Cuadernillo Poesia
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Cuadernillo Poesia
4to ao
Prof.
Dolores Gonzlez
UNIDAD V: LA POESA
La poesa: Expresividad del lenguaje. La funcin esttica. Autoreferecialidad e
introspeccin. El yo lrico. El verso y la prosa. La mtrica. La poesa clsica y
poesa moderna. Vanguardia esttica y vanguardia poltica. Estilo potico y la
esttica de cada poeta.
Antologa:
Octavio Paz, poetas surrealistas, Julio Cortzar, Alejandra Pizarnik, Oliverio
Girondo, Bertolt Brecht, Mario Benedetti, Pablo Neruda, Eduardo Galeano,
Haikus.
POESA Y POEMA
Octavio Paz
La poesa es conocimiento, salvacin, poder, abandono. Operacin capaz de cambiar al mundo, la actividad potica es revolucionaria
por naturaleza; ejercicio espiritual, es un mtodo de liberacin interior.
La poesa revela este mundo; crea otro. Pan de los elegidos; alimento
maldito. Asla; una invitacin al viaje; regreso a la tierra natal.
Inspiracin, respiracin, ejercicio muscular. Plegaria al vaco, dilogo
con la ausencia: el tedio, la angustia y la desesperacin la alimentan.
Oracin, letana, epifana, presencia. Exorcismo, conjuro, magia.
Sublimacin, compensacin, condensacin del inconsciente. Expresin
histrica de razas, naciones, clases. Niega a la historia: en su seno se
resuelven todos los conflictos objetivos y el hombre adquiere al fin
conciencia de ser algo ms que trnsito. Experiencia, sentimiento,
emocin, intuicin, pensamiento no-dirigido. Hija del azar; fruto del
clculo. Arte de hablar en una forma superior; lenguaje primitivo,
obediencia a las reglas; creacin de otras. Imitacin de los antiguos, copia
de lo real, copia de una copia de la Idea. Locura, xtasis, logos. Regreso a
la infancia, coito, nostalgia del paraso, del infierno, del limbo. Juego,
trabajo, actividad asctica. Confesin. Experiencia innata. Visin,
msica, smbolo. Analoga: el poema es un caracol en donde resuena la
msica del mundo, y metros y rimas no son sino correspondencias, ecos,
de la armona universal. Enseanza, moral, templo, revelacin, danza,
dilogo, monlogo. Voz del pueblo, lengua de los escogidos, palabra del
solitario. Pura e impura, sagrada y maldita, popular y minoritaria,
colectiva , personal, desnuda y vestida, hablada, pintada, escrita, ostenta
todos los rostros pero hay quien afirma que no posee ninguno: el poema
es una careta que oculta el vaco, prueba hermosa de la superflua
grandeza de toda obra humana!
Cmo no reconocer en cada una de estas frmulas al poeta que
las justifica y que al encarnarlas les da vida? Expresiones de algo vivido y
padecido, no tenemos ms remedio fue adherimos a ellas -condenados a
abandonar la primera por la segunda y a sta por la siguiente. Su misma
Poesa Surrealista
El Surrealismo (en francs: surralisme; sur [sobre, por encima] ms
ralisme [realismo]) o superrealismo es un movimiento artstico y
literario surgido en Francia a partir del dadasmo, en la dcada de los
aos 1920, en torno a la personalidad del poeta Andr Breton. Buscaba
descubrir una verdad, con escrituras automticas, sin correcciones
racionales, utilizando imgenes para expresar sus emociones, pero que
nunca seguan un razonamiento lgico.
El cadver exquisito
(Creacin colectiva de poetas surrealistas)
A la salud de la serpiente
I
Yo canto el calor con rostro de recin nacido, el calor
desesperado.
II
Le toca al pan romper al hombre, le toca ser la belleza
del amanecer.
IV
En la ronda de la golondrina una tormenta se forma, un
jardn se disea.
V
Siempre habr una gota de agua que dure ms que el sol
sin que el ascendiente del sol sufra por eso.
VII
Lo que viene al mundo para no trastornar nada, no
merece ni consideracin ni paciencia.
XI
T hars del alma que no existe, un hombre mejor que
ella.
