Promueve Accion de Amparo. Solicita Medida Cautelar de No Innovar - Fase Innovativa-. Se Dicte Subsidiari
Promueve Accion de Amparo. Solicita Medida Cautelar de No Innovar - Fase Innovativa-. Se Dicte Subsidiari
Promueve Accion de Amparo. Solicita Medida Cautelar de No Innovar - Fase Innovativa-. Se Dicte Subsidiari
RESERVA DEL CASO FEDERAL. Seor Juez: DANIEL RAL FERNNDEZ, abogado (C.P.A.C.F. t 48, f 634, C.U.I.T. n 20-12780880-6, I.V.A. responsable inscripto), constituyendo domicilio procesal en Bartolom Mitre 1540, piso 3, depto. F, Ciudad,, se presenta y dice: I.- PERSONERIA: Tal como la acredito con la copia simple de poder vigente, soy apoderado judicial de , L.E. n , Beneficio n , con domicilio en II.- OBJETO: En el carcter invocado, vengo a promover: 1) Accin de amparo (cfme. art. 43 de la Constitucin Nacional) contra la A.N.Se.S (Administracin Nacional de la Seguridad Social), con domicilio en Paseo Coln 329, piso 7, Capital Federal, solicitando: 2) Hasta tanto se resuelva el fondo de la litis V.S. pronuncie como medida cautelar innovativa (art. 230 del Cd. Procesal) y; 3) para el caso de considerarse procedente se dicte medida cautelar autosatisfactiva. Ello a fin de que se declare la inconstitucionalidad, invalidez e inaplicabilidad, por arbitraria e ilegal de la ley 25.453, en cuanto cercena sus derechos constitucionales de percibir in integrum su haber jubilatorio (especialmente arts. 10 y 14), todo ello con costas (arts. 68 del Cd. Procesal). III.- LEGITIMACION ACTIVA: a) Segn surge de la documental mencionada en el acpite I, que en este acto acompao, se trata de un beneficiario, representado por la suscripta. En tal carcter, interpongo esta accin de acuerdo a las prescripciones legales que otorgan la legitimacin que se alega en defensa de los intereses individuales del representado y la vigilia sobre el cumplimiento de la normativa social que se le aplica, conforme se ha reconocido por la sala V del fuero Contencioso Administrativo, en autos MOLINA, JOSE C/ESTADO NACIONAL (PEN) S/AMPARO LEY 16.986.
Por otra parte, ha de tenerse en cuenta que la reciente reforma constitucional, reconoce que ...Podrn interponer esta accin contra cualquier forma de discriminacin y en lo relativo a los derechos que protegen al ambiente, a la competencia, al usuario y al consumidor, as como a los derechos de incidencia colectiva en general, el afectado, el defensor del pueblo y las asociaciones que propendan a esos fines, registradas conforme a la ley, la que determinar los requisitos y formas de su organizacin... (art. 43, segundo prrafo de la Constitucin Nacional reformada en 1994). En este particular ha de considerarse que la omisin de establecer la normativa reglamentaria -indicada en la parte ltima del mencionado prrafo- no puede redundar en perjuicio de los administrados, ya que ello significara restarle eficacia jurdica al precepto constitucional con relacin a sus beneficiarios por la simple omisin estatal, quitndole sustento a la proteccin de los intereses colectivos introducida expresamente con la reforma analizada, lo que resultara incongruente con el Estado de Derecho. Conforme surge de los recibos de jubilacin acompaados, el seor , beneficiario de la A.N.Se.S n , percibe una jubilacin, que en virtud de la ley cuestionada ver afectado su percepcin por aplicacin de la misma con grave violacin de su derecho alimentario y de propiedad. IV.- PROCEDENCIA DE LA VIA ELEGIDA: Corresponde sealar que la va elegida para canalizar el reclamo, es procedente ya que la actual redaccin del art. 43 de la Constitucin Nacional ha removido el obstculo que presentaba el art. 2 inc. d) de la ley 16.986, habilitando la declaracin de inconstitucionalidad de la norma lesiva por va de amparo. Pero an con anterioridad a la reforma constitucional, la Corte Suprema de Justicia de la Nacin tena resuelto que ...nadie puede sustraer al Poder Judicial la atribucin inalienable y la obligacin de hacer respetar la Constitucin ... (Corte Suprema de Justicia de la Nacin, OUTON CARLOS J. Y OTROS S/RECURSO DE AMPARO, Fallos 267:215 ) con lo cual los jueces deben en pos de restituir de inmediato los derechos, apelar a la va sumaria del amparo ( id. Corte Suprema de Justicia de la Nacin, PERALTA, L.L., 1991-C-158). Del relato de los antecedentes y de la explicacin de los aspectos jurdicos involucrados, surgir que el caso rene la totalidad de los requisitos exigidos por el Art. 43 de la Constitucin Nacional, ley 16.986 y jurisprudencia citada.
El acto de autoridad previsto en el citado art. 43 se encuentra constituido en el caso por la ley 25.453 que lesiona, restringe y altera los derechos del suscripto, totalmente ilegtimos por afectar el derecho de propiedad, protegido por el art. 17 de la Constitucin Nacional. Ninguno de los impedimentos enumerados en el art. 2 de la ley 1.6986 est presente en el caso. Cabe acotar que el actor toma conocimiento emprico de las
consecuencias nefastas de la ley en el momento de acudir al banco a percibir sus haberes los cuales eran superiores a los pesos quinientos (500.-) y encuentra que el mismo fue rebajado en un 13 %. Luego, experimenta el real perjuicio a medida que pasan los das y esas sumas no le alcanzan para llegar a fin de mes. Por lo que esta accin se da en tiempo hbil, atento las obligaciones del Estado para con los pasivos (de dar) son peridicas. El dao que aquel ocasiona todos los meses se renueva indefinidamente en el tiempo. Es permanente. Por lo que no cabe acotar la litis en los estrechos mrgenes -ritualistas por otra parte- de una estrechsima temporalidad. Respecto de la posibilidad de acudir a otras vas, es necesario insistir en que ninguna que no sea tan rpida como el amparo ofrecera la posibilidad de evitar los gravsimos e irreparables perjuicios que la ejecucin de lo dispuesto por la normativa atacada acarreara. Ya que aquella configurara la jurisdiccin oportuna. Es decir posibilitara dar a cada uno lo suyo en tiempo til -para satisfacer adecuada y oportunamente sus expectativas- teniendo en cuenta su condicin de tercera edad -los cuales desde ya son menores que las del resto de la poblacin-. Ello debe conjugarse con la notoria y manifiesta ilegitimidad de la cuestionada ley, que no requiere mayor debate ni prueba ni mucho menos interpretaciones sofisticadas. Se ha resuelto que el progreso de la accin de amparo exige que la restriccin sea claramente individualizada por el accionante, se indique con precisin el o los derechos lesionados, resulte verosmil su existencia y pueda evidenciarse con nitidez en el curso de un breve debate . (Cmara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal, sala II, MUTUAL DE AGUA Y ENERGIA C/ESTADO NACIONAL, l..L., 1983-A-514). Estos recaudos concurren en el caso que nos ocupa, como se demostrar.
