIA
TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 06/11/2019
DECISIÓN : CONCEDE TUTELA
ACCIONADO : SALA JURISDICCIONAL DISCIPLINARIA
DEL CONSEJO SUPERIOR DE LA
JUDICATURA
ACCIONANTE : PAULINA CANOSA SUÁREZ
FUENTE FORMAL : Ley 1581 de 2012 art. 5 / Ley 1755 de
2015 art. 24 / Ley 270 de 1996 art. 57 /
Ley Estatutaria 1266 de 2008 art. 3 lit.
f, g, h / Ley Estatutaria 1712 de 2014
art. 2, 4, 6, 19 / Constitución Política de
Colombia art. 74, 20 y 23

ASUNTO:
¿La Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la
Judicatura vulnera los derechos de petición y de acceso a la información
pública de la accionante, al negar la expedición de copia de los actos de
nombramiento y posesión de los magistrados de la Sala, los documentos
entregados por ellos para efectos de su posesión, y las cartas de renuncia
a tales nombramientos, así como copia de las actas de sesión de dicha
Sala?

TEMA: DERECHO DE PETICIÓN - Doble dimensión

DERECHO DE PETICIÓN - Requisitos de la respuesta

DERECHO DE PETICIÓN - La resolución de fondo no involucra el sentido


de la respuesta

Tesis:
«(...) el artículo 23 de la Constitución garantiza el derecho fundamental de
todas las personas a dirigirse ante las autoridades y, eventualmente a los
particulares, para obtener una respuesta de fondo a sus solicitudes,
formuladas en interés general o particular. El derecho de petición, en
consecuencia, tiene una doble dimensión: a) la posibilidad de acudir ante
el destinatario, y b) la de obtener una respuesta pronta, congruente y
sustancial en relación con la cuestión planteada.

La esencia de la prerrogativa comentada comprende entonces: (i) pronta


resolución, (ii) respuesta de fondo y, (iii) notificación de la contestación al
interesado.

Valga destacar, que una verdadera respuesta, si bien no tiene que ser
siempre favorable a las pretensiones del peticionario, sí debe cumplir con
los requisitos de ser oportuna, resolver lo solicitado de manera clara,
precisa y congruente, además de ser puesta en conocimiento del
solicitante».

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Funciones


esenciales (c. j.)

Tesis:
«El artículo 74 de la Constitución Política consagra el derecho fundamental
que tienen todas las personas de acceder a los documentos públicos, salvo
los casos establecidos en la ley, disposición que armoniza con el precepto
20 que garantiza la libertad de recibir información veraz e imparcial y con
el artículo 23 que asegura la vigencia de la prerrogativa constitucional de
petición, pues mientras que este último es el género, el primero constituye
una manifestación concreta de aquél.

Bajo este marco supralegal se ha desarrollado en el ordenamiento


colombiano la garantía de acceso a la información pública, la cual deriva
de los deberes de transparencia, divulgación y publicidad que rigen las
actuaciones de las entidades del Estado.
3.1. La jurisprudencia constitucional le ha reconocido al menos tres
funciones esenciales:

i) garantiza la participación democrática y el ejercicio de los derechos


políticos, pues “{s}i el desempeño del poder, en los distintos ámbitos del
Estado, fuera clandestino y secreto, no sería posible que el ciudadano
pudiera “participar en la conformación, ejercicio y control del poder
político” (C.P. art. 40).[124] La publicidad de las funciones públicas (C.P.
art. 209), es la condición esencial del funcionamiento adecuado de la
democracia y del Estado de derecho; sin ella, sus instituciones mutan de
naturaleza y dejan de existir como tales” (CC, C-038-96, 5 feb. 1996, rad.
D-980, D-981, D-982, D-986, D-988, D-992, D-994, D-995).

En consecuencia, fortalece la formación de un ciudadano “activo,


deliberante, autónomo y crítico” que pueda ejercer un debido control de la
actividad del Estado” (CC, C-053-1995 y C-957 de 1999).

ii) Es instrumento para el ejercicio de otros derechos constitucionales,


pues permite conocer las condiciones y presupuestos de su
materialización. Al respecto se ha dicho que uno de los fines legítimos que
pueden alcanzarse con el acceso a la información pública es “asegurar que
las autoridades y agencias estatales expliquen públicamente las decisiones
adoptadas y el uso que le han dado al poder que han delegado en ellos los
ciudadanos, así como el destino que le (han) dado a los recursos públicos;
y garantizar el cumplimiento de deberes constitucionales y legales por
parte de la ciudadanía” (CC, C-276-2013).