XX
No te encorves sino para amar. Aun muerto, sigues
amando.
XXIV
Si habitamos un relmpago, all est el corazn de lo
eterno.
XXVI
La poesa es de todas las aguas claras la que menos se
demora ante los reflejos de sus puentes.
Poesa, vida futura en el interior del hombre que ha
ganado en calidad.
Del libro Le Pome pulvris
I.
Seprate de tus compaeros en la estacin.
Vete de maana a la ciudad con la chaqueta abrochada,
bscate un alojamiento, y cuando llame a l tu compaero,
no le abras. Oh, no le abras la puerta!
Al contrario,
borra todas las huellas.
Si encuentras a tus padres en la ciudad de Hamburgo,
o donde sea,
pasa a su lado como un extrao, dobla la esquina, no los
reconozcas.
Baja el ala del sombrero que te regalaron.
No muestres tu cara. Oh, no muestres tu cara!
Al contrario,
borra todas las huellas.
Come toda la carne que puedas. No ahorres.
Entra en todas las casas, cuando llueva, y sintate
en cualquier silla,
pero no te quedes sentado. Y no te olvides el sombrero.
Hazme caso:
borra todas las huellas.
Lo que digas, no lo digas dos veces.
Si otro dice tu pensamiento, nigalo.
Quien no dio su firma, quien no dej foto alguna,
quien no estuvo presente, quien no dijo nada,
cmo puede ser cogido?
Borra todas las huellas.
Cuando creas que vas a morir, cudate
de que no te pongan losa sepulcral que traicione donde ests,
8
4.
Yo s lo que necesito.
Simplemente me miro en el espejo
y veo que tengo que dormir ms;
el hombre que tengo me lastima.
Si me oigo cantar, me digo:
hoy estoy contenta; esto es bueno
para la piel.
6.
l recorra la calle con el sombrero en la nuca.
l los miraba a todos a los ojos y saludaba.
l se detena frente a todas las vidrieras.
(Y todos saben que est perdido!)
Usted debera haberlo odo cuando dijo, que todava
tena algo que hablar seriamente con su enemigo.
Que el tono de voz de su casero no lo incomodaba
que la calle estaba mal barrida.
(Sus amigos ya lo dan por perdido!)
Por cierto que todava quiere construir una casa.
Por cierto que todava quiere acostarse con todas.
Por cierto que no quiere juzgar con apuro.
(Ay, ya est perdido, ya nada lo respalda!)
(Eso ya se lo he odo decir al la gente.)
Me esmero
en mantenerme fresca y firme,
pero no me esfuerzo.
Eso genera arrugas.
No tengo nada para regalar,
pero me alcanza con mi racin.
Como con medida; vivo despacio;
soy partidaria de lo moderado.
(As se esforzaba gente que yo he viste.'
8.
Abandonen la ilusin de que harn
Una excepcin con ustedes.
Lo que les dijo su madre
no era un compromiso.
Dejen sus contratos en el maletn.
Aqu no sern respetados.
Abandonen sus esperanzas
de estar destinados a ser presidentes.
Pero pongan todo su empeo.
Van a tener que esforzarse mucho
para que los toleren en la cocina.
Todava les falta aprender lo elemental.
Y lo elemental es que:
Van a acabar con ustedes..
No piensen en lo que tienen para decir:
No les van a preguntar.
Ya estn todos los comensales
Lo que hace falta es carne picada.
Pero esto no debe Desalentarlos!
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Arena
ARENA,
y ms arena,
y nada ms que arena.
De arena el horizonte.
El destino de arena.
De arena los caminos.
El cansancio de arena.
De arena las palabras.
El silencio de arena.
Arena de los ojos con pupilas de arena.
Arena de las bocas con los labios de arena.
Arena de la sangre de las venas de arena.
Arena de la muerte...
De la muerte de arena.
Nada ms que de arena!