V.- COMPETENCIA: La competencia de la Justicia Federal de la Seguridad Social para entender en las presentes actuaciones, surge expresamente del art. 2, inc. b) de la ley 24.655, al fijar su competencia en general, ...en las demandas que versen sobre la aplicacin del Sistema Integrado establecido por la ley 24.241 y sus modificatorias. En igual sentido el art. 3 del mismo cuerpo normativo el cual sustituye al art. 15 de la ley 24.463. VI.- ANTECEDENTES: Planteo inconstitucionalidad de los arts. 10 y 14 de la ley 25.453. La ley 25.463 (art. 10) subordina la obligacin del Estado de proveer a satisfacer un derecho constitucional de raigambre alimentada a un hecho aleatorio como es la recaudacin mensual que aquel obtenga. Reduciendo a fin de mantener el equilibrio entre gastos operativos y recursos presupuestarios". En la proporcin que fuere suficiente a tal fin. Es decir que cuando los recursos presupuestarios estimados no fueren suficientes, se reducirn los haberes previsionales de los beneficiarios -entre otros- a fin de mantener el equilibrio con los gastos operativos. Esto es abierta y groseramente conculcar la histrica INTANGIBILIDAD de los haberes previsionales, respaldado desde siempre por jurisprudencia de nuestro ms Alto Tribunal. Y un toque de alarma. La recaudacin mes a mes ser seguramente inferior con el paso de los meses, con lo cual la quita previsional ser superior al 13 % si esta ltima ya per se es confiscatoria, Qu quedar para ms adelante?. El mecanismo as implementado es arbitrario e ilegal. No tiene tope en el tiempo en el que se prolongar la medida, ni en el quantum del despojo, dando lugar a incertidumbre angustiosa a una franja mayoritariamente de la tercera edad, de menores expectativas de vida, cuanto ms tranquilidad necesitan y amparo. Asimismo el art. 14 de dicho cuerpo normativo -cuya inconstitucionalidad al igual que el art. 10 planteamos infra- que prohibe a los rganos jurisdiccionales dictar medidas cautelares que comprometen recursos financieros del Estado,
avasalla groseramente no slo las potestades del Poder Judicial Seccin Tercera Captulo Segundo - (arts. 116, ss. concs.) de la Le Fundamental violando el principio de divisin de poderes, sino derechos constitucionales elementales (peticin a las autoridades, defensa en juicio, amn de los que se enumeran infra). El actor de esta litis ha sufrido rebajas en sus rdenes de pago previsionales, ya que -a raz de la normativa atacada- al concurrir al banco se encontr materializada esa situacin. Momento en que entra en real conocimiento de la gravedad del mecanismo legislativo implementado en su perjuicio. El actor, percibi -como acredito con las O.P.P. que agrego- sumas superiores a los $ 500.- constitutivas de su haber intangible las que fueron degradadas. Concurri al asesoramiento profesional, en la medida de su precario conocimiento legal y en funcin que sufrir las consecuencias del menoscabo profesional, tratando de restablecer sus derechos constitucionales conculcados. Por lo que intenta la presente, a fin de ser reinstalados los mismos. VII.- LEY ATACADA: En el subexamine prima la irrazonabilidad del tope por encima del cual se efectuara la quita, por tanto se demuestra la irrazonabilidad y arbitrariedad de la medida limitativa de derechos consagrados constitucionalmente. La medida atacada se enmarca ms en una poltica encaminada a sanear las finanzas estatales que un recurso de excepcin para los problemas coyunturales. Menciono as los autos PERALTA L.A. Y OTROS C/ESTADO NACIONAL alegando que si la C.S.J.N. reconociera normas de esta naturaleza, obliga a recordar que la Corte Suprema de Justicia de la Nacin puntualiz los requisitos de las medidas de emergencia, sealando entre otros: 1) Que exista una situacin de emergencia que imponga al Estado el deber de amparar los intereses vitales de la comunidad; 2) que la ley tenga como finalidad legtima la de proteger los intereses generales de la sociedad y no a determinados individuos; 3) que su duracin sea temporal y limitada al plazo indispensable para que desaparezcan las causas que hicieron necesarias..., amn de no privar a los particulares de beneficios patrimoniales legtimamente adquiridos, sino slo limitar temporalmente el goce de los mismos (Corte Suprema de Justicia de la Nacin; CASSIN JORGE, 31/10/94).
En el presente caso no se ha configurado nicamente una limitacin al derecho del beneficiario, sino que lisa y llanamente se le amputa su haber -importe porcin de su ingreso mensual- y a otra parte se le disminuye en gran medida lo que constituye un avasallamiento a un derecho de propiedad (art. 17 de la Const. Nac.). Mucho menos podra alegarse transitoriedad de la medida ya que se ha afectado el derecho de propiedad con carcter definitivo deviniendo por tanto en una medida arbitraria e irrazonable que conculca derechos fundamentales de los trabajadores. La prolongacin del statu quo contrara el consenso social y agrava el deterioro financiero del rgimen que exige remedios excepcionales como el presente. El mencionado deterioro del sistema ha sido provocado por el propio Estado, conforme se analiza en el punto que sigue, y cabra recordar el principio nemo auditus. Atento la disminucin de las contribuciones patronales, el drenaje de aportes a las A.F.J.P., la incorporacin de Cajas Provinciales y dems ultra deficitarias, los prstamos usurarios que toma A.N.S.E.S., etc.. Polticas implementadas por el Estado en abierta colisin con los arts. 14, 14 bis, 75, inc. 22 y 23 de la Constitucin Nacional. Respecto de la excepcionalidad de los remedios, estn en pugna con lo previsto por el texto constitucional. No existen facultades extraordinarias en el Poder Legislativo que lo autoricen a resolver de esta forma siquiera situaciones de emergencia. Encontrndose ampliamente facultados los tribunales para revisar los presupuestos fcticos y jurdicos de su dictado, a efectos de resolver en consecuencia. A ello cabe agregar que la reduccin de los haberes y el directo deterioro de ellos, se asemeja a un recurso de naturaleza tributaria pues impone coactivamente una prdida de dinero (cfme. Corte Suprema de Justicia de la Nacin, VIDEO CLUB DREAMS C/INSTITUTO NACIONAL DE CINEMATOGRAFIA, del 6/6/95). Establecida de tal suerte la motivacin del acto legislativo, ste en su parte dispositiva establece un nuevo sistema de percepciones, conforme las siguientes pautas: Incluye en estas prestaciones a las personas cuya remuneracin sea superior a pesos quinientos ($ 500.-). En este punto me remito a las consideraciones efectuadas en el inciso b) que antecede, agregando a ellas que la suma referida es la percibida mayoritariamente, con lo que prcticamente se quita a una importante
franja de beneficiarios parte sustancial del valor. Se contrara as el art. 16 de la Const. Nac., puesto que se crea una categora de beneficiarios que deber soportar sobre sus sacrificados hombros el peso de una quita que a otros ingresos muy superiores no se les realiza (beneficiarios de los poderes del Estado Nacional, por ejemplo). VIII.- NORMATIVA VIOLADA: Como corolario de todo lo expresado precedentemente, la inconstitucionalidad de la ley 25.453 (especialmente los arts. 10 y 14) perjuicio expreso y extremo, para los beneficiarios, se sustenta en la violacin de las normas de mayor jerarqua que se ven vulneradas por los mismos. La pretensin de aplicar la ley objeto del presente, constituira as la va de hecho prevista por su art. 9, inc. a) de la ley 19.549. Que ante lo expuesto, carece la ley atacada de motivacin razonada, lo que la constituye en un acto irregular, afectado por un grave error de derecho que supera lo meramente opinable y lo torna por ello en manifiestamente ilegtimo (doctrina de Fallos de la C.S.J.N. 293:133; 253:15; 250:491; entre muchos otros). Que igualmente el acto padece de manifiesta falta de proporcionalidad entre los medios que adopta y los fines que se persiguen. IX.- SUPREMACA CONSTITUCIONAL: Este principio de supremaca de la Constitucin Nacional, construccin que se simboliza en una pirmide, en cuyo vrtice est la norma fundamental, y en orden de prelacin las dems normas, indica claramente que este principio esencial del sistema democrtico no puede ni debe ser alterado. Nos referimos en este captulo a la supremaca de la Constitucin Nacional porque en l se basa toda la estructura jurdica de nuestra Carta Magna, estableciendo el orden de prelacin de las normas, colocando en la cima de la pirmide al mismo texto constitucional determinando luego el orden jerrquico del resto del cuerpo normativo, principio establecido en el art. 31 de la Constitucin Nacional. Adems de la Constitucin Nacional, este artculo se refiere, en su orden de prelacin, a la supremaca del orden jurdico federal integrado por la Constitucin, las leyes dictadas en su consecuencia, y los tratados internacionales y a esa trinidad la llama Ley Suprema de la Nacin. Nos encontramos entonces con que en el presente caso la facultad conferida por la Constitucin Nacional al Poder Legislativo ha sido ejercida de un
modo abusivo, violatorio de la divisin de poderes y por lo tanto, violentando el principio de razonabilidad con el que debe ejercer las facultades. As se ha establecido que conforme al principio de que quien tiene el deber de procurar un determinado fin tiene el derecho de disponer de los medios necesarios para su logro efectivo y habida cuenta que los objetivos enunciados en el prembulo y los deberes-facultades establecidos en los incs. 12), 13), 16) y 28) del art. 75 de la Constitucin Nacional tiene razn de causa final y mvil principal del Gobierno Federal, no cabe sino concluir que ste ni puede ser enervado en el ejercicio de estos poderes delegados, en tanto se mantenga en los lmites razonables de los mismos conforme a las circunstancias. Ese es, por lo dems, el principio de supremaca constitucional que consagra el art. 31 de la Constitucin Nacional (C.S.J.N., 3/11/83, BUENOS AIRES, PROVINCIA C/SEGBA, Servicios Elctricos del Gran Buenos Aires). El desvo constitucional que se invoca es una cuestin judiciable, no importando ello que el Poder Judicial se introduzca en la esfera de facultades que corresponden a otro Poder del Estado, sino que su competencia deviene del mandato constitucional, haciendo vigente permanentemente la supremaca de la Constitucin Nacional y el orden de prelacin de las normas que establecen el art. 31 de la misma. Cuando la justicia juzga un acto de los otros poderes con fundamento en un supuesto desvo de competencia constitucional, no est interfiriendo en el mbito privativo del rgano de que se trata, sino que simplemente est ejerciendo su funcin de control de la supremaca de la Constitucin Nacional para determinar si el desvo aducido se ha producido o no (S.M. Jujuy, 22/12/57, E.D. 127-192). El principio de supremaca lleva a la conclusin de que las normas y actos infractorios de la Constitucin no valen, o lo que es lo mismo, que son inconstitucionales. Sin embargo nos quedaramos a mitad de camino si despus de arribar a esa conclusin, no se estableciera un remedio para defender y restaurar la supremaca violada. El principio ser terico, y carecera de eficacia para hacerse valer. Por eso, la doctrina de la supremaca constitucional pasa de inmediato a forjar el control o revisin constitucionales, como mecanismo que, confrontando normas y actos con la Constitucin, verifica si estn o no de acuerdo con ella, y en caso de no estarlo, las declara inconstitucionales, enervando su eficacia por falta de validez.
