Papers by Diego Leiton
La Zaranda De Ideas Revista De Jovenes Investigadores En Arqueologia, 2009
Page 1. 65 * Grupo Interdisciplinario de Arqueología y Antropología de Tucumán (GIAAT). Facultad ... more Page 1. 65 * Grupo Interdisciplinario de Arqueología y Antropología de Tucumán (GIAAT). Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo. Universidad Nacional de Tucumán. E-mail: dmleiton@yahoo.com Leiton, Diego M. 2009. ...
Sesiones y Resúmenes. IV Reunión Internacional de Teoría Arqueológica en América del Sur, 2007
El conflicto emergente en torno a la utilidad social de la arqueología no sólo responde a una pre... more El conflicto emergente en torno a la utilidad social de la arqueología no sólo responde a una preocupación estrictamente académica por hacer del conocimiento científico una mercancía de valoración social extendida. Más bien, esa situación en la que se encuentra involucrada la arqueología y la sociedad en su conjunto, tiene que ver con la agudización de una crisis trazada por la historicidad misma de prácticas de opresión hegemónica, praxis de resistencia, derechos desiguales, e intereses/saberes legitimados e intereses/saberes reprimidos. Ahora bien, si en la actualidad el campo de la utilidad social de la arqueología devela que la disipación de esa crisis es posible y que la labor académica en ese sentido puede dejar de ser excluyente y represiva, entonces, ¿cómo constituir ese campo en torno a la investigación arqueológica del terrorismo de Estado en Argentina cuando los colectivos populares subalternos que en la década del setenta se vieron involucrados activamente en el escenario de las praxis de resistencia y emancipación, en la actualidad no han encontrado espacio para constituirse y actuar como verdaderos agentes políticos en el proceso de construcción y producción de conocimiento y memoria social sobre nuestra historia reciente? Tomando como punto de partida este planteo, y lejos de pretender definir líneas acción, en el presente trabajo me propongo plantear una mirada reflexiva a esta problemática tomando finalmente como eje de análisis la relación construida en torno a un canal de desagüe de agua subterránea, entre los vecinos del Barrio Villa Muñecas (Tucumán, Argentina) y las investigaciones arqueológicas que un grupo de profesionales y estudiantes venimos realizando como peritos de la Justicia Federal en un viejo 'pozo' de agua que fue funcional al aparato genocida administrado por el Estado argentino hacia la mitad de la década del setenta. Reflexiones sobre la arqueología de las confrontaciones sociales y la violencia política recientes: "El saber está ligado al poder que lo autoriza" M. De Certau (1996) En la Argentina, las violaciones recientes a los derechos humanos han de constituirse como campo de acción de la arqueología hace unos veinte años atrás, cuando en 1984 el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), en el marco de investigaciones judiciales, llevó a cabo exhumaciones e identificaciones nominales de víctimas del terrorismo de Estado de la última dictadura militar (EAAF 1990). Estas intervenciones constituyen, tanto a nivel nacional como mundial, una experiencia pionera en cuanto a la articulación de la práctica arqueológica con el trabajo de antropólogos, organismos de derechos humanos,
Encuentro de Jóvenes Investigadores/10 (EJI). Textos y Resumenes 10. Fundación el Colegio de Santiago, CONICET /FHCSYS- INDES- UNSE, 2010
Tal vez sin ninguna otra intención que la de dar a conocer unos restos de alfarería prehispánica ... more Tal vez sin ninguna otra intención que la de dar a conocer unos restos de alfarería prehispánica hallados en la localidad de Tarapaya (Provincia de Santiago del Estero), en el año 1901, J. B. Ambrosetti inaugura, en muchos sentidos, la escritura de la arqueología de la provincia de Santiago del Estero. En tal oportunidad, Ambrosetti expuso una serie de opiniones sobre similitudes observadas entre los fragmentos de alfarería pintada que motivaron su texto, los cuales fueron años más tarde comprendidos en lo que Reichlen (1940) denominó estilo Averías de la región chaco-santiagueña, y ejemplares cerámicos provenientes de los valles calchaquíes asignables al estilo Yokavil, definido por Bennet para la “cultura calchaquí” en general (1948).
Para Ambrosetti, el sentido de la presencia de restos de este tipo de alfarería en tierras santiagueñas, no podía ser otro que aquel condicionado por el lugar en torno al cual sus propios conocimientos eruditos se formaron: los valles calchaquíes. Así, todo indicaba para el pionero que aquel territorio había sido habitado por la denominada "civilización diaguita-calchaquí", a cuyo repertorio patrimonial correspondían esas modalidades de alfarería pintada. Pero, en aquella oportunidad, el autor también agregó que la "civilización diaguita-calchaquí" a la que correspondió tal alfarería, nunca se había vinculado con la cultura incaica, “sentencia” que expuso en objeción a las opiniones del Dr. H. D. Hoskold, quién en la misma época había planteado que esos estilos de cerámica correspondían a tiempos incaicos en la región calchaquí.
