La masacre de Kurapaty (1937-1941)

Patriarcal Ateneo San Marcos LA MASACRE DE KURAPATY Fig.1 - Kurapaty, un sitio donde los árboles y las cruces se mantienen de pie para recordar al pueblo bielorruso una misión que deben llevar a cabo por la memoria de sus mártires I - La alianza entre el árbol y la cruz La niebla iba disipándose, las copas de los árboles parecían estirarse en busca de la luz del sol. Un mar de ramas pobladas de verde, eran centinelas para aquellos extraños que intentaban ingresar en las profundidades de ese paraje denominado KURAPATY, a pocos kilómetros de la ciudad de Minsk, capital de Bielorrusia. Caminar en medio de los árboles, que ejércitos y pueblos enteros transitaron por milenios, ahora era surcado por una columna de hombres y mujeres, que se iban internando en el mismo, perdiéndose de momentos en medio de una niebla que se resistía a desvanecerse. Al frente de la pequeña columna, iba un hombre de edad, de porte noble, frente en alto, pero de rostro entristecido y por momentos nostálgico. Era el año 2003, primeros días de noviembre, y el conductor del grupo, era Su Beatitud YURI, Emigidiusz Ryzy,(1) fundador en el exilio de la Iglesia Ortodoxa Autocéfala Bielorrusa del Pueblo. Era su tercer y último viaje a su tierra natal Bielorrusia, desde la caída del régimen comunista. Décadas atrás, se había visto forzado al exilio por sus actividades en pro de la libertad de su amada tierra de las garras del comunismo. Frente a los peregrinos, comienzan a surgir entre los árboles, las cruces de KURAPATY, aquellas que desde el año 1989 comenzaron a emplazarse en el lugar. El bosque parecía abrigar con sus árboles y grandes ramas esas cruces, protegiéndolas de un enemigo misterioso. Ellas ya eran parte del bosque de KURAPATY, una fuerza sobrenatural, cuya presencia hacía recíproca la protección hacia los árboles del lugar. Patriarcal Ateneo San Marcos El árbol y la cruz constituían en KURAPATY una cadena aurea de color madera rústica, una alianza que protegía el sueño eterno de las víctimas inocentes masacradas por las hordas criminales que sirvieron al comunismo por más de medio siglo. Fig. 2 - Atravesando el bosque de Kurapaty en una pequeña columna, portando una nueva cruz Fig. 3 - Su Beatitud YURI, Emigidiusz Ryzy, KURAPATY, noviembre del año 2003. II – La historia oculta Entre los años 1935 y 1941, se produce la denominada segunda “Gran Purga”, realizada por el gobierno comunista en todo el territorio que comprendía la ex URSS (Unión de las Repúblicas Socialistas y Soviéticas), durante el liderazgo del Mariscal Josif Stalin. El brazo ejecutor de esta matanza, fue la tristemente conocida policía secreta, la NKVD, Comisariado del Pueblo para Asuntos Internos (en ruso: На ы а а в х ). (2) En tanto la primera gran purga tuvo lugar durante la década del ´20 del siglo pasado, la cual afectó el ala más “revolucionaria” o utópica de la Revolución Bolchevique, su segunda afecto a la “derecha” de la Revolución, cayendo antiguos aliados de Stalin como Lev Kamenev, Grigori Zinóviev (cercanos a Trotsky en un comienzo, que fueron condenados a muerte en 1936) y Nikolái Bujarin (condenado a muerte en 1938 en el “juicio de los 21”). Este periodo de terror, no fue algo específico que haya afectado en exclusividad a la elite gobernante. Los planes de Stalin eran la de centralizar bajo su comando el gobierno de todas las repúblicas soviéticas. Por este motivo ahogó todos los intentos de corte nacionalista (3). Uno de esos casos, fue la República de Bielorrusia, qué al terminar la Primera Guerra Patriarcal Ateneo San Marcos Mundial, declaró su independencia, denominándose “República Popular Bielorrusa” (1918-1919), la cual duró unos 10 meses hasta la llegada de los bolqueviques quienes tomaron el poder por la fuerza. En la historia de RUSIA como conjunto de naciones, Bielorrusia y Ucrania fueron los primeros centros religiosos y políticos de lo que terminaría por constituirse siglos después el Imperio Ruso y posteriormente la Unión Soviética. En el