El control judicial de constitucionalidad cuenta con la frmula acuada por la Corte Suprema desde su fallo del 5 de diciembre de 1865, la cual, si bien se refiere expresamente a las leyes, se torna extensiva a normas y actos distintos a las leyes. Dicha frmula dice que es elemento de nuestra organizacin constitucional, la atribucin que tienen y el deber en que se hallan los tribunales de justicia, de examinar las leyes en los casos concretos que se traten a su decisin comparndolos con sta, y abstenerse de aplicarlas, si las encuentran en oposicin con ella, constituyendo esta atribucin moderadora uno de los fines supremos y fundamentales del Poder Judicial Nacional y una de las mayores garantas con que se ha entendido asegurar los derechos consignados en la Constitucin contra los abusos posibles e involuntarios de los poderes pblicos. El control judicial de constitucionalidad, y la eventual declaracin de inconstitucionalidad de una norma o un acto, es un deber (u obligacin) que implcitamente impone la Constitucin formal a todos los Tribunales del Poder Judicial cuando ejercen su funcin de administrar justicia, o cuando deben cumplir dicha norma o dicho acto (Bidart Campos, Germn; Tratado Elemental de Derecho Constitucional Argentino; t. 1; pg. 80). As lo ha entendido la jurisprudencia al establecer en el sistema estatuido por la ley fundamental, el ltimo y definitivo intrprete de ella, el Poder Judicial, que en su carcter de guardin de la efectiva supremaca constitucional, habr de verificar, a instancia de parte legitimada, si esta atribucin privativa -an cuando su contenido pueda conceptualizarse como de ndole poltica- ha sido ejercida conforme con las limitaciones materiales y procedimentales imperantes por la Ley Fundamental (del voto del Dr. Gaone, CS Tucumn, 28/11/87, E.D., 127-221). En el caso que nos ocupa la preservacin del principio de supremaca constitucional exige que se declare la inconstitucionalidad de esta Ley que se opone, modifica y deroga derechos constitucionales elementales, en cuanto dicha norma ocasiona un concreto desmedro econmico al beneficiario, afectando la inviolabilidad de la propiedad consagrada en el art. 17 de la Constitucin Nacional. Siguiendo esta lnea de anlisis el planteo de inconstitucionalidad que se realiza encuentra fundamento en que dentro de las vas procesales utilizables no existe la va directa, de accin o demanda, sino exclusivamente la va indirecta, incidental o de excepcin. De lo expuesto surge que la competencia de los jueces para revisar la inconstitucionalidad de los actos derivados de los dems poderes del Estado no es slo una facultad, sino que es un deber, el cual debe ser ejercido no slo a peticin
de parte, sino que debe ser puesto en prctica an de oficio, es decir, por el slo hecho de haber tomado conocimiento inconstitucional. No es funcin de los jueces el gobernar, sino el de controlar la supremaca de la Constitucin, lo que importa que todas las normas y los actos del Estado y de los particulares se ajusten a las disposiciones de la Ley Fundamental. Si no ocurre as, existen los diversos procedimientos de control de constitucionalidad que permitirn hacer real esa supremaca. La idea misma de supremaca y de control supone que los poderes constituidos han obrado positivamente, en un determinado sentido o en otras palabras lleva consigo la condicin de que haya existido de parte de los mismos una actividad, un quehacer, traducido en la creacin de normas o en la realizacin de actos que entren en conflicto con preceptos constitucionales (del fallo de primera instancia, Cmara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal, sala II, 12/08/86, E.D. 120-477, con nota de Germn Bidart Campos). Justificado entonces el inters jurdico de esta parte en la peticin de que se declare la inconstitucionalidad de la normativa atacada, basado en el perjuicio econmico ocasionado por su aplicacin en cuanto provoca la disminucin de los haberes que debe percibir el beneficiario y establecidos que el control de constitucionalidad debe efectuarse no en forma automtica, sino dentro del proceso judicial en que se reclama la conjura del perjuicio, corresponde a V.S. se expida declarando la inconstitucionalidad denunciada. Asimismo, Mana Mercedes Sena (Procesos y Recursos del acto o norma presuntamente
Constitucionales, Editorial Depalma, Buenos Aires, 1992) sostiene: El propsito de obtener un correcto funcionamiento del Estado, es decir, que cada poder realice su funcin segn su competencia y lmites constitucionales y legales, impidiendo la intromisin dentro de la esfera de los particulares, determina la configuracin del Estado de Derecho, como instrumento de seguridad jurdica y lmite al ejercicio irrestricto del poder... para ello se arbitran una serie de instrumentos denominados garantas constitucionales las que se refieren tanto a la especial proteccin proporcionada por la Constitucin a ciertos principios, institutos o situaciones subjetivas como a determinados mecanismos jurdicos de seguridad, establecidos por el ordenamiento constitucional con la finalidad de salvaguardar su valor y su existencia misma. De las garantas de la Constitucin, en cuanto tcnicas al servicio de la afirmacin efectiva de la primaca de la Ley Suprema del Estado, tiene suma importancia una de sus formas, cual es la justicia constitucional. Conjunto de actividades encaminadas a la presentacin o reparacin del orden jurdico
establecido por la Constitucin, y a... a la Constitucin misma, que en cuanto ley suprema vincula a los ciudadanos y poderes pblicos (op. cit., pg. 3). Es adems la autoconciencia que la Constitucin posee de su propia eficacia y dinamismo y su objeto y mediante los procedimientos y rganos establecidos, el cumplimiento, tutela y aplicacin de las normas jurdicas constitucionales. (op. cit., pg. 5). El control en nuestro caso, es reparador ya que aparece a posteriori de la sancin de la norma, siendo su objeto restaurar el orden constitucional alterado con motivo de los decretos inconstitucionales lesivos de los derechos fundamentales por el exceso funcional en que incurri el rgano constitucional estatal. (pg. 18). La supremaca de la Constitucin significa esencialmente que la Constitucin es la base y el fundamento de todo el orden jurdico-poltico de un Estado; adems de ello importa que la Constitucin formal, investida de superlegalidad, obliga a que los actos estatales y privados se ajusten a ellas; de ese modo todo el orden jurdico del Estado debe ser congruente y compatible con la Constitucin. La supremaca constitucional importa, entonces, una grabacin
jerrquica del ordenamiento derivado en relacin al primigenio, es decir, que las normas inferiores se supeditan o subordinan a las superiores y todo el conjunto normativo se subordina a su vez a la norma primera -o ltima segn los planos en que se mire, o sea, a la Constitucin. En consecuencia de esa estructura jerrquica del orden jurdico, que deviene por el principio de supremaca constitucional todo acto y norma contraria a la Constitucin carece de validez y resulta inconstitucional. Es as, que aparece el control de constitucionalidad como un mecanismo que confronta las normas y actos con la Constitucin, para verificar su concordancia o compatibilidad con aquella declarando la inconstitucionalidad y privando de eficacia a los que no lo estn. En el derecho constitucional argentino, la doctrina de la supremaca y el control constitucional derivan de principios contenidos en la constitucin formal y se efectiviza por medio del derecho judicial. Siguiendo a Humberto Quiroga Lavi en su obra Derecho
Constitucional, pgs. 434, 444, 637, 644, 646 y 742 , se puede afirmar que la
