1. Introducción Quiero introducirme con unas palabras que pronunció recientemente en un programa de televisión el gran teólogo latinoamericano Leonardo Boff: "la teología tiene que pensar en los temas que atañen a toda la humanidad...
more1. Introducción Quiero introducirme con unas palabras que pronunció recientemente en un programa de televisión el gran teólogo latinoamericano Leonardo Boff: "la teología tiene que pensar en los temas que atañen a toda la humanidad efectivamente desde la fe, pero siempre desde una perspectiva que produzca esperanza y empeño de cuidar de la casa común y en función de la vida". 1 Ciertamente toda teología debiera ser contextual y responder a la realidad de nuestro tiempo, en tiempos desafiantes de globalización, pluralidad, ecumenismo y planetización. Es por ello, que he decidido hacer este breve trabajo sobre el desarme tomando como base el método histórico-crítico y buscando en lo posible que otros métodos teológicos dialoguen un poco con él. Estoy consciente que la teología no debe de hacerse desde la lejanía, el escritorio y tan solo como un objeto teológico a escoger, es decir, que para construir la teología debe hacerse desde la experiencia, y sobre todo desde una experiencia de fe. Creo que muchos latinoamericanos y sobre todo los mexicanos, hemos vivido la experiencia de lo que es enfrentar el riesgo inminente de muerte a causa de un arma de fuego, y eso en el mejor de los casos, pues hay quienes han experimentado cosas peores como la misma guerra o el fuego cruzado entre una lucha de bandas delictivas. En lo personal he vivido la quizás limitada, pero negativa y real experiencia de asaltos a mano armada, y sé lo que es tener una pistola apuntando a mi cabeza, algo que podría definir teológicamente como un momento kairotico que marca o deja huella, para bien o para mal. Y de estas vivencias, más lo que escucho que sucede en el mundo, en especial a los más vulnerables, llego a las preguntas de ¿qué podemos decir en cuanto al uso de las armas desde la fe? y ¿qué repercusiones prácticas nos puede dejar una reflexión de desarme, no solo en la iglesia sino en una sociedad tan violenta como la nuestra? 2. De Hermanos a Chacales Simeón y Leví son hermanos; Armas de iniquidad sus armas. En su consejo no entre mi alma, Ni mi espíritu se junte en su compañía. Porque en su furor mataron hombres, Y en su temeridad desjarretaron toros. Maldito su furor, que fue fiero; Y su ira, que fue dura. Yo los apartaré en Jacob, Y los esparciré en Israel. Gn 49,5-7 RVR60 (Énfasis añadido). Estamos ante un texto muy interesante en el que vale la pena detenerse y observar el hebreo, en especial de la palabra hermanos (ajim-ַא ח ִ֑ ,)םי una palabra que puede trabajarse desde el método histórico-crítico.