Revista Latinoamericana de Psicología
ISSN: 0120-0534
direccion.rlp@konradlorenz.edu.co
Fundación Universitaria Konrad Lorenz
Colombia
Garrido, Lusmenia; Santelices, María Pía; Pierrehumbert, Blaise; Armijo, Iván
Validación chilena del cuestionario de evaluación de apego en el adulto CAMIR
Revista Latinoamericana de Psicología, vol. 41, núm. 1, 2009, pp. 81-98
Fundación Universitaria Konrad Lorenz
Bogotá, Colombia
Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=80511492006
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Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto
Validación chilena del CAMIR
Validación chilena del
cuestionario de evaluación de
apego en el adulto CAMIR
Chilean validation of the questionnaire of attachment
evaluation in the adult CAMIR
Lusmenia Garrido
Universidad Católica del Maule, Chile
Recibido: enero de 2008.
Aprobado: marzo de 2009.
María Pía Santelices
Pontificia Universidad Católica de Chile
Blaise Pierrehumbert
Université de Lausanne, Suiza
Iván Armijo
Pontificia Universidad Católica de Chile
Correspondencia: Lusmenia Garrido, Universidad Católica del Maule, Chile.
Correo Electrónico: lgarrido@ucm.cl .
La elaboración de este artículo contó con el financiamiento otorgado por
el Proyecto Interno N 8.1.4.11. de la Universidad Católica del Maule, y el
Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico, FONDECYT
Nº 7060155
Resumen
Abstract
El objetivo de esta investigación fue examinar la
confiabilidad y validez del instrumento de evaluación de
apego en el adulto, Cartes: Modèles Individuels de
Relation (CAMIR), en la realidad sociocultural chilena.
Este instrumento, basado en la teoría del apego, es un
cuestionario de auto-reporte que evalúa los modelos
operativos internos en adultos y otras escalas relacionadas al apego. Los participantes fueron 578 sujetos, 204
hombres y 374 mujeres, con edades entre 14 y 80 años.
Los sujetos completaron el CAMIR y medidas de vínculo y sintomatología actual, a través del Parental Bonding
Instrument (PBI) and Outcome Questionnaire OQ-45.2.
A través del análisis estadístico de los resultados se evaluaron las características psicométricas del test y se analizó la posibilidad de generar normas locales para la prueba.
Los resultados confirmaron que el CAMIR es un instrumento confiable y válido en la evaluación de los modelos
internos de relación en adultos.
This study was designed to estimate the validity and
reliability of the Cartes: Modèles Individuels de Relation
(CAMIR), in Chile. This inventory, based on attachments
theory, its a auto-questionnaire evaluates the working
models in adults and other scales relating to attachment.
Participants were 578 individuals, 204 males and 374
females, 14 a 80 years old. Individuals completed the
CAMIR and measures of bond and actual symptoms,
with the Parental Bonding Instrument (PBI) and Outcome
Questionnaire OQ-45.2. The general norms were
obtained according to a statistical analysis of the results
and to an evaluation of the psychometric characteristics
of the test. The results confirmed that the psychometric
characteristics of the CAMIR make it a reliable and valid
tool to assess working models in adults.
Key words: CAMIR, models, attachment, adults.
Palabras clave: CAMIR, modelos, apego, adultos.
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Garrido, Santelices, Pierrehumbert & Armijo
Introducción
La teoría del apego (Bowlby, 1969, 1986, 1989, 1998) es
concebida como una tendencia de los seres humanos a
establecer vínculos afectivos sólidos con personas determinadas a través de la vida. En la actualidad, la teoría
constituye una de las construcciones teóricas más sólidas
e influyentes en distintas áreas de la psicología y cuenta
con importante investigación empírica (Hazan & Shaver,
1994a; Marrone, 2001; Rholes & Simpson, 2004; Shaver
& Mikulincer, 2002b).
La experiencia del niño con sus cuidadores tiene un
rol fundamental en la capacidad posterior de establecer
vínculos afectivos; es importante que el niño pueda depender de sus figuras de apego y que éstas puedan contener y
proteger al niño cuando lo necesita. Esto tendría que ver
con lo que Bowlby (1969, 1986, 1989) identificó como
modelo operativo interno, internal working model, que se
define como una representación mental de sí mismo y de
las relaciones con los otros, y que hacen posible anticipar,
interpretar y responder a la conducta de sus figuras de apego, ya que integran experiencias presentes y pasadas en esquemas cognitivos y emocionales. Estos modelos,
construidos a partir de las relaciones con las figuras de apego (West & Sheldon-Keller, 1999), se organizan como patrones de pensamientos, memoria, sensaciones y
sentimientos acerca de las relaciones tempranas y sirven de
guía para futuras relaciones interpersonales significativas
(Benoit & Parker, 1994; Fonagy, Steele & Steele, 1991;
Fonagy et al., 1995; Pietromonaco & Feldman, 2000).
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Luego de estos primeros intentos y hasta la actualidad, ha sido enorme la diversificación en la medición del
apego adulto, poniéndose énfasis distintos en su conceptualización, en la forma de evaluar, en el foco de la evaluación, en el tipo de instrumentos utilizados, etc.
(Bartholomew, 1994; Bifulco, 2002; Casullo & Fernández,
2005; Griffin & Bartholomew, 1994; Harris, 2002;
Jacobvitz, Curran & Moller, 2002; Martínez & Santelices,
2005; Hazan & Shaver, 1994b; Shaver & Mikulincer, 2002a;
Shaver & Mikulincer, 2004; Stein, Jacobs, Ferguson, Allen
& Fonagy, 1998; Stein et al., 2002).
Martínez y Santelices (2005) presentan una exhaustiva revisión de la evaluación del apego y señalan que en
Chile no existe una tradición en la investigación del apego
en adultos, insistiendo además en la escasez de literatura
nacional en esta temática. Lo anterior aumenta la relevancia de la presente investigación, al permitir contar con un
instrumento validado en población chilena.
Para Bretherton (1990, 1997, 2005), la propuesta de
Bowlby en relación a los modelos operantes internos es
uno de los conceptos más relevantes de su legado, en la
medida que forma la base desde la cual los sujetos inician
y mantienen otras relaciones cercanas. Además, serían relativamente estables a lo largo del ciclo vital (Bretherton,
1999; Fonagy, 1999). Este concepto es clave en la medición o evaluación del apego en el adulto; si bien en las
primeras décadas el esfuerzo se orientó a la evaluación
del apego en niños a través de comportamientos específicos (Ainsworth, Blehar, Waters & Wall, 1978), en las últimas décadas se ha producido un creciente interés por
estudiar el apego en el adulto (Shaver & Mikulincer, 2002a;
Simpson & Rholes, 2002; West & Sheldon-Keller, 1999),
siendo las representaciones y modelos internos conceptos centrales (Collins, Guichard, Ford & Feeney, 2004).
