Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                
El Aporte para la Descentralización Cultural –ADESCA- es una institución pública descentralizada del Estado, creada por medio del Decreto número 95-96 del Congreso de la República “Ley de Creación del Aporte para la Descentralización Cultural” como respuesta a la necesidad de complementar la política cultural del Estado, para facilitar la participación ciudadana en los procesos de creación, difusión, conservación y rescate del patrimonio artístico y cultural de Guatemala. ADESCA tiene como objeto el financiamiento de: a) Actividades de apoyo a la creación y difusión artística y cultural; b) Proyectos que favorezcan tanto el rescate, difusión y fomento de las culturas populares, como el desarrollo de sus cultores y portadores; c) Actividades de conservación y difusión del patrimonio cultural. ADESCA, en concordancia con los lineamientos de la política cultural del Estado, está consciente de que el derecho a la cultura -consagrado en la Constitución Política de la República y en la Declaración Universal de los Derechos Humanos- debe hacerse vigente en el país para la construcción de la paz y el desarrollo de las nuevas generaciones. En más de dieciocho años de funcionamiento, ADESCA ha fortalecido la participación comunitaria, promoviendo el liderazgo cultural de la población guatemalteca. En este tiempo se ha facilitado el rescate, fortalecimiento y difusión cultural de los distintos pueblos que conviven en el país y se ha constituido en una de las instancias que oye y apoya las inquietudes culturales de los guatemaltecos y guatemaltecas sin distinción alguna. El relato de los títulos Nijaib' Buenabaj El relato de los titulos Nijaib’ Primera edición, 2016 © Alcaldía comunitaria de San Vicente Buenabaj, Momostenango, Totonicapán. Guatemala 2016 © Carlos Fredy Ochoa García, Ph. D. Cand. (autor) <www.oralidadmaya.info> Fotografía: Esteban Velásquez Vicente y Kevin Velásquez Vicente: 2 - 6 - 7 - 8 – 21 - 22 - 23 – 24 - 25 - 26 - 27 - 28 - 29 - 30 - 34 - 36 – 41 – 42 - 43 - 44 - 45 - 46 - 47- 48 - 49 - 50 - 51 -52 - 53 - 54 Carlos Fredy Ochoa G.: 10 - 11 - 12 - 13 - 15 – 18 - 19 - 31 - 32 - 33 - 37 - 38 - 39 40 - 41 - 42 - 43 Daniel Tucux Coyoy: 20 Daniel Sosa: 1 - 3 - 9 - 16 Universidad de Princeton, New Jersey, biblioteca en línea: 14 Santos Pérez Vicente: 17 www.facebook.com/sanvicente.buenabaj: 4 - 5 - 35 Paleografía del Pictograma II (foto 13): Robert Carmack Paleografía del Pictograma III (foto 14): Alejandro Conde Roche Revisiones: Historia: Santos Vicente Pérez, Prof. Pedro Eliseo Chún Vicente, Prof. Esteban Velásquez Vicente, Leovijildo Anael Vicente Vicente, Dr. Edgar Esquit Choy Estilo k’iche’: Esteban Velásquez Vicente Estilo castellano: Marcia Claudina Dardón Véliz Vda. de Rendón Busto de Diego Vicente: Geovanny Vicente Contraportada: Pictograma II de San Vicente Buenabaj Portada: Pictograma III de San Vicente Buenabaj Diseño e impresión: Cholsamaj APORTE PARA LA DESCENTRALIZACIÓN CULTURAL, “ADESCA”, financia la publicación de este libro, Proyecto No. 70-2015-07-ADESCA, convocatoria 2015-2016. El contenido del texto es responsabilidad exclusiva del autor, ADESCA otorga únicamente el financiamiento para la ejecución del proyecto. Contenido Presentación - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 5 I. Ecología y geografía del altiplano buenabajense - - - - - - - - - - - - - - 7 II. La historia antigua y arqueológica - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 15 III. El señor Izkin Nijaib’ señor de Palotz Tzaqib’ala’ hacia 1500 - - - - - 19 IV. Las tierras del señor Izkin Nijaib’ - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 23 V. El alto valle de Uk’uleb’al Tena, lugar de asiento de Corral Ab’aj - - 27 VI. El Señor Izkin Nijaib’ y Tekum - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 31 VII. Los pictogramas de Buenabaj - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 33 VIII. Los títulos Nijaib’ - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 39 IX. Buenabaj en el lienzo Quauhquechollan de 1527 - - - - - - - - - - - - - 49 X. Los relatos de fundación de San Vicente y el pacto con Momostenango - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 53 Don Diego Vicente y las tierras de Buenabaj - - - - - - - - - - - - - - - - 59 XII. El departamento de Totonicapán y la jurisdicción territorial de Buenabaj - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 69 XIII. El gobierno comunitario de Buenabaj - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 71 XIV. Buenabaj y sus 14 comunidades - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 77 Bibliografía - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 87 Agradecimientos - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 91 Anexos - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 92 Notas - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 97 XI. San Vicente Buenabaj J PRESENTACIÓN M e complace presentar públicamente este nuevo estudio sobre la historia de San Vicente Buenabaj por el antropólogo Carlos Fredy Ochoa García, el cual enriquece el trabajo de varios otros estudiosos sobre esta comunidad, entre quienes podemos mencionar a Roberto Carmack, Virgilio Reyes, Miguel Álvarez Arévalo, Gisela Gellert y Silvel Elías. Tanto ellos como nosotros, sabemos que la historia de San Vicente Buenabaj es parte de la historia maya y que la historia maya debe ser parte de la historia nacional de Guatemala. San Vicente Buenabaj es una comunidad muy apreciada por muchas organizaciones tanto del país como de otras partes del mundo pero, tristemente, también es codiciada por grandes empresas que buscan muchos minerales de nuestra madre tierra o establecer grandes negocios, esto porque nuestro territorio y nuestros bosques alimentan las cuencas de los ríos más grandes del país como el Cuilco, Negro, Samalá e incluso tiene hilos de agua que alimentan el Motagua. Somos un pueblo ciento por ciento k’iche’, descendiente de los Nijaib’, somos personas de paz, nos gusta respetar las leyes y, de igual manera, que nos respeten. Pedimos a las autoridades de nuestra comunidad, a los que han servido un cargo y servirán en el futuro como autoridad, que sigan trabajando de acuerdo con nuestras costumbres, mejorando nuestra identidad y protegiendo nuestros derechos, que es la obligación primera de la autoridad. A los maestros y maestras de nuestras comunidades, se les insta a orientar a las nuevas generaciones tomando en cuenta nuestra historia y nuestra identidad con la tierra que nos vio nacer. A nuestros conciudadanos, a los buenabajenses que han emigrado a diferentes partes de mundo, les decimos que es importante que ellos también tengan presente la historia de San Vicente Buenabaj. t Finalmente, instamos a la juventud a conocer lo nuestro para poder mejorar todos en el futuro, porque la superación y el desarrollo piden que conozcamos el pasado para enfrentar con visión de futuro los problemas del presente. Santos Vicente Pérez Presidente del Consejo de Ancianos y Principales de San Vicente Buenabaj San Vicente Buenabaj, 17 de noviembre de 2014 5 y San Vicente Buenabaj I. Ecología y geografía del altiplano buenabajense B uenabaj es un altiplano de altura al que se llega por varios caminos, la ruta central sigue un ascenso sinuoso y de gran paisaje, es un antiguo camino que, en su mayor parte, es el que sigue la Carretera Nacional 9, que atraviesa este territorio de sur a norte con varios ramales. La entrada que parte del km 203 de la Carretera Interamericana–CA1, en jurisdicción de Pologuá, tiene un trayecto de 12 km hasta el centro de Buenabaj. Esta ruta central sigue casi el mismo camino real del siglo XVII que comunicaba a Quetzaltenango con Chiapas. Seguramente, se trata de la misma traza prehispánica que se observa en el lienzo de Quauhquechollan del siglo XVI. La marca distintiva del territorio de Buenabaj es el monte Tena [3 300 m latitud 15°03’26’’, longitud 91°033’52’’], un macizo rocoso que es una formación volcánica, aunque no está clasificado como volcán, ni está sobre la hilera volcánica del país que corre paralela al Pacífico. El Tena es la cima más alta en la sección noroccidental del país1 y, por no hallarse expuesta a la radiación solar extrema ni a fuertes vientos, sus alrededores están habitados. La altiplanicie de Buenabaj tiene valles por arriba de los 3 000 m sobre el nivel del mar, la misma altura de los altiplanos de los Cuchumatanes, ixil y marquense, que son los cuatro altiplanos habitados más altos de Guatemala y de la Sierra Madre. u Foto 1. El monte Tena y el valle central de Buenabaj 7 San Vicente Buenabaj Gracias al monte Tena, el territorio de Buenabaj tiene un paisaje de gran contraste entre alta montaña y valles inclinados; la región de montaña es de bosque muy húmedo y montano2, se trata de un ecosistema forestal típico de 2 500 – 3 000 m que incluye robles o encinos (Quercus spp.), alisos (Alnus jorullensis), pino de las cumbres o colorado (Pinus rudis), madrones (Arbutus xalapensis) y el pinabete o abetos (Abies guatemalensis) (Herrero, 2010: 1300). El monte Tena es el gran signo de la identidad territorial de los buenabajenses. Su nombre significa en k’iche’ “junta o depósito de agua”, aunque el título Nijaib’ II da una explicación histórica: “le pusieron el nombre de Tena por haberse juntado a toda la gente y los soldados en aquel paraje…” (Carmack, 1973:349). Además del Tena hay otras tres grandes montañas alrededor de Buenabaj; en su conjunto forman cuatro cerros guardianes que enmarcan el territorio: al oeste, el cerro Chuwi Tuk Tuk; en el sur, el cerro Chuwi Saq k’oli’k Ab’aj; en el este, el cerro Chuwi B’uenab’aj; y en el norte, el monte Tena’. Este Releb’al Q’ij Monte Tena (3 300 mt) “Depósito de agua” Chuwi Tuk Tuk (3 310 mt) “Sobre el pájaro Tuctuc” Chuwi Buena Ab’aj (2 978 mt) “Sobre la buena piedra” Cerro Chuwi Saq K’oli’k Ab’aj (2 890 mt) “Sobre la planicie donde está la piedra” Foto 2. Los cuatro cerros guardianes de Buenabaj i Las comunidades del territorio tienen en estas cuatro montañas a los grandes referentes de su identidad y pertenencia al territorio. Este encuadramiento del espacio buenabajense es un rasgo común de los antiguos 8 San Vicente Buenabaj pueblos mayas. Las cimas de estos montes son puntos de referencia de una geografía que está sacralizada y marcada con lugares sagrados o altares. En la cima del Tena, se halla el sitio central sagrado llamado “Presidente Mundo”, dedicado en el calendario maya al día wajxaqib’ b’atz, (ocho hilos u ocho monos), que es la celebración más importante del calendario lunar maya; el sitio también es conocido como “Altar de Diego Vicente”, el héroe cultural del pueblo de Buenabaj. Foto 3. El alto altiplano de Buenabaj a 3 000 m snm. En primer plano, el valle sur, antiguo Paxchun, con las comunidades de Santa Lucía Buenabaj y San Antonio Buenabaj, al fondo el volcán Santa María (3 771 m). Los bosques y aguas son dos grandes marcadores de identidad. Los árboles han sido tomados como rasgos distintivos del gran paisaje y usados como topónimos para dar nombre a lugares. Los mayas del siglo XV usaron zonas arbóreas y especies indicadoras para identificar y demarcar sus territorios, dando así origen a muchos términos topónimos de la geografía moderna de Guatemala; términos cómo K’iche’, Iximche’ (che’ significa árbol) fueron usados para designar grandes territorios políticos, y el mismo término Quauhtemallan (quauh significa árbol en idioma nahuatl) fue el que dio origen al nombre de Guatemala, que significa “país de árboles”. o Buenabaj basa mucho su identidad territorial en la dualidad de “valles y montañas” cuya unidad ha dado al territorio un sentido de región y de haberse constituido desde la antigüedad en una entidad autónoma. Se trata 9 San Vicente Buenabaj de una concepción muy antigua del territorio. En libros como el Popol Wuj, se lee: Xawi waral qajuyub’al qataqajal: “He aquí nuestros montes (comarcas), nuestras llanuras” (Villacorta, 1962: 274); este es un marcador de unidad territorial3 que está también muy presente en la tradición de Buenabaj. Foto 4. Granizada en el monte Tena en 2012 p Foto 5. “Buenos días, gente nuestra, hace mucho frío aquí”—idioma k’iche’ 10 San Vicente Buenabaj La intensidad de la lluvia, el granizo, el rocío, la neblina y una escasa evaporación, hacen que los bosques de Buenabaj sean de una alta captación hídrica4. De hecho, los bosques de Buenabaj alimentan las cuencas hidrográficas de tres grandes ríos: Samalá, Cuilco y Chixoy, a través de las subcuencas de los ríos XeTena, San Diego, San Jorge y Nicajá, con sus numerosas microcuencas. Por Buenabaj, pasa también la llamada línea continental de aguas, declive natural que reparte estos ríos, unos en dirección a la vertiente del Pacífico y otros, al Atlántico. En el siglo XV, los ríos y particularmente sus desembocaduras (xalq’atja’ o cruce de ríos), eran los marcadores por excelencia de los límites (k’ulb’at)5 de los territorios prehispánicos. Estos mojones también eran señalados por picos montañosos, los vértices sobresalientes de las montañas (tza’n)6, las grandes piedras (ab’aj), las peñas7, y los barrancos (siwan)8. Estos accidentes geográficos también han pasado a señalar los límites entre pueblos y comunidades de Buenabaj. Otra característica de muchos de estos mojones es que están marcados por lugares sagrados o altares, y han sido generalmente sitios de peregrinación. Es por referencia a la montaña que también se tienen varias nociones de territorio. El concepto genérico es juyub’, que literalmente significa montaña pero cuando se universaliza y se le adiciona el abstractivo (al) [juyubal] pasa a ser un concepto de región, de comarca. Este es el caso de la expresión “taq’ajaljuyub’al”, (valles y montañas). Cuando el sustantivo montaña (juyub’) se localiza (chi: locativo), como en “chijuyub’al, se refiere al territorio de una colectividad, a las tierras comunales, por referencia a las tierras del chinamital o gran grupo familiar (Popol Wuj, Sam Colop: 2008:189). En relación con la montaña, también se tienen otras nociones de territorio más locales, en tanto lugar de pertenencia y vivencia: nujuyub’al, (“mi montaña”), lo que equivale a “mi aldea”, “mi comunidad”. Finalmente, las categorías más familiares: qaxoral (mi corral, mi tierra), k’olib’al, (mi lugar, mi casa). Por ejemplo, cuando los títulos Nijaib’ dicen que en Buenabaj estaba el corral del señor Ixkin Nijaib’, en el año 1500, en realidad están diciéndonos que allí estaban sus tierras personales y familiares. Los bosques de Buenabaj están entre los más ricos complejos montañosos del país. Buenabaj es realmente una región con microregiones bien identificadas, un valle de gran altura que estuvo habitado antiguamente pero Q 11 San Vicente Buenabaj luego fue abandonado. Las zonas de alta montaña, mayoritariamente boscosas, solo se hallan pobladas en sus alrededores y las planicies bajas e inclinadas concentran la mayor parte de las comunidades y han sido zonas de intenso movimiento poblacional9. El conjunto del gran bosque de Buenabaj suma globalmente la extensión de unas 800 hectáreas10, repartidas entre el Cerro Tuk Tuk Ab’aj con 280.20 ha, el cerro Tena con 162 ha, la ladera noreste de Chipuertá con 7.80 ha, y el este de Chuwi B’uenab’aj con 3.60 ha11. Hay un régimen de bosques comunales administrados sobre una base comunitaria fuerte pero diversa. El cuidado de los bosques descansa sobre un intenso trabajo voluntario que recae en las autoridades comunitarias, la Parcialidad de Vicente y los responsables comunitarios de los bosques (guardabosques) designados por las asambleas de comunidades, todos se desempeñan por periodos anuales de servicio comunitario. ), El área total de la parcialidad se estima en 1 778.48 hectáreas, divididas de la siguiente manera: bosque natural 425 ha, plantaciones forestales 65.48 ha, área de pastos de 200 ha, área desprovista de cobertura forestal, área de bosque de producción de 320 ha y área poblada que se estima en 765 ha.12 Los miembros de la parcialidad son herederos copropietarios de la propiedad que en la colonia era llamada Cobalchaj o Chubilchaj, hoy San Vicente Buenabaj. La parcialidad representa al conjunto de los intereses del pueblo de San Vicente Buenabaj y no solo de los Vicente. Sin embargo, la parcialidad de Vicente tiene su propio régimen de autoridad. El sistema actual data de los años noventa, en que la comunidad se vio forzada gubernamentalmente a organizarse como una una asociación y bajo una junta directiva que administra el uso del bosque bajo fines comunitarios y de todos sus bienes naturales. De esta cuenta, la asocición se declara sin finalidad lucrativa, no política ni religiosa, con naturaleza de índole social y cultural. Sus fines y objetivos manifiestos son procurar el mejoramiento social, cultural, económico, educacional, de salud y de otros beneficios para todos los habitantes de San Vicente Buenabaj. W 12 San Vicente Buenabaj Foto 6. Cumbre boscosa del cerro Tuk Tuk Ab’aj, lado oriente. E Foto 7. Tuk Tuk Ab’aj, figura del pájaro Tuk Tuk símbolo del cerro. 