Lo anterior por cuanto

"El Estado de derecho se funda, entre otros principios, en el de la


publicidad, el cual supone el conocimiento de los actos de los órganos y
autoridades estatales, en consecuencia, implica para ellos desplegar una
actividad efectiva para alcanzar dicho propósito; dado que, la certeza y
seguridad jurídicas exigen que las personas puedan conocer, no sólo de la
existencia y vigencia de los mandatos dictados por dichos órganos y
autoridades estatales, sino, en especial, del contenido de las decisiones por
ellos adoptadas, para lo cual, la publicación se instituye en presupuesto
básico de su vigencia y oponibilidad, mediante los instrumentos creados
con tal fin.

Es más, el referido principio constituye un fin esencial del Estado social de


derecho, por cuanto permite enterar a la comunidad y mantenerla
informada sobre los hechos que ocurren a su alrededor, así como de los
fundamentos que motivan las decisiones adoptadas por las autoridades.
(…)

“En este orden de ideas, la Carta Política establece la publicidad como


principio rector de las actuaciones administrativas, para lo cual, de
conformidad con lo preceptuado en su artículo 209, obliga a la
administración a poner en conocimiento de sus destinatarios los actos
administrativos, con el fin, no sólo de que éstos se enteren de su contenido
y los observen, sino que, además, permita impugnarlos a través de los
correspondientes recursos y acciones (CC, T-420-1998 y C-957-1999, C-
276-2013)".

iii) Asegura de la transparencia de la gestión pública, por lo que el derecho


de acceder a la información pública es una herramienta de control o
veeduría ciudadana de la actividad estatal. La transparencia y la
publicidad de dicha información “son la garantía más importante de la
lucha contra la corrupción y del sometimiento de los servidores públicos a
los fines y procedimientos que les impone el derecho” (CC, C-089-1994 y
C-491-2007)».

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Ley de


Transparencia y del Derecho de Acceso a la Información Pública Nacional:
objetivo y principios que la rigen

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Ley de


Transparencia y del Derecho de Acceso a la Información Pública Nacional -
Principio de máxima publicidad para titular universal: concepto

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Excepciones:


subreglas jurisprudenciales (c. j.)

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Excepciones: las


normas que limitan su acceso son de interpretación restrictiva

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Causales


constitucionalmente legítimas para restringir el acceso

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Principio de


máxima publicidad: obligaciones del Estado (c. j.)

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Principio de la


buena fe: conductas exigibles de los sujetos obligados a suministrar la
información

Tesis:
«Es deber constitucional de las autoridades públicas entregarle a cualquier
persona información clara, completa, oportuna, cierta y actualizada sobre
la actividad del Estado por la cual se indague, y la respuesta suministrada
ha de ser completa, consistente, coherente, verificable, comparable,
contextualizada, diáfana y pronta.

La Ley Estatutaria 1712 de 2014 o “Ley de Transparencia y del Derecho de


Acceso a la Información Pública Nacional…” que desarrolla el artículo 74
de la Carta Magna, tiene por objeto regular las condiciones de ejercicio y
garantía del derecho de acceso a la información pública y las excepciones a
la regla de la publicidad.

En cumplimiento de ese propósito, instituyó una serie de principios que


deben ser respetados por las autoridades en la atención de las solicitudes
de información y de acceso a documentos públicos.

El primero de ellos lo consagra el artículo 2º y es conocido como “máxima


publicidad para titular universal”, postulado conforme al cual toda la
información que se encuentre en posesión, custodia o control de un sujeto
obligado a suministrarla “es pública y no podrá ser reservada o limitada
sino por disposición constitucional o legal, de conformidad con la presente
ley”.

Los restantes axiomas pueden sintetizarse de la siguiente manera:

Transparencia: Toda la información en poder de los sujetos obligados se


presume pública. En consecuencia, dichos sujetos deben “proporcionar y
facilitar el acceso a la misma en los términos más amplios posibles y a
través de los medios y procedimientos que al efecto establezca la ley,
excluyendo solo aquello que esté sujeto a las excepciones constitucionales
y legales y bajo el cumplimiento de los requisitos establecidos en esta ley”.

Buena fe: Todo sujeto obligado, al cumplir con las obligaciones derivadas
del derecho de acceso a la información pública, lo hará con motivación
honesta, leal y desprovista de cualquier intención dolosa o culposa.

Facilitación: Los sujetos obligados deberán facilitar el ejercicio del derecho


de acceso a la información pública, excluyendo exigencias o requisitos que
puedan obstruirlo o impedirlo.

No discriminación: Los sujetos obligados deberán entregar información a


todas las personas que lo soliciten, en igualdad de condiciones, sin hacer
distinciones arbitrarias y sin exigir expresión de causa o motivación para
la solicitud.