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Una de las primeras propuestas en este ámbito, fue
la Entrevista de Apego Adulto o Adult Attachment Interview,
descrita con la sigla AAI, y creada por Mary Main
(Marrone, 2001). Esta entrevista es una medida
representacional basada en la narrativa de los sujetos de
su propia historia de apego; el énfasis está en las representaciones mentales de las relaciones padre-hijo (Shaver
& Mikulincer, 2002b). Si bien es una de las entrevistas
más utilizadas en la actualidad (Maier, Bernier, Pekrun,
Zimmermann & Grossmann, 2004), tiene ciertas desventajas que la hacen más inaccesible, ya que requiere un entrenamiento costoso, realizado en pocos lugares del
mundo y un conocimiento importante de la teoría del
apego (Martínez & Santelices, 2005). Por otro lado,
Carnelley y Brennan (2002) alertan en relación a la subjetividad que existe en la codificación de la trascripción de
la AAI, lo que podría implicar errores en la categorización
de los sujetos.
CAMIR: Cartes, Modèles Individuels de
Relation
Cartes, Modèles Individuels de Relation (CAMIR), es un
cuestionario de autoreporte para acceder a los modelos
operativos internos en adultos. Este cuestionario fue creado por Pierrehumbert et al. (1996) en Lausanne, Suiza. Su
objetivo es la evaluación de las estrategias relacionales del
adulto, suponiendo la existencia de un modelo de sí mis-
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mo y del otro en las relaciones interpersonales
(Pierrehumbert et al., 1996).
Para la construcción de CAMIR, el objetivo fue crear
un instrumento que enfatizara en primer lugar las relaciones en la infancia, pero igualmente lograra dar cuenta de
las representaciones de las personas en cuanto a sus necesidades emocionales y las de los demás. Se trataría de
conocer, por una parte, la apreciación actual de la persona acerca de las relaciones de vínculo en la infancia y, por
otra, las características del sistema de intercambio
interpersonal en su medio familiar actual. Así, los ítemes
se definieron para cubrir 4 niveles de realidad: el presente
(preguntas relativas a la familia actual), el pasado (preguntas destinadas a captar elementos de la experiencia pasada con los padres), el estado de ánimo (preguntas
concernientes a la apreciación actual de la implicación de
los padres en un nivel de elaboración, más que a los recuerdos o experiencia real) y las generalizaciones (representación generalizada y semántica de la parentalidad y de
las necesidades emocionales de niños y adultos). En cada
uno de estos niveles, los ítemes exploran las estrategias
relacionales, a) estrategia primaria: la persona valora el
apoyo social y la seguridad relacional (prototipo seguro)
y b) estrategia secundaria: la persona valora la independencia en desmedro del apoyo relacional (prototipo
rechazante) o, por el contrario, valora la implicación
interpersonal en desmedro de la autonomía (prototipo
preocupado).
La fuente para la obtención de los ítemes fue la literatura, entrevistas clínicas e instrumentos ya existentes. La
base original estuvo constituida por 1500 ítemes; se procedió a reducciones sucesivas por consenso para eliminar
redundancias, pasando a 251 ítemes que constituyeron un
precuestionario Bi-Mir, que fue aplicado a 368 personas
de Suiza y Francia. Se realizó un estudio de validación del
instrumento, utilizando un análisis factorial en rotaciones
varimax, sobre los 251 ítemes de 339 cuestionarios completos. Se aislaron 13 factores (A a M), con un total de 72
ítemes, cuya consistencia interna para los 13 factores son:
.72, .70, .81, .82, .78, .70, .81, .48, .85, .78, .71, .71, .71.
Estos 72 ítemes constituyeron el cuestionario definitivo
CAMIR, reagrupados en las siguientes escalas:
Escala A: Interferencia Parental (IP); Escala B: Preocupación Familiar (PF); Escala C: Resentimiento de
Infantilización (RI); Escala D: Apoyo Parental (AP); Escala
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E: Apoyo Familiar (AF); Escala F: Reconocimiento de Apoyo
(RA); Escala G: Indisponibilidad Parental (IP2); Escala H:
Distancia Familiar (DF); Escala I: Resentimiento de Rechazo
(RR); Escala J: Traumatismo Parental (TP); Escala K: Bloqueo de Recuerdos (BR); Escala L: Demisión Parental (DP);
Escala M: Valorización de la Jerarquía (VJ).
Las escalas ABC se aproximan a la noción de preocupación, las escalas DEF son relativas a la autonomía,
las escalas GHI evocan lo rechazante, las escalas JK se
relacionan con la no-resolución y las escalas LM son relativas a la estructuración del medio familiar.
De tal manera, el cuestionario definitivo mantuvo
72 ítemes, los que fueron transcritos cada uno sobre una
carta. La aplicación, que dura aproximadamente 30 minutos, implica la utilización del cuestionario de dos maneras diferentes: en formato Likert y en formato Q-Sort.
En una primera etapa se solicita al sujeto repartir las
72 cartas en cinco montones, desde muy verdadero, verdadero, ni verdadero ni falso, falso, a muy falso, teniendo
puntajes de 1 a 5. Posteriormente, se procede al procedimiento Q-Sort o de distribución forzada, solicitando al
sujeto retomar su elección de manera que cada montón
tendrá un número determinado de cartas, indicado en la
tarjeta. Este procedimiento es muy interesante, ya que disminuye la deseabilidad social y permite explorar aspectos
significativos de la experiencia personal del sujeto. Se dispone de tres prototipos de Q-Sorts: el prototipo
rechazante, preocupado y seguro. De este modo, el
CAMIR entrega puntajes en 13 factores de variables relacionadas a los patrones de apego y además entrega puntajes
en cada uno de los prototipos de apego (seguro,
rechazante y preocupado), describiendo al caso predominante.
Dentro de las ventajas de la aplicación de este instrumento se cuenta que: a) evalúa el concepto de apego en
forma más integral a las pruebas validadas preliminarmente en Chile, con base en la AAI, considerando además el pasado, presente y el estado de ánimo, y b) su
aplicación puede ser realizada de manera económica y
rápida, con encuestadores que no necesitan una capacitación tan exclusiva como los de la AAI. Otra ventaja importante es que logra mezclar dos sistemas de clasificación:
el categorial y el dimensional, lo que implica una mayor
riqueza en el análisis, menores pérdidas de información y
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mayor utilidad en el ámbito clínico. De hecho, algunos autores contemporáneos sugieren que las mediciones basadas en
prototipos, puede ser más adecuada en el apego adulto
(Griffin & Bartholomew, 1994), considerando que es difícil
que los sujetos correspondan en forma exacta a un patrón
de apego dadas las distintas influencias pasadas y las influencias específicas de relaciones y situaciones presentes en sus
relaciones de apego. Por último, el CAMIR ha sido utilizado
ampliamente en investigación, reafirmando su confiabilidad
- validez y la posibilidad de realizar investigación transcultural
(Miljkovitch, Pierrehumbert, Karmaniola, Bader & Halfon,
2005; Pierrehumbert et al., 2002).
realidad social y cultural chilena desde un punto de vista
lingüístico y semántico, b) evaluar validez aparente, de
contenido, de constructo y convergente del instrumento
adaptado, y c) analizar la consistencia interna de CAMIR,
sus escalas y prototipos.