13 San Vicente Buenabaj Mapa 1. Altiplano de Buenabaj, vista de norte a sur. Google Tierra 2014 Huehuetenango R Totonicapán Monte Tena San Vicente Buenabaj Quetzaltenango San Marcos Totonicapán 14 San Vicente Buenabaj II. La historia antigua y arqueológica L as altas planicies de Buenabaj han sido una zona de paso entre las tierras altas de los Cuchumatanes y la costa del Pacífico. En tiempos antiguos, Buenabaj estuvo a mitad de camino entre las ciudades de Saq Ulew (Saq Txox) y Tak’alik Ab’aj, las cuales coexistieron por unos dos mil años con estrechos nexos comerciales y políticos13, incluso pudieron hablar la misma lengua, una antigua forma de mam. En el área de Buenabaj y Momostenango, también se habló mam a lo largo del periodo clásico maya y posiblemente, hasta el año 1000 de nuestra era (NE)14, de hecho, el idioma k’iche’ evolucionó del mam y solo para esta época ya era un idioma aparte. Cuando los k’iche’ de Q’umarkaj pasaron a controlar esta región, colocaron aquí sus fronteras, alrededor del 1300 NE15. Este suceso fue tan importante que con él empiezan sus relatos históricos los títulos Nijaib’ y otras crónicas k’iche’. Aunque este acontecimiento fue muy violento, no habría sido esto lo que hizo que los habitantes de esta área cambiaran de idioma; este cambio ya venía dándose (Carmack et al, 1972:11) y así pasó Buenabaj a estar en la frontera lingüística y después política entre k’iche’ y mam. No hay muchas evidencias arqueológicas halladas en las altas planicies como las de Buenabaj, aunque toda esta región es muy mal conocida y ha sido poco estudiada (Ciudad Ruiz et al, 1995: 91); las primeras evidencias arqueológicas de la región se concentran en valles más bajos16, y provienen del período clásico temprano (300 NE al 600) en el sitio La Estancia, que se localiza en un valle al norte del actual Momostenango. Esta ciudad tenía incluso un juego de pelota orientado este-oeste, que sugiere autonomía y una relación con sitios clásicos como Saq Ulew. La Estancia tal vez no duró más allá del 600 NE; después surgió Parracana, un sitio más pequeño en un valle no lejos de La Estancia. Más tarde, durante el clásico tardío, a fines del 900 de NE, existió Xuabaj construida en un emplazamiento ya más alto, dominando un pequeño valle al suroeste del actual Momostenago, este sitio todavía permanecía al tiempo de la invasión española (Carmack et al, 1972:9 ss.). T Varias nuevas pequeñas ciudades se desarrollaron hacia el 1 400 en esta región. No muy lejos de Buenabaj, la antigua ciudad de Malak’atán (“junto a las malacates o husos para hilar”, en nahuatl), actualmente “Pueblo Viejo Malacatancito” [coordenadas 15° 09’ 354’’ / 91° 25’ 742’’], sin duda alcanzó a ser la más grande ciudad en la región para el 1 500, porque tenía juego de pelota, lo cual es indicio de que tenía autonomía política. Sin embargo, el verdadero nombre de esta ciudad es ignorado, Carmack (1995: 41) sospecha que esta ciudad sea el sitio identificado como Izna’ (casa? de camote) en los 15 San Vicente Buenabaj Títulos Nijaib’ II (Recinos, 1957:111) y que el señor Izkin Nijaib’ tenía aliados en esta ciudad porque para estos años predominaba la influencia k’iche’ en la región; la ciudad es famosa porque envió unos cinco mil soldados a combatir a los invasores españoles en 1524 (Fuentes y Guzmán, 1932-33:9:110ff, citado por Carmack, 1972:14). La otra ciudad del área era Chwa Tz’aq (sobre las murallas o edificios), la más importante del antiguo Momostenango para 1500 y continuó existiendo después de la invasión, pues allí mismo se estableció el centro del pueblo de Momostenango, cuando este se fundó alrededor de 1554, después de mucho tiempo transcurrido de violencia y sufrimiento desde 1524. Fue en esta fundación que tuvo gran participación el señor ajaw Izkin Nijaib’. Chwa Tz’aq continuó siendo la cabecera de Momostenango hasta 1587 y por esta ocupación continuada y antigua, se le llama todavía Ojer Tinamit17; actualmente, Pueblo Viejo Momostenango18, a siete km al oeste de la cabecera de Momostenango. El importante lugar de Tz’aqib’ala (“caída de agua”, en k’iche’), cuyo nombre se sabe gracias a las antigua crónicas, pero su ubicación no ha sido precisada19, talvez es el sitio arqueológico de Ojertinamit (“antiguo pueblo”, en k’iche’) (Carmack, 1972:13), que era muy pequeño y pudo abandonarse por completo a raíz de la invasión española, se ubica un km al sureste de Momostenango, cercano al límite con Chiquimula, sobre un angosto cerro arriba del río Palá (Carmack, 2001:189). Infortunadamente, debido a la superposición colonial que ocultó muchos de estos asentamientos antiguos “los relatos e itinerarios descritos o basados en los manuscritos indígenas mencionados no han sido totalmente contrastados con datos arqueológicos”20. Utz’aqib’ala estaba controlada por el linaje Ilokab’ y mantenía una alianza política o pacto federativo con otra entidad llamada Palotz y juntas conformaban un territorio llamado Palotz Utz’aqib’ala21, muy nombrado en las antiguas crónicas, entre ellas por el título K’oyoi22 pues llegó a ser una provincia del antiguo Estado k’iche’ de Q’umarkaj (Carmack, 1995:30). Y 16 Palotz (pa: en, lotz: trébol o trifolium) está bien identificado en las antiguas crónicas, pero no así su centro, que algunos ubican al sureste del actual Buenabaj, en Paxchun23, un sitio del que tampoco han quedado evidencias arqueológicas24, aunque Carmack sospecha que Palotz estaba en las cercanías del monte Tena. Indicios de esto los dan los títulos Nijaib’ II y IV, el primero habla de un alto valle atrás del Tena y el otro de un valle llamado “Saq’ol Ajkab’awil Ab’aj”. Este alto valle es donde está el sitio arqueológico de Corral Ab’aj25, seguramente fue construido por Izkin Nijaib’ para 1500, y que se relaciona con Diego Vicente (su nieto) quien lo habitó para 1600 (Carmack, 1995:102). San Vicente Buenabaj Los antiguos documentos Nijaib’ y K’oyoi son claros al identificar que entre los territorios conquistados en 1300 estaban Paxchun y Siha (tz’i ja’). Paxchun es la pequeña ciudad ya presentada anteriormente, de la que no han quedado restos, y posiblemente, destruida con la invasión española (Carmack, 1995:19, 20 y 23). La tradición oral de Buenabaj identifica las tierras de Paxchun con la planicie inclinada entre los cerros Chuwi Buena Ab’aj y Tz’i ja’, misma que, hacia al final del siglo XIX terminó en jurisdicción compartida de Santa Lucía Buenabaj, San Antonio Buenabaj y San Carlos Sija. Un poco antes del 1400 de nuestra era (NE), cuando Q’umarkaj consiguió conquistar y dominar todo el territorio a lo largo del río Samalá (Carmack, 1967:7; Carmack, 1995:40), unos 141 km, desde las alturas de Tena hasta las tierras bajas, teniendo como última frontera el mar, la región de Palotz también fue integrada en la órbita política k’iche’. Esto debido a las campañas militares dirigidas por el notable Ajaw de Q’umarkaj llamado Q’ukumatz (1399-1 434); el título Nijaib’ I indica que esto sucedió en 1 300 (Recinos, 1957:78), aunque últimamente se estima que todo esto pudo empezar mucho antes (Popenoe de Hatch, 2005:98). En tiempos en que Q’umarkaj fue gobernada por el poderoso Ajaw Kikab’ (1444 – 1484 NE), este territorio era llamado Palotz - Tz’aqib’ala26, el cual se corresponde bastante bien con el actual Momostenango27. Según las crónicas k’iche’, las últimas operaciones militares en el área de Palotz - Tz’aqib’ala tuvieron lugar alrededor de 1501 y perseguían poner orden en las zonas de frontera, fueron dirigidas contra los tinamit y los linajes mam leales a la capital de Saq Ulew (Saq Txox en idioma mam). Es aquí donde Palotz destacó como una zona estable de poder, gracias a la cual el Estado k’iche’ estabilizó sus fronteras en su parte occidental; esto consolidó la posición hegemónica del señor Izkin Nijaib’, uno de los goberantes de la provincia, poder y posición que mantuvo incluso mucho después de la invasión española. De esta cuenta, los sucesos del 1500 definieron el statu quo territorial de la región y consolidaron los mojones de Palotz, los que en su mayoría fueron mantenidos a lo largo del colonialismo español. U El histórico papel jugado por Palotz , así como su ubicación, límites y colindancias están bastante bien identificados gracias a una serie de documentos antiguos, particularmente los títulos Nijaib’ 28 y el título K’oyoi29, ambos de gran relevancia para él conocimiento de la historia antigua de esta región. Estas mismas fuentes relacionan a Palotz con Paxchun, Chuwa Tz’aq, Q’umarkaj e incluso con México (Tenochtitlán). 17 San Vicente Buenabaj Mapa 2. Antiguas ciudades de las tierras altas de Guatemala en 1500 Buenabaj Takalik Ab’aj I 18 Fuente. Elaboración del Comité de Amigos de Iximche’, con base en: Fox, 1978. San Vicente Buenabaj III. El señor Izkin Nijaib’ señor de Palotz Tzaqib’ala’ hacia 1500 L a historia del señor Izkin Nijaib’ comienza en las casas grandes que gobernaban en la capital k’iche’ de Q’umarkaj donde los Nijaib’ habían llegado a ser, para el año 1500, el segundo linaje más importante en el gobierno. El significado del apellido Nijaib’ viene del plural de nim-ja, “gran casa”, Izkin , una sub rama del linaje Nijaib’, es una palabra náhuatl que quiere decir “perro” (tzi’ en k’iche’) (Carmack, 1972:14; Akkeren 2011:52). El señor Izkin Nijaib’, era un miembro prominente de este linaje y es el personaje central del que hablan los Títulos Nijaib’ , llevaba el nombre de sus dos ramas familiares, aunque al final de su vida también se le conoció con el nombre de don Francisco Izkin Nijaib’ . Los títulos Nijaib’ describen la larga lucha que en 1501 libro el señor Izkin Nijaib’ para lograr el control definitivo de las fronteras del Estado k’iche’, en especial sobre los linajes mam Yoc30 Kanchebex y otros señores con los cuales hizo acuerdos. Su fama y legitimidad política fue una recompensa por sus grandes victorias (Carmack, 1967:8), cuando volvía de sus triunfos, los señores más altos de Q’umarkaj salían a encontrarlo y hacían grandes fiestas en su honor por siete días: A la llegada del Capitán Izkin, todos los señores fueron a honrarlo, fue ensalzado por todos los señores de Nijaib’ y de Kawek, los valientes guerreros, los lanceros, los flecheros, los de los escudos, los grandes señores, uno en pos de otro (Título Nijaib’ II, en Carmack, 2009:120). Para el año 1500 el señor Izkin Nijaib’ era un ajaw (señor) y se presentaba como “señor de Palotz , señor de Utzaqib’ala”. La concesión de esta gubernatura y señorío o ajawarem sobre Momostenango fue un mandato directo recibido de la capital de Q’umarkaj (Recinos, 1957:98), porque él no actuaba a título personal sino como un enviado del Estado k’iche’ central. Para el año 1524, el señor Izkin Nijaib’ desempeñó un gran papel como ajaw kalel o capitán y fue contemporáneo y compañero de batalla de Tekun frente a la invasión española (título Nijaib’ I, Carmack, 1979:176). O El señor Izkin Nijaib’ mantenía tierras y familia en Palotz. Esta región le tributaba peces, maíz, frijol, resinas y artículos obtenidos a través del comercio (Carmack, 1967:8). El señor Nijaib’ residía en Xe’lajun Kej (Xelajuj)31 y habría muerto allí antes de 158832. 19 San Vicente Buenabaj Su puesto al final de su vida fue de Ajpop, que significa “el del petate” o gran gobernante y su hermano menor don Juan tuvo el puesto de kalel; esta dignidad le fue reconocida en el año de 1558 por un Consejo de Señores — ajaw que celebró una gran reunión en el día de Santa Cecilia en la ciudad de Chwa Tz’aq (de esta fecha, datarían también los pictogramas de Buenabaj), el título Nijaib’ II declara que esta reunión de Señores no fue convocada por ninguna autoridad española, por ningún obispo, sino acordada entre ellos mismos. Esta reunión sucedió unos 30 años después de la conquista. Chwa Tz’aq era entonces centro del nuevo pueblo de Momostenango que acababa de fundarse, suceso, este último, por el cual al señor Izkin Nijaib’ también se le reconoce como fundador del pueblo. Seguramente los señores —ajaw de la región estaban posicionándose en una relación de fuerza, resistiéndose ante el nuevo sistema invasor que los colonizaba. El pictograma I (foto 13) de San Vicente Buenabaj muestra tres ciudades de donde provenían algunos de los señores —ajaw que declararon ajpop a Izkin Nijaib’ : Santa Cruz del Quiché, San Antonio Ilotenango y Santiago Chuwa Tz’aq Momostenango Relata el título Nijaib’ II que, en esta misma ocasión, allí le fueron entregados a Izkin Nijaib’ , a quien también nombraron “don Francisco”, los “huesos envueltos, huesos de león, huesos de tigre, su bordón y su corona”; todas insignias de realeza” (Recinos, 1957:98). Algunas de estas insignias se pueden observar claramente en el pictograma II de Buenabaj (foto 13) donde sobresalen el bastón o vara de mando, el tambor y la chirimía, instrumentos que según la tradición acompañan a la autoridad. q P 20 San Vicente Buenabaj Mapa 3. en Carmack, 1967:14.ver también Carmack, 1995:30 q q 21 q w San Vicente Buenabaj IV. Las tierras del señor Izkin Nijaib’ V arios títulos Nijaib’ coinciden en que el centro de las tierras del señor Izkin Nijaib’ estaba en un alto valle, pero le dan diversos nombres. Un pasaje revelador del título Nijaib’ IV lo nombra “Saq’ol Ajkab’awil Ab’aj”. El texto es el siguiente: y por medida y vista de ojos empiezan desde el paraje de Saq’ol ajcabawil abaj, aquí fue donde llegaron a ver alto con don Francisco Izquin y don Juan su hermano, a (el) paraje donde les hizo un gran convite el dicho don Francisco a los capitanes de Otzoyá; de aquí partieron y fueron a dar aI paraje de San Sija; y de aquí fueron caminando para el sur y llegaron a un volcán que Ie llaman, eI Excanul, y en Twipach (Manuscrito en el Archivo General de Centroamérica - AGCA, A1:18:6074-54884; en Carmack, 1973:354). En general, el territorio que se describe en este fragmento era llamado Palotz y está bastante bien identificado, Roberto Carmack (1967, 1972, 1973,1979, 1995, 2009) concluyó que el conjunto corresponde al territorio de Buenabaj. q e Según el título IV el centro de estas tierras estaba en un lugar llamado Saq’ol ajcabawil abaj, allí empezaba el territorio reconocido como propiedad de don Francisco Izkin y de don Juan, su hermano33. El nombre de “Saq’ol Ajkab’awil Ab’aj” tiene un significado complejo: por una parte, saq es una noción de territorio, un toponímico que en general se refiere a una planicie34; así se entiende en Buenabaj, donde el caserío Pasaq actualmente se traduce como “en la llanura” (ver foto 35); igualmente el cerro Chuwi Saq K’oli’k Ab’aj, significa “sobre la planicie donde está la piedra” (ver foto 2). En los diccionarios de Varea (f 226), saq significa “lo claro y tierra clara sin arboleda”; en Baseta “zac” significa “lugar” y en Coto “lo descombrado o despejado de árboles el çerro o pueblo”. En el título K’oyoi saq hace referencia a los llanos y lugares abiertos en las zonas del campo (Carmack y Mondloch, 2009:37). En el Rabinal Achi’, “niq’aj saq”, hace referencia a “el mundo” (Breton, 1999:382), y en Totonicapán Saq es usado para referirse a una planicie o a un lugar abierto en una zona rural (Carmack, 1973, 327). Finalmente, saq también connota la claridad, la luz, así lo entiende Sam Colop en el Popol Wuj (2008:26). El sufijo ol es un marcador de agente, por ejemplo la referencia a Tz’aqol, B’itol, como “el constructor”, “el creador” (Sam Colop, 2008 21); de manera que saq’ol podría también interpretarse como “el que hace los valles, el que hace la luz”. 