Pero también otros autores se han detenido tempranamente a exponer al debate las relaciones que habrían existido entre las poblaciones de tierras bajas santiagueñas y las de valles calchaquíes, a partir de la advertencia sobre ciertas características plásticas que compartían el estilo Yokavil y el Averías (ver Serrano 1938, 1940; Márquez Miranda 1940).
Sin embargo, la investigación sobre los modos a través de los cuales estos estilos alfareros pudieron verse involucrados en aquellas relaciones históricas, tuvo su más significativo avance a partir de los aportes realizados principalmente por Lorandi (1978; 1984) y otras autoras (Cremonte 1994; Williams y Cremonte 1994). En tales trabajos se han aportado una serie de datos que contribuyeron a definir la relación que el estilo Yokavil habría tenido con la presencia, en el sur del valle de Yocavil, de olleros prehispánicos provenientes de tierras bajas santiagueño-tucumanas en carácter de aliados y mitimaes incaicos. Esto contribuyo a superar las tradicionales narrativas de perfil diaguito-centrista (Ambrosetti 1901; Serrano 1938), culturalista (Márquez Miranda 1946; Bennet 1948) y ecologista (Lorandi 1978) que sobre el tema habían sido sugeridas hasta ese momento. Pero fundamentalmente aquellas propuestas trazaron, por un lado, una mirada histórico-procesual que aportó elementos de análisis relacional innovadores a la comprensión de los procesos socio-históricos en torno a los cuales se habría constituido y desplegado el estilo Yokavil. Y, por otro lado, movilizó el discurrimiento de preguntas y reflexiones sobre las implicancias sociales, políticas, económicas, culturales e históricas que pudieron haber tenido tales relaciones, y sobre las intermitencias, continuidades y cambios del proceso (Angiorama y Taboada 2008; Taboada y Angiorama 2009; Taboada et al 2010; Leiton ms). De este modo, las identidades plásticas construidas sobre tales clases de objetos alfareros, se constituyeron en materialidad de las discusiones arqueológicas sobre aquellos procesos histórico-sociales, asumiendo un lugar destacado en la historización de las relaciones identitarias que habrían vinculado a aquellas poblaciones indígenas.
Tomando ello como marco, la presente ponencia tiene como propósito exponer una aproximación al análisis y discusión sobre las modalidades que pudieron haber asumido aquellas relaciones. Para aportar al abordaje de esta problemática, nos centraremos en la historia social de las modalidades alfareras Yokavil, en tanto constituyen una particular clase de objetos que estuvieron asociados al trabajo y experiencias de vida de personas presuntamente provenientes de las tierras bajas santiagueñas, en época incaica, en carácter de colonos de mitimaes. Particularmente, el interés de esta investigación estuvo orientado hacia el conocimiento de los elementos técnicos y de diseño que dan cuenta de la identidad plástica de tal estilo, los modos a través de los cuales pudieron desenvolverse sus redes de aprovisionamiento, las experiencias de consumo en las que se vio involucrado, y los contextos histórico-sociales cambiantes en los que tales prácticas, relaciones y procesos, tuvieron lugar. Con el abordaje de esta problemática se pretende contribuir, desde una mirada situada en los procesos histórico-sociales indígenas que tuvieron lugar en los valles intermontanos, al conocimiento y comprensión de las diversas formas en las que las poblaciones indígenas que estuvieron asentadas en las tierras bajas santiagueño-tucumanas, se involucraron y constituyeron en las relaciones que se desenvolvieron a escala macro-regional en tiempos incaicos (Angiorama y Taboada 2008; Taboada y Angiorama 2009; Taboada et al 2010; Leiton ms). Esta problemática general se enmarca en el Proyecto CIUNT “Procesos locales e interacción regional entre las comunidades prehispánicas del piedemonte catamarqueño y área circunvecina. Arqueología, historia de las investigaciones, identidad y transferencia” (Taboada 2010), cuyo principal objetivo es generar múltiples lineamientos de trabajo, información e hipótesis para aproximarse al conocimiento de los diversos procesos socio-culturales indígenas que tuvieron lugar en el pedemonte catamarqueño-tucumano y llanura santiagueña, y las interacciones que se desenvolvieron con poblaciones de regiones aledañas, en particular con los valles intermontanos en las provincias de Catamarca y Tucumán, donde justamente el estilo Yokavil plantea su presencia más notable, heterogénea y prolongada.