Método
Participantes
Se evaluó un total de 578 sujetos (374 mujeres y 204 hombres), provenientes de la Región Metropolitana (n=193) y
del Maule (n=385) de Chile. Se utilizó un proceso de
muestreo mixto. En el caso de la Región Metropolitana,
el muestreo se hizo entre madres que asistían a programas de promoción de apego seguro y que constituyeron
la muestra de la primera evaluación de la adaptación chilena del test, a la que se agregó una muestra universitaria
que permitió representar a personas de distinto sexo y
nivel socioeconómico (NSE). En el caso de la Región del
Maule, se hizo un muestreo aleatorio simple entre alumnos, docentes y funcionarios de la Universidad Católica
del Maule (con base en los registros académicos universitarios) y entre funcionarios del Hospital Regional de Talca
(con base en los registros del hospital). La edad promedio de hombres (M: 27.28, DE: 10.92) y mujeres (M:
26,63, DE: 10,29), no muestra diferencias estadísticamente
significativas (t=0,72, p=0,47). El 77% de la muestra se
encuentra en el rango joven, de 14 a 30 años (n=445),
mientras que el 33% restante está en el rango adulto, de
31 a 80 años (n=133). La clasificación por NSE se pudo
obtener en forma confiable para el 82,2% de la muestra
(n=475), con un 26.9% de sujetos de NSE bajo, 59.4%
de NSE medio y 12.4% de sujetos con NSE alto. Todos
los sujetos aceptaron voluntariamente participar en el estudio, obteniéndose el consentimiento informado correspondiente y la aprobación de los comités de ética de las
instituciones correspondientes.
El presente estudio tiene como objetivo central adaptar y validar el instrumento de evaluación de estilos de
apego en el adulto CAMIR para su uso en la población
Chilena. Con este objetivo, se analizó la adecuación lingüística del test, la confiabilidad obtenida por sus escalas
y la validez del instrumento en sus distintos niveles: Aparente o Face, Contenido, Constructo y Convergente
(Anastasi & Urbina, 1997). Como pruebas de contraste
se utilizan el PBI y el OQ-45.2, ambos instrumentos validados en Chile. El PBI posee indicadores estadísticos
que muestran un buen nivel en su confiabilidad y validez
(Melis et al., 2001), evaluando escalas de cuidado (apunta
a la presencia o ausencia de éste, y es definido como afectuosidad, contención emocional, empatía y cercanía o frialdad emotiva, indiferencia y negligencia) y sobreprotección
(alude a la presencia o ausencia de ésta y se define como
control, sobreprotección, intrusión, contacto excesivo,
infantilización y prevención de la conducta autónoma),
permitiendo obtener estilos de vínculo parental que pueden transformarse a categorías clásicas de apego.
Por otra parte, existe abundante evidencia de la relación existente entre estilos de apego y psicopatología, reportada en una gran cantidad de investigaciones y que
apunta a mayores problemáticas en los estilos de apego
inseguros (Allen et al., 2001; Andersson & Perris, 2000;
Crittenden, 1995; Green & Goldwyn, 2002; Muris, Mayer
& Meesters, 2000). De este modo, se espera confirmar
que existan diferencias en los puntajes obtenidos en el
OQ-45.2, entre los distintos estilos de apego evaluados a
través del CAMIR, tendiendo los estilos inseguros a presentar puntajes más elevados en las escalas del OQ-45.2.
Instrumentos
CAMIR (Cartes, Modèles Individuels de
Relation)
Se midió los modelos internos de relación y las estrategias relacionales de los individuos o prototipos de apego;
estrategia primaria: seguro y estrategia secundaria:
rechazante-preocupado, además de las 13 escalas ya se-
De esta manera, los objetivos específicos de esta investigación fueron: a) adaptar los ítemes del CAMIR a la
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ñaladas en el apartado anterior. Se utilizaron 71 de los 72
ítemes originales del CAMIR (Pierrehumbert et al., 1996),
con formato de respuesta tipo Likert de 1 a 5 (desde
muy verdadero, verdadero, ni verdadero ni falso, falso a
muy falso) y en la segunda etapa se agrega el procedimiento Q-Sort, en que se obliga al sujeto a dejar una cantidad específica de cartas en cada categoría (desde muy
verdadero, verdadero, ni verdadero ni falso, falso a muy
falso).
Parental Bonding Instrument (PBI)
Adaptado en Chile por Albala y Sepúlveda (1997) y estandarizado por Melis et al. (2001). El PBI es un cuestionario de autorreporte, desarrollado por Parker, Tupling
y Brown en 1979, que mide la percepción de la conducta
y actitud de los padres en relación con el sujeto en su
infancia y adolescencia. El cuestionario posee un total de
25 ítemes, que se contestan en forma separada en relación a los recuerdos con el padre y con la madre; en este
estudio sólo se contestó en relación con la madre. Cada
ítem se puntúa a través del método Likert y éstos componen dos escalas: cuidado (apunta a la presencia o ausencia de éste, y es definido como afectuosidad, contención
emocional, empatía y cercanía o frialdad emotiva, indiferencia y negligencia), y sobreprotección (alude a la presencia o ausencia de ésta y se define como control,
sobreprotección, intrusión, contacto excesivo,
infantilización y prevención de la conducta autónoma)
(Melis et al., 2001). A partir de los puntajes se pueden
elaborar cinco tipos de vínculos parentales: vínculo óptimo, ausente o débil, constricción cariñosa, control sin afecto
y promedio entre ambas escalas. En la adaptación Chilena, el PBI obtuvo buenos niveles de confiabilidad (con a
de Cronbach entre .78 y .93) y logró replicar la estructura
factorial de la versión original. Para efectos del presente
estudio se consideró un vínculo positivo la obtención de
puntajes medios y altos de cuidado asociados a baja
sobreprotección, un vínculo medio cuando se obtienen
puntajes medios de cuidado y medios de sobreprotección,
y vínculo negativo cualquier combinación que incluya alta
sobreprotección o bajo cuidado.
Este instrumento ha sido utilizado ampliamente a
nivel mundial (Manassis, Owens, Adam, West, & SheldonKeller, 1999; Mancini, DOlimpio, Prunetti, Didonna, &
Del Genio, 2000; Cheng & Furnham, 2004; Favaretto,
Torresani & Zimmerman, 2001; Myhr, Sookman &
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Pinard, 2004; Willinger, Diendorfer-Radner, Willnauer,
Jorgl & Hager, 2005).
OQ-45.2
Validado y adaptado para Chile el año 2001 por De la
Parra, Von Bergen y Del Río, el OQ-45.2 es un cuestionario autoadministrado que permite evaluar patología y
que logra discriminar poblaciones consultantes y controles. Fue creado por Lambert et al. (1996) y ha sido utilizado ampliamente en investigación (Correa et al., 2006;
Florenzano, Artero, Gonzalez, Martínez & Ortega, 2005).
El instrumento consta de 45 ítemes que se puntúan a través del método Likert, y que abarcan tres dominios de
problemáticas de personas en búsqueda de ayuda
psicoterapéutica: a) síntomas y malestar subjetivo con 25
ítemes, b) relaciones interpersonales con 11 ítemes y c)
rol social con 9 ítemes. Los autores reportan una alta capacidad de discriminación del instrumento, tanto entre
pacientes y controles, como en la población misma, según el grado subjetivo de perturbación psicológica. Los
índices de confiabilidad por métodos α de Cronbach
fluctúan entre .65 y .88 para las sub-escalas y .91 para la
escala total. El OQ45-2 se utilizó como criterio externo
de validación para los resultados del CAMIR, dada la
evidencia acerca de asociación significativa entre estilos
de apego y psicopatología (Allen et al., 2001; Andersson
& Perris, 2000; Benony, Peny, Gianoli, Hernández &
Larome, 2001; Crittenden, 1995; Green & Goldwyn,
2002; Muris, Mayer & Meesters, 2000).