23 San Vicente Buenabaj En el término “ajkab’awil”, el prefijo aj es un agentivo que designa al que desempeña una función o realiza un trabajo; el sustantivo kab’awil hace referencia a una divinidad35, la cual puede ser representada de diversas maneras, entre ellas por pequeñas figuras en piedra o madera; al estar implicada la noción de divinidad se hace referencia a la noción de “protector”, cuya característica es ser propietaria de algo, señor, dueño, patrón, propietario de, “santo dueño” de la tierra, la montaña, el maíz, el agua, el aire, el pueblo, etc. Finalmente, el término “ab’aj” quiere decir piedra, pero en este fragmento hace referencia a una cualidad física del territorio, porque la función de este toponímico es darle una “mirada al territorio” y en este caso, describiría al monte Tena como maciso rocoso y lugar prominente; tampoco se puede descartar que ab’aj tenga o exprese un contenido simbólico para designar un mojón, un altar, un mirador o el lugar de un gran suceso, como se detalla más adelante. Por el título Nijaib’ IV también sabemos que Saqol ajcab’awil ab’aj, don Francisco Izkin, como su hermano don Juan, “ellos llegaron a ver alto”. Esto quiere decir que se trata de un alto lugar, seguramente el valle de Uk’uleb’al Tena, descrito más adelante, desde el cual gobernaban o cuidaban su territorio. El término toponímico San Sija (tza’n tz’i ja’) designa al cerro actualmente llamado Sija (14° 59’ 20.10” N - 91° 32’ 26.47” O) al sur de Buenabaj, frente al cual se juntan varias afluentes del río (ja’) Samalá. El cerro es un límite, por un lado, Buenabaj (ahora con San Carlos Sija), por el otro, San Antonio Sija (aldea de San Francisco El Alto). El manuscrito dice “San” pero debe leerse tza’n (punta, nariz, península), es un descriptor toponímico muy común que se refiere a la saliente de un cerro, por su característica prominente. Sija es un toponímico común en las tierras altas mayas que debe leerse tzi’ ja’ (“perro de agua”). El toponimico designa la conjunción de cerro y ríos y hace alusión a su forma de montaña extendida, baja en uno de sus extremos y prominente por el otro, frente al cual se juntan las aguas. Con el topónimo Sija, se conoció a Ixtahuacán (antiguamente llamada “Santa Catarina Sixa” (Gall,1982,TII:859; Gall TIII:748), así está registrado en los títulos antiguos de Santa Clara La Laguna, Totonicapán, K’oyoi, Nijaib’ I y el título relación de Paxtoca. Igualmente, este topónimo también identifica a Patzicía [en kaqchikel] pa-tzi-ya’, donde tiene el significado de “en el perro de agua”). q r 24 En resumen, lo extraordinario de esta fórmula toponímica que nos da el título Nijaib’ IV es que reúne en realidad cinco referencias: importancia, ubicación, forma del territorio, designa a la divinidad o santo dueño del territorio y además denota la característica simbólica del lugar. Se puede decir que el nombre “Saq’ol Ajkab’awil Ab’aj”, identifica a “la gente de la planicie contigua a la piedra sagrada (kab’awil Ab’aj). También podría significar “los San Vicente Buenabaj de la piedra sagrada (buena piedra!). Hay un extraordinario paralelismo entre este nombre antiguo del lugar y el nombre moderno de San Vicente Buenabaj! Foto 8. El cerro Tza’n tzi’ ja’ visto de norte a sur, sobre Santa Lucía y San Antonio Buenabaj. q t Foto 9. El cerro Tza’n tzi’ ja’, visto desde el sur, sobre el valle del río Samalá. 25 q y San Vicente Buenabaj V. El alto valle de Uk’uleb’al Tena, lugar de asiento de Corral Ab’aj U k’uleb’al Tena (donde se asienta el Tena) es un precioso valle de altura situado a 3 068 m SNM, también conocido simplemente como uk’uleb’al (lugar donde se encuentran); el valle está cercado por las altas cumbres del Tena36 (3 300 m) el cerro Mumus y el Q’ixajuyub’ (cerro de Espinas). En este alto valle se encuentra el sitio arqueológico de Pa Corral Ab’aj (Corral de Piedra”) (foto 12). La cumbre de la altiplanicie está atravesada por un antiguo camino “real”, que lleva a Huehuetenango y hacia la costa sur, por lo que este valle era un lugar de parada para los viajeros. Actualmente, hay un lugar cercano que se conoció como “pa kiwarab’al amaq’ib’, “lugar de reposo de los amaq”37. El Manuscrito Buenabaj II proporciona referencias sobre este lugar y lo describe de la siguiente manera: y llegaron a un cerro que llaman Tena y allí se juntaron todos los soldados allí tocaron una bocina para llamarlos y juntarse en aquel lugar que le pusieron el nombre de Tena por haberse juntado toda la gente y soldados en aquel paraje (Álvarez Arévalo, 1987:42). [Izkin Nijaib’ ] se fue de allí y llego llegó a un paraje que llaman “Cucihujub” que confronta con el zerro de Tena y allí dijo que en aquellos parajes buscaran la vida mis hijos y vasallos (Álvarez Arévalo, 1987:42). El relato anterior coincide con el título Nijaib’ II: “entonces llegaron al cerro Q’aqijuyub’ atrás del Tena donde vivían sus madres, familia, hijos, todos” (en Carmack, 2009:122, traducción propia). q u Hay muchas referencia a este alto valle en los títulos antiguos, lo describen como lugar de encuentro entre el señor Izkin Nijaib’ y sus vecinos, un lugar donde hacía convite o celebraciones, es decir, un lugar donde se hacían acuerdos. El Título Nijaib’ III dice tambièn “aquí llegó la medida detrás de Tena; y vino la medida, aquí llego sobre el cerro Q’ixal, K’akijuyub” (Carmack, 1967:4), “xpe chi’ ketab’aj chiri’ xul chirij Tena; xpe chiketab’al chiri’, xul chwi’ juyub’ k’ixal kakijuyub’, releb’al… wa puaq …” (Carmack, 1973:352). Un documento antiguo de 1664 afirma que en este alto valle vivió Diego Vicente cuando tenía la edad de 66 años, aquí estaba su hacienda y ya para entonces era conocida como “corral de Piedra”, “corral abaj”, pero el termino “corral” es una categoría antigua para nombrar a un territorio local, familiar, doméstico, en tanto lugar de pertenencia y vivencia familiar. La tradición oral dice que la 27 San Vicente Buenabaj casa de Diego Vicente estuvo en Corral Ab’aj, misma de la que aún se pueden ver vestigios arqueológicos (Carmack, 1979:178). Título real de don Francisco Izquin Nehaib’ (Título Nijaib’ II) Versión k’iche’ del archivo General de Centroamérica Xel chi k’u chi ri’ xopon chi Q’aqijuyub’ uk’ulel te na chi ri’ k’ute chik’ase’ wi wal, nuk’ajol chuxik, xcha’ maji chi kixilab’iqo k’ulaja aj Xelaju chuwach e pu aj Xelajun Kej rumal xa junam koyowal, kachajilal. (Carmack, 2009:122) Traducción de Recinos Salieron de allí y llegaron al cerro Guki donde encontraron a mis hijos y parientes que allí vivían; se fueron, los sacaron y llevaron a Culajá [Q’ulaja] Ah Xelahú [Xe’laju], ante los de [Xe’lajun Kej], pues iguales eran su valor y su hidalguía. (Recinos, 1957:113). Traducción propia38 : Xel chi k’u chi ri’ xopon chi Q’aqijuyub’ / X - el / chi / k’u / chi ri’ / x - opon / chi / Q’aqi - juyub’ 39 t1 - salir loc. entonces dem. t1 - llegar loc. fuego- cerro salieron de allí, entonces llegaron al cerro Q’aqijuyub’ uk’ulel te na chi ri’ k’ute chik’ase’ wi wal /u - k’ulel /te na / chi ri’ / k’u /te / chik’ase’ / wi - wal / Pos. 3s. - encontrar Tena allí donde madres vivían pos.3pl - parientes detrás del Tena donde vivían sus madres, parientes nuk’ajol chuxik / nu - k’ajol Pos. 1 pl hijos / chuxik todos nuestros hijos, todos Versión del manuscrito Buenabaj II q i 28 Y se fue de allí y llegó en un parage que llaman Cucihujub que confronta con el zerro de Tena y allí dixo que en aquellos parages buscaran la vida mis hijos y vasallos en adelante que no sean perjudicados por los que llaman Qulaja [Q’ulaja] que son los de Quezaltenango porque el señor de ellos es tan valiente como nosotros dixo. (Álvarez Arévalo, 1987:42-43). San Vicente Buenabaj Foto 10. El alto valle de Uk’uleb’al Tena, a la izquierda Corral Ab’aj (corral de piedra). Vista desde la cumbre del Tena, al fondo el cerro Mumus. Foto 11. Pa Corral Ab’aj, el lugar donde tuvieron su casa Diego Vicente y su abuelo, el señor Izkin Nijaib’. q o 29 q p San Vicente Buenabaj VI. El Señor Izkin Nijaib’ y Tekum E n Buenabaj, existe una fuerte tradición, oral y escrita, alrededor de Tekum, debido en parte a que los títulos Nijaib’ hacen una extensa descripción de varias batallas entre los k’iche’ y las fuerzas invasoras españolas (Recinos,1957:86; Carmack, 1979:163; Álvarez Arévalo, 1987:32 ss). Carmack, (2009:108) observa que el título Nijaib’ I proporcionan ciertas referencias sobre Tekum muy diferentes a las que dan el Título K’oyoi (Carmack, 1979:241-242) y el Título del Ajpop Huitzitzil Tz’unun (Gall, 1963:27). Hay mucha polemica acerca de estas descripciones, pero son testimonios propios que no pueden ponerse en duda, sin olvidar que fueron escritos más de 25 años después de esos sucesos; además “Posiblemente, los traductores del Título Nijaib’ I tuvieran dificultades en traducir esta parte de la narración, y de hecho el texto k’iche’ sobre estos acontecimientos en el Título K’oyoi ha sido también difícil de traducir.” (Carmack, 2009:107 ss, para este y los siguientes textos entrecomillados). El título Nijaib’ I proporciona importantes registros: “los españoles fueron atacados primero por dos capitanes, uno de Xepach y el otro de Momostenango”. Esta es “una referencia al papel importante jugado por el señor Izkin Nijaib’ , uno de los jefes militares más prominentes del pueblo de Momostenango ”; también “la referencia al oro entregado a los españoles concuerda con el hecho de que las montañas prominentes de Buenabaj contenían oro y otros metales valiosos.”; finalmente, “No cabe duda que este párrafo sobre la muerte de Tekum es el más alegórico del Título Nijaib’ , y talvez de todos los títulos k’iche’.” Estos relatos de la guerra contra los invasores tienen mucho significado para los K’iche’, especialmente en Buenabaj, pueblo que se considera legítimo heredero de la tradición del señor Izkin Nijai’b’, quien es aquí considerado y elevado legítimamente a la categoría de compañero de lucha de Tekum: Izkín Aj Palotz Utzaqib’aljá, llamado Nejaib’, hecho águila y león, capitán hecho rayo quien también sucumbió y fue atormentado para que dijera dónde estaba el oro y colaborara con ellos (Álvarez Arévalo, 1987:34). q Q En la tradición oral de Buenabaj, hay una continua reminiscencia de Tekum y un claro respeto a su figura y su nombre. Tekum también es llamado Zukum, que significa el escogido, el buscado, el elegido40. Por medio de ambos, de Tekun y del señor Izkin Nijaib’ , Buenabaj se identifica con la historia nacional. 31 San Vicente Buenabaj q W 32 Foto 12. Pictograma de Buenabaj No. I (arriba) y No. II (abajo). San Vicente Buenabaj VII. Los pictogramas de Buenabaj D entro del patrimonio documental en posesión de San Vicente Buenabaj, se hallan tres pictogramas que representan hechos reales de la historia k’iche’, también registrados en los títulos Nijaib’. Las pinturas están trazadas sobre papel español, sin indicación de fecha pero, presumiblemente, se hicieron como parte de los títulos Nijaib’, entre 1550 y 1560, pues la historia narrada y los detalles que brindan sobre los atributos del poder y de la autoridad concuerdan con estos documentos. El pictograma I, de las casas grandes El pictograma está trazado en tinta negra y decorado en colores ocre terroso, rojo y azul (en su parte central) hay tres grandes edificaciones y en una parte superior, dibujado en azul, lo que parece un paisaje rocoso de alta montaña, de donde baja un rio que atraviesa la zona pasando frente a una pequeña laguna en el centro. Las tres son casas grandes o de gobierno, con forma de iglesia sobre una base piramidal, con campanas y banderas; representan a tres ciudades aliadas, y según los mismos textos41, se trata de Santa Cruz del Quiché, San Antonio Ilotenango y Santiago Chwa Tz’aq (Momostenango). Estos son los pueblos nuevos que representan a tres linajes, Kaweq, Ilokab’ y Nijaib’ que fueron parte de la federación k’iche’ de Q’umarkaj hasta 1524; Chwa Tz’aq es la antigua ciudad donde el señor Izkin Nijaib’ era gobernante, que desde 1558 hasta 1587 fue el centro o cabecera de Momostenango. El pictograma II, de las princesas Este pictograma presenta una escena de matrimonio entre gobernantes. El texto, al pie de las cuatro figuras reales dibujadas, dice en idioma k’iche: Emperador chupa Mexico rajawal quiche culuna ojer ruc’ e caib’ u mial malintzin qui bui, e u mial ajae mendectzum…emperador ajawal quiche ri xoc patan chwach ojer iboyooca chwach cunal ajauab chupa tinamit quiche utladecat oj (transcripción de Carmack, 1973:371). q E Traducción: El emperador en México y el señor k’iche’ quien antes casó a dos de sus hijas, nombradas Malintzin, hijas del señor Montezuma… El señor Quiché, ante quien entraron los tributos antiguamente, por los señores en nuestro centro Quiché de Utatlán (Carmack, 1973:371). 33 San Vicente Buenabaj Alvaréz Arévalo describe esta escena: El emperador con tres brazos, dos junto a su pecho y el tercert brazo (izquierdo) recibiendo una guirnaldad de una docella. En el centro de esta y otra doncella figura un personaje real de menor estatura que los otros tres, sosteniendo con su mano derecha una lanza y con su izquierda y derecha de la doncella un cetro. (Alvarez Arévalo, 1987:18). Muy importante, al lado de los personajes, están las insignias mayas de autoridad: el tambor y la chirimía, rodeadas de dos arcos, una flecha, un hacha y lo que parece ser una escopeta o talvez un bastón de autoridad. En Buenabaj, llaman a este cuadro “las princesas”, relata un suceso histórico real, la alianza matrimonial entre los k’iche’ de Q’umarkaj con Tenochtitlán (México). Se trataría del gobernante k’iche’ Wuqub’ No’j (Siete Pensamientos), quien gobernó Q’umarkaj entre 1500-1523, y casó con dos hijas de Moteuczoma, gobernante de Tenochtitlán (México), ambas llamadas Malintzin. Se sabe que desde 1 510 los k’iche’ comenzaron a dar tributo a Moteuczuma en forma de plumas de quetzal, oro, piedras preciosas, cacao y telas (Christenson, 2003:277; Carmack, 1981:143). El título Nijaib’ I (Recinos, 1957:84, Álvares Arévalo, 1987:31) señala que Moteuczoma demandó que se le pagara tributo y así lo hicieron, pero el pictograma no presenta esto como una sumisión sino como una alianza matrimonial y política. En el pictograma II se lee Montezuma, se trata Moteuczoma II, gobernante de Tenochititlan (México), 1503 – 1519. Moteuczoma significa “Aquel que frunce el ceño como un señor”, el nucleo de este nombre es teu que significa “señor”, en idioma Nahuatl (Stuart, 2016:11). El pictograma III, escudo de B’alam Akab’ de don Francisco Izkin Nijaib’ q R 34 El águila de Buenabaj es una pintura trazada en tinta negra sobre dos hojas de papel español, decorada en colores ocre terroso rojizo y amarillo (pictograma III). El águila es la imagen central y toda la figura tiene la forma de un escudo de armas español del siglo XVI, pero estos emblemas o títulos también eran comunes dentro de la tradición maya y estaban para uso de los gobernantes (ajpatan), que ceremonialmente los cargaban en la espalda (cacaxte) con plumas de quetzal, (Tedlock, 2003:140) como claro símbolo de autoridad y reconocimiento a su cargo. El águila así como el jaguar, eran grandes símbolos mayas para mostrar los atributos del poder que distinguía a cada linaje gobernante. Según el Popol Wuj, el águila, k’ot, era el símbolo de B’alam Ak’ab’ (“jaguar o señor la noche” (Recinos, 1953:210-12), quien fue uno de los grandes abuelos, fundador de la casa Nijaib’, por lo que el águila era la insignia de todo San Vicente Buenabaj el grupo (Carmack, 1972:15). El águila, nawal de B’alam Ak’ab’, identificaba al señor Izkin Nijaib’ como un guerrero águila (Carmack, 1979:176; Recinos 1953:210). El águila de Buenabaj es de un tipo común en Guatemala, es robusta, negra, de alas anchas y cresta coronada, grandes ojos, garras y pico lenguado. Tiene las alas extendidas y se halla de pie sobre tierra firme. Esta águila tiene dos cabezas y entre ambas, destaca al centro una corona real que tiene trece florones decorados con vírgulas mayas, rematada en medio por un orbe o mundo con una cruz en la cúspide. A sus pies, tiene dos bastones cruzados por cintas conmemorativas, parecen espadas atrapadas en sus garras, esta impresión la dan las cintas con su inscripciones, la del lado izquierda dice en latin: “Deus Ius Huc” “Dios, Derecho, Aquí”; y la del lado derecho tiene una numeración romana no legible (transcripción de Conde Roche, 2 016). Colgando como de un listón, del ala central del águila pende lo que parece un caballo miniaturizado o una danta, semejante al pequeño tzijolaj de Chichicastenango. Esto, posiblemente, tiene un significado calendárico. Todo el cuadro se enmarca o tiene un borde alrededor y de la parte superior cuelga un decorado tipo cortinas de palacio. El borde es del tipo yagual, banda, o cinta que usan las ancianas, también llamada ranta en Quetzaltenango. Esta banda solía bordear las capas de cofrades y terminar en forma de cruz expresando un significado que sacraliza el conjunto. La parte central del escudo está en el pecho del ave y se divide en cuatro cuadrantes, cada uno con la imagen de una casa grande, con forma de iglesia sobre una base piramidal, y el conjunto, sostenido sobre dos cuadrantes adicionales, uno con el signo maya del jaguar y el otro atravesado por bandas que son el símbolo maya clásico para la tierra. La historia k’iche’, tal como la relatan el Popol Wuj y el Título de Totonicapán, empieza con cuatro ancestros fundadores. Uno de ellos es B’alam Ak’ab’ (jaguar del amanecer), y su mujer Chomi Ja’ a quienes les corresponde el mérito de haber sido la segunda pareja hecha. Ambos son madres y padres de las nueve casas grandes de los Nijaib’ (Popol Wuj, Sam, 2008:134,141). q T El águila bicéfala es un símbolo presente en la iconografía de muchas culturas, en Mesoamérica, fue el símbolo político más fuerte del siglo XVI. En forma similar al pictograma de Buenabaj, al águila también se le ve en el Título de Totonicapán, en el título Koyoi’ de Quetzaltenango y en varios códices del centro de México como el códice p’urhépecha Tzin Tzun Tzan, «lugar de colibris», y en el lienzo de Quauhquechollan que empieza su relato con el pictograma de una doble águila como símbolo de una alianza política. 35 San Vicente Buenabaj Águila bicéfala en documentos antiguos y tejidos contemporáneos Figura 2. Águila del título Koyoi’ de Quetzaltenango, arriba se lee: “Castillo del calpul Juan Penonias de Putanza [...] tercero” (Carmack y Mondloch, 2009:15). Figura 3. Águila en el lienzo de Quauhquechollan, restaurado digitalmente por UFM, 2007. Figura 4. Águila en un tejido maya contemporáneo, tzute de Chichicastenango. Figura 5. Águila en un tejido maya contemporáneo, mantel de Nahualá. Figura 6. Águila en un tejido maya contemporáneo, güípil de Quetzaltenango. q Y Figura 1. Águila del Título Totonicapán, al pie se lee: Auto del señor don Juan de Aguilar, Conquistador (Carmack y Mondloch, 2007:167). 