siglo XI, la ciudad de KIEV había adquirido importancia estratégica en toda la región. Quién luego sería la capital de todo ese inmenso territorio, Moscú, surgiría tres siglos después. Esto nos brinda un panorama acerca de que la cultura bielorrusa y ucraniana es originaria y antecesora a aquella que comenzará a irradiar Moscú principalmente luego del gobierno de Iván el Terrible (1550-1584). La política de Stalin fue precisamente la de ahogar todo residuo cultural pre-existente en las repúblicas soviéticas, y en Bielorrusia tenía un particular problema por su fuerte identidad nacional y sus persistentes anhelos de autonomía política y cultural. Fig.5 -Nikolai Yezhov (1895-1940), uno de los principales verdugos de la NKVD, quién tuviera un papel destacado en la segunda gran purga. Finalmente, es ejecutado por los mismos crímenes por los cuales envío a cientos de miles a la muerte. Su reemplazante fue Lavrenti Beria, el último verdugo de Stalin en la NKVD. En consonancia con la ola de terror desatada en los altos mandos y mandos medios del partido comunista, la nomenklatura (burocracia soviética) y el ejército, los juicios de “traición” el ideario comunista, llegarían a Bielorrusia. A diferencia de la farsa de los juicios públicos, donde luego de espantosas torturas y amenazas de asesinar a las familias de los condenados, todos los enjuiciados se declaraban culpables de traición a la Revolución Bolchevique, pasando inmediatamente a ser ejecutados, en Bielorrusia todo fue SECRETO: tropas armadas de la NKVD leales al dictador Stalin, fueron llevando a una gran cantidad de ciudadanos de Bielorrusia, “culpables” de crímenes contra el Estado Soviético a los bosques en KURUPATY, cercana a la ciudad capital de Bielorrusia, Minsk, para su ejecución. En Bielorrusia, miles de personas desaparecerán para siempre de la faz de la tierra entre 1937 hasta 1941. Familias enteras de la noche a la mañana desaparecerían misteriosamente de sus casas, de sus trabajos, de las calles, de sus tareas rurales. Nadie se atrevía a preguntar por su destino, porque el preocuparse por un “traidor” era prácticamente caer en el mismo crimen contra el Estado Totalitario Soviético; donde no se estaba permitido pensar, solo lo que el Estado le diga que decir y hacer por el ideario revolucionario. Fig. 6 - Josif Stalin, junto a Lavrenti Beria, (4) Patriarcal Ateneo San Marcos La sanguinaria purga culminaría en 1941, cuando iniciada ya la Segunda Guerra Mundial, las tropas alemanas ocuparán Bielorrusia hasta 1944. Al finalizar la guerra, la política de los genocidas de Moscú, fue responsabilizar a los alemanes de las masacres perpetradas por el comunismo contra su misma población. Así fue por ejemplo el caso de la masacre de los bosques de KATYN (más de 21.000 militares, policías y civiles polacos fueron asesinados y enterrados en fosas comunes entre 1939 y 1940 por la NKVD), que los comunistas se lo adjudicaron falsamente a los alemanes, y también fue el caso de las ejecuciones en masa en los bosques de KURAPATY. Fig. 7 - Ejecuciones de la NKVD. Fosas comunes sin identificar como las de la imagen, poblaron toda Rusia en tiempos del comunismo. III – El Descubrimiento En el año 1988, durante el gobierno del premier GORVACHOV, la URSS iniciaba un proceso de apertura de libertades civiles denominada GLASNOST (que en ruso significa “apertura”, “transparencia”), y fue dentro de este contexto que Zianon Pazniak, escribe un artículo llamado “Kurapaty, los caminos de la muerte”, acerca de los crímenes en los bosques de KURAPATY. El artículo causó un gran revuelo en la población bielorrusa. Dicho trabajo, le brindo una importante popularidad, que lo lleva a fundar el FRENTE POPULAR BIELORRUSO, que luego de la desintegración de la URSS en 1991, comienza a participar de la vida electoral del país. Lamentablemente, el poder soviético oculto bajo las baldosas de una tierra de la cual no quiere desprender sus garras, con la figura de Alexander Lukashenko, se apoderan del gobierno de Bielorrusia, y obligan