Ensayo Sobre Malvinas
Ensayo Sobre Malvinas
Ensayo Sobre Malvinas
Siempre argentinas
1
ndice
Introduccin 3
Introduccin
No hay nada ms doloroso y triste que tener que alejarse de un ser amado y
ms an si es de imprevisto y a la fuerza, que de un momento a otro ya no puedan
estar juntos, te llena la existencia de preguntas, pero hay una que sin dudas es la
ms repetida, Por qu? Y lamentablemente rara vez puede ser respondida, al igual
que en el tema elegido, es una pregunta sin respuesta o, por el contrario veremos
que reformulando la pregunta lo que no tiene respuesta, ni fundamento alguno, es
la negativa britnica a devolver la soberana de las islas.
Por tal motivo la idea de que este navegante fue el primer descubridor carece
de sustento. Groussac2 seala que en realidad las costas avistadas fueron los
acantilados de la Patagonia.
Unos aos despus recorri los mares del sur Hernando Magallanes, en la
clebre expedicin que inmortalizara su nombre y el de sus compaeros. La
existencia de cierta cartografa posterior a esta expedicin llev a algunos a
sealarlo como el descubridor, si bien es cierto que su viaje de 1519-1520 permiti
el relevamiento cartogrfico de toda la costa patagnica, Magallanes no estableci
la geografa ni de Tierra del Fuego, ni de las Malvinas, esto hace presumir que el
navegante ni siquiera las avist, pero, lo que fundamenta la versin de ser
Magallanes o, mejor an, Esteban Gomez (el piloto que diriga la san Antonio, nave
que deserto del grueso de la flotilla al iniciar la navegacin del estrecho) quien
descubri las islas, en la prueba cartogrfica proporcionada por el Islario General
1
Piero Soderini: Naci en Florencia en 1450, En 1481 ya era prior de la ciudad, y ms tarde se convirti en
uno de los favoritos de Piero di Lorenzo de Medici, que lo nombr en 1493, con el ttulo de embajador al reino
de Francia, gran amigo de Amrico Vespucio. Fallece en 1522.
2
Paul-Franois Groussac (15 de febrero de 1848, Toulouse, Francia 27 de junio de 1929, Buenos Aires,
Argentina) fue un escritor, historiador, crtico literario y bibliotecario franco-argentino. Naci en Toulouse,
hijo de Catherine Deval y Pierre Groussac, un descendiente de una vieja familia de Languedoc.
5
de Alonso de Santa Cruz (1541)3 que destaca el descubrimiento de unas yslas que
estn al oriente del puerto de Sanct Julian aparacen con el nombre de san anton
o san sason.
3
Alonso de Santa Cruz (Sevilla, 1505 - Madrid, 1567) fue un cosmgrafo e historiador espaol.
4
Fue bautizada as por el propio Groussac a falta del nombre verdadero.
5
Goebel, Julius. la pugna por las islas Malvinas
6
Cabe sealar que a principios del siglo XVIII, los franceses enviaron
numerosas exploraciones a las Islas Malvinas demostrando su importancia como
base para largas navegaciones. Como la mayora de las expediciones partan de
Saint-Mal, bautizaron a las islas como Malouines.
6
Inglaterra consideraba importante a las islas Malvinas por su posicin estratgica en el atlntico
sur, ya que vean con buenos ojos usarla como base para lograr su expansin hacia estas latitudes,
es por ello que comienzan a idear una expedicin hacia las islas. El embajador espaol en Inglaterra
al enterarse protesta ante la corona britnica, sta responde que solo ser con fines cientficos,
Espaa no lo autoriza y dicen que ellos pueden proveerle de tal informacin.
8
Mientras todo esto ocurra, los ingleses que, no haban perdido su inters
por las islas, preparan una expedicin bajo el mayor de los secretos para evitar el
reclamo espaol. Y as fue que el 21 de junio de 1764, es decir, tres meses despus
de la fundacin de Puerto Luis, parti de Inglaterra una expedicin bajo el mando
del comodoro John Byron a bordo de la nave Dolphin. Casi 6 meses despus llegan
a las islas y establecen una base que bautizaron como Puerto Egmont, en la parte
noreste de la isla Gran Malvina. En ese lugar Byron escribi: "Tomo posesin de
este puerto y de las islas adyacentes en nombre de su Majestad el Rey Jorge III de
Gran Bretaa, y las nombr Islas Falkland". El comodoro solo exploro las costas
vecinas y nunca se dio cuenta del asentamiento francs. En junio de 1765 llegan a
Inglaterra las noticias del xito de Byron, dado este hecho deciden enviar otra
expedicin con el propsito de establecer una colonia permanente. El 8 de enero de
1766 arrib a Puerto Egmont la segunda expedicin britnica bajo el mando del
capitn John Macbride. Los ingleses continuaron ignorando la presencia francesa
en las islas hasta que en marzo de 1766, le informan a Macbride de la existencia del
establecimiento francs. Finalmente, el 2 de diciembre de 1766, los ingleses
encuentran el asentamiento francs.