36 San Vicente Buenabaj q U Foto 13. Pictograma III de San Vicente Buenabaj. Escudo de B’alam Akab’ otorgado a don Francisco Izkin Nijaib’. 37 q I San Vicente Buenabaj VIII. Los títulos Nijaib’ L os títulos Nijaib’ son varios documentos escritos por miembros de los Nijaib’, uno de los grandes linajes gobernantes que para el año 1500 alcanzó a ser el segundo más importante en la capital k’iche’ de Q’umarkaj. Los documentos identificadas como títulos Nijaib’ nos remiten a los mismos lugares, sucesos y personajes centrales, pero hay diferencias entre una versión y otra. Las similitudes posiblemente se deben a que estas versiones se basan en un mismo texto original, una especie de arquetipo que sirvió de base, el cual pudo haber sido redactado en k’iche’ entre 1550 y 1560 (Carmack, 1973:32). También pudieron haber sido escritas, por lo menos en parte, por los mismos autores. En cambio, las diferencias se deben a que se hicieron copias mandadas a hacer en diferentes momentos, en distintos lugares o por distintos señores42 y sus descendientes, entre ellos los Vicente de Buenabaj. En conclusión, cada versión de los títulos Nijaib’ parece reflejar preocupaciones diferentes y diversas situaciones locales, por tanto hay que ver cada versión como texto independiente. En San Vicente Buenabaj se hallan dos versiones de estos Títulos Nijaib’ y además tres pictogramas que presentan temas tratados en estos documentos. Este patrimonio ha sido cuidado por siglos en Buenabaj gracias a la autoridad local y a los varios grupos y comités comunitarios que custodian estos documentos. En resumen, el relato de los títulos Nijaib’ trata de lo siguiente: La gran capital k’iche’ de Q’umarkaj edministraba un gran territorio que había conquistado desde el año 1300 pero enfrentaba problemas para controlar sus fronteras y linderos. Por esta razón, alrededor del año 1501, fue enviado el señor— Ajaw Izkin Nijaib’ a recorrer estos lugares fronterizos, sujetarlos a la capital y gobernarlos. Continuó su recorrido y marchó de Xoch’o por Chuchilotz, por la orilla de Palotz, hasta el límite de Tz’aqib’ala. Esto quiere decir que atravesó Buenabáj y Momostenango, pasó por Tunayac (tambor de gato de monte), que era q O El ajaw Izkin Nijaib’ recorrió las fronteras, siguió el curso del río Chixoy desde el norte, pasó por Zacapulas, Aguacatán, Tz’olojche’ (Santa María Chiquimula), y después de 21 días de recorrido, llegó a Xoch’o (San Francisco el Alto), al cerro Kuxmak. Después su camino, fue en ascenso, parece que rodeó la antigua ciudad o tinamit llamado Izna (Malacatancito Viejo), luego descendió al cruce de ríos (Xalkatja’), llamado temiska (Aguas Calientes)43. En este lugar, los habitantes, a grandes voces, exaltaron la gran bondad del señor Izkin Nijaib’ . 39 San Vicente Buenabaj un k’alpul muy extenso que antes tenía mojón con Aguas Calientes, K’alel y Buenabaj. Después el señor Izkin Nijaib’ se retiró a su alto valle detrás de monte Tena, donde encontró a sus hijos, parientes y vasallos, a quienes les señaló su territorio y les dijo que los de Xelaju no llegarían allí a molestarlos. Desde aquí fue a Patzicache (chui tzik’iche’), mojón de Calel con Momostenango, fue a B’alik Ixok Ab’aj (Huitán), luego cerró la vuelta en Paxchun. Allí en su alto valle, donde tenía una residencia, el señor Izkin Nijaib’ recibió a autoridades de otros pueblos y realizó varios festejos y acuerdos. El título Nijaib’ II llama a este alto valle Uk’uleb’al Tena y el título Nijaib’ IV lo llama Saqol Ajcabawil Abaj. Este último dice que fue allí donde “don Francisco Izkin y don Juan su hermano, llegaron a ver alto”, es decir que desde allí gobernaban la región. De aquí se deriva la importancia de Buenabaj en los Títulos Nijaib’, porque los títulos dejan en claro que se trata de sus tierras, cuyos límites son la cumbre de Huitán, la punta del cerro Tz’an Tzi’ Ja’ (Sija) y un punto detrás del monte Tena (Carmack 1979:176). Buenabaj fue llamada entonces Palotz y era un distrito de la antigua ciudad de Chuwa Tz’aq desde donde se gobernaba la región fronteriza. Los títulos ponen mucha atención en las fronteras, por esta razón listan los mojones, los cuales van apareciendo en la forma de palabras toponímicas que nombran estos lugares, generalmente, los puntos sobresalientes del gran paisaje. Pero hay que notar que la noción de frontera (k’ulb’at) era bastante amplia en el siglo XV. Estos puntos además de señalar fronteras de Estado, señalaban también fronteras provinciales, entre ciudades, entre parajes locales y entre linajes familiares. Es gracias a este cruce, que han sido nombres duraderos, decisivos en varios aspectos y se les sigue recordando y citando en situaciones de todo tipo. w P Los documentos Nijaib’ tratan también otros temas importantes, ofrecen una detallada descripción de la lucha de Tekum contra los invasores cuando estos llegan en 1 524, lucha en la cual también participó el ajaw Izkin Nijaib’; el papel que jugó Santiago Chwa Tz’aq en diversos momentos, la fundación de Momostenango, y en general asuntos en los cuales participo el señor Izkin Nijaib’. Estos títulos abundan en elogios para el señor Izkin Nijaib’, Momostenango y particularmente Buenabaj (Carmack, 1967:32). En general, los títulos presentan la historia maya k’iche, a sus héroes y símbolo y los historiadores Nijaib’ (Nejaib en algunos documentos) hacen énfasis en aquellos que pertenecieron a su linaje, Majukotaj, Tekum, Izkin Nijaib’, Diego Vicente, entre otros. Los títulos Nijaib’ son textos muy complejos y su comprensión demanda un fuerte conocimiento histórico, lingüístico y geográfico sobre una extensa región, como lo demostró Carmack en sus diversos estudios (1967, 1973, 40 San Vicente Buenabaj 1995, 2009), y aún queda mucho por saber, todo lo cual requiere un trabajo que espera a las nuevas generaciones. Títulos Nijaib’ Foto 14. Reproducción digital del Título Nijaib’ I, página 1, copia hecha por Brasseur de Bourbourg en 1856, manuscrito depositado en la biblioteca de la Universidad de Princeton, New Jersey. Foto 15. Título Nijaib’ II, página 1, copia hecha en 1704, manuscrito en posesión de San Vicente Buenabaj. TÍTULO NIJAIB’ I Hay otra versión del Título I en San Vicente Buenabaj, hecha en castellano el 5 de mayo de 1704, mandada a hacer por Francisco Vicente, hijo de Mateo Vicente, descendiente y nieto de Francisco Izkin Nijaib’ w q De los varios títulos Nijaib’ esta versión es la más larga y detallada, fue escrita entre los años 1550 y 1560 en Quetzaltenango y Momostenango. El documento se guardó por mucho tiempo en Totonicapán hasta que, a mitad del 1700, se presentó como prueba ante un juzgado colonial de tierras, allí se mando traducir al castellano, pero el original k’iche’ se extravió. Solo se conserva su copia en español y tiene dos versiones en el Archivo General de Centroamérica (AGCA)44 ambas publicadas varias veces45 con el nombre de “Título de la casa Ixquin Nehaib señora del territorio de Otzoya”46. 41 San Vicente Buenabaj , según hace constar en la parte final del documento. El manuscrito de Buenabaj no concuerda íntegramente con los manuscritos del AGCA, particularmente en varias escenas locales que involucran a Izkin Nijaib’. Carmack publicó extractos de esta versión en 1973 y Álvarez Arévalo la publicó íntegramente en 1987. A continuación algunos fragmentos de ambas versiones. Manuscrito del Archivo General de Centroamérica Inicio Títulos de los antiguos nuestros antepasados. Los que ganaron estas tierras de Otzoya’ antes de que viniera la fe de Jesucristo entre ellos. En el año de mil y trescientos (Carmack, 2009, Pág.100). Cierre Y esto es el título y probanza de este pueblo de Quetzaltenango y del pueblo de Santiago Chwa Tz’aq Momostenango (Carmack, 2009, Pág.112). Manuscrito de Buenabaj Títulos que llaman de los antiguos y antepasados, los que ganaron estas tierras antes que viniera la fee, de Christo, nuestro señor a estas partes (Álvarez Arévalo, 1987, Pág.27). Y se dio fin a este traslado oy sinco del mes de mayo de mil y setecientos cuatro años yo Francisco Bisente desendiente y nieto de don Francisco Izquin Nehaib’ etcétera.… Francisco Bisente hijo de Mateo Bisente. Yo escribano de este pueblo de Momosteango: Antonio Hernández escribano de cabildo (Álvarez Arévalo, 1987, Pág.37). TÍTULO NIJAIB’ II El manuscrito original fue escrito en idioma k’iche’ en Chuwa Tz’aq (Momostenango) a nombre de los señores de Quiche, Santa Cruz Utatlán47 y proporciona la fecha de 1558. El título II se le conoce como “Título real de don Francisco Izquin Nehaib’”, Recinos lo publico en 1957 y Carmack en 200948. w w 42 En San Vicente Buenabaj, se conserva una versión de este título, escrita en castellano, que debió haber sido hecha al mismo tiempo que los pictogramas que también se guardan en la comunidad. Esta versión fue publicada íntegramente por Álvarez Arévalo en 1987. El manuscrito de Buenabaj da más detalles en los asuntos que se refieren a Buenabaj y Momostenango en cuanto a su historia, colindancias y mojones49. San Vicente Buenabaj Inicio del título Manuscrito del Archivo General de Centroamerica Wakamik chiqaya’o titulo, probansa, fiel sikutorio. Wakamik k’ut k’a qawinaqij chi nima qonojel oj rajawal chun, sajkab’, oj pu rajawal k’iche’ Santa Cruz Utatlán. Wakamik k’ut chiqaya’o titulo probanza, zikutorio rech ajaw don Francisco Iskin Nejayib’ aj Utz’aqib’ala, aj pa Lotz, aj Utzukarib’ala, qitzij ri oyew achij, qitzij chi chak’ol amaq’ tinamit, qasay amaq’ tinamit (Carmack, 2009:123). Aquí daremos el título, probanza y ejecutoria fiel. Aquí damos testimonio todos los grandes, nosotros los señores de la ciudad, los señores del Quiché, Santa Cruz Utatlán. Ahora daremos el título, probanza y ejecutoria al Señor don Francisco Izquín Nehaib [Nejayib’], Ah Utzaquibalá [Utzakib’ala], Ah Palotz , Ah Utzcaribalá [Utzkarib’ala], en verdad valiente guerrero, en verdad vencedor de los pueblos y las gentes (Carmack, 2009:123). Manuscrito de Buenabaj En veinte días del mes de abril de mil y setecientos y cuatro años se traslado estos títulos y executoria de los antiguos desde la gentilidad que era escripto en lengua quiché a la castellana y es como sigue (Álvarez Arévalo, 1987, Pág.27). Cierre del título Manuscrito del Archivo General de Centroamérica Wakamik k’ut k’a qaya’ utitulo, uprobanza, usekutorio fiel, sekutorio k’a qaya’ k’u poder chi rech ajaw don Francisco Iskin, ajpop, ruk’ uchaq’ don Juan Q’alel. Xaqi e juna’al ajawab’ xaqi jun kichuch kiqajaw, xa k’u qi chupam karmita xke’ilow wi misa, xkib’an wi kajawarem chuwa po k’i’al, xola usuk’ulikil, qatzij qaq’anawinaqil. Wakamik k’ut k’a qaqasaj qafirma chi rij kajib’ monton chi capitulo kuk’ mamayib’ e aj Tz’alamib’ e utza’m Chinamital, e ral pop aj Tz’alam, e nimal achij (Carmack, 2009:123). w e Ahora, pues, extendemos el título, la probanza, la ejecutoria fiel, ejecutoria y poder a favor del Señor don Francisco Izquín Ahpop y su hermano don Juan Galel. Ellos son hijos de un [mismo] señor, una misma fue su madre, uno mismo su padre, en la ermita oyeron la misa, hicieron su Señorío por su calidad de Señores, y en fe de verdad damos nuestra palabra y nuestro testimonio. Ahora, pues, ponemos nuestra firma en cuatro montones o capítulos con los ancianos, los 43 San Vicente Buenabaj Ah Tzalam, los Utzam [utza’m] Chinamital, los Ahpop [ajpop], los Ah Tzalam [Tz’alam], los grandes varones (Carmack, 2009:123). Manuscrito de Buenabaj Que asi lo dise el título probanza y executoria del casique, don Francisco Izquin que llaman ahpop Calel; el y su hermano menor don Juan Calel Izquin y este los años en que fueron nombrados y graduados que fue el año de mil quinientos y sinquenta y ocho, los señores casiques y principales, cavesas del pueblo de Momostenango que llaman, Ahuvagak, Ahitzakibola Ahpalotz en este de Momostenango y lo emos bisto todos los principales cavesas de cada pueblo, que todos lo emos dicho y relatado y emos dado nuestra ynformacion sobre lo conquistado y sobre de sus balentias, entre todos nosotros veintidós pueblos y por eso le damos su Título probansa fiel executoria y le damos poder al señor don Francisco Izquin que llaman Ahpop y su ermano menor don Juan Calel son hijos de un padre y madre y en una ermita oyran las misas, y ellos an asistido y gobernado poklan y en chuajola en que es verdad todo lo dicho y aber atestiguado y ahora ponemos nuestras firmas a favor de cuantos montamos de los títulos con todos los que llaman …. pop Ahgulam. Don Juan Cortes Reyes Cavallero, señor del pueblo de Santa Cruz; don Martin Reyes ahau quiche, Santa Cruz; don Juan Perez Chuilocab San Antonio; don Juan Cortes rib Saknoy de Quesaltenango; don Andres Calel ahau quiche; don Martin … Quesaltenango y todos …. Santa Cruz (Álvarez Arévalo, 1987:37). TÍTULO NIJAIB’ III Este es un pequeño documento redactado en k’iche que dice haber sido escrito el 15 de junio de 1542 a nombre de los principales de Chwa Tz’aq (Momostenango), Quezaltenango, Chiquimula, San Antonio y de Palotz Utzakibala. El original ha desaparecido pero una copia, también en k’iche’, se halla en el Archivo General de Centroamérica (A1:6074-54879), publicada por Carmack (1973:349-352). w r Una versión de este título escrita en castellano se conserva en la alcaldía indígena de Momostenango. Este documento fue presentado por los alcaldes de Momostenango en 1775 ante la Alcaldía Mayor de Totonicapán en un litigio por tierras con Santa María Chiquimula; esta versión fue publicada por Carmack (1967:3-13). El título III se refiere con mucho detalle a Momostenango y menciona a dos señores, don Francisco Izkin y don Juan Gomez Rok’che Ilocab’, a los 44 San Vicente Buenabaj que llama señores de Palotz y Tzaquibala. Los siguientes textos en Carmach, 1967:3-13. Inicio: “Hoy comenzamos a señalar esta tierra del señor don Francisco Izquin Nijaib’, poderoso señor Izquin; ciertamente así dice el informe de tierra, dicen todos los señores de la conquista, gananza del señor Izquin, porque así dice el título y probanza por él. Cierre: Firma don Francisco Izquin, conquistador de las tierras de Palotz Utzakibala. Bartolome López Unum, su escribano. Mención de Buenabaj: Entonces habló el Yoc K’anchebex Q’izol. Bajaron a la unión de los ríos, aquí en el temascal, el mojón, la unión de tierras del conquistador señor don Francisco Izquin, de Utzab’ala Palotz , (son) sus mojones. Fue a recibir el terreno bajo… entonces vino la medida …por un lado, viene su medida entre… con el cabaxolxul, su caja (¿?), va su medida aquí, llega junto a Sakcolaj Cabawilal: después llega la medida todavía con los principales. con los principales k’iche’ winaq y los mam tzikol fue hecha una gran celebración. Después, los señores ….el señor Señor don Izquin siguen con la medida aquí ….junto a las tierras de los Yok K’ancheb’ex. Allì dio vuelta y llegó la medida al principio del rio Caquixa; y de allí vino la medida y llego aquí en el cerro Paxchun; y aquí llegó la medida detrás de Tena; y vino la medida, aquí llego sobre el cerro Q’ixal, K’akijuyub. TÍTULO NIJAIB’ IV El Título Nijaib’ IV fue redactado en Santa Cruz del Quiché, a nombre de los principales Nijaib’ residentes en Quetzaltenango. El original fue escrito entre 1550 y 1560 en k’iche’ y en castellano, pero solo se conservan dos copias en castellano que se encuentran en el Archivo General de Centroamérica, (A1:6074-54883, 54884) (Carmack, (1973:354). w t Este título tiene la importancia de que identifica las fronteras locales con bastante detalle y proporciona múltiples citas de lugares que se pueden asociar con mucha certeza a Buenabaj. De especial interés, es el lugar “Saqol Ajcabawil Ab’aj” que posiblemente se relaciones con un nombre antiguo de Buenabaj, así como la referencia al cerro “San Sija”, misma que debe leerse “tza’n tz’i ja’”, un toponímico que significa “en el extremo del perro de agua”, y que designa al cerro “Sija” que actualmente divide a San Carlos Sija de San Antonio Sija y San Vicente Buenabaj. 45 San Vicente Buenabaj Inicio del título: Aquí comienzan los títulos y probanzas de los caciques y principales de los pueblos que abajo se van citando, compuestos en el idioma Achi y rubricado por su escribano público en el año de 1505 y al presente sacados en el original que queda en romance y en el idioma Achi. Mención de Buenabaj: y por medida y vista de ojos empiezan desde el paraje de Saqol Ajcabawil Ab’aj, aquí fue donde llegaron a ver alto con don Francisco Izkin y don Juan su hermano, a (el) paraje donde les hizo un gran convite al dicho don Francisco a los capitanes de Otzoya’; de aquí partieron y fueron a dar aI paraje de San Sija; y de aquí fueron caminando para el sur y llegaron a un volcán que Ie llaman, eI Excanul, y en Twipach …” w y 46 San Vicente Buenabaj Mapa del recorrido del señor Nijaib’ y lugares mencionados en los Títulos Tujlanis tambor ab’aj Temiska w u Mapa 4. Elaboración propia, con base en: MacBryde, 1969, Tomo I, mapa 3. Escala 1: 500:000, Recorrido con base en: Carmack, 1967, 1973, 1995 y 2003. 