supremaca constitucional es la particular relacin de supra y subordinacin en que se encuentran las normas dentro de un ordenamiento jurdico determinado. En consecuencia este principio produce los siguientes efectos, en el marco de la estructura que estamos estudiando, surge el principio de unidad, a travs del cual se asegura la compatibilidad vertical y horizontal de las normas dentro del ordenamiento, las inferiores deben adecuarse a las superiores y las normas de igual nivel no pueden contradecirse pues la norma superior decide el conflicto. Asimismo surge el principio de razonabilidad, segn el cual las leyes deben ser instrumentos o medios adecuados (razonables) a los fines establecidos por la Constitucin. Como ya se dijera dentro de la estructura constitucional argentina la Unidad es un sub-principio del de Supremaca. Por unidad jurdica entendemos la compatibilidad existente entre normas, sean ellas de igual o de diferente nivel. De modo que definimos a la unidad por la compatibilidad, por cuanto, toda vez que aparezca una, surge la otra en relacin inescindible. Pero, en razn de que la compatibilidad puede darse en dos sentidos (vertical y horizontal), la unidad tambin se modaliza en forma equivalente. De modo que la Constitucin irradia, por va del principio de supremaca, la unidad de ordenamiento jurdico, obtenida gracias a la compatibilidad vertical, que deben poseer las normas de diferentes nivel en la estructura. En el otro sentido, la Constitucin por va de la compatibilidad horizontal, produce la unidad interna de las normas. Es evidente que la ley 25.453 en su art. 10 donde sustituye el art. 34 de la ley 24.156 desde ya adelanto, violenta el principio de razonabilidad, uno de los requisitos a los que debe ajustarse el denominado poder de polica de emergencia, pues no puede estar subordinada en su quantum una obligacin de naturaleza alimentaria, a un hecho aleatorio cual es la mayor o menor recaudacin mensual de los diversos recursos presupuestarios. As el art. 10 de la ley 25.453, establece que cuando los recursos presupuestarios estimados no fueren suficientes para atender la totalidad de los crditos presupuestarios previstos se reducir proporcionalmente los crditos correspondientes a la totalidad del Sector Pblico Nacional, de modo de mantener el equilibrio entre gastos operativos y recursos presupuestarios , luego dispone que dicha reduccin afectar a los crditos respectivos en la proporcin que resulte necesaria a tal fin aplicndose a los crditos destinados a atender el pago de retribuciones peridicas por cualquier concepto, incluyendo sueldos,
haberes adicionales, asignaciones familiares, jubilaciones, pensiones, as como aquellas transferencias que los organismos y entidades receptoras utilicen para el pago de dichos conceptos. Agrega la norma que la reduccin de los crditos presupuestarios que se dispongan de acuerdo con lo previsto en el artculo importar de pleno derecho la reduccin de las retribuciones alcanzadas, cualesquiera que fuera su concepto, incluyendo sueldos haberes, adicionales, asignaciones familiares, jubilaciones y pensiones. No debe olvidarse lo sostenido por la Corte Suprema ( Fallos 323:1551) respecto del deber de los jueces de actuar con extrema prudencia cuando del ejercicio de su actividad pueda resultar el desconocimiento de derechos de carcter alimentario; como (Fallos 323:2054) la inteligencia y aplicacin de las leyes previsionales debe hacerse de modo tal que no reduzcan al negar los fines superiores que persiguen dado que por el carcter alimentario y protector de los riesgos de subsistencia y ancianidad que poseen dichos beneficios, slo procede desconocerlos con suma cautela, asimismo (Fallos 323:2055) las jubilaciones y pensiones no constituyen una gracia o favor concedido por el Estado, sino que son consecuencia de la remuneracin que perciba el trabajador como contraprestacin laboral y con referencia con la cual efectu sus aportes y como dbito de la comunidad por dichos servicios. Puntualizo a V.S. que es evidente que la ley atacada no cumple con varios de los requisitos necesarios para que pueda considerrsela dentro del cauce constitucional, uno el ya mencionado precedentemente, el de la razonabilidad, otro el de la transitoriedad de la restriccin del derecho que se efecta implica la determinacin de un plazo cierto dentro del cual se restringe el derecho pertinente y adems atento a la naturaleza alimentaria del derecho previsional atacado, debe establecerse el monto de la reduccin o limitacin que lo afecte, ello tambin para permitir la injerencia jurisdiccional a fin de determinar la existencia de confiscatoriedad en la limitacin de la que sea objeto. Al respecto, transcribo el punto 7 del voto de los doctores Marco Aurelio Risola y Margarita Argas, in re ANTONIO S. DIAZ v. CAJA NACIONAL DE PREVISION PARA EL PERSONAL DEL ESTADO: Que no es doctrina de este pronunciamiento negar la emergencia, como necesidad sbita, urgente y transitoria, que no puede ser atendida por los recursos ordinarios de la legislacin en vigor y que exige al mximo la actuacin de los poderes de polica con que el Estado combate una calamidad pblica. Pero los poderes que la Constitucin otorga para establecer el orden y el imperio de las leyes no puede llegar al punto de derogarlas y de invalidar derechos sustanciales, mediante una afectacin indefinida o una supresin total de los beneficios que ellos reconocen.
De esta forma es evidente la inconstitucionalidad del art. 10 de la ley 25.453 en cuanto no determina los lmites de la cuanta de la afectacin de los derechos de naturaleza alimentaria, impidiendo ejercer el control jurisdiccional pertinente a los fines de determinar la razonabilidad de la misma y la existencia o no de una restriccin de naturaleza confiscatoria, agravada adems por la falta de limitacin temporal de la pretendida reduccin con lo cual dicha indefinicin vulnera de manera evidente los caracteres de integrales e irrenunciables de los derechos de la Seguridad Social consagrados en el art. 14 bis de la Constitucin Nacional. Asimismo la sustitucin del art. 195 del Cd. Procesal que dispone el art. 14 de la ley 25.453, al prohibir a los jueces decretar ninguna medida cautelar que afecte, obstaculice, comprometa, distraiga de su destino o de cualquier manera perturbe los recursos propios del Estado ni tampoco imponer a los funcionarios cargas personales pecuniarias implica a mi entender una flagrante y grosera violacin de los derechos constitucionales de peticin y defensa respecto del justiciable y un avasallamiento de la jurisdiccin intolerable y violatorio del estado de derecho, pues impedira el ejercicio de los deberes judiciales, ya que dicha norma habra de limitar las atribuciones del Poder Judicial que el art. 116 de la Const. Nac. establece. Es inconstitucional concluiremos la ley porque ataca derechos
adquiridos, ancestralmente por nuestra Carta Magna y la jurisprudencia generalizada atento su inviolabilidad (cfme. Caubet, Fernndez Madrid; La Constitucin - su jurisprudencia; Errepar; Buenos Aires; 1995; pg. 268). La discrimina contra un amplio grupo de pasivos obligndolos a disminuir su calidad de vida, violando la igualdad ante la ley (art. 16 C.N.), viola la defensa en juicio (art. 18 C.N.). La garanta constitucional de la defensa en juicio supone la posibilidad de recurrir ante algn rgano jurisdiccional y obtener de ellos sentencia til relativa a los derechos de los litigantes (C.S.J.N., CIA. ARENERA DE RIO LUJAN C/DE CASTRO, 1/9/92). Constituye la garanta individual bsica del sistema constitucional argentino la posibilidad otorgada a todos los habitantes de demandar ante los tribunales judiciales a obtener una decisin efectiva protectora de los derechos que se consideran conculcados, sea por una autoridad pblica, sea por un particular. Y choca frontalmente contra el art. 14 de la Const. Nac., el cual quedar defenestrado y fundamentalmente colisiona con el art. 28, y absolutamente contra el art. 75, incs. 22) y 23) de nuestra Ley Suprema.