7
Algunas fuentes sealan que en realidad Espaa compro sus derechos sobre las islas a los
franceses, fuentes espaolas niegan rotundamente esta versin y sostienen que solo fue un
resarcimiento a los empresarios franceses
9
Recordemos que los espaoles toman posesin formal de las islas en 1767,
en febrero del ao siguiente la corte espaola ordena a Bucareli combatir y expulsar
cualquier asentamiento britnico. Recin se produce el encuentro entre espaoles e
ingleses en noviembre de 1769, 4 meses despus, una fragata espaola, comandada
por Fernando de Rubalcava localiz finalmente Puerto Egmont. Se produce un
cruce de amenazas entre l y el capitn ingls, Hunt. Ambos reclamaban para su
propio rey los derechos de posesin de las islas, se acusaban mutuamente de ocupar
territorio que no les correspondan y se ordenaban la evacuacin inmediata.
Por ltimo, hay quienes dicen que a cambio de una promesa secreta de
que salvando su honor Gran Bretaa evacuara las Malvinas, Carlos III cedi,
acept devolver Puerto Egmont y el 22 de enero de 1771 firman una declaracin en
la que se comprometan a: Espaa por su parte a dar rdenes inmediatas, a fin de
que las cosas sean restablecidas en la Gran Malvina en el Puerto denominado
Egmont exactamente al mismo estado en que se encontraban antes del 10 de junio
8
Firmado el 15 de agosto de 1761, las monarquas espaola y francesa se comprometan a
prestarse ayuda mutua en caso de que alguna de ellas entrara en guerra.
10
Sepan todas las naciones, que las islas Falkland, con este fuerte, los
almacenes, desembarcaderos, puertos naturales, bahas y caletas a ellas
pertenecientes, son de exclusivo derecho y propiedad de su ms sagrada Majestad
Jorge III, Rey de Gran Bretaa, Francia e Irlanda, Defensor de la Fe, etc. En
testimonio de lo cual, es colocada esta placa, y los colores de Su Majestad Britnica
dejamos flameando como signo de posesin por S. W. Clayton, Oficial Comandante
de las Islas Falklands. A.D. 1774.
Al igual que los britnicos aos antes, coloc una placa de plomo en el campanario
de la capilla con la siguiente inscripcin:
territorio del antiguo virreinato. Por este acto, Vernet se haba convertido en
funcionario de un estado encargado de hacer cumplir las leyes del pas.
Al mismo tiempo, gran Bretaa recobraba su inters por las islas9, y ante el
nombramiento de Vernet el gobierno britnico reaccion.
9
El Gobierno ingls se da cuenta de la importancia creciente de stas las islas; los cambios polticos
ocurridos en Sud Amrica y la naturaleza de nuestras relaciones con los diversos Estados de que se
compone, unido a nuestro extenso comercio en el Ocano Pacfico, hacen altamente deseable la
posesin de algn punto seguro donde nuestros buques puedan abastecerse y, si es necesario,
carenarse. En la posibilidad de hallarnos empeados en una guerra en el Hemisferio Occidental, tal
estacin sera casi indispensable para poder continuarla con xito...
14
Tampoco fueron los primeros ocupantes, porque fueron los franceses, estos
entregaron, como primeros ocupantes y primeros colonizadores. Las islas a Espaa,
reconociendo en los espaoles la soberana.
No estuvieron (despus del arribo francs), nada ms que ocho aos en las
islas y terminaron por reconocer en tratados vigentes, no denuncindolos jams ni
atacados de nulos, la soberana espaola.
Pinedo, ante la amenaza del uso de la violencia, sin fuerzas para resistir,
debi arriar nuestro pabelln, por lo cual se consum la usurpacin violenta de gran
Bretaa sobre nuestras islas.
de manifiesto en las dos formas que hemos descripto: los caones de 1833 y la
negativa de negociar durante un siglo y medio.
Los argentinos no hemos sido quienes desde 1833 han querido establecer
una relacin de fuerza. No somos nosotros quienes consumamos el atentado contra
el derecho al amparo de caones, ni somos nosotros quienes nos hemos
pertinazmente, deslealmente, inmoralmente negado a negociar para restituir la
soberana que nos corresponde inclusive por razones geogrficas y geopolticas.
Con esta posicin se habr notado que las autoridades britnicas del
momento actual no han sido capaces de rebatir uno solo de los argumentos que
acabamos de resear, apoyando sus reclamos solamente en el principio de
autodeterminacin que no tuvieron en cuenta cuando por la violencia (en las
Naciones Unidad se habla del uso de la amenaza o de la fuerza) arrojaron al mar a
los argentinos.
