Papers by José María Sánchez Benito
Emociones políticas y políticas de la emoción. Las sociedades urbanas en la Baja Edad Media, 2021
El Islam En Espana Historia Pensamiento Religion Y Derecho Actas Del Primer Encuentro Sobre Minorias Religiosas Cuenca 21 22 De Marzo De 2000 2001 Isbn 84 8427 125 0 Pags 75 84, 2001

Studia Historica Historia Medieval, 2012
RESUMEN: El artículo pretende contribuir al estudio de la violencia relacionada con la pugna por ... more RESUMEN: El artículo pretende contribuir al estudio de la violencia relacionada con la pugna por el poder, su naturaleza y características durante la Baja Edad Media. Para conseguirlo, se procede a investigar un caso de estudio, distinguiendo las diferentes formas que muestra y proponiendo unos objetivos que tratan de abarcar el fenómeno con la mayor amplitud posible. Tales objetivos van desde los protagonistas de los hechos hasta la extensión de la violencia y su impacto sobre la vida de las gentes. Palabras clave: Violencia. Guerra. Con icto. Ciudad. Nobleza. Cuenca. Siglo. ABSTRACT: is paper aims to contribute to the study of violence, its nature and characteristics, as related to the struggle for power during the Late Middle Ages. To achieve this 1 Este artículo se ha realizado en el marco del proyecto: «Fundamentos de identidad política: La
Ayuda. Buscador. Ver el registro completo y el enlace al documento. Registro completo. Recurso de... more Ayuda. Buscador. Ver el registro completo y el enlace al documento. Registro completo. Recurso de origen, Medievalismo. Identificador, http://revistas.um.es/medievalismo/article/ view/51521. Título, FISCALIDAD DE ÁMBITO MUNICIPAL ...
En la España Medieval, 2008
El objetivo fundamental de este artículo es el estudio de la diferenciación social aldeana, a fin... more El objetivo fundamental de este artículo es el estudio de la diferenciación social aldeana, a fines del siglo XV y principios del XVI. Para ello se recurre al método prosopográfico y al análisis pormenorizado de los padrones fiscales, utilizando los dos libros del concejo que en la actualidad se conservan en el Ayuntamiento de una localidad llamada Fuentes. De esta manera, atendiendo a la minuciosidad del detalle, se abordan problemas generales para entender mejor el mundo campesino.
En la España Medieval, 1991
Al ínisnso tiempo, se prohibía que los taber' scress eesns prasen cl vino Ira ido para provisión ... more Al ínisnso tiempo, se prohibía que los taber' scress eesns prasen cl vino Ira ido para provisión cte la ciudad antes del elia de Todos los San' tos, y poco antes otra orden les había impedido comprar en el mercado que tenia lugar tos jueves cualquier caistídad de trigo de fuera. cg. 215.

La practica de una trashumancia de largo alcance desde la repoblacion altomedieval en los territo... more La practica de una trashumancia de largo alcance desde la repoblacion altomedieval en los territorios de la Corona de Castilla, llevo aparejada desde un primer momento el desarrollo paralelo de un sistema impositivo que gravaba la propiedad semoviente. La aparicion del mismo no estuvo generada por el sistema senorial, sino que es inherente a las actividades pecurias migratorias, pues su dinamica propia —movilidad de la propiedad mueble, obligatoriedad del transito por vias y parajes legalmente definidos, cobro inmediato en especie, etc.— las hacen muy asequibles a las entidades hacendisticas. Por ello, la tributacion ganadera es denominador comun de todos los pueblos mediterraneos que tienen este tipo de actividad pastoril, y de la mas antigua legislacion, desde la romana Ley Licinia del 367 a.C. y el visigotico Fuero Juzgo hasta las disposiciones del monarca aragones Alfonso el Magnanimo que regulaban el trafico ganadero en la primera mitad del siglo xv para los reinos de la Corona...