a Zianon Pazniak a huir al exterior para evitar ser encarcelado por sus ideas autonomistas. En 1996, será recibido como exiliado político en los Estados Unidos. Como hemos dicho arriba, el artículo publicado en 1988 por Pazniak, levanta una ola de indignación en todo el territorio de Bielorrusia, pero con gran habilidad, las autoridades soviéticas y las que luego vendrían a partir de 1991 impondrían un silencio sepulcral sobre el tema. Durante años, otros opositores políticos como Lavon Barszczeuski (5) exigirían que se revelaran los archivos secretos de la NKVD en Bielorrusia, pero hasta el día de hoy, el gobierno neo-comunista de Vladymir Putin rechaza indagar ese pasado histórico que Patriarcal Ateneo San Marcos avergüenza a muchos sobrevivientes de la época y a dirigentes políticos que actualmente, defienden lo realizado durante los 70 años de existencia de la ex – URSS. Un año después del artículo de Pazniak, el 30 de octubre de 1989, una multitud de descendientes de los ejecutados en KURAPATY, y otros ciudadanos de la región, se acercaron al lugar para honrar a las víctimas del stalinismo, y en especial, se entronizó una enorme cruz para testimoniar lo ocurrido ahí. En ese día, la policía salió a reprimir para desmovilizar a los presentes en el homenaje. Los “héroes” del comunismo, no debían ser mancillados para el gobierno. Fig. 8 - Zianon Pazniak El trabajo de Pazniak no quedó inconcluso: recabo testimonios de familiares de los ejecutados, de testigos presenciales de las ejecuciones, y gracias a sus estudios en arqueología, realizó búsquedas de las fosas, logrando hallar aproximadamente siete lugares donde se hicieron enterramientos en masa, calculándose que podrían contener más de 300 cuerpos. Se conoce que algunos de los cuerpos fueron exhumados, pero según lo dicho por Lavon Barszczeuski no se supo el destino ni el resultado de las investigaciones sobre los mismos. Fig. 9 - El opositor al régimen de Lukashenko, Lavon Barszczeuski testimonia que a cuerpos exhumados de Karapaty, se le desconoce el paradero de los mismos y resultado de las investigaciones. IV – Las cifras de la masacre Se calcula que existen aproximadamente más de 200 fosas comunes en KURAPATY. Las autoridades comunistas, indicaron en su momento que habría aproximadamente 30.000 cuerpos enterrados. Por su parte, Zianon Pazniak, en sus investigaciones, expone que el cálculo estimado es entre 102.000 y 250.000 personas, existiendo otros investigadores que indican el que número es aún mayor. Fig. 10 - Excavaciones en Kurapaty Patriarcal Ateneo San Marcos V – Renacimiento de la DZIADY La tradición eslava festejaba antiguamente el festival de la DZIADY (Д я ы). El término, aunque su transliteración sería “abuelos”, el sentido del mismo es evocar a los “antepasados”. Aunque dicha tradición es de origen pagano, la misma se hizo presente en muchas regiones de la antigua Europa cristiana, y tanto la Iglesia Ortodoxa como la Romana, conmemoran en esas fechas a sus “antepasados”, a sus muertos. La fecha comprende los últimos días de octubre y primeros de noviembre. En cada lugar, la celebración es diferente. El común denominador es ofrendar a los difuntos, comidas y bebidas. Asimismo, en varios lugares, hay procesiones donde desfilan personas con máscaras, y muñecos hechos de diversos materiales como madera, alambres, telas, que no finalizan la fiesta sin ser quemados. Aunque algunas de estas fiestas han desparecido de muchos lugares del mundo, Bielorrusia, desde ese 30 de octubre de 1988, decidió que no debería faltar nunca más un día de DZIADY: el Partido del Frente Popular de Bielorrusia fundado por Pazniak, decidió iniciar el renacimiento de esta tradición, y KURUPATY debía ser el centro de la peregrinación. VI – Entre el olvido y el recuerdo Desde el año 1994, a tres años de la caída del comunismo, gobierna Aleksandr Lukashenko el pasado, presente y futuro de los bielorrusos. El país ha sido considerado como la “primera dictadura del Siglo XXI”, “la isla comunista de Europa”, y