POSICINES JURIDICAS:
Este documento es el que abre las puertas para las negociaciones bilaterales
entre Argentina y Gran Bretaa, convirtindose en la herramienta esencial para
abordar el tema multilateralmente, comprometiendo a la comunidad internacional
en su conjunto, ya que el trasfondo de la resolucin no fue otro que acabar con el
colonialismo.
10
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/1514(XV)&lang=S&Area=RESOLUTION
11
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/16544(XVI)&lang=S&Area=RESOLUTION
18
12
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/2065(XX)&lang=S&Area=RESOLUTION
19
13
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/2621(XXV)&lang=S&Area=RESOLUTION
22
14
https://www.dipublico.org/5889/resolucion-3160-xxviii-de-la-asamblea-general-de-las-
naciones-unidas-cuestion-de-las-islas-malvinas-falkland/
23
Ya para abril de 1982 todos sabemos muy bien lo que aconteci: Argentina
se lanz a una gesta patritica. Sin embrago, por qu la guerra no se desat antes?
Uno de los fundamentos tiene que ver con el nivel de relaciones comerciales que
existe entre ambos pases; desde siempre Gran Bretaa ha tenido inters en
comerciar con nosotros y dominarnos econmicamente. Recordemos tratados, no
pases, inters plasmado inicialmente en el Tratado de Paz y Comercio de 1825,
verdadera constitucin internacional que nos fue impuesta y que an hoy sigue en
vigencia. De ah el fundamento al conflicto armado que hubo durante la poca de
Rosas, donde la flota britnica bloque el puerto ante la negativa del Restaurador a
comerciar con Londres para proteger la industria local, no obstante, las relaciones
se han mantenido hasta nuestros das.
Desde el lado britnico podemos mencionar dos aspectos que nos inducen a
creer en la voluntad unilateral de desembocar en la guerra.
3- Por ltimo, los malos augurios con que contaba la Dama de hierro en
el poder.
territorios tan alejados, y segn crean los estrategas de las Fuerzas Armadas
argentinas, sin importancia para los intereses britnicos. Este error de apreciacin
fue la razn por la cual la Junta no tena previsto un plan de defensa de sus
posiciones una vez que las islas haban sido tomadas. Por otra parte, confiaban
tambin en que, en caso de un enfrentamiento armado, las fluidas relaciones que la
Argentina tena con el gobierno de Ronald Reagan, presidente de los Estados
Unidos, serviran para asegurar, por lo menos, la neutralidad de ese pas en la
guerra.
Sin embargo, la reaccin britnica no fue la que haban previsto Galtieri y los
otros jefes militares. Los grupos conservadores de aquel pas, liderados por la
primera ministra Margaret Thatcher, vieron, al igual que los militares argentinos, la
posibilidad de utilizar la guerra del Atlntico Sur como un medio para conseguir
consenso hacia su poltica interna. Rpidamente los britnicos enviaron una gran
cantidad de buques de guerra hacia la zona austral, al mismo tiempo que lograban
la solidaridad de los miembros de la Comunidad Econmica Europea y el apoyo del
Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y tambin de la OTAN.
La llegada de los buques de guerra britnicos a las islas hizo evidente que
los ingleses consideraban que tenan muy poco para negociar con el gobierno
argentino. Luego de recuperar sin mayores problemas las Islas Georgias, a
principios del mes de mayo, los britnicos comenzaron el ataque militar contra las
Malvinas.
30
Permaneci en el pas dos das, durante los cuales despleg una intensa
actividad que comprendi, fundamentalmente, una prolongada entrevista con la
Junta Militar con el presidente de la Nacin. A su vez celebr dos misas una en
Palermo y la otra, en Lujn, a las que concurrieron ms de miles de seguidores,
instando por la paz del pas.
LA RENDICIN.
Al mismo tiempo que el Papa elevaba sus splicas por la concordia y la paz
ante inmensas multitudes, recrudeca en las Malvinas y en las Georgias la lucha
despus del desembarco britnico en diversos puntos de sus territorios.
32
2 de abril de 1982
3 de abril de 1982
Del 5 y el 28 de abril
1 de mayo
2 de mayo
4 de mayo
21 de mayo
1 de junio
11 de junio
12 de junio
13 de junio
Continan los bombardeos por parte de las fuerzas britnicas hacia las tropas
argentinas, a las que supera ampliamente en armamento, logstica y hombres.
14 de junio: el da de la rendicin
Para todos los argentinos signific la prdida de muchos inocentes por una
guerra injusta, que -como todas- no debera haber sucedido.
36
cierta medida, como tambin que las islas eran esencialmente una colonia
(Estoppel).