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Y T tambin
quejido,
intil,
extraviado,
de tranva ya loco
de trajes
y de horarios;
adentro de mis venas,
en mi tiempo,
en mis huesos,
mezclado a mi silencio,
a mi pulso,
a mi fiebre,
a todo lo que impregna
esta vigilia estril,
con ritmo de gotera,
de persiana que se abre
y golpea, golpea,
aqu,
adentro de lo hueco,
donde estoy confinado,
recluido entre tendones,
asomado a los prpados,
aqu,
entre azoteas,
ventanas,
moribundos,
vajillas que se baan,
rodeado de papeles,
de todo lo que sufre
mi presencia obstinada:
los libros,
la ceniza,
los lpices,
la silla,
el pelo y la dulzura
que se acerca, y me mira,
la mesa
y el ropero,
con sus trajes ahorcados,
la cama que me espera
el velamen tendido
anclada en la penumbra,
en el sueo?,
en la vida?,
las cortinas,
la alfombra,
que miro y me entristece
cuando voy a sacarme,
con calma,
los botines,
y llega algn recuerdo
fragmentario,
perdido:
las plazas de mi infancia,
un camino,
una casa;
las manos,
las caderas,
las piernas amputadas
de mujeres diluidas
por las horas,
los ruidos,
que suelen detenerme,
de pronto,
en la certeza
de haberlas posedo
entre muebles extraos;
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5
LA lluvia,
con frecuencia,
penetra por mis poros,
ablanda mis tendones,
traspasa mis arterias,
me impregna,
poco a poco,
los huesos,
la memoria.
Entonces,
me refugio
en un rincn cualquiera
y estirado en el suelo
escucho,
durante horas,
el ritmo de las gotas
que manan de mi carne,
como de una gotera.
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cornamusa, heresiarca,
sabandija, seuelo,
artilugio, epiceno;
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El puro no
Mi luma
El no
el no invulo
el no nonato
el noo
el no poslodocosmos de impuros ceros noes que noan noan
noan
y nooan
y plurimono noan al morbo amorfo noo
no dmono
no deo
sin son sin sexo ni rbita
el yerto inseo noo en unisolo amodulo
sin poros ya sin nodulo
ni yo ni fosa ni hoyo
el macro no ni polvo
el no ms nada todo
el puro no
sin no
Mi lu
mi lubidulia
mi golocidalove
mi lu tan luz tan tu que me enlucielabisma
y descentratelura
y venusafrodea
y me nirvana el suyo la crucis los desalmes
con sus melimeleos
sus eropsiquisedas sus decbitos lianas y dermiferios limbos y
gormullos
mi lu
mi luar
mi mito
demonoave dea rosa
mi pez hada
mi luvisita nimia
mi lubsnea
mi lu ms lar
ms lampo
mi pulpa lu de vrtigo de galaxias de semen de misterio
mi lubella lusola
mi total lu plevida
mi toda lu
luma
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Tropos
Toco
toco poros
amarras
calas toco
teclas de nervios
muelles
tejidos que me tocan
cicatrices
cenizas
trpicos vientres toco
solos solos
resacas
estertores
toco y mastoco
y hada
Prefiguras de ausencia
inconsistentes tropos
qu t
qu qu
qu quenas
qu hondonadas
qu mscaras
qu soledades huecas
qu s qu no
qu sino que me destempla el toque
qu reflejos
qu fondos
qu materiales brujos
qu llaves
qu ingredientes nocturnos
qu fallebas heladas que no abren
qu nada toco
en todo
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(http//www.geocities.com/Wellesley/4124/ o
amediavoz.com/pizarnik.htm)
Alejandra Pizarnik
fue una destacada poetisa argentina, eximia
representante local del surrealismo potico.
Obtuvo su ttulo en Filosofa y Letras por la Universidad de Buenos Aires
y posteriormente viaj a Paris hasta 1964 donde estudi Literatura
Francesa en La Sorbona y trabaj en el campo literario colaborando en
varios diarios y revistas con sus poemas y traducciones de Artaud y
Cesair, entre otros.
Es una de las voces ms representativas de la generacin del sesenta y es
considerada como una de las poetas lricas y surrealistas ms importantes
de Argentina. En 1972 falleci como consecuencia de una profunda
depresin.
Tiempo
a Olga Orozco
Yo no s de la infancia
ms que un miedo luminoso
y una mano que me arrastra
a mi otra orilla.
Mi infancia y su perfume
a pjaro acariciado.
La Carencia
Yo no s de pjaros,
no conozco la historia del fuego.
