Compañias Bananeras
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CRISIS
etc. Como en el caso de las compaas mineras, esas exenciones eran acordadas por un trmino renovable de veinte aos. Adems de la Vaccaro, ya citada, otras compaas, como la Cuyamel Fruit Company y la United Fruit Company, se beneficiaron de esa poltica. Es interesante ver, brevemente, a travs del desarrollo de estas compaas, como se aceleraba el proceso de concentracin que finalizara en el monopolio absoluto. La Cuyamel Fruit Company fue fundada en 1911 por Samuel Zemurray. En 1912 esta compaa obtena la concesin de 10.000 hectreas de tierra en la regin de Cuyamel, en el norte de Honduras (decreto No.78 del 4 de marzo de 1912). A esta concesin vinieron a agregarse las 5.000 hectreas compradas por Zemurray a William Streich. La United Fruit Company haba sido fundada en 1899 bajo las leyes del Estado de New Jersey, hasta poco antes de 1914 su actividad en Honduras se limitaba a la comercializacin de los bananos, y eso, por medio de compaas intermediarias, como laSalvador Oteri y la Michel Machecca, establecidas en La Ceiba. Desde 1905, sin embargo, esta se aseguraba el control, que conserv hasta 1918, del 46% de las acciones de la Vaccaro Brothers Company. Desde 1905, igualmente, esta detentaba el 60% del capital de la HubbardZemurray Company, la primera de las compaas creada por Zemurray; ms tarde, hacia el comienzo de la primera guerra mundial, la United Fruit Company adquiri el 35% de las acciones de la segunda compaa creada por Zemurray, la Cuyamel Fruit Company. En un segundo momento, la United Fruit Company pas de la comercializacin a la produccin directa de los bananos en Honduras obteniendo concesiones a nombre de dos compaas que fund a este efecto en 1912: la Tela Railroad Company y laTrujillo Railroad Company. En 1914, esas dos compaas detentaban en conjunto 15.000 acres de tierra, o sea ms de 6.000 hectreas. En contrapartida de las tierras otorgadas por el Estado hondureo, la Tela Railroad Company se comprometi a construir 12 kilmetros de lnea ferroviaria por porcin de 6.000 hectreas concedidas, y la Trujillo Railroad Company, 20 kilmetros por la porcin de 10.000 hectreas cedidas. La United Fruit Company se haba convertido de este modo en un verdadero imperio, un Estado en el Estado en cada pas donde esta desarrollaba sus operaciones. Esta compaa posea su propia flota (la White Fleet) y, hacia 1913, se evaluaba en alrededor de 852.000 acres, casi 345.000 hectreas, las tierras que detentaba en Amrica Latina. Era adems propietaria de 669 millas de lnea ferroviaria en los diferentes pases de la regin. Se le consideraba con toda razn la compaa americana ms importante de la Amrica Central. Sin embargo, la prensa hondurea, sobre todo la liberal, criticaba muy a menudo la poltica demasiado generosa del Estado respecto a las compaas extranjeras. Por ejemplo, El Nuevo Tiempo, de Tegucigalpa, vea en ello una fuente de toda clase de males: polticos, econmicos, y tambin morales. Las demandas de concesiones de las grandes compaas despertaban, segn ese peridico, la ambicin de los funcionarios y los llevaba a la corrupcin. Muy a menudo, deca, se ha abusado de la consideracin maliciosa de nuestros altos funcionarios pblicos, y se ha estigmatizado la frmula corriente: ya s que tendr que gastar algunos pesos y obsequiar algunas copas de champagne para obtener la concesin.
De hecho, la poltica de concesiones se revelaba como un mercado de abusos y timos, era adems un fracaso para el Estado hondureo. Como era de esperarse, las compaas beneficiarias de las concesiones solo instalaban la infraestructura en la medida en que sus necesidades en intereses lo requeran. El ministro americano en Honduras, John D. Ewin, lo observaba desde 1915: en mi opinin, ellos nunca se propusieron cumplir con esto desde el principio. Ellos se propusieron usar esas lneas para sus propios propsitos particulares, en el transporte de la fruta de sus plantaciones a la costa y agotar el kilometraje estipulado. Ewin agregaba que el gobierno hondureo estaba conciente de su impotencia frente a las grandes compaas, listas a emplear todos los medios, comprendida la corrupcin y el fomento de insurrecciones, para defender sus posiciones. Tales temores -deca Ewin- no carecan de fundamento, bastaba recordar a Samuel Zemurray y sus actividades de 1911: El contribuy con 100.000 dlares y () sus naves transportaron armas y municiones para aprovisionar el movimiento revolucionario que puso al General Manuel Bonilla en el poder.
Sntomas
Una persona con trastorno de personalidad antisocial puede: Ser capaz de actuar jovial y encantador Ser buena para adular y manipular las emociones de otras personas Quebrantar la ley constantemente Descuidar su propia seguridad y la de los dems Tener problemas de consumo de drogas Mentir, robar y pelear con frecuencia No mostrar culpa ni remordimiento Estar a menudo enojado o ser arrogante
TRASTORNO DE PERSONALIDAD NEURASTENICA El trmino neurosis fue propuesto por el mdico escocs William Cullen en 1769 en referencia a los trastornos sensoriales y motores causados por enfermedades del sistema nervioso. En psicologa clnica, el trmino se usa para referirse a trastornos mentales que distorsionan el pensamiento racional y el funcionamiento a nivel social, familiar y laboral adecuado de las personas. Existe una confusin generalizada sobre el trmino neurosis. Por un lado se aplica, comosntoma, a un conjunto heterogneo de trastornos mentales que participan de mecanismos inadaptativos ligados a la ansiedad. Por otra parte, su uso popular (como sinnimo de obsesin, excentricidad o nerviosismo) ha provocado su extensin a terrenos no estrictamente ligados a la enfermedad mental. El trmino clsico hace referencia a un trastorno mental sin evidencia de lesin orgnica que se caracteriza por la presencia de un nivel elevado de angustia y una hipertrofia disruptiva de los mecanismos compensadores de la misma. El sujeto mantiene un adecuado nivel deintrospeccin y conexin con la realidad, pero presenta la necesidad de desarrollar conductas repetitivas y en muchos casos inadaptativas con objeto de disminuir el nivel de estrs. Se trata, en realidad, de un rasgo caracterial que acompaa al sujeto durante toda su vida, de gravedad muy variable, desde grados leves y controlables hasta situaciones gravemente incapacitantes que pueden llegar a precisar hospitalizacin. Los psicoanalistas afirman que, para protegerse de la angustia, las personas recurren a mecanismos de defensa como la represin, laproyeccin, la negacin, la intelectualizacin y el desplazamiento, entre otros. Cuando se observan patrones crnicos de mala adaptacin que simulen una neurosis, es posible que se trate de un trastorno de personalidad. Para identificar la neurosis, existen distintas pruebas psicolgicas.