Procedimiento
El proceso de adaptación del CAMIR siguió los pasos
típicos de adaptación y validación de test. La versión
chilena se construyó sobre la base de la traducción y
retraducción de la versión francesa del test
(Pierrehumbert et al., 1996), siendo ésta aprobada por el
autor principal del test. La versión en español fue evaluada por un grupo de jueces expertos, quienes verificaron tanto la validez de contenido del test, como la
adecuación de la redacción de los ítemes a las formas
lingüísticas chilenas. A partir de este análisis, y luego de
una aplicación piloto con una muestra reducida para
verificar la comprensión de los ítemes, se decidió eliminar el ítem 70 (De niño(a), a menudo tenía la sensación
que mis seres queridos no estaban muy seguros de la
validez de sus exigencias), dado que se lo consideró
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confuso para la población chilena, ajustando los cálculos
de escala correspondientes.
obtener puntajes que fluctúan entre 1 y 5 puntos, donde
un mayor puntaje indica mayor presencia de la dimensión medida. Dadas estas restricciones, es esperable obtener medias entre 2 y 3 puntos y una distribución
relativamente normal de los puntajes.
La versión final fue aplicada a la muestra, obteniendo los puntajes por escala y por tipo de apego para cada
individuo. Se calcularon los estadísticos descriptivos para
cada escala, la consistencia interna (a de Cronbach) y la
homogeneidad (correlación inter-ítem) de cada escala y
del test general. Se analizaron las correlaciones inter-escala y la estructura factorial interna de los ítemes como
forma de verificación de la validez de constructo. Finalmente, se analizó la validez concurrente del test verificando la asociación obtenida entre los tipos de apego CAMIR
y la calidad del vínculo detectada por el PBI, así como la
asociación de los distintos tipos de apego CAMIR con
los niveles de patología detectados por el OQ-45.
Por su parte, las dimensiones de apego son evaluadas inicialmente por medio de una correlación de un patrón estándar de respuesta representativo de cada estilo
con el perfil de respuesta de cada sujeto. De esta forma,
los puntajes pueden fluctuar entre -1 y 1, donde a mayor
puntaje se registra un mayor nivel de ajuste con cada patrón de apego.
A partir de estos datos se calcula el puntaje estandarizado con el cual se puede clasificar el estilo de apego dominante, comparando los puntajes obtenidos en
cada escala por el sujeto y asignándolo a la categoría de
la escala donde obtiene un puntaje mayor. Con este criterio, la distribución por tipo de apego en base a los
puntajes Q originales y en la versión chilena se muestra
en la tabla 1.
Resultados
Los puntajes escalares del test CAMIR se calculan con
base en las medias de los puntajes de los ítemes que las
componen. De esta manera, todas las escalas pueden
Tabla 1
Clasificación obtenida según tipo de apego dominante en base a
norma original o puntajes muestrales
Tipo de apego detectado
Apego Seguro
Según norma
En base a puntajes
original
en Chile
n (%)
n (%)
367 (63.5%)
297 (51.4%)
Apego Rechazante
72 (12.5%)
118 (20.4%)
Apego Preocupado
128 (22,1%)
143 (24.7%)
11 (1.9%)
20 (3.5%)
Apego Desorganizado
No se encontraron diferencias significativas por sexo
en los puntajes obtenidos en las escalas de apego (p>0.01
en todos los casos), ni en la clasificación categorial de apego obtenida, indistintamente de usar la norma original (χ2
(3, n=578)=8.767, p=0.033), o la adecuación a puntajes
chilenos (χ2 (3, n=578)=8.162, p=0.043). Tampoco se encontraron diferencias significativas al comparar los puntajes
escalares obtenidos según NSE, ni una asociación entre el
NSE y el tipo de apego predominante.
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En cuanto a la variable edad, no se detectaron asociaciones significativas de los puntajes estandarizados en
las escalas de apego con la edad reportada por los sujetos
(-0.055 = r = 0.047, p>0.05), ni tampoco diferencias en
la edad de los grupos de tipo de apego detectados (Norma original: F (3,574)=.703, p=.55; Norma muestral: F
(3,574)=1.12, p=.34).
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rían ser revisadas para detectar posibles causas de los bajos niveles de confiabilidad alcanzados.
Análisis de Confiabilidad del Test
En relación a la consistencia interna, las escalas mostraron
niveles adecuados de confiabilidad, similares a los obtenidos en la validación del test original, salvo en las Escalas
de Interferencia Parental (α=.54), Distancia Familiar
(α=.33), Demisión Parental (α=.39) y Valoración de Jerarquía (α=.33). De estas, la escala de Distancia Familiar
ya presentaba niveles bajos de consistencia en la versión
original del test, de modo que no representa un resultado
inesperado. Sin embargo, las restantes tres escalas debe-
El análisis de confiabilidad permitió detectar además,
algunos ítemes que sería recomendable eliminar, ya sea por
su efecto negativo sobre la consistencia interna de la escala
o por presentar asociaciones inter-ítem negativas. En particular, los ítemes 54 (de Interferencia Parental), 53 (de Apoyo Parental), 17 (de Distancia Familiar), 50 (de Resentimiento
de Rechazo), 46 (de Bloqueo de Recuerdos), 16 (de Demisión Parental), y 24 (de Valoración de Jerarquía).
Tabla 2
Confiabilidad obtenida en la adaptación y validación chilena del CAMIR
Estudio Original
α
ESCALA
Pre.estudio
Adaptación
Chile 2005
Chile 2007
α (?n=90)
(n=339)
α
(n=578)
Correlaciones inter-item
Mín
↔ Max
↔ .36
↔ .54
.19 ↔ .43
.24 ↔ .53
.33 ↔ .46
.27 ↔ .52
.24 ↔ .48
.10 ↔ .22
.23 ↔ .58
.21 ↔ .59
.20 ↔ .60
-.01 ↔ .44
-.12 ↔ .41
Interferencia Parental
.72
.72
.54
-.37
Preocupación Familiar
.70
.82
.78
.26
Resentimiento de Infantilización
.81
.73
.76
Apoyo Parental
.82
.80
.78
Apoyo Familiar
.78
.81
.80
Reconocimiento de Apoyo
.70
.74
.77
Indisponibilidad Parental
.81
.79
.78
Distancia Familiar
.48
.48
.33
Resentimiento de Rechazo
.85
.84
.82
Traumatismo Parental
.78
.81
.79
.61
Bloqueo de Recuerdos
.71
.72
Demisión Parental
.71
.51
.49
Valoración de Jerarquía
.71
.61
.33
Por su parte, las correlaciones observadas con las
dimensiones de apego general del test mantienen también una estructura coherente con lo esperado teóricamente, lo que reafirma la validez de constructo del
instrumento. En particular, el apego seguro se asocia positivamente en forma estadísticamente significativa con
las dimensiones de Apoyo Familiar (r=.60), Parental (r=.78)
y Reconocimiento de Apoyo (r=.72) y negativamente con
Resentimiento de Infantilización (r=-,71), Indisponibilidad
Parental (r=-,73), Resentimiento de Rechazo (r=-.83) y
Traumatismo Parental (r=-,76). El apego rechazante, posee sus mayores asociaciones positivas con Resentimiento
de Rechazo (r=.51) e Indisponibilidad Parental (r=.50),
mientras que las mayores asociaciones negativas se en-
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cuentran con Apoyo Parental (r=-,59) y Familiar (r=-.64).