Espacio Tiempo y Forma. Serie III, Historia Medieval, 1994
Se sitúa la ciudad de Huete en el lado este de un arriscado cerro coronado por un castillo de ori... more Se sitúa la ciudad de Huete en el lado este de un arriscado cerro coronado por un castillo de origen árabe, cuya altura domina todo el contorno y otorga las mejores posibilidades de defensa. Después de la conquista, durante el proceso repoblador, el caserío urbano fue creciendo alrededor de la fortaleza, por las empinadas cuestas, aferrándose al enclave defensivo y protegiéndose en la parte final de la ladera mediante un cinturón amurallado, que debió terminarse a fines del siglo xii y cuyo trazado partía del alto del cerro, enlazando con el castillo tanto por el norte como por el sur.
Espacio Tiempo y Forma. Serie III, Historia Medieval, 1996
Es perfectamente conocido de todos que Cuenca forma parte de los grandes concejos que surgen en e... more Es perfectamente conocido de todos que Cuenca forma parte de los grandes concejos que surgen en el curso del movimiento colonizador de la plenitud medieval, dotados casi desde un principio con extensos territorios para poblar y defender. No hemos de estudiar aquí la formación y desarrollo histórico de ese ámbito geográfico dependiente de la ciudad, pero sí constituirá el centro de nuestra atención en un período concreto, cual es el reinado de los Reyes Católicos.

Revista de Estudios de la Administración Local y Autonómica, 1988
La Hermandad general impulsada por los Reyes Católicos partía de una ya larga tradición recogiend... more La Hermandad general impulsada por los Reyes Católicos partía de una ya larga tradición recogiendo el amplio cúmulo de experiencias que las sucesivas formaciones hermandinas habían venido desarrollando durante siglos. Los recientes ensayos surgidos a lo largo del reinado de Enrique IV proporcionaban un ejemplo inmediato, y es acertado decir que los nuevos monarcas aprovecharon una idea «que flotaba en el ambiente» (1) y que muchos habían considerado adecuada para salvaguardar valores que como la propiedad y la seguridad quedaban seriamente cuestionados, especialmente, en etapas de inestabilidad política, aun siendo, por otra parte, imprescindibles para el desenvolvimiento económico de las ciudades castellanas, dispuestas a recurrir a la fórmula hermandina con cierta asiduidad desde tiempos que al iniciarse el último cuarto del siglo xv podían considerarse ya casi remotos. Sin embargo, la organización proyectada desde los primeros momentos del acceso al poder de Isabel y Fernando aunque asumía todo lo que era fundamental al concepto hermandad, tal y como por entonces se entendía: solidaridad de ciudades con una finalidad prioritaria de seguridad más allá de los muros de las mismas, mostró pronto, en el curso de las juntas celebradas en el verano de 1476, nuevas vertientes que hacían de la entidad impulsada por la Corona algo claramente novedoso, con objetivos militares y fiscales al servicio de aquélla. Pero, antes que nada, y ya desde comienzos de 1475, la corporación aparecía como una iniciativa regia expresada a través de ordenamientos dados por la monarquía mediante los cuales ésta asociaba a las diferentes tierras, pueblos y núcleos urbanos en una entidad suscitada desde el poder y, naturalmente, para el poder, dando así la vuelta a la tradición hermandina que se basaba en la iniciativa ciudadana y hacía de la organización constituida en cada una de ellas algo independiente (2) coordinándose luego entre sí. Por consiguiente, la nueva hermandad desde el principio resultaba peculiar: la adaptación de una fórmula institucional sólidamente enraizada en Castilla a los intereses de los soberanos para

Studia Historica. Historia Medieval, 2016
RESUMEN: Quizá se haya hecho años atrás, pero en la actualidad no es posible analizar los concejo... more RESUMEN: Quizá se haya hecho años atrás, pero en la actualidad no es posible analizar los concejos y la vida política de las ciudades de la Corona de Castilla prescindiendo de la nobleza territorial que tenía señoríos en su entorno. Así pues, este artículo pretende estudiar el atractivo que los núcleos urbanos tenían para dichos nobles y los procesos a través de los cuales se implantaron en ellos. De esta forma, podremos observar cómo, al hacerlo, condicionaron decisivamente la política ciudadana, la acción de los concejos, así como las bases sociales en que ambas cosas se apoyaban. A tal fin se recurrirá, con una cierta perspectiva regional, a 1 Este trabajo ha sido realizado en el marco del proyecto de investigación, financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad, dirigido por el profesor José Antonio Jara Fuente y titulado Ciudad y nobleza en la Castilla de la Baja Edad Media: la (re)construcción de un marco de relaciones competitivo (HAR2013-42787-P). josé maría sánchez benito algunas consideraciones sobre nobleza territorial, concejos y ciudades a través 188 de un ejemplo: cuenca y huete entre fines del siglo xiii y comienzos del xv © Ediciones Universidad de Salamanca Stud. hist., H.ª mediev., 34, 2016, pp. 187-211 dos ejemplos que son suficientemente significativos, pero entre los cuales hay diferencias que enriquecen la comparación.

