Modelo Sistemico Estructural
Modelo Sistemico Estructural
Modelo Sistemico Estructural
“Modelo Sistémico
Estructural”
CUSCO – PERÚ
2012- II
INTRODUCCIÓN
A través del tiempo, se ha visto a la terapia sistémica como un gran pilar dentro del
tratamiento y terapia familiar, por tal motivo es que éste presente trabajo se basa
en los aportes de Minuchin, el cual no solo se enfoca en el individuo sino en el
individuo como parte de un sistema que interactúa con él y del cual generará la
mayoría de sus conductas que determinarán su vida futura, al igual que la serie de
factores que se ven inmersas en estas, enfocando así un modelo de tratamiento
eficiente, pero a su vez prolongado. A continuación daremos a conocer todos y cada
uno de los elementos que comprenden esta teoría.
MODELO SISTÉMICO ESTRUCTURAL
1 Precedentes del modelo sistémico
En el marco de los procedimientos clínicos, los psicoterapeutas sistematizados son un
logro reciente en comparación con la mayor parte de las actividades clínico–terapeutas,
la psicoterapia familiar, es dentro de ellas, una adquisición aun más próxima en el
tiempo. Como referencia se puede señalar, que el soporte técnico y conceptual de la
terapia familiar es un logro posterior al primer conflicto mundial, y que la psicoterapia
familiar sistémica no se desarrollo hasta bastante mediada la presente centuria y su
consolidación no se alcanza hasta que ya se ha iniciado el último tercio de nuestro siglo.
En modo alguno quiere decir que la familia del paciente no haya estado presente en el
desarrollo de los distintos modelos de psicoterapia sistematizada. Pero si, desde luego
que no lo ha estado con una identidad propia que no lo ha estado de una forma
operativa en el contexto del proceso terapéutico mismo.
Para llegara a la actual terapia familiar sistémica se ha hecho un largo camino que partió
de planteamientos que tienen un soporte epistemológico causal, en los que se postula
la noción causante nocivo de un efecto morbígeno: conceptos de linealidad pasando
por la consideración de una causalidad de acción reciproca a propósito de los vínculos
familiares en el conocimiento de los principios de la finalidad causalidad teleológica y en
la consolidación de los mecanismos reguladores de los procesos de relación nocivos y
por ende a la teoría familiar sistémica.
Puede aceptarse, que este es el desarrollo que han tenido los conocimientos y el
abordaje de las familias: lo que ha acontecido en su mayor parte en compromiso con las
propias técnicas de psicoterapia sistematizada al menos que hasta en la década de los
cincuenta empiezan a aparecer las primeras experiencias específicas de terapia familiar.
Por demás este curso ha corrido paralelo al propio desarrollo del pensamiento de la
tecnología y de las estructuras sociales en nuestro siglo y ha estado presidido en sus
momentos críticos por diversos principios orientadores, la efectividad en el inicio de las
técnicas dinámicas - profundas particularmente en el psicoanálisis: la productividad o la
constancia, en la incorporación de las técnicas grupales o comunicacionales y la
regularidad cuando se impongan finalmente las teorías sistémicas o las técnicas
psicoterapeutas; efectividad, productividad y regularidad son las advocaciones que
presiden los momentos críticos del desarrollo reciente de nuestra cultura pero también
son las finalidades que en estos momentos persigue el esfuerzo humano por el dominio
técnico de la naturaleza y que finamente se integran en los planeamientos sistémicos.
En este contexto del desarrollo de la psicoterapia, los conocimientos acerca de la familia
se derivan mas de las percepciones que el paciente tiene de la misma que de la
observación directa que los terapeutas hagan de ella la familia como estructura real,
queda fuera del campo de los intereses teóricos y terapéuticos inmediatos.
A principio de los años 30 algunos terapeutas han tomado contacto con la familia del
paciente directa o indirectamente. Sobre los investigadores van a tener una influencia
decisiva 2 grupos de cuestiones:
- La consideración de que los efectos negativos ejercidos sobre el niño por sus
cuidadores son dignos de estudio.
- El reconocimiento de la influencia de los factores socioculturales que es
propugnada por algunos disidentes de la orientación psicoanalítica ortodoxa
que son la puerta de entrada a la consideración del ambiente real y de los
cambios y sucesos de la vida familiar.
Así parten los investigadores de una concepción en la que se pensaba que la
problemática de la familia era causada por el miembro enfermo. Para más adelante
postular que es la presencia de una madre patógena y más tarde la de un padre
inadecuado las que engendran la problemática del hijo.
Los estudios con una sistemática y con un resultado bien definido no aparecen hasta
una década más tarde. David Levy (1943) fue uno de los primeros en establecer con
claridad la relación entre un rasgo ‘’supuestamente patógeno de la madre’’ y la parición
te trastornos en la conducta de los hijos; también sobre la sobreprotección de la madre,
dentro de 2 tipos básicos: la madre sobreprotectora dominante y la indulgente. De ahí
Frieda Fromm-Reichman (1948) habla sobre la madre esquizofrenógena, que las
describe como agresivas, dominantes, inseguras y rechazantes. Inicialmente el foco de
atención de los investigadores se centró en la figura materna, pero luego la figura
paterna ocupa el centro de atención, también como esquizofrenógenos, dominantes y
sádicos.
Se plantea que determinados medios familiares son capaces de producir trasmisión
psicopatológica de padres a hijos, particularmente aquellas que se caracterizan porque
se producen con elevadas frecuencias en el seno de la familia las situaciones de
violencias físicas o psicológicas.
Debemos señalar que tanto los trabajos de este último grupo, referidos a los sucesos y
situaciones de la vida, como los anteriores en relación con la acción nociva de algún
miembro de la familia se encuadran en una concepción metodológica
fundamentalmente causal y se sitúan aquí en la perspectiva genética y dinámica del
psicoanálisis es decir en la consideración fundamentalmente en la repercusión
intrapsíquica de estos factores.
En todo caso conviene señalar, que la revisión crítica de estos trabajos muestran
deficiencias de control experimental en la mayoría, lo que induce a mantenerse
cauteloso a la hora de extraer conclusiones firmes de estos estudios. El tercer grupo de
trabajo se caracteriza por centrarse en la investigación de las relaciones morbosas.
Cuando los autores han escapado de la fascinación por la dinámica intrapsíquica ya sea
de la madre o de hijo para interesarse por la relación, se encuentran sin embrago con
una gran dificultad para trasvasar a la práctica terapéutica tales planteamientos. El
concepto de lazos simbólicos se vulgariza para designar ciertos tipos de relación
patógena madre-hijo, pero en la práctica aun no puede escapar al influjo de a teoría
psicoanalítica en todos sus extremos.
2 Paradigma del modelo
A través de la exposición del siguiente pensamiento de Minuchin, se pueden sacar los
elementos fundamentales del Enfoque del Modelo Estructural: “El enfoque estructural
de la familia se basa en el concepto de que una familia no se reduce a los aspectos
biopsicodinámicos de sus miembros”. Los miembros de una familia se relacionan de
acuerdo con ciertas disposiciones que gobiernan sus transacciones. Estas disposiciones
aunque por lo general no son establecidas en forma explícita, constituyen un todo: “La
estructura de la familia”. Es decir, las relaciones del núcleo familiar están dadas por
disposiciones que son las reglas que gobiernan la familia como un sistema abierto.
(Minuchin 1998).
Aunque el modelo aparece como muy rígido, en realidad es muy flexible pues incluye
diversas maneras en que pueden organizarse las estructuras familiares, dependiendo
del nivel socioeconómico o de familias de diversas culturas, respetando sus propias
costumbres para entender la naturaleza de la organización familiar.
3 Representantes del modelo
Salvador Minuchin llevo a cabo su trabajo inicial en la Child Guidance Clinic of Filadelfia
en Estados Unidos. Las personas con las que trabajo inicialmente fueron Jay Haley (quien
posteriormente desarrollo su modelo al que denomino estratégico), Jorge Colapinto,
Braulio Montalvo, Harry Aponte, Bernice Rosman. En el año 1965 Minuchin inició su
labor como director de la Philadelphia Child Guidance Clinic, que por mucho tiempo
estuvo a la vanguardia como centro de terapia familiar y de entrenamiento para
terapeutas. En esta clínica, Minuchin diseñó, junto con otros colegas, programas de
entrenamiento para terapeutas y para personas no profesionales que trabajan con
poblaciones de comunidades marginadas.
En 1969, junto con Haley, Montalvo y Rosman, desarrolló programas de entrenamiento
para terapeutas que hacían énfasis en la supervisión en vivo, en el trabajo sobre la
experiencia directa y en el uso de videograbaciones para aprender y aplicar las técnicas
de la terapia estructural. Colapinto colaboro con Minuchin durante muchos años,
desarrollando proyectos de prevención y atención a familias marginadas y a familias
“de acogida” (Foster families). También se ha dedicado a la enseñanza y a la difusión del
modelo estructural para su aplicación a distintos escenarios que impactan el desarrollo
de niños y de familias.