Gratuidad: El acceso a la información pública es gratuito y no se podrán


cobrar valores adicionales al costo de reproducción de la información.
Celeridad: Se busca la agilidad en el trámite y la gestión administrativa.

Eficacia: Impone el logro de resultados mínimos en relación con las


responsabilidades confiadas a los organismos estatales, con miras a la
efectividad de los derechos colectivos e individuales.

Calidad de la información: Toda la información de interés público que sea


producida, gestionada y difundida por el sujeto obligado, deberá ser
oportuna, objetiva, veraz, completa, reutilizable, procesable y estar
disponible en formatos accesibles para los solicitantes e interesados en
ella, teniendo en cuenta los procedimientos de gestión documental de la
respectiva entidad.

Divulgación proactiva de la información: El derecho de acceso a la


información no radica únicamente en la obligación de dar respuesta a las
peticiones, sino también en el deber de los sujetos obligados de promover y
generar una cultura de transparencia, lo que conlleva la obligación de
publicar y divulgar documentos y archivos que plasman la actividad
estatal y de interés público, de forma rutinaria y proactiva, actualizada,
accesible y comprensible, atendiendo a límites razonables del talento
humano y recursos físicos y financieros.

Responsabilidad en el uso de la información: Cualquier persona que haga


uso de la información que proporcionen los sujetos obligados, lo hará
atendiendo a la misma.

3.3. Acorde con esta normatividad, el ejercicio del derecho fundamental de


acceso a la información “solamente podrá ser restringido
excepcionalmente” y “{l}as excepciones serán limitadas y proporcionales”,
además “deberán estar contempladas en la ley o en la Constitución y ser
acordes con los principios de una sociedad democrática” (art. 4°). En
virtud de ello, las autoridades públicas deben “responder de buena fe, de
manera adecuada, veraz, oportuna y accesible a las solicitudes de acceso”
(ibídem).

La sentencia C-491 de 2007 recogió las subreglas cuyo acatamiento se


impone a las restricciones que pretendan establecerse frente al derecho de
acceso a la información. Se trata de diez directrices, las cuales se
consignan a continuación:

"(…) En resumen, la Corte ha considerado que sólo es legítima una


restricción del derecho de acceso a la información pública - o el
establecimiento de una reserva legal sobre cierta información - cuando: i)
la restricción está autorizada por la ley o la Constitución; ii) la norma que
establece el límite es precisa y clara en sus términos de forma tal que no
ampare actuaciones arbitrarias o desproporcionadas de los servidores
públicos; iii) el servidor público que decide ampararse en la reserva para
no suministrar una información motiva por escrito su decisión y la funda
en la norma legal o constitucional que lo autoriza; iv) la ley establece un
límite temporal a la reserva; v) existen sistemas adecuados de custodia de
la información; vi) existen controles administrativos y judiciales de las
actuaciones o decisiones reservadas; vii) la reserva opera respecto del
contenido de un documento público pero no respecto de su existencia; viii)
la reserva obliga a los servidores públicos comprometidos pero no impide
que los periodistas que acceden a dicha información puedan publicarla; ix)
la reserva se sujeta estrictamente a los principios de razonabilidad y
proporcionalidad; x) existen recursos o acciones judiciales para impugnar
la decisión de mantener en reserva una determinada información".

En el mismo sentido, el fallo T-451 de 2011 resumió las exigencias a


cumplir cuando se trata de la fijación de limitaciones a la obtención de
información pública. Enfatizó en que las normas que limitan esta
prerrogativa son de interpretación restrictiva; la negativa del acceso ha de
estar adecuadamente motivada y es necesario que se indique de manera
expresa “la norma en la cual se funda la reserva”, con el fin de que el
asunto eventualmente pueda someterse a “controles disciplinarios,
administrativos e incluso judiciales”.

Adicionalmente precisó que no resultan admisibles las reservas con origen


en disposiciones que no tienen naturaleza legal, como por ejemplo, actos
administrativos, ni tampoco fundarse en “normas genéricas o vagas en
materia de restricción del derecho de acceso a la información porque
pueden convertirse en una especie de habilitación general a las
autoridades para mantener en secreto toda la información que
discrecionalmente consideren adecuado”.

Por tal motivo, las restricciones serán constitucionalmente legítimas “si


tienen la finalidad de proteger derechos fundamentales o bienes
constitucionalmente valiosos como (i) la seguridad nacional, (ii) el orden
público, (iii) la salud pública y (iv) los derechos fundamentales y si además
resultan idóneos (adecuados para proteger la finalidad
constitucionalmente legítima) y necesarios para tal finalidad (principio de
proporcionalidad en sentido estricto)” (Código Civil, C-451-2011, ).