Anales de la Universidad de Alicante. Historia Medieval, 1992
En los últimos años la investigación ha dedicado gran atención al estudio de las Cortes medievale... more En los últimos años la investigación ha dedicado gran atención al estudio de las Cortes medievales castellanas, tanto desde el punto de vista global como monográfico, abriendo con ello interesantes caminos que entrocan con un amplio arco temático en cuanto el desenvolvimento de la vida política, fiscalidad o trayectoria de las ciudades y su participación en las decisiones relativas a todo el reino, y con ello se pone sobre el tapete una cuestión de tanto interés como es el problema de la representación, teniendo en cuenta el alcance que a esta palabra cabe dar en los tiempos de la baja Edad Media. Lo que ocurre es que al hablar de las ciudades, su participación y sus relaciones, se plantea de inmediato otra cuestión en absoluto secundaria; me refiero a las hermandades, institución, sin duda, diferente a las Cortes, pero que aparece ante nuestros ojos como expresión de las tendencias asociativas que presencia el mundo urbano en la Castilla de la época (1) y, a la vez, como ámbito de representación de las fuerzas políticas ciudadanas (2). Como es bien sabido, bajo la denominación Hermandad se reúnen en los siglos finales del Medievo castellano entidades muy diferentes, tanto que muchas veces tienen poco que ver entre sí, variando sus fines, su ám-

Espacio Tiempo y Forma. Serie III, Historia Medieval, 2005
Si la Santa Hermandad Vieja de Toledo, Talavera y Ciudad Real en su conjunto, y las dos últimas, ... more Si la Santa Hermandad Vieja de Toledo, Talavera y Ciudad Real en su conjunto, y las dos últimas, en particular, han sido objeto de diferentes estudios, aludiendo tanto a la Edad Media como a la Moderna, la rama toledana, por el menor número de fuentes aprovectiables para su estudio, aun siendo la principal de las tres fia permanecido en una penumbra que no tiene parangón en el caso de sus dos gemelas. El presente artículo tiene como fin profundizar en sus características, organización y funciones, insistiendo en lo que tiene de peculiar, en una cronología —entre los siglos xiv y xv— que resulta especialmente interesante para comprender el proceso evolutivo de esta institución.If the Holy Oíd Brotfiertiood of Toledo, Talavera and Ciudad Real, considered as a whole, and the last two, in particular, have been the purpose of several studies that mentioned their existence both during the Middie Ages and the Modern Age, the Toledan Branch, although it was the main one of the three, has be...

Espacio Tiempo y Forma. Serie III, Historia Medieval, 2014
En el estudio de las ciudades medievales no es raro que la nobleza territorial quede relativament... more En el estudio de las ciudades medievales no es raro que la nobleza territorial quede relativamente en penumbra, llegando incluso a entenderla ajena al sistema urbano. Sin embargo, una mirada simplemente superficial descubre con facilidad que su presencia en la vida ciudadana era muy considerable y así se ha destacado ya en varias investigaciones. Además, es tan grande la complejidad que presenta el influjo de los nobles en la misma que parece oportuno profundizar en los distintos papeles que efectivamente desempeñan y, al mismo tiempo, recapitular la problemática desde una perspectiva comparativa. Así pues, para alcanzar tales objetivos, recurriremos a la observación de los núcleos situados en el centro del reino castellano, a lo largo del río Tajo.In research concerning medieval towns, it is not unusual for the territorial nobility to be neglected as a political player, even to the point of being considered an outsider to the urban system. However, even a quick view will easily rev...