Serie Monográfica y Didáctica, Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo, UNT, 2011
Los procesos genocidas, tal como ha sido planteado recientemente en las ciencias sociales, no se ... more Los procesos genocidas, tal como ha sido planteado recientemente en las ciencias sociales, no se limitan únicamente al aniquilamiento masivo de diversos colectivos humanos o al exterminio de una fuerza social dada; más bien, ello asume un lugar particular en la realización de proyectos modernos que se han propuesto re-construir las relaciones sociales hegemónicas a partir de la destrucción y modificación de otras, que estructuran aquella sociedad a la cual el genocidio va dirigido. Pero las prácticas genocidas no culminan con el exterminio o realización material, sino que también entra en juego lo que se ha denominado "realización simbólica" de las prácticas genocidas, la cual contribuye a que el proceso que comprende el genocidio sea pensado, concebido, argumentado y explicado de una determinada manera y no de otra. En la producción de ambas formas de realizaciones, asume un lugar particular el despliegue de un conjunto de técnicas de exterminio, como la producción masiva de muerte; pero también otros haceres como la desaparición forzada de personas. La desaparición desencadena un proceso de desmantelamiento y disociación de aquellas tramas relacionales y de sentidos inscriptas, incorporadas y anudadas en los cuerpos de los sujetos, que pasan a ser objetos del hacer desaparecedor. Este proceso quiebra intempestivamente los lazos que anudaban al sujeto a su mundo vital, y supone procesos que provocan vacios para el encuentro. Pero esta particularidad de la desaparición puede también pensarse en relación a otras formas de materialidad que han sido objeto de desaparición en contextos de genocidio, como diversos bienes, documentaciones e incluso lugares, cuya sustracción, destrucción, resignificación violenta y/o ocultamiento produjeron rupturas diversas en las relaciones que materializaban y contribuyeron a construir otras nuevas. Así, entendemos que en estos procesos, hay una producción social y política ya no sólo de cuerpos como espacios sociales, sino también de objetos y lugares como paisajes sociales, que operan en la construcción de subjetividades, experiencias y relaciones sociales en torno a las cuales las propias realizaciones genocidas son posibles.
Teniendo esto en cuento, en este trabajo nos preguntamos cómo operó política y socialmente el paisaje en el desenvolvimiento de las realizaciones genocidas, alterando y produciendo relaciones sociales y subjetividades en la vida cotidiana de los vecinos del barrio Villa Muñecas (Dpto. Tafí Viejo, Tucumán), a partir de la constitución de un viejo pozo de aprovisionamiento ferroviario de agua (Pozo de Vargas) como un sitio de administración de la muerte. Para ello, se expone un análisis preliminar de entrevistas a vecinos del barrio, y una lectura sobre algunas de las dinámicas desplegadas partir del inicio de trabajos arqueológicos en el lugar con fines periciales de investigación. La atención fue puesta en la experiencia y efectos que tuvo en los vecinos, el proceso de transformación (material y simbólica) del sitio que comprende el pozo, en tanto lugar cuyas relaciones sociales (domésticas, laborales, recreativas) que lo constituían como parte del paisaje social vivido y sentido cotidianamente, fueron alteradas al haber sido empleado y luego desaparecido, como fosa de inhumación clandestina durante las década del 70. Pero también incluimos el proceso abierto, en tales sentidos, a partir del hallazgo y destapamiento del pozo por investigaciones arqueológicas, y de todo lo que en él se encontraba soterrado, tanto en términos materiales como también simbólicos y representacionales; proceso que también trajo aparejado reconfiguraciones en el paisaje social vecinal y en las relaciones y sistemas de representaciones de los vecinos.
Finalmente, se plantea una reflexión sobre el lugar de la práctica de la arqueología como una instancia de encuentro en la producción de condiciones que posibiliten subvertir realizaciones de procesos genocidas, al contribuir al desenterramiento de lugares y cosas, y aportando diálogos a la construcción política y social de nuevos sentidos de lugar que contribuyan a situar y racionalizar experiencias soterradas, exiliadas y traumáticas, urdiendo materialidades, temporalizaciones e identidades, sobre campos de sentidos fragmentarios, oprimidos y fantasmales. Así como también, sobre las dimensiones que entendemos están implicadas en los procesos de restitución de identidades de cosas, lugares, cuerpos, personas, relaciones, experiencias e historias.
Zaranda de Ideas, 2009
RESUMEN Este trabajo es un ensayo sobre la praxis de la arqueología en contextos donde circulan y... more RESUMEN Este trabajo es un ensayo sobre la praxis de la arqueología en contextos donde circulan y se representan diversas identidades vinculadas a experiencias sujetas a sentidos contemporáneos del pasado. Para ello me sitúo en casos en los que profesionales y estudiantes de arqueología, entre otros, se han implicado en la constitución de territorios sociales definidos por historias de vida trazadas por hechos traumáticos de represión y prácticas de confrontación a la violencia política del Estado en la década del setenta, en Argentina. Se trata de espacios de debate y construcción de conocimiento en los cuales los sentidos modernos que han dado lugar a las nociones eruditas de lo que el pasado significa en términos de tiempo e identidad, se diluyen para asumir otras fisonomías. Se exponen algunos aspectos de esas experiencias de trabajo y finalmente se plantea la necesidad de situar y debatir críticamente en la escena de la política de conocimiento arqueológico, otras nociones y vivencias respecto al sentido que tienen el pasado y sus identidades en la construcción actual de memoria histórica, verdad, justicia y cambio social. Palabras clave: Experiencias-Identidades-Tiempos-Representaciones-Crisis de la modernidad ABSTRACT This is an essay on the praxis of Archaeology in contexts in which diverse identities linked to experiences, and subject to contemporary senses of the past, are represented and circulated. I focus on cases where professionals and students of Archaeology, among others, are involved in the constitution of social territories, which are defined by life-stories affected by traumatic events of repression and confrontational practices to the political State violence in the seventies in Argentina. I deal with debate arenas and knowledge construction in which modern senses of the past, built on the erudite notions of time and identity, are diluted to assume other features. I describe some aspects of these work experiences and suggest the need to locate and critically debate other notions of the past in the context of the politics of archaeological knowledge, regarding the significance that the past and their identities have in the current construction of historical memory, truth, justice and social change.