Por su parte, el estilo preocupado muestra asociaciones
positivas con Interferencia Parental (r=.63), Resentimiento de Infantilización (r=.66) y Resentimiento de Rechazo
(r=.63), y las mayores asociaciones negativas con las escalas Apoyo Parental (r=-.55) y Reconocimiento de Apoyo
(r=-.51). Finalmente, las escalas que consistentemente
muestran baja asociación con los distintos tipos de apego
son: Bloqueo de Recuerdos, Demisión Parental y Valoración de la jerarquía.
En relación con las dimensiones de apego preocupado y rechazante, muestran una asociación negativa con
los puntajes de apego seguro, y bastante baja entre sí, lo
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que concuerda con lo esperado en base a la definición
dada por la literatura a cada uno de ellos.
mostró que estos cumplían las condiciones para realizar
un análisis de este tipo (KMO=.901, χ2 para prueba de
esfericidad de Bartlett (78, N=578)=3840,72, p=.000). Se
detectaron 3 factores que explican el 65% de la varianza
de las escalas del CAMIR. Al analizar las cargas factoriales
se observa que la agrupación de escalas concentra en el
primer factor a todas las escalas asociadas a rechazo
parental y sus efectos, lo que podría asociarse principalmente al estilo de apego rechazante o preocupado. El
segundo factor, en cambio, agrupa a todas las escalas asociadas a la percepción de apoyo por parte del grupo familiar, en la línea del apego seguro. El factor 3, finalmente,
agrupa a escalas que no se asocian directamente a un estilo de apego, sino más bien a elementos de estructuración
del medio familiar, en la línea de lo planteado por
Pierrehumbert et al. (1996).
La estructura interna del test fue explorada por medio de un Análisis Factorial por Componentes Principales. El análisis previo de los datos mostró una buena
adecuación muestral para este tipo de análisis (KMO=.934,
χ 2 para prueba de esfericidad de Bartlett (2485,
N=578)=16517.6, p=.000), encontrándose un total de 16
factores (eigenvalues>1), que explican el 59% de la varianza
total del instrumento. De estos, se decidió trabajar con
los primeros 8 factores, tomando como punto de corte
el tener al menos un 2% de varianza explicada, y estar
compuesto por al menos dos ítemes significativos en su
estructura. La estructura de cada factor se obtuvo por
medio de una rotación oblicua de tipo Oblimin, que permitió diferenciar más claramente las cargas factoriales.
Dadas las restricciones de tamaño (considerando que se
cuenta con 71 ítemes), para la interpretación de los factores se consideraron sólo aquellos ítemes con peso factorial
superior o igual a 0.4.
En definitiva y en lo que respecta a los constructos a
la base del test, podemos decir que si bien no se reconstruyen estadísticamente todas las escalas que lo componen, sí se observa en el test un funcionamiento interno
concordante a lo esperado teóricamente, enfatizando el
rol de dimensiones subyacentes nuevas tales como la percepción de abandono en la infancia.
Los factores encontrados se detallan en la tabla 3.
Puede observarse que la estructura factorial reconstruye
completamente las escalas de Preocupación Familiar (factor 2) y Apoyo Familiar (factor 4), y parcialmente, Demisión Parental (factor 5), Bloqueo de Recuerdos (factor 7)
e Interferencia Parental (factor 8).
Otra perspectiva de validación de constructo del test
es verificar la presencia de asociaciones con variables que
han sido detectadas consistentemente en la literatura previa. En particular, se verificó la asociación existente entre
los puntajes obtenidos en las escalas CAMIR con los niveles de patología detectados por OQ-45.2. Se observó
consistentemente una asociación positiva entre los niveles
de patología medidas por todas las escalas OQ-45.2, con
los puntajes registrados en Interferencia Parental, Preocupación Familiar, Resentimiento de Infantilización, Distancia
Familiar, Resentimiento de Rechazo, Traumatismo Parental
y Bloqueo de Recuerdos, mientras que las escalas de Apoyo parental, Apoyo Familiar y reconocimiento de Apoyo
muestran una asociación de tipo negativo con la presencia de patología (Tabla 4). Del mismo modo, la dimensión de apego seguro muestra asociaciones negativas,
estadísticamente significativas, con los niveles de patología de todas las escalas, mientras que la dimensión de apego
preocupado se asocia en forma positiva y estadísticamente
significativa con los niveles de patología detectados por
las escalas del OQ-45.2.
Por otro lado, las escalas de Apoyo Parental, Reconocimiento de Apoyo, así como las de Resentimiento de
Infantilización, Distancia Familiar y Resentimiento de Rechazo no aparecen representadas en la estructura latente
detectada y más bien, se mezclan en otras dimensiones
detectadas. En particular, llama la atención la detección
de dos factores que mezclan ítemes de diversas escalas
teóricas del test: Percepción de Abandono Infantil (factor 1) y Desconexión Emocional (factor 3), los que podrían ser considerados como alternativas para la
generación de nuevos sistemas de puntuación del test.
Dados los resultados obtenidos, se realizó un segundo análisis factorial, esta vez para detectar la estructura
latente de las escalas del CAMIR. Para favorecer la generación de una estructura simple se trabajó con una rotación de tipo Equamax. El análisis previo de los datos
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Validación chilena del CAMIR
Tabla 3
Ítemes, carga factorial, comunalidad y escala de procedencia par análisis factorial de componentes
principales con rotación oblimin
Item
2
Carga factorial
Factor 1.
(61) Tengo la sensación
Abandono Infantil (22.87%
h
Escala
de varianza explicada)
,72
.62
TP
(70) Durante mi niñez, sufrí la indiferencia de mis seres queridos.
de haber sido un niño rechazado.
,61
.59
IP2
(47) No me han dejado disfrutar mi niñez.
,48
.54
RR
(67) Cuando recuerdo mi infancia siento un vacío afectivo.
,46
.70
RR
-.46
.56
AP
.43
.52
RI
.42
.60
RI
.79
.62
PF
.72
.59
PF
.69
.50
PF
queridos si los dejara.
.67
.51
PF
(32) Tengo la sensación que nunca superaría la muerte de uno de mis seres queridos.
.57
.53
PF
(71) A menudo, me siento preocupado sin razón por la salud de mis seres queridos.
.57
.49
PF
.84
.69
DF
.80
.65
VJ
lo que yo quería.
.75
.62
DP
(46) No logro tener una idea clara de mis padres y de la relación que yo tenía con ellos.
.69
.69
BR
(16) Cuando era niño, mis padres habían renunciado a su papel de padres.
.69
.65
DP
.73
.55
AF
familia son una fuente de conversación y de enriquecimiento para todos
.63
.57
AF
(18) Frecuentemente dedico tiempo a conversar con mis seres queridos.
.53
.59
AF
(21) Cuando niño, encontré suficiente cariño en mis seres queridos como para
no buscarlo en otra parte.
(64) En mi familia vivíamos aislados de los demás.
(52) Tengo la sensación de no haber podido apoyarme en el ambiente donde
crecí (familia, amigos, barrio, trabajo).