Pero creo que mi soledad debera tener alas.
18
18
y por qu
tengo miedo
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a Laure Bataillon
Continuidad
No nombrar las cosas por sus nombres. Las cosas tienen bordes
dentados, vegetacin lujuriosa. Pero quin habla en la habitacin
llena de ojos. Quin dentellea con una boca de papel. Nombres que
vienen, sombras con mscaras. Crame del vaco dije. (La luz se
amaba en mi oscuridad. Supe que no haba cuando me encontr
diciendo: soy yo.) Crame dije.
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a Ester Singer
Vida, mi vida, djate caer, djate doler, mi vida,
djate enlazar de fuego, de silencio ingenuo,
de piedras verdes en la casa de la noche,
djate caer y doler, mi vida.
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XII
Pero el silencio es cierto. Por eso escribo. Estoy sola y escribo. No, no
estoy sola.
Hay alguien aqu que tiembla.
XIX
Deslumbramiento del da, pjaros amarillos en la maana. Una mano
desata tinieblas, una mano arrastra la cabellera de una ahogada que no
cesa de pasar por el espejo. Volver a la memoria del cuerpo, he de
volver a mis huesos en duelo, he de comprender lo que dice mi voz
Fronteras intiles
XIII
Aun si digo sol y luna y estrella me refiero a cosas que me suceden.
Y qu deseaba yo?
Deseaba un silencio perfecto.
Por eso hablo.
un lugar
no digo un espacio
hablo de
qu
XIV
La noche tiene la forma de un grito de lobo.
hablo de lo que no es
hablo de lo que conozco
XV
Delicia de perderse en la imagen presentida. Yo me levant de mi
cadver, yo fui en busca de quien soy.
Peregrina de m, he ido hacia la que duerme en un pas al viento.
XVI
Mi cada sin fin a mi cada sin fin en donde nadie me aguard pues al
mirar quin me aguardaba no vi otra cosa que a m misma.
XVII
Algo caa en el silencio. Mi ltima palabra fue yo pero me refera al
alba luminosa.
no el tiempo
slo todos los instantes
no el amor
no
s
no
un lugar de ausencia
un hilo de miserable unin.
XVIII
Flores amarillas constelan un crculo de tierra azul. El agua tiembla
llena de viento.
20
Los amantes
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hubiera sucedido.
Y no tener que acordarme de este olvido que sube
para nada, para borrar del pizarrn tus muequitos
y no dejarme ms que una ventana sin estrellas.
Soledades
A veces no me siento
tan solo
si imagino
mejor dicho si se
que mas all de mi soledad
y de la tuya
otra vez estas vos
aunque sea preguntndote a solas
que vendr despus
de la soledad.
No te salves
No te quedes inmvil
al borde del camino
no congeles el jbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
slo un rincn tranquilo
no dejes caer los prpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueo
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo
pero si
pese a todo
no puedes evitarlo
y congelas el jbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
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Agua sexual
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Oda a la Cebolla
Cebolla
luminosa redoma,
ptalo a ptalo
se form tu hermosura,
escamas de cristal te acrecentaron
y en el secreto de la tierra oscura
se redonde tu vientre de roco.
Bajo la tierra
fue el milagro
y cuando apareci
tu torpe tallo verde,
y nacieron
tus hojas como espadas en el huerto,
la tierra acumul su podero
mostrando tu desnuda transparencia,
y como en Afrodita el mar remoto
duplic la magnolia
levantando sus senos,
la tierra
as te hizo,
cebolla,
clara como un planeta,
y destinada
a relucir,
constelacin constante,
redonda rosa de agua,
sobre
la mesa
de las pobres gentes.
Generosa
deshaces
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tu globo de frescura
en la consumacin
ferviente de la olla,
y el jirn de cristal
al calor encendido del aceite
se transforma en rizada pluma de oro.
Tambin recordar cmo fecunda
tu influencia el amor de la ensalada
y parece que el cielo contribuye
dndote fina forma de granizo
a celebrar tu claridad picada
sobre los hemisferios de un tomate.
Pero al alcance
de las manos del pueblo,
regada con aceite,
espolvoreada
con un poco de sal,
matas el hambre
del jornalero en el duro camino.