47 w i San Vicente Buenabaj IX. Buenabaj en el lienzo Quauhquechollan de 1527 E l lienzo de Quauhquechollan es una importante narración elaborada por indígenas provenientes de un lugar llamado Quauhquechollan, centro de México, que pactaron una alianza en 1527 con las fuerza invasoras de Jorge de Alvarado. Fue hecho cerca de 1530 sobre un lienzo, una tela grande de 2.35 x 3.25 mt. En realidad el lienzo es una gran pintura que cuenta la invasión española, en una segunda oleada, los caminos por donde pasaron, presenta los ríos, montañas, plantas, animales, personas, lugares y pueblos. Todo está descrito con gran cantidad de glifos y en la forma de un mapa en donde ambos, españoles y Quauhquecholtecas, se muestran como aliados y van haciendo la guerra; los caminos se ramifican y se señalan claramente con huellas humanas y de caballos y sirven para guiar al lector por el mapa documental de Guatemala y El Salvador. En una sección del lienzo, (sección E) el mapa indica un camino que asciende de la costa sur a Quetzaltenango, cruza un río, el Samalá, y pasa un pueblo marcado por el símbolo de Olintepeque. Después el camino sigue directamente hacia arriba, atraviesa tres ríos pequeños, estos son los varios ramales del Samalá en el área, bordea un enorme cerro que sería el Tena o el Tz’an Tz’i ja’ (Sija) y una zona de guerra no identificada (Momostenango?) hasta alcanzar otro pueblo (Malacatancito?) contiguo a un enorme río (Cuilco?). Después el camino cruza directamente hacia la derecha al Quiché, bordeando barrancos y evitando otra zona de guerra, y siguiendo un ramal se dirige a Chichicastenango50. La “Certificación”, un título de tierras de 1705 en posesión de Buenabaj, describe bien este antiguo camino y sus extremos. Coincidentemente presenta w o El camino vía el Tena se muestra como una ruta de tránsito pacífica, se observa a un hombre que lleva carga a la espalda (tameme), a su izquierda hay una gran montaña coronada de bosque y flanqueada por ríos que podría ser el cerro Tz’an tz’i ja’. Un poco más adelante, a la derecha y fuera del camino, se encuentra el glifo de Totonicapán o Chwi Miq’ina “por encima de la fuente termal”, representado por una fuente de agua con columnas de humo. Más adelante, siempre a la derecha del camino, aparece el glifo de un pueblo sin identificación, está un poco aislado y dentro de una zona de guerra, lo cual significa que este ejército invasor no lo ocupó, por la cercanía y por hallarse entre el monte Tena y Totonicapán. Este pueblo no puede ser otro sino Momostenango (Chuwa Tzaq). Hay tres áreas con glifos de casas (chinamit) de diverso tamaño en las cercanías. Al menos, una de ellas correspondería al alto valle Uk’uleb’al Tena entonces ya habitado. 49 San Vicente Buenabaj un largo trayecto hacia el norte, siempre hacia arriba, se trata del viejo camino real que actualmente aún sigue, en su mayor parte, la Ruta Nacional No.9. w p 50 Mapa 5. Lienzo de Quauhquechollan (1530), original enmuseo Casa del Alfeñique, Puebla, México. En el recuadro la región de Buenabaj. En: Asselberg. F. (2002). Mesoamérica (54), Pàg.3. San Vicente Buenabaj La región en el lienzo de Quauhquechollan (1530) río Cuilco ? Q’umarkaj Chichicastenango Comalapa Malacatancito? Momostenango? (Chuwa Tzak) Totonicapán Sololá? cerro Tena? afluentes del Samalá Chimaltenango Olintepeque afluente del Samalá Iximche’ Territorio Kaqchikel ? afluente del Samalá Territorio K’iche’ ? Quetzaltenango Samalá2 Zapotitlán Suchitepéquez Mar Pacifico w Q Mapa 6. Vista parcial del lienzo Queauhquechollan, restaurado digitalmente por UFM, 2007. Fuentes: Asselbergs, (2002), Akkeren (2007) 51 w W San Vicente Buenabaj X. Los relatos de fundación de San Vicente y el pacto con Momostenango E n 1600, San Vicente era un santo entre los más famosos en América. La misma orden dominica en 1551 había nombrado a la gran provincia eclesiástica que administraba “Provincia de San Vicente de Chiapa y Guatemala”. Es importante conocer la importancia y el significado que se le daba a San Vicente en el siglo XVI para comprender su adopción como santo y nombre patronímico de Buenabaj. El cronista Juan de Torquemada, franciscano, alrededor del año 1600 describía a San Vicente como un viajero que recorrió comarcas, le hablaba a las multitudes y a los príncipes, se preocupó por ayudar a los pobres y necesitados, y una persona que servía de arbitro en conflictos sociales y divisiones políticas51. Si esta era su imagen, quien como San Vicente para encarnar y hacer presente la memoria de los grandes líderes históricos de un lugar como Buenabaj, o dicho de otro modo, ¿acaso los grandes héroes culturales de Buenabaj, el señor ajaw Izkin Nijaib’ y el mismo Diego Vicente, no encarnan bien los valores atribuidos a San Vicente? Los santos patronos del pueblo de Momostenango son Santiago y Santa Isabel, esta última, patrona de San Vicente Buenabaj52. El relato que narra la fundación de San Vicente Buenabaj, como casi todos los relatos mayas de su tipo, sigue la misma secuencia de la tradición, lo primero que resalta es que se trata de la fundación de un pueblo grande (los relatos de fundación de aldeas y en general de comunidades menores siguen un patrón diferente, pues los toponímicos que los identifican se concentran en los toponímicos del paisaje y raramente hace alusión a divinidades y santos patronos); lo segundo es la gran antigüedad del relato de fundación pues entronca directamente con el siglo XVI y aparece ligado a la historia de la fundación de Momostenango. El relato en cuestión dice lo siguiente: “Cuando Diego Vicente tuvo problemas con los dirigentes de Pamumus [Momostenango], él se vino y trajo consigo dos imágenes: Santiago Apóstol y Santa Isabel de Hungría, que era de la hermana de Diego Vicente. w E Pero la imagen de Santiago se les desaparecía aquí, entonces, en ese tiempo averiguaron que la puerta de la casa de Santiago tenía que tener vista al poniente (donde cae el sol); solo así estuvo Santiago contento y la imagen aceptó quedarse y así estuvo un tiempo. 53 San Vicente Buenabaj Entonces pasó que los cofrades de Pamumus celebraron un acuerdo, dijeron que las imágenes eran para todo el pueblo de Momostenango y a donde hubiera fiesta ellos podían llevarlas. Así estuvo mucho tiempo, la imagen salía de Buenabaj pero entonces pasó que un día ya no la fueron a traer, así también se llevaron a Santa Isabel de Hungría de la iglesia de San Vicente. Francisco Izkin, Diego Vicente y su hermana Isabel tenían antiguamente nombres propios en el idioma k’iche’, sus nombres originales eran Izkin Nijaib’ Wuqub’ K’ixo Tzukum e Ixmukane. Tekum también fue llamado tzukum, persona escogida, buscada, madura, de experiencia, (tzukum significa buscar). A Diego Vicente también se le llamaba tzukum, persona buscada, escogida”53. Todos ellos pertenecían a la cuarta casa de los k’iche’, la de los Anejaib’. Esta casa fue tomada en cuenta por los hijos de Tekun54 y por los españoles. Santa Isabel es la santa patrona de Buenabaj, es la misma Santa Isabel patrona del barrio Santa Isabel de Momostenango; era en este barrio del centro donde estaba la casa grande a la que pertenecían los de San Vicente Buenabaj. Hasta no hace mucho, tanto las autoridades de San Vicente Buenabaj, como los cofrades, los alcaldes y los alguaciles daban su servicio comunitario allá en la capilla del barrio Santa Isabel de Momostenango. “A Santa Isabel se le pide por la vida de todos sus hijos e hijas, hay libertad, ella lo puede todo, intercede por el pueblo.”55 Santa Isabel es celebrada ahora el 18 de noviembre (aniversario oficial de su nacimiento fechado en 1207) pero en el siglo XVI, parece que ella era celebrada para la fiesta de Pentecostés, que entre los mayas se adoptó porque conmemoraba la cuarentena o los dos periodos de veinte días después de la Semana Santa, para celebrar el elote tierno. No muy lejos de Buenabaj se encuentra la comunidad de Pueblo Viejo Momostenango, donde tuvo su asiento la antigua Chuwa Tz’aq. En este lugar, hay también una historia parecida, un relato de fundación que relaciona igualmente a la comunidad con el patrón Santiago y la fundación de Momostenango; esta thistoria es hoy rememorada como “la historia de Chuwa Tz’aq”: w R 54 En tiempos antiguos, nuestras madres, nuestros padres, desearon que se Momostenango tuviera su centro en Chwa Tz’aq. Se cuenta que Sebastián Herrera paseaba por este lugar cuando, de pronto, encontró una imagen, la vio entre un árbol, entre unos montes; llevó la imagen a Chwa Tz’aq y le construyó una casita, avisándole a todas las personas San Vicente Buenabaj de ese lugar. Pero al patrón Santiago (tal era el nombre del santo aparecido), no le gustó, no gustaba de permanecer en ese lugar, huía; entonces salían a buscarlo y no le encontraban, y cuando al fin le hallaban, era siempre en los riscos que se aparecía (el lugar donde está el poblado cabecera actualmente), iban los Herrera a traerlo y él no quería, y aunque regresaba con ellos se marchaba de nuevo. Varias veces lo intentaron pero terminaba por irse. Los Herrera entraron en conflicto con los que vivían alrededor de los riscos; les decían esto a los Herrera: “con nosotros debe quedarse y es de nosotros, aquí vamos a fundar el pueblo”. “Aquel lugar no es nuestro pueblo”, le decían aquí al patrón Santiago. Prosiguió el conflicto, allá en los riscos le construyeron una casita al patrón Santiago, pero él tampoco permanecía nunca en ella, escapaba, pero poco a poco fue aceptando y entonces el patrón Santiago se quedó allá donde hoy aún está. “Cuento esto porque es la historia del patrón Santiago y porque este lugar se quedó con el nombre de Antiguo Pueblo, Pueblo Viejo, “Sobre la Muralla”56. Este pueblo ha cambiado mucho, pero a sus fiestas siempre han llegado “los gracejos” a bailar, así como muchos vendedores, porque cada año el patrón Santiago viene a visitarnos durante la fiesta”57 “En este lugar trajeron a Santiago, fue llevado a Chwa Tz’aq pero desaparecía, la imagen se apartaba; se preguntaron porque no le convenía, hasta que hallaron donde construir la iglesia. Un terremoto la destruyó. Luego construyeron otra, descendientes blancos, junto con Diego Vicente, construyeron la iglesia.” En la tradición oral de Buenabaj, los relatos de fundación del pueblo de Momostenango están ligados a dos hechos históricos muy importantes, la fundación del pueblo de Momostenango en Chuwa Tz’aq, alrededor de 1554, y después el traslado del centro del pueblo de Chuwa Tz’aq a su centro actual en los riscos, alrededor de 1587. Al señor Izkin Nijaib’ el manuscrito de Buenabaj II lo llama varias veces “el fundador de su pueblo”, significa que él realizó la labor de convencer a las familias de hacer un pacto para fundar el pueblo de Mumustenango o Pamumus58, que es el nombre nahuált de Chuwa Tz’aq (sobre las murallas); por ello el nuevo pueblo retuvo las fronteras y distritos de la antigua Palotz Utz’aqib’ala prehispánica cuyo centro fue Chuwa Tz’aq. w T El relato relaciona la fundación con Diego Vicente, pero se está refiriendo al traslado del pueblo, lo que seguramente necesitó un nuevo pacto. El santo es por tradición un fundador de pueblos, su misión es congregar, por ello su imagen desaparece y reaparece en diferentes lugares y adoptar una deidad patrona o santo patrón es un asunto de identidad; y cuando el relato dice que Diego Vicente regresó con las imágenes consigo, está usando una antigua 55 San Vicente Buenabaj metáfora que tiene el significado de victoria, pues llevarse una imagen de la divinidad a su ciudad era, en la Época Prehispánica, llevarse un trofeo Es muy simbólico que las imágenes pertenezcan a todo el pueblo y por tanto haya que llevarlas (procesionalmente) a las comunidades el día de su fiesta. Esta tradición de visitas recíprocas entre los santos(as) aún suelen hacerse, no solo entre pueblos sino entre aldeas o entre barrios, un ritual muy común cuyo fin es reforzar las relaciones históricas entre pueblos vecinos que invocan ancestros comunes o una misma comunidad de origen. En un momento en que la ubicación de la iglesia es lo determinante para escoger el lugar de fundación del pueblo, el santo patrón juega un papel importantísimo, por ello va y viene juntando a la gente, congrega y crea vínculos. Más compleja es la referencia en este relato a que la casa que quiere el santo patrón sea una casa con la puerta vista al sol, pues esto recuerda a ciertas plazas prehispánicas con pirámides orientadas hacia el sol. Finalmente, cuando la imagen decide quedarse definitivamente en un lugar esto tiene el significado de que se ha establecido un nuevo centro para todos (nik’aj tinamit), tal vez no para siempre, sino hasta que la imagen lo quiera. La gran metáfora que cohesiona el imaginario de este proceso de fundación de pueblos es la de la siembra: “[cuando] se sembró el pueblo (tinamit), nosotros (chitinamit), estábamos allí, todos los amaq” (Memorial de Sololá (Maxwell y Hill, 2006:294); entonces un amaq era un conjunto de chinamit o grupos familiares que, al unirse o llegar al acuerdo de federarse, llegaban a tener una plaza común en la ciudad (tinamit). El termino sembrar (tik) tiene aquí el significado de iniciar algo con gran acuerdo y aplica tanto a fundar pueblos como a establecer gobierno y territorio. w Y 56 Los datos históricos dicen que la cabecera municipal de Momostenango tuvo como asiento originario el lugar hoy conocido como “Pueblo Viejo Momostenango”, antiguamente llamado Chuwa Tz’aq. Momostenango, como todos los pueblos grandes, hizo su proceso de fundación a mediados del siglo XVI y estaba concluido para 1554. Fue mucho más tarde, en el ya citado año de 1587, cuando se trasladó el centro del pueblo a su sitio actual próximo a los riscos (Carmack, 1995:54; Vásquez, 1937-44:1:249; Gall, 1961-62: 234). Como todos los pueblos mayas, el nuevo Momostenango se organizó con un centro (nik’aj tinamit) a partir de cuatro barrios: Santa Isabel, Santa Ana, Patzite (Patz’ite’: lugar del palo de pito) y Santa Catarina. Actualmente, los buenabajenses reconocen tener familiares en el barrio de Santa Isabel y recuerdan con cariño su casa grande del barrio de Santa Isabel. San Vicente Buenabaj LOS CUATRO BARRIOS DE MOMOSTENANGO ta San Ana Patzite’ Santa Isabel Santa Catarina MAPA DEL MUNICIPIO DE MOMOSTENANGO w U Mapa 7. Buenabaj fue parte fundadora del barrio de Santa Isabel, en el centro de Momostenango. Mapascon base en: Garret Cook, 2000, Pág. 5 57 San Vicente Buenabaj Mapa 8. Centro de San Vicente Buenabaj w I 58 Foto 16. Centro de Buenabaj San Vicente Buenabaj XI. Don Diego Vicente y las tierras de Buenabaj D iego Vicente era tal vez aún muy niño cuando sucedió el traslado del centro del pueblo de Momostenango en 1587. En realidad, no se conoce la fecha de su nacimiento, tampoco se conoce el nombre de su padre, lo que se sabe con certeza es que era nieto del señor Izkin Nijaib’, como lo afirman sus descendientes y otras fuentes59. Por lo demás, el nombre de Diego Vicente está registrado en muchos documentos de la época, preservados en diversos archivos, que dan fe de sus ejecutorias. Como miembro del patrilinaje que el señor Izkin Nijaib’ estableció en Palotz y donde se amplio su descendencia, Diego Vicente nació en esta región un poco antes del 1600, por lo que habrá vivido sus primeros años en el alto valle del Uk’uleb’al Tena, ya habitado para entonces, o bien en el valle de Paxchum que es la otra zona histórica de Buenabaj. Su carrera política la hizo en el centro de Momostenango donde fue el más importante principal durante gran parte del 1600 hasta su muerte alrededor de 1675 (Carmack, 1995:102). Un retrato de Diego Vicente se conserva en Buenabaj, el cual habrá sido mandado a hacer por sus descendientes a finales del siglo XVII. Este lienzo muestra a Diego Vicente, vestido con un traje de cofrade y principal, un pañuelo español al cuello y en el hombro derecho una arganilla o bolso de viaje de tela. El fondo de la pintura muestra el poblado y la alta montaña (foto 18). Sobre los hijos de Diego Vicente, los cuales fueron Pedro, Diego, Melchor y Juan, se sabe que figuraron entre los personajes más notables de su tiempo. Por una noticia que se tiene de don Juan, que reclamaba sus derechos hereditarios en 1675, se presume que Diego Vicente pudo haber muerto durante este año. Don Juan, que fue dos veces alcalde de Momostenango y mayordomo de la iglesia, es citado en diversos documentos de 1675 y 1684 a través de los cuales se le reconocen derechos60. En cuanto a sus nietos, ellos fueron Mateo, Pedro y Miguel. Este último fue mayordomo de la iglesia de Momostenango a la cual ayudó en sus obras y le hizo en 1689 importantes donaciones de objetos de plata61. w O En 1704, un tataranieto suyo, Francisco Diego, fue quien transcribió el título Nijab’ como así lo hizo constar en el manuscrito I en poder de Buenabaj: “y se dio fin a este traslado… Yo soy Francisco Vicente descendiente y nieto de don Francisco Izkin Nijaib’. Francisco Vicente hijo de Mateo Vicente” (Álvarez Arévalo, 1987:37). La primera noticia que tenemos de Diego Vicente es del 25 de mayo de 1621 cuando fue