3.4. En reciente pronunciamiento, la Corte Constitucional señaló las


obligaciones que recaen sobre el Estado como correlativas al principio de
máxima divulgación, las cuales se contraen a: “(i) el derecho de acceso a la
información solamente puede ser restringido a partir de un régimen
limitado de excepciones; (ii) toda decisión negativa, esto es, que niegue el
acceso a la información pública, debe ser motivada, bajo el supuesto de
que el Estado tiene la carga de la prueba respecto de las razones que
justifican la reserva de información; y (iii) ante la duda o el vacío legal
sobre el carácter público o reservado de la información, opera la
presunción de publicidad” (C-276-2019).

De otro lado, el postulado de buena fe -precisó la citada Corporación- exige


de los sujetos obligados a suministrar la información pública las siguientes
conductas: “(i) interpretar el régimen jurídico aplicable de manera que se
cumplan los fines perseguidos por el derecho de acceso a la información
pública; (ii) asegurar la estricta aplicación de este derecho; (iii) ofrecer los
medios de asistencia necesarios a quienes solicitan la información; (iv)
promover una cultura de transparencia de la gestión pública, a partir de la
diligencia, el profesionalismo y la lealtad institucional; y (v) realizar las
acciones necesarias para que las actuaciones de los sujetos obligados
aseguren la satisfacción del interés general y no defrauden la confianza de
los individuos en la gestión estatal” (ibídem)».

DERECHO DE PETICIÓN - Categorías de los documentos solicitados por


la accionante

DERECHO DE PETICIÓN - Peticiones ante autoridades: información y


documentos reservados

DERECHO AL HABEAS DATA - Ley de protección de datos personales -


Datos sensibles: definición

DERECHO AL HABEAS DATA - Datos personales: clasificación

DERECHO A LA INTIMIDAD - Definición

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Ley de


Transparencia y del Derecho de Acceso a la Información Pública Nacional -
Legitimidad de los terceros para obtener información o datos personales de
los servidores públicos: excepciones

DERECHO ADMINISTRATIVO - Acto administrativo: se rige por el


principio de máxima publicidad

DERECHO ADMINISTRATIVO - Acto administrativo - Actos de


nombramiento, actos de elección distintos a los de voto popular y actas de
posesión: obligación legal de publicarlos a través de medios accesibles a
los ciudadanos

Tesis:
«En el caso que ocupa la atención de la Sala, la petición de amparo revela
que la accionante presentó seis derechos de petición en los que exoró la
expedición a su costa de copias auténticas de algunos documentos
relacionados con el nombramiento, posesión y ejercicio del cargo de
algunos funcionarios y ex funcionarios de la Sala Jurisdiccional
Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura y de las Salas
Jurisdiccionales Disciplinarias de los Consejos Seccionales de la
Judicatura, amén de reclamar que se certificaran algunos temas
específicos vinculados a lo anterior.

Los documentos respecto de los cuales se realizaron las solicitudes se


dividen en cuatro categorías: a) actos administrativos; b) documentos de
soporte o anexos a solicitudes; c) actas de posesión y d) actas de la Sala
accionada.

A su turno, las certificaciones pedidas versan sobre la delegación en el


Presidente de la facultad de nombramiento si ello ocurrió, el cumplimiento
de requisitos para el ejercicio del cargo por parte de uno de los
funcionarios designados y el nombre de los integrantes de la Sala que
participaron en el nombramiento de los servidores por los cuales se
indagó, en la posesión de uno de ellos y en la determinación que ocasionó
el egreso de la Corporación de otro de los mencionados.

4.1. En cuanto a los actos administrativos, la ciudadana reclamó los de


nombramiento de algunos magistrados de la sala accionada; los proferidos
posteriormente para su permanencia o modificatorios del anterior, los de
aceptación de renuncia o contentivos de la decisión que motivó la salida
del cargo, los de designación de los reemplazos y el de delegación de la
función de nombramiento en caso de haberse procedido de la señalada
manera.

Frente a la documentación que sirvió de soporte a algunas solicitudes, se


pidió aquella aportada para la posesión en los cargos proveídos y las
cartas de renuncia que se hayan presentado.

Referente a las actas, adicional a las de posesión de los magistrados


designados, la peticionaria requirió las de la Sala accionada donde se
acordaron los nombramientos de los servidores mencionados y la
insubsistencia, destitución, aceptación de renuncia o vencimiento del
plazo del ex magistrado Julio César Villamil Hernández.