Jornada de Derechos Humanos: Reflexiones acerca de los procesos de exhumación y restitución de identidad (Instituto Gino Germani, UBA), 2009
El LABORATORIO DE INVESTIGACIONES DEL GRUPO INTERDISCIPLINARIO DE ARQUEOLOGÍA Y ANTROPOLOGÍA (LIG... more El LABORATORIO DE INVESTIGACIONES DEL GRUPO INTERDISCIPLINARIO DE ARQUEOLOGÍA Y ANTROPOLOGÍA (LIGIAAT) constituye un espacio académico de investigación interdisciplinaria que articula diferentes cuerpos teórico-metodológicos orientados a la construcción de conocimiento sobre las especificidades que adquirieron los Procesos de conflictividad sociopolítica y de aniquilación por desaparición forzada de personas, que tuvieron lugar entre 1975 y principios de la década de 1980 en la provincia de Tucumán, y sobre las modalidades que asumieron los efectos que tales procesos produjeron en las relaciones sociales, sistemas de representaciones y mundo simbólico de nuestra sociedad.
La desaparición forzada de personas como tecnología de aniquilamiento, implica un encadenamiento de procesos que se ordenan y despliegan para eliminar a sujetos –que por las relaciones sociales que encarnaban eran- considerados subversivos, anormales, peligrosos.
Tales procesos produjeron una ruptura catastrófica de las relaciones de significación en torno a las cuales las identidades de las personas desaparecidas se constituían como unidades sociales e históricas. El producto de todo ello fueron retazos, pedazos, vacíos, restos de sentidos, historias, nombres y materialidades en las que aquellos se encarnaban. Ahora bien, la tecnología que se desplegó para producir la desaparición forzada –la catástrofe social- tuvo como atributo específico la producción ostensible de lo clandestino. El secreto a voces es lo que resuena, la ruina visible de todo aquello que los perpetradores se ocuparon de ocultar, destruir y silenciar, es el material sobre el cual trabajamos. Esos restos y faltantes de los dispositivos y andamiajes en los que se sostuvieron las posibilidades materiales y simbólicas de aquellos procesos de aniquilación, constituyen nuestras referencias en la construcción de conocimiento.
Arqueología de la vertiente oriental Surandina. Interacción macro-regional, materialidades, economía y ritualidad. Beatriz N. Ventura, Gabriela Ortíz y María Beatriz Cremonte (eds.)., 2017
Intersecciones en Antropología 14 , 2013
We explore the relationship, between the indigenous residents of the lowlands of Santiago del Est... more We explore the relationship, between the indigenous residents of the lowlands of Santiago del Estero and the Inca State, from distributional, contextual and stylistic analysis of three evidence lines: metallic artifacts, elements associated with the yarn production and ceramic objects (Averías and Yokavil styles). Our approach tries to focus from the local late history, although changing the perspective towards the eastern foothills and the central valleys. We intend to contribute to the discussion and understanding of the processes involved in such relationships, in terms of evolutions, mechanisms and ways of political, private and symbolic action. We interpret that, in addition to the mobilization of indigenous (mitimaes), from the plains to valley Inca installations; alliances transcended the sphere of political and economic interaction, on the way to preservation, ownership and identification processes and strategies, in the private or domestic areas. These strategies allow the incorporation and/or exclusion of certain features and objects, both in practice and everyday materials of the local communities, as in the mitimaes in the valleys. The latter would have generated emergent forms of identity, especially for mitimaes, yanas and privileged indians serving in state facilities, and among the communities of the plain, which maintained ties of alliance with the Inca State.
Intersecciones en Antropología 14:137-156., 2013
"Exploramos las relaciones entre los habitantes indígenas de la llanura santiagueña y el Estado I... more "Exploramos las relaciones entre los habitantes indígenas de la llanura santiagueña y el Estado Inca, a partir
del análisis distribucional, contextual y estilístico de tres líneas de evidencias: artefactos metálicos, elementos
vinculados a la producción de hilados y objetos cerámicos (estilos Averías y Yokavil). Nuestro enfoque pretende
situarse desde la historia tardía local, aunque cambiando el plano de observación hacia el piedemonte oriental
y los valles centrales. Procuramos contribuir a la discusión y comprensión de los procesos implicados en tales
relaciones. Interpretamos que, además de la movilización de indígenas (mitimaes) desde la llanura hacia instalaciones
incaicas en los valles, las alianzas trascendieron la esfera de interacción política y económica hacia
procesos y estrategias más domésticas de preservación, apropiación e identificación, que generaron la incorporación
y/o la exclusión de ciertos rasgos y objetos, tanto en prácticas y objetos cotidianos de las comunidades
locales, como en las de los mitimaes en los valles. Esto debió traer aparejadas formas emergentes de identidad,
principalmente para mitimaes, yanas e indios de privilegio que cumplieron funciones en instalaciones estatales,
así como entre las comunidades de la llanura, que mantuvieron relaciones de alianza con el Estado incaico."
