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LECTORADO

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EL LECTORADO EN LA

LITURGIA CATÓLICA
¿QUÉ ES EL LECTORADO?
Es un Ministerio Litúrgico
ejercido por los Laicos
Puede ser:
 INSTITUIDO (Sin Imposición de
Manos. MQ 1975)
ESTABLE (Sin institución)
OCASIONAL (En Celebraciones
específicas)
FUNCIONES DEL LECTOR:
 Proclamar la Palabra de Dios en las
Celebraciones Litúrgicas (excepto el Evangelio
que esta reservado para el Diacono, Presbítero
u Obispo)
 Recitar los Salmos Interleccionales o
Responsoriales
 Presentar las Intenciones en la Oración de los
Fieles
 Monitor o Comentador

 Catequista Litúrgico

 Instructor de Lectores Ocasionales


¿QUIÉNES PUEDEN SER
LECTORES?
Los Fieles Laicos que pueden estar
preparándose para el Sacramento del Orden o
no, que cumple con unas cualidades humanas,
técnicas y espirituales que le permiten realizar
la gran tarea de “PROCLAMAR LA PALABRA
DE DIOS”, y hacerla así, cercana a toda la
Asamblea.
A través de ellos, Dios comunica su
mensaje de salvación a todas las personas, por
tanto debe hacerlo reconociéndose indigno de
tal misión, pero con la humildad suficiente de
cumplirla con decoro, diligencia y entusiasmo
LA PROCLAMACIÓN DE LA
PALABRA DE DIOS
 La Palabra de Dios que se transmite por los labios
del Ministro hacen posible el "hoy" de la
salvación. En la Liturgia de la Iglesia la Palabra
halla su marco natural y su más fuerte resonancia
en el corazón del creyente, en el que se provoca,
alimenta y vigoriza la fe bautismal
 “El Lector, consciente de la responsabilidad
adquirida, procure con todo empeño y ponga los
medios aptos para conseguir cada día más
plenamente el suave y vivo amor, así como el
conocimiento de la Sagrada Escritura, para llegar
a ser más perfecto discípulo del Señor” (MQ 143)
TENER EN CUENTA QUE:
Tal y como señala la Ordenación de las Lecturas
de la Misa (1981): el Lector tiene un ministerio propio
en la celebración Eucarística, ministerio que debe
ejercer él, aunque haya otro ministro. La Asamblea
Litúrgica necesita de Lectores, aunque no estén
instituidos para esta función, conviene que haya
algunos Laicos, los más idóneos, que estén preparados
para ejercer este Ministerio.
Para que los fieles lleguen a adquirir una estima
suave y viva de la Sagrada Escritura por la audición de
las lecturas divinas, es necesario que los Lectores que
ejercen tal ministerio, sean de veras aptos y
diligentemente preparados. Es necesario que acojan la
Palabra de Dios en la meditación personal para que
puedan transmitirla con fidelidad y unción a sus
hermanos
LAS LECTURAS EN
LA EUCARISTÍA
EL AMBÓN
 Es el Altar de la Palabra de Dios, es el
lugar reservado desde donde se proclama
la Palabra
 Merece ser tratado con sumo respeto
 No es conveniente hablar ni
leer cosas distintas a la
Palabra Santa desde él
 Debe ser un lugar fijo y
estable dentro de la
ambientación del Templo
EL LECCIONARIO

 Son varios volúmenes volúmenes


clasificados en Ciclos de de
lecturas: Domingos, entre semanas
y Fiestas especiales
 Los Domingos y Solemnidades, se Proclaman 3
lecturas: Profética, Apostólica y el Evangelio, además
de un Salmo Responsorial
 En el Tiempo Pascual, la primera lectura se toma de
Libro de los Hechos de los Apóstoles
 En las Ferias o durante el año, se leen 2 lecturas, la
primera del Antiguo Testamento, menos en Pascua que
es de los Hechos y el Evangelio
 Existen tres Ciclos de Lecturas, con
duración de un año cada uno,
determinado por la misma Palabra de
Dios, en estos se leen los Evangelios
Sinópticos y el de San Juan de la
siguiente manera:
 Ciclo A, Evangelio de San Mateo
 Ciclo B, Evangelio de San Marcos
 Ciclo C, Evangelio de San Lucas
 El Evangelio de San Juan se reserva
para el Tiempo de Cuaresma y Pascua en
los tres Ciclos
 En Adviento, Cuaresma y Pascua, las
lecturas son las mismas en cada Ciclo
 En las 34 semanas del Tiempo Ordinario,
el Evangelio se repite en un solo ciclo,
mientras que la primera lectura se
reparte en dos ciclos que se leen
alternamente en Años Pares e Impares
 La composición Armónica se usa en
Adviento, Cuaresma y Pascua, mientras
que en el Tiempo Ordinario, se hace
lectura semicontinua
EL SER Y EL
QUEHACER
DEL
LECTOR
¿QUÉ SE REQUIERE PARA SER UN
LECTOR?
 Formación Bíblico-litúrgica
 Formación Técnica
 Profunda Espiritualidad
 Ser persona Seria y Responsable capaz de
asumir y honrar los compromisos que
adquiere
 Llevar una vida recta y poder dar
testimonio de Dios, de quien se hace vocero
en el Ministerio que ejerce, dentro y fuera
de la Iglesia
¿Y ENTONCES?
 ¿Qué vestimenta debe usar el Lector?
 ¿Quién asigna a los Lectores?
 ¿Cuántos Lectores deben
programarse para una
celebración
Eucarística?
 ¿Dónde deben sentarse
los Lectores?
 ¿Cómo debe prepararse
un Lector?
ORIENTACIONES DE CARÁCTER
TÉCNICO
 1.- Condiciones materiales para una buena
proclamación
 2.- Técnicas de proclamación

 2.1.- Preparación de la lectura

 2.2.- Articulación y tono

 2.3.- Ritmo de proclamación

 2.4.- Leer con expresión.

 3.- Actitud corporal

 4.- El silencio en el ejercicio del Ministerio


del Lector
¡RECUERDE!
No puede haber mayor
dignidad que ser llamado por
Dios y dar testimonio de Él en
el servicio, porque:
“No hemos venido a
ser servidos, sino a
servir”
¡GRACIAS, DIOS
LES BENDIGA!

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