Factor 2. Preocupación Familiar (6.06% de la varianza explicada)
(56) Cuando me alejo de mis seres queridos, no me siento bien conmigo mismo.
(68) La idea de separarme momentáneamente de uno de mis seres queridos,
me deja una sensación de inquietud.
(20) Saber que alguno de mis seres queridos tiene problemas me preocupa
tanto que no puedo concentrarme en otra cosa.
(22) Siempre estoy preocupado por la pena que podría causar a mis seres
Factor 3. Desconexión Emocional (4.14% de la varianza explicada)
(17) Para poder superar una pérdida o un duelo, es mejor no lamentarse demasiado.
(24) Los adultos deben controlar sus emociones hacia los niños, ya sean de felicidad,
de amor o de rabia.
(44) Cuando niño, hacía que los adultos se enfrentaran entre ellos para conseguir
Factor 4. Apoyo familiar (4.14% de la varianza explicada)
(4) En mi familia, cada uno expresa sus emociones sin temer a las reacciones
de los otros.
(1) En mi familia, las situaciones vividas por cada uno en ambientes fuera de la
(27) En mi familia, cuando uno de nosotros tiene un problema, los otros se
sienten involucrados.
.47
.53
AF
(69) Hay un buen entendimiento entre los miembros de mi familia.
.42
.57
AF
Factor 5. Demisión parental (2.72%
de varianza explicada)
(42) Mis padres me dieron demasiada libertad para hacer todo lo que yo quería.
.75
.61
DP
(23) Cuando era niño me dejaban hacer todo lo que yo quería.
.72
.64
DP
(5) Mis padres eran incapaces de tener autoridad cuando era necesario.
.43
.57
DP
Factor 6. Valoración a Autoridad (2.56% de la varianza explicada)
(65) Es importante que el niño(a) aprenda a obedecer.
.79
.66
RA
(34) Los niños deben sentir que existe una autoridad respetada dentro de la familia.
.59
.59
VJ
-.46
.59
IP
(48) Yo era un niño miedoso.
continúa
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Item
2
Carga factorial
h
Escala
BR
Factor 7. Bloqueo de recuerdos (2.41% de la varianza explicada)
(37) Realmente no me acuerdo de qué manera veía las cosas cuando era niño.
.88
.76
(51) Tengo dificultad para recordar con precisión los acontecimientos de mi infancia.
.87
.73
BR
-.43
.59
RA
(25) Me gusta pensar en mi niñez.
Factor 8. Interferencia Parental (2.16% de la varianza explicada)
(7) Desearía que mis hijos fueran más autónomos o independientes de lo que yo he sido.
.73
.52
IP
(41) No me han preparado psicológicamente lo suficiente para la realidad de la vida.
.60
.55
RI
.46
.57
IP
-.85
.75
TP
de mis recuerdos infantiles.
-.81
.69
TP
(45) Cuando niño tuve que enfrentarme a la violencia de uno de mis seres queridos.
-.60
.69
TP
(35) Mis padres no se han dado cuenta que un niño(a), cuando crece, tiene
necesidad de tener su propia vida.
Factor 9. (Ausencia de) Traumatismo parental
(1.91% de la varianza explicada)
(63) Cuando era niño había peleas insoportables en casa.
(3) Las amenazas de separación o de ruptura de los lazos familiares, son parte
Nota:
N = 578
Identificación de escalas: (IP) Interferencia Parental; (PF) Preocupación Familiar; (RI) Resentimiento de Infantilización; AP ( Apoyo Parental); (AF) Apoyo
Familiar; (RA) Reconocimiento de Apoyo, (IP2) Indisponibilidad Parental, (DF) Distancia Familiar; (RR) Resentimiento de Rechazo; (TP) Traumatismo
Parental; (BR) Bloqueo de Recuerdos; (DP) Dimisión Parental; (VJ) Valoración de Jerarquía
Tabla 4
Correlaciones entre escalas de CAMIR y niveles de patología medidas por OQ45.2
Escalas OQ45.2
Escalas CAMIR
sd
ir
sr
total
Interferencia Parental
.427**
.306**
.328**
.430**
Preocupación Familiar
,257**
,134**
,158**
,229**
Resentimiento de Infantilización
,395**
,419**
,303**
,433**
Apoyo Parental
-,306**
-,366**
-,229**
-,353**
Apoyo Familiar
-,381**
-,404**
-,318**
-,431**
Reconocimiento de Apoyo
-,336**
-,422**
-,311**
-,401**
Indisponibilidad Parental
,367**
,378**
,302**
,409**
Distancia Familiar
,166**
,275**
,146**
,216**
Resentimiento de Rechazo
,415**
,421**
,301**
,446**
Traumatismo Parental
,361**
,368**
,294**
,399**
Bloqueo de Recuerdos
,290**
,223**
,219**
,289**
,074
,131*
,153**
,107*
-,011
-,032
,050
-,013
Demisión Parental
Valoración de Jerarquía
Dimensiones
CAMIR
Seguro -,377**
-,423**
-,301**
-,428**
Desatendido
,142**
,233**
,115(*)
,187**
Preocupado
,473**
,419**
,328**
,491**
Nota:**
p<.01
*
p<.05
sd = síntomas; ir= Relaciones interpersonales; sr = rol social. En todas las escalas mayor puntaje indica mayor nivel de patología.
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Finalmente, se analizó la convergencia de los resultados obtenidos por el Test CAMIR, con las escalas evaluadas por PBI, como forma de validación concurrente
del test. La escala de sobreprotección del PBI mostró
asociaciones significativas y positivas con Interferencia
Parental, Resentimiento de Infantilización, Resentimiento
de Rechazo, y Traumatismo Parental, y asociaciones ne-
gativas con apoyo parental, apoyo familiar y reconocimiento de apoyo. Por su parte, la escala de cuidado mostró un comportamiento completamente opuesto, tal como
puede observarse en la tabla 5. Llama la atención que las
escalas de Preocupación Familiar, Demisión Parental y
Valoración de la Jerarquía, no muestran asociaciones con
las escalas del PBI.
Tabla 5
Correlaciones entre Escalas CAMIR y resultados PBI
Escalas PBI
Escalas CAMIR
Sobreprotección
Cuidado
Interferencia Parental
,403**
-,243**
Preocupación Familiar
,069
,092
,411**
-,491**
Apoyo Parental
-,300**
,602**
Apoyo Familiar
-,222**
,431**
Reconocimiento de Apoyo
-,206**
,421**
Resentimiento de Infantilización
Indisponibilidad Parental
,381**
-,515**
Distancia Familiar
,155**
-,353**
Resentimiento de Rechazo
,392**
-,594**
Traumatismo Parental
,346**
-,396**
Bloqueo de Recuerdos
Demisión Parental
,170**
-,249**
-,155**
-,008
,037
,006
Valoración de Jerarquía
Dimensiones CAMIR
Seguro
-,361**
,553**
Desatendido
,236**
-,419**
Preocupado
,388**
-,402**
Nota:
**
p<.01
*
p<.05
En cuanto a las dimensiones de apego, se observa
que la dimensión de apego seguro muestra una asociación positiva con la escala de cuidado (r=.55) y negativa
con sobreprotección (r=-.36), mientras que las dimensiones de apego rechazante y preocupado se asocian negativamente con la escala de cuidado y positivamente con la
escala de sobreprotección.
