Fundamento Teórico de Ciclovia
Fundamento Teórico de Ciclovia
Fundamento Teórico de Ciclovia
Fundamento terico
2.1.- Antecedentes
Conocidos como Vas verdes, ciclo vas, vas lentas, corredores naturales,
senderos urbanos, veredas urbanas, los genricos Parques Lineales tienen su
origen en la bsqueda de espacios verdes como refugio a las problemticas
urbanas.
Los efectos adversos derivados del intenso trfico motorizado que inund a las
principales ciudades en pases europeos en las dcadas de los aos 70 y 80,
fueron las condiciones principales que animaron hacia la bsqueda de espacios
libres de trnsito y ruido vehicular en donde los ciudadanos pudieran caminar,
montar en bicicleta, o simplemente pasear.
manera ms reciente los Bicitekas A.C. que adems de promover la bicicleta como
medio de transporte citadino y el rescate del espacio urbano, realizan paseos
urbanos tres veces a la semana.
(Cuernavaca, 2015)
2.2.- La bicicleta en Mxico, en intensa competencia frente al automvil
El regreso de la bicicleta a las zonas urbanas, como la Ciudad de Mxico,
representa el cambio social y cultural ms importante en materia de movilidad en
los ltimos 100 aos de historia del pas, debido a la integracin de la movilidad no
motorizada a la motorizada.
La bicicleta comienza a cumplir una funcin que en pocos aos ser
indispensable: ayudar a los transentes citadinos a llegar de su casa al metro,
metrobs o tren y despus al trabajo o escuela. De esta manera, reducir el uso de
ms 3 millones de automviles que circulan diariamente en la Ciudad de Mxico.
A principios del siglo pasado, el 80 por ciento de la poblacin mexicana viva en
zonas rurales. Actualmente, el 70 por ciento reside en las reas urbanas. Este
cambio ha propiciado que los diferentes gobiernos se pregunten cmo alentar una
movilidad sustentable.
Un ejemplo lo tenemos en el Distrito Federal y su rea conurbada, que se extiende
sobre ms de mil 500 km cuadrados. De esta enorme superficie se estima que el
70 por ciento es propicia para el uso de la bicicleta pues cuenta con pendientes
menores al 6 por ciento. Aunado a lo anterior, la temperatura promedio al ao en la
metrpoli es de 16 grados centgrados, ideal para realizar recorridos ciclistas.
Por otro lado, se sabe que 40 por ciento de los viajes en la ciudad son de menos
de 15 minutos y menos de ocho kilmetros, lo cual convierte a la bicicleta en un
medio potencial de interconexin con el transporte pblico, ya que 70 por ciento de
los viajes en la capital del pas se realizan con este sistema. Pero adems, la
mayora de los usuarios necesita dos o ms medios de transporte para llegar a su
destino final, lo que incrementa los tiempos de viaje y disminuye la calidad de vida.
De acuerdo con un censo que la Universidad Nacional Autnoma de Mxico
(UNAM) realiz en el 2010, el gasto diario en transporte pblico es de 17 pesos, lo
cual significa que el grupo de habitantes con menores ingresos gasta en promedio
el 35 por ciento de sus ingresos en transporte. Si se logra aumentar el uso de la
bicicleta, lo anterior puede cambiar pues la bicicleta urbana disminuye el uso de
vehculos motorizados, reduce los congestionamientos viales y mejora la salud.
Cabe recordar que en los aos ochenta del siglo pasado, la bicicleta de montaa
tuvo un papel protagnico al convertirse en herramienta para la conservacin de
parques y reservas forestales alrededor de las ciudades. Ahora toca hacerlo en la
mancha de asfalto.
(FEBO, 2012)
2.3.- La bicicleta como fuente de libertad
El uso de la bicicleta urbana es el sntoma de que se vive un cambio social en el
que se privilegia la flexibilidad y libertad en cuanto a las formas en que un
ciudadano decide desplazarse de un punto a otro. As lo afirm Connie
Hedegaard, comisionada europea del medio ambiente en el Congreso Mundial
Velocity 2010.
Las ciudades que tienen bicicletas son ciudades modernas y una ciudad moderna
es mucho ms equitativa, puesto que propicia el bienestar de todos los integrantes
del ncleo social. Una ciudad que tiene bicicletas es una ciudad con mayor
beneficio social, pero tambin con mayores beneficios ambientales y ticos,
enfatiz Hedegaard.
(FEBO, 2012)
2.4.- Alternativas de movilidad
En febrero del 2010, una vez que las autoridades de la Ciudad de Mxico
comenzaron a establecer medidas para incrementar el uso de la bicicleta, se
integr el sistema de bicicletas pblicas ECOBICI. Como resultado, se sumaron
ms de mil bicicletas al sistema de transporte pblico.
La accin anterior marc un inicio importante en cuanto a la promocin e inversin
gubernamental en infraestructura ciclista. No slo por el monto original invertido
(100 millones de pesos), sino por la contundencia del mensaje, pues la
experiencia mundial confirma que una vez que se instala un sistema de ese tipo,
su futuro es crecer.
El objetivo del programa es lograr sustituir el primer y tercer modo de viaje; es
decir, salir de casa para ir al trabajo o la escuela y tomar la bicicleta propia para
llegar al metro o metrobs. De igual forma, salir de estos medios de transporte y
tomar una bicicleta pblica para llegar al destino final. El resultado ha sido
satisfactorio, si bien en un principio la gente no se registraba porque para formar
parte del sistema de bicicletas pblicas la solicitud se hace por medio de una
tarjeta de crdito.
Con el tiempo, se descubri que el sistema y su inscripcin no representaban un
gasto elevado y tampoco una complicacin. A tal punto ha funcionado que existe
una lista de espera de 15 mil usuarios, de acuerdo con los datos proporcionados
por las autoridades citadinas.
Las ECOBICIS ofrecen, al igual que en otras ciudades del mundo, como Pars o
Barcelona, media hora de uso gratuito, suficiente para llegar de un punto a otro.
(FEBO, 2012)
2.5.- reas con mayor cambio
Las que ms se han transformado a partir del uso de la bicicleta son las de mayor
densidad habitacional y laboral; aqullas donde se encuentra el centro del poder
econmico. No es una casualidad, pues son los principales espacios donde se
realizan viajes. Un ejemplo es el Paseo de la Reforma. Para casos como la Ciudad
de Mxico, en la que el promedio de viaje diario por trabajador que asiste al centro
de la ciudad es de dos horas ida y vuelta proveniente de zonas como Iztapalapa,
Tlhuac, Xochimilco, el oriente y norte del Estado de Mxico, el uso de la bicicleta
podra ayudar a disminuir el tiempo de los trayectos.
Segn investigadores de la UNAM, si las 15 estaciones de metro en las que se
detecta el mayor nmero de bicicletas en distancias de 10 y 15 minutos
(iscronas) contaran con ciclo-estacionamientos seguros, se podran sustituir 128
mil 740 viajes que actualmente se hacen por otros medios.