Semana 13 - La Cenicienta - Carnelutti
Semana 13 - La Cenicienta - Carnelutti
Semana 13 - La Cenicienta - Carnelutti
1.
ABSORCIN
DE
LA
CIENCIA
DEL
EN LA CIENCIA DEL DERECHO PENAL
PROCESO
PENAL
Haba una vez tres hermanas que tenan en comn, por lo menos, uno
de sus progenitores: se llamaban la ciencia Del derecho venal, la ciencia
del -proceso penal y la ciencia del proceso civil. Y ocurri que la
segunda, en comparacin con ls otras dos, que eran ms bellas y
prsperas, haba tenido una infancia y una adolescencia desdichadas.
Con la primera le toc dividir durante mucho tiempo la misma habitacin;
y aqulla retuvo para s lo bueno y lo mejor. Esta comunidad no dejaba
de tener sus buenas razones: desde el primer momento en que me
ocurri tener que encarar las relaciones entre derecho y proceso civil y
derecho y proceso penal (en la prolusin paduana de 1915, que nunca se
imprimi), me impresion su profunda diversidad; en la conclusin,
manifestada ms tarde, de que todo el derecho penal es procesal, y en la
construccin de su sistema al modo de una triloga, de la cual los actos
segundo y tercero son el juicio y la expiacin, ha encontrado esta idea su
desenvolvimiento. Pero ello quiere decir que el estudio del derecho penal
tiene una amplitud que se presta mal a ser contenida en el cuadro de una
sola enseanza, tanto ms cuanto que la duracin de ella se limita a un
ao; lo cual, a lo menos por lo que ocurra en Padua, hace medio siglo,
se resolva en una supresin, o poco menos, del estudio del proceso.
Ms cenicienta todava !
2.
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3.
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la ciencia del proceso penal, diran los ingleses, una leading position.
Nadie que lea desapasionadamente a CHIOVENDA o a MASSARI, que
son los ms destacados nombres en uno o en otro campo, puede
sustraerse a la impresin de que el cultivador del proceso penal sea
conducido de la mano por el otro. Ciertamente, tambin la ciencia del
derecho procesal penal tiene ltimamente recorrido un buen trayecto de
camino ; pero el progreso, en un noventa por ciento, consiste en la
adaptacin a sus fenmenos de los conceptos construdos para el
estudio del proceso civil. Aqu tendra verdaderamente razn BETTIOL
para hablar de pancivilismo, si su atencin se dirigiese, con gran ventaja
para nosotros, del delito hacia el proceso. En una palabra, la teora del
proceso penal se halla todava en una fase de neta dependencia
respecto de la teoria del proceso civil : donde se trata de superar el
empirismo, sirven casi exclusivamente los esquemas importados. De una
elaboracin indgena no digo que no haya huellas, pero s que son casi
irrelevantes; y menos todava de una exportacin del campo del proceso
penal al del proceso civil.
La cenicienta, justamente, se contentaba con los vestidos desechados
por sus ms afortunadas hermanas.
4.
por el otro. Somos siempre aquellos qui habent oculos et non vident,
hdbent aures et non audiunt [que tienen ojos y no ven, tienen odos y no
oyen]. Quin de nosotros llega a apreciar ms el ser que el haber?
Hasta al buen joven, obediente a todos los mandamientos de la ley de
Dios, cuando el Maestro lo invit, para conquistar el ser, a dejar el haber,
le falt la fuerza para seguirlo. De los dos verbos que contienen todo el
sabor de la vida, uno, que habra de ser el siervo, ocupa en el corazn de
los hombres el puesto del dueo; el otro, que debiera ser el dueo, es
tratado, en l, como siervo. Despus de esto, podr sorprender a nadie
que a la cincia del proceso penal le haya sido reservada la suerte de la
Cenicienta?
5.