Pat Minuchin, su esposa, ha desarrollado investigación y proyectos de atención
psicosocial para poblaciones marginadas y de muy bajos recursos, enfocándose a niños
y a familias. (Minuchin, Colapinto y Minuchin, 1999).
3.1 SALVADOR MINUCHIN: Nació en Argentina, en el año 1921, creció en una
familia de inmigrantes judíos-rusos. Se graduó en 1946 de la Facultad de
Medicina de la Universidad de Córdova y en 1950 se trasladó a los EE.UU. para
estudiar psiquiatría. Es un destacado terapeuta familiar y creador de la
"terapia familiar estructural" (1974).
Sus concepciones acerca de la importancia de las estructuras y los límites en
los contextos familiares se impusieron en el medio de los psicoterapeutas de
los años '60 que habían comenzado recientemente a tratar familias en vez de
a personas individuales; su modelo estructural comprende a la familia como
un sistema que tiende a la defensa de su estabilidad ante los cambios de
condiciones e influencias internas y externas lo que suele favorecer la
disfuncionalidad mediante mecanismos de mantención del sufrimiento en la
familia o de alguno de sus miembros. El restablecimiento de jerarquías, la
formulación de límites claros, la definición de roles y funciones y la disolución
de alianzas o triángulos ayudaría regresar a una estructura familiar funcional.
Minuchin fue académico de la cátedra de pediatría y psiquiatría infantil en la
Universidad de Pennsylvania y psiquiatra jefe de la clínica infantil y director
de la Child Guidance Clinic en Philadelphia (1965). Junto Jay Haley, Braulio
Montalvo y Bernice Rosman desarrolló un programa de capacitación y
entrenamiento para terapeutas familiares, el que ya entonces incluía las
sesiones supervisadas y las grabaciones en video de las sesiones de terapia.
En 1988 fundó en Nueva York el Family Studies Inc., un instituto dedicado a la
formación de terapeutas familiares. Hasta hace poco y a la avanzada edad de
80 años continuaba trabajando allí en la formación de nuevos profesionales.
En la actualidad vive en la ciudad de Boston.
3.2 PATRICIA MINUCHIN: Esposa de Salvador Minuchin, actualmente se sabe que
es especialista en nutrición y medicina del deporte y labora en el país de
Argentina, trabaja en forma interdisciplinaria con distintos profesionales con
los cuales existe un lenguaje común, que es la Actividad Física. Esto asegura
una mejor atención, personalizada y con un nivel altamente calificado para
cualquier deportista que desee mejorar su performance, o aquella persona que
desee realizar actividad física para mejorar su salud y lo desee hacer sin correr
riesgos.
4 Postulados e ideas rectoras
Una visión sistémica estructural permite la exploración de las interacciones de las
personas con relación a los distintos contextos de los que forma parte; permite
experimentar las formas en que los miembros de la familia se sostienen y califican
mutuamente. Al considerar a la persona como un miembro de distintos contextos
sociales, el problema se ubica entre el sujeto y sus contextos, más que en procesos
internos del paciente. La familia constituye un factor significativo en el proceso de
adaptación individual y social, determina respuestas de sus miembros a través de
estímulos que provienen desde el interior y el exterior, y su organización y estructura
tamizan y califican las experiencias de las personas. Un miembro de la familia responde
a las tensiones que afectan a la familia y, a la vez, la familia responde a los cambios de
cada uno de sus miembros, por medio de procesos de adaptación continuos.
Minuchin (1989) plantea los siguientes axiomas de la terapia estructural sistémica:
…La vida psíquica de un individuo no es exclusivamente un proceso
interno. El individuo influye sobre su contexto y es influido por éste por
secuencias repetidas de interacción. Un miembro de una familia adapta un
sistema social: sus acciones están regidas por las características del sistema y
estas características influyen los efectos de sus propias acciones.
…Las modificaciones en una estructura familiar contribuyen a la
producción de cambios en la conducta y los procesos psíquicos internos de los
miembros del sistema.
…Cuando un terapeuta trabaja con un paciente o con la familia del
paciente, su conducta se incluye en ese contexto. Terapeutas y familia forman
un nuevo sistema (terapéutico) que influye en la conducta de las personas.
La terapia estructural se concentra en el proceso de retroalimentación entre las
circunstancias y las personas implicadas. La terapia recurre a técnicas que alteran el
contexto inmediato de las personas de tal modo que sus posiciones cambian. Un cambio
en la posición de una persona en relación con sus circunstancias, con su contexto
familiar, constituye una modificación de su experiencia subjetiva.
4.1 TEORÍA GENERAL DE SISTEMAS: Entre los seres humanos, unirse para
coexistir significa alguna suerte de grupo familiar. La familia es el contexto
natural para crecer y para recibir auxilio. Es un grupo natural que en el curso
del tiempo ha elaborado pautas de interacción las cuales constituyen la
estructura familiar que a su vez rige el funcionamiento de los miembros de la
familia, define su gama de conducta y facilita la interacción recíproca.
(Salvador Minuchin, HCharles Fishman, 2006).
Las tareas esenciales de la familia son apoyar a la individuación al tiempo de
proporcionar sistema de pertenencia, para lo cual la familia necesita de una
estructura viable. Tradicionalmente, las ciencias exactas han sido
progresivamente analíticas. La ilusión de este método como el único fiable, por
lo menos, el más fiable, hizo que las ciencias de la salud diseccionaran cada vez
más el organismo humano (aislándolo, además, de su entorno vital). Frente a
lo propuesto por la teoría analítica surge la teoría general de los sistemas como
un intento de comprender el funcionamiento de los organismos de una forma
global.
La elaboración del paradigma de la teoría general de sistemas acarreó pasar
del interés por el carácter individual al enfoque del contexto de interacción.
Esta iniciativa provino de la biología, la cibernética y la teoría de la
información transformando el clásico modelo de pensamiento lineal causa-
efecto a un modelo que considerara una causalidad integridad orgánica, y la
complejidad de toda entidad viva, supone por otra parte una organización
sistémica de esa complejidad. Las partes interdependientes de toda entidad
viva estaban organizadas a través de pautas relacionales. Así de esta
organización surgen reglas y rutinas operacionales de relación reciproca entre
las partes subordinadas y a su vez su influencia sobre el sistema global. De este
paradigma sistémico de la actividad humana se fundamentan los términos
teóricos de la terapia familiar estructural.
Un sistema es un conjunto de unidades interrelacionadas entre sí, cada una de
ellas con: diferente nivel de complejidad, límites de permeabilidad variables,
sistema de comunicación interno, y medio de comunicación con el exterior. La
mayoría de los sistemas son abiertos ya que establecen algún tipo de
intercambio con su entorno; sin embargo, se podría hablar de sistemas
cerrados en aquellos casos en los cuales el intercambio sería escaso o
prácticamente nulo. En el caso de la familia su contexto incluye clase social,
etnicidad, cultura determinada por su escenario geográfico y su tiempo dentro
de la historia universal. Todo sistema está constituido de subsistemas mismos
que construyen sus reglas y rutinas manteniendo entre sí una relación
dinámica organizadas alrededor de la ejecución defunciones para la
supervivencia del sistema total.
4.2 SISTEMAS ABIERTOS Y CERRADOS:
Sistema Abierto: Hay una relación permanente con su medio ambiente. Se
intercambia energía, materia, información. Existe interacción constante entre
el sistema y el medio ambiente.
Sistema Cerrado: Hay muy poco intercambio de energía, de materia, de
información, etc., con el medio ambiente. Utiliza su reserva de energía o
potencial interno.
Los sistemas abiertos tienden hacia una evolución constante y un orden
estructural, en contraposición a los cerrados en los que se da una tendencia a
la indiferenciación de sus elementos y al desorden, hasta alcanzar una
distribución uniforme de la energía.
Los sistemas vivos son “Sistemas Abiertos” pues intercambian con su entorno
energía e información. Ejemplos de éstos serían: una célula, una planta, un
insecto, el hombre, un grupo social. La familia, por tanto, la consideraremos un
Sistema Abierto.
4.3 RASGOS PRINCIPALES DEL PARADIGMA SISTÉMICO: Entre los más
importantes tenemos:
4.3.1 Totalidad y No Sumatividad: El todo es más que la suma de sus partes; esto es:
existen ciertas propiedades del sistema que derivan no sólo de los elementos
en sí mismos, sino de la forma en que estos se relacionan. Cada una de las
partes de un sistema está relacionada de tal forma con las demás que un
cambio en una de ellas desencadena un cambio en todas y cada una de las
demás y, por tanto, en el sistema como un todo.