autorizado, por disposición de Felipe IV y al Real Audiencia 59 San Vicente Buenabaj de Guatemala, a tener sus propios hierros para marcar ganado (Manuscrito de Buenabaj–en adelante abreviado MB, Leg. 1, folio 38v)62. Para entonces, él poseía estancias de ganado, ovejas y montaba caballo, y no era obligado a hacer trabajos públicos (tequío) gratuitos o semigratuitos, que el colonialismo imponía a toda la gente. En 1627, Diego Vicente fue citado como testigo en una compra de tierras a favor de Gaspar de los Reyes uno de los propietarios españoles más grandes venidos al área (AGCA A1 5939-51960, en Carmack, 1995:104, 453 nota 6). En 1630 Diego Vicente y Juan Pérez Ajtun fueron amonestados por un juzgado de San Antonio Suchitepéquez, condenados al pago de una multa y la suspensión del puesto de alcalde por cuatro años a este último, por haber ahuyentado el ganado de su vecina Sebastiana de Anis Vda. de Mazariegos y golpeado a su hijo (MB1,folios 25-27). Diego Vicente fue un principal que llegó a ser alcalde dos veces. En 1637, fue portavoz de los Vicente en las disputas por tierras contra los Mejía de San Cristóbal y ante disputas contra San Francisco en 1642, ambas resueltas pacíficamente (Carmack, 1995:101). En 1542, Diego Vicente y Baltasar López solicitaron al gobierno que prohíbiera una costumbre que afectaba a los Vicente que consistía en matar ganado y pagar a la gente con esa carne. También pidieron que se prohíbieran los corrales falsos. Ambas peticiones les fueron concedidas (MB1, folio 39). El 10 de agosto de 1645, Diego Vicente afirmó tener dos estancias con crianza de mulas y ganado mayor y que con ellas sostenía a su familia, ayudaba a la iglesia y al pueblo. Asimismo, informó haber ayudado a la construcción del templo y de dotarlo de ornamentos, entre ellos un cáliz de plata que aún se conserva en la iglesia de Momostenango (MB1, folio 35; Carmack, 1995:103). Para esta fecha de 1645, Diego Vicente estaba autorizado para vestir de paño español y montar a caballo con silla y freno y daba fe de pagar sus tributos. Se le amparó en un real despacho para librarlo de los tequíos y trabajos personales63. e P 60 Los Vicente tenían tierras en varias zonas de Momostenango, en Pasanyep (Tierra Colorada), Xequemeya, Tambor Abaj, Pacorral Abaj y Paxchun; tenían además propiedades en la costa sur (Carmack, 1967:10). Sobre sus tierras de Pa Corral Abaj, en un documento del 2 de octubre de 1664, cuando Diego Vicente tenía 66 años, pidió al gobierno general colonial de Santiago de Guatemala la medida de las tierras vecinas a su rancho y majada ubicado en Paja’caja’, por sobre nombre “Corral de Piedra”. Los testigos (españoles) San Vicente Buenabaj reconocieron que las tierras pretendidas por Diego Vicente eran dos caballerías de tierras que limitaban con las tierras de Gaspar de los Reyes, Pajacaja’ (Panicaja’) y el cerro Tena, las cuales habían sido denunciadas como baldías y realengas (disponibles), por los españoles aunque Diego Vicente ya las poseía y ocupaba con ganado ovejuno64, como reconocieron los testigos. El anterior es un documento no concluyente, pero la tradición oral de Buenabaj guarda la memoria de las varias “adquisiciones” y “composiciones” de tierras hechas por Diego Vicente y sus descendientes, quienes en realidad realizaron pagos forzados por el colonialismo español para no perder su propiedad sobre las tierras, pretendidas por los españoles quienes las denunciaban como “excesos”, “sobrantes”, “baldías” y “realengas” (propiedad del rey de españa)65. Efectivamente, según se tiene noticia por documentos en poder de la comunidad, los Vicente pagaron cuatros veces por “compras” de tierras, la primera compra fue de 1629, la segunda compra, fue de 1633, la tercera compra, fue de 1644 y la cuarta compra, fue de 1654. Durante el colonialismo estos territorios fueron registrados con diversos nombres, como “k’ab’owilchaj” (semilla de pino), kob’alchaj (pino agujereado) y Chuvilchaj (Alvarez 1987:11, 13; Reyes: 1999:57). “Diego Vicente, como fundador de Momostenango, comenzó a escriturar estas tierras, las propias y las de Momostenango, allá en Sevilla, España. Fue una ventaja tener títulos para Momostenango porque muchas comunidades no los tienen. Pero muchas personas se preguntaban por qué Diego Vicente escrituraba sus tierras y un grupo de los inmigrantes europeos estuvo en su contra. Esa fue la causa por la cual él vino a ocupar sus tierras, así llegó a Corral Ab’aj primeramente, y por las luchas de Diego Vicente sus hijos se ubicaron en Xebuenab’aj o Paxchun, que hoy en día es Santa Lucía Buenabaj”66. Entre los títulos de las tierras, en posesión de los Vicente de San Vicente Buenabaj, se halla un expediente denominado la “Certificación” que contiene documentos de 1705, 1801 y 1874. El orden de los mojones que sigue este título corresponde a una remedida de tierras que tuvo lugar en noviembre de 1705, remedida que fue pedida por los españoles que pretendían las tierras llamadas “Covalchaj” o “Chuvilchaj”, las que habían denunciado como tierras baldías. e q Estas tierras de “Chuvilchaj” eran las comprendidas entre los mojones 1. Lucbacon; 2. Chui Sija (lo alto del cerro Sija); 3. Chui Tena (lo alto del monte Tena); 4. Cerro nombrado o rucubaltrit; 5. Rucubalant (mojon con 61 San Vicente Buenabaj Juan de León y Cardona); 6. San José (límite con los Mejía de San Cristóbal Totonicapán), y nuevamente cerrando en Lucbacon. Finalmente estas tierras fueron sometidas a remate el 11 de mayo de 1710, remate que ganaron los Vicente, habiendo pagado por ellas 449 tostones, 3 reales y 24 maravedies. La posesión les fue adjudicada hasta el 14 de julio de 1717, por un total 30 cabellerias y media, dos cuerdas y 24 varas. Para adquirir estas tierras de Chuib’ilchaj, los Vicente tuvieron que vender sus tierras al norte de Xequemeyá (Carmack, 1995:110-112; Reyes, 1998:59). El mapa 16 muestra un plano de las tierras de Covalchaj o Chivilchaj, que contiene la “Certificación” en su página 84, de fecha 19 diciembre de 1835. Sin embargo, este mapa está incompleto, no incorpora la compra hecha a Ana María de Mazariegos en 1654, tal como consta en el documento del Archivo General de Centroamérica, AGCA, AI legajo 4943,expediente 52013) y cuyos límites son los siguientes Punto No.1. Lukubalcon. [luk’ b’alkon] [luk: doblar, arrancar; balcón: poste]. Este punto es el primer mojon nombrado por La Certificación (1705), el límite es descrito como ‘una cruz que marca la colindancia con los Mejía de San Cristobal Totonicapán”, el mojón se halla sobre una cuchilla de tierra, curva, ubicada sobre una cumbre. Punto No. 2. Chuisija’: [chuwi tzi’ja’] “sobre el cerro Sija”, es una cumbre sobre lo alto del cerro Sija (Tzi’ja’), una piedra grande rayada con una cruz marca el mojón. Foto 48. La Certificación (1705), lo describe como el mojón con Ines herrera Maldonado y que antes lo fue de Gaspar de los Reyes y, al sur, con las tierras de María de Aparicio Punto No.3. Montón de Piedra. [jumul ab’aj] Es el límite entre San Vicente Buenabaj con los Maldonado de Chivarreto (San Francisco El Alto). El cementerio de “Cuesta del aire”, próximo al lugar, atestiguaría el límite por parte de Chivarreto. Punto No.4. Xe Tena. Bajo el cerro Tena. Punto No.5. Chuimumus. Cerro. 2,700 m SNM, latitud 15º01’20”, longitud 91º27’13”. Punto No.6. Cruz de piedra. [kajb’al ab’aj]. Límite con Chuimumus. e w 62 Punto No.7. Rukiab’al Ut [ruk’iab’al ut]. “Donde llegan a beber agua las palomas”. [ru: posesivo 3ra. Sing.; Kiab’al: mirador; ut: paloma torcaz]. Hay allí una cruz verde de madera que marca la colindancia con los Yoc k’ancheb’ex de Chihuitan. San Vicente Buenabaj Punto No.8. Chihuitán. [chuwi wita’n]. “Sobre huitán”. Piedra grande en una cumbre que marca la colindancia con los Mejía de San José Chicalquix. Punto No.9. K’ob’anchaj. [Pino picado]. [k’ob’an: picar, agujerear; chaj: pino]. Colindancia con los Mejía de San José Chicalquix. Punto No.13. Lukubalcon y retorno al punto de Chuwisija’, siguiendo el curso del río Samalá, tal como lo muestra el mapa hecho por el ingeniero Raúl Aguilar Batres (plano de la finca Covalchaj) elaborado en julio de 1945 ante un juzgado. Ver mapa 17. La compra de tierras de 1654 y sus límites: Punto No.1. Chui Tena. [chuwi Tena] “Sobre el Cerro Tena”, en lo alto del cerro Tena donde está una cruz sobre una base de piedras sueltas. La Certificaciòn (1705) dice que allí llega el límite de las tierras de Ana María de Mazariegos. Punto No.2. “cerro Nombrado”. Es el límite con la parcialidad López, la aldea Nik’aj’a –Tunayac (Momostenango). La “Certificación” (1705) llama a este cerro “Rucubaltrit”. Punto No.3. Cho’ Xac. [cho xaq]. “Enfrente del cerro de roca” [Cho’: enfrente; Xaq: roca, talpetate]. Punto No.4. Cruz de madera. [kajb’al che’]. Límite de esquina con las comunidades de Santiago Momostenango y Tierra Blanca; Calel [llamado en documentos antiguos como Chuitzik’iche’] y los Pérez de San Francisco El Alto. Hasta 1982, existió aquí un cementerio. Punto No.5 Chui Mumus. Cerro. e e Los mojones del territorio de San Vicente Buenabaj se demarcaron siguiendo los puntos sobresalientes de su geografía, la mayoría picos montañosos y cumbres, y los mismos son señalizados por símbolos mayas tradicionales como cruces, altares o lugares sagrados67 y grandes piedras. En general estos mojones se corresponden con las coordenadas que aparecen identificadas en la Iniciativa de Ley 2961 que obra en el Congreso de la República desde el 11 de noviembre de 2008, actualmente en la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, para su estudio y dictamen correspondiente esperando porque el pleno del Congreso de la República reconozca a San Vicente Buenabaj como un municipio de la República. 63 San Vicente Buenabaj Foto 17. Diego Vicente. Pintura de principios del siglo XVIII, en San Vicente Buenabaj. Postal impresa en Eichemnberger en 1972. e r 64 Foto 18. Busto de Diego Vicente por el escultor chalchiteco Geovany Vicente, 2016. Foto 19. Bandera de San Vicente Buenabaj. San Vicente Buenabaj Foto 20. Foto19. El centro de Buenabaj. Iglesia y la centenaria escuela que lleva el nombre de “Diego Vicente” Marcadores limítrofes o mojones de San Vicente Buenabaj Foto 22. Punto No.3. XeTena. “Debajo del cerro Tena”. Altura: 2 910 m. Foto 23. Punto No.5. En primer plano el Altar de Diego Vicente. Mojón sobre el cerro Tena. Altura: 3 200 m. Foto 24. Punto 9. Tres Cruces. Altura: 3061 m. e t Foto 21. Punto No. 1. Chuisija’ “Sobre el cerro Sija’”. Altura: 3000 m. 65 San Vicente Buenabaj Foto 25. Cruz de Madera o Cruz Piedra Altura: 3 083 m. Foto 26. Punto No.10. Chihuitán o Piedra Cruz Chaj. Altura: 2 914 m Foto 28. Punto No.12.Lukbalcon. Foto 27. Punto No.11. K’ob’anchaj. “Pino picado” o “Pino agujereado”. Altura: 2 949 m. e y 66 Foto 29. Piedra enterrada. Altura: 3106 m. Foto 30. Cementerio general de San Vicente Buenabaj enclavado en el centro de Recuerdo a Barrios (San Carlos Sija). San Vicente Buenabaj e u Mapa 9. La “Certificación”. Mojones de Buenabaj del 19 diciembre de 1835. Transcripción: “Mapa de los mojones de Buenabaj, levantado el 19 diciembre de 1835. “De orden general del señor presidente extiendo la presente que signo y firmo en Guatemala a 30 de mayo de 1874 para entregarla a la parcialidad interesada a quienes devolveré los títulos y documentos con quienes concuerda la presente. (f) Fco. Gonzales Campo.” 67 San Vicente Buenabaj e i 68 Mapa 10. Plano de Covalchaj (kob’alchaj): Firmado por el Ing. Raúl Aguilar Batres . Guatemala, julio 1945, tal como se conserva en la alcaldía de San Vicente Buenabaj. En Alvarez Areválo, 1987:8 San Vicente Buenabaj XII. El departamento de Totonicapán y la jurisdicción territorial de Buenabaj P or su pasado prehispánico, colonial y del periodo repúblicano, Buenabaj se ha constituido como una región sobre la base de sus vínculos y alianzas que han sido más intensas con Momostenango y Totonicapán. Otra razón es que Buenabaj ha sido zona de frontera sobre la cual han pasado las demarcaciones aldeanas, municipales, provinciales, departamentales e incluso lingüísticas y étnicas. Por ello Buenabaj ha jugado un papel clave en la historia moderna del departamento de Totonicapán, sobre todo si se considera que en los últimos dos siglos este departamento ha perdido jurisdicción sobre extensos territorios. Cuando en 1825 la primera constitución reorganizó administrativamente el naciente Estado de Guatemala, Totonicapán fue uno de los siete departamentos creados y alcanzó a conservar sus antiguas fronteras prehispánicas, que luego mantuvo como Corregimiento y como Alcaldía mayor (ver mapa 11). Totonicapán perdió la jurisdicción del distrito de Huehuetenango tras la larga guerra civil de quince años terminada en 1839, sobre todo a raíz de la derrota del Estado de Los Altos, del que Totonicapán fue parte activa; de nueva cuenta en 1872 se tomaron porciones de Sololá y Totonicapán para formar el nuevo departamento de El Quiché. Del lado de Buenabaj, el mapa del municipio de Momostenango y del departamento de Totonicapán también perdió territorio en 1871 por la práctica de Barrios, seguida por Ubico, de suprimir o trasladar aldeas y municipios de jurisdicción, modificaba los departamentos. En 1871, Barrios estableció su principal base militar regional al sur de Buenabaj y fijó en Sija su batallón de soldados, llamados milicianos, los cuales pasaron a controlar y ocupar militarmente el área (Carmack, 1995:137-146, 364) con el resultado de que la violencia se generalizó en el área y decenas de personas fueron desplazadas y sus casas incendiadas. Lo que sucedió fue que Justo Rufino Barrios confiscó tierras a Buenabaj en el área de Santa Lucía y las entregó a Sija68, les expropió tierras que llegaron a sumar 84 caballerías, 46 manzanas, 364 varas y 7 centésimos, sobre la planicie entre los linderos de Chivarreto San José Chicalquix y Huitán69. e o Ya para el año de 1600, en Sija, se había congregado una población que vivía dispersa y sin iglesia. No había poblado pero las tierras venían siendo reclamadas como baldías y compradas, tanto por individuos de Sija como de Buenabaj (Carmack, 1995:148). Finalmente, una villa fue fundada el 18 de diciembre de 177870 (el colonialismo hacía la distinción entre villas de 69 San Vicente Buenabaj españoles y pueblos de indios). La villa pertenecía entonces a la jurisdicción de Totonicapán, así lo confirman varias disposiciones de 179771, 188072 182573, 183674, 1879 y 188075; sin embargo, algunos documentos son ambiguos, la razón posible es que alrededor de 1900, el gobierno para implementar sus medidas solía agrupar municipios temporalmente pero sin afectar su jurisdicción (Gall, TIII, 1982:250, Carmack, 1995:170). Oficialmente, Sija fue separado de Totonicapán para formar parte del departamento de Quetzaltenango, a partir de un acuerdo gubernativo del 26 agosto de 189276, esta vez en forma definitiva77. En este mismo periodo la aldea Calel fue anexada a San Carlos Sija, se segregó a San Francisco El Alto por acuerdo gubernativo del 27 julio 1886, luego por breve tiempo retornó a San Francisco pero fue reanexada a Sija el 15 febrero 1920 a solicitud de la municipalidad de Sija. Barrios intento hacer lo mismo con Buenabaj, pero tan pronto como el 2 de junio de 1886 dio marcha atrás reanexandola a Momostenango definitivamente. Poco después de que San Bartolo obtuviera su autonomía municipal en 1951 los vecinos de Chiquival, Tierra Blanca y Tzanjón intentaron aliarse para formar también un municipio78; pero este proyecto no prosperó y Chiquival fue anexado a San Carlos Sija. Las dictaduras liberales solían hacer este tipo de cambios y con criterios étnicos, privilegiaban a los ladinos, con ello eludían el reconocimiento de comunidades así como evitaban el reconocimiento de autoridades propias a los pueblos. Para 1871 Guatemala tenía 17 departamentos y su número aumentó a 22 para 1877. Estos movimientos de jurisdicción fueron parte de la tradición intervencionista en municipios, aldeas y departamentos y cuando la resistencia era fuerte no era extraño que dieran marcha atrás. Este intervencionismo terminó en 1944 en Guatemala, cuando se estableció la garantía de la autonomía municipal. En contraste, el subsiguiente régimen revolucionario de 1944 de Arévalo y reafirmado por Arbenz no llegó a suprimir ningún municipio ni aldea, al contrario, les reconoció a todos la autonomía municipal. e p 70 En lo que se refiere a la actual división política administrativa de Guatemala ésta quedó instaurada desde 1935. La Constitución de 1945 la confirmó y desde entonces también sus límites han sido intocables. La Constitución de 1985 vigente dispone que solo el Congreso pueda hacer modificaciones en el país, estableciendo para ello un régimen de regiones, departamentos y municipios, o cualquier otro sistema, sin menoscabo de la autonomía municipal (Artículo 224 constitucional. División administrativa). San Vicente Buenabaj XIII. El gobierno comunitario de Buenabaj L a Alcaldía comunitaria tiene jurisdicción que se extiende sobre todo Buenabaj. Por tradición política, tiene entre otras funciones, coordinar y mantener acciones articuladas con las 14 comunidades, en el marco de los usos, normas, y tradiciones de Buenabaj y las competencias reconocidas por el Código Municipal79. La autoridad en la Alcaldía de Buenabaj está a cargo de un cuerpo de personas que se desempeñan a título de servicio comunitario; en total forman un cuerpo de unas 54 personas. Ver el organigrama en Reyes, 1998:70. Las autoridades se eligen mediante una asamblea comunal (o cabildo abierto) donde participan hombres y mujeres. Igualmente, cada una de las comunidades elige a sus respectivas autoridades mediante asambleas. El alcalde y su corporación se eligen para un período de servicio comunitario de un año. e Q Fuente: Reyes, 1998:70 71 San Vicente Buenabaj Foto 31. Asamblea de elección de autoridades comunitarias, 9 de septiembre de 2014, día Wuqub’ kej (7 venado) en el calendario maya. e W 72 Foto 32. Asamblea comunitaria de elección de autoridades, 9 de septiembre de 2014. San Vicente Buenabaj Foto 33. Alcaldía comunitaria de San Vicente Buenabaj, al centro Daniel E. Vicente, alcalde, 2013 e E Foto 34. Corporación 2014 de San Vicente Buenabaj. Al centro, Pedro Chun Vicente, alcalde 2014 y 64 autoridades comunitarias en servicio. 