Posteriormente, al usar las categorías de calidad de
vínculo construidas en base a los puntajes PBI, con el
procedimiento explicado en la sección de Métodos, se
realizó una comparación de los puntajes en las escalas
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CAMIR entre las tres categorías de calidad de vínculo
PBI (Negativo, Medio, Positivo), por medio de un
ANOVA simple. Se registraron diferencias significativas
en todas las escalas, salvo en Preocupación Familiar, Distancia Familiar, Bloqueo de recuerdos, Demisión Parental
y Valoración de Jerarquía. El grupo de Vínculo Positivo
medido por el PBI mostró mayores puntajes en la Escala
de Apoyo Parental, Apoyo Familiar y Reconocimiento
de Apoyo, y menores puntajes en Interferencia Parental,
Indisponibilidad Parental, Resentimiento de Rechazo y
Traumatismo Parental, diferenciándose significativamente
de los grupos de calidad de vínculo Medio y Negativo.
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Finalmente, se encontraron también diferencias
estadísticamente significativas en los puntajes obtenidos
por las personas que componen los grupos de calidad de
vínculo positivo, medio y negativo en los puntajes de las
dimensiones de apego seguro (F (2,575)=15.45, p=.000),
rechazante (F (2,575)=12.00, p=.000) y preocupado (F
(2,575)=14.89, p=.000).
do con las escalas Interferencia Parental y ambas escalas
de Resentimiento; ambos estilos inseguros se asocian de
manera negativa con las escalas de Apoyo. Además, los
estilos de apego rechazante y preocupado muestran una
asociación negativa con los puntajes de apego seguro y
bastante baja entre sí. Lo anterior valida, en gran medida,
la conceptualización de los distintos estilos de apego desde las investigaciones iniciales de Ainsworth y Bowlby
hasta la actualidad. En esta línea, el estilo seguro se asocia
no sólo a una mayor percepción y reconocimiento de
apoyo en general, sino también a una mayor búsqueda de
éste, sumado a la sensación de disponibilidad de las figuras de apego; de hecho, la investigación muestra que las
madres de sujetos con estilos de apego seguro suelen tener respuestas más sensibles hacia sus bebés y estar más
disponibles para ellos, a la vez que, permiten una autonomía necesaria. También es concordante con lo reportado
empíricamente, que ambos estilos inseguros se asocien
negativamente con las escalas de apoyo; específicamente,
en el estilo rechazante la literatura muestra que las madres
suelen tener conductas activas de rechazo ante conductas
de apego e incomodidad ante los afectos negativos, con
una menor disponibilidad. Por último, en cuanto al estilo
preocupado, las madres suelen presentar reacciones imprevisibles y muchas veces incoherentes, lo que implica
inconsistencia en el cuidado y a su vez, menor sensibilidad y disponibilidad.
En el caso de apego seguro, se observa que los
puntajes obtenidos no sólo son mayores en el grupo de
vínculo positivo, sino que, además, muestran una menor
dispersión, mientras que las escalas de apego preocupado y rechazante muestran un comportamiento inverso,
pero sin mostrar diferencias estadísticamente significativas entre ellas.
Discusión
El objetivo principal de esta investigación fue validar el
CAMIR, para así contar con un instrumento válido y
confiable que pueda ser utilizado en la investigación psicológica en el medio cultural chileno. Para lograr este
objetivo se examinó la consistencia interna y la validez de
constructo y convergente de sus escalas, y de los prototipos de apego.
En cuanto a la consistencia interna, los valores obtenidos muestran niveles adecuados de confiabilidad en la
mayoría de las escalas del CAMIR, similares a los obtenidos en la validación del test original, salvo en las escalas
de Interferencia Parental (alfa=.54), Distancia Familiar
(alfa=.33), Demisión Parental (alfa=.39) y Valoración de
Jerarquía (alfa=.33). También se detectaron algunos ítemes
que presentan un efecto negativo sobre la consistencia
interna de la escala o asociaciones inter-ítem negativas (54,
53, 17, 50, 46, 16, 24), que sería sugerible eliminar.
En cuanto a los resultados obtenidos a través del
análisis factorial, un aspecto relevante a destacar es la
obtención, con rotación de tipo Equamax, de tres factores que explican el 65% de la varianza de las escalas
del CAMIR. Uno de ellos podría asociarse a los estilos
de apego inseguros, agrupando escalas asociadas a rechazo parental y sus efectos; el segundo podría asociarse al estilo seguro, al agrupar las escalas que tienen que
ver con el apoyo y, por último, hay un factor que agrupa
escalas que no se asocian directamente a un estilo de
apego determinado.
Por otro lado, un aspecto interesante es que al analizar las correlaciones entre escalas del test y estilos de apego, es posible apreciar una estructura coherente con lo
esperado teóricamente, reafirmando la validez de
constructo del instrumento. En este sentido, el apego seguro se asocia positivamente y de modo significativo con
las tres escalas de Apoyo y negativamente con las escalas
de Resentimiento, y de Indisponibilidad y Traumatismo
Parental. El apego rechazante se asocia positivamente y
de modo significativo con las escalas Resentimiento de
Rechazo e Indisponibilidad Parental; el estilo preocupa-
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En este sentido, hay varios elementos que conducen a la necesidad de pensar en la posibilidad de desarrollar una nueva versión del instrumento, algo más
reducida, que pueda centrarse en tres cambios fundamentales: la eliminación de ciertas escalas que no se relacionan directamente con ningún estilo de apego, también
de aquellas que presentan una baja confiabilidad y la eliminación de los ítemes que no presentaron un funcio-
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namiento adecuado. De lograr lo anterior, se podría
contar con un instrumento más reducido pero mejorado, que disminuiría el tiempo de aplicación, pudiendo
aumentar así su aplicabilidad en contextos diversos,
como por ejemplo en el Sistema de Salud, pudiendo
constituirse en un screening o tamizaje inicial que permita
detectar diadas en riesgo, incluso en periodos de embarazo, tomando medidas preventivas tempranas, permitiendo así un mejor pronóstico.
Por otro lado, la validación de constructo de los estilos de apego del CAMIR, incluía verificar ciertas predicciones acerca de su relación con la presencia de
patología y sintomatología. Tal como se predecía, los resultados muestran una asociación significativa entre los
tipos de apego y los niveles de sintomatología detectados
por el OQ-45.2, en particular diferenciando el estilo de
apego seguro como potenciador de disminución de la
sintomatología, en comparación con los estilos de apego
preocupado y rechazante, que tienden a asociarse con
aumentos en los niveles de sintomatología. Es interesante
además, notar que los estilos de apego preocupado y
rechazante tienden a no diferenciarse en forma
estadísticamente significativa entre sí en los análisis realizados. Estos resultados reafirman los aportes empíricos
de investigaciones anteriores y, además, relevan nuevamente la necesidad de generar programas que permitan
potenciar el desarrollo de estilos de apego seguro, en la
medida que se confirma que la presencia de éste, se constituye en un factor protector de la salud de los individuos
(Garrido, 2006).
En cuanto a la validez convergente, efectivamente se
observó una asociación significativa entre el apego seguro detectado por el CAMIR y el vínculo positivo detectado por el PBI, tanto en las medidas de las dimensiones
de cuidado y sobreprotección, como en la clasificación
general, que muestra un claro acuerdo entre la detección
de un apego seguro en el CAMIR con un vínculo positivo medido por el PBI.