(2013) Volumen 17, número 2 by Diego Leiton
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Para Ambrosetti, el sentido de la presencia de restos de este tipo de alfarería en tierras santiagueñas, no podía ser otro que aquel condicionado por el lugar en torno al cual sus propios conocimientos eruditos se formaron: los valles calchaquíes. Así, todo indicaba para el pionero que aquel territorio había sido habitado por la denominada "civilización diaguita-calchaquí", a cuyo repertorio patrimonial correspondían esas modalidades de alfarería pintada. Pero, en aquella oportunidad, el autor también agregó que la "civilización diaguita-calchaquí" a la que correspondió tal alfarería, nunca se había vinculado con la cultura incaica, “sentencia” que expuso en objeción a las opiniones del Dr. H. D. Hoskold, quién en la misma época había planteado que esos estilos de cerámica correspondían a tiempos incaicos en la región calchaquí.
Pero también otros autores se han detenido tempranamente a exponer al debate las relaciones que habrían existido entre las poblaciones de tierras bajas santiagueñas y las de valles calchaquíes, a partir de la advertencia sobre ciertas características plásticas que compartían el estilo Yokavil y el Averías (ver Serrano 1938, 1940; Márquez Miranda 1940).
Sin embargo, la investigación sobre los modos a través de los cuales estos estilos alfareros pudieron verse involucrados en aquellas relaciones históricas, tuvo su más significativo avance a partir de los aportes realizados principalmente por Lorandi (1978; 1984) y otras autoras (Cremonte 1994; Williams y Cremonte 1994). En tales trabajos se han aportado una serie de datos que contribuyeron a definir la relación que el estilo Yokavil habría tenido con la presencia, en el sur del valle de Yocavil, de olleros prehispánicos provenientes de tierras bajas santiagueño-tucumanas en carácter de aliados y mitimaes incaicos. Esto contribuyo a superar las tradicionales narrativas de perfil diaguito-centrista (Ambrosetti 1901; Serrano 1938), culturalista (Márquez Miranda 1946; Bennet 1948) y ecologista (Lorandi 1978) que sobre el tema habían sido sugeridas hasta ese momento. Pero fundamentalmente aquellas propuestas trazaron, por un lado, una mirada histórico-procesual que aportó elementos de análisis relacional innovadores a la comprensión de los procesos socio-históricos en torno a los cuales se habría constituido y desplegado el estilo Yokavil. Y, por otro lado, movilizó el discurrimiento de preguntas y reflexiones sobre las implicancias sociales, políticas, económicas, culturales e históricas que pudieron haber tenido tales relaciones, y sobre las intermitencias, continuidades y cambios del proceso (Angiorama y Taboada 2008; Taboada y Angiorama 2009; Taboada et al 2010; Leiton ms). De este modo, las identidades plásticas construidas sobre tales clases de objetos alfareros, se constituyeron en materialidad de las discusiones arqueológicas sobre aquellos procesos histórico-sociales, asumiendo un lugar destacado en la historización de las relaciones identitarias que habrían vinculado a aquellas poblaciones indígenas.
Tomando ello como marco, la presente ponencia tiene como propósito exponer una aproximación al análisis y discusión sobre las modalidades que pudieron haber asumido aquellas relaciones. Para aportar al abordaje de esta problemática, nos centraremos en la historia social de las modalidades alfareras Yokavil, en tanto constituyen una particular clase de objetos que estuvieron asociados al trabajo y experiencias de vida de personas presuntamente provenientes de las tierras bajas santiagueñas, en época incaica, en carácter de colonos de mitimaes. Particularmente, el interés de esta investigación estuvo orientado hacia el conocimiento de los elementos técnicos y de diseño que dan cuenta de la identidad plástica de tal estilo, los modos a través de los cuales pudieron desenvolverse sus redes de aprovisionamiento, las experiencias de consumo en las que se vio involucrado, y los contextos histórico-sociales cambiantes en los que tales prácticas, relaciones y procesos, tuvieron lugar. Con el abordaje de esta problemática se pretende contribuir, desde una mirada situada en los procesos histórico-sociales indígenas que tuvieron lugar en los valles intermontanos, al conocimiento y comprensión de las diversas formas en las que las poblaciones indígenas que estuvieron asentadas en las tierras bajas santiagueño-tucumanas, se involucraron y constituyeron en las relaciones que se desenvolvieron a escala macro-regional en tiempos incaicos (Angiorama y Taboada 2008; Taboada y Angiorama 2009; Taboada et al 2010; Leiton ms). Esta problemática general se enmarca en el Proyecto CIUNT “Procesos locales e interacción regional entre las comunidades prehispánicas del piedemonte catamarqueño y área circunvecina. Arqueología, historia de las investigaciones, identidad y transferencia” (Taboada 2010), cuyo principal objetivo es generar múltiples lineamientos de trabajo, información e hipótesis para aproximarse al conocimiento de los diversos procesos socio-culturales indígenas que tuvieron lugar en el pedemonte catamarqueño-tucumano y llanura santiagueña, y las interacciones que se desenvolvieron con poblaciones de regiones aledañas, en particular con los valles intermontanos en las provincias de Catamarca y Tucumán, donde justamente el estilo Yokavil plantea su presencia más notable, heterogénea y prolongada.