tantas formas de enunciar que una lavada forma de neo-comunismo, sigue siendo parte de la vida de los bielorrusos. Ante los hechos de KURAPATY, ante los reclamos de su pueblo, ante el despliegue de las banderas rojas y blancas de la Bielorrusia autónoma, Lukashenko hace de Bielorrusia el satélite más sumiso a la política de Moscú impulsado por el ex KBG, Vladimir Putin. Para el actual gobierno bielorruso, KURAPATY no existe. Y aquellos que se atreven a cuestionar la “historia oficial” pro stalinista, terminan como Pazniak exiliados en el extranjero. Fig. 11 - Su Beatitud YURI, iniciando la excavación del pozo para entronizar la cruz Cabe mencionar que, tampoco el Patriarcado de Moscú se preocupó por la memoria de las víctimas del estalinismo en Bielorrusia (salvo honrosas excepciones no “oficiales”). A modo de aclaración, el Patriarcado de Moscú, es destruido y obligado a Patriarcal Ateneo San Marcos establecer comunidades religiosas en el exilio, por las persecuciones despiadadas de los bolcheviques cuando estos toman el poder en el año 1917. Posteriormente, el Patriarcado sería “rehabilitado” por Stalin a partir de 1941, imponiendo su primer Patriarca pro-comunista Sergio (Stragorodski) en 1943 en plena Segunda Guerra Mundial para levantar la moral combativa de los rusos. Significaba que la religión no era más el “opio del pueblo”?. No, por el contrario, las persecuciones continuarían y el Patriarcado de Moscú sería un apéndice de la política imperialista de la URSS. Fig. 12 - Divina Liturgia para las víctimas de Kurapaty. Su Beatitud YURI es acompañado por el arcipreste Viktor. * * * Aún con este panorama poco alentador, la VERDAD se desliza entre las grietas de los muros del silencio. La VERDAD viaja en el viento que acaricia los árboles y cruces de KURAPATY. Los exiliados escriben. Las publicaciones rompen las cortinas de hierro. La bandera roja y blanca ondea en muchos hogares de Bielorrusia y del mundo entero. Uno de los tantos exiliados, regresó en el año 2003 para brindar su homenaje a las víctimas del comunismo. Su Beatitud YURI, Emigidiusz Ryzy, viajo desde los Estados Unidos para reunirse con el Arcipreste Viktor en los bosques de KURAPATY, con el objeto de plantar una cruz más en el lugar. Bajo una fuerte nevisca, hicieron el pozo, colocaron la cruz, y luego realizaron una Liturgia ante unos pocos asistentes. Desde la caída del comunismo, la Iglesia Ortodoxa Autocéfala Bielorrusa del Pueblo, nació para consolidar una iglesia nacional en Bielorrusia, ajena a la injerencia del Patriarcado de Moscú, la cual es cómplice de la “amnesia” de las autoridades y de la propaganda neo-comunista en la Bielorrusia de Lukashenko. Patriarcal Ateneo San Marcos Desde el año 1993, en que Su Beatitud YURI realiza el primer viaje de retorno a su amada Bielorrusia, comienza esta tarea que continuamente será truncada por las autoridades políticas y religiosas, llegándose a demoler la primera capilla instalada por su clero y sus fieles. Asimismo, a la represión policial, se le sumó la presión/persecución de los fieles de la Iglesia, por autoridades religiosas y simpatizantes pro-comunistas, situación que también sufrió el memorial de KURAPATY, donde se testimoniaron actos de vandalismo contra las cruces de madera traídas por los pobladores. Hoy, año 2016, en tiempos de DZIADY, la bandera bielorrusa ondea en diferentes lugares del mundo. Una vela se enciende, y las cruces de KURAPATY inician con el viento y los árboles un melodioso y tierno canto que buscan llevar paz a las víctimas que yacen bajo tierra. Х ы ва ! Vladyka TEOFANO, Juan Manuel Garayalde (6) Archieparquia de la República Argentina Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava en el Extranjero Buenos Aires, 02-11-2016 NOTAS: (1) Su Beatitud YURI, Emigidiusz Ryzy nace en Latygol, Bielorrusia el 05 de agosto del año 1923 y fallece en Ossining, Estado de Nueva York, Estados Unidos el 30 de noviembre de 2015. Proveniente de una familia de nacionalistas bielorrusos, junto a su hermano ULADISLAV, deberán