Finalmente, se pidió certificar el nombre de los magistrados y magistradas


que participaron en los nombramientos, posesiones, insubsistencia,
destitución y aceptación de renuncia de los designados, amén de
circunstancias atinentes al ejercicio de un cargo en la Procuraduría
General de la Nación por el magistrado Camilo Montoya Reyes, Carlos
Arturo Ramírez Vásquez y otros funcionarios.

4.2. La autoridad convocada a este trámite no accedió a expedir copia de


ninguno de los documentos referenciados en las peticiones, ni a
suministrar a la reclamante la información requerida por ella. Fundó su
negativa en que los artículos 24 de la Ley 1755 de 2015 “{p}or medio de la
cual se regula el Derecho Fundamental de Petición…” y 57 de la Ley 270
de 1996 o Estatutaria de la Administración de Justicia, amparaban la
reserva de los mismos.

Al tenor de la primera disposición:

"Solo tendrán carácter reservado las informaciones y documentos


expresamente sometidos a reserva por la Constitución Política o la ley, y en
especial:

1. Los relacionados con la defensa o seguridad nacionales.

2. Las instrucciones en materia diplomática o sobre negociaciones


reservadas.

3. Los que involucren derechos a la privacidad e intimidad de las


personas, incluidas en las hojas de vida, la historia laboral y los
expedientes pensionales y demás registros de personal que obren en los
archivos de las instituciones públicas o privadas, así como la historia
clínica.

4. Los relativos a las condiciones financieras de las operaciones de crédito


público y tesorería que realice la nación, así como a los estudios técnicos
de valoración de los activos de la nación. Estos documentos e
informaciones estarán sometidos a reserva por un término de seis (6)
meses contados a partir de la realización de la respectiva operación.

5. Los datos referentes a la información financiera y comercial, en los


términos de la Ley Estatutaria 1266 de 2008.

6. Los protegidos por el secreto comercial o industrial, así como los planes
estratégicos de las empresas públicas de servicios públicos.

7. Los amparados por el secreto profesional.

8. Los datos genéticos humanos".

La accionada adujo el numeral 3) del precepto para sustentar su decisión


adversa a lo peticionado, subrayando que tienen carácter reservado las
informaciones y documentos que “involucren derechos a la privacidad e
intimidad de las personas, incluidas en las hojas de vida, la historia
laboral”.
Del aparte transcrito surge evidente que la reserva establecida por la
norma no recae sobre la totalidad de los documentos que hacen parte de la
hoja de vida de un trabajador, sino únicamente sobre aquellos que
comprometen los derechos a la privacidad e intimidad de las personas, es
decir, la información que tenga la connotación de “sensible” o de privada,
pues en concordancia con el artículo 15 de la Carta Política “{t}odas las
personas tienen derecho a su intimidad personal y familiar y a su buen
nombre, y el Estado debe respetarlos y hacerlos respetar…”.

La información o datos que se catalogan como “sensibles” de acuerdo con


la definición proporcionada por la Ley de “protección de datos personales”
(L. 1581 de 2012), son los que afectan la intimidad del titular o cuya
indebida utilización puede generar su discriminación “tales como aquellos
que revelen el origen racial o étnico, la orientación política, las
convicciones religiosas o filosóficas, la pertenencia a sindicatos,
organizaciones sociales, de derechos humanos o que promueva intereses
de cualquier partido político o que garanticen los derechos y garantías de
partidos políticos de oposición así como los datos relativos a la salud, a la
vida sexual y los datos biométricos” (art. 5°).

Y es que debe distinguirse que tratándose de los datos vinculados a una o


varias personas determinadas o determinables, sean servidores públicos o
no, éstos pueden clasificarse en públicos, semiprivados, privados y
sensibles.

Según la Ley Estatutaria 1266 de 2008 que regula el derecho de habeas


data, los primeros son los calificados como tales por la Ley o la
Constitución Política y los demás que no ostenten la naturaleza de
semiprivados o privados como, por ejemplo, los contenidos en
“documentos públicos, sentencias judiciales debidamente ejecutoriadas
que no estén sometidos a reserva y los relativos al estado civil de las
personas” (literal f) art. 3°).

Señala el artículo 3 del Decreto 1377 de 2013 que “{s}on considerados


datos públicos, entre otros, los datos relativos al estado civil de las
personas, a su profesión u oficio y a su calidad de comerciante o de
servidor público. Por su naturaleza, los datos públicos pueden estar
contenidos, entre otros, en registros públicos, documentos públicos,
gacetas y boletines oficiales y sentencias judiciales debidamente
ejecutoriadas que no estén sometidas a reserva” (el subrayado no es del
texto).