Teniendo esto en cuento, en este trabajo nos preguntamos cómo operó política y socialmente el paisaje en el desenvolvimiento de las realizaciones genocidas, alterando y produciendo relaciones sociales y subjetividades en la vida cotidiana de los vecinos del barrio Villa Muñecas (Dpto. Tafí Viejo, Tucumán), a partir de la constitución de un viejo pozo de aprovisionamiento ferroviario de agua (Pozo de Vargas) como un sitio de administración de la muerte. Para ello, se expone un análisis preliminar de entrevistas a vecinos del barrio, y una lectura sobre algunas de las dinámicas desplegadas partir del inicio de trabajos arqueológicos en el lugar con fines periciales de investigación. La atención fue puesta en la experiencia y efectos que tuvo en los vecinos, el proceso de transformación (material y simbólica) del sitio que comprende el pozo, en tanto lugar cuyas relaciones sociales (domésticas, laborales, recreativas) que lo constituían como parte del paisaje social vivido y sentido cotidianamente, fueron alteradas al haber sido empleado y luego desaparecido, como fosa de inhumación clandestina durante las década del 70. Pero también incluimos el proceso abierto, en tales sentidos, a partir del hallazgo y destapamiento del pozo por investigaciones arqueológicas, y de todo lo que en él se encontraba soterrado, tanto en términos materiales como también simbólicos y representacionales; proceso que también trajo aparejado reconfiguraciones en el paisaje social vecinal y en las relaciones y sistemas de representaciones de los vecinos.
Finalmente, se plantea una reflexión sobre el lugar de la práctica de la arqueología como una instancia de encuentro en la producción de condiciones que posibiliten subvertir realizaciones de procesos genocidas, al contribuir al desenterramiento de lugares y cosas, y aportando diálogos a la construcción política y social de nuevos sentidos de lugar que contribuyan a situar y racionalizar experiencias soterradas, exiliadas y traumáticas, urdiendo materialidades, temporalizaciones e identidades, sobre campos de sentidos fragmentarios, oprimidos y fantasmales. Así como también, sobre las dimensiones que entendemos están implicadas en los procesos de restitución de identidades de cosas, lugares, cuerpos, personas, relaciones, experiencias e historias.
La desaparición forzada de personas como tecnología de aniquilamiento, implica un encadenamiento de procesos que se ordenan y despliegan para eliminar a sujetos –que por las relaciones sociales que encarnaban eran- considerados subversivos, anormales, peligrosos.
Tales procesos produjeron una ruptura catastrófica de las relaciones de significación en torno a las cuales las identidades de las personas desaparecidas se constituían como unidades sociales e históricas. El producto de todo ello fueron retazos, pedazos, vacíos, restos de sentidos, historias, nombres y materialidades en las que aquellos se encarnaban. Ahora bien, la tecnología que se desplegó para producir la desaparición forzada –la catástrofe social- tuvo como atributo específico la producción ostensible de lo clandestino. El secreto a voces es lo que resuena, la ruina visible de todo aquello que los perpetradores se ocuparon de ocultar, destruir y silenciar, es el material sobre el cual trabajamos. Esos restos y faltantes de los dispositivos y andamiajes en los que se sostuvieron las posibilidades materiales y simbólicas de aquellos procesos de aniquilación, constituyen nuestras referencias en la construcción de conocimiento.
del análisis distribucional, contextual y estilístico de tres líneas de evidencias: artefactos metálicos, elementos
vinculados a la producción de hilados y objetos cerámicos (estilos Averías y Yokavil). Nuestro enfoque pretende
situarse desde la historia tardía local, aunque cambiando el plano de observación hacia el piedemonte oriental
y los valles centrales. Procuramos contribuir a la discusión y comprensión de los procesos implicados en tales
relaciones. Interpretamos que, además de la movilización de indígenas (mitimaes) desde la llanura hacia instalaciones
incaicas en los valles, las alianzas trascendieron la esfera de interacción política y económica hacia
procesos y estrategias más domésticas de preservación, apropiación e identificación, que generaron la incorporación
y/o la exclusión de ciertos rasgos y objetos, tanto en prácticas y objetos cotidianos de las comunidades
locales, como en las de los mitimaes en los valles. Esto debió traer aparejadas formas emergentes de identidad,
principalmente para mitimaes, yanas e indios de privilegio que cumplieron funciones en instalaciones estatales,
así como entre las comunidades de la llanura, que mantuvieron relaciones de alianza con el Estado incaico."