4.3.2 Homeostasis: Es el estado interno de un sistema que se mantiene
relativamente constante mediante la autorregulación. Define la estabilidad
del sistema o su estado de equilibrio y su tendencia a mantenerse estable
mediante dos formas diferentes:
a) Retroalimentación positiva: Que tiende a modificar la estructura y
funcionamiento del sistema produciendo crecimiento y diferenciación.
b) Retroalimentación negativa: Que tiende a mantener el sistema estable
proporcionando unión, sentido de pertenencia y apoyo.
4.3.3 Equifinalidad/multifinalidad: El concepto de equifinalidad defiende que el
estado de un sistema está determinado por la naturaleza de la relación
(proceso) y no por sus condiciones iniciales, de manera tal que, distintas
condiciones iniciales pueden llevar aun mismo estado del sistema. El
concepto opuesto, el de multifinalidad, hace referencia al hecho de que desde
un mismo punto inicial se puede llegar a diferentes estados finales.
4.3.4 Calibración: La regulación por calibración consiste en el pasaje del sistema de
un estado a otro (se la puede comparar con el modelo del termostato) y se
constituye por las reglas que gobiernan la estabilidad del sistema. Un
enfoque del proceso familiar desde la perspectiva de la teoría general de
sistemas es una opción para comprender la unidad de la familia y la
diversidad del individuo, siempre con la perspectiva de que toda forma de
vida cambia, cuidando de conservar su equilibrio y regularidad en su
intercambio adaptativo con el contexto ambiental. Es preciso que se
promueva cambio y crecimiento, pero con un ritmo que preserve un sentido
de mismidad. En este sentido toda familia parecerá ser siempre la misma, sin
embargo que sutilmente promueve cambios en el interior de los subsistemas
existentes.
5 Objetivos
El terapeuta se asocia con la familia con el objeto de cambiar la organización de la
misma, de tal modo que la experiencia de sus miembros se modifique.
Según Minuchin, la terapia estructural de familia es una terapia de acción:
Una transformación de la estructura familiar permitirá posibilidad de cambio…
…El sistema de la familia está organizado sobre la base del apoyo,
regulación, alimentación y socialización de sus miembros. El terapeuta se asocia
a la familia no para educarla o socializarla sino para reparar o modificar su
funcionamiento para que esta pueda desarrollar las tareas con mayor eficacia…
…El sistema familiar tiene sus propiedades de autoperpetuación. El
proceso que el terapeuta inicia se mantiene por los mecanismos de
autorregulación de esta. Una vez que se ha producido un cambio, la familia lo
preservara, modificándola retroalimentación que continuamente califica o
valida las experiencias de sus miembros (Minuchin, 1989).
Minuchin señala que la familia es una unidad de desarrollo que enfrenta una serie de
tareas de desarrollo. Estas difieren de acuerdo con los parámetros de las diferencias
culturales. La familia experimenta cambios y acomodaciones a lo largo de días distintas
etapas del proceso de desarrollo familiar. En las diferentes etapas la familia va
modificando su estructura. Se enfrenta al desafío de cambios internos y externos y a
mantener, a la vez, su continuidad. Debe estimular el crecimiento de sus miembros
mientras se adapta a una sociedad en transición.
Para el autor de la terapia estructural, la familia cumple dos objetivos:
- Uno interno, que implica la protección psicosocial a sus miembros.
- Uno externo, que se refiere a la acomodación a una cultura y transmisión de
ésta.
La familia puede cambiar y a la vez mantener la continuidad suficiente para la
socialización de sus miembros.
La familia imprime a sus miembros:
- Un sentido de identidad (pertenencia).
- Un sentido de separación (individuación).
El sentido de pertenencia se acompaña con una acomodación del niño a los grupos
familiares y con la asunción de pautas transaccionales en la estructura familiar que se
mantienen a través de la vida. El sentido de separación se logra a través de la
participación en diferentes subsistemas familiares, en diferentes contextos familiares y
extrafamiliares.
La familia posee una estructura que solo puede observarse en movimiento. Las familias
tienen preferencia por algunas pautas suficientes para responder a requerimientos
habituales. Su fortaleza depende de su capacidad para movilizar pautas alternativas
cuando las condiciones externas o internas exigen restructuración. Una familia se
adapta al estrés de tal modo que este mantiene la continuidad de la familia al mismo
tiempo que permite restructuraciones. Si una familia responde al estrés con rigidez, se
manifiestan pautas disfuncionales.
6 Familia como sistema
Constituye una unidad, un conjunto de interacciones, no como una suma de
individualidades o características de sus miembros., sino de las relaciones que entre
ellos mantienen. Esta concepción de la familia como sistema nos permite sustituir el
análisis causa-efecto por el análisis de las pautas y reglas de interacción familiar
reciproca que va a permitir llegar al centro de los conflictos familiares, por tanto a las
causas de la disfunción familiar.
Igualmente la familia tiende a autorregularse con mecanismos de dos tipos: El
decrecimiento/cambio frente al de autorregulación/homeostasis. La alternancia de
estas dos fases señala el grado de adaptabilidad del sistema, mientras que la
predominancia de una de ellas anticipa la aparición de alguna crisis.
En algunos casos la enfermedad puede ser un mecanismo de autorregulación del
sistema, una alternativa que presiona en dirección de la estabilidad. Al hablar de
funcionamiento familiar, existen diversos criterios; para algunos autores (Carter
Umbarger) la disfuncionalidad familiar se hace presente cuando existe rigidez en las
reglas impidiendo ajustarse a su propio ciclo y al desarrollo de sus miembros, otros
señalan como característica la incompetencia familiar y el incumplimiento de sus
funciones básicas.
En general las familias funcionales presentan las siguientes características:
a) Cumplimiento de su función económica, biológica y cultural-espiritual.
b) Que el sistema familiar permita el desarrollo de la identidad personal y la
autonomía de sus miembros, manteniendo los límites claros (fronteras
psicológicas entre las personas que permiten preservar su espacio vital) de
tal manera que no se limite la independencia, ni haya una excesiva
individualidad promoviendo el desarrollo de sus miembros y no se generen
sistemas de insatisfacción o infelicidad.
c) Que en el sistema familiar exista flexibilidad de las reglas y roles para la
solución de los conflictos, lo que conlleva a la flexibilidad o
complementariedad del rol, que los miembros se complementen
recíprocamente en el cumplimiento de las funciones asignadas, lo contrario,
la rigidez provoca equitación de los conflictos.
Es importante analizar la jerarquía o distancia generacional que se da de una
manera horizontal (cuando se tiene el mismo poder) o de una manera
vertical (diferentes niveles de jerarquía) así por ejemplo en la relación
matrimonial debe existir un sistema de jerarquía horizontal y en la relación
padres-hijo debe ser la jerarquía vertical cuando se encuentran bajo la tutela
de éstos.
d) Que en el sistema familiar exista una comunicación clara, coherente y
afectiva que permita compartir los problemas. Por lo general cuando existe
la comunicación de los dobles mensajes hay conflictos no resueltos como
consecuencia de las disfunciones entre otros vínculos familiares como las
reglas, roles, jerarquías, etc.
e) Que en el sistema familiar sea capaz de adaptarse a los cambios constantes
que todo sistema vivo enfrenta ya que es un continuo equilibrio-cambio,
teniendo que modificar sus límites, sus sistemas jerárquicos, sus roles y
reglas.
Existen dos tipos de tareas específicas y constantes: tareas de desarrollo: que
son las etapas relacionadas con su ciclo vital y tareas de enfrentamiento que
se derivan de las llamadas crisis familiares no transitorias o paranormativas.
No se puede hablar de funcionalidad familiar como algo estable y fijo, sino
como de procesos que tiene que reajustarse constantemente.
Resumiendo se concluye que una familia funcional es la que promueve un
desarrollo favorable a la salud para todos sus miembros, siendo necesario
que posea jerarquías, limites, roles claros y definidos, comunicación abierta
y explicita y capacidad de adaptación al cambio.
Con esta concepción sistémica se concibe que las relaciones que se dan entre
los miembros de una familia tengan una causalidad circular, es decir, nadie
es culpable y nadie es víctima.
Metafóricamente se la puede comparar como un grupo de personas, todas
en un bote, cuando un miembro nuevo ingresa en él, el bote se desequilibra
un ejemplo seria nacimiento de los hijos o un abuelo que se muda a la casa.
Para que el bote consiga adquirir su equilibrio anterior o una nueva armonía
las personas tienen que moverse, asumir nuevos y diferentes roles. A la par
cuando alguien sale del bote éste entra en crisis y su equilibrio se trastorna
puede ser un adolescente en pleno proceso de su autonomía, un divorcio,
muerte.
