Quien Soy 1
Quien Soy 1
Quien Soy 1
junio de 1990
Área libre
Área ciega
Área privada
Área desconocida
ÁREA LIBRE
Lo que conozco de mí y los demás también conocen.
En esta zona es muy común que re presentemos la personalidad que está apoyada por la información
que recibimos de los demás acerca de nosotros mismos; desde luego, adoptamos siempre lo que más
nos gusta, pero cuando ellos nos hacen ver nuestros defectos nos inquietamos y preferimos salirnos
de la jugada. William Shakespeare escribió en Hamlet: "Nadie se puede ver en un espejo",
seguramente porque cuando nos paramos delante del espejo sólo miramos lo que queremos ver.
El área libre representa la opinión de nosotros mismos, aunque en su esencia no es muy real.
ÁREA CIEGA
Lo que ignoro de mí y que los demás conocen.
En esta zona existe información muy valiosa que está en poder de los demás; desafortunadamente
esta información no fluye hacia el interesado, porque éste la bloquea constantemente, sólo en
momentos críticos el interesado deja que le digan sus verdades. Cuando se esté enteramente
dispuesto a recibir la información que tienen los demás sobre nosotros mismos obtendremos la paz
interior que nos permita conocemos tal como nos conocen los demás; pero para lograrlo es necesario
inspirar confianza, para que con libertad y sin temores nos comuniquen abiertamente lo que ellos
conocen de nosotros.
ÁREA PRIVADA
Lo que yo guardo en mi interior y los demás no conocen.
A través del curso de nuestra vida hemos ido almacenando emociones, sentimientos, sensaciones,
etc., que nadie conoce más que nosotros mismos. El inventario moral de nuestro programa de
Alcohólicos Anónimos va dirigido a esta área y solamente apoyados fuertemente de la mano del Poder
Superior para libramos del temor y teniendo la decisión para iniciar la limpieza de nuestro interior,
podremos iniciar el encuentro de nosotros mismos. ¡Cuántos cachivaches están almacenados en
nuestro archivo personal! Esta es, sin duda, la causa principal de las fallas de la personalidad. Si
pretendemos hacer nuestro inventario y no sacamos la basura que está oculta, muy poco será el
provecho que podamos recibir.
ÁREA DESCONOCIDA
Lo que no conozco de mí y los demás tampoco
¿Y esto qué es?... Seguramente que hemos conocido o experimentado casos de irracionalidad total
Cuántas veces en la actividad alcohólica hemos hecho actos de completo mal juicio y en la cruda
moral, con un arrepentimiento atroz, nos hemos preguntado: ¿por qué lo hice?, ¿por qué lo dije? En
nuestras borracheras secas, ¿cuántas veces hemos actuado en forma absurda e irracional? Esta zona
de nuestra personalidad re presenta el área impredecible del ser humano. No se sabe cómo opera este
mecanismo absurdo e irracional, pero sí se sabe que está alimentado por la parte oculta de nosotros
que, por negligencia o temeridad no sacamos a la luz, a través del quinto paso.
El área oculta está cargada de impulsos que nos llevan a conductas inimaginables, temores de toda
índole, reacciones peligrosas y dramáticas que producen exceso de emociones, frustraciones y
rencores.
El inventario moral, tal como lo describe el cuarto paso, “es una labor vigorosa de toda la vida"; es
por ello importante hacer algunas reflexiones para obtener la información que está guardada en cada
una de las áreas que conforman nuestra personalidad y para ello es necesario realizar un análisis
breve de nuestro pasado, para rescatar la valiosa y significativa información de quiénes somos en
realidad.
Debemos considerar que nuestro cerebro no sólo se caracteriza por almacenar información, sino que
además tiene la virtud de reproducir emociones. En él almacenamos el recuerdo de olores como
cuando entramos a la cantina que acostumbrábamos a visitar el recuerdo de olores gratos o fétidos
nos hace volver a vivir nuestro pasado. De hecho, en nuestra niñez almacenamos, más comunicativas
que el propio lenguaje. Daisei Susuni, filósofo oriental, afirma que "cuando el hombre desarrolló la
conciencia del lenguaje, disminuyó la verdadera comunicación".
Tratemos de recordar no solamente usando la capacidad de reproducir palabras sino recuperar
sensaciones, estado de ánimo, olores, en fin, todo aquello que hace posible vivenciar los recuerdos.
El ejercicio que a continuación se propone, se realiza con otro compañero, de manera verbal, sin
anotar algo, hacer todas las preguntas y tener tiempo suficiente para profundizar en cada una de ellas.
Las preguntas las hace uno de los dos participantes, quien es el entrevistador; al concluir el
cuestionario, el entrevistador pasa a ser el entrevistado y el que fue entrevistado pasa a ser el
entrevistador.
Este ejercicio nos permite realizar un breve inventario y al mismo tiempo un quinto paso.
¿Quién soy?
1. ¿Cuál ha sido el período más feliz de tu vida?