(2013) Volumen 17, número 2 by Diego Leiton
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Para Ambrosetti, el sentido de la presencia de restos de este tipo de alfarería en tierras santiagueñas, no podía ser otro que aquel condicionado por el lugar en torno al cual sus propios conocimientos eruditos se formaron: los valles calchaquíes. Así, todo indicaba para el pionero que aquel territorio había sido habitado por la denominada "civilización diaguita-calchaquí", a cuyo repertorio patrimonial correspondían esas modalidades de alfarería pintada. Pero, en aquella oportunidad, el autor también agregó que la "civilización diaguita-calchaquí" a la que correspondió tal alfarería, nunca se había vinculado con la cultura incaica, “sentencia” que expuso en objeción a las opiniones del Dr. H. D. Hoskold, quién en la misma época había planteado que esos estilos de cerámica correspondían a tiempos incaicos en la región calchaquí.
Pero también otros autores se han detenido tempranamente a exponer al debate las relaciones que habrían existido entre las poblaciones de tierras bajas santiagueñas y las de valles calchaquíes, a partir de la advertencia sobre ciertas características plásticas que compartían el estilo Yokavil y el Averías (ver Serrano 1938, 1940; Márquez Miranda 1940).
Sin embargo, la investigación sobre los modos a través de los cuales estos estilos alfareros pudieron verse involucrados en aquellas relaciones históricas, tuvo su más significativo avance a partir de los aportes realizados principalmente por Lorandi (1978; 1984) y otras autoras (Cremonte 1994; Williams y Cremonte 1994). En tales trabajos se han aportado una serie de datos que contribuyeron a definir la relación que el estilo Yokavil habría tenido con la presencia, en el sur del valle de Yocavil, de olleros prehispánicos provenientes de tierras bajas santiagueño-tucumanas en carácter de aliados y mitimaes incaicos. Esto contribuyo a superar las tradicionales narrativas de perfil diaguito-centrista (Ambrosetti 1901; Serrano 1938), culturalista (Márquez Miranda 1946; Bennet 1948) y ecologista (Lorandi 1978) que sobre el tema habían sido sugeridas hasta ese momento. Pero fundamentalmente aquellas propuestas trazaron, por un lado, una mirada histórico-procesual que aportó elementos de análisis relacional innovadores a la comprensión de los procesos socio-históricos en torno a los cuales se habría constituido y desplegado el estilo Yokavil. Y, por otro lado, movilizó el discurrimiento de preguntas y reflexiones sobre las implicancias sociales, políticas, económicas, culturales e históricas que pudieron haber tenido tales relaciones, y sobre las intermitencias, continuidades y cambios del proceso (Angiorama y Taboada 2008; Taboada y Angiorama 2009; Taboada et al 2010; Leiton ms). De este modo, las identidades plásticas construidas sobre tales clases de objetos alfareros, se constituyeron en materialidad de las discusiones arqueológicas sobre aquellos procesos histórico-sociales, asumiendo un lugar destacado en la historización de las relaciones identitarias que habrían vinculado a aquellas poblaciones indígenas.
Tomando ello como marco, la presente ponencia tiene como propósito exponer una aproximación al análisis y discusión sobre las modalidades que pudieron haber asumido aquellas relaciones. Para aportar al abordaje de esta problemática, nos centraremos en la historia social de las modalidades alfareras Yokavil, en tanto constituyen una particular clase de objetos que estuvieron asociados al trabajo y experiencias de vida de personas presuntamente provenientes de las tierras bajas santiagueñas, en época incaica, en carácter de colonos de mitimaes. Particularmente, el interés de esta investigación estuvo orientado hacia el conocimiento de los elementos técnicos y de diseño que dan cuenta de la identidad plástica de tal estilo, los modos a través de los cuales pudieron desenvolverse sus redes de aprovisionamiento, las experiencias de consumo en las que se vio involucrado, y los contextos histórico-sociales cambiantes en los que tales prácticas, relaciones y procesos, tuvieron lugar. Con el abordaje de esta problemática se pretende contribuir, desde una mirada situada en los procesos histórico-sociales indígenas que tuvieron lugar en los valles intermontanos, al conocimiento y comprensión de las diversas formas en las que las poblaciones indígenas que estuvieron asentadas en las tierras bajas santiagueño-tucumanas, se involucraron y constituyeron en las relaciones que se desenvolvieron a escala macro-regional en tiempos incaicos (Angiorama y Taboada 2008; Taboada y Angiorama 2009; Taboada et al 2010; Leiton ms). Esta problemática general se enmarca en el Proyecto CIUNT “Procesos locales e interacción regional entre las comunidades prehispánicas del piedemonte catamarqueño y área circunvecina. Arqueología, historia de las investigaciones, identidad y transferencia” (Taboada 2010), cuyo principal objetivo es generar múltiples lineamientos de trabajo, información e hipótesis para aproximarse al conocimiento de los diversos procesos socio-culturales indígenas que tuvieron lugar en el pedemonte catamarqueño-tucumano y llanura santiagueña, y las interacciones que se desenvolvieron con poblaciones de regiones aledañas, en particular con los valles intermontanos en las provincias de Catamarca y Tucumán, donde justamente el estilo Yokavil plantea su presencia más notable, heterogénea y prolongada.