La familia es un sistema abierto gobernado por reglas y con límites que van
desde los muy rígidos a los muy difusos inmerso en un suprasistema y
compuesto por subsistemas.
7 Estructura familiar
‘'Es el conjunto invisible de demandas funcionales que organizan los modos en que
interactúan los miembros de la familia’’ (Minuchin).
El sistema familiar se expresa a través de pautas transaccionales cuyo funcionamiento
se da con bases en reglas acerca de quiénes son los que actúan, con quien y de qué
forma. Cuando se sobrepasan los índices de equilibrio familiar es cuando puede
representarse el síntoma. Es aquí donde el terapeuta tiene como interrogante: ¿Cuáles
son las interacciones que se dan dentro de una estructura especifica que llevaron a una
desviación tal en la que el síntoma es ‘’necesario’’ como un mecanismo regulatorio para
que se mantenga la estabilidad familiar?
De acuerdo con lo señalado, la familia se va adaptando a circunstancias cambiantes,
ante las cuales experimenta estrés, ya sea provocado por situaciones del contexto o de
sus miembros, o bien a partir de los efectos derivados de procesos transicionales por las
que van pasando.
Ante la necesidad de adaptación continua, la familia debe contar con una gama de
pautas transaccionales alternativas y con flexibilidad para tranquilizarlas, de tal manera
que pueda cambiar de acuerdo con las demandas externas e internas. Cuando la familia
con cuenta con los elementos para el cambio y la adaptación, puede desarrollar
mecanismos homeostáticos para contrarrestar las dificultades para aceptar cambios.
Entre estos mecanismos podrían surgir síntomas que adquieren una función en los
sistemas y se conectan con estructuras familiares específicas.
7.1 CARACTERÍSTICAS:
7.1.1 La Protección Psicosocial de sus Miembros (Interno): En todas las culturas, la
familia imprime a sus miembros un sentimiento de identidad independiente.
La experiencia humana de identidad posee dos elementos: un sentimiento de
identidad y un sentido de separación. El sentimiento de la identidad de cada
miembro se encuentra influido por su sensación de pertenencia a una familia
específica. El sentido de separación y de individuación se logra a través de la
participación en diferentes subsistemas familiares en diferentes contextos
familiares, al igual que a través de la participación en grupos extra familiares.
El niño y la familia crecen en conjunto, y la acomodación de la familia a las
necesidades del niño delimita áreas de autonomía que él experimenta como
separación.
7.1.2 La acomodación y transmisión de una cultura (externo): Aunque la familia es
matriz del desarrollo psicosocial de sus miembros, también debe
acomodarse a la sociedad y garantizar alguna continuidad a su cultura. Esta
función social ha sido fuente de ataques contra la familia por movimientos
contraculturales.
7.2 FUNCIONES:
7.2.1 Eje sincrónico del espacio: De relaciones del sistema con supra o infra
sistemas donde la diferenciación y coordinación expresan dicha apertura-
cierre. La familia tiene la función de articulación y tapón entre el individuo y
la sociedad. Asegura por una parte la función de apertura: socialización,
pertenencia e integración, que implica “estar con”; y por otra la función de
cierre: individualización que implica “ser uno mismo”.
7.2.2 Eje diacrónico del tiempo: Donde el cierre conservación y la apertura al
cambio. La familia asegura la continuidad y el cambio. Esto se nota en los
procesos rápidos de los hechos cotidianos y en aquellos más lento del
desarrollo de una familia. Así asegura la continuidad del hombre, del género
humano. La familia es una comunidad que nace, crece: procreando y criando
niños, da nacimiento a otras familias, y luego decrece y muere, mientras
permanece de manera transgeneracional, permanece pero con cambio.
Perpetúa a la generación siguiente pero al mismo tiempo permite el cambio,
la adaptación a distintas circunstancias, la evolución.
8 Elementos que permiten evaluar la estructura familiar
Según Minuchin algunos sistemas familiares pueden producir y mantener síntomas en
uno o varios miembros en conexión con estructural familiares específicas. Propone el
cambio de un sistema para poder establecer un funcionamiento adecuado; requiere la
identificación de la estructura familiar y la comprensión de la forma como el o los
síntomas se conectan con dicha estructura. Los elementos de esta estructura son:
8.1 SUBSISTEMAS: A través de estos, la familia desempeña sus funciones, dentro
de los cuales se tiene distintos niveles de poder y se aprende habilidades
diferenciales; pueden estar formados por: Generación, genero, interés,
función, etcétera. Básicamente son tres los subsistemas que se encuentran en
la familia:
8.1.1 Conyugal: Formado por la pareja, alrededor del cual se forman todas las
relaciones. Con este subsistema comienza y termina la familia, lleva
implícitos tareas de complementariedad y de acomodación mutua; negocian,
organizan las bases de la convivencia y mantienen una actitud de
reciprocidad interna en relación con otros sistemas. Este subsistema posee
un límite que lo protege de la interferencia y necesidades de otros sistemas.
Los adultos deben poseer un territorio psicosocial propio, un refugio, un
sostén emocional ante los múltiples requerimientos de la vida.
8.1.2 Paternal: Formado por padres e hijos. Es el poder ejecutivo y ejerce las
funciones organizativas básicas. Son básicos los principios de autoridad,
jerarquía y diferenciación de sus miembros, comparten sentimientos de
unión de apoyo, de guía y de control. El subsistema conyugal hade desarrollar
habilidades de socialización, nutritivas y educacionales.
8.1.3 Fraternal: Formado por los hermanos. Aquí los niños aprenden a
relacionarse, apoyarse, aislarse, a negociar, cooperar, competir, a conquistar
amigos y aliados, a lograr reconocimiento por sus habilidades. Estas
relaciones son muy significativas y constituyen un aprendizaje donde se
prueba la competición. Puede ser de hecho a la vez una fuente de conflictos,
pero también de rivalidad constructiva.
11.1.3 Fases:
a) Primera etapa.- El terapeuta sigue las reglas culturales de relación social.
En esta etapa la preocupación del terapeuta es lograr que la familia se sienta
cómoda. Cuando la familia toma asiento, el terapeuta familiar debe prestar
atención al modo en que se ubican. A menudo, su ubicación puede
proporcionar algunos datos acerca de los vínculos existentes en la familia.
El terapeuta puede utilizar los primeros minutos para charlar
informalmente. Si se utiliza algún equipamiento especial, como grabadores
o filmadoras, debe explicar de qué se trata.
b) Segunda etapa.- El terapeuta interroga a cada miembro de la familia acerca
de cuáles son en su opinión los problemas de la familia. La primera pregunta
del terapeuta es planteada, por lo general en términos genéricos, y no es
dirigida claramente a ningún miembro de la familia en particular. El
terapeuta está atento al contenido" de la presentación del problema por
parte de la familia, pero sobre todo, observa el modo en que se comporta la
familia. En esta etapa, el terapeuta debe aceptar simplemente lo que le
dicen, aunque puede preguntar sobre un punto que le parezca confuso. En
esta segunda etapa el terapeuta sólo quiere conocer la opinión de cada
entrevistado. Por tanto, todos deben tener oportunidad de manifestarse.
c) Tercera etapa.- El terapeuta debe dejar de ser el centro y conseguir que
todos dialoguen sobre el problema. Es decir, deberá procurar que todos los
miembros se "trencen" cada vez más en la conversación. Su principal
preocupación es la de intentar comprender el modo en que funciona la
familia. Al orientar a determinados miembros para que hablen entre sí pone
a prueba sus "hipótesis" acerca del modo en que la familia funciona. Indaga
áreas de discrepancia, observa de qué modo se maneja esa discrepancia y
cómo resuelve la familia un problema. La familia ha acudido a terapia
debido a su fracaso en la resolución del problema con el paciente
identificado. Al ampliar la visión del problema, el terapeuta hace surgir la
esperanza de que un modo diferente de abordar el problema permitirá
encontrar una solución. Finalmente, todas las operaciones terapéuticas
deben efectuarse teniendo una clara conciencia del hecho de que la primera
regla de la estrategia terapéutica es la de que la familia parta con el deseo
de volver en la sesión siguiente.
d) Cuarta etapa.- Al final de la primera entrevista es importante obtener de la
familia una formulación suficientemente clara de los cambios que quieren
alcanzar mediante la terapia: El problema a ser resuelto por el terapeuta
debe ser uno que la familia desee solucionar, pero planteado en forma tal
que lo haga resoluble. Si al término de la primera entrevista se tiene una
idea lo suficientemente clara del problema, se pueden fijar otros elementos
del contrato terapéutico como son la duración, frecuencia y número de
sesiones. Con respecto a la duración de la terapia, más que hablar de un
tiempo en meses, es aconsejable fijar un número concreto de sesiones.