El análisis de las propiedades psicométricas del
CAMIR arrojó resultados satisfactorios y permite concluir que presenta los requisitos necesarios para ser considerada una medida confiable y válida para evaluar los
modelos individuales de relación en adultos en el contexto cultural chileno. Las ventajas del instrumento se centran en la facilidad de corrección y la posibilidad de extraer
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información muy completa del cuestionario. El hecho que
se cuente con puntajes en 13 escalas, más los puntajes en
cada tipo de apego, permite hacer un análisis más fino y
detallado de los datos. La adecuación del instrumento
para evaluar modelos individuales de relación en adolescentes y adultos facilita la comparación de los estilos de
apego y la observación de la evolución en distintas etapas
del desarrollo. Sin embargo, las desventajas son el tiempo
de aplicación (en ocasiones mayor a 40 minutos) y la dificultad de algunos sujetos para comprender ciertos ítemes
con ideas abstractas. Lo anterior implica considerar que,
en el contexto chileno, el instrumento sólo podría ser usado en adultos con un nivel educacional medio o alto.
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Validación chilena del CAMIR
ANEXO 1: Ca-Mir
Traducción para Chile (2006), del original de Pierrehumbert et al. (1996).
1
En mi familia, las situaciones vividas por cada uno en ambientes fuera de la familia son una fuente de conversación y de enriquecimiento
para todos.
2
Cuando niño me dejaban pocas oportunidades para tener mis propias experiencias.
3
Las amenazas de separación o de ruptura de los lazos familiares, son parte de mis recuerdos infantiles.
4
En mi familia, cada uno expresa sus emociones sin temer a las reacciones de los otros.
5
Mis padres eran incapaces de tener autoridad cuando era necesario.
6
En caso de necesidad, estoy seguro que puedo contar con mis seres queridos para encontrar consuelo.
7
Desearía que mis hijos fueran más autónomos o independientes de lo que yo he sido.
8
En la vida familiar el respeto a los padres es muy importante.
9
Cuando niño, sabía que siempre encontraría consuelo en mis seres queridos.
10
Pienso que he sabido devolver a mis padres el cariño que ellos me han dado.
11
Las relaciones con mis seres queridos durante mi niñez me parecen, en general, positivas.
12
Detesto el sentimiento de depender de los demás.
13
Aunque sea difícil de admitir, siento cierto rencor hacia mis padres.
14
Sólo cuento conmigo para resolver mis problemas.
15
Cuando niño, a menudo mis seres queridos se mostraban impacientes e irritables.
16
Cuando era niño, mis padres habían renunciado a su papel de padres.
17
Para poder superar una pérdida o un duelo, es mejor no lamentarse demasiado.
18
Frecuentemente dedico tiempo a conversar con mis seres queridos.
19
Mis seres queridos siempre me han dado lo mejor de sí mismos.
20
Saber que alguno de mis seres queridos tiene problemas me preocupa tanto que no puedo concentrarme en otra cosa.
21
Cuando niño, encontré suficiente cariño en mis seres queridos como para no buscarlo en otra parte.
22
Siempre estoy preocupado por la pena que podría causar a mis seres queridos si los dejara.
23
Cuando era niño me dejaban hacer todo lo que yo quería.
24
Los adultos deben controlar sus emociones hacia los niños, ya sean de felicidad, de amor o de rabia.
25
Me gusta pensar en mi niñez.
26
En mi adolescencia, nunca nadie de mi entorno entendía realmente mis preocupaciones.
27
En mi familia, cuando uno de nosotros tiene un problema, los otros se sienten involucrados.
28
Actualmente, creo comprender las actitudes de mis padres durante mi niñez.
29
Mis deseos de niño no eran muy tomados en cuenta por los adultos de mi entorno.
30
Cuando era niño los adultos me parecían preocupados, sobretodo, por sus propios problemas.
31
Cuando era niño teníamos mucha dificultad para tomar decisiones en familia.
32
Tengo la sensación que nunca superaría la muerte de uno de mis seres queridos.
33
Cuando era niño le tenía miedo a mis padres.
34
Los niños deben sentir que existe una autoridad respetada dentro de la familia.
35
Mis padres no se han dado cuenta que un niño(a), cuando crece, tiene necesidad de tener su propia vida.
36
Me siento en confianza con mis seres queridos.
37
Realmente no me acuerdo de qué manera veía las cosas cuando era niño.
38
En mi familia de origen, conversábamos más sobre los demás que sobre nosotros mismos.
39
Cuando niño me preocupaba que me abandonaran.
40
Cuando niño me estimularon a compartir mis sentimientos.
41
No me han preparado psicológicamente lo suficiente para la realidad de la vida.
42
Mis padres me dieron demasiada libertad para hacer todo lo que yo quería.
continúa
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Garrido, Santelices, Pierrehumbert & Armijo
Traducción para Chile (2006), del original de Pierrehumbert et al. (1996).
43
Los padres deben mostrarle a su hijo(a) que ellos se quieren.
44
Cuando niño, hacía que los adultos se enfrentaran entre ellos para conseguir lo que yo quería.
45
Cuando niño tuve que enfrentarme a la violencia de uno de mis seres queridos.
46
No logro tener una idea clara de mis padres y de la relación que yo tenía con ellos.
47
No me han dejado disfrutar mi niñez.
48
Yo era un niño miedoso.
49
Es esencial trasmitir al niño(a) el sentido de la familia.
50
A partir de mi experiencia de niño, me he dado cuenta que uno nunca es lo suficientemente bueno para sus padres.
51
Tengo dificultad para recordar con precisión los acontecimientos de mi infancia.
52
Tengo la sensación de no haber podido apoyarme en el ambiente donde crecí (familia, amigos, barrio, trabajo).
53
Aunque no sea cierto, yo siento que tuve los mejores padres del mundo.
54
Cuando niño, se preocupaban tanto por mi salud y mi seguridad, que me sentía atrapado.
55
Cuando niño, me inculcaron el temor a expresar mi opinión personal.
56
Cuando me alejo de mis seres queridos, no me siento bien conmigo mismo.
57
Nunca he tenido una verdadera relación con mis padres.
58
Mis padres siempre han tenido confianza en mí.
59
Cuando era niño mis padres abusaban de su autoridad.
60
Cada vez que trato de pensar en los aspectos buenos de mis padres, recuerdo los malos.
61
Tengo la sensación
62
Mis padres no podían evitar controlarlo todo, mi apariencia, mis resultados escolares e incluso mis amigos.
63
Cuando era niño había peleas insoportables en casa.
64
En mi familia vivíamos aislados de los demás.
de haber sido un niño rechazado.
65
Es importante que el niño(a) aprenda a obedecer.
66
Cuando niño, mis seres queridos me hacían sentir que les gustaba compartir su tiempo conmigo.
67
Cuando recuerdo mi infancia siento un vacío afectivo.
68
La idea de separarme momentáneamente de uno de mis seres queridos, me deja una sensación de inquietud.
69
Hay un buen entendimiento entre los miembros de mi familia.
70
Durante mi niñez, sufrí la indiferencia de mis seres queridos.
71
A menudo, me siento preocupado sin razón por la salud de mis seres queridos.
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