Teniendo esto en cuento, en este trabajo nos preguntamos cómo operó política y socialmente el paisaje en el desenvolvimiento de las realizaciones genocidas, alterando y produciendo relaciones sociales y subjetividades en la vida cotidiana de los vecinos del barrio Villa Muñecas (Dpto. Tafí Viejo, Tucumán), a partir de la constitución de un viejo pozo de aprovisionamiento ferroviario de agua (Pozo de Vargas) como un sitio de administración de la muerte. Para ello, se expone un análisis preliminar de entrevistas a vecinos del barrio, y una lectura sobre algunas de las dinámicas desplegadas partir del inicio de trabajos arqueológicos en el lugar con fines periciales de investigación. La atención fue puesta en la experiencia y efectos que tuvo en los vecinos, el proceso de transformación (material y simbólica) del sitio que comprende el pozo, en tanto lugar cuyas relaciones sociales (domésticas, laborales, recreativas) que lo constituían como parte del paisaje social vivido y sentido cotidianamente, fueron alteradas al haber sido empleado y luego desaparecido, como fosa de inhumación clandestina durante las década del 70. Pero también incluimos el proceso abierto, en tales sentidos, a partir del hallazgo y destapamiento del pozo por investigaciones arqueológicas, y de todo lo que en él se encontraba soterrado, tanto en términos materiales como también simbólicos y representacionales; proceso que también trajo aparejado reconfiguraciones en el paisaje social vecinal y en las relaciones y sistemas de representaciones de los vecinos.
Finalmente, se plantea una reflexión sobre el lugar de la práctica de la arqueología como una instancia de encuentro en la producción de condiciones que posibiliten subvertir realizaciones de procesos genocidas, al contribuir al desenterramiento de lugares y cosas, y aportando diálogos a la construcción política y social de nuevos sentidos de lugar que contribuyan a situar y racionalizar experiencias soterradas, exiliadas y traumáticas, urdiendo materialidades, temporalizaciones e identidades, sobre campos de sentidos fragmentarios, oprimidos y fantasmales. Así como también, sobre las dimensiones que entendemos están implicadas en los procesos de restitución de identidades de cosas, lugares, cuerpos, personas, relaciones, experiencias e historias.
La desaparición forzada de personas como tecnología de aniquilamiento, implica un encadenamiento de procesos que se ordenan y despliegan para eliminar a sujetos –que por las relaciones sociales que encarnaban eran- considerados subversivos, anormales, peligrosos.
Tales procesos produjeron una ruptura catastrófica de las relaciones de significación en torno a las cuales las identidades de las personas desaparecidas se constituían como unidades sociales e históricas. El producto de todo ello fueron retazos, pedazos, vacíos, restos de sentidos, historias, nombres y materialidades en las que aquellos se encarnaban. Ahora bien, la tecnología que se desplegó para producir la desaparición forzada –la catástrofe social- tuvo como atributo específico la producción ostensible de lo clandestino. El secreto a voces es lo que resuena, la ruina visible de todo aquello que los perpetradores se ocuparon de ocultar, destruir y silenciar, es el material sobre el cual trabajamos. Esos restos y faltantes de los dispositivos y andamiajes en los que se sostuvieron las posibilidades materiales y simbólicas de aquellos procesos de aniquilación, constituyen nuestras referencias en la construcción de conocimiento.
del análisis distribucional, contextual y estilístico de tres líneas de evidencias: artefactos metálicos, elementos
vinculados a la producción de hilados y objetos cerámicos (estilos Averías y Yokavil). Nuestro enfoque pretende
situarse desde la historia tardía local, aunque cambiando el plano de observación hacia el piedemonte oriental
y los valles centrales. Procuramos contribuir a la discusión y comprensión de los procesos implicados en tales
relaciones. Interpretamos que, además de la movilización de indígenas (mitimaes) desde la llanura hacia instalaciones
incaicas en los valles, las alianzas trascendieron la esfera de interacción política y económica hacia
procesos y estrategias más domésticas de preservación, apropiación e identificación, que generaron la incorporación
y/o la exclusión de ciertos rasgos y objetos, tanto en prácticas y objetos cotidianos de las comunidades
locales, como en las de los mitimaes en los valles. Esto debió traer aparejadas formas emergentes de identidad,
principalmente para mitimaes, yanas e indios de privilegio que cumplieron funciones en instalaciones estatales,
así como entre las comunidades de la llanura, que mantuvieron relaciones de alianza con el Estado incaico."