73 San Vicente Buenabaj Foto 35. Alcaldía comunitaria de San Vicente Buenabaj, Corporación 2015. Al extremo derecho, Herlinda Vicente Vicente, Alwasil, Santos Ixmay Vicente, alcalde, enero-abril 2015, Rolando Enecón Vicente, mayo-enero 2016. e R 74 Foto 36. Corporación 2016 de San Vicente Buenabaj, al centro Bonifacio Pelicó Vicente, y 64 autoridades comunitarias en servicio. San Vicente Buenabaj Foto 37. Santos Vicente Pérez, presidente del Comité de Ancianos de Buenabaj. e T 75 San Vicente Buenabaj Alcaldes de San Vicente Buenabaj e Y 76 1960 1961 1962 1963 1964 1965 1966 1967 1968 1969 1970 1971 1972 1973 1974 1975 1976 1977 1978 1979 1980 1981 1982 1983 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 Félix Sontay Andrés Vicente Tiburcio Ixmay Vicente Camilo Pérez Cecilio Vicente Elías Camilo Vicente Tzún Francisco Vicente S. Basilio Sontay Vicente José Toribio Vicente Juan Pablo Vicente Vel. Rafael Vicente Sontay Alberto Vicente Tzún Cirilo Sontay Vicente Juan Sontay Vicente Esteban Chanchavac Francisco Sontay Juan Faustino Pelicó Silverio Poroj Vicente Martín Vicente Sontay Santos Vicente Sontay Margarito Vicente Guox Alejandro Poroj Eusebio Vicente Poroj Ernesto Victor Calel Santos Timoteo Vicente Ajtún Teodoro Vicente Coz Estanislao Vicente Lajpop Isidro Martínez Herminio Vicente Calel Santos Tranquilino Sontay Valerio Francisco Sontay Vas. 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 Martin Sontay Vicente Santos Pérez Vicente Federico Vicente Pelicó Eleuterio Vicente Vicente Ejidió Pelicó Guox Alberto Vicente Pérez Pablo Tzún Vicente Prof. Olivio Ixmay Vicente Juan Vicente Vicente Adrián Pelicó Az Florencio Lázaro Sontay Vicente Patrocinio Vicente Xiloj Prof. Roberto Ixmay Vicente Prof. Alejandro Chún Vicente Federico Chun Vicente Prof. Esteban Velásquez Vicente Prof. Israel Chávez PC. Antonio Rafael Pérez Vicente Bach. Francisco Vicente Vicente Félix Arturo Vicente López Santiago Vicente Vicente Olivio Poroj Vicente Prof. Daniel Esteban Vicente Vicente Prof. Pedro Eliseo Chún Vicente Rolando Enecón Vicente Bonifacio Pelicó Vicente San Vicente Buenabaj XIV. Buenabaj y sus 14 comunidades E l centro urbano de San Vicente Buenabaj está a una altura de 2900 mt snm [Lat. 15°01’47.3”, Long. 91°34’56.3”]. Visto desde una imagen satelital, como se le ve en los mapas 1 y 2, sobresale por hallarse al centro del territorio, las altas montañas están hacia el norte y las extensas planicies enclinadas al sur, hasta el rio Samalá, después el valle desciende abruptamente hacia las planicies de Olintepeque, Quetzaltenango y Palajunoj, hasta el volcán Santa María (Ixkanul). Buenanbaj se divide territorialmente en 14 comunidades, como consta en el Diccionario Geográfico de Guatemala, elaborado a principios de la década del sesenta por un equipo dirigido por Francis Gall, de la Autoridad Nacional de Nombres Geográficos, después Instituto Geográfico Nacional. El Acuerdo Gubernativo del 6 de abril de 1961 dio carácter oficial a los nombres geográficos que aparecen en el referido diccionario, y lo declara la fuente autorizada por la que deben guiarse todos los actos y servicios que presta el Estado guatemalteco. 1. Agua Tibia: Altura: 2980 m SNM. 2. Buena Vista 3. Centro Norte 4. Centro Sur 5. Centro San Vicente Buenabaj 6. Chihuitán: “En Huitán”. 7. Chipuerta: “En la entrada”.Antiguamente se llamó “a xotaja”. 8. Pacoj: “En la quebrada”. Altura: 2900 mt SNM. 9. Paloma: Pa loma. “En la loma”. 10. Pasac. Pa Saq. “En la planicie o llanura”. Altura: 2790 mt SNM 11. Santa Lucía: Asiento original del centro de Buenabaj y sede del juzgado hasta fines del siglo XIX. e U 12. San Antonio Buenabaj. Sobre la planicie conocida como Paxchun. Registrada como caserío de San Vicente Buenabaj en el Censo Nacional de 1973 y en el Diccionario Geográfico Nacional (Gall, Tomo III, Pág. 214). 13. Xemuj: “Bajo la sombra”. 14. Xetena: “Bajo el monte Tena”. También se le llamaba Chi Q’ayes “en la montaña”. Altura: 3 000 m SNM. 77 San Vicente Buenabaj Mapa 11. División política administrativa de San Vicente Buenabaj. DIVISIÓN POLÍTICA: 14 Caseríos: ³ Centro ³ Centro Norte ³ Centro Sur ³ Pasac ³ Xetená ³ Chipuertá ³ Agua Tibia ³ Paloma ³ Xemuj ³ Chuhuitán ³ Buena Vista ³ Santa Lucia ³ Pacoj ³ San Antonio e I 78 San Vicente Buenabaj Calendario de fiestas patronales y danzas de San Vicente Buenabaj San Vicente Buenabaj 18 noviembre San Antonio Buenabaj 15 septiembre Pasac 10 mayo Centro Norte Semana Santa Chipuertá 24 diciembre Xetená 15 enero Santa Lucía Buenabaj 24 enero Foto 38. Danza del convite Foto 39. Danza de monos (K’oy) e O Foto 40. Danza de tigres (b’alam) 79 San Vicente Buenabaj Mapa 12. Las comunidades de Buenabaj. Mapa a escala 1:50,000 / 2014 r P 80 San Vicente Buenabaj Mapa 13. Mapa de San Vicente Buenabaj con base en los limites geo posicionados de la Iniciativa de ley 3961, del 11 novbre. 2008. Google Tierra 2014 r q 81 San Vicente Buenabaj Foto 41. Agua Tibia Foto 42. Buena Vista Foto 43. Centro Norte r w 82 San Vicente Buenabaj Foto 44. Centro Sur Foto 45. Centro San Vicente Foto 46. Chi Huitán r e 83 San Vicente Buenabaj Foto 47. Chi Puerta Foto 48. Pacoj Foto 49. Paloma r r 84 San Vicente Buenabaj Foto 50. Pasac Foto 51. Santa Lucía Buenabaj r t Foto 52. San Antonio Buenabaj 85 San Vicente Buenabaj Foto 53. Xemuj Foto 54. Xetena r y 86 San Vicente Buenabaj Bibliografía Asselbergs, F. (2010). Los conquistadores conquistados. México: CONACYTPLUMSOC. Asselbergs, F. (2009). Lienzo de Quauhquechollan: Crónica pictográfica nahua sobre la conquista española de Guatemala. Crónicas Mesoamericanas. Tomo II. Guatemala: Universidad Mesoamericana. 163-182 Akkeren, R. (2000). Place of the Lord’s Daughter: Rab’inal, its History, its Dance-Drama. University Leiden: Center for Non-Western Studies (91). Akkeren, R. V. (2007). La visión indígena de la conquista. Guatemala: Serviprensa Centroamericana. Álvarez Arévalo, M. (1987). Manuscritos de Covalchaj. Guatemala: Serviprensa Centroamericana. Breton, A. (1999). Rabinal Achi. Un drama dinástico maya del siglo XV. Guatemala: Centro de Estudios Mexicano Centroamericanos. Cook, Garrett,W. (2000). Charter myths and status groups in Momostenango Guatemala. En Weeks (ed.). (2001). Essays in Honor of Robert Carmack. Labyrinthos. 107-123 Carmack, R. M. (1967). Análisis histórico-sociológico de un antiguo título Quiche. Antropología e Historia de Guatemala (19)1, 3-13 Carmack, R. M. (1972). Análisis histórico-sociológico de un antiguo título Quiche. Guatemala Indìgena (VII) 4, 5-21 Carmack, R. M. (1973). Quichean Civilization. The ethnohistoric, ethnographic and arqueological sources. University of California Press. Carmack, R. M. (1979). Historia social de los Quichés. Guatemala: Seminario de Integración Social. Carmack, R. M. (1995). Rebels of Highland Guatemala. Austin: University of Oklahoma Press. Carmack, R. M. y Mondloch, J. L. (2009). Título K’oyoi. En: Crónicas Mesoamericanas (II) Guatemala: Universidad Mesoamericana. 15-68 r u Carmack, R. M. (2009). Título Nijaib’ I. En: Crónicas Mesoamericanas (II) Guatemala: Universidad Mesoamericana. 97-124. Recuperado de www.umes.edu.gt/libros/CRONICAS%20II.pdf 87 San Vicente Buenabaj Carmack, S., Stewart y Thelen. (1972). La pre y proto historia de Santiago Momostenango. Guatemala Indígena 7(4) 7-21. Carmack, R., Ak’ab’al, H. (2011). La comunidad maya K’iche’ de Santiago Momostenango. Guatemala: Maya Wuj. Ciudad Ruiz, A. Iglesias, M.J. (1995). Arqueología del Occidente de Guatemala: Estado actual y perspectivas de futuro. En VIII Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 1994 Laporte, J.P. y Escobedo H. (Eds.).Guatemala: Museo Nacional de Arqueología y Etnología. Crespo, M. (1968). Sobre algunos títulos indígenas. (Tesis) Universidad de San carlos de Guatemala. Elías Gramajo, S., Pinto Díaz, D. (1997). Bosques comunales en Guatemala. Guatemala: Facultad de Agronomía, Universidad de San Carlos de Guatemala. Elías, S. (1988). Caracterización de la producción campesina de la aldea San Vicente Buenabaj, Momostenango, Totonicapán. Tesis de la Facultad de Agronomía. Guatemala: Universidad de San Carlos de Guatemala. Fox, J. (1978). Quiche conquest. Albuquerque: University of New Mexico Press. Gall. F. (1981). Diccionario geográfico de Guatemala. Guatemala: Instituto Geográfico Nacional. Gellert, G. (2000). Las migraciones como estrategias de sobrevivencia de los excluidos y sus determinantes territoriales. En Gálvez Borrel y Gellert, G. Guatemala: exclusión social y estrategias para enfrentarla. Guatemala: Guatemala: Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales. 173-343. Gobierno de Guatemala. (2006). Mapas de cobertura vegetal y uso de la tierra a escala 1:50,000. Guatemala: Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación. r i Grünberg, G. (2003). Tierras y territorios Indígenas en Guatemala. Guatemala: Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales. Flores Hernández, R. (2015). El título de la casa Ixquín-Nehaib, un documento maya de la época colonial. Diacronías (8) 14. Herrero, J. (2010). Kobalchaj: El parto difícil de una experiencia exitosa. En: Sabogal, César, Casaza Jessica (2010). En busca de casos ejemplares 88 San Vicente Buenabaj de manejo forestal sostenible en América Latina y el Caribe. Santiago de Chile: Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. 129-136. Ochoa García, C. (1998). Nuestra Geografía del Lago Atitlán. Guatemala: Cholsamaj, Ochoa García, C. (2002). Derecho consuetudinario y pluralismo jurídico. Guatemala: Cholsamaj Ochoa García, C. (2013). Alcaldías indígenas. Guatemala: Asociación de Investigación y Estudios Sociales. Popenoe De Hatch, M. (2005). «La Conquista de Tak’alik Ab’aj». XVIII Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 2004. Eds. LaPorte, Arroyo, Mejía. Guatemala: Museo Nacional de Arqueología y Etnología 992-999. Quesada Saldaña (2005). La construcción y desarrollo de la administración política territorial de Guatemala. Guatemala: Centro de Estudios Urbanos y Regionales. Recinos, A. (1957). Crónicas Indígenas de Guatemala. Guatemala: Editorial Universitaria. Reyes, E. V. (1998). Poder local y bosques comunales en Totonicapán: estudio de un caso. San Vicente Buenabaj. Guatemala: Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales. Scaglia Martínez, M. A. (2010). Propuesta de zonificación y Futuras áreas de San Vicente Buenabaj, Momostenango. Facultad de Arquitectura. Guatemala: Universidad de San Carlos de Guatemala. Taracena, A., Pira, J. Celia M. (2002). La construcción nacional del territorio de Guatemala, 1825-1934. Revista de Historia (45) 9-33. Tedlock, D. (2003). Rabinal Achi: A Mayan Drama of War and Sacrifice. Oxford: Oxford University Press. Torquemada, J. (1986) [1615]. Monarquía Indiana (III). México: Porrúa. r o Winkler, K. Alonzo, F. (2010). Presiones territoriales e instituciones indígenas en Totonicapán y Alta Verapaz. Guatemala: Instituto de Estudios Agrarios y Rurales y Coordinadora de Cooperativas y ONGs de Guatemala. 89 r p San Vicente Buenabaj Agradecimientos A inicios de 2013 las autoridades comunitarias de Buenabaj solicitaron al autor realizar un peritaje cultural para ser presentado ante la Corte Constitucional de Guatemala. Gracias a la gran colaboración obtenida por la comunidad, se desarrolló como un documento más amplio; fue hecho como un servicio a la comunidad, no solo por el autor, sino por todas las personas que han intervenido. El autor hizo sus investigaciones de doctorado en antropología (Universidad de Connecticut, Storrs, EU) en la región de San Bartolo Aguas Calientes, un pueblo vecino de San Vicente Buenabaj. En los años noventa, fue miembro del grupo de trabajo que bajo la dirección del doctor Jesús García-Ruiz (Universidad de París VIII) realizó investigaciones en Momostenango. Entre 1991 y 2000, fue miembro del grupo de trabajo sobre tradición oral maya en la región de Atitlán bajo la dirección de la doctora Perla Petrich (París VIII). Posteriormente, en la universidad de Albany, N.Y., fue alumno del doctor Robert Carmack. Es editor de la página electrónica <www.oralidadmaya. info> y coordinador del Comité de Amigos de Iximche’, autor de una guía de visita a la zona arqueológica de Iximche’ y otros documentos sobre historia maya del siglo XV (Cholsamaj 2011 - 2013); pluralismo jurídico y de los estudios “Alcaldías indígenas, diez años después de su reconocimiento por el Estado”(ASIES, 2013);“Concepción uso y manejo del diálogo por autoridades indígenas” (ASIES, 2014) y Sololá y Totonicapán: libre decisión y clientelismo político (ASIES, 2015). Muchísimas gracias a la Acaldía de San Vicente Buenabaj, especialmente a sus corporaciones de 2013, 2014, 2015, 2016, y a las siguientes personas: Santos Vicente Pérez, presidente del Comité de Ancianos, exalcalde (1992), Prof. Esteban Velásquez Vicente, exalcalde (2006), Prof. Daniel Esteban Vicente Vicente, exalcalde (2013), Prof. Pedro Eliseo Chún Vicente, exalcalde (2014), Prof.German Vicente Tzun, síndico de la Municipalidad de Momostenango, Abogada Claudia Caballeros, Abogado Israel Benito Ajucúm López, Fotógrafos Daniel Tucux Coyoy, Daniel Sosa y Kevin Velásquez, Historiador doctor Edgar Esquit Choy. r Q El autor agradece los comentarios recibidos de Santos Vicente Pérez, Geovanny Vicente, profesores Esteban Velásquez, David Xiloj Ajtun y Leovijildo Anael Vicente Vicente y a los antropólogos Robert Carmack, Rudd Van Akkeren, Virgilio Reyes y Stener Ekern. Otras muchas personas de San Vicente Buenabaj y del país dieron valiosos aportes como contribuyentes anónimos. Finalmente, agradecer la confianza del pueblo de San Vicente Buenabaj y al Fondo de Desarrollo Cultural (ADESCA) que ha hecho posible su publicaión. 91 r W 92 Mapa 14. República de Guatemala 91.5o HUEHUETENANGO Santa Lucía La Reforma San Bartolo Aguas Calientes 15o Santa María Chiquimula San Francisco El Alto Mapa 15. Municipio de Momostenango San Cristobal San Andrés Totonicapán Xecul Totonicapán QUETZALTENANGO SOLOLÁ DEPARTAMENTO DE TOTONICAPÁN EL QUICHÉ Anexos Momostenango San Vicente Buenabaj Buenabaj San Vicente Buenabaj Mapa 16. San Vicente Buenabaj: Scaglia Martínez, M. A. (2010: 27). r E Mapa 17. Ruta nacional 9. Gobierno de Guatemala, Ministerio de Comunicaciones Inf. y Viv. 93 San Vicente Buenabaj Mapa 18. Buenabaj: frontera lingüística K’iche’, en: Richads, 2003:64 Ubicación de Buenabaj como frontera lingüística Atlas Lingüístico de Guatemala, 2003 Zona núcleo Mam ampliada. r R 94 Zona núcleo K’iche’ ampliada. San Vicente Buenabaj Mapa 19. Buenabaj según los límites reconocidos en la Certificación (1705) y remedidos por el R. Aguilar Batres (1945). Mapa elaborado por Rogelio Ixmay Vicente (2009). r T 95 r Y San Vicente Buenabaj Notas 1 Las cimas más altas de la región son los volcanes Santa María 3772 mt, Siete Orejas 3370 mt, Tená 3300 m, Cerro Quemado 3197 m, Cuxliquel 3004 m. 2 El sistema ecológico de Buenabaj se ubica en una zona de vida denominada bosque muy húmedo montano bajo subtropical, según el sistema de clasificación de Holdrige. Esta es una faja territorial que atraviesa Patzité, San Francisco El Alto, Buenabaj, Sija, Pologuá, Sibilia y San Marcos. El área total de esta zona representa el 15% de la superficie del país. En: Reyes, 1998:19. 3 Ver Rabinal Achi en Breton, 1999:153; Crónica Xajil, en Maxwel, 2006:2, notas 4 y 80; Carmack, 1979:109. 4 En esta parte de las tierras altas el patrón de lluvias varía entre 1057 mm y 1588 mm, con un promedio de 1344 mm de precipitación anual. Las biotemperaturas oscilan entre 15 y 23° C° en la estación lluviosa. La evaporación promedio es de 0.75. Instituto de Sismología, Vulcanología y Meteorología (2004) Estudio de lluvia máxima diaria en la república de Guatemala. 