EDAD MEDIA, 2008
concejo castellano, cuya documentación, por su abundancia, permite seguir con detalle suficiente ... more concejo castellano, cuya documentación, por su abundancia, permite seguir con detalle suficiente tanto el contexto en el que se va orquestando como sus diferentes alternancias. Se pretende de este modo una aproximación al modelo que en esta materia siguieron en general las ciudades castellanas del siglo XV, comprendiéndolo en su formación y evolución. Por ello se ha intentado presentar los diversos factores que a lo largo del tiempo fueron condicionando su desenvolvimiento.
Historia. Instituciones. Documentos, 2013
Siendo conscientes de la gran complejidad que presentan los despoblados bajomedievales, en el pre... more Siendo conscientes de la gran complejidad que presentan los despoblados bajomedievales, en el presente artículo se ofrece el estudio de un caso-la tierra de Cuenca-, a fin de analizar el fenómeno conjugando toda suerte de aspectos geográficos, económicos y sobre todo sociales. De este modo, el objetivo último del trabajo no se limita a la organización del territorio sino que va más allá, intentando profundizar en los diferentes intereses y grupos sociales que actuaban en los espacios rurales dependientes de las ciudades realengas.

Historia, instituciones, documentos, 1999
El presente artículo tiene como objeto el estudio de algunos de los problemas que se desprenden d... more El presente artículo tiene como objeto el estudio de algunos de los problemas que se desprenden de las relaciones campo-ciudad en la baja Edad Media castellana. Para este fin se ha elegido un ejemplo que pueda ser significativo y que, al mismo tiempo, permanece todavía casi desconocido. Me refiero a Huete, cabecera en aquellas fechas de un considerable territorio y ciudad' seguramente pequeña pero con vitalidad productiva y un peso específico no demasiado inferior al que por la misma época tenía la cercana Cuenca, a cuya diócesis pertenecía. El amplio espacio desde ella dirigido, cuya extensión casi alcanzaba los 3.000 kilómetros cuadrados, será pues el tema cuya problemática platearemos en los arios del siglo XV. Ciertamente, Huete es en la actualidad un núcleo que apenas llega a los 2.500 habitantes y, al contrario que en otros tiempos, cuenta casi únicamente con la agricultura como sustento económico. Pero cuando los Reyes Católicos implantaron la Hermandad General y para su organización dividieron el reino en provincias, una de ellas tenía su centro rector en la población a cuya problemática dedicaremos nuestra atención en las páginas subsiguientes. Al igual que ocurre en la Extremadura Castellana o, tiempo más tarde, en la cercana Cuenca, la ciudad de Huete, que emerge como centro de importancia al compás de la Reconquista, se organiza desde un principio como concejo de frontera, dotado con un extenso alfoz a fin de poblarlo y defenderlo. En un trabajo anterior hemos resumido la evolución del mismo hasta 1400, por lo que ahora, a título meramente introductorio, tan sólo dedicaré breve atención a los siglos anteriores al XV con el único interés de establecer la configuración de la tierra optense, evitando, por tanto, detalles que ya son conocidos'. En el siglo XII el territorio sometido a la influencia de la ciudad de Huete tan sólo ofrece límites suficientemente precisos en el oeste, por donde se levanta la sierra de Altomira, mientras que al sur y al este permanecía abierto frente a los musulmanes. De este modo, la colonización pudo avanzar en dirección a Cuenca, en manos del Islam, en cuyas cercanías los castellanos llegaron a levantar núcleos poblados antes de la caída de la ciudad. Cuando esto ocurrió y [2] Organización y explotación de la tierra de Huete (siglo XV) De acuerdo con lo que acabamos de ver, el núcleo urbano de Huete disponía desde los tiempos de la repoblación de un amplio territorio que se organizaba desde la ciudad. Dicho espacio, siguiendo una modalidad común a la Transierra castellana y a la vecina Cuenca, estaba dividido en sexmos, cuya fecha de aparición, aunque sin duda es temprana, no