De esta forma creemos acreditar la amenaza a los derechos enunciados, y que origina la presente accin, pues al reducir la demanda sus haberes previsionales a travs de una norma viciada en su gnesis deviene procedente la accin instaurada. Por lo expuesto solicito a V.S. la declaracin de inconstitucionalidad impetrada. X.- DERECHOS CONSTITUCIONALES CONCULCADOS: X.- A.- DIVISIN DE PODERES: La independencia de los Poderes del Estado constituye una de las columnas fundamentales del Estado de Derecho, que el art. 14 de la ley 25.453 viola de manera flagrante. Conculca el principio de Divisin de Poderes segn el cual el Poder Ejecutivo administra, el Poder Legislativo legisla, cuidando de no vulnerar la Ley Suprema, y el Poder Judicial juzga, custodiando la seguridad jurdica y las garantas constitucionales. No existe en nuestro derecho superioridad de un Poder del Estado sobre otro, sino un armonioso y equilibrado juego de poderes y funciones que, actuando en cada caso, son confrontados con la Constitucin. La subordinacin de uno u otro orden, est limitada por el ejercicio regular de las facultades que respectivamente les competen a los distintos rganos del gobierno, por lo que la actividad normativa del Poder Ejecutivo Nacional es siempre sublegal, sin habilitacin constitucional para incurrir en excesos reglamentarios que avancen sobre gneros legales y subviertan las polticas legislativas que regulan la materia especfica de que se trate. De all que disponer la prohibicin para los rganos jurisdiccionales de dictar medidas cautelares que comprometan recursos financieros del Estado, es inviable tcnicamente, reprochable jurdicamente, e indefendible epistemolgicamente y la surgida en esos trminos -como es la 25.453- es nula de nulidad absoluta, por violar manifiestamente la letra y el sentido de la Constitucin Nacional. X.- B.- PRINCIPIO DE RAZONABILIDAD: La garanta de razonabilidad debe estar siempre presente en los actos del Estado a tenor del artculo 28 de la Constitucin Nacional. La razonabilidad impone un cierto lmite que, si se traspasa, se cae en la zona opuesta de lo irrazonable o de lo arbitrario, y esto es lo que ha ocurrido con el decreto impugnado.
Si bien es cierto que la misin ms delicada de la justicia es la de saber mantenerse dentro de la rbita de su jurisdiccin, sin menoscabar las funciones que incumben a los otros poderes, de all no cabe derivar que el Poder Judicial pueda abstenerse de ejercer el control de razonabilidad. Lo contrario, deja de lado garantas que hacen a la esencia de nuestro sistema Republicano de Gobierno, cuya integridad pretende resguardarse por medio, entre otros, de la subsistencia de dichas garantas. Todas las medidas que se dicten en el marco de una emergencia econmica social deben gozar de razonabilidad. Se trata de asegurar lo previsto en el art. 28 de la Constitucin Nacional, cuando con dureza operativa y no slo programtica dispone: Los principios, garantas y derechos reconocidos en los anteriores artculos, no podrn ser alterados por las leyes que reglamenten su ejercicio segn lo expresa inspiracin de Alberdi. La razonabilidad es un principio general del derecho (Sardegna, Miguel A.; Rgimen de Contrato de Trabajo y Ley Nacional de Empleo). La ley 25.453 es irrazonable e inconstitucional. Desconoce, innecesaria e injustificadamente, derechos fundamentales, que el Poder Judicial debe amparar, porque de otro modo se tornaran ilusorias las garantas constitucionales que dicho Poder tutela. X.- C.- PRINCIPIO DE SEGURIDAD JURIDICA: La vigencia del Estado de Derecho supone, de manera cabal y completa, la facultad de ejercer los derechos y garantas reconocidos en todo el plexo normativo. Requiere un marco confiable, estable, de normas generales que se apliquen con continuidad, al cubierto de sorpresas, cambios o giros imprescindibles o caprichosos, que respondan a los intereses del gobernante de turno, y no al inters de la comunidad. La ley 25.463 (art. 10) subordina la obligacin del Estado de proveer a satisfacer un derecho constitucional de raigambre alimentada a un hecho aleatorio como es la recaudacin mensual que aquel obtenga. Reduciendo a fin de mantener el equilibrio entre gastos operativos y recursos presupuestarios". En la proporcin que fuere suficiente a tal fin. Es decir que cuando los recursos presupuestarios estimados no fueren suficientes, se reducirn los haberes previsionales de los beneficiarios -entre otros- a fin de mantener el equilibrio con los gastos operativos.
Esto es abierta y groseramente conculcar la histrica intangibilidad de los haberes previsionales, respaldado desde siempre por jurisprudencia de nuestro ms Alto Tribunal; como as tambin el principio de seguridad jurdica. En trminos generales, hay seguridad jurdica cuando el sistema ha sido regularmente establecido en trminos iguales para todos, mediante leyes susceptibles de ser conocidas, que slo se aplican a conductas posteriores -y no previas a su vigencia, que son claras, y que son dictadas adecuadamente por quien est investido de facultades para hacerlo . (Alterini, Atilio Anbal; La Seguridad Jurdica; Ed. Abeledo Perrot; Bs. As.; 1993). Cuando la administracin de justicia fracasa, la regularidad del Derecho es desplazada por la irregularidad caprichosa de la arbitrariedad y, por lo tanto, se afirma la irracionalidad, se consagra la imprevisibilidad y se arruina la confianza... El Derecho, en cuanto representa un medio para la realizacin de valores en la persona individual, slo puede llevarse a cabo donde existe seguridad jurdica. Porque, dicho con el expresivo estilo del jusfilsofo Luis Recasens Siches, sin seguridad jurdica no hay Derecho, ni bueno, ni malo, ni de ninguna clase . (Alterini, Atilio Anbal; op. cit.). X.- D.- TUTELA JUDICIAL EFECTIVA: El derecho a la tutela judicial efectiva, genuina expresin del derecho a la jurisdiccin, contiene dos elementos: a) uno formal, consistente en un proceso constitucional que tutele determinados derechos y garantas; b) otro sustancial, que procura que la cobertura jurisdiccional tenga la suficiente celeridad, para que la pretensin esgrimida no se torne ilusoria o de imposible cumplimiento, dejando al justiciable en un total estado de indefensin . (Figueruelo Burriez, Angela; El Derecho a la Tutela Efectiva; Ed. Tecnos; Espaa; 1990). La prohibicin para los rganos jurisdiccionales de dictar medidas cautelares que comprometan recursos financieros del Estado (art. 14 de la ley 25.453), es claramente inconstitucional violatoria del derecho elemental a que cualquier persona, natural o jurdica, pueda recurrir ante el juez en demanda de justicia. En este sentido se ha expresado la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en el caso del peridico La Nacin, de Costa Rica, del 23 de mayo de 2001, al sostener Que en el derecho internacional de los derechos humanos las medidas provisionales tienen fundamentalmente un carcter no slo cautelar en el sentido que preservan una relacin jurdica, sino tambin tutelar por cuanto protegen
derechos humanos; siempre y cuando se renan los requisitos bsicos de extrema gravedad y urgencia y de la prevencin de daos irreparables a las personas, las medidas provisionales se transforman en una verdadera garanta jurisdiccional de carcter preventivo. No hay derechos constitucionales simblicos. Ningn derecho fundamental es otorgado por el ordenamiento jurdico, ni siquiera por la propia Constitucin Nacional, que si puede reconocerlo y otorgar las garantas necesarias para su defensa y mantenimiento. El derecho a la tutela judicial efectiva no es exigida por disposicin expresa contemplada en la Carta Magna, no depende de texto normativo alguno que lo consagre, sino que ste, como derecho fundamental, existe por ser inherente a la persona humana y consustancial al Estado de Derecho. X.- E.- DERECHO A PETICIONAR A LAS AUTORIDADES : El artculo 14 de la Constitucin Nacional, consagra el derecho de ...peticionar a las autoridades.... La disposicin contenida en el artculo 14 de la ley 25.453 claramente conculca el citado derecho constitucional, al prohibir el dictado de medidas cautelares, obstaculizando el normal trmite stos y convirtindolo en un mero enunciado terico carente de operatividad. X.- F.- DERECHO DE PROPIEDAD: El concepto genrico de propiedad constitucional, que engloba todas sus formas posibles, ha sido acuado por la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nacin al sealar que el trmino propiedad utilizado por la Constitucin comprende todos los intereses apreciables que el hombre puede poseer fuera de si mismo, su vida y su libertad, con lo que todos los bienes susceptibles de valor econmico o apreciables en dinero alcanzan nivel de derechos patrimoniales rotulados unitariamente como derecho constitucional de propiedad (cfme. Bidart Campos, Germn J.; Manual de la Constitucin Argentina; Ediar; Buenos Aires; 1997; t. II; pg. 118). Esta concepcin del derecho de propiedad se ha reiterado en forma
indirecta en el inciso 19 del artculo 75, que dispone que el Congreso debe proveer lo conducente al progreso econmico con justicia social, por lo cual se indica la necesidad de correlacin entre ambos preceptos a lograr el bienestar general. El artculo 17 de la Constitucin Nacional establece el carcter de inviolable, no slo del derecho de propiedad, sino de todos los derechos individuales, en la interpretacin que tanto la doctrina como la jurisprudencia han hecho del
principio. Ni el Estado ni los particulares pueden privar a una persona, sea sta fsica o jurdica, de tales derechos arbitrariamente o restringirlos ms all de lo razonable, de forma tal que, en los hechos, signifique una anulacin o alteracin del derecho en cuestin. La doctrina y jurisprudencia han sostenido el carcter alimentario de las prestaciones previsionales; stas son indispensables para satisfacer las necesidades ordinarias del beneficiario. La ley cuestionada al establecer una rebaja del 13 % sobre los haberes jubilatorios, viola palmariamente la garanta de la inviolabilidad de la propiedad sustentada en nuestra Carta Fundamental. XI.- SOLICITA MEDIDA CAUTELAR: Con base en las razones expuestas, a los fines de asegurar el derecho de mi representado y no tornar ilusorio el pronunciamiento definitivo en el juicio, se solicita a V.S. se proceda a dictar medida de no innovar en su fase innovativa, atengo a que los descuentos ya han sido efectuados y lo que se busca es revertirlos en los trminos y con el alcance que luego se expresa y detallo. Asimismo solicito se ordenen la devolucin al interesado de todos los importes descontados indebidamente por la demandada al beneficiario. La medida que se requiere importa un verdadero anticipo de la garanta jurisdiccional que se otorga con el objeto de impedir que el derecho cuyo reconocimiento se pretende obtener pierda virtualidad durante el plazo que transcurra entre la articulacin del proceso y el pronunciamiento definitivo. As la doctrina nacional viene sosteniendo que: ...se ha abierto camino una tendencia amplia y flexible, que ha terminado por prevalecer, porque tanto o ms que al inters privado del solicitante, interesa al orden pblico que la justicia no fracase por la inevitable lentitud de su actuacin, motivo por el cual se viene resolviendo que es preferible un exceso en acordarlas que la parquedad en desestimarlas, ya que con ello se satisface el ideal de brindar seguridades para la hiptesis de triunfo (Morello, Passi Lanza, Sosa, Berizonce, Cdigos Procesales, ed. 1971, v. III). En el presente ocurren los presupuestos que ameritan la medida cautelar solicitada, a saber: verosimilitud en el derecho, peligro en la demora y la exigencia de contracautela, comunes a toda medida cautelar que surgen del art. 195 y concs. del Cd. Procesal.