Estrella de los pobres,
hada madrina
envuelta en delicado
papel, sales del suelo,
eterna, intacta, pura
como semilla de astro,
y al cortarte
el cuchillo en la cocina
sube la nica lgrima
sin pena.
Nos hiciste llorar sin afligirnos.
Yo cuanto existe celebr, cebolla,
pero para m eres
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El miedo
Quien no est preso de la necesidad, est preso del miedo: unos no
duermen por la ansiedad de tener las cosas que no tienen, y otros no
duermen por el pnico de perder las cosas que tienen.
Pobrezas
Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que no tienen tiempo para perder el tiempo.
Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que no tienen silencio ni pueden comprarlo.
Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que tienen piernas que se han olvidado de caminar,
32
El Sistema
Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que comen basura y pagan por ella como si fuese comida.
Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que tienen el derecho de respirar mierda,
como si fuera aire, sin pagar nada por ella.
Pobres,
lo que se dice pobres
son los que no tienen ms libertad de elegir entre uno y otro canal de
televisin.
Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que viven dramas pasionales con las mquinas.
33
La noche
Ventana sobre el miedo
El hambre desayuna miedo.
El miedo al silencio aturde las calles.
El miedo amenaza:
Si usted ama, tendr sida.
Si fuma, tendr cncer.
Si respira, tendr contaminacin.
Si bebe, tendr accidentes.
Si come, tendr colesterol.
Si habla, tendr desempleo.
Si camina, tendr violencia.
Si piensa, tendr angustia.
Si duda, tendr locura.
Si siente, tendr soledad..
Fuegos
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Los nadies
Suean las pulgas con comprarse un perro
y suean los nadies con salir de pobres,
que algn mgico da llueva de pronto la buena suerte,
que llueva a cntaros la buena suerte;
pero la buena suerte no llueve ayer,
ni hoy ni maana ni nunca,
ni en llovizna cae del cielo la buena suerte,
por mucho que los nadies la llamen
y aunque les pique la mano izquierda,
o se levanten con el pie derecho,
o empiecen el ao cambiando de escoba.
Los nadies: los hijos de nadie, los dueos de nada.
Los nadies: los ningunos, los ninguneados,
corriendo la liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos:
Que no son aunque sean.
Que no hablan idiomas, sino dialectos.
Que no practican religiones, sino supersticiones.
Que no hacen arte, sino folklore
Que no son seres humanos, sino recursos humanos.
Que no tienen cara, sino brazos.
Que no tienen nombre, sino nmero.
Que no figuran en la Historia Universal,
sino en la crnica roja de la prensa local.
Los nadies, que cuestan menos que la bala que los mata.
35
Qu distinto el otoo
Para m que voy
Para ti que quedas.
Haiku
Un haik o jaiku es una estrofa potica originaria de la literatura japonesa
clsica que pretende expresar en slo tres versos un sentimiento breve y
sincero, surgido normalmente ante la contemplacin de la naturaleza o
tambin ante sentimientos sobre el amor, la muerte, la enfermedad, el
dolor o ante cualquier momento vivido.
A continuacin se adjuntan algunos haiks de Masaoka Shiki, uno de los
autores japoneses ms famosos por este tipo de poesa.
(http://www.casaescritura.com/antologia%20haikus.pdf)
Masaoka Shiki (
) (1867 1902)
Llega el otoo
Paso los das pintando
Flores y yerbas.
Camino caluroso
Sobre esa piedra
Descansan todos.
36
Confusas
Entre los ptalos
Alas de pjaros.
Nos separamos
Y ahora me quedo solo
A la sombra del rbol.
Volvi de la comedia
Pero an no se ha quitado
Las ropas de fiesta.
La hierba reverdece
Sin ayuda de nadie
La flor florece.
Lluvia de primavera
Bajo el paraguas
Mirando la tienda.
37
Primavera
En la hierba tumbado
Hojas repaso.
Rostro cuarentino
Labios de carmn
Estrenando el ao.
En el pedregal
Doblegada y lnguida
La manzanilla.
Se ve nevar
Por el agujero
De la puerta.
Revuelo de mariposas
Trocando caminos
Y canciones de cuna.
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