Los datos semiprivados son los que no tienen “naturaleza íntima,


reservada, ni pública y cuyo conocimiento o divulgación puede interesar
no sólo a su titular sino a cierto sector o grupo de personas o a la sociedad
en general” (literal g) art. 3 Ley 1266 de 2008).
Y tienen la connotación de privados los que “por su naturaleza íntima o
reservada” sólo son relevantes para el titular” (literal h) art. 3 Ley 1266 de
2008).

4.3. La protección de la reserva o excepción al derecho de acceso a la


información recae sobre los datos sensibles y privados, pues estos son
componentes del núcleo esencial del derecho fundamental a la intimidad
“entendido como aquella esfera o espacio de la vida privada no susceptible
de interferencia arbitraria de las demás personas” (C-748-2011), pero no
son reservadas las informaciones o datos que aun siendo personales
ostenten la calidad de públicas, como aquellas relacionadas con la
condición de servidor público, contenidas en documentos de igual
carácter.

El artículo 18 de la Ley de Transparencia precisamente advierte sobre tal


condición al establecer que si bien el acceso a la información puede
denegarse cuando cause daño al derecho a la intimidad, es necesario
atender “las limitaciones propias que impone la condición de servidor
público”, de modo que es legítimo que terceros obtengan información
vinculada a tales sujetos a quienes se les ha encomendado el ejercicio de
una función pública, que los ciudadanos tienen el derecho de conocer y
fiscalizar. No obstante, el acceso está vedado para los aspectos íntimos,
sensibles y absolutamente privados o personales de los servidores que se
encuentren consignados en reportes como sus hojas de vida, historia
laboral, expedientes pensionales y demás registros de personal que obren
en los archivos de las instituciones para las cuales laboran actualmente o
lo hicieron en el pasado.

4.4. Los actos administrativos se rigen por el principio de publicidad, de


ahí que no tienen carácter reservado. En particular, frente a “los actos de
nombramiento y los actos de elección distintos a los de voto popular”,
existe la obligación legal de publicarlos (parág. art. 65 CPACA), a través de
medios accesibles para los ciudadanos en concordancia con los principios
orientadores de la “Ley de Transparencia y del Derecho de Acceso a la
Información Pública Nacional”. En consecuencia, no existe razón válida
que justifique el proceder de la accionada al denegar el acceso a tales
documentos.

Igual razonamiento se aplica frente a las actas de posesión de los


servidores respecto de los cuales se elevaron las seis solicitudes, por
cuanto se trata de documentos públicos que al igual que los anteriores,
aunque están contenidos en las hojas de vida que de ellos se archivan en
la entidad, de ninguna manera atentan contra sus derechos
fundamentales a la privacidad e intimidad, pues los datos allí consignados
no corresponden a información “sensible”, “privada” o “semiprivada”, dado
que no tocan aspectos de su esfera íntima o espacio individual no
susceptible de interferencias provenientes de terceros.

Los únicos datos que revelan tales documentos guardan relación con
fechas de nombramiento, posesión y situaciones administrativas de los
funcionarios, es decir información relativa a la calidad de servidor público
que ostentan (literal f art. 3 Ley 1266/08 y art. 3 Dcto. 1377/13). Por tal
razón se trata de información que sin ninguna duda es pública, respecto
de la cual es completamente viable el acceso de terceros, teniendo en
cuenta que son de interés para la ciudadanía como instrumento de control
y veeduría sobre el cumplimiento de las normas legales que disciplinan la
provisión de los cargos públicos y de manera concreta frente a las
personas a quienes se ha encomendado el ejercicio de la función
disciplinaria».

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Ley de


Transparencia y del Derecho de Acceso a la Información Pública Nacional -
Información pública: categorías

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Ley de


Transparencia y del Derecho de Acceso a la Información Pública Nacional -
Información pública clasificada: limitaciones al acceso

Tesis:
«Los datos públicos admiten adicionalmente la categorización fijada en la
Ley 1712 de 2014 en su norma de definiciones, que alude a los conceptos
de “información pública clasificada” e “información pública reservada”.

La primera es aquella que “estando en poder o custodia de un sujeto


obligado en su calidad de tal, pertenece al ámbito propio, particular y
privado o semiprivado de una persona natural o jurídica por lo que su
acceso podrá ser negado o exceptuado, siempre que se trate de las
circunstancias legítimas y necesarias y los derechos particulares o
privados consagrados en el artículo 18 de esta ley” (literal c) art. 6°).

La otra tipología corresponde a la información que “estando en poder o


custodia de un sujeto obligado en su calidad de tal, es exceptuada de
acceso a la ciudadanía por daño a intereses públicos y bajo cumplimiento
de la totalidad de los requisitos consagrados en el artículo 19 de esta ley”
(literal d).