optar en diferentes momentos de sus vidas, por el exilio en los Estados Unidos, a riesgo de ser arrestados y ejecutados por la policía secreta NKVD, luego conocida como la KGB en la Unión Soviética. En los Estados Unidos, junto con otros obispos exiliados, en el que se destaca Su Beatitud PETER II, Andreas Zhurawetsky, fundan el “American World Patriarchs” (1967), y con posterioridad la “Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava en el Extranjero” (1972). Al fallecer Su Beatitud ULADISLAV, Ryzy Rysky en el año 1978, Su Beatitud YURI asume la conducción del “American World Patriarchs” hasta su muerte en el año 2015. En ese tiempo, funda la “Iglesia Ortodoxa Autocéfala Bielorrusa del Pueblo”, con asiento en Estados Unidos y Bielorrusia. Caído el comunismo, Su Beatitud YURI retorna en tres oportunidades (1993, 1997 y 2003) a su patria bielorrusa a consolidar su iglesia, hasta que un cáncer malogrará los esfuerzos de sus últimos años. Su última actividad oficial, fue la visita a la República Argentina en octubre de 2014, para visitar una de las misiones de la “Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava en el Extranjero”. (2) Fig. 4, oficiales de la NKVD (3) Al igual que Vladimir Lenin, Stalin creía que el nacionalismo era un obstáculo a la Revolución Proletaria, la cual tenía necesariamente una orientación hacia la unificación dentro de un estado plurinacional. El “nacionalismo” solo era aceptable si el mismo ayudaba a derrocar un establishment burgués, para instalar la Dictadura del Proletariado. Sobre el tema, ver: “El Marxismo y la Cuestión Nacional” de Josif Stalin.(4) Lavrente Beria, será el último verdugo dentro de la NKVD en tiempos de Stalin. Al fallecer este último en 1953, y temiendo una nueva purga por parte de la NKVD, Beria sería ejecutado en diciembre de 1953 por el nuevo hombre fuerte de la URSS: Nikita Krusckev (5) Ver entrevista en: https://communismblog.wordpress.com/2015/01/20/communist-crimeskurapaty-massacre-belarus/ Patriarcal Ateneo San Marcos (6) Vladyka TEOFANO, Juan Manuel Garayalde, es argentino, nacido en la ciudad de Concordia, Argentina, en 1973. Realizó sus estudios en la ciudad de Buenos Aires, obteniendo su título en la licenciatura en Ciencia Política (1998-Universidad del Salvador), cursando posteriormente una especialización en Políticas Sociales (1999-Univ. de General San Martin) y la Maestría en Estudios Estratégicos (2000-Escuela de Guerra Naval). En esos años, comenzó a participar de grupos de estudios de orientación tradicionalista, especializados en la obra de René Guénon, Julius Evola, Mircea Eliade, Ananda Coomaraswamy y otros pensadores de la mencionada corriente de pensamiento. Desde el año 2004 al 2011, ha sido responsable de la organización de la “Semana Guenoniana de Buenos Aires”, que reúne a importantes especialistas en estudios tradicionales del mundo de habla hispana. Desde el año 2006, desempeña tareas técnico-pedagógicas en al Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires. -En el año 2007, es ordenado sacerdote en la Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava en el Extranjero (IOBE). -En el año 2009, por economía eclesiástica, es elevado al Episcopado, siendo obispo coadjutor del Archieparca de San Vicente, Vladyka FRANCISCO, Franc Primozic. -En el año 2010 culmina el Posgrado en Teología Ortodoxa brindado por el Patriarcal Ateneo San Marcos (PASM), con sede en San Pablo, Brasil, presidido por la autoridad máxima de la Iglesia, Su Beatitud Athanasios 1º Aloysios. Posteriormente asume funciones dentro del PASM responsable de armar cursos de formación para laicos, postulantes y para el seminario interno de la Iglesia. -En el año 2011, el Santo Sínodo de la IOBE lo designo Eparca Coadjutor de la ciudad de Buenos Aires. -En el año 2015, es designado como Archieparca General de la República Argentina por el Santo Sínodo. -Desde el año 2013, es responsable de la Secretaria de Asuntos Externos del Patriarcado de Su Beatitud Athanasios 1º Aloysios.