XI.- A.- Requisitos comunes de la medida cautelar: A los efectos de un mejor orden expositivo, seguidamente se analizarn los requisitos comunes de toda medida cautelar que surgen de los artculos 195 y concordantes del Cd. Procesal 1) Verosimilitud en el derecho: El fumus bonis iuris surge inequvocamente de la descripcin de los derechos conculcados por la ley 25.453. La arbitrariedad de las medidas adoptadas es clara y manifiesta, desvirtuando cualquier principio de legalidad que pudiera contener. Sin perjuicio de destacar que lo expuesto hasta aqu permite considerar que en el caso existe verdadera certeza sobre la bondad del derecho alegado, no huelga recordar que la jurisprudencia de nuestro Mximo Tribunal ha sentado una importante pauta interpretativa para el anlisis de este requisito al sealar que las medidas cautelares no exigen de los magistrados el examen de certeza sobre la existencia del derecho pretendido sino slo su verosimilitud. Es ms, el juicio de verdad en esta materia se encuentra en oposicin a la finalidad de la medida cautelar, que no es otra que atender a aquello que no excede del marco de lo hipottico, dentro del cual, asimismo, agota su virtualidad . (cfme. C.S.J.N. in re EVARISTO IGNACIO ALBORNOZ C/NACION ARGENTINA - MINISTERIO DE TRABAJO Y SEGURIDAD SOCIAL S/MEDIDA DE NO INNOVAR, EL 20/12/84, Fallos 306:2060). El instituto de la prohibicin de innovar responde al principio de igualdad de las partes en el proceso, puesto que para que esta igualdad no desaparezca es necesario que no se altere o modifique la situacin del hecho preexistente por lo cual se tiende a evitar el dictado de sentencias ineficaces o de cumplimiento imposible, por las modificaciones que pudiera sufrir la situacin jurdica o fctica del objeto litigioso (CC Apelaciones de Santa Fe, sala III 28/06/93, E.D. 154-422). El fundamento de la medida de no innovar radica en la necesidad de mantener la igualdad de las partes en el juicio y evitar, que se convierta en ilusoria la sentencia que le ponga fin (Cmara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal, sala II, 17/09/87, E.D. 126-213; Cmara Federal de San Martn, 30/05/88, E.D. 129-542). La interpretacin en materia de medidas precautorias no debe ser restrictiva, por ser necesario tutelar las pretensiones articuladas a fin de que no resulten inocuos los pronunciamientos que den trmino al litigio (Cmara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala D, 19/07/65, E.D. 14-772).
Los requisitos necesarios para la procedencia de una medida precautoria se hallan relacionados entre si de tal modo, que a mayor verosimilitud del derecho cabe no ser tan exigentes en la gravedad e inminencia del dao y viceversa, cuando existe un riesgo de un dao de extrema gravedad e irreparabilidad, el rigor acerca del fumus se puede atenuar (C. N. Fed., sala Cont. Adm., 18/10/65, E.D. 13-778). Las razones de urgencia permiten atenuar el rigor del fumus, en una medida cautelar, cuando existe riesgo de un dao de gravedad (Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo Federal n 2, 31/08/89, E.D. 130-317). De no admitirse la medida de no innovar, el tribunal carecera de lapso mnimo que exige una evaluacin en la cual resultara inoficioso el pronunciamiento de la Corte Suprema de la Nacin (C.S.J.N., 9/12/91, E.D. 149-388). Como resulta de las medidas cautelares, ellas no exigen el examen de la certeza sobre la existencia del derecho pretendido sino slo de su verosimilitud. Es ms el juicio de verdad en esta materia se encuentra en oposicin a la finalidad del instituto cautelar, que no es otra que atender a aquello que no excede el marco de lo hipottico dentro el cual asimismo, agota su virtualidad (C.S.J.N., 22/12/92, E.D. 154-190). 2) Contracautela: En atencin a lo expresamente previsto en el artculo 199 del Cd. Procesal, es condicin de ejecutoriedad de la medida y por ende presupuesto de esta que la parte que la solicitare diera caucin suficiente. En el caso de autos y habindose ya justificado la verosimilitud del derecho de esta parte a demandar como lo hace, se estima pertinente y se ofrece desde ya la caucin juratoria del beneficiario. Solicito a V.S. tenga presente que el fundamento de la accin radica en la inconstitucionalidad de normas emanadas del Poder Legislativo, en franca violacin a la pirmide normativa (art. 31 de la Const. Nac.), con afectacin entre otros, del derecho de propiedad y de integralidad e irrenunciabilidad de los beneficios de la Seguridad Social, lo cual por surgir como evidente hace que la contracautela que se exija deba ser merituada con menor exigencia, atento el mayor grado de verosimilitud del derecho. XI.- B.- Requisitos propios de la medida de no innovar en su faz innovativa: Ellos son los siguientes.
1) Peligro en la demora: Conforme lo previsto en las normas procesales pertinentes debemos referirnos seguidamente al requisito de acreditar sumariamente el peligro de que si se mantuviera la situacin del derecho atacado, esta pudiera influir en la ejecucin de sentencia sobre el fondo del asunto, de tal modo que la convertira en ineficaz o de cumplimiento imposible, ya que los beneficiarios perjudicados, se habran visto privados de percibir sumas de dinero de carcter netamente alimentario e imprescindible para su subsistencia. Es por ello que la nica medida que tiende a proteger debidamente la defensa en juicio del demandante representado, que restablece el equilibrio de las partes en el proceso y que protege el objeto final del litigio es hacer lugar a la medida de no innovar peticionada en su faz innovativa. 2) Inexistencia de otro remedio idneo : Atento los trminos de la cuestin planteada no existe otra medida que posibilite impedir el dao que procura subsanar. Fcil se advierte que las restantes medidas cautelares expresamente individualizadas en el Captulo III) del Cd. Procesal no son aptas ni se ajustan a las necesidades del presente caso. El inters jurdico que fundamenta el otorgamiento de la medida cautelar solicitada encuentra su justificacin legtima en el peligro que implica que la duracin del proceso convierta en ilusorios los derechos reclamados. Como lo hemos referido en los acpites anteriores, se peticiona ante V.S. se ordene medida de no innovar en su fase innovativa, a fin de que el Estado Nacional a travs de la A.N.S.E.S.. se abstenga de efectuar las medidas decretadas objeto del presente, respecto del beneficiario representado, a cuyo efecto deber notificrsele expresamente la medida a la ANSES. XII.- SE SOLICITA EN SUBSIDIO MEDIDA AUTOSATISFACTIVA : Por su claridad meridiana y argumentacin irrebatibles, no podemos menos que hacer nuestras las argumentaciones del fallo leading case GERARDI, PEDRO ANGEL C/PODER EJECUTIVO NACIONAL S/AMPARO Y SUMARISIMO, expte. n 25.841/2001 - Juzgado Federal de Primera Instancia de la Seguridad Social n 7, de fecha 4 de agosto de 2001.