5 K’ulb’at: “mojón” (k’ul denota una relación de unión; b’at: límite). Genérico para señalar todo tipo de límite territorial; cuando se trata de la frontera de un territorio este límite es simbolizado actualmente con una cruz; generalmente es demarcado por grandes piedras y peñascos; entre propiedades familiares es demarcado por ciertas plantas, como los nopales, sembrados para este efecto. 6 Tza’n, literalmente punta, nariz, península, protuberancia. Varios ejemplos de uso en: Ochoa García, 1998: Págs. 50, 77, 79, 92, 101. 7 Las peñas se asocian a las condiciones de resguardo de las planicies y llaman la atención sobre los puntos de quiebre del paisaje entre valle y montaña, sobre todo cuando marcan el cambio de dirección de la cordillera. Las peñas son designadas por su color: blancas, coloradas, rojas, negras, amarillas, y también por sus formas distintivas, tales como peñascos, lugares escarpados, protuberancias y los miradores (miramundo). 8 Los barrancos son un concepto de territorio. Eran de la mayor importancia en el patrón urbano del pos clásico porque se asociaban al emplazamiento de las ciudades tinamit, haciendo de ellas fortificación natural, que las hacía casi inexpugnables; por lo mismo, las denominaban “ciudades de barranco” o “siwan tinimit” (Popol Wuj, en Villacorta, 1962:329). 9 Desde una época alrededor de 1551, los españoles empezaron a establecerse en el valle de Sija y expandieron sus propiedades en alto valle al que ellos denominaron Valle de Nuestra Señora de la Concepción de Sija, donde habían edificado una ermita, pero no constituían villa, y de hecho no la establecieron sino hasta 1778. Sobre el poblamiento de Sija, ver Carmack, 1995: 59, 60,109, 111; Álvarez, 1987:13; Reyes, 1998:59. 10 Elías, 2008:202 11 Para una descripción de los bosques de Buenabaj ver: Reyes (1998), Herrero (2010), Elías (2008), Elías y Pinto (1997). Grünberg, (2003). r U 12 Fuente: Asociación de forestería comunitaria de Guatemala. Utz Che’ http://www.utzchecomunitaria. org/index.php/es/region-occidente/39-asociacion-parcialidad-de-vicente 13 Popenoe, 2005:98; Carmack et al, 1972:7; Ciudad Ruiz e Iglesias 1995:90. 14 Kaufmann 1973, citado por Carmack 1995:435. 15 Carmack, 1995:8; Carmack et al 1972:5 ss. 97 San Vicente Buenabaj 16 Carmack, (1972:8) determinó que en el valle central de Momostenango hay evidencias arqueológicas ya desde el preclásico, con patrones y complejidad que se ve en otros sitios altos como Huitán y Cucal (Smith 1955), Saq Ulew (Woodbury y Trik ), Cambote (Smith 1955). 17 Más referencias sobre esta ciudad en: Carmack 1967:7; Carmack et al, 1972:17; Carmack 1979:30; Carmack, 1995:437; Carmack 2001:189; Fox, 1978:126 ss. 18 Las coordenadas de Pueblo Viejo Momostenango son Lat. 15° 05’ 699’’ Long. 91° 26’ 551’’. 19 Carmack estimó en 1979 que Tzaquib’ala estaba al este de la actual cabecera de Momostenango, era un sitio muy pequeño, con unas cinco grandes estructuras, se construyó sobre una meseta rodeada por el río Sajkolaj, en el actual límite entre Momostenango y Santa María Chiquimula (Carmack, 2001: 189) 20 Ciudad Ruiz, Iglesias, 1995:90-101; Fox, 1978:129. 21 El señor Izkin Nijaib’ llegó a ser gobernante de Palotz Utz’aqib’ala y tuvo los títulos de “señor de Palotz, Señor de Tzaqib’ala” pero su gobierno era compartido con otros linajes de gran influencia, este poder compartido era común dado que todos estos linajes habían participado en los esfuerzos militares. Carmack, 1967:7; Carmack, 1979:174; Carmack, 1979b: 167, 175. 22 “Entonces, nuestros abuelos y padres salieron [...] (y llegaron) enfrente de las montañas de Ikiya e Ikilaja. (estos lugares) fueron abandonados ante las flechas y el escudo. Entonces salieron de allá frente a Tena, Lotz, y Tzaqib’alja”. Título K’oyoi, en Carmack y Mondloch, 2009:40. 23 En el Diccionario de Varea pax significa quebrar, también es un “verbo irregular para quebrarse o henderse cualquiera obra de barro, vidrio, xicaras, adobes, pared, suelo, tablas guebos o resquebrajarse manos o pies”; en el Diccionario de Coto pax significa pedrera, donde sacan piedras, y chun significa cal. Carmack traduce Paxchun como lugar de la cal” (Carmack, 1995:14). Testimonios modernos indican que en los altos del Samalá estaban algunos de los pocos centros productores de cal, McBryde, 1969:216, T. I. 24 Considérese que la investigación arqueológica en el área es escasa, ver Carmack, 1995:19, 20, 23 y notas 32, 37, 437 nota 38; Recinos, 1957:112. 25 Las coordenadas de Corral Ab’aj son Lat. 15° 03’ 52.3’’ Long. 91° 33’ 47.5’’ 26 Ver Carmack, 1995, páginas19, 20 y notas 32, 37; Carmack, 1967:7; Carmack, 1995:437 Nota 38; Recinos, 1957:112. 27 Carmack señala que los límites de la provincia de Palotz Utzatkib’ala corresponden casi exactamente a los límites del pueblo de Momostenango, esto se debe a que fueron los mismos jefes de linajes quienes acordaron la constitución del territorio municipal. Carmack: 1967:7; 1995:29. 28 Ver Recinos, 1957: 69-94 [Título I]; 95-130 [Título II]; Carmack, 1973: 347-349 [Título II]; Carmack, 1973:349:352 [Título III]; Carmack, 1973:352-355 [Título IV]; Álvarez Arévalo, 1987:27-44, Manuscritos de Buenabaj, Títulos I y II. 29 Título K’oyoi en Carmack y Mondloch, 2009:41. r I 30 El título Nijaib’ II indica que en este lugar el señor Izkin Nijaib’ derrotó a los Yoc Kanchebex de origen mam. Carmack afirma que Yoc era un título para designar a una autoridad, en la tradición oral de Buenabaj se asume que yoc es un linaje que corresponde a los López así como Cabrera a los k’ancheb’ex. Ver Carmack, 2009:122; Carmack, 1972:13; Recinos, 1957:112. 31 Carmack, 1972:12; Carmack, 1967:8; Carmack, 1995:443, nota 41; Recinos, 1957:91. 32 Una biografía del señor Nijaib fue elaborada por Carmack, en Carmack, 1979:171-79) 98 San Vicente Buenabaj 33 Título Nijaib’ IV, en: Carmack, 1967:352-355; Carmack, 1979:1789. 34 Al referirse a la toponimia saq significa planicie en Santa Catarina Palopó (Ochoa García, 1998: 37); ver también Título K’oyoi en Carmack y Mondloch, 2009:37; Rabinal Achi en Breton, 1999:382. Las otras referencias corresponden a los diccionarios del siglo XVII de Varea, Baseta y Coto. 35 Edmonson, (1965) (en Carmack, 1979:176), sugiere que el término viene de (k’ab)awil ix, la divinidad lunar maya o Ixchel, patrona de Q’umarkaj y de Iximche’. Ver también Carmack, 1983:220 nota 112. 36 El título Nijaib’ II da una explicación histórica al nombre del cerro Tena: “le pusieron el nombre de Tená por haberse juntado a toda la gente y los soldados en aquel paraje…” (Carmack, 1973:349). 37 Leovijildo Anael Vicente Vicente, Comunicación personal, enero 2015. 38 Abreviaturas: Tiempo pasado: t1; Tiempo presente: t2; Locativo: loc. (allí); Demostrativo: dem.; Posesivo tercera de singular: Pos. 3 s.; Posesivo primera del plural: Pos. 1 pl. 39 Recinos (1957:113) transcribe el nombre de esta montaña como “Guki juyub”, Carmack (2009:122) lo transcribe “Q’aqijuyub’”, seguramente con base en el Título III que nombra Q’ixal, K’akijuyubal al cerro detrás de Tena (Carmack, 1973:352); el manuscrito de Buenabaj lo llama Cucihujub. Actualmente la montaña se conoce como “Q’ixajuyub’ ” (cerro de espinas) y también como “Cerro Nombrado”, en ciertos documentos antiguos de la comunidad. 40 Relato de Santos Vicente Pérez, presidente del Comité de Ancianos. Fecha: diciembre 2013 41 En el texto se lee: Santa Crus, Sta Antun Chijlocab y Stiago Chwa Tz’aq, transcripción de Carmack, 1973:62. 42 El ajaw Izkin Nijaib’ aún vivía en Chuwa Tz’aq cuando al menos uno de estos títulos fue mandado a escribir. Ver: Recinos, 1957: 71-117; Carmack, 1967: 3-13; Carmack, 1973:36. 43 Temiska: término de origen náhuatl: Sust. temazcalatl “agua para baños”, por referencia a los baños de vapor del temazcalli (temascal); el texto haría referencia a las aguas termales que nacen en el cerro Patz´am en San Bartolo Aguas Calientes allí donde se juntan los ríos Chocolomabaj (Palá), y Pologuá (Las Palmeras). Ver título Nijaib’ IV y Diccionario Nahuatl de Remi Semeon. 44 Este documento se halla en el Archivo General de Centro América (AGCA) en Ciudad de Guatemala con dos versiones, en Clasificación A1.18, Legajo 6074, Expediente 54883, Expediente 54,884. 45 El título Nijaib I se ha publicado en 1876 por la Sociedad Económica de Guatemala, en 1941 por la Sociedad de Geografía e Historia, en 1957 por Recinos (en su libro Crónicas indígenas), 1968 por Crespo, en 2009 por Carmack y en 2015 por Flores Hernández. Estas dos últimas ediciones están disponibles por internet gracias a la Universidad Mesoamericana (libro Crónicas Mesoamericanas II), y en la revista científica Diacronías (8) 14. 46 Título Nijaib en Archivo General de Centro América (AGCA), catalogado con el número AI 18 Legajo 074 expediente 54884, publicado por Recinos (1957:69-94), y transcrito por Crespo:1968: 63-73. En el AGCA, hay una segunda versión con signatura AGCA, Guatemala A1, Leg. 6074, Exp. 54883 también reproducida por Crespo (1968:74–82) quien indica que es más amplia y desconocida. Esta fue publicada por Flores Hernandez (2015:74–56). r O 47 El manuscrito se halla en la biblioteca del Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Princeton, Nueva Jersey, Estados Unidos. Se le puede leer íntegramente en alta resolución en el sitio de su biblioteca digital, enlace <http://arks.princeton.edu/ark:/88435/r781wh31g> Títulos de los señores del Reino del Quiché: manuscript, [1501-1781?]. 99 San Vicente Buenabaj 48 La edición está disponible por internet gracias a la Universidad Mesoamericana en el libro Crónicas Mesoamericanas, Tomo II (2009), Págs. 97-124. En: https://www.academia.edu/7597885/ CR%C3%93NICAS_MeSoAMeRICANAS 49 Xelaju es la actual Quetzaltenango pero aquí se refiere a su centro antiguo bajo el cerro Lajuj Noj o Cerro Quemado, también llamada Q’ulaja’. 50 Con base en Asselbergs, Florine. (2009, 2010), Akkeren (2007), Lujan Muñoz (2009:163-182). 51 Torquemada, Juan de, 1986:107 y 444. Para una descripción de la personalidad de Vicente Ferrer (1350-1419) ver: http://www.dominicos.org/grandes-figuras/santos/san-vicente-ferrer 52 Akkeren (2011:51) sugiere que la divinidad patrona del linaje Nijaib’ era Awilix, una divinidad femenina. 53 Relato de Santos Vicente Pérez, presidente del Comité de Ancianos de Buenabaj, octubre 2014. 54 Tekun también aparece nombrado en el Título Nijaib’ I en el cual se hace una más larga descripción de los hechos que asocian a Izkin Nijaib’ con Tekum 55 Estos relatos de la tradición oral buenabajenses y las notas históricas fueron dados por Santos Vicente Pérez, en octubre, 2013. 56 Chuwi Tzaq (chuwi: sobre, tzaq: blanco, lugar), asiento original de la cabecera del pueblo Momostenango, hasta 1590, fecha de traslación a su actual sitio, siete km al este. Ver Carmack, 1979:175 y ss 57 Relato de C. Herrera, Pueblo Viejo, recopilado por Virginia Sontay, de Tunayac, Momostenango. en 1995. 58 Hasta 1587 la cabecera municipal de Momostenango se hallaba muy próxima a Aguas Calientes, en el viejo asentamiento Chuwa Tz’aq, hoy llamado Pueblo Viejo, Carmack, 1995: 55; ver también relatos de fundación analizados en Cook, 2001:107. 59 Las dos biografías de Izkin Nijaib’ y Diego Vicente han sido reconstruidas por Carmack, 1979:171 ss.; Carmack, 1995:102 ss. 60 Manuscritos de Covalchaj Legajo No.1 folio 19, en Alvarez Arévalo 1987:17. 61 Todos los datos sobre Diego Vicente y esta cronología en Carmack, 1995:102; Carmack, 1979:163; Carmack, 1967:10. Ver también: Álvarez Arévalo 1991:3. 62 Estos datos y los siguientes provienen del Manuscrito de Buenabaj, Leg. 1, que en lo sucesivo se cita MB1 y folio correspondiente, según la transcripción de Álvarez Arévalo, 1987, Págs. 15-22. 63 Manuscritos de Buenabaj, Leg. No.1 folio 19, en Alvárez Arévalo 1987:17. 64 Autos de dos caballerías de tierras realengas que se midieron a pedimento de Diego Vicente (1654). Archivo General de Centroamérica (AGCA), AI legajo 5943, expediente 52013. t P 65 Un legajo de documentos en posesión de San Vicente Buenabaj denominado “La certificación” informa sobre un litigio sobre 30 caballerías de tierras, el cual transcurre entre 1705 y 1718 y resuelto a favor de los Vicente; el último expediente de este legajo informa de una contribución hecha en 1831 por los Vicente al Estado de los Altos, como contribución o impuesto territorial por cuenta de estas mismas tierras. 66 Relato de Santos Vicente Pérez, San Vicente Buenabaj, 17 de octubre de 2013. 100 San Vicente Buenabaj 67 Las siguientes coordenadas aparecen identificadas en la Iniciativa de Ley 2961 que obra en el Congreso de la República desde el 11 de noviembre de 2008, actualmente en la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, para su estudio y dictamen correspondiente. 68 Sobre las fronteras territoriales de Momostenango y el papel de Barrios ver: Carmack, 1995:170. Sobre las fronteras departamentales, ver Taracena, 2002. 69 Este fueron las tierras que pasaron a denominarse “Recuerdo a Barrios”, ver Reyes, 1998: 59. 70 San Carlos Sija se fundó después de un trámite que se inició en 1776 por un expediente tramitado por el alcalde mayor de Totonicapán ante la Real Audiencia de Guatemala y el Consejo de Indias lo aprobó finalmente el 9 de marzo de 1781; la villa se fundó con unas 70 familias. Ver Gall 1982:249; Francisco Antonio de Fuentes y Guzmán (1700), Pedro Cortés y Larraz (1770), Carmack, 1995. 71 Don Joseph Domingo Hidalgo descripción de la “Provincia de Totonicapam”, publicada en la Gaceta de Guatemala del lunes 25 de septiembre de 1797. Gall, 1982, 249. 72 Así figura en el Censo de Población el 31 de octubre de 1880. 73 Constitución Política del Estado de Guatemala, 11 de octubre de 1825. 74 Decreto de la Asamblea del 27 de agosto 1836, en la Administración de Justicia por el sistema de jurados Sija está adscrito al Circuito de Totonicapán (Pineda Mont, Recopilación de Leyes). 75 Censo de Población el 31 de octubre de 1880 Gall, 1982, 249. 76 Demarcación Política de la República de Guatemala, Oficina de Estadística. Gall, 1982, 249. 77 La legislación actual establece que una circunscripción administrativa departamental solo podrá ser modificar por el Congreso de la República, Artículo 224 Constitucional. 78 Comunicación del alcalde de Sija a la corporación municipal de Momostenango, del 28 de enero de 1951, Libro de actas Municipales, 1951, Archivo Municipal de Momostenango. 79 El Código Municipal [12-2002], (Artículo 55), reconoce que “el gobierno del municipio debe reconocer, respetar y promover las alcaldías indígenas, incluyendo sus propias formas de funcionamiento administrativo”. También reconoce (Artículo 20) a las comunidades de los pueblos indígenas su derecho a personalidad jurídica y a regirse con respecto de su organización y administración interna de conformidad con sus normas valores y procedimientos propios, con sus respectivas autoridades tradicionales. Ver también Artículos 8. F, 20, 55, 56, 58. j), 64, 65, y 66. t q 101 Impreso en los talleres de Cholsamaj 5a. Calle 2-58, Zona 1, Guatemala, C. A. Teléfonos: (502) 2232 5959 - 2232 5402 E-mail: editorialcholsamaj@yahoo.com www.cholsamaj.org San Vicente Buenabaj (17 000 hab.), Momostenango, Totonicapán, se halla en uno de los altiplanos más altos del país, a la misma altura de los Cuchumatanes. La marca distintiva del territorio es el monte Tena (3 300 m), cuyos sus alrededores están habitados. En las cercanías del monte Tena se encuentra el alto valle llamado uk’uleb’al Tena, 3 068 m SNM, donde se halla el sitio arqueológico de Pa Corral Ab’aj, seguramente construido por Izkin Nijaib’ hacia 1500 y que se relaciona con Diego Vicente (su nieto) quien lo habitó para 1600. Por las luchas de Diego Vicente (± 1595 – 1675) se escrituraron las tierras de Buenabaj en 1629, 1633, 1644 y 1654 y sus hijos se ubicaron desde el alto valle del Uk’uleb’al Tena hasta Xebuenab’aj o Paxchun y el cerro Tzi’ Ja’. El histórico papel jugado por Buenabaj, antiguamente llamada Palotz, así como su ubicación, límites y colindancias están bastante bien identificados gracias a una serie de documentos antiguos en posesión de la comunidad, particularmente los títulos Nijaib’, que contiene extraordinarios relatos y pictogramas del siglo XVI. Los títulos Nijaib’ describen, entre otros temas, la larga lucha que en 1501 libro el señor Izkin Nijaib, “señor de Palotz , señor de Utzaqib’ala”, para controlar las fronteras del antiguo Estado k’iche’. Buenabaj (17 000 hab. ), Momostenango, Totonicapán, es el territorio antiguamente llamado Palotz. El rico pasado prehispánico de Buenabaj esta descrito en los títulos Nijaib’ del siglo XVI. Estos antiguos escritos resaltan el papel desempeñado por el señor Izkin Nijaib’ y abundan en detalles sobre la situación de Momostenango y particularmente de Buenabaj. Desde entonces, Buenabaj ha sido zona de frontera por la cual han pasado las demarcaciones aldeanas, municipales, provinciales, departamentales e incluso lingüísticas y étnicas, por ello Buenabaj ha jugado un papel clave en la historia moderna del departamento de Totonicapán. El objetivo de esta obra es poner a disposición de un público amplio tanto una descripción contextualizada de las crónicas indígenas Nijaib’ como presentar una etnografía sobre San Vicente Buenabaj y de esta forma rever parte de la historia de Guatemala y de los maya k’iche’.