Como orientación podemos situar 5 sesiones para casos poco graves, y
entre 10 y 12 para los más graves, cronificados y en los que la familia "ha
derrotado" a muchos terapeutas anteriores. Así mismo, se les dice que si el
problema se resuelve antes de finalizar el número acordado de entrevistas,
no será necesario realizar las que faltan. No obstante, si al llegar a la última
sesión acordada no se ha conseguido el objetivo propuesto se hará una
valoración conjunta con la familia para decidir la conveniencia de continuar
con alguna sesión más.
11.2 CONSTRUCCIÓN E INTERPRETACIÓN DEL GENOGRAMA FAMILIAR: Es una
representación gráfica de una constelación familiar multigeneracional (por lo
menos tres generaciones), que registra información sobre los miembros de esa
familia y sus relaciones. Su estructura en forma de árbol proporciona una
rápida "gestalt " de las complejas relaciones familiares y es una rica fuente de
hipótesis sobre cómo un problema clínico puede estar relacionado con el
contexto familiar y su evolución a través del tiempo. El propósito del
genograma es proporcionar de una forma rápida y vistosa los rasgos genéticos
que pueden haber pasado de una generación a otra, proporcionando una vista
de la historia de una familia y sus antepasados. Una técnica que es capaz de
desvelar posibles conflictos y/o coaliciones que pueden estar incidiendo en la
actual problemática familiar.
12 Técnicas de la terapia estructural
Estas llevan a organizar a la familia mediante el cuestionamiento de su organización. Su
finalidad es conducir el proceso terapéutico a la búsqueda de nuevas pautas. La elección
y eficacia de la técnica va a depender de las metas que tenga el terapeuta, según la
conceptualización que haga de la familia y del proceso de cambio, así como del enfoque
teórico que tenga y el rol que asuman ambos dentro del sistema terapéutico. Para esto
es importante que el planteamiento de hipótesis y objetivos terapéuticos este en
continua revisión conjuntamente entre el terapeuta y la familia. Las técnicas están
agrupadas en 3 categorías, aunque se pueden utilizar simultáneamente:
12.1 REENCUADRE: Tiene como objetivo el cuestionamiento del síntoma, permite
que el terapeuta genere un clima agradable facilitando que ambos sistemas
(familia y terapeuta) se acomoden mutuamente, logrando la confianza
suficiente para poder plantear las intervenciones específicas. Implica el uso de
las siguientes técnicas:
12.1.1 Escenificación: Es poner en acto las interacciones, se pide a los miembros de
la familia que “actúen” en presencia del terapeuta para construir una
secuencia interpersonal en la sesión. En el momento mismo de la
escenificación se produce el descubrimiento de conflictos que en un principio
no parecían importantes pero que tienen que ver con el problema presentado
y que todos tienen que ver con este, esta técnica se da en tres movimientos:
a) Secuencias Espontáneas.- El terapeuta observa las interacciones
espontáneas de la familia y decide los campos disfuncionales que conviene
iluminar.
b) Provocar Interacciones.- El terapeuta organiza secuencias escénicas en
que los miembros de la familia interpretan sus pautas disfuncionales.
c) Promover Interacciones Alternativas.- El terapeuta incentiva a la familia
a realizar interacciones diferentes a las habituales disfuncionales, esto
proporciona información predictiva y motiva a la familia.
12.1.2 Foco: El terapeuta selecciona y pone énfasis en un aspecto de la integración
familiar, luego los organiza acorde con las estrategias y objetivos
terapéuticos. Consiste en deslindar la información que la familia
proporciona, ya que como es sabido, los pacientes muchas veces inundan al
terapeuta con datos que para ellos son todos importantes. El terapeuta debe
jerarquizar esta información y dirigir la más importante hacia un foco de
tratamiento, es decir, primero seleccionar un enfoque y en segundo lugar un
tema para trabajar sobre él.
12.1.3 Intensidad: Intervenir de manera que la familia registre el mensaje, que sea
reconocido en su importancia. Esta técnica facilita que los mensajes del
terapeuta lleguen a la familia y tengan su efecto deseado, es decir, que el
cambio sea eficaz. Lo anterior se logra mediante intervenciones destinadas a
intensificar los mensajes terapéuticos, estas intervenciones pueden ser las
siguientes:
a) Repetición del Mensaje.- Esto consiste en repetir un mensaje muchas veces
en el curos de la terapia con el fin de hacer crecer la intensidad.la repetición
puede ser sobre dos niveles:-la estructura (un acuerdo entre los padres)-el
contenido (la hora de llegar a casa de los hijos) el mensaje puede ser
repetido en la misma forma cada vez o el mismo mensaje en diversas
maneras con metáforas o analogías.
b) Repetición de Interacciones Isomórficas.- Esta técnica implica la anterior,
sin embargo, va dirigida a otro nivel lógico, que incluye mensajes que en la
superficie parecen dispersos, pero que son idénticos en un nivel más
profundo, por ejemplo:-¿por qué no fuiste a buscar trabajo? (nivel
superficial)- es claro que no fuiste a buscar trabajo, ya que a pesar de tus
veinte años es difícil hacerlo para un niño de ocho años (nivel profundo).
CAMBIO DE TIEMPO.- Regularmente las familias traen su propio manejo del
tiempo de las interacciones, por ejemplo, un padre que acostumbra hablar
cinco minutos seguidos, los otros miembros respetan este tiempo y no
intervienen, un hijo que solo contesta monosílabos y los otros miembros
intervienen en cuanto dice “si” o “no”. Esta técnica, por lo tanto, apunta a
pedirle al padre que hable menos y permita al hijo hablar más.
CAMBIO DE DISTANCIA.- La cercanía o lejanía en que se colocan los
miembros dentro del sistema terapéutico, son datos que sirven para ir
corroborando la jerarquía de los conflictos, en los casos de
farmacodependencia hemos observado y comprobado que la madre y el
paciente identificado mantienen una distancia cercana y el padre se coloca
más lejano, esto se refiere también a la distancia psicológica, mas difícil de
medir que la distancia física. El terapeuta puede modificar estas distancias
pidiendo que cambien de lugar, es decir, que padre e hijo intercambien sillas.
La utilización del espacio del consultorio es un instrumento útil para la
emisión de mensajes terapéuticos.
RESISTENCIA A LA PRESION FAMILIAR.- Un aspecto teórico importante de
terapia familiar es que la familia presenta una resistencia al cambio y una
forma de mostrarlo es diciéndole al terapeuta lo que debe hacer, a las familias
con un alto nivel de tendencia al no-cambio son descritas como familias de
“oídos sordos”, por lo que el terapeuta debe olvidar las reglas de ética y si es
necesario gritar, otras veces hacer como que no escucha lo que le dicen piden,
con esto se logra no mantener una homeostasis familiar disfuncional.
12.2 REESTRUCTURACIÓN: Tiene como objetivo el cuestionamiento de la
estructura, intenta romper con las coaliciones, logrando una nueva
estructuración de poderes y jerarquías. Implica el uso de las siguientes
técnicas:
12.2.1 Fijación de fronteras: Destinada a modificar la participación de los
miembros de diferentes subsistemas, es decir implantar cambios, por
ejemplo, en la relación padre-hijo. Esto se puede lograr mediante dos
maniobras:
a) La Distancia Psicológica.- Cuando habla uno de los miembros, el terapeuta
observa quien lo interrumpe o completa la información, quien confirma o
rechaza, quien ayuda, etc., también da datos acerca de las alianzas, sobre
involucraciones, coaliciones, la formación de diadas y triadas.la tarea del
terapeuta es una intervención que apunte a crear fronteras nuevas.
b) Duración de la Intervención.- Esta técnica se refiere principalmente a
modificar el subsistema terapéutico aplicándolo fuera del consultorio, es
muy eficaz recurrir a tareas entre sesión y sesión, por ejemplo, a unos
padres que solo van al cine si los acompaña un hijo, se les puede pedir que
lo hagan ellos solos, sin el hijo, esto marca un límite entre el subsistema
parental y el conyugal.
12.2.2 Desequilibramiento: Modifica jerarquías de personas dentro de un holón
(sistema que es un todo en sí mismo así como es parte de un sistema mayor).
Puede producir cambios importantes cuando en los miembros existe la
capacidad de experimentarse con roles y funciones a un nivel interpersonal.