Sobre el particular estoy plenamente convencido que debo efectivizar en la presente causa la jurisdiccin oportuna, mediante la cual se procura, no slo dar a cada uno lo suyo sino hacerlo cuando corresponda, es decir en tiempo til para satisfacer adecuadamente las expectativas del justiciable. Recordemos que la medida autosatisfactiva constituye una especie del gnero de los procesos urgentes; las resoluciones anticiparais, el rgimen del amparo y del hbeas corpus, las propias medidas cautelares, etc. caracterizados todos por reconocer que en su seno el factor tiempo posee una relevancia superlativa. Nuestra Constitucin Nacional, como explica Peirano, en modo alguno desalienta la creacin pretoriana de tutelas diferenciadas que privilegien el actor tiempo en el proceso, puesto que incluye un procedimiento expeditivo de amparo dotado de un amplio campo de accin (cfme. art. 43 C.N.). Adems la presente causa se halla incluida en la excepcin prevista por el art. 11 de la ley 25.344. Ahora bien hasta tanto se regule legalmente la medida autosatisfactiva puede fundarse su dictado tanto en la potestad cautelar genrica, como en una vlida interpretacin analgica extensiva de las disposiciones legales que expresamente disciplinen diversos supuestos que pueden calificarse como medidas autosatisfactivas, pudiendo al respecto aplicarse analgicamente el Cd. Procesal de la Provincia del Chaco al respecto, donde se incluy este instituto. Es as que recurriendo a la actividad pretoriana del juez para concretar la operatividad de la institucin a aplicarse, fundndome para ello en lo establecido en los arts. 14 CN, derecho a peticionar; 18 CN derecho a la jurisdiccin; 33 CN garantas implcitas; 43 CN con la interposicin de la accin expedita y rpida, ya mencionada ms arriba, todo ello conforme a lo expresado por la CSJN en el caso SIRI cuando afirma que las clusulas que reconocen derechos y otorgan garantas son operativas. Adems por lo dispuesto en el art. 15 y 16 del Cdigo Civil: Los jueces no pueden dejar de juzgar bajo el pretexto de silencio, oscuridad o insuficiencia de las leyes, si la cuestin no puede solucionarse por la palabra ni por el espritu de la ley, atender los principios generales del derecho en las normas anlogas. Tambin se puede recurrir a la aplicacin de la previsin del art. 232 del CPN, respecto del poder cautelar genrico que prev la norma. De all que, como dice DE LOS SANTOS, respetamos las circunstancias por la cual se acude a las medidas cautelares para obtener el dictado de este tipo de medidas diferenciadas, ante la ausencia de previsin legal y encuadre procesal de estas ltimas radica en que las mismas participan de algunos caracteres propios de las medidas cautelares, especialmente de su carcter urgente, lo que la hace la va
procesal ms afn. La nota caracterstica de estos procesos urgentes consiste en la prevalencia en el trmite del principio de celeridad, que obliga a reducir la cognicin y a postergar la bilateralidad, con la finalidad de acortar una tutela eficaz y rpida (Conf. Revista de Derecho Procesal, separata N 1, medidas autosatisfactivas y medida cautelar). Advirtase que las medidas autosatisfactivas son soluciones
jurisdiccionales urgentes autnomos, despachables inaudita et altera pars y cuando media una fuerte probabilidad de que los planteos formulados sean atendibles, importando una satisfaccin definitiva de los requerimientos del postulante. Sobre este tema debe realizarse el pronunciamiento de la CSJN recado en la causa 2348 XXXII 7 de agosto de 1997 CAMACHO ACOSTA, Maximino C/ Grafi Graf SRL y Otros que como sealara Peyrano, si bien el Alto Tribunal utiliza una denominacin incorrecta al fallar la medida cautelar innovativa, no hace sino otorgar un anticipo de jurisdiccin. Partiendo de la premisa que la medida autosatisfactiva precede cuando media una fuerte probabilidad cercana a la certeza del derecho invocado, debo dilucidar si se da tal situacin en nuestro caso. En primer trmino es menester destacar que la ley 25.453, padece de uno de los males ms generalizados en la legislacin nacional contempornea, una poco feliz tcnica legislativa, suerte de pandemnium jurdico, al plasmarse como una miscelnea de diversas materias: fiscal, tributaria, procesal, previsional y constitucional, todo ello en un mbito bsicamente de carcter economicista. De esta forma es de suponer que la norma mencionada se halla encuadrada en el mbito de la ley 25.344 que declar en emergencia la situacin econmico-financiera del Estado Nacional, la prestacin de los servicios y la ejecucin de los contratos a cargo del sector pblico nacional, con vigencia por un ao a partir de su promulgacin. Como seala Armando N. Canosa (cfme. Pg. 28/29 Emergencia Econmica ley 25344, Errepar) respecto de los fallos de la Corte Suprema donde se establecen los requisitos a los que debe sujetarse el denominado poder de polica de emergencia cuando dice: de la lectura de los fallos mencionados y de la interpretacin que de los mismos hace la doctrina, surge clara la enumeracin de una serie de requisitos que hacen a la procedencia de la emergencia como forma
excepcional de ejercicio del definido poder de polica, los cuales pueden enunciarse de la siguiente manera: a) Debe haber una situacin de emergencia econmica, lo que pone en funcionamiento el denominado poder de polica de emergencia; b) la emergencia debe ser declarada por ley del Congreso; c) la declaracin de emergencia debe perseguir un fin pblico; d) las restricciones excepcionales de derechos deben ser transitorias; e) los medios elegidos por el legislador para superar la emergencia deben ser proporcionados al fin perseguido (la razonabilidad); f) las restricciones no pueden afectar a personas individuales o a grupos determinados de ellas, o sea, deben ser generales; y g) las garantas constitucionales no pueden quedar suspendidas en su totalidad, sino slo en lo que hace a su ejercicio. Debemos recordar que un fallo GUIDA LILIANA C/ PEN S/ EMPLEO PUBLICO G. 304 XXXIII, CSJN, el ms Alto Tribunal sostuvo: Esta Corte ha reconocido la constitucionalidad de la las leyes que suspenden los efectos de los contratos como los de las sentencias firmes, siempre que no se altere las sustancias de unos y otras (Fallos 243:467), a fin de proteger el inters pblico en presencia de desastres o graves perturbaciones de carcter fsico, econmico o de otra ndole (Fallos: 238:76). En estos casos el gobierno est facultado para sancionar las leyes que considera conveniente, con el lmite que tal legislacin sea razonable y no desconozca las garantas o restricciones que impone la Constitucin, no debe darse a las limitaciones constitucionales una extensin que trabe el ejercicio eficaz de los poderes del estado (Fallos 171:79) toda vez que acontecimientos extraordinarios justifican remedios extraordinarios (Fallos 238:76). La restriccin que impone el Estado al ejercicio normal de los derechos patrimoniales debe ser razonable, limitada en el tiempo, un remedio y no una mutacin en la sustancia o esencia del derecho adquirido por sentencia o contrato y est sometida al control jurisdiccional de constitucionalidad, toda vez que la emergencia a diferencia del estado de sitio no suspende las garantas constitucionales (Conf. Fallos 243:467) CC.9) Que la modificacin de los mrgenes de remuneracin en forma temporaria motivada por los efectos de una grave crisis internacional de orden financiero, no implica per se una violacin del art. 17 de la CN. Corresponde advertir en este aspecto que la ausencia de indemnizacin o compensacin por la reduccin salarial, no constituye el elemento determinante para juzgar la constitucionalidad de la norma, como parece entenderlo el a quo. Es que la relacin de empleo pblico se rige por pautas de derecho pblico en las que el Estado goza de prerrogativas que resultaran exorbitantes para el derecho privado, pero que componen el marco en que se desenvuelve su poder de gobierno. 10) que sin embargo esas prerrogativas no son absolutas e irrestrictas sino que encuentran su lmite en la imposibilidad de alterar a sustancia del contrato celebrado.