podemos establecer. Lo que ocurre es que desconocemos mucho más que los orígenes de estas circunscripciones, porque apenas aparecen mencionadas en la documentación que ha llegado hasta nosotros y ni siquiera se encuentra una sola vez la figura de los sexmeros. Por eso tendremos que conformarnos con enumerarlos. Son estos: Barajas, Carrascosa, El Campo, Caracena, Tinajas y el Sexmillo6. El primero se situaba al suroeste, el sexmo del Campo comprendía el sector más meridional, el de Caracena al este de la urbe, siguiendo el curso del río Mayor en dirección a Cuenca, Tinajas ocupaba todo el sector central de la tierra y el llamado Sexmillo, parcialmente separado del resto por las villas del Infantado, agrupaba el área más septentrional, más allá del río Guadiela (Ver mapa II). Finalmente, el de Carrascosa, debía localizarse en el centro, no lejos de la ciudad. Así organizado el conjunto, desde fechas seguramente no posteriores al siglo XIII cada pueblo disponía de su propio término para atender las necesidades de subsistencia del vecindario7. Pero si como decíamos no hay mención alguna acerca de sexmeros y hasta, al menos en el último siglo de la Edad Media, hay que dudar creo yo de su existencia, los pueblos de la tierra se reunían para determinar los asuntos que les eran propios en la ermita de Santa Ana de la ciudad de Huete, acudiendo dos representantes por cada uno de ellos según se consideraba costumbre en 15058. El verdadero cometido de estas convocatorias, que siempre correspondió hacer al concejo, consistía fundamentalmente en proceder al repartimiento tanto de los pechos reales como del que anualmente se echaba entre los pecheros aldeanos para atender las necesidades de la ciudad y tierra'. Ahora bien, podía haber otros contenidos no poco importantes en estas reuniones. Así, y siempre a convocatoria del concejo, tenían facultad para apoderar 6. Me baso en la relación publicada por J. J. Amor Calzas, Curiosidades históricas de la ciudad de Huete (Cuenca), Madrid, 1904, p. 119, debido a que la documentación conservada no menciona todos los sexmos y resulta muy poco expresiva en lo que a ellos se refiere. De todas formas, hay que aclarar que el citado autor cambia dos de las denominaciones medievales, llamando Villalcampo al sexmo del Campo y Zabala al Sexmillo. 7. J. M. Mangas Navas, El régimen comunal agrario de los concejos de Castilla, Madrid, 1981, pp. 150-51, quien señala que tales términos comprenden las heredades de los aldeanos y los campos de naturaleza colectiva y aprovechamiento local. 8. (A)rchivo (G)eneral de (S)imancas, (C) mara de (C)astilla-Pueblos, leg. 9, fol. 216. 9. Una convocatoria realizada por el concejo para el repartimiento anual que hacía el propio municipio en (A)rchivo (M)unicipal de (Hu)ete, Actas-1490, fols. 14r-16r y otra relativa a una imposición regia en

Historia, instituciones, documentos, 2005
Como no podía ser de otro modo, los estudios sobre el mundo rural tienen tradición en el medieval... more Como no podía ser de otro modo, los estudios sobre el mundo rural tienen tradición en el medievalismo y los especialistas, a partir de fuentes diversas -aunque de manera especial los fondos eclesiásticos-, han tratado numerosos problemas económicos y han indagado hasta cierto punto en lo que se refiere a las formas de vida de las gentes. Naturalmente, las sombras siguen siendo muchas y a iluminar algunas de ellas pretende contribuir esta investigación, aportando enfoques diferentes y el respaldo de unas fuentes nada comunes, cuyo origen no está fuera del mundo campesino, bien sea en una institución clerical, en la ciudad o en la nobleza, sino en la misma aldea. Por consiguiente, nuestro punto de mira va a apuntar directamente a uno de los pueblos de Castilla y a la vida que en el mismo se desarrolla, mediante el análisis pormenorizado de dos libros del concejo pertenecientes a un lugar de la tierra de Cuenca llamado Fuentes'. Dichos libros son muy misceláneos y, desde luego, presentan un grado de desorden verdaderamente grande, pero siguen con cierta puntualidad las actividades del municipio de esa