Conforme a la remisión contenida en los anteriores preceptos, el acceso a


la “información pública clasificada” está exceptuado por tiempo ilimitado
en atención a que puede causar daño a: i) El derecho de toda persona a la
intimidad, bajo las limitaciones propias que impone la condición de
servidor público, en concordancia con lo estipulado por el artículo 24 de la
Ley 1437 de 2011; ii) El derecho de toda persona a la vida, la salud o la
seguridad y iii) Los secretos comerciales, industriales y profesionales (art.
18), o por un lapso no mayor a quince años cuanto se atenta contra los
intereses públicos, siempre que el acceso esté expresamente prohibido por
una norma legal o constitucional y guarde relación con: a) La defensa y
seguridad nacional; b) La seguridad pública; c) Las relaciones
internacionales; d) La prevención, investigación y persecución de los
delitos y las faltas disciplinarias, mientras que no se haga efectiva la
medida de aseguramiento o se formule pliego de cargos, según el caso; e)
El debido proceso y la igualdad de las partes en los procesos judiciales; f)
La administración efectiva de la justicia; g) Los derechos de la infancia y la
adolescencia; h) La estabilidad macroeconómica y financiera del país; i) La
salud pública (art. 19)».

DERECHO DE PETICIÓN - Procedencia del acceso de la peticionaria a los


documentos entregados por los funcionarios designados para la posesión
como magistrados de las Salas Disciplinarias de los Consejos Seccionales
de la Judicatura y sus cartas de renuncia, con excepción de las
revelaciones íntimas efectuadas en las dimisiones

Tesis:
«(...) los documentos diferentes de actos administrativos que solicitó la
tutelante, tales como aquellos que los funcionarios designados entregaron
para efectos de su posesión como magistrados de la Sala accionada y de
las Salas Jurisdiccionales Disciplinarias de los Consejos Seccionales de la
Judicatura y cartas de renuncia, contienen datos de los magistrados y ex
magistrados de las corporaciones señaladas y por ello su conocimiento o
divulgación no sólo interesa a su titular, con la única salvedad de las
revelaciones íntimas que se hayan efectuado en las misivas de dimisión,
información ésta que por tener el carácter de privada y directamente
vinculada con la privacidad de la persona, si está amparada por reserva».

DERECHO DE PETICIÓN - Publicidad de las sesiones de la Sala Plena y


de la Sala Administrativa del Consejo Superior de la Judicatura, de las
Salas Administrativas de los Consejos Seccionales, de la Corte
Constitucional, Consejo de Estado y Sala Disciplinaria del Consejo
Superior de la Judicatura con excepción de aquellas que contienen
asuntos judiciales o disciplinarios de carácter individual, de grupo o
colectivos reservadas para terceros

DERECHO DE PETICIÓN - Las actas de la Sala Jurisdiccional


Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura solicitadas por la
accionante no son documentos sujetos a reserva
DERECHO DE PETICIÓN - Solicitud ante la Sala Jurisdiccional
Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura: vulneración del
derecho al no suministrar respuesta clara, concreta y de fondo

DERECHO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA - Vulneración del


derecho

Tesis:
«En lo que atañe a las actas en las cuales se acordó el nombramiento de
los integrantes de la Sala accionada y de los magistrados de las Salas
Jurisdiccionales Disciplinarias de los Consejos Seccionales de la
Judicatura; aquellas en las que se acordó la aceptación de la renuncia
presentada por la ex magistrada María Lourdes Hernández Mindiola y la
designación de su reemplazo, y en las que se acordó la insubsistencia,
destitución, vencimiento del plazo para el ejercicio del cargo, aceptación de
renuncia o decisión que haya motivado el egreso del ex magistrado Julio
César Villamil Hernández así como el nombramiento del servidor que lo
sustituyó, debe acudirse a las previsiones de la Ley Estatutaria de la
Administración de Justicia.