Son cuatro las maniobras a las que se puede recurrir y es el terapeuta quien
las realiza. Ya desde la coparticipación, el terapeuta va creando alianzas,
confirmando los lados fuertes de las personas se convierte en una importante
fuente de estima. Se recurre a una alianza con algún miembro para modificar
su posición jerárquica dentro del sistema familiar. Como se recordará, un
principio sistémico dice: “Si un elemento cambia, el sistema total se
modifica”.
a) Alianza con Miembros de la Familia.- Esta puede verse como variante de
la anterior, la diferencia es que el terapeuta alterna su alianza con dos
miembros del sistema, por ejemplo, apoyar a los padres en sus decisiones
sobre los hijos adolescentes y a la vez apoyar a el hijo cuando cuestiona que
los padres no tienen que decidir sobre él.
b) Alianza Alternante.- Esta técnica apunta principalmente a desequilibrar el
sistema, es una modalidad considerada como de mucha agresividad ya que
recurre a una relación descalificadora, el terapeuta ignora a un miembro de
la familia tal como si fuera invisible, es decir, como si no existiera. Una
variante más compleja y difícil es que el terapeuta intente cambiar la
posición de un miembro poderoso y central, tomando el rol de esta persona
e interactuar solo con el resto de la familia ignorando al otro.
c) Ignorar a Miembros de la Familia.- Implica no tomar en cuenta en una
sesión terapéutica a un miembro, y relacionar los sentimientos aflorados de
la familia con la persona ignorada, para iniciar estrategias de cambio.
d) Coalición contra Miembros de la Familia.- Este tipo de participación del
terapeuta lo confronta a tener un enfrentamiento y de utilizar su posición
jerárquica. A la vez que implica la habilidad de entrar y salir del sistemas
familiar ya que se corre el riesgo que la familia pierda su perspectiva
terapéutica, ya que el terapeuta se alía con un miembro para atacar a otro,
es obvio que uno como el otro se tensionaran. El éxito de esta estrategia
depende de que los miembros acepten que esta postura del terapeuta es un
beneficio de todos.
12.2.3 Complementariedad: Cuestiona la idea de jerarquía lineal, nos dice: para que
una persona sea padre es necesario que exista un hijo y viceversa. Concepto
del yo como unidad y como parte un todo, cuestionar el problema y al
certidumbre del paciente individual. Cuestionamiento del control lineal, del
modo de recortar sucesos. Introducir concepto de reciprocidad y de tiempo
ampliado. Encuadrar conductas individuales como parte del contexto. Hay
tres aspectos a cuestionar:
a) Cuestionario del Problema.- El terapeuta introduce incertidumbre, en
cuanto a que el problema sea de un solo miembro de la familia, es decir, el
paciente individualizado. En tal caso el terapeuta debe ampliar el foco del
síntoma extendiéndolo a más de una persona.
b) Cuestionamiento del Control Lineal.- Esta técnica se basa en que cada
persona es el contexto de las demás, nos referimos al concepto de
reciprocidad, el terapeuta muestra una conducta disfuncional y
responsabiliza a otra; por ejemplo: decir a un adolescente "Te comportas
como un niño berrinchudo" e inmediatamente decir a los padres "Y ustedes,
¿qué han hecho para tener un niño berrinchudo?”; así el miembro que es
atacado como disfuncional no presenta desafío ya que se ha
responsabilizado a otros de esa conducta.
c) Cuestionamiento del modo de recordar los sucesos.- Esta técnica parece
ser la que presenta mayores dificultades ya que implica cuestionar el modo
en que la familia observa y explica lo que sucede, por lo general lo hacen de
la parte por el todo, rara vez, esta técnica alcanza su objetivo ya que la
familia al aceptar una visión sistémica se coloca del lado perdedor y esto
último, poca gente lo acepta. El terapeuta tiene que poder ampliar el foco de
atención de la familia, debe enseñarles a ver integradamente los sucesos y
no meramente la secuencia de acción, las respuestas y las contrarespuestas.
12.3 CONSTRUCCIÓN DE LA REALIDAD: Tiene como objetivo el cuestionamiento
de la realidad familiar. Las familias se organizan según la realidad que ellos
mismos han creado, y es así como la experimentan. Esta estrategia de desafío
se basa, por lo tanto, en el principio de que las pautas de interacción de la
familia se dan de acuerdo a la realidad tal como es vivenciada y contiene
modalidades de experiencia. Implica el uso de las siguientes técnicas:
12.3.1 Empleo de Constructos Cognitivos.- Para dar una visión más flexible y plural
del problema familiar. Esta técnica permite relajar la rigidez referencial y
preferencial de la forma en que la familia percibe las cosas y con esto
constituye una "realidad terapéutica", el terapeuta tiene que tener cuidado
de no seleccionar la realidad que el percibe (en cuanto a su propia realidad
familiar), es importante construirla con arreglo a una meta terapéutica, es
decir, modificar la concepción del mundo y crear una realidad que no haga
necesario el síntoma.
12.3.2 Uso de Símbolos Universales.- Aludir a valores o a premisas validadas
socioculturalmente. Básicamente el terapeuta hace sus intervenciones
apoyándose en la conceptualización de la familia como institución, es decir,
"la familia tiene como función proteger a los miembros de esta" o "los padres
que deben dar comida, vestido y sustento a los hijos", etc. también es
adecuado recurrir al sentido común, a la tradición o a los dichos y refranes,
esto tiene como meta desafiar la disfunción en distintos subsistemas y su
fuerza reside en el hecho de que se refieren a cosas que todo el mundo
conoce.
12.3.3 Verdades familiares.- Usar la definición de la familia para extender su
modalidad de funcionamiento. Se refiere a las justificaciones que la familia
utiliza para describir su realidad, esto se realiza utilizando las mismas
metáforas que usa la familia, por ejemplo, un padre que es descrito y el
mismo se define como aficionado al toreo y utiliza metáforas como tener que
darle "capotazos" a su esposa, el terapeuta utiliza esta parte cultural para
decirle que es un buen momento para "tomar al toro por los cuernos". Esta
simbolización de su realidad se utiliza como una construcción nueva y cada
vez que la familia las saque o el mismo terapeuta las introduzca,
transformándolas en una nueva señalización de la dirección al cambio.
12.3.4 Consejo profesional.- Presentar una explicación distinta de la realidad y
basarla en su experiencia o conocimiento. En esta técnica, el terapeuta debe
ubicarse con la jerarquía superior y mantener el liderazgo del sistema
familiar. Utiliza intervenciones como: "según mi experiencia...", "he revisado
las estadísticas y en este caso han demostrado...", etc.
12.3.5 Búsqueda de lados fuertes.- Para resaltar los recursos y logros de la familia o
de alguno de sus miembros. Esta técnica estratégica es la que se va aplicando
a lo largo de toda la terapia, está basada en la connotación positiva y tiene
como principio rector el que la familia tiene la capacidad para solucionar
problemas por mas difíciles que estos se presenten, así mismo, creemos que
los mejores terapeutas de cada individuo es su propia familia.
12.3.6 Aplicación de Paradojas.- Tiene como consecuencia lo opuesto de lo que se
pretende. Su aplicación debe estar basada en tres principios:
La familia es un sistema autorregulado.
El síntoma es un mecanismo de autorregulación.
El concepto de resistencia es sistemática al cambio.
Con esto se enfrenta la resistencia y principalmente se evita una lucha por el
poder entre la familia y el terapeuta. Por lo cual es decisivo, saber qué pasará
con la familia cuando se elimine el síntoma, ya que las paradojas provocan
una fuerte crisis a nivel tanto de estructura como de comunicación, la familia
entra en confusión y presionada a conformarse de una nueva manera sin
requerir del síntoma. Son tres las principales técnicas para aplicar una
paradoja sistemática:
a) Redefinición.- Tiene como propósito cambiar el modo en que la familia ve
el problema, esto significa, la utilización de la connotación positiva al cien
por ciento; el enojo se definirá como preocupación, el sufrimiento como
abnegación, el distanciamiento como una manera de permitir mas
intimidad, la drogadicción como una forma de unir a los padres para
resolver problemas, etc.
b) Prescripción.- Esta técnica está basada en aquella frase de "Más de lo
mismo", esto es, pedirle a la familia que siga haciendo lo mismo, ya que es
difícil que ellos cambien y si se siguen comportando disfuncionalmente
seguirán tan unidos como lo han estado desde que apareció el problema.
Para esta maniobra es indispensable que el terapeuta tenga muy claro y
entendido el ciclo repetitivo disfuncional que la familia ha creado alrededor
del problema.
c) Restricción.- Como punto final al proceso de la paradoja terapéutica, la
restricción se utiliza cada vez que la familia manifiesta cambios positivos y
lo reconocen así, el terapeuta debe cuestionarlos en el sentido de dudar de
que realmente haya cambios, eso –basados en el principio de resistencia al
cambio- proporciona que la familia haga mayores esfuerzos por hacer
quedar mal al terapeuta y va reforzando esos cambios para el futuro.
