Periodos de Mesoamérica
Periodos de Mesoamérica
Periodos de Mesoamérica
Cronología Mesoamérica
Los sacerdotes consiguieron poder y estaban a cargo de los temas sagrados. De la mano de
estos surgieron gobernantes que comenzaron a ordenar las tareas agrícolas, laborales,
comerciales y militares que los demás debían cumplir.
La cultura olmeca se localizaba en la costa del golfo de México, en áreas de los actuales
estados de Tabasco y sur de Veracruz. En los sitios arqueológicos se hallan muestras de los
primeros basamentos piramidales para edificios. También dejaron tras de sí esculturas de
cabezas colosales que manifiestan el alcance artístico de su mundo.
Los olmecas tuvieron al jaguar por animal sagrado. Son comunes en su arte las tallas y figuras
del jaguar con forma humanizada. Esto, entre otras cosas, forma parte de los elementos que
luego retomaron otras culturas mesoamericanas posteriores.
Cabeza olmeca
Cabeza colosal esculpida en piedra de basalto. Elaborada por la cultura olmeca probablemente
durante el periodo preclásico medio.
Periodo clásico (250 - 950 d.C.)
Está subdividido en dos etapas: el clásico temprano (250 a 600 d.C.) y el clásico tardío (600 a
950 d.C). Durante el horizonte cultural clásico tuvo lugar el resplandor de diversos centros
urbanos, florecieron las artes, aumentó el comercio y hubo un perfeccionamiento tanto de la
astronomía como de la escritura.
La extensión de la ciudad también incrementó las diferencias sociales. Los sacerdotes y los
guerreros componían la élite, mientras la mayor parte de la población común debía pagar
tributo. El poder de las ciudades grandes se imponía a los pequeños poblados y les exigía a
estos parte de sus productos o mano de obra para laborar en la construcción de pirámides y
caminos.
Teotihuacan, por ejemplo, alcanzó su época de brillo entre los años 300 y 650 d.C. Estaba
ubicada en el noroeste del valle de México y llegó a tener más de 150.000 habitantes. Este
lugar tuvo gran influencia como centro económico y cultural, ya que expandió la creencia en
sus dioses y estableció rutas comerciales tanto con las poblaciones de Oasisamérica en el
norte como con las ciudades mayas de Yucatán en el sur.
Teotihuacan
Teotihuacan, principal ciudad del periodo clásico temprano en el valle de México. Su mayor
prestigio se alcanzó entre los años 300 y 650 d.C.
Características del periodo clásico
En el clásico temprano predominó la cultura de Teotihuacan. En el clásico tardío destacaron la
cultura maya en Centroamérica y la cultura zapoteca en el suroeste de México.
Hubo crecimiento de la población. Con esta vino la consolidación de las diferencias sociales
basadas en el linaje, es decir, que las personas ocupaban un lugar en la sociedad dependiendo
de quienes habían sido sus antepasados. Nobles y sacerdotes tenían el rango social más alto.
Incluso, a veces declaraban ser descendientes de dioses.
En las ciudades se construyeron grandes centros ceremoniales. Los templos tomaron forma de
pirámides escalonadas que podemos observar hasta el día de hoy en los sitios arqueológicos.
Se afianzó el uso de la escritura. Muestra de esto son los códices y las escrituras religiosas y
dinásticas en monumentos. También se utilizó la escritura y la numeración en los asuntos
comerciales.
El intercambio cultural propició la adopción de muchos dioses que pasaron a ser compartidos
por varios pueblos del clásico y que luego fueron incorporados por las civilizaciones del
posclásico.
Los mayas: cultura destacada del clásico
Los mayas han sido admirados en virtud de sus grandes logros culturales. En la civilización
maya se afinó la escritura jeroglífica, se hicieron complejos cálculos matemáticos gracias al
conocimiento del número cero, se construyeron ciudades con edificios extraordinarios y
contaron con astrónomos que estudiaron el cielo y podían predecir eclipses.
La civilización maya se desarrolló en los territorios que ahora ocupan Guatemala, Belize, la
zona occidental de Honduras y los estados mexicanos de Quintana Roo, Yucatán, Campeche y
el área oriental de Chiapas. Sin embargo, no llegó a conformarse como un imperio.
Esta cultura estuvo compuesta por varias ciudades independientes que tenían una lengua,
religión y tradición cultural común. Entre las ciudades mayas existían alianzas y rivalidades, por
lo que era habitual que se enfrentaran en guerras.
Algunas de las ciudades más importantes en este periodo fueron Copán, Palenque, Bonampak
y Tikal. A pesar de sus avances, numerosos centros urbanos mayas sufrieron un declive en el
siglo X y fueron abandonados. Los expertos explican que eso ocurrió por una combinación de
inestabilidad política y la degradación del medio ambiente que causó disminución de los
recursos para su sustento.
Bonampak mural
Pintura del siglo VIII en el templo de los murales en la ciudad maya de Bonampak. Varios
frescos de este templo detallan escenas como el pago de tributos con granos de cacao, fiestas,
guerras y sacrificios.
Vea también: Cultura Maya: historia, ubicación y características.
Cada vez fue más corriente que los dioses fueran representados como guerreros. A estos se
les ofrecían sacrificios humanos para mantenerlos satisfechos y para que hubiera, según se
creía, equilibrio en el universo. Las ciudades poderosas aprovechaban su posición para
aumentar el comercio. Al interior de las ciudades la desigualdad también se amplió entre las
castas dominantes y el pueblo común.
Tula contaba con un centro ceremonial compuesto de templos. En torno a este vivían las
personas con mayor rango social. Los toltecas dejaron testimonios de sus costumbres en los
muros y en los adornos de sus templos, en los que se pueden observar escenas de combates y
de sacrificios.
Los campesinos y los artesanos habitaban casas en las afueras de la ciudad. Estos formaban
barrios de personas que se dedicaban a oficios similares. Los artesanos de Tula tenían buena
reputación y trabajaban materiales como la obsidiana y la turquesa.
Los gobernantes hicieron uso de la fuerza militar para establecer relaciones comerciales
ventajosas. A partir del comercio, la guerra y la migración a otras regiones se expandió la
influencia tolteca hacia distintos lugares de toda Mesoamérica.
aTLANTES DE tULA
Los atlantes de Tula. Son esculturas toltecas hechas en bloques de basalto ensamblados.
Representan a Tlahuizcalpantecuhtli "el señor de la estrella del amanecer".
Los mexicas: cultura destacada del posclásico tardío
La civilización azteca-mexica tal vez sea la más famosa entre las culturas mesoamericanas,
pues se hallaba en la cúspide de su dominio cuando los españoles llegaron al valle de México
en 1519. Sus códices cuentan que provenían del norte, de un lugar mítico llamado Aztlán. En
aquel momento los habitantes de Aztlán eran llamados aztecas.
Pero ellos salieron de allí en busca de otro lugar para vivir y prosperar. Durante sus viajes
siguieron el llamado de su dios principal: Huitzilopochtli, quien les dio el nombre de mexicas.
Este les prometió nuevas tierras, poder y supremacía entre los pueblos. La peregrinación fue
larga y transcurrió entre los siglos XII y XIII, hasta que finalmente llegaron a las orillas del lago
Texcoco.
El sistema político imperial mexica permaneció en pie hasta la caída de Tenochtitlan en manos
españolas en agosto de 1521.