aldea y, a través de la incidencia del mismo, el pulso de la colectividad entera. De esta suerte podremos descubrir la vida municipal en el realengo castellano y más allá de eso nos aproximaremos con cierta precisión al mundo rural en muchas de sus vertientes, a lo largo de un periodo cronológico que va desde los arios setenta del siglo XV hasta casi acabar la primera década del XVI. 1. LA ALDEA Los libros del concejo, que nos van a servir de base a lo largo de este artículo, propician muy poco el estudio del núcleo aldeano. En realidad, apenas si * Este trabajo se enmarca en el proyecto de investigación BHA2002-02573 (M. de Ciencia y Tecnología). 1. Fuentes se sitúa a unos 18 kilómetros de la ciudad de Cuenca en dirección Sureste, siguiendo la carretera nacional que va hacia Teruel. Los dos libros del concejo que constituirán la base documental de este artículo se conservan en la actualidad en el Ayuntamiento de esta localidad, en cuyo archivo llevan las signaturas 162-1 y 162-2. En un trabajo que he realizado recientemente a partir de estas mismas fuentes, cuyo título es "Fiscalidad y mundo rural en tiempos de los Reyes Católicos: estudio de una aldea realenga castellana (Fuentes)" (en prensa), he dado alguna explicación breve sobre estos libros. Hay que tener en cuenta a lo largo de las páginas subsiguientes que casi toda la información que utilizo HID 32 (2005) 287-314

Espacio Tiempo y Forma. Serie III, Historia Medieval, 2002
El objetivo de este artículo es el estudio de la formación y funcionamiento de la Hermandad Gener... more El objetivo de este artículo es el estudio de la formación y funcionamiento de la Hermandad General castellana desde 1464 hasta 1476, esto es, entre los reinados de Enrique IV y los Reyes Católicos. A tal fin, se ha procedido al análisis de las diferentes etapas de su evolución, poniendo en evidencia el impulso que dio la Corona a la institución, primeramente en respuesta a la violenta oposición de la nobleza y, después, como un instrumento de gobierno en manos de la monarquía.The objective in this article is to study about formation and functioning of the Hermandad General of Castilian since 1464 until 1476, that is, between Henry IV and Catholic Kings reigns. For that reason, we have analyzed the different periods of its evolution, demonstrating that the Crown impelled the institution, first in response to violent opposition that was suffering by the sovereign, and later, like and instrument of government at the hands of monarchy.
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Papers by José María Sánchez Benito
emociones que permean las relaciones entre particulares, también en
las sociedades medievales, pero igualmente emociones que articulan
las relaciones que, dotadas de una innegable dimensión política, se
establecen entre los diversos integrantes del cuerpo político y entre
los diferentes sistemas políticos. En todo caso, ya consideremos las
emociones, al menos las básicas, como representaciones o experiencias de naturaleza universal o como constructos sociales que pueden y deben entenderse en el marco de una cultura concreta, la comprensión de la lógica, funcionalidad y operatividad que las emociones políticas alcanzan en una determinada sociedad, requieren de un plus de racionalización, de contextualización, pues la percepción inmediata que genera el referente emocional no se adecúa sin más al proceso político y al marco relacional en el que es llamado a operar. El amor político no se produce necesariamente entre iguales ni manifiesta sus efectos en un ámbito de generoso desinterés; y el miedo o la ira tampoco constituyen necesariamente expresiones de una imposición política que se ejerce o sufre de manera desordenada, desreglada, ilegítima. Esta obra se ocupa de examinar el modo en el que algunas de estas emociones operaron en el interior y en los márgenes -incluso en la superestructura- de las sociedades urbanas medievales occidentales, persiguiendo elucidar su lógica funcional, su significado o significados políticos, y los contextos en los que aquella y estos se desenvolvían.