13 Proceso de intervención
13.1 MANEJO DE LA RESISTENCIA: El terapeuta debe tener presente en sus
intervenciones. Estas consideraciones de tipo general:
a) Debe intervenirse respetando a las personas y al sistema familiar en su
estilo, ideología y valores: Un desafío frontal a cualquiera de estos puntos lleva
al fracaso o a un rechazo que provoca tensión.
b) No entrar en la familia nada más que hasta donde ellos quieran y puedan
dejar entrar en cada momento: Hay que ir entrando conforme ellos van
"abriendo las puertas", al ritmo de su confianza y de verse respetados.
c) Usar un lenguaje acomodado al nivel sociocultural de la familia.
d) Mantener una actitud neutral ante todos los miembros.
e) Hay que estar pendiente de no realizar intervenciones "antiterapéuticas":
Pues serán ineficaces. Son aquellas que se dan en algunos de estos casos:
- El terapeuta mantiene a la familia distante porque "teme" ser envuelto
por ella.
- El terapeuta realiza una intervención que va dirigida a defenderse.
- El terapeuta da tantas prescripciones que no hay tiempo para
desarrollarlas antes de la próxima sesión.
- El terapeuta lleva a cabo una intervención que provoca una
interrupción prematura del contexto terapéutico, alejando a la familia.
- El terapeuta realiza una intervención dejándose llevar por
sentimientos negativos hacia algún miembro.
- El terapeuta da una "prescripción imposible" que no puede seguirse,
ocultando, de este modo, su hostilidad hacia la familia o hacia algún
miembro.
Es importante tener presente que las intervenciones serán más eficaces si el
terapeuta sabe calibrar en cada momento el grado de resistencia del sistema.
La resistencia puede definirse como el conjunto de conductas del sistema
terapéutico que interactúan para impedir el logro de los objetivos de la familia
en relación con la terapia. El "sistema terapéutico" incluye: a los miembros de
la familia, al terapeuta y al contexto en el cual se desarrolla la terapia.
13.1.1 Niveles de resistencia: El nivel de resistencia de cada familia se puede situar
sobre un continuo que va del acatamiento a la oposición absoluta: Algunas
familias mostrarán predisposición a seguir casi cualquier directiva
terapéutica (lo cual, desde luego, puede ser en sí mismo un tipo de resistencia
encubierta). Otras se inclinarán a lo que Brehm ha llamado "reactancia" y que
sería la tendencia a hacer lo contrario de lo que se les ha propuesto a fin de
reafirmar el sentimiento de autodeterminación.
Las familias se pueden mover a lo largo de este continuo al paso que el
tratamiento avanza. Algunas tenderán a hacer más oposición al comienzo y a
aminorarla cuando entran en confianza con el terapeuta. Otras son más
obedientes al principio, oponiéndose sólo después de sentir cuestionadas sus
pautas básicas o su seguridad o cuando les parece estar frente a cambios
peligrosos.
13.1.2 Expresiones comunes de resistencia al inicio del tratamiento: La resistencia es
un fenómeno normal y en general se hace particularmente evidente en los
comienzos de la terapia. Durante las fases iniciales del tratamiento es a veces
difícil distinguir entre una resistencia genuina y aquellas realidades de la
familia y de los sistemas que estorban el compromiso de la familia con la
terapia. Por ello, todas las conductas se deben evaluar en el contexto en que
ocurren.
Algunas de las formas más comunes de resistencia encontradas en la primera
sesión son las siguientes: Énfasis de la familia por asumir que el problema se
localiza únicamente en un miembro, cancelaciones, no hay problema, un
miembro domina, un miembro no habla, la familia insiste en la información
histórica, la familia rehúsa comentar información histórica.
13.2 CLARIFICAR Y RECAPITULAR: La CLARIFICACIÓN es una técnica de
intervención verbal que consiste en una pregunta que el terapeuta dirige a la
familia o a algún miembro de ella, con intención de comprobar que se ha
comprendido correctamente el mensaje de los participantes.
La RECAPITULACIÓN consiste en transmitir un resumen elaborado del
contenido "cognitivo" y/o "afectivo" del mensaje de la familia o de algún
miembro de ella. Los contenidos pueden tener como objeto toda una
entrevista, algunos momentos de ella o incluso una serie de entrevistas,
pueden sintetizar la comunicación digital y analógica de la familia y/o de algún
miembro. Una recapitulación aglutina los temas, las redundancias o las
consistencias de la comunicación de la familia y, además, actúa como un
"feedback" que tiende a estructurar los mensajes imprecisos o ambiguos. Así
pues, los objetivos que permite alcanzar esta técnica son: enlazar diversos
elementos dispersos a lo largo de la comunicación de algún miembro de la
familia; identificar un tema o estructura común a una serie de enunciados;
interrumpir una divagación excesivamente larga.
13.3 PREGUNTAS:
13.3.1 Preguntas Estratégicas Lineales.- Estas preguntas producen una "interacción
correctivo". Su efecto es constrictivo y fácilmente, el interlocutor expresará
oposición. Preguntas como las que siguen pertenecen a este grupo:
- ¿No le parece que la disciplina que emplea con su hijo es excesiva?
- ¿No cree que tiene algo abandonados a sus hijos?
- ¿Es posible que esté intentando negar la realidad?
13.3.2 Preguntas Descriptivas Lineales.- Podemos denominarles también
"enjuiciantes". Su efecto es conservador. Se investiga sobre diversas
cuestiones. Preguntas como las siguientes, son de este grupo:
- ¿Quién de Uds. es el último que se va a dormir?
- ¿Al llegar de la escuela, qué es lo primero que haces?
- ¿Quién de Uds. es el que está menos tiempo en casa?
13.3.3 Preguntas Descriptivas Circulares.- Mediante estas preguntas, exploramos un
comportamiento dentro de la red de comportamientos de la familia. Estas
preguntas producen un efecto liberador ya que son de carácter "aceptante".
Por ejemplo:
- (Al hermano mayor:) ¿Qué hace el padre mientras la madre acuesta al
pequeño?
- Cuando Ud. se pone irritable con su esposa, ¿qué hace su hijo?
- (Al padre:) ¿Qué dice la abuela cuando la madre riñe al niño por tener
una rabieta?
13.3.4 Preguntas Reflexivas Circulares.- Estas preguntas producen una "interacción
facilitadora". Su efecto es generativo y creativo. Algunos ejemplos pueden ser
los siguientes:
- (A la esposa:) ¿Si su marido aumentara la disciplina con el hijo, se
conseguirían mejores o peores resultados?
- (Al marido:) ¿Si su esposa le ayudara en la disciplina, el hijo tendría
mejor comportamiento?
13.4 ESCULTURA FAMILIAR: Es una técnica por medio de la cual se recrean en el
espacio, las relaciones entre los miembros de la familia, á través de la
formación de un cuadro físico. La técnica fue ideada por Kantor y Duhl
("Boston Family Institute") y desarrollada por Papp ("Family Institute" de
Nueva York) y por Virginia Satir. La escultura familiar es un instrumento de
diagnóstico y una técnica terapéutica: se visualizan y se experimentan,
espacial y concretamente, las configuraciones relacionases de la familia. En la
escultura familiar queda simbolizada la posición emocional de cada miembro
de la familia respecto de los otros.
La forma de llevar a cabo esta técnica es la siguiente: el terapeuta pide a un
miembro de la familia que sea "escultor", mientras que el resto del grupo
constituye su "arcilla" humana. La invitación a esculpir puede dirigirse a
cualquier miembro de la familia que al terapeuta le parezca que responde más
espontáneamente. Por ejemplo, puede pedir al paciente identificado que sea el
escultor teniendo en mente la capacidad que este miembro a menudo tiene
para captar niveles profundos de la dinámica familiar. 0 puede elegir a uno de
los niños, tal vez porque como el resto de la familia no lo identifica con "el
problema", no participa demasiado en las sesiones. También es posible que
sean todos y cada uno de los miembros los que en la misma sesión hagan su
escultura".
Una vez seleccionado el escultor, el terapeuta pide al resto del grupo que se
ponga de pie y que realice los movimientos que el escultor indique. Después
de haber establecido las reglas básicas, el terapeuta deja lugar al escultor,
quien inicia la construcción del cuadro; en adelante, el terapeuta toma la
posición de observador y comentarista. Debe dejarse que la escultura se
desarrolle a su propio ritmo y luego se pide a los participantes que compartan
algunos de los sentimientos acerca de las posiciones físicas en que se
encuentran. Cuando se pide a los miembros de la familia compartir dichos
sentimientos con el escultor, es útil que el terapeuta los oriente a que expresen
cómo se sienten en ese preciso momento, respecto de su posición física; esto
evita que los miembros de la familia se vuelvan a sumergir en una discusión
intelectual sobre sus relaciones. Cuando el escultor ha terminado, el terapeuta
puede pedirle que encuentre una posición para sí mismo en la escultura,
ubicándose él mismo dentro del cuadro.