Asimismo no puedo dejar pasar por alto los sostenido por Germn B. Campos y Walter Carnota (Nota a fallo, Economicismo, Constitucin y SS, L.L. 1997D-226) cuando expresan: 10) es que la invocacin de los recursos disponibles o indisponibles no pueden pasar por un ejercicio discrecional del poder administrador que desconozca la canasta de valores sobre la que reposa nuestra organizacin constitucional. El economicismo exige en superley a la ejecucin presupuestaria desplazando a la suprelegalidad constitucional. Ningn plan econmico dispone de discrecionalidad para desembarazar el sistema hacendal de ingresos y egresos presupuestarios del anclaje que las finanzas pblicas deben tener y tienen con el derecho de la Constitucin y con el derecho internacional de los derechos humanos que comparte su mismo rango en la cabecera de nuestro ordenamiento jurdico. El orden socioeconmico que con mucha nitidez trae programada la constitucin reformada no admite convertirse en letra muerta a la que pueda esterilizar o dejar de lado un plan econmico a la ley presupuestaria. Gustara o no gustara a muchos la tnica de constitucionalismo social que impregna la Constitucin pero est presente y todos le debemos acatamiento. Tambin la economa 11) la manera concreta de realizar el designio economicista es precisamente conferir por medio de esta clase de artilugios, como destaca el juez Herrero, infecundidad al proceso judicial e insustancialidad a la sentencia que su resultado queda una reflexin final. El Estado es el primer obligado a no regalarse a si mismo privilegios que rien con la Constitucin; hasta diramos que son ofensivos al espritu del viejo art. 16 Es evidente que la cuestin planteada por el accionante cumple con los extremos mnimos necesarios para permitir la sustanciacin de la medida autosatisfactiva instalada. Si bien la autosatisfactiva tiene un carcter contencioso, y que esa contradiccin es la que dirime contiendas entre partes, ello no implica que haya necesidad imprescindible de la existencia de debate previo para que se de cumplimiento a los requisitos del estado de cognicin y contradiccin pues en el proceso meritorio, cual es en definitiva su naturaleza o que acontece es que se anticipa la decisin jurisdiccional, por la urgencia que reviste el tema a dilucidar. As en razn que la demora que puede ocasionar el trmite del debate en esta oportunidad, podra a llegar a desbaratar los derechos que al accionante pretende proteger y que han sido conculcados, lo que se posterga es el debate para una instancia posterior donde se le reconoce al destinatario de la resolucin
decretada el derecho a utilizar todas las vas procesales a su alcance para la pertinente impugnacin. Partiendo de la base que el control de constitucionalidad en nuestro orden jurdico es el judicial difuso, incumbe a todos los magistrados del territorio nacional su ejercicio, la Corte Suprema dispuso que el principio de supremaca constitucional impone a todo magistrado la obligacin de examinar las leyes en los casos concretos que se traen a su decisin comparndolos con el texto de la Constitucin para averiguar si guardan o no conformidad con esta y abstenerse a aplicarlas si las encuentra en oposicin a ella constituyendo esa atribucin moderadora uno de los fines supremos y fundamentales del Poder Judicial Nacional y una de las mayores garantas con que se ha entendido asegurar los derechos consagrados en la Constitucin contra los abusos posibles involuntarios de los poderes polticos (Fallos 33:162; 267; 215;215;313;1513). Es de hacer notar que el derecho constitucional argentino no ha previsto especie alguna de pleitos en los que los jueces puedan fallar con prescindencia del texto constitucional, en la medida en que la declaracin de inconstitucionalidad de las normas tiende a preservar el ejercicio equilibrado de los poderes establecidos en la Ley Fundamental (Conf. El control de inconstitucionalidad en la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia por Mara A. Bottoni y Marcelo J. Navarro, La Ley, diario viernes 22 de diciembre de 2000. Adems es necesario que exista peticin de parte perjudicada por la norma que se impugna, para que proceda en el derecho pblico nacional la declaracin de inconstitucionalidad ya que se presume la validez de los actos estatales sin perjuicio de ello advierto que esta necesidad de peticin de parte, no se ha exigido cuando la norma o su exceso reglamentario, colisionar con la autonoma funcional del Poder Judicial. En estos actuados se da cumplimiento al requisito de la peticin de parte, con lo cual se habilita la capacidad jurisdiccional para tal menester, por ende habr de expedirme al respecto. Por ello poniendo el acento en el valor eficacia y en el carcter instrumental de las normas procesales, en el sentido que su finalidad radica en la efectividad de los derechos sustanciales, y como ampliacin de la proteccin cautelar a fines de evitar el riesgo de una sentencia favorable pero ineficaz por tarda deviene procedente dictar la pertinente resolucin con carcter de medida autosatisfactiva en la presente causa por medio de la cual declar la
inconstitucionalidad de los arts. 10 y 14 de la ley 25.543 y orden la demandada -ANSES- abstenerse de aplicar la norma y declararla inconstitucional y respecto del haber previsional del accionante, debiendo previamente prestar caucin juratoria, por ante la Actuaria. Por lo expuesto, solicito de considerarlo V.S. procedente hacer lugar a la medida autosatisfactiva incoada. XIII.- PLANTEA EL CASO FEDERAL: Se formula expreso planteo del caso federal para el supuesto improbable de que las instancias ordinarias no acogieran la accin deducida formal o sustancialmente, conforme a las prescripciones del artculo 14 de la ley 48, a fin de articular oportunamente el recurso extraordinario ante la Corte Suprema de Justicia de la Nacin, por violacin a los preceptos constitucionales individualizados en esta presentacin. Si bien el ms Alto Tribunal ha considerado en general que las decisiones sobre medidas precautorias -por carecer del carcter de sentencias definitivas- no son susceptibles de remedio federal, en algunos casos se ha resuelto la apertura fundando tal situacin en que la demora podr tornar ilusoria el derecho. As se equiparan a tal, los pronunciamientos que producen gravamen irreparable an cuando no fueren sentencias definitivas y an cuando fuesen pronunciamientos anteriores a ellas (cfme. Ymaz y Rey en nota 114 de la pg. 203 de El Recurso Extraordinario; Buenos Aires; 2 ed.). En igual sentido, se formula la reserva del caso federal, en los trminos del artculo 14 de la ley 48 en relacin al fondo de la cuestin por entenderse que todo fallo que no declarase la nulidad e inconstitucionalidad de los derechos peticionados vulnerara los derechos y garantas de mi representado consagrado en el art. 14 CN, igualdad ante la ley (art. 16 CN), de propiedad (art. 17 CN), de defensa en juicio (art. 18 CN), de reserva (art. 19 CN), la pirmide constitucional (art. 31 CN), la divisin de poderes (art. 99 CN). Conforme lo dispuesto por el art. 75, inc. 22 de la ley CN, habindose violado los arts. 6, 7, 11, 12 y 14 de la Declaracin Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, art. 22 y 23 de la Declaracin Universal de Derechos Humanos, art. 17 y siguientes del Pacto de San Jos de Costa Rica, arts. 6, 7 y concordantes del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos, art. 18 y siguientes de la Convencin sobre Derechos del Nio, expresamente se reservan los derechos de ocurrir a los Tribunales Internacionales en procura de su salvaguarda.
XIV.- PRUEBA: Se ofrece en tal sentido: 1. Documental: Recibos de cobro jubilatorio. XV.- DERECHO: El derecho que asiste a mi mandante se asienta en las siguientes normas: Constitucin Nacional (arts. 14, 14 bis, 16, 17, 28, 31, 33, 43 y 75 incs. 22 y 23); ley 19.549; ley 24.655; jurisprudencia y doctrina aplicables. XVI.- PETITORIO: Por todo lo expuesto a V.S. solicito: 1. Se me tenga por presentado, por parte en el carcter invocado y por constituido el domicilio procesal indicado. 2. Se agregue la documentacin acompaada, reservndose los originales en la caja fuerte del Juzgado, a cuyo fin se adjuntan las copias pertinentes para glosar al expediente. 3. Se dicte la medida de no innovar en su fase innovativa, en los trminos con el alcance peticionado supra. De considerarse procedente se haga lugar en subsidio a la medida autosatisfactiva. 4. Oportunamente se haga lugar a la accin en todas sus partes. Con costas en el caso de oposicin. 5. Se tenga por planteado el caso federal. 6. Se ordenen devolver al actor los importes indebidamente descontados de sus percepciones de beneficios por la demandada. Proveer de conformidad SERA JUSTICIA