El artículo 57 preceptúa:

"Son de acceso público las actas de las sesiones de la Sala Plena y de la


Sala Administrativa del Consejo Superior de la Judicatura, de las Salas
Administrativas de los Consejos Seccionales y de las corporaciones citadas
en el inciso anterior (Corte Suprema de Justicia, Corte Constitucional,
Consejo de Estado y Sala Disciplinaria del Consejo Superior de la
Judicatura), y los documentos otorgados por los funcionarios de la Rama
Judicial en los cuales consten actuaciones y decisiones de carácter
administrativo. También son de acceso público las actas de las sesiones de
la Sala Plena de la Corte Constitucional, de las Salas y Secciones del
Consejo de Estado y de los Tribunales Administrativos y de las Salas de la
Corte Suprema de Justicia y de los Tribunales Superiores de Distrito
Judicial en las cuales consten los debates, actuaciones y decisiones
judiciales adoptadas para propugnar por la integridad del orden jurídico,
para hacer efectivo el cumplimiento de una ley o un acto administrativo de
carácter general y para la protección de los derechos e intereses colectivos
frente a la omisión o acción de las autoridades públicas. Las actas de las
sesiones de las Salas y Secciones de la Corte Suprema de Justicia, de la
Corte Constitucional, del Consejo de Estado, de la Sala Jurisdiccional
Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura, de la Comisión de
Investigación y Acusaciones de la Cámara de Representantes, de las Salas
Jurisdiccionales Disciplinarias de los Consejos Seccionales y de los
Tribunales en las cuales consten actuaciones y decisiones judiciales o
disciplinarias de carácter individual, de grupo o colectivos, son reservadas
excepto para los sujetos procesales, sin perjuicio de las atribuciones de las
autoridades competentes. Son de acceso público las decisiones que se
adopten” (negrilla y subrayado adicionados).

Se colige del precedente marco normativo que las actas de las sesiones de
la Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura
son de acceso público a excepción de aquellas que contengan actuaciones
y decisiones judiciales o disciplinarias de carácter individual, de grupo o
colectivas que son reservadas para terceros más no para los sujetos
procesales y las autoridades competentes. De otra parte, también son de
acceso público las decisiones que se adopten en tales asuntos y los
documentos que otorguen los magistrados de la Sala donde consten
actuaciones y decisiones de carácter administrativo.

En ese orden de ideas, las actas de la Sala accionada cuya copia solicitó la
tutelante son documentos que no están sometidos a reserva, pues no
versan sobre las actuaciones y decisiones judiciales o disciplinarias
preanotadas, con excepción únicamente de los apartes de las mismas que
correspondan a las opiniones y deliberaciones de los magistrados, las
cuales deben ser excluidas de las reproducciones que se expidan a su
costa, pues preceptúa el parágrafo del artículo 19 de la Ley 1712 de 2014
que se exceptúan del acceso público “los documentos que contengan las
opiniones o puntos de vista que formen parte del proceso deliberativo de
los servidores públicos”, disposición consonante con el artículo 15 del
Reglamento interno de la accionada (Acuerdo 012 de 1994) conforme al
cual “las deliberaciones de la Sala serán reservadas” (literal j).

Por ello y dado que la información a suministrar es parcial, debe darse


cumplimiento a lo estatuido por el artículo 21 de la precitada
normatividad, esto es, ofrecer a la accionante una versión pública de la
información “que mantenga la reserva únicamente de la parte
indispensable”, pues aquella “que no cae en ningún supuesto de excepción
deberá ser entregada a la parte solicitante, así como ser de conocimiento
público” en garantía del derecho fundamental de todas las personas de
“solicitar y recibir información de cualquier sujeto obligado, en la forma y
condiciones que establece esta ley y la Constitución” (art. 24).

Finalmente, teniendo en cuenta que la convocada a este trámite no


respondió afirmativa ni negativamente a ninguna de las solicitudes
concretas de certificación que se le formularon, se le ordenará cumplir su
obligación de suministrar una respuesta clara, concreta y de fondo a tales
requerimientos atendiendo las directrices expuestas en esta motiva, toda
vez que la información que constituye su objeto no es reservada ni refiere a
datos sensibles o privados de los funcionarios involucrados; por el
contrario son datos públicos relacionados con el ejercicio de las
competencias asignadas a los integrantes de la accionada en su condición
de funcionarios al servicio del Estado.
5. Bajo las anteriores consideraciones se concluye que la Sala
Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura vulneró
los derechos fundamentales de petición y acceso a la información pública
de la tutelante, razón que motiva el otorgamiento de la protección.

En consecuencia, se ordenará a la autoridad cuestionada que en el


término máximo de cuarenta y ocho (48) horas, contadas a partir de la
notificación de esta providencia, ofrezca contestación clara, concreta y de
fondo a las solicitudes presentadas, expidiendo copia auténtica de los
documentos señalados por ella y suministrándole las informaciones
requeridas, excluyendo únicamente la relativa a las opiniones y
deliberaciones de los magistrados contenidas en sus actas».

JURISPRUDENCIA RELACIONADA: CC C-451/11 / CC T-420/98 / CC


C-491/07 / CC C-089/94 / CC C-276/13 / CC C-053/95 / CC C-
957/99 / CC C-276/19 / CC C-748/11

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