La técnica de la escultura familiar se puede emplear ya desde la primera
sesión, pidiendo a los miembros de la familia que esculpan sus diferentes
visiones de la familia en vez de "hablar" sobre sus problemas. En una sesión
ulterior, puede solicitar a los miembros que esculpan su visión "idealizada" de
la familia; de esta manera el terapeuta utiliza esta técnica con el fin de elucidar
los objetivos familiares del tratamiento.
El terapeuta puede utilizar la técnica de la escultura familiar como un medio
de enfrentar un período de resistencia en el que pareciera no existir evolución.
Puede ser particularmente eficaz, por ejemplo, para quebrar la
intelectualización defensiva de algunos grupos familiares altamente verbales.
13.5 NARRACIÓN DE CUENTOS METAFÓRICOS: La técnica de "narración de
cuentos" cumple una doble función, tanto si el cuento es narrado entre todos
los miembros de la familia, como si es el terapeuta quien lo cuenta a la familia.
En el primer caso, su función será más diagnostica que terapéutica, y en el
segundo caso, a la inversa.
La familia narra el cuento: El terapeuta propone a todos los miembros de la
familia, que se coloquen en posición relajada y se les recomienda cerrar los
ojos. Se les pide que uno de ellos empiece el cuento con la frase "Erase una
vez..." continuando con algo más. El siguiente miembro deberá continuar con
otra frase, más o menos larga. Así, sucesivamente, y entre todos irán
construyendo un cuento en el que, sin salirse del tema, cada miembro lo va
enriqueciendo con nuevos personajes y situaciones. Después de varias vueltas,
cada miembro habrá aportado cinco o siete frases, dependiendo, lógicamente
del número de miembros que esté compuesta la familia.
La metáfora sirve al terapeuta como obtención de claves para entender algo
más de la familia, y a los miembros del sistema familiar como aportación de
visiones nuevas sobre la situación. Una vez narrado el cuento, el objetivo no
será tanto el "analizarlo" racionalmente, sino "dejarlo ahí" como semilla que
dará su fruto más adelante. A veces, algún miembro querrá hacer algún
comentario sobre el cuento; ese comentario lo podrá utilizar el terapeuta como
elemento para la interacción familiar
13.6 PRESCRIPCIONES: RITUALES CURATIVOS: La vida ritual de la familia con
frecuencia refleja temas centrales de la relación. Celebraciones como las
Navidades, Reyes, cumpleaños, tradiciones especiales, etc. nos adentran en un
mundo repleto de metáforas, símbolos y relatos de profundo dolor y profunda
alegría. El terapeuta invita a formar rituales para apaciguar el dolor y
solucionar el problema que los aqueja, ofreciéndoles una vía que
simultáneamente honra el pasado, altera el presente y permite el futuro.
13.7 ALGUNAS TAREAS ORIGINALES:
13.7.1 Tarea de primera sesión: Se suele emplear al término de la primera sesión; de
ahí su nombre. Se trata de que la familia "se fije" en lo que "sí" va bien. Muchas
familias no esperan que se les pregunte sobre lo que va bien, así que a veces
quedan sorprendidas por esta petición. La tarea se pide de la siguiente
manera: "Desde ahora y hasta la próxima entrevista lo que ocurre en esta
familia que cada uno quiere que siga ocurriendo". Cuando la familia vuelve a
la siguiente entrevista se les pregunta: "Bien, ¿qué está sucediendo que les
gustaría que siguiera sucediendo?".
13.7.2 Días impares, Días pares: Este ritual pretende cambiar las reglas de
interacción y, por tanto, la estructura familiar. El ritual prescribe distintas
conductas en días alternos. Prescribir comportamientos "viejos"
(disfuncionales) los días impares y comportamientos "nuevos" los días pares,
disminuye en algo la resistencia al cambio, ya que la gente sabe que el nuevo
comportamiento sólo durará un día y que luego será seguido siempre por el
comportamiento viejo".
Así, por ejemplo, una pareja que consulta por sus peleas en la relación, y
después de observar que la mujer está resentida con su marido porque no se
atreve a tomar decisiones por temor a las críticas de él, se les puede
prescribir que: "los días impares él esté a cargo de tomar las decisiones para
ambos y ella deberá seguirlo amablemente, siempre que las decisiones no
entrañen peligro o capricho, mientras que ella deberá tomar las decisiones lo
días pares y él deberá seguirla amablemente".
13.7.3 Una sorpresa agradable: Esta tarea tiene cierto carácter lúdico. Consiste en
pedir, por ejemplo a una pareja, que se hagan una sorpresa agradable,
mutuamente, en el intervalo de tiempo que va de la sesión actual a la
siguiente. No deberán verbalizarse cuál es la sorpresa a fin de comprobar en
la primera entrevista si cada uno "adivina" qué sorpresa ha recibido del otro.
Por tanto, en la próxima entrevista empezaremos preguntando, por ejemplo,
a la mujer: ¿Qué sorpresa crees que te ha hecho tu marido? Y luego a la
inversa. La experiencia demuestra que si los miembros de la pareja o familia
expresan sentido del humor al proponerles dicha tarea, el resultado será
positivo.
13.7.4 Autoevaluación: Esta tarea consiste en pedir a cada miembro que se auto
califique, diariamente y antes de acostarse, con un puntuación de 0 a 10,
sobre aquel "aspecto" que se esté considerando en la sesión. Para que los
miembros de la familia la perciban con rigor, es aconsejable decirles que si
una noche, por el motivo que sea, uno se olvida de puntuar, no lo haga al día
siguiente con carácter retroactivo, sino que coloque una raya, para que el
terapeuta sepa que ese día no lo hizo.
Ampliando esta tarea, también se les puede pedir que valoren, de 0 a 10 la
conducta del otro. La forma concreta de hacerlo es colocar las fechas a la
izquierda y las puntuaciones a la derecha. Se les dice que no podrán
mostrarse, entre ellos, las puntuaciones, hasta que no estén en la sesión. Es
en ese momento, cuando el terapeuta les pide que le entreguen las
"puntuaciones" y el terapeuta lee en voz alta las de un miembro pidiendo, a
continuación, el comentario al otro miembro.
Esta tarea no tiene como objetivo, solamente, el que el terapeuta tenga un
registro informativo sobre las conductas de los miembros de la familia, sino
que su mayor eficacia radica en el cambio de perspectiva que supone en cada
miembro, el tener que "centrarse" en uno mismo para evaluarse; el " poder"
evaluar al otro, y el "saber" que te están evaluando. Todo esto hace que se
produzcan cambios en las pautas interaccionales, flexibilizándose las
posiciones.
Así, por ejemplo, si en la entrevista la madre ha comentado que,
habitualmente, tiene un ánimo depresivo, con pocas ganas de hablar y de
hacer cosas y, a su vez, se queja de su hija de 23 años, porque se muestra
irritable e irrespetuosa, podremos pedir a cada una que "puntúen" estos
aspectos. Es importante que el rasgo a puntuar sea "definido" de forma que
las puntuaciones altas indiquen positividad. Así en este caso, las
puntuaciones altas de la madre indicarían animosidad, actividad, etc., y las
puntuaciones altas de la hija reflejarían una conducta tranquila y respetuosa
con la madre. La hija, a su vez, habrá traído sus puntuaciones, que al
exponerlas a la familia, servirán de material para la interacción de los
miembros.
13.7.5 Un objeto en el congelador: Esta tarea permite modificar, a través de
mensajes analógicos, interacciones de escalada simétrica. Tiene, también, un
componente lúdico, al punto de que suelen reír al proponerlo. Si esto ocurre,
es buena señal para el éxito de la tarea. Así, por ejemplo, en el caso de una
pareja, que vienen a consultar por sus frecuentes riñas y desacuerdos se les
pide que piensen en un objeto de casa, pequeño y que sientan hacia él cierta
"antipatía".
Una vez han elegido el objeto, se les dice que al llegar a casa, lo deberán meter
en el congelador. Cuando uno de los dos observe que el otro se comporta de
la manera que a uno le molesta, lo sacará del congelador y lo colocará en un
lugar visible. Estará en ese lugar durante tanto tiempo como a uno le dure el
malestar, para volverlo a guardar cuando se sienta mejor. En la próxima
sesión se les preguntará las veces que fue sacado del congelador cada uno de
los objetos, y el tiempo que permaneció fuera.
14 Terapia estructural en la actualidad
Como sabemos la teoría estructural se nutre de teorías sistémicas y comunicacionales,
poniendo igualmente énfasis en la relación y en la existencia innata de estructuras en
las relaciones humanas. Sin embargo, a diferencia de los sistémicos puros, no cataloga
al individuo únicamente como miembro del sistema familiar sino que lo contempla como
un "subsistema", con su propia estructura psicológica en interrelación con